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Semana 7,2

ESTABILIDAD DE LOS SISTEMAS COLOIDALES Y COAGULACION


Estabilidad de los sistemas dispersos
El estudio de las condiciones que dan estabilidad a los sistemas coloidales es muy importante
porque de estas depende su existencia. La estabilidad de estos sistemas depende de varios
factores, tales como, características de la fase dispersa, medio dispersor, doble capa eléctrica,
moléculas de sustancias tensioactivas, pH del medio dispersor, etc. Es necesario mencionar,
que la estabilidad de estos sistemas es consecuencia directa de la existencia de la superficie
de división de fases y del exceso de la energía libre superficial de las partículas coloidales.

La estabilidad de un sistema disperso se puede definir como la capacidad que tiene este
para mantener invariable en el tiempo sus parámetros fundamentales: la dispersión y
la distribución uniforme de sus partículas en la fase dispersa. Se distinguen dos tipos de
estabilidad: La estabilidad sedimentacional o cinética y la estabilidad agregativa.
a) La estabilidad sedimentacional se define como la capacidad que tienen los sistemas
dispersos para contrarrestar la sedimentación de las partículas coloidales por acción de la
gravedad. La sedimentación de las partículas dispersas conduce a la destrucción del sistema
disperso. En este tipo de estabilidad participan dos procesos contrarios: la difusión y la
sedimentación, ambos procesos dependen del tamaño de las partículas dispersas, cuando las
partículas son grades predomina la sedimentación, en cambio para partículas muy pequeñas
predomina la difusión y el sistema es altamente estable, estos procesos se muestran en la
figura 7.1. La estabilidad del sistema se alcanza también cuando hay equilibrio entre la
sedimentación y la difusión. Como ya se ha examinado anteriormente en la sedimentación
de las partículas influyen tres fuerzas: la fuerza de gravedad Fg (que es la mayor), Arquímedes
FA y de rozamiento FR y en la difusión influyen la fuerza de rozamiento y el movimiento
browniano, que es producto del movimiento térmico de las moléculas del medio dispersor.

Fd
FR FA

Fg Fg
Figura 7.1 Procesos y fuerzas que influyen en la estabilidad de los sistemas
dispersos: A-partículas grandes (sedimentación) y B-partículas pequeñas
(difusión).

b) La estabilidad agregativa. Se define como la capacidad que tienen los sistemas


dispersos para impedir la unión de las partículas dispersas. La unión entre las partículas
dispersas produce la formación de agregados. Estos agregados con el transcurso del tiempo
aumentan su masa y por efecto de la gravedad precipitan, destruyéndose de esta manera la
estabilidad del sistema disperso, este proceso se muestra en la figura 7.2. Se distinguen dos
tipos de agregación: a) la agregación o unión de partículas sólidas se conoce como
coagulación y b) la agregación de gotas pequeñas, que produce gotas de mayores
dimensiones, se le denomina coalescencia.

Partículas sólidas Coagulación

Gotas Coalescencia

Figura 7.2 Tipos de agregación de partículas dispersas:


