CAJAMARCA

“UN VIAJE POR LAS EMOCIONES”

MATERIAL DE APOYO PARA PADRES, MADRES

DE FAMILIA, O ADULTOS QUE ACOMPAÑA EL
APRENDIZAJE DEL NIÑOS DESDE CASA

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La educación y el aprendizaje de los
niños es una de las principales
preocupaciones de los padres y
también de nosotros los profesores.
Es importante, desde luego,
que los niños vayan adquiriendo
conocimientos académicos, pero sin
dejar de lado otros tipos de
aprendizajes, como el control de sus
emociones y sentimientos.

Es muy importante de los niños aprendan a

identificar y gestionar sus emociones, tienen
que aprender a pensar antes de actuar, a
controlar su agresividad, su ira, su miedo. A
identificar por ejemplo: cuándo están tristes
o contentos. Todo esto se va a lograr
educándolos emocionalmente desde
pequeños. Solamente así lograran
desarrollar su inteligencia emocional, serán
felices y sabrán adaptarse a las diferentes
situaciones por las que los irá llevando la
vida.

La inteligencia emocional no es innata

en los niños. Se va construyendo a
través de las vivencias y las
interacciones que se den desde el
hogar, de ahí, que sea tan importante el
papel de los padres en el desarrollo
emocional de sus hijos.
La educación emocional enseña a los
niños, con ayuda de sus padres, a
controlar y a gestionar sus emociones.

El desarrollo socioemocional de las

niñas y los niños tiene sus bases en la
infancia, en las experiencias tempranas
que viven con sus padres o con su
adulto significativo y con las personas
cercanas. Contar con un entorno
afectivo y seguro les posibilita
conocerse, valorarse, confiar en sí
mismos, así como, reconocer, expresar
y regular sus emociones. Esto los
ayudará a ir construyendo de manera
saludable su propia identidad.

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En el nivel de Educación Inicial, nuestra preocupación, como maestros, se
orienta a lograr que los niños se reconozcan a sí mismo, como seres únicos
para que luego se diferencien de los otros, es decir, que sepa quién es y que
reconozca qué él, es diferente a los demás.
Por ello nuestra acción, y ahora con la intervención de los padres desde casa,
se orienta, a ayudarlos a tomar decisiones con autonomía, a realizar
actividades con iniciativa, con independencia y seguridad, según sus propios
criterios, sus posibilidades y de acuerdo a su grado de madurez emocional.

La conciencia emocional del niño es la

capacidad que tiene para expresar lo que
esta sintiendo en diferentes situaciones,
tratando al mismo tiempo de identificar
los motivos de estas emociones,. Esto le
permite entender su alegría, su tristeza, su
miedo o cólera y a la vez reconocer poco a
poco los emociones de los otros.
Esta edad es privilegiada para desarrollar
las habilidades sociales y el control de sus
emociones.

Muchas veces creemos que los niños no

saben lo que quieren, que no tienen
preferencias definidas, por ejemplo: en
sus alimentos, en sus juegos, en las
actividades escolares o en la elección de
sus amigos. Creemos pues, que solo los
adultos “Sabemos lo que necesitan” y “lo
que es mejor para ellos”, por eso no los
dejamos elegir.

Frente a una situación de conflicto por ejemplo actuamos probablemente

siguiendo pautas aprendidas a lo largo del tiempo, y sin darnos cuenta asumimos
que los niños todavía no tienen emociones y sentimientos definidos, por eso ante
situaciones de agrado o desagrado para ellos , no les preguntamos ¿Qué ha
ocurrido?, ¿cómo se sienten? , ¿Porqué racionaste así?
También, pensamos que no reconocen las emociones de las otras personas, y
decimos, “no se da cuenta”, por eso, no compartimos nuestros sentimientos con
ellos y a veces actuamos como si no estuvieran presentes.

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Cuantas veces en la casa observamos conductas de apoyo o de
compañerismos de nuestros hijos, a otros niños, sólo que no les
prestamos atención, y pasan desapercibidas, a veces no les
permitimos que compartan sus cosa, sus juguetes, sus alimentos con
otros niños, desconociendo que estas son las primeras conductas
empáticas que tiene el niño, es decir, de ponerse en el lugar del otro.
Estas son ya, las habilidades sociales que está desarrollando y que lo
llevaran a desarrollar su inteligencia emocional.

