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Santiago, once de noviembre de dos mil diez.

Vistos:

En estos autos rol N° 7270-2008 caratulados ?Fisco de Chile con Alvial


Salinas Luis?, sobre juicio ordinario de cobro de pesos, el demandado
dedujo recurso de casación en el fondo en contra de la sentencia de la
Corte de Apelaciones de Santiago que confirmó el fallo de primer
grado que acogió la demanda y le ordena el pago de doce millones
setenta y siete mil seiscientos ochenta y siete pesos($ 12.077.687),
más reajustes e intereses.

Se trajeron los autos en relación.

Considerando:

Primero: Que, en primer término, el recurso denuncia la infracción de


lo dispuesto en los artículos 2492 y 1567 N° 10 del Código Civil.
Explica que el fallo recurrido contraviene el texto formal de la ley y la
interpreta erróneamente, argumentando que en la especie se reúnen
todos los requisitos para que opere la prescripción de las acciones del
demandante. Ella no se había suspendido ni interrumpido, fue alegada
y transcurrió el tiempo que señala la ley.
Acusa, además, la vulneración de lo dispuesto en el artículo 2514 del
Código Civil, norma que indica que la prescripción que extingue las
acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo
durante el cual no se hayan ejercido dichas acciones, debiendo
contarse el tiempo desde que la obligación se hizo exigible.

Segundo: Que, en un segundo capítulo, el libelo reprocha la


transgresión de lo dispuesto en la Resolución Exenta N° 527 del
Ministerio de Justicia, la que estableció para todos los efectos legales y
administrativos que el demandado jamás había delinquido. Sostiene
que no procede legalmente que el demandado haya sido condenado al
pago de las indemnizaciones reclamadas por el demandante.

Expone que la sentencia recurrida vulnera lo señalado en la


Resolución Exenta al interpretarla ilegalmente, manifestando que el
indulto no se aplica al aspecto civil del fallo y sólo tiene efectos en el
ámbito penal. Esta arbitraria interpretación resulta del todo ilegal, ya
que la resolución en comento no realiza distinción alguna, sino que por
el contrario, sólo se limita a declarar que para todos los efectos legales
y administrativos el Sr. Alvial nunca delinquió.

Tercero: Que finalmente se argumenta que las infracciones


denunciadas han influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo, ya
que de haber sido acogida su alegación de prescripción y respetado el
claro tenor literal de la Resolución Exenta N° 0527, necesariamente la
sentencia recurrida habría sido distinta.

Pide, en definitiva, se invalide el fallo recurrido y se dicte acto seguido


y separadamente, pero sin nueva vista, la sentencia de reemplazo
estableciendo que se rechaza la demanda de reembolso deducida por
el Fisco de Chile.

Cuarto: Que para resolver, resulta necesario describir los siguientes


antecedentes del proceso:
1.- Con fecha 12 de Junio de 2007 el Fisco de Chile dedujo acción de
reembolso y cobro de pesos prevista en el artículo 2370 del Códi go
Civil, fundada en el pago efectuado por su parte en virtud de sentencia
condenatoria emanada del Séptimo Juzgado del Crimen de Santiago
en los autos rol 136.792-PL. En estos autos con fecha 22 de Julio de
2007 se dictó sentencia de primera instancia que condenó a Luis
Alberto Vial Saldías a cien días de reclusión menor en su grado
mínimo, con las accesorias legales y se acogió la demanda civil
interpuesta en contra del condenado Alvial Saldías y el Fisco,
ordenando el pago solidario de la cantidad de dos millones setenta y
siete mil seiscientos ochenta y siete pesos por concepto de daño
emergente y diez millones de pesos a título de daño moral, más
reajustes e intereses. Dicha decisión fue confirmada por la Corte de
Apelaciones de Santiago con fecha 5 de Enero de 1999, dictándose el
cúmplase el día 21 del mismo mes y año.

2.- Con fecha 05 de Julio de 2000 y luego de haberse liquidado el


crédito el Fisco de Chile dio cumplimiento al pago de la suma trece
millones cuatrocientos nove
nta y siete mil novecientos veinte pesos.

