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INTEGRANTES:
- Córdova Gonzales Mónica Yulissa - 71788405
- De la Cruz Paredes Cristopher Esteban - 72212864
- Figueroa Villalobos Karenia Elizabeth- 46122252
- Marchand Ramos, María Alejandra - 73235670
- Ramos Rodas Caroline - 72540539
- Reátegui Díaz Diego – 71888990
- Ruiz Llontop, Miriam – 7269353
- Tarrillo Ventura Robert - 72517534
- Valderrama Durand Luz - 73215397
- Vásquez Picón, Dayana Cristal - 72917048
- Vega Arévalo, Manuela - 73144131
2021
INTRODUCCION
Por todo ello, es necesario conocer la epidemiología del cáncer de pulmón, sin dejar de
lado los aspectos genéticos y moleculares que forman parte de la génesis, desarrollo,
pronóstico y sobrevida de esta enfermedad. Se debe conocer cuáles son las nuevas
técnicas de diagnóstico, su aplicación, ventajas y beneficios, enfatizando en aquellas que
ayuden a un diagnóstico precoz. No se deben dejar de mencionar las alternativas
terapéuticas y los avances que en este campo se han logrado.
OBJETIVOS:
- Identificar la etiología sobre Cáncer de pulmón.
- Diferenciar los distintos signos y síntomas de Cáncer de pulmón.
- Conocer los tipos de Cáncer de pulmón.
- Identificar los métodos diagnósticos para el cáncer de pulmón.
- Estudiar el tratamiento vigente para los distintos estadios del cáncer de
pulmón.
- Conocer el pronóstico de cáncer de Pulmón.
- Reconocer la prevención del cáncer de pulmón
ETIOLOGÍA
La causa más importante de cáncer de pulmón, responsable de alrededor del 85% de los
casos, es
Tabaquismo
El riesgo de cáncer difiere según la edad, la intensidad y la duración del tabaquismo.
El riesgo de cáncer de pulmón aumenta con la exposición combinada a toxinas y
tabaquismo. Otros factores de riesgo posibles o confirmados incluyen la contaminación
del aire, fumar marihuana, la exposición activa y pasiva al humo del cigarrillo y la
exposición a agentes carcinógenos (p. ej., el amianto, la radiación, el radón, el arsénico,
los cromatos, el níquel, los éteres del cloro metilo, los hidrocarburos aromáticos
policíclicos, el gas mostaza, las emisiones de horno de coque, las cocinas primitivas, la
calefacción en chozas o cabañas). El riesgo de cáncer de pulmón asociado con los
sistemas electrónicos de suministro de nicotina (p. ej., los cigarrillos electrónicos) aún no
se ha determinado, aunque se cree que los productos de la combustión del tabaco son los
principales carcinógenos.
El riesgo de cáncer disminuye después de dejar de fumar, pero nunca regresa al riesgo
basal que presentan los que nunca fumaron. Cerca del 15 al 20% de las personas que
desarrollan cáncer de pulmón nunca ha fumado o lo ha hecho mínimamente.
Si la exposición al radón en el hogar aumenta el riesgo de cáncer de pulmón y en qué
medida es controvertido.
La inflamación crónica aumenta el riesgo de muchos cánceres, incluido el cáncer de
pulmón. Por ejemplo, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, la deficiencia de alfa-1
anti tripsina y la fibrosis pulmonar aumentan la susceptibilidad al cáncer de pulmón. Las
personas cuyos pulmones presentan cicatrices por otras enfermedades pulmonares (p.
ej., tuberculosis) corren un riesgo potencialmente mayor de cáncer de pulmón. Asimismo,
los fumadores activos que toman suplementos de beta-caroteno tienen mayor riesgo de
desarrollar cáncer de pulmón. 1
SINTOMATOLOGÍA
El cáncer pulmonar temprano rara vez da síntomas, durante estos estadios el 80% de los
pacientes presenta síntomas generales e inespecíficos como astenia, hiporexia y pérdida
de peso.
Para cuando el paciente acude a consulta se encuentra en estadios avanzados; los
motivos de consulta son por lo general tos, disnea, disfonía, hemoptisis y el dolor torácico;
en ocasiones, sin embargo, se pueden encontrar presentaciones específicas como el
síndrome oclusivo de vena cava superior, el síndrome de Pancoast o el síndrome de
Claude-Bernard-Horner.
Las molestias de pacientes con enfermedad metastásica están determinadas
principalmente por los sitios específicos afectados tales como hueso, cerebro, hígado y
glándulas adrenales.
