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SALA DE CASACIÓN CIVIL

Exp. 2016-000031
 
 
Magistrado Ponente: Yván Darío Bastardo Flores
 
 
En el juicio por nulidad de asientos registrales de documentos,
incoado ante el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, del
Tránsito y del Trabajo de la Circunscripción Judicial del estado Falcón, con
sede en Tucacas, por los ciudadanos CARMEN ZENOVIA ARIAS DE
FIGUEROA, CESAR ELÍAS ARIAS LOZANO, DOMINGA
MARGARITA ARIAS DE URBINA, FLORA CATALINA ARIAS DE
PINEDA, JOSÉ DE LA ROSA ARIAS LUGO, MARÍA GENARA ARIAS
LUGO, SIMÓN ARIAS LUGO  y YORELIS COROMOTO ARIAS
LOZANO, representados judicialmente por los abogados en libre ejercicio
de su profesión Octavio Alcalá, Marisol Martínez y María Ochoa, contra los
ciudadanos  ÁNGEL MARTÍN LOZANO, CARMEN ANGELINA
ESCALONA DE LOZANO, BRAULIO ALEXANDER YARAURE
SÁNCHEZ, ROSA DEL VALLE ROJAS CARABALLO  y HENRY JOSÉ
YOVERA NAVEDA , patrocinados judicialmente por la abogado en libre
ejercicio de su profesión Soraya Sánchez, y ante esta Sala por el abogado
Waldemar Núñez López; el Juzgado Superior en lo Civil, Mercantil,
Tránsito y Bancario de la Circunscripción Judicial del estado Falcón, con
sede en Santa Ana de Coro, dictó sentencia definitiva en fecha 25 de
septiembre de 2015, mediante la cual declaró: Con lugar el recurso de
apelación interpuesto por la demandante, contra la sentencia del  a quo de
fecha 16 de septiembre de 2014, que declaró sin lugar la demanda; revoca la
decisión recurrida; y declara con lugar la demanda incoada.

Hubo condenatoria en costas a los codemandados de acuerdo a lo


establecido en el artículo 274 del Código de Procedimiento Civil.

Contra la referida decisión de alzada, los codemandados Carmen


Angelina Escalona de Lozano, Braulio Alexander Yaraure Sánchez, Rosa
Del Valle Rojas Caraballo y Henry José Yovera Naveda, anunciaron recurso
extraordinario de casación, el cual fue admitido y oportunamente
formalizado. Hubo contestación a la formalización.

En fecha 23 de diciembre de 2015, la Asamblea Nacional de la


República Bolivariana de Venezuela, nombró nuevos Magistrados Titulares
en esta Sala de Casación Civil del Tribunal Supremo de Justicia, y mediante
acta de fecha 7 de enero de 2016, se reconstituyó esta Sala, quedando
constituida de la siguiente forma: Magistrado Presidente: Dr. Guillermo
Blanco Vázquez; Magistrado Vicepresidente: Dr. Francisco Ramón
Velázquez Estévez; Magistrada: Dra. Marisela Valentina Godoy Estaba;
Magistrada: Dra. Vilma María Fernández González y Magistrado: Dr. Yván
Darío Bastardo Flores.

Concluida la sustanciación del recurso extraordinario de casación y

cumplidas las demás formalidades de ley, pasa la Sala a dictar sentencia,

bajo la ponencia del Magistrado que con tal carácter la suscribe , en los

términos siguientes:

Por razones metodológicas, la Sala altera el orden seguido por los

formalizantes en casación y pasa a resolver la tercera denuncia por defecto

de actividad, como si fuera la primera, de la siguiente forma:


 
RECURSO DE CASACIÓN
POR DEFECTO DE ACTIVIDAD
-III-

Señala expresamente el formalizante, lo que a continuación se


transcribe:
 
