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UNIVERSIDAD DE GUAYAQUIL

NEUROCIENCIA Y EDUCACIÓN: COMPRENDER COMO FUNCIONA EL


CEREBRO EN EL PROCESO DE APRENDIZAJE.

INTRODUCCIÓN

“La neurociencia es, por mucho, la rama más excitante de la ciencia, porque el
cerebro es el objeto más fascinante del universo. Cada cerebro humano es diferente,
el cerebro hace a cada ser humano único y define quién es”. Stanley B. Prusiner
(Premio Nobel de Medicina, 1997)

Comprender cómo funciona el cerebro, es clave para un mejor aprendizaje; puesto


que, entenderla aporta las tácticas elementales para lograr un aprendizaje más
profundo y eficiente durante lo largo de la vida. Es el órgano más complejo de
nuestro cuerpo, se encuentra vinculado a todas las funciones que realizamos, por
esta razón, se necesita hallar patrones y regularidades en su desempeño y
composición; en otras palabras, se debe intentar formular explicaciones útiles y
primordiales.

¿CÓMO FUNCIONA NUESTRO CEREBRO?


El cerebro es la parte más voluminosa del encéfalo y está dividido por un surco
central llamado cintura longitudinal en los hemisferios derecho e izquierdo a la vez
unidos por el cuerpo calloso. La superficie de cada hemisferio presenta un conjunto
de pliegues que forman una serie de depresiones irregulares son los surcos o
fisuras, la disposición que adoptan estos surcos nunca es igual entre los cerebros
de diferentes personas y también adoptan disposiciones distintas en ambos lados
de un mismo encéfalos. Cada hemisferio cerebral se divide en cuatro lóbulos:
Frontal- El parietal –Temporal- Occipital. En general los cuatro primeros lóbulos, se
sitúan debajo de los huesos que llevan el mismo nombre, así el lóbulo frontal
descansa en las profundidades del hueso frontal, el lóbulo parietal bajo el hueso, el
lóbulo temporal bajo el hueso temporal y el lóbulo occipital debajo de la región
correspondiente a la protuberancia del occipital.
El cerebro contiene varios billones de células de las que unos cien mil millones de
neuronas y posee casi 100 trillones de interconexiones en serie y en paralelo, que
proporcionan la base científica que permite el funcionamiento cerebral, gracias a los
circuitos formados por las células nerviosas o neuronas es capaz de procesar
información sensorial procedente en el mundo exterior y del propio cuerpo el
cerebro. Desempeña funciones: sensoriales, funciones: motoras y funciones de:
integración menos definidas asociadas con diversas actividades mentales, algunos
procesos que están controlados por el cerebro son: la memoria el lenguaje la
escritura y la respuesta emocional.

El funcionamiento del cerebro se basa en el concepto de que la neurona es una


unidad anatómica y funcional independiente integrada por un cuerpo celular del que
salen numerosas ramificaciones llamadas dendritas capaces de recibir la
información procedente de otras células nervios y de una prolongación principal el
axón, que conduce la información hacia las otras neuronas en forma de corriente
eléctrica, pero las neuronas no se conectan entre sí por una red continua formada
por sus prolongaciones, sino que, lo hacen por contactos separados por unos
estrechos espacios denominados sinapsis la transmisión de las señales a través de
la sinapsis se realiza mediante unas sustancias químicas conocidas como
neurotransmisores de los cuales hoy se conocen más de 20 clases diferentes.

TEORIA DEL CEREBRO TRIÚNICO

“Es como si en nuestra cabeza convivieran un cocodrilo, un caballo y un ser humano,


y que las decisiones las tomaran entre los tres, aunque no siempre de mutuo
acuerdo” Paul MacLean

Uno de los neurocientíficos más célebres del último siglo Paul Mclean en 1960
presentó su teoría del cerebro trib [ CITATION Cll18 \l 12298 ]uno, en el cual planteó que,
en realidad los humanos tenemos tres cerebros en uno, que han ido surgiendo,
mientras evoluciona.

