Antes de iniciar, me siento en la necesidad de resaltar el hecho de que, aunque la manera de

mercadear ha variado con los años, la intención de averiguar cómo aumentar nuestras
ventas siempre ha existido. Otra cuestión distinta es el cómo conseguirlo. Eso es lo que ha
variado con los años. La forma en la que vendemos el producto de nuestra empresa, como
llegamos al cliente, que uso diario de plataformas son las que nos han llevado a adaptarnos
a nuevas herramientas, procesos de venta y confianza con el usuario.

Tal como se presenta en el video, durante los primeros años del capitalismo, las empresas
se centraban en la producción y en la fabricación. Para ellos, la clave estaba en intentar
producir cada vez más ya que así venderían más.

Sin embargo, con el paso de los años el foco se puso en la venta, en buscar que las personas
comprasen los productos. A principios de los años 70 se produce un nuevo cambio de
mentalidad y el interés se redirige a atender las necesidades del consumidor

Actualmente vivimos en una época en la que el marketing ha pasado de centrarse en la

producción a enfocarse en el cliente, pero no en grupos o targets, la tendencia marca que
gracias a las nuevas TIC & IA nos dirigimos a un marketing de la persona. Las empresas se
enfrentan con un nuevo reto el cual se basa en ofrecer experiencias 100% personalizadas.
Más allá del año 2050 el marketing pasará de basarse en los individuos a enfocarse en los
órganos buscando así la satisfacción de las sensaciones, focalizando la interface en el
cerebro humano.

En estos tiempos se procesan una serie de acontecimientos los cuales evidencian que la
evolución del marketing se ha dado debido a la rápida velocidad en el avance de la
tecnología.

Lo que claramente nos lleva a concluir que el marketing ha vuelto a superarse y hemos
entrado en lo que se conoce como big data o antiguamente investigación de mercados,
puesto que lo que sucede exactamente es la nueva aparición de grandes cantidades de datos
y diariamente se recoge información sobre la investigación que hacemos en internet lo que
nos permite conocer cuáles son nuestros gustos y en qué cosas estamos interesados. Cabe a
destacar que gracias a este nuevo recurso la publicidad que recibimos es más precisa y
agresiva ya que tiene un toque personal, gracias a los medios de comunicación de los que
disponemos hoy en día, un pequeño negocio podría ser conocido en el mundo entero en
cuestión de un solo día.

A su vez, el consumidor actual no busca productos o servicios en serie, busca experiencias,

las cuales le hagan apasionarse por el producto, la marca y la empresa. Por lo general, las
experiencias son memorables y esto es lo que hace que hablen positivamente de la marca, y
lo difundan a través de sus canales preferidos, y donde tienen voz, es decir, en las redes
sociales. Este nuevo consumidor poco tiene que ver con el que antes era, interviniendo o
entrando en juego un mayor número de canales, influencias, y creando nuevas motivaciones
y procesos de compra. Esto ha originado un nuevo consumidor: el consumidor omnicanal
hiperconectado.