“…Con fundamento al ordinal 1 de (sic) artículo 313 del
Código de procedimiento (sic) civil (sic), se denuncia
infracción del artículo 243 ordinal 5, en concordancia
con el artículo 12 del mismo Texto Adjetivo Civil, por
considerar el formalizante que el sentenciador de alzada
incurre en el vicio de incongruencia negativa .
Es resaltante que la jueza (sic) (…),  no resolvió el alegato
dispuesto por mis patrocinados, en la contestación de la
demanda, que   OPONEN la PRESCRIPCIÓN de la acción
de nulidad de la Compra-Venta   (sic) , de los asientos
registrales .
A tal efecto y de manera demostrativa, transcribo
textualmente extracto de la sentencia recurrida, que
evidencia el error en la   Incongruencia Negativa   en el
presente asunto : (…).
Es notorio que esta Juzgadora (sic) no hizo un
pronunciamiento en base al problema judicial debatido, de
acuerdo a lo explanado de forma contradictoria por la parte
demandada, que alegaron en el presente asunto  la
prescripción por haber excedido los 5 años según
1346   (sic)   de   (sic)   Código Civil vigente ; En el caso de
marra el derecho que tenían los interesados en demandar la
nulidad debatid (sic), la norma referida en el artículo 1.346
del Código Civil los limita a cinco (5) años ; y para el caso
concreto que se reclama, por ser un acto de aquellos que,
según el artículo  1.920 del Código Civil , deben ser
registrados, a partir de la fecha cierta de su
protocolización. La defensa perentoria de prescripción de
la acción, con fundamento en el artículo 1.346 del Código
Civil, es procedente en derecho por cuanto, para el día
de interposición de la presente demanda habían
transcurrido con creses más de cinco (5) años de la
protocolización del acto registral cuya nulidad se
demanda, según su fecha de inscripción en la respectiva
Oficina Subalterna de Registro (19 de Noviembre  (sic)del
año 1997), lo cual llevaría consigo la pérdida de la acción
del demandante y de cualquier otra persona para reclamar
la nulidad relativa de dicho acto.
Transcurrido como fueron más de cinco (5) años de la
fecha de la respectiva protocolización, se produjo la
inexistencia misma del derecho que se pretendió haciendo
valer con posterioridad, como es el caso de la presente
demanda. Es así que el derecho de los reclamantes (parte
actora) de ejercer la acción para demandar la nulidad del
asiento registral de fecha 19 de Noviembre (sic) de
1997, se extinguió por falta de ejercicio oportuno de la
misma. (han transcurrido 19 años) .
En este mismo orden de idea la Juzgadora (sic) hoy
recurrida, como Administradora (sic) de Justicia
(sic), debió pronunciarse sobre la petición de la
prescripción de acción de nulidad, que procesalmente
era determinante para la solución   (sic)   la presente
controversia y evitar reposiciones inútiles ; por lo cual
atentó flagrantemente la JUEZA   (sic)   (…), con la Tutela
Judicial Efectiva en su sentido estricto y el debido
Proceso  (sic)…”. (Mayúsculas, resaltado y subrayado del
texto).
 

Para decidir, la Sala observa:

El formalizante, fundamentado en el ordinal 5° del artículo 243 del


Código de Procedimiento Civil, denunció que la recurrida incurrió  en
incongruencia negativa del fallo por haber omitido  pronunciamiento
respecto al alegato de defensa expuesto en el escrito de contestación de la
demanda, relativo a la prescripción de la acción por haber excedido los 5
años establecidos en el artículo 1.346 del Código Civil.

Finalmente, el recurrente señaló que resultaba evidente que la ad


quem incurrió en el delatado vicio al haber omitido el pronunciamiento
respectivo sobre la petición de la prescripción de acción de nulidad, que
procesalmente era determinante para la solución del presente asunto y evitar
reposiciones inútiles.
Ahora bien, el vicio de incongruencia negativa, constituye infracción
de los artículos 12, 15 y 243 ordinal 5º del Código de Procedimiento Civil,
y el mismo tiene lugar cuando el sentenciador no decide todo lo alegado o
no decide sólo sobre lo alegado por las partes, en las oportunidades
procesales señaladas para ello, como son, en el libelo de la demanda o en su
reforma, en la contestación o en los informes u observaciones, siempre y
cuando sean formuladas peticiones o alegatos que, aunque no estén
comprendidos en la demanda, o en su contestación, pudieran tener
influencia determinante en la suerte del proceso.   (Cfr. Fallo de esta Sala
N° RC-105 de fecha 20 de diciembre de 2006, Exp. N° 06-067).