Todo esto tiene relación con

el sentimiento de
solidaridad que se forma
desde el hogar.

Recordemos que la empatía

es una de las primeras
habilidades sociales y que se
desarrollan en un clima
saludable de afecto y de
respeto al niño.

Los niños que muestran mayor empatía tienden a ser menos

agresivos, pues ayudar y compartir con los demás, les permite
ser apreciados por su grupo de amigos y también por los
adultos, lo que se va a contribuir a desarrollar mayor confianza
en sí mismos, para aprender mejor y a relacionarse con los
demás.

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 ¿CÓMO AYUDO A MI HIJO/A , A AUTOREGULAR SUS
EMOCIONES?

Esto implica ayudarlos a reconocer y tomar conciencia de sus

propias emociones, con el fin de poder expresarlas de manera
regulada, adecuada al contexto y al momento en que se dan, ello le
permite aprender a modular su comportamiento, a favor de su
bienestar y el de los otros.
La autorregulación es el manejo de las emociones, es decir, ser
capaz de ajustar el estado emocional en una situación dada. Implica
reconocer y aceptar nuestras emociones tanto de alegría y placer
como las de enojo o miedo.

En este proceso de autorregulación

de emociones, el adulto tiene un
papel fundamental para ayudarlos
a identificar sus sentimientos y
entender la relación que existe
entre sus emociones y su
comportamiento

Es indispensable, que tu hijo/a pueda reconocer, validar, expresar y

regular sus emociones durante las interacciones que se produzcan en
casa, y fuera de ella y que pueda comprender que todas sus emociones
son importantes y que las debe expresar pero de manera adecuada,
por ejemplo: si siente ira, o enojo no es válido pegar o agredir a los
demás.
Todas las personas experimentamos emociones como la alegría, la
tristeza, el miedo, la ira, la emoción, y son parte de nuestra vida.

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 Es muy importante que las niñas y los niños reconozcan sus
emociones.
Para ello el adulto cumple un rol fundamental, pues les brinda
orientación para que puedan reconocerlas y expresar en palabras lo
que sienten en los momentos de juego y en situaciones de la vida
cotidiana.

Esto último hace posible, además, la

construcción de vínculos afectivos
seguros, que son la base para las
relaciones que podrán establecer con
los demás, y que se consolidarán en la
medida que generemos un clima de
respeto y valoración a través del
establecimiento de límites, rutinas y
acuerdos, y brindando elogios,
reconociendo conductas inapropiadas y
corrigiendo sin rabia.

Todas las personas experimentamos emociones como la alegría, la tristeza,

el miedo, la ira, temor, son parte de nuestra vida y se manifiestan a través
de nuestro cuerpo.
Lo importante es reconocerlas, nombrarlas y expresarlas sin hacernos
daño a nosotros, ni a los demás.
Las emociones son diversas, algunas nos hacen sentir bien y otras nos
hacen sentir mal, esto es normal. Las emociones pasan pronto, van y
vienen, por ello es importante ayudar al niño a regularlas en el momento en
que se presentan.

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 ¿COMO AYUDAMOS A LOS NIÑOS A RESOLVER UN CONFLICTO?

Los conflictos son situaciones donde los intereses o deseos de las personas se oponen
a nuestros propios intereses.
Los conflictos son frecuentes en la vida de los niños, a veces degeneran en peleas o
agresiones, es decir, en hechos de violencia, por ello como padres, debemos
prestarles especial atención, interviniendo de manera acertada y oportuna.
Si un niño agrede a otro, nos está diciendo que algo le ocurre y es nuestra
responsabilidad ayudarlo.
Lo importante es saber cómo y cuándo intervenir frente a una agresión de los niños,
para ello, te sugerimos lo siguiente:

-Brinda atención a tu hijo si ha sido

agredido, sin darle el mensaje de
que no puede defenderse.

-Espera a que se calmen los dos

niños que intervinieron en el
conflicto, el niño agresor también
se asusta, por la reacción del otro
niño, y tiene miedo por lo que
puede ocurrirle.

-Dialoga sobre lo ocurrido, parte de la reconstrucción de los hechos, con

intervención de las dos partes.
-Ayuda a los niños a encontrar alternativas a lo que hicieron, plantéales
preguntas para ayudarlos a encontrar sus propias respuestas.