Cerebro reptiliano: Está formado por el cerebelo que es esencial para controlar
ocupaciones o actividades motrices cómo tocar algún instrumento, herramienta
correr o caminar y el tronco encefálico que transmite la información sensorial, el
cerebro reptiliano es el más antiguo de todos debido a que, tiene quinientos millones
de años de antigüedad. El objetivo primordial del cerebro reptiliano es garantizar la
supervivencia del sujeto y de la especie,

Cerebros límbicos: Es algo más complejos que los cerebros reptilianos tienen unos
150 millones de años y se encuentra justo encima del cerebro reptiliano. El cerebro
límbico representa a los sentimientos, emociones tales como, el amor la lealtad la
pena la excitación la angustia o la alegría. El cerebro límbico tiene memoria y
acumula sensaciones de vivencias pasadas, además es responsable de juzgar e
influir en nuestra personalidad y nuestra conducta, es decir, tiene una enorme
predominación en nuestro comportamiento. Aparte lo mencionado, clasifica los
estímulos según causen dolor o placer y los albergan en la memoria para vivencias
futuras.

Neocorteza: La neocorteza es la parte más evolucionada del cerebro humano, se


calcula que, surgió hace 2 o 3 millones de años aproximadamente. Su función
principal es mantener el controlar las emociones y las capacidades cognitivas como
la memorización la concentración la autorreflexión la resolución de inconvenientes o
la destreza de elegir la conducta conveniente. Inclusive la neocorteza juega un
papel bastante importante en funcionalidades como el razonamiento espacial el
pensamiento consciente y en los humanos el lenguaje de este cerebro nos permite,
planificar sumar y analizar.

EL CEREBRO DEL NIÑO

El niño nace con un cerebro muchísimo más conformado de lo que suponemos y se


va desarrollando con velocidad en los primeros años. Desde el nacimiento ya se
encuentran estan preparados para identificar emociones; es decir, tienen la
posibilidad de sentir temor, tristeza y otros sentimientos. El cerebro del infante es
muy semejante al del adulto, la diferencia entre un cerebro y el otro es el número de
conexiones (sinapsis), y éstas conexiones son las responsables del aprendizaje, de
qué un niño aprenda a gatear, andar, leer, etc. Realmente, el cerebro de un infante
tiene casi el 80% del tamaño del de un adulto; o sea, cuenta con casi cada una de
las neuronas que tendrá a lo largo de su vida. Sin embargo las funcionalidades
cerebrales se encajan desde las interrelaciones que tiene el niño con el ambiente y
con los otros.
Por ello, debemos tener en cuenta que, el cerebro del infante es más moldeable y
adaptable, con una capacidad de aprendizaje que jamás tendrá en la vida. Por esta
razón, la función de contestar a los estímulos es mucho más grande y significativa
en la primera niñez, puesto que, el cerebro tiene capacidad de plasticidad y,
mientras se va moldeando, adquiere una característica de especialista basado en la
vivencia que se les ofrece.

¿Cuál es la función del cerebro?

Podríamos decir que la función del cerebro, como parte del Sistema Nervioso
Central (SNC), es la de regular la mayoría de funciones del cuerpo y la mente. Esto
incluye desde funciones vitales como respirar o el ritmo cardíaco, pasando por
funciones más básicas como el dormir, tener hambre o el instinto sexual, hasta las
funciones superiores como pensar, recordar o hablar.

En las partes del cerebro se analiza cómo las funciones vitales más básicas están
medidas por las estructuras cerebrales más antiguas, es decir, aquellas situadas en
el rombencéfalo (bulbo raquídeo, protuberancia, cerebelo) y el mesencéfalo. En
cambio las funciones cerebrales superiores como el razonamiento la memoria, la
atención están controladas por los hemisferios y lóbulos cerebrales que forman
parte del córtex. Una correcta estimulación puede ayudar a mejorar el estado de las
diferentes capacidades cognitivas (Finisguerra et al., 2019).

¿Qué son las funciones cognitivas?

Las funciones cognitivas son los procesos mentales que nos permiten recibir,
seleccionar, almacenar, transformar, elaborar y recuperar la información del
ambiente. Esto nos permite entender y relacionarnos con el mundo que nos rodea.