Ha sentado esta Sala en múltiples fallos, que cuando los jueces no se


pronuncian sobre los múltiples puntos objeto de la litis, su conducta
acarreará la nulidad del fallo dictado, al producirse el vicio
de incongruencia negativa , el cual se traduce en una omisión o falta de
pronunciamiento sobre un alegato oportunamente formulado,
en incongruencia negativa , citrapetita  o incongruencia omisiva.

Así pues, la falta de pronunciamiento,  enmarca, los casos


de incongruencia negativa  consistentes en la falta de solución de aquellos
puntos controvertidos, que si bien fueron mencionados o citados por el
sentenciador, sin embargo sobre ellos, guarda silencio, al no analizarlos,
establecerlos, correlacionarlos, calificarlos, apreciarlos o desecharlos; o el
caso de silencio total, en el cual, el sentenciador no sólo no se pronuncia
sobre el extremo de hecho controvertido, sino que ni siquiera lo menciona
en el texto material de la sentencia.

De lo que se colige, que el fallo no debe contener más de lo pedido


por las partes oportunamente; en - eat iudex ultrapetita partium- , pues, si
así lo hiciera incurriría en incongruencia positiva.

Igualmente se entiende, que el fallo no debe contener menos de lo


pedido por las partes en -eat iudex citrapetita partium- , pues si así lo
hiciera incurría en incongruencia negativa, la que se da cuando la
sentencia omite decidir sobre alguna de las pretensiones procesales.
 

Ahora bien, la Sala considera pertinente transcribir lo alegado por los


codemandados en su escrito de contestación a la demanda, que corre inserto
a los folios 131 al 140 de la primera pieza del expediente, que señala lo
siguiente:
 
“…Con respecto a los hechos alegados por los demandantes
Ciudadanos (sic) (…), no son ciertos, los rechazamos,
negamos y contradecimos y no reconocemos ni
aceptamos lo alegado por los accionantes .
OPONEMOS LA PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN DE
NULIDAD DE COMPRA VENTA Y DE LOS ASIENTOS
REGISTRALES CORRESPONDIENTES A LOS
SIGUIENTES DOCUMENTOS : (…).
En tal sentido, previamente nos permitimos aclarar a los
demandantes, que en el caso que nos ocupa mal puede
hablarse de una solicitud de nulidad absoluta, toda vez que
no se llena los extremos que la originan.
…Omissis…
Como oportunamente demostraremos, los demandantes
tienen pleno conocimiento de la existencia de los
documentos de compra venta ya identificados (…), que
contiene la venta de la que se originan las dos
subsiguientes, por lo que el lapso de prescripción
respectivo ya se cumplió y no existe demostración alguna
de que la misma haya sido legalmente interrumpida. (…).
(Mayúsculas y resaltado del texto).
 

De lo anterior transcrito, se tiene que los codemandados alegaron


expresamente como defensa de fondo en su escrito de contestación a la
demanda, la prescripción de la acción de nulidad de los asientos registrales
correspondientes a los documentos señalados por los demandantes en su
escrito libelar.
De igual forma, la Sala a fin de verificar lo delatado por el recurrente
en casación pasa a transcribir la parte pertinente del fallo de la  ad quem,
que expresamente señaló lo siguiente:

“…Consta del folio 131 al 140, escrito de contestación a


la demanda presentado por los ciudadanos (…), en
donde niegan, rechazan y contradicen lo alegado por los
accionantes en el libelo de demanda; oponen la
prescripción de la acción de nulidad de compra venta y
de los asientos registrales correspondientes a los
siguientes documentos : (…);asimismo señalan que el
presente caso no puede enmarcarse en la nulidad absoluta
pues no se llenan los extremos que la originan; que los
demandantes tiene pleno conocimiento de la existencia de
los documentos de compra venta y muy especialmente
desde el mes de agosto de 2007, del suscrito por los
ciudadanos Margarito Arias y Ángel Martín Lozano, que
contiene la venta de la que se originan las dos
subsiguientes,  por lo que el lapso de prescripción
respectivo ya se cumplió y no existe demostración
alguna de que la misma haya sido legalmente
interrumpida; (…).
 