Los síndromes paraneoplásicos son el conjunto de signos o síntomas no asociados a
efectos mecánicos del tumor o sus metástasis y que se deben a la producción de
mediadores bioquímicos. 2
TIPOS DE CANCER DE PULMON
Tipos histológicos
El cáncer pulmonar es un tumor maligno que se desarrolla a partir de células, tanto
pulmonares como bronquiales. Existen dos categorías de cáncer pulmonar clínicamente
importantes considerando el origen y el comportamiento de las células cancerosas:
Cáncer pulmonar de células pequeñas (CPCP)
Representa aproximadamente el 25% de los cánceres pulmonares y es de
comportamiento muy agresivo, proliferando rápidamente. Muestra la mayor
relación con el tabaquismo, ya que el 98% de los pacientes que lo presentan
cuentan con historia de tabaquismo.
Radiografía de tórax.
Analítica general.
Con todas las pruebas radiológicas (TAC, RM, pet TAC) se obtiene la información
necesaria para determinar a parte del pulmón qué otros órganos están afectados.
Conocer esta extensión es fundamental para establecer el estadio de la enfermedad, ya
que el estadio tiene un papel pronóstico y terapéutico, ya que en función del estadio (entre
otros factores) se decide el tratamiento de los pacientes con cáncer de pulmón.
TRATAMIENTO
Todos los pacientes con cáncer de pulmón (microcítico o no) se decide el tratamiento
dentro de un comité multidisciplinar. La reunión multidisciplinar o comité de tumores
torácicos es una reunión de médicos de diferentes especialidades experto e implicados en
el diagnóstico y tratamiento del cáncer de pulmón. Después de revisar todas las pruebas
realizadas deciden a la mejor opción de tratamiento para los pacientes en función del
estadio, edad, estado general del paciente y otras enfermedades acompañantes que
pueda presentar el paciente.
Si, por cualquier motivo, el cirujano no puede extirpar todo el lóbulo del pulmón, puede
realizar una resección en cuña del tumor, rodeada por un margen de pulmón normal.
Después de la cirugía y una vez analizado el tumor y la afectación o no de los ganglios se
decide la indicación de una quimioterapia adyuvante (después de la cirugía). Será su
oncólogo quién después de valorar toda la información decidirá dicha indicación. Por lo
general la afectación ganglionar y los tumores con un tamaño de al menos 4 centímetros
son susceptibles de recibir quimioterapia, que consta de la combinación de un fármaco
llamado cisplatino con otro agente de quimioterapia.
En pacientes con estadios I a III que por comorbilidades no sean candidatos a realiza una
cirugía y que tengan buena capacidad pulmonar pueden beneficiarse de un tratamiento
radical mediante radioterapia.
Los pacientes con cáncer de pulmón tratados con radioterapia a menudo experimentan
fatiga, malestar y pérdida del apetito. Si se administra radioterapia en el cuello, o en el
centro del tórax, los pacientes pueden desarrollar dolor de garganta y presentar dificultad
para tragar. En la zona tratada puede desarrollarse irritación de la piel. La mayoría de los
efectos secundarios de la radioterapia desaparecen una vez finalizado el tratamiento. Si la
radioterapia irrita o inflama el pulmón, los pacientes pueden desarrollar tos, fiebre o
disnea durante varios meses y a veces años después de finalizado el tratamiento. Esta
afección se presenta en aproximadamente el 15% de los pacientes y se llama neumonitis
por radiación. Si es leve, no requiere tratamiento y se cura por sí sola. Si es grave, puede
requerir tratamiento con esteroides. La radioterapia también puede dejar cicatrices
permanentes en el tejido pulmonar cerca del tumor canceroso. Normalmente, las
cicatrices no presentan síntomas. Las cicatrices generalizadas pueden provocar tos
permanente y disnea. Por esta razón, es importante que las radioterapias se dirijan a
reducir al mínimo la cantidad de tejido pulmonar normal expuesto a la radiación. Los
radio-oncólogos a menudo utilizan tomografías computarizadas para planear la
radioterapia.
Una de las razones por las que las células malignas tienen éxito en su crecimiento es
porque son capaces de eludir el sistema inmunitario. La inmunoterapia es un tipo de
tratamiento que ayuda al sistema inmunitario a combatir el cáncer. En estadios iniciales se
está investigando en ensayos clínicos el papel de la inmunoterapia, medicamentos
administrados por vía endovenosa que intentan despertar el sistema inmunitario para que
este pueda actuar contra el cáncer. Existen diferentes estudios clínicos de inmunoterapia
después de la cirugía (adyuvante) o bien antes de la cirugía (neoadyuvante) en
combinación con quimioterapia. Si su médico le propone alguno de estos estudios, puede
ser una oportunidad para testar unos tratamientos muy prometedores. Las principales
contraindicaciones para recibir estos tratamientos son pacientes con enfermedades
autoinmunes (por ejemplo: enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, artritis reumatoides
evolucionadas). Los efectos secundarios son menores que los de quimioterapia
(cansancio, inflamación del hígado, afectación de la función del tiroides, prurito en la piel,
entre otros), normalmente leves y que se controlan con la suspensión del tratamiento y la
administración de cortisona. Es cierto que pueden existir efectos secundarios graves
(minoritarios), como por ejemplo inflamación del pulmón causando ahogo, también se
controla suspendiendo el tratamiento y administrando cortisona. Es importante que
pregunte a su oncólogo para que le informe específicamente.