En el curso de un solo día, utilizamos nuestras funciones cerebrales continuamente.


¿Te apetece prepararte un buen desayuno? ¿Quieres leer un libro? ¿Conduces?
¿Tienes una charla estimulante con tus amigos?

¿Para qué utilizamos las funciones cerebrales?

En el curso de un solo día, utilizamos nuestras funciones cerebrales continuamente,


se realizan miles de tareas físicas que requieren millones de complejos cálculos
mentales de las diferentes partes del cerebro. Aquí te mostramos algunos ejemplos
de cómo en tu vida diaria combinas de muchas formas diferentes tus habilidades
cognitivas y funciones cerebrales:

A. ¿Preparar una comida es un buen ejercicio para el cerebro? Cuando estás


cocinando, tienes que atender a varias ollas y cazuelas, mientras piensas en los
invitados y recuerdas la receta.

B. ¿Para dirigir con éxito una reunión qué funciones cerebrales deben activarse
en el cerebro? Dirigir correctamente una reunión del trabajo, o una reunión familiar
es una tarea muy compleja, requiere que tu cerebro active determinadas redes de
conexiones neuronales y funciones cerebrales relacionadas con la atención,
concentración, capacidad de escuchar activamente, rapidez de respuesta, etc...

C. ¿Volar una cometa? La mayoría de la gente asume que la relajación es algo


natural, pero no podrías relajarte sin algunas capacidades cognitivas fundamentales.

La teoría del Cerebro Triuno

La teoría del cerebro triuno o teoría de los tres cerebros de Mac Lean surgió con el
objetivo de agrupar diferentes zonas neuronales según su función y en el orden de
aparición evolutiva (de los sistemas más primarios hasta aquellas estructuras más
avanzadas y propias de los seres humanos). Además, según Sperry y MacLean,
estas estructuras están diferenciadas física y químicamente.
En esencia, la teoría de los tres cerebros plantea una novedosa manera de
reagrupar nuestro cerebro. Estos tres bloques o secciones son conocidas como el
cerebro reptiliano, el cerebro límbico o emocional (coincidiendo con el sistema
límbico) y el cerebro racional.

Dichas secciones están conectadas entre ellas pero a su vez funcionan de manera
independiente. Por lo que se envían información constantemente a pesar de estar
centradas cada una en una función concreta.

El cerebro reptiliano

También conocido como el cerebro instintivo o cerebro básico, este es el cerebro


más primitivo de todos según la teoría de MacLean.

El cerebro reptiliano es considerado como la estructura ancestral que regula


nuestras funciones vitales y las conductas más instintivas relacionadas con la
supervivencia del individuo (comer, beber, dormir) y de la especie (impulsos y
relaciones sexuales). En definitiva, según la psicología, la función del cerebro
reptiliano es actuar rápido y de manera instintiva para asegurar nuestra
supervivencia.

Anatomía del cerebro reptiliano

Encontramos el cerebro reptiliano en la zona baja del encéfalo: el tronco cerebral y


el prosencéfalo (. El cerebro reptiliano según la psicología es aquella zona en la que
se controlan los niveles de energía de nuestro cuerpo y se busca el equilibro,
también conocido como homeostasis.

Neocórtex (cerebro)

El neocórtex, neocorteza o isocórtex es la


estructura que en los seres humanos
conforma la mayor parte de la corteza
cerebral, concretamente el 90% de ella. Se
trata de la parte del cerebro de aparición más reciente a nivel filogenético. Está
conformada principalmente por materia gris, es decir, por somas (los "cuerpos" de
las neuronas, donde se encuentra el núcleo celular) y dendritas de las neuronas que
forman parte del encéfalo.

La región cerebral encargada del razonamiento y del pensamiento abstracto.

Estructura y funciones

Desde que apareció la vida en la Tierra, han ido apareciendo, evolucionando y


muriendo una gran diversidad de estructuras y seres.