II
MOTIVOS DE HECHO Y DE DERECHO
…Omissis…
En la oportunidad de la contestación , los codemandados
Carmen Angelina Escalona de Lozano, Braulio Alexander
Yaraure Sánchez, Rosa del Valle Rojas Carballo y Henry
José Yovera Naveda, niegan, rechazan y contradicen lo
alegado por los accionantes en el libelo de demanda;
oponen la prescripción de la acción de nulidad de
compra venta y de los asientos registrales
correspondientes a los documentos cuya nulidad se pide ;
asimismo señalan que el presente caso no puede
enmarcarse en la nulidad absoluta pues no se llenan los
extremos que la originan; que los demandantes tienen
pleno conocimiento de la existencia de los documentos de
compra venta y muy especialmente desde el mes de agosto
de 2007, del suscrito por los ciudadanos Margarito Arias y
Ángel Martín Lozano, que contiene la venta de la que se
originan las dos subsiguientes,  por lo que el lapso de
prescripción respectivo ya se cumplió y no existe
demostración alguna de que la misma haya sido
legalmente interrumpida  (…).
…Omissis…
Vistos los términos en los cuales se pronunció el Tribunal
(sic) a quo, se colige que declaró sin lugar la presente
acción bajo el fundamento que no consta en autos prueba
fehaciente que desvirtúe la veracidad del documento
público del cual se pide la nulidad de su asiento registral,
y en consecuencia improcedentes las subsiguientes ventas.
Por lo que apelada como fue esta decisión, esta alzada
procede a hacer las siguientes consideraciones: En el
presente caso, la parte demandante pretende que se declare
la nulidad del asiento registral del documento de compra
venta celebrada entre Margarito Arias y Ángel Martín
Lozano, en fecha 19 de mayo de 1997, registrado ante la
Oficina (…), así como las ventas subsiguientes, a saber,
del documento de compra venta celebrada entre Carmen
Angelina Escalona de Lozano y Braulio Alexander Yaraure
Sánchez, registrada ante la Oficina (…), y del documento
mediante el cual Braulio Alexander Yaraure Sánchez vende
el inmueble a Rosa del Valle Rojas Carballo y Henry José
Yovera Naveda, en fecha 1° de noviembre de 2012,
registrado por ante (…).
Ahora bien, estando circunscrita la presente demanda a la
solicitud de declaratoria de nulidad de un asiento registral,
este Juzgado estima necesario analizar previamente la
regulación normativa y jurisprudencial de este tipo de
pretensiones.
La implementación de la Ley de Registro Público y
Notariado de 2001, no consagró de manera explícita una
disposición normativa, como la consagrada en artículo 53
de la Ley del Registro Público de 1999, en la cual se
establecía expresamente la posibilidad para que las
personas afectadas por determinada inscripción registral
solicitaran su nulidad ante la jurisdicción ordinaria, ni
tampoco se precisó en esa Ley cuáles serían los motivos
por los cuales podrían solicitar tal nulidad. Tal situación se
encuentra presente en la actual Ley de Registro Público y
del Notariado, en la cual solamente se establece en su
artículo 43 lo siguiente:
La inscripción no convalida los actos o negocios jurídicos
inscritos que sean nulos o anulables conforme a la ley. Sin
embargo, los asientos registrales en que consten esos actos
o negocios jurídicos solamente podrán ser anulados por
sentencia definitivamente firme.
Como se aprecia, la citada norma consagra de manera
genérica la posibilidad de que sean anulados, mediante
sentencia definitivamente firme, los asientos registrales en
los cuales consten actos o negocios jurídicos. No obstante,
no se consagra en la aludida norma cuáles serían los
motivos por los cuales podría solicitarse y en definitiva las
causales en las que se puede dar la nulidad de los asientos