coagulación y coalescencia

Los sistemas coloidales se caracterizan por una débil interacción entre la fase dispersa y el
medio dispersor y por la tendencia a disminuir el grado de dispersión en el tiempo. La
velocidad de unión entre las partículas para formar coágulos depende de diferentes factores.
Así por ejemplo, un sistema coloidal formado por partículas de oro puede durar muchos años,
pero, si se le agrega sustancias coaguladoras, puede perder su estabilidad en segundos.
Entre la inestabilidad termodinámica del sistema y la velocidad de su destrucción no
existe una dependencia determinada. La variación de las propiedades del sistema
coloidal en el tiempo, solamente se puede apreciar a través del estudio
experimentalmente del mecanismo de agrupación de las partículas coloidales en el
tiempo.
Existen dos mecanismos de disminución del grado de dispersión, uno de ellos es proceso
de adsorción de las partículas pequeñas en la superficie de partículas grandes (proceso
de recristalización) y el otro es la unión de las partículas. El último mecanismo es más
frecuente en los sistemas coloidales y se denomina coagulación. La coagulación se puede
apreciar por la variación de la turbidez del sistema o también por la variación del color.
El estudio de la coagulación es de gran importancia, porque en muchas aplicaciones
industriales es necesario utilizar técnicas para evitar la coagulación en cambio en otras es
necesario producir la coagulación con gran rapidez. El proceso de coagulación más utilizado
es el producido por acción de electrolitos y macromoléculas.
Potencial de interacción entre partículas con doble capa eléctrica
La forma como varía el potencial de interacción entre dos moléculas y dos partículas
coloidales con doble capa eléctrica se muestra en la figura 7.3. En el caso de la interacción
entre dos moléculas (figura 7.3 A) se observa que a grandes distancias se manifiesta con
mayor intensidad la fuerza de atracción y a distancias cercanas a un diámetro molecular
crece rápidamente la repulsión, además se tiene un valor mínimo negativo del potencial de
interacción, en el cual se equilibran las fuerzas de atracción y repulsión. Para el caso de la
interacción entre dos partículas coloidales (7.3.B) se observa que a grandes distancias
prevalece la atracción y, a medida que las partículas se acercan se alcanza un valor
mínimo, cuyo valor es negativo, el cual indica que las fuerzas de atracción y repulsión
se equilibran. Este estado de equilibrio, en muchos casos, conduce a la formación de
geles coloidales a pesar que las partículas no se encuentren unidas, este estado explica
la existencia del fenómeno de tixotropía (equilibrio sol – gel). Después de este mínimo
las fuerzas de repulsión electrostática comienzan a prevalecer impidiendo que las
partículas se unan y coagulen. Si las partículas al acercarse pasan esta barrera de
repulsión inevitablemente se unen formando coágulos muy compactos.
Barrera de repulsión
 (r )
Repulsión

Repulsión
r

Atracción
B
A Atracción
Coagulación por acción de electrolitos
Figura 7.3 Potenciales de interacción: A-entre dos moléculas y B-entre
dos partículas coloidales con doble capa eléctrica.

Los sistemas coloidales pueden coagular por la acción de diferentes factores, tales como:
variación del pH del sistema coloidal, fuerza iónica de la solución, temperatura. También por
acción de campos eléctricos y magnéticos, por acción de la luz y por envejecimiento del
sistema coloidal. Sin embargo, uno de los factores que más se ha estudiado es por la acción
de electrolitos en el caso de suspensiones coloidales.
La pérdida de estabilidad de los sistemas dispersos por acción de electrolitos se debe
fundamentalmente a las variaciones que estos provocan en la estructura de la doble capa
eléctrica. Estas variaciones dependen del tamaño, carga y capacidad de adsorción de los
iones de los electrolitos coaguladores. Del estudio de una gran cantidad de datos
experimentales acumulados sobre este fenómeno se han propuesto las reglas de coagulación
por electrolitos, que se conocen con el nombre de reglas de Shultz – Hardy.
Reglas de coagulación de Shultz-Hardy
a) Los iones que producen la coagulación son aquellos que tienen carga contraria a la carga
del ion potencial determinante de la partícula coloidal (o sea tienen la misma carga que los
iones contrarios).
b) La capacidad de coagulación de los iones de la misma valencia aumenta a medida que
aumenta el radio del ion o también a medida que disminuye la capa de solvatación, se tiene
las siguientes series:
Para cationes monovalentes
Li   Na   K   Rb   Cs 
Para cationes divalentes
Mg2+ < Ca2+ < Sr2+ < Ba2+
Para aniones monovalentes
Cl- < Br- < NO3 < I  < SCN 
c) La capacidad de coagulación de los iones es mayor cuanto mayor sea su valencia, se tiene
la serie:
K+ << Ca2+ << Al3+ << Th4+
d) La coagulación puede ser producida por cualquier electrolito, pero para que la velocidad
del proceso sea observada es necesario agregar una concentración mínima, a esta
concentración se le denomina umbral de coagulación o también concentración óptima y
comúnmente se designa por  mmol / L .
Para entender estas reglas examinemos los datos sobre el umbral de coagulación del yoduro
de plata AgI (-), partícula coloidal de carga negativa, que se muestran en las siguiente tabla.
Tabla 7.1 Umbral de coagulación del AgI ()

Electrolito  mg  eqv / L


LiCl 582
NaCl 300
KCl 255
LiNO3 600
NaNO3 360
KNO3 260
Li2SO4 640
Na2SO4 420
K2SO4 272
De esta tabla, se deduce que de acuerdo con las reglas de coagulación, el ion coagulador es
un catión y a medida que aumenta el radio iónico del catión el valor del umbral de
coagulación es menor, o sea se incrementa la capacidad de coagulación. Además, el anión
que acompaña al catión también influye en el valor del umbral de coagulación.