- Reflexiona con los niños sobre la lección aprendida, los niños se

reconcilian dialogando, no los obligues a darse un abrazo o besito para
solucionar un conflicto, las expresiones de afecto deben ser espontaneas.

Recordemos que no hay formulas para resolver un conflicto, ni reglas

rígidas que se aplican a cualquier problema, lo importante es ayudarles a
resolver sus desacuerdos y de esa manera contribuimos a su socialización
y al manejo de sus emociones.
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Muchas veces, pensamos que los adultos podemos resolver los
conflictos que se dan entre los niños, por eso nuestra
acercamiento a las peleas de los niños, es a veces superficial, y
tratamos de resolver el conflicto de manera arbitraria, sin
considerar la opinión de los involucrados, lo qué paso antes o lo
que podría venir después, no se trata de darles un pequeño
sermón y luego obligarlos a darse un beso y el conflicto queda
“cerrado”, eso no es así.

Por ello, debemos preguntarnos

siempre si nuestra forma de
abordar y resolver las situaciones
conflictivas de nuestros hijos son
las más adecuadas, es decir, si los
estamos ayudando a resolver sus
desacuerdos.

Aprender a resolver un conflicto es un proceso que toma tiempo

y que requiere que se involucren todos los actores, los niños y en
este caso, los padres de familia.
No podemos pasar por alto o hacernos de la “vista gorda” frente a
las agresiones entre niños. Frases como “no se pelea”, “ahora
todos somos amigos y nos abrazamos”, no son formas de
responder a los conflictos que surgen en el hogar, tenemos que
darnos tiempo, y actuar con calma y serenidad, paga intervenir,
porque estos aprendizajes valen para toda la vida.

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 ¿COMO AYUDAS AL DESARROLLO
EMOCIONAL DE TU HIJO/A?

Siendo sensibles y Acompañando a los

respondiendo niños de manera
adecuadamente a las respetuosa y afectiva,
necesidades que nos es decir, aceptándolos,
expresan a su manera,
comprendiéndolos y
es decir, no siempre van
a expresase de manera
ayudándolos a
oral, a veces lo harán con enfrentar sus
sus gestos, con sus sentimientos y
actitudes, o a través de emociones de dolor,
sus dibujos y creaciones, rabia, angustia,
así , no estarán diciendo tristeza, miedo.
lo que les molesta,
inquieta, asusta o los
pone tristes

Dándole tiempo para Dándole oportunidad

que se exprese, para que se relacione
ayudándolo a tomar con otros niños o
conciencia de sus adultos. El desarrollo
emociones, para emocional se da en la
afrontar un conflicto, y interacción cotidiana
para hacer las cosas con los demás ya sea
de acuerdo con sus en el hogar, la escuela
posibilidades y grado y la comunidad.
de madurez.

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 Padre, madre de familia o adulto que acompañas al niño, no olvides que en
estos momentos de emergencia sanitaria y aislamiento social que estamos
viviendo, es muy importante que brindes soporte y contención emocional
a tus hijos.
Explícale lo que esta pasando con un leguaje sencillo, responde sus
preguntas de acuerdo a su grado de madurez, acompáñalo a reconocer e
identificar las emociones, que le producen estos momentos difíciles.

Hazlo sentir seguro cuando se

presenten, cuidando a que las pueda
expresar con naturalidad y libertad.
Pregúntale qué cosas lo hacen sentir
bien y qué cosas lo hacen sentir triste y
en ese momento que sienta tu mano y
mirada empática y cariñosa. De ti
depende la seguridad emocional que
va logrando tu hijo/a.
No juzgues sus respuestas acéptalas
con naturalidad y ayúdalo cuando sea
necesario.

Deseamos que esta información, te sirva de

ayuda y pueda aclarar tus ideas y conceptos
acerca de este tema fundamental en la
formación de tu hijo/a.
Recuerda que las habilidades sociales, que
harán de tu hijo un adulto exitoso, seguro y
feliz, están ahora en tus manos y de ti
depende no desperdiciar esta edad
privilegiada de su desarrollo
Suerte en tu tarea!!!

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 Material de trabajo para Padres de Familia
“APRENDO EN CASA”
(12° Semana)
CENTRO DE RECURSOS PARA EL APRENDIZAJE EN
EDUCACIÓN INICIAL
CRA EI CAJAMARCA
JUNIO 2020

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