En este escrito sobre la interrupción espontanea o asistida del embarazo
denominado aborto. La autora cita diferentes posturas analizando ampliamente el tema desde diferentes puntos de vista ya sea el que apoya este acto o así a mismo a los que no están de acuerdo con él, por varias razones, pero poniendo en cuestión el status moral siempre sobre cada ideología y buscado el porqué de cada apreciación dándonos a conocer diferentes conceptos básicos pero a la vez tan subjetivos como lo que es la vida para cada quien, si la de otra especie se le debe dar el mismo valor a que a la de una humana, en qué momento se considera alguien vivo, lo que se considera sensibilidad o tacto humano, temas de derechos humanos y sobre quien aplicarlos, cuestionando incluso hasta la misma genética. Todo esto rodeado de la principal incógnita que es si este acto es moral, social, legal aceptable recordando la historia del mismo a través del tiempo que es la que muestra los cambios que ha tenido esta problemática a lo largo del tiempo y las diferentes soluciones que se le han dado a partir de este, pero aun sin conseguir llegar a un consenso mundial donde exista una satisfacción global. Todas las ideologías plasmadas en este relato tienen argumentos respetables y analíticos, unos más radicales que otros, pero siempre bajo el mismo margen critico de lo que defienden. la subjetividad de este tema es la esencia del mismo pues incluso su concepto puede variar dependiendo de quién lo exponga cargando con los otros aspectos individuales y considerados por cada quien. Es increíble pensar como la denominación de “estar vivo” o “permitir vivir” genera una discusión tan extensa cuando los márgenes médicos están establecidos en base a la evidencia e investigación, pero aquí es donde entra en acción el sentir moral y social que afecta de forma directamente proporcional esta perspectiva con argumentos discutibles. Para concluir, el escrito de la autora, después de analizar todos los diferentes puntos de vista manifiesta que la negación del aborto legal y seguro atenta sobre los derechos de la mujer. Esta es una afirmación bastante fuerte claramente con argumentos, pero quizá olvidándose del régimen científico que en muchos aspectos defiende a estos, ya que la vida de la madre prima muchas veces sobre la del feto mismo, obviamente abordando de forma compleja el contexto social de cada mujer, pero priorizando sus necesidades, intenciones y el porque de estas. Para no dejar un trasfondo vacío en el sentir de la misma y así entender esta iniciativa tan determinante. Que no solamente marcará un aspecto biológico y un concepto de existencia o no, si no una experiencia que perdurará toda la vida y quizá dependiendo cada caso, motivo o circunstancia llevara a la reflexión de si fue la decisión correcta en el determinado momento teniendo él cuenta las circunstancias que llevaron a tal acto en el cual se comprometió algo tan importante como lo es la vida misma.