En los pacientes con estadio IV o avanzado, pacientes con metástasis es muy importante
que antes de iniciar el tratamiento su oncólogo dispongo de los biomarcadores (ver
apartado diagnóstico) ya que estos son necesarios para decidir la actitud terapéutica.
En los pacientes con, EGFR, ALK, ROS1 negativo (su tumor no expresa estos
biomarcadores), pero el tumor expresa PD-L1 ≥ 1% (incluso en tumores con PD-L1
negativo) en la biopsia, estos pacientes van a recibir si no existe ninguna contraindicación
una combinación de quimioterapia con inmunoterapia. La quimioterapia con la
inmunoterapia se administra una vez cada 3 semanas (1 ciclo) hasta un máximo de 4
ciclos. Si después de 4 ciclos de tratamiento conjunto no existe crecimiento del tumor,
recibirá un tratamiento de mantenimiento de hasta 2 años con inmunoterapia acompañada
de un tratamiento de mantenimiento de quimioterapia (sólo en el caso del
adenocarcinoma, si usted padece un carcinoma escamoso, sólo recibirá la inmunoterapia
de mantenimiento). Si los pacientes tienen alguna contraindicación para recibir la
inmunoterapia realizarán tratamiento de quimioterapia exclusiva de 4 a 6 ciclos seguido o
no, seguido de un tratamiento de mantenimiento según el subtipo de cáncer si no existe
progresión.
En los pacientes con EGFR mutado (~12% de los pacientes con adenocarcinoma de
pulmón), el tratamiento con mayor eficacia es dar un tratamiento personalizado que van
dirigidos contra esta alteración. Estos son fármacos que se administran por vía oral, se
administran cada día hasta que el tumor crezca. Los principales efectos secundarios son
cansancio, diarrea, granos en el cuerpo, pero la mayor parte de pacientes este
tratamiento es más cómodo y con menores efectos secundarios que la quimioterapia. En
pacientes EGFR mutados independientemente de que tengan un PD-L1 elevado, el
tratamiento de elección inicial no es nunca la inmunoterapia con o sin quimioterapia, es el
tratamiento personalizado. Si el tratamiento inicial fracasa, cuando éste es erlotinib,
agatino o gefitinib, en un 50% de los casos es debido a la adquisición de una mutación de
resistencia denominada T790M que puede ser tratada con osimertinib. Para determinar la
existencia de esta mutación a la progresión es necesario hacer una biopsia de tejido y en
su defecto una biopsia líquida (intentar determinar esta mutación a través de un análisis
de sangre).
En los pacientes con ALK positivo (~5% de los pacientes con adenocarcinoma de
pulmón), el tratamiento con mayor eficacia es dar un tratamiento personalizado que van
dirigidos contra esta alteración. Estos son fármacos que se administran por vía oral, se
administran cada día hasta que el tumor crezca. Los principales efectos secundarios son
cansancio, diarrea, a veces ganancia de peso, alteraciones en la analítica como aumento
del colesterol o inflamación del hígado. Este tratamiento es más cómodo y con menores
efectos secundarios que la quimioterapia. En pacientes ALK positivos
independientemente de que tengan un PD-L1 elevado, el tratamiento de elección inicial no
es nunca la inmunoterapia con o sin quimioterapia, es el tratamiento personalizado. En los
pacientes con ROS1 positivo (~2% de los pacientes con adenocarcinoma de pulmón), el
tratamiento con mayor eficacia es dar un tratamiento personalizado que van dirigidos
contra esta alteración (crizotinib). Estos son fármacos que se administran por vía oral, se
administran cada día hasta que el tumor crezca. Los principales efectos secundarios son
cansancio, diarrea, a veces ganancia de peso, alteraciones en la analítica como aumento
del colesterol o inflamación del hígado. Este tratamiento es más cómodo y con menores
efectos secundarios que la quimioterapia. En pacientes ROS1 positivos
independientemente de que tengan un PD-L1 elevado, el tratamiento de elección inicial no
es nunca la inmunoterapia con o sin quimioterapia, es el tratamiento personalizado.