3.- Por resolución exenta N° 527 de 23 de Abril de 2002 el Secretario


Regional Ministerial de Justicia, Región Metropolitana, resolvió que en
atención a lo dispuesto en el Decreto Ley N° 409 de 1932 y la facultad
conferida en el artículo 9° del Decreto Ley N° 3.346 de 1980, debe
considerarse a Luis Alberto Saldías, RUN 8.460.693-6, respecto de la
causa rol N° 1396.792-0095 del 7° Juzgado del Crimen de Santiago,
como si nunca hubiere delinquido para todos los efectos legales y
administrativos.

Quinto: Que para resolver los jueces del grado señalaron que el
cómputo del plazo de prescripción de cinco años de la acción incoada
debe contarse desde la fecha en que se realizó por el deudor solidario
el pago efectivo, esto es, el día 05 de Julio de 2000, fecha en la cual
nace para el nuevo acreedor el derecho para repetir lo pagado en
contra del deudor principal.

Manifiestan que al constar en autos que el demandado fue notificado


legalmente de la demanda con fecha 31 de Julio de 2002, al momento
de dicha actuación no había transcurrido el plazo de prescripción que
indica la ley, por lo que no ha operado la prescripción alegada.

En relación con el efecto de la resolución que concede al demandado


el beneficio contemplado en el Decreto Ley N° 4 09 del año 1932,
concluyen que la decisión, además de ser posterior a la fecha en que
operó el pago con subrogación, no manifiesta en forma expresa que
tenga efectos civiles en cuanto a extinguir obligaciones. Además, el
beneficio del mencionado decreto tiene claros fines penales y no
civiles, en el sentido de permitir la integración de condenados a la
sociedad en las mismas condiciones de los miembros que la
componen, por lo que acoger la alegación de la demandada atentaría
precisamente contra la igualdad referida.
Sexto: Que entrando al análisis del recurso, el primer tema a dilucidar
dice relación con la excepción perentoria de prescripción opuesta por
el demandado. Así, se sostiene por el recurrente que se ha incurrido
en error de derecho al fijar el inicio del cómputo de la prescripción.
Esgrime que el plazo debió contabilizarse a partir de la fecha de la
dictación de la sentencia de primera instancia -22 de Julio de 1997- por
lo que al momento de notificarse la demanda ?31 de Julio de 2002-
dicho término había transcurrido.
Séptimo: Que al efecto debe recordarse que la acción ejercida en
autos corresponde a la contemplada en el artículo 2370 del Código
Civil fundada en el pago efectuado por el Fisco de la obligación
solidaria establecida por sentencia ejecutoriada en la causa criminal ya
individualizada. Dicha norma dispone, en su inciso primero, que ?el
fiador tendrá acción contra el deudor principal para el reembolso de lo
que haya pagado por él con intereses y gastos, aunque la fianza haya
sido ignorada del deudor.?
Para analizar la situación jurídica del actor ha de tenerse presente que
el artículo 1522 del Código Civil dispone que: ?El deudor solidario que
ha pagado la deuda, o la ha extinguido por alguno de los medios
equivalentes al pago, queda subrogado en la acción de acreedor con
todos sus privilegios y seguridades, pero limitada respecto de cada
uno de los codeudores a la parte o cuota que tenga este codeudor en
la deuda.
Si el negocio para el cual ha sido contraída la obligación solidaria,
concernía solamente a alguno o algunos de los deudores solidarios,
serán éstos responsables entre sí, según las partes o cuotas que les
correspondan en la deuda, y los otros codeudores serán considerados
como fiadores.?
Al tenor de la norma recién citada debe precisarse la calidad que
detenta el Fisco de Chile en relación con la deuda cuyo cobro se
persigue en estos autos, puesto que la extinción de la deuda operada
respecto del acreedor produce diversos efectos entre los deudores que
se encontraban en la necesidad jurídica de satisfacerla, esto es, debe
analizarse la contribución a la deuda.
Octavo: Que al efecto debe distinguirse s
i quien efectuó el pago es el que debe realmente solventar la
obligación o corresponde a un obligado no interesado, caso en el cual
éste no se encuentra obligado a sufrir en su patrimonio las
consecuencias del hecho dañoso.
Para dilucidar lo anterior debe atenderse a quien desarrolló la acción
ilícita, quien perpetró el cuasidelito, única persona que se encuentra
llamada a sufrir en su patrimonio los efectos de su acción, pues es el
que ha desarrollado la conducta imprudente y negligente. Al efecto
debe precisarse que en autos no se observa una conducta propia del
dueño del vehículo que determine su responsabilidad que no sea a
título de tercero civilmente responsable, como propietario del vehículo
conducido de manera imprudente y en contra de los reglamentos del
tránsito; esto atendido que no se ha establecido en los hechos ningún
elemento que permita reprochar su conducta de forma tal que deba
soportar en su patrimonio las consecuencias patrimoniales del actuar
del conductor.
Noveno: Que conforme a lo que se ha expuesto el demandante Fisco
de Chile corresponde a un obligado solidario no interesado, esto es, se
encuentra en el deber o necesidad jurídica de satisfacer la deuda pero
no de soportarla en su patrimonio, puesto que ninguna conducta
antijurídica se le ha imputado, emanando su obligación al pago del
hecho de ser propietario del vehículo con el cual se produjeron las
lesiones reprochadas en la sentencia criminal.
Décimo: Que atendida la conclusión precedente resulta aplicable en la
especie lo dispuesto en el inciso segundo del artículo 1522 del Código
Civil, debiendo ser considerado el Fisco de Chile para estos efectos
como fiador de la obligación establecida y es procedente a su respecto
la acción contemplada en el artículo 2370 del Código Civil, que ha sido
incoada en estos autos.
Undécimo: Que para determin ar el momento en que nace la acción de
reembolso incoada ?cuya prescripción se discute en autos- debe
consignarse que mientras se encuentre pendiente el pago de la
obligación, el codeudor solidario no interesado carece de cualquier
acción personal para exigir prestación alguna al interesado, ya que su
garantía no se ha hecho efectiva, de modo de que para que ésta se
origine deben concurrir tres supuestos: 1) que no se pague el crédito
por el deudor interesado o una proporción del mismo. 2) que se le
requiera el pago de la deuda; 3) que solucione, a lo menos en parte, la
obligación caucionada. Producidos estos eventos, el deudor no
interesado que pagó tendrá derecho a repetir por el total de lo pagado
y sólo en contra de los deudores interesados.
Duodécimo: Que al tenor de lo expuesto, es el pago efectuado por el
codeudor solidario el que da origen a la acción de reembolso y es por
ello que desde dicha época debe computarse el plazo de prescripción
contemplado en el artículo 2515 del Código Civil.
Décimo tercero: Que luego de lo reseñado no puede sino concluirse
que no se ha incurrido en las infracciones de ley que se denuncian en
el recurso respecto de la excepción de prescripción rechazada. Por el
contrario, se advierte que al decidir como lo hicieron los
sentenciadores han efectuado una correcta aplicación de la normativa
de prescripción atinente al caso de que se trata, puesto que como se
consignó en el motivo sexto el fallo recurrido computó el plazo a partir
de la fecha en que el demandante satisfizo la deuda originada en los
autos criminales citados.
Décimo cuarto: Que en relación al segundo capítulo, por el cual se
denuncia la transgresión de lo dispuesto en la resolución exenta N°
527 del Ministerio de Justicia, debe consignarse que el artículo 767 del
Código de Procedimiento Civil dispone que el recurso de casación
procede en contra de sentencias que se hayan pronunciado con
infracción de ley cuando ésta ha influido sustancialmente en lo
dispositivo del fallo. Por ello para que un error de derecho pueda influir
de manera sustancial en lo dispositivo del fallo, como lo exige la ley,
aquél debe c
onsistir en una equivocada aplicación, interpretación o falta de
aplicación de las normas destinadas a decidir la cuestión controvertida.
Ninguno de tales presupuestos se denuncia en la especie como
fundamento de éste capítulo del recurso, limitándose el recurrente a
invocar la transgresión de lo resuelto por la autoridad administrativa,
circunstancia que impide la revisión de lo decidido sobre dicho
particular atendida la naturaleza de derecho estricto del recurso en
análisis.

Por estas consideraciones y de conformidad, además, con lo que


disponen los artículos 764, 765, 767 y 805 del Código de
Procedimiento Civil, se declara que se rechaza el recurso de casación
en el fondo deducido por el demandado en lo principal