En la mayor parte de este reino es posible encontrar uno de los órganos que hace
posible nuestra supervivencia y el control de nuestro organismo y conducta: el
cerebro. Así pues, el neocórtex hace posible que haya multitud de neuronas
distribuidas a lo largo de varias capas de cerebro replegadas sobre sí mismas, y
esto, a su vez, tiene grandes ventajas para nuestro rendimiento mental.

Por otro lado, el neocórtex no es una estructura uniforme, sino que se encuentra
dividido en los dos hemisferios cerebrales.

Funciones principales

Teniendo en cuenta que conforma el 90% de la corteza cerebral, es lógico pensar


que esta parte del encéfalo tiene una gran importancia en el funcionamiento habitual
del ser humano.

El neocórtex o neocorteza se considera el área cerebral responsable de nuestra


capacidad de razonamiento, permitiendo el pensamiento lógico y la consciencia. Se
trata del área del cerebro que permite todas las funciones mentales superiores y las
funciones ejecutivas (especialmente localizadas en el lóbulo frontal). Se considera
que el Yo y la autoconciencia se deben al funcionamiento de esta estructura.

Razonamiento, reflexión, toma de decisiones...

Asimismo el neocórtex sirve como área de asociación e integración de las diferentes


percepciones y la toma de conciencia de éstas, contribuyendo a formar una imagen
mental de la realidad más precisa. Permite el análisis profundo de la información, la
reflexión y la capacidad de toma de decisiones.
Habilidades como el cálculo y el lenguaje también dependen del neocórtex,
precisándose de la integración de distintas informaciones y su transformación en
diferentes zonas de esta estructura. Del mismo modo, la memoria a largo plazo
también depende en gran medida de la neocorteza, siendo la zona donde se “graba”
la nueva información y desde la cual se lleva a la memoria de trabajo con el fin de
poder operar con ella.

El Cerebro Límbico

La utilidad del Cerebro Límbico tiene que ver con el aprendizaje. Si una conducta
produce emociones agradables, tenderemos a repetirla o a intentar cambiar nuestro
entorno para que se produzca de nuevo, mientras que si produce dolor
recordaremos esa experiencia y evitaremos tener que experimentarla otra vez.

El elemento clave del sistema límbico era el hipocampo, que se ilustraba en forma
de caballito de mar. Se creía que recibía información previamente del mundo
exterior (mediante la vista, el olor, el oído, el tacto y el gusto) así como del medio
interno o visceral.

La integración de las sensaciones internas y externas se consideraba la base de la


experiencia emocional. Las células piramidales del hipocampo formaban el teclado
emocional.

Los seres humanos tenemos, la mente que piensa (el cerebro racional) y la mente
que siente (el cerebro emocional). En circunstancias normales estas dos facetas de
nuestra personalidad están en equilibrio y coordinadas una respecto a la otra. La
mente emocional es mucho más rápida que la mente racional, se activa con rapidez
sin detenerse a analizar las consecuencias de una acción, sigue una lógica
asociativa y un pensamiento categórico. La mente racional, en cambio, establece
relaciones entre causas y efectos, y como se apoya en evidencias objetivas, puede
reevaluar una situación concreta y cambiar una conclusión previa. Anatómicamente,
la parte del cerebro que gestiona la mente emocional es el sistema límbico.
El sistema límbico es la parte del cerebro especializada en la gestión de las
emociones, el aprendizaje y la memoria. Lo componen la amígdala cerebral, el
hipocampo, la circunvolución parahipocámpica, la circunvolución del cuerpo calloso
(o circunvolución límbica), el área subcallosa, la región del septum y el giro
paraterminal, entre otras estructuras. El concepto de «sistema límbico», sin
embargo, se basa más en relaciones funcionales que en estructuras anatómicas.

Bibliografía
Gallardp, C. P. (6 de 11 de 2018). Psicología-Online. Obtenido de https://www.psicologia-
online.com/la-teoria-del-cerebro-triuno-de-maclean-4194.html

Guerri, M. (13 de 03 de 2020). Psicoactiva. Obtenido de https://www.psicoactiva.com/blog/como-


funciona-el-cerebro/

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