Teorías sobre la estabilidad y coagulación por acción de electrolitos


La teoría más aceptada es la “teoría física de la estabilidad y coagulación por electrolitos” y
fue propuesta por los científicos Rusos Deryagin y Landau y los científicos Noruegos
Verwey y Overbeek, la teoría es conocida por las siglas DLVO. Esta teoría se basa en el
balance de las fuerzas de atracción y repulsión entre las partículas coloidales con doble
capa eléctrica y toma en cuenta el potencial de interacción que se muestra en la figura (7.3
B). De acuerdo a esta grafica la energía de atracción se considera negativa y la de
repulsión positiva. La fuerza de repulsión no aparece hasta que se alcance una distancia
determinada, que corresponde a la distancia en que se superponen la parte difusa de
las dobles capas eléctricas. La naturaleza de la fuerza de repulsión entre partículas
coloidales es más compleja que el caso de la repulsión entre moléculas. Por otro lado, cuando
las dobles capas eléctricas se superponen aparece la presión de superposición, la cual
contribuye también a la repulsión entre las partículas.
La otra fuerza que influye en la estabilidad de los sistemas dispersos es la fuerza de atracción
entre las partículas dispersas, esta fuerza es parecida a la fuerza de atracción entre moléculas.
Pero en este caso, participan todos los átomos que se encuentran en la superficie de las
partículas coloidales. De acuerdo a lo expuesto, para la energía de interacción entre dos
partículas dispersas con doble capa eléctrica se puede escribir la ecuación:
U  U repulsión  U atracción (7.1)

La deducción de una ecuación que permita representar la repulsión y atracción entre


partículas dispersas con doble capa eléctrica es compleja, porque depende mucho de la forma
de las partículas dispersas y de la estructura de la doble capa eléctrica. En la figura 6.4 se
muestra el modelo de láminas, propuesto por Deryaguin:


 ad
2
1
x
d h

Figura 6.4 Potenciales en la interacción entre dos láminas

En esta figura 1 y  2 son las caídas de los potenciales en la doble capa eléctrica de la

primera y segunda lámina,   1   2 es el potencial resultante,  ad potencial de la capa


de adsorción, d grosor de la capa de adsorción y h es la distancia de acercamiento entre
las láminas. En base a este modelo Deryaguin obtuvo la ecuación:

 2 exp  2 h  
64cRT A
U (7.2)
 48h 2
Donde h es la distancia mínima a la cual se acercan las partículas en forma de láminas, A -
es una constante de interacción molecular (constante de Hameker)  es el espesor de
la capa difusa, la cual se determina a través de la ecuación de Debye-Huckel:
1
  zF 8c RT (7.3)

Donde z es la carga del ion, F la constante de Faraday, c la concentración de la solución y 
es la permeabilidad eléctrica de la solución
Además  es el parámetro de Debye:
exp  1 2  1
 (7.4)
exp  1 2  1

Este parámetro varía de 0 a 1 cuando aumenta el potencial  ad , al cual se le denomina

potencial de máximo acercamiento de los iones a la superficie de la partícula (cuando x=d,


d es la distancia del plano de deslizamiento). La gráfica de la ecuación (7.4) se muestra en
la figura 7.6.
U

Urep

2h

Uatra.

Figura 6.6 Energía potencial en función de la distancia


entre las láminas (2h), ecuación (6.2)

La posibilidad que las partículas se acerquen a una distancia determinada, depende de