registrales.
Sin embargo, la Sala Constitucional del Tribunal Supremo
de Justicia, en sentencia (…).
Conforme se desprende del anterior criterio
jurisprudencial, la demanda que pretenda la nulidad de un
asiento registral debe fundamentarse en el incumplimiento
de los requisitos establecidos en la Ley de Registro Público
y del Notariado, para su inscripción en el registro, y en la
medida en que tales requisitos condicionan la validez de
esa inscripción. En otras palabras, la nulidad podrá ser
declarada en aquellos casos en los cuales se logre
demostrar que la inscripción registral se realizó en
manifiesta contravención tanto de la referida Ley como de
cualquier otra Ley de la República que establezca
exigencias y requisitos concretos para que pueda
materializarse un asiento registral.
El asiento registral o inscripción de un documento, según
doctrina de la Sala Político Administrativa, es (…).
Ahora, bien, en el presente caso, los demandantes (…),
herederos del ciudadano Margarito Arias, manifestaron en
su escrito libelar que la supuesta venta realizada por su
fallecido padre ciudadano Margarito Arias al ciudadano
Ángel Martín Lozano, es nula, en razón de que el hoy
difunto Margarito Arias nunca vendió los inmuebles objeto
de la presente demanda; por su parte el codemandado
Ángel Martín Lozano conviene en la Nulidad del
Documento de la presunta compra venta efectuada por el
ciudadano Margarito Arias a su persona, de conformidad
con lo establecido en el artículo 363 del Código de
Procedimiento Civil, en virtud de ser falso que el hoy
difunto ciudadano Margarito Arias y su persona Ángel
Martín Lozano, hubiesen presentado y tramitado
personalmente para su registro el documento Registrado
por ante al (sic) Oficina (…); hechos estos que no fueron
demostrados con los elementos probatorios traídos al
proceso, encontrando solo una prueba indiciaria, que es el
oficio Nº 328-6470, emanado del Registrador (…), no se
encuentra inserto en los libros respectivos.
…Omissis…
Visto lo anterior, quien aquí suscribe habiendo valorado la
copia certificada de la experticia grafotécnica remitida por
el Ministerio Público, en la cual quedó probado que la
firma de los ciudadanos Ángel Lozano y Carmen Escalona
no se corresponde con la firma que aparece en el
documento objeto de nulidad, que corre inserto a los folios
del 51 al 54 de la I pieza del presente expediente, el cual
aparece protocolizado por ante la Oficina (…); como
consecuencia de ello, quien aquí juzga, considera que en el
presente caso existe una contravención de normas
registrales, que hacen nulo el asiento registral del
documento contentivo de la venta del inmueble
anteriormente identificado, autenticado en fecha 4 de abril
de 2002, por ante la Notaria (…).
Por lo que siendo así, en consecuencia quedan afectados de
nulidad los documentos posteriores, a saber, la compra
venta celebrada entre CARMEN ANGELINA ESCALONA
DE LOZANO y BRAULIO ALEXANDER YARAURE
SÁNCHEZ, registrada ante la Oficina (…); y el documento
mediante el cual el ciudadano BRAULIO ALEXANDER
YARAURE SÁNCHEZ vende el inmueble a ROSA DEL
VALLE ROJAS CARBALLO y HENRY JOSÉ YOVERA
NAVEDA, en fecha 1° de noviembre de 2012, registrado
(…), en virtud que constituyen actos que contravienen los
requisitos establecidos legalmente para la inscripción de un
documento en el registro público; y así se establece.
Hechas las consideraciones anteriores, concluye esta
alzada que debe declararse la nulidad de los asientos
registrales antes mencionados; por lo que la presente
demanda debe ser declarada con lugar y la sentencia
recurrida debe ser revocada; y así se decide…”.
(Mayúsculas del fallo y resaltado de la Sala).
 