En los pacientes con ROS1 positivo (~2% de los pacientes con adenocarcinoma de
pulmón), el tratamiento con mayor eficacia es dar un tratamiento personalizado que van
dirigidos contra esta alteración. Estos son fármacos que se administran por vía oral, se
administran cada día hasta que el tumor crezca. Los principales efectos secundarios son
cansancio, diarrea, a veces ganancia de peso, alteraciones en la analítica como aumento
del colesterol o inflamación del hígado. Este tratamiento es más cómodo y con menores
efectos secundarios que la quimioterapia. En pacientes ROS1 positivos
independientemente de que tengan un PD-L1 elevado, el tratamiento de elección inicial no
es nunca la inmunoterapia con o sin quimioterapia, es el tratamiento personalizado.
Los pacientes con cáncer de pulmón de células pequeñas en estadio limitado (sin
metástasis a distancia) se tratan con una combinación de quimio y radioterapia. La
radioterapia se administra durante el primer o el segundo ciclo de quimioterapia (que se
prolonga de tres a seis meses). Cuando se combina con la radioterapia, el esquema más
usado es la combinación de cisplatino y etopósido. Se hacen un total de 4 ciclos. Si
después de la quimio-radioterapia no existe progresión de la enfermedad se realiza una
radioterapia cerebral profiláctica (realizar radioterapia en el cerebro) para reducir el riesgo
de aparición de metástasis cerebrales. Este tratamiento se discute en pacientes mayores
de 70 años o que hayan presentado previamente ictus cerebrales.
Los pacientes con enfermedad en estadio extendido (con metástasis) se tratan solamente
con quimioterapia. En caso de buena respuesta al tratamiento de quimioterapia se puede
plantear una radioterapia cerebral profiláctica o bien realizar un control estricto (cada 8
semanas aproximadamente) con RNM cerebrales, y realizar la radioterapia sólo si
aparecen las metástasis.
Actualmente en carcinoma microcítico de pulmón avanzado, dos estudios clínicos han
demostrado que la combinación de quimioterapia con inmunoterapia se ha demostrado
más efectiva que la quimioterapia sola, pero esta combinación no se encuentra todavía
aprobada en España.
Tratamiento médico
PRONOSTICO
El cáncer de pulmón junto con el cáncer de páncreas y esófago son los tumores más
agresivos. Se estima que un 15% de los pacientes que sufren un cáncer de pulmón
sobreviven más de 5 años. Esto es debido a la agresividad del tumor y a la dificultad de
realizar un diagnóstico precoz. La supervivencia global del cáncer de pulmón ha mejorado
de forma considerable en los últimos años con la introducción de nuevos tratamientos y
técnicas de imagen. El cáncer de pulmón es la primera causa de muerte por cáncer a
nivel mundial. Hay que recordar que las estadísticas son solo estimaciones poblacionales
y que, en muchos casos, no representan la evolución de cada individuo. 5
PREVENCIÓN
No fume. En los Estados Unidos, fumar cigarrillos causa alrededor del 80 % al
90 % de las muertes por cáncer de pulmón. Lo más importante que usted puede
hacer para prevenir el cáncer de pulmón es no empezar a fumar o, si ya fuma,
dejar de hacerlo.
Evite el humo secundario del tabaco. El humo del cigarrillo, los puros o las pipas
que fuman otras personas se llama humo secundario. No deje que se fume en su
casa ni en su automóvil.
Realice pruebas para detectar radón en su casa. La Agencia de Protección
Ambiental recomienda que se realicen pruebas para detectar gas radón en todas
las casas.
Tenga cuidado en el trabajo. Las directrices sobre salud y seguridad en el lugar
de trabajo pueden servir de guía para evitar el contacto con sustancias
(carcinógenos) que pueden causar cáncer. 5
CONCLUSIONES
La causa más importante de cáncer de pulmón es el tabaquismo que difiere según
la edad, la intensidad y la duración del tabaquismo, otros factores de riesgo
posibles o confirmados incluyen la contaminación del aire, fumar marihuana.
Los síntomas más conocidos de cáncer de pulmón son tos, disnea, disfonía,
hemoptisis y el dolor torácico; en ocasiones, sin embargo, se pueden encontrar
presentaciones específicas como el síndrome oclusivo de vena cava superior, el
síndrome de Pancoast o el síndrome de Claude-Bernard-Horner.
Los tipos de cáncer de pulmón son Cáncer pulmonar de células pequeñas (CPCP)
y Cáncer pulmonar de células no pequeñas1 (CPCNP).
5- National Cancer Institute (Instituto Nacional del Cáncer). INC 2020. Revisado 2021
marzo 21. Disponible en: http://www.cancer.gov/types/lung/patient/lung-prevention-
pdq.