la altura de la barrera de repulsión y de la profundidad del hoyo o pozo del potencial.
De acuerdo a estas condiciones pueden ocurrir los siguientes casos típicos:
a) Si la altura de la barrera de repulsión y la profundidad del hoyo son pequeños ( kT ) , las
partículas se acercan por acción del movimiento browniano hasta alcanzar una distancia
mínima que corresponde a la disminución de la energía potencial, que es igual al mínimo
del pozo de potencial. En este caso ocurre inevitablemente la unión de las partículas
(coagulación) debido a la baja energía de repulsión electroestática.
b) Si la altura de la barrer de repulsión es muy grande  kT  y la profundidad del pozo de
potencial es pequeño, entonces las partículas no pueden pasar la barrera de repulsión y por
lo tanto se separan. Este caso corresponde a una alta estabilidad agregativa.
c) Si la profundidad del pozo de potencial es muy grande  kT  , independientemente de la
altura de la barrera de repulsión, ocurre el fenómeno de la interacción lejana entre dos
partículas, que comúnmente se manifiesta a la distancia 2h. En este caso se establece un
enlace flexible entre las partículas, de tal manera que estas no pueden acercarse ni separarse
y se mueven juntas dentro del sistema. Si a este par de partículas se unen más partículas
entonces se formara un sistema flexible tridimensional, que da lugar a la formación de un
gel coloidal y al fenómeno de tixotropía.
En el estudio de la coagulación de sistemas coloidales se distinguen dos casos extremos, que
tienen relación con el valor del salto total del potencial  0 y la concentración del electrolito
coagulador. Examinemos con detalle estos casos:
a) Coagulación por neutralización
Este tipo de coagulación se observa cuando el salto total del potencial  0 tiene un valor

muy pequeño y por lo tanto la partícula coloidal es incapaz retener a los iones que forman la
doble capa eléctrica. Como consecuencia de este factor el valor del potencial zeta también es
pequeño y al acercarse las partículas se unen inevitablemente, produciéndose de esta manera
la coagulación.
b) Coagulación por el aumento de la concentración del electrolito coagulador
Se considera que el salto total del potencial  0 tiene un valor grande y constante que le

permite retener con gran fuerza a los iones que forman la doble capa eléctrica. En este caso
la causa de la coagulación es el aumento de la concentración de un electrolito indiferente,
que conduce a la disminución de la barrera de repulsión electroestática entre las partículas
coloidales. En la figura 7.7 se muestra la variación de la energía potencial de interacción
entre las partículas coloidales por acción del aumento de la concentración del electrolito
indiferente.

Barrera de repulsión
U
Pozo de atracción
C1
h

C2

Figura 7.8 Energía potencial de interacción cuando


aumenta la concentración C2 > C1

De acuerdo a la figura (7.8) cuando aumenta la concentración del electrolito coagulador la


barrera de repulsión electroestática tiende a cero, por esta razón se produce la coagulación.
Deryaguin y Landau a partir del análisis de los datos experimentales determinaron que la
barrera de repulsión electrostática desaparece cuando se alcanza la concentración
crítica o el umbral de coagulación. Estos científicos a base de la teoría DLVO obtuvieron
la siguiente ecuación para el cálculo del umbral de coagulación:
 3 (kT ) 5
 C (7,5)
A2 e 6 Z 6

Donde C es una constante que depende de la simetría de los iones y de la relación de la


carga del catión con respecto a la carga del anión, ε es la constante dieléctrica del medio, A
es una constante que depende de la fuerza de interacción entre las partículas, e es la carga
del electrón y Z es la valencia del ion contrario o ion coagulador. De esta ecuación se
deduce que umbral de coagulación o concentración óptima para producir la coagulación
es inversamente proporcional a la carga del ion elevada a la sexta potencia, es decir:
C 3 kT 
5
  K Z6 K (7,6)
A2 e 6
Usando esta relación para los umbrales de coagulación correspondiente a iones
monovalentes, divalentes, trivalentes y tetravalentes, se obtiene:
6 6 6
 1 1 1
1 :   :   :    1 : 0,016 : 0,0013 : 0,00024
 2  3  4
Esta relación refleja de alguna manera la regla de coagulación de Shultz – Hardy y le
dada el sustento teórico. En la siguiente tabla (6.2) se dan los valores de los umbrales de
coagulación  mmol / L , determinados experimentalmente por Overbeek para iones de
diferentes valencias (I, II, III, IV), los cuales coinciden con los datos teóricos en forma
aproximada.
Tabla 7.2 Umbrales de coagulación y su relación
Partículas coloidales I II III IV
As2S3 (-) 55 0,69 0,091 0,09
Relación 1 0,013 0,0017 0,0017
Au (-) 24 0,38 0,0006 0,0009
Relación 1 0,016 0,0003 0,00004
AgI (-) 14 2,43 0,068 0,013

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