De acuerdo a lo antes transcrito, se tiene que la  ad quem  en su fallo,


respecto a la prescripción de la acción de nulidad de asientos registrales,
alegada por los codemandados como defensa de fondo en el escrito de
contestación a la demanda, sólo hizo una referencia o enunciado de los
alegatos de defensa expuesto por los codemandados en su escrito de
contestación a la demanda.

Por otra parte, la Sala evidenció que la ad quem en lo absoluto dio
respuesta expresa al referido alegato de prescripción de la acción de nulidad
de asientos registrales de documentos, habiendo silencio total al respecto,
cuyo análisis y resolución podía ser determinante en el dispositivo del fallo.

De lo anterior, la Sala verifica la existencia de la violación de normas


de orden público que inciden directamente en el debido proceso y derecho a
la defensa de los codemandados, por la falta de pronunciamiento con
respecto al reseñado alegato de prescripción de la acción de nulidad de
asientos registrales de documentos, pues, de manera específica la  ad
quem no se pronunció sobre el punto delatado, y era su deber efectuar la
debida respuesta para así cumplir con el principio de la congruencia del
fallo establecido en el ordinal 5° del artículo 243 del Código de
Procedimiento Civil.

En consideración a todos los fundamentos precedentemente


expuestos, esta Sala declara la procedencia de la denuncia por
incongruencia negativa del fallo por omisión de pronunciamiento, por haber
incurrido la recurrida en el vicio delatado. Así se decide.

Por cuanto se ha encontrado procedente una infracción de las


descritas en el ordinal 1º del artículo 313 del Código de Procedimiento
Civil, esta Sala se abstiene de conocer y decidir las restantes denuncias
contenidas en el escrito de formalización del recurso extraordinario de
casación, de conformidad con lo establecido en el artículo 320  eiusdem. Así
se decide.

D E C I S I Ó N
En fuerza de las anteriores consideraciones, este Tribunal Supremo de
Justicia en Sala de Casación Civil, administrando justicia en nombre de la
República Bolivariana de Venezuela y por autoridad de la ley,
declara: CON LUGAR  el recurso extraordinario de casación, anunciado y
formalizado por los codemandados Carmen Angelina Escalona de Lozano,
Braulio Alexander Yaraure Sánchez, Rosa Del Valle Rojas Caraballo y
Henry José Yovera Naveda, contra el fallo dictado por el Juzgado Superior
en lo Civil, Mercantil, del Tránsito y Bancario de la Circunscripción
Judicial del estado Falcón, con sede en Santa Ana de Coro, en fecha 25 de
septiembre de 2015.

En consecuencia,  SE ANULA  la sentencia recurrida y se ORDENA  al


juez superior que corresponda, dicte nueva decisión.

Queda de esta manera CASADA  la sentencia impugnada.

No hay condenatoria en las costas del recurso, dada la naturaleza del


presente fallo.

Publíquese, regístrese y remítase este expediente al juzgado superior


antes mencionado,  todo de conformidad con lo estatuido en los artículos 322
y 326 del Código de Procedimiento Civil.

Dada, firmada y sellada en la Sala de Despacho de la Sala de


Casación Civil del Tribunal Supremo de Justicia, en Caracas, a los
dieciocho (18) días del mes de noviembre de dos mil dieciséis. Años: 206°
de la Independencia y 157° de la Federación.

Presidente de la Sala,
 
 
 
__________________________
GUILLERMO BLANCO VÁZQUEZ
 
 
 
Vicepresidente,
 
 
 
___________________________________
FRANCISCO RAMÓN VELÁZQUEZ ESTÉVEZ
Magistrada,
 
 
 
_______________________________
MARISELA VALENTINA GODOY ESTABA
Magistrada,
 
 
 
_______________________________
VILMA MARÍA FERNÁNDEZ GONZÁLEZ
 
 
 
Magistrado-Ponente,
 
 
 
___________________________
YVÁN DARÍO BASTARDO FLORES
 
Secretario,
 
 
 
_________________________
CARLOS WILFREDO FUENTES
 
 
 
 
 
Exp. AA20-C-2016-000031
 
Nota: Publicada en su fecha a las (   )
 
 
 
Secretario,
 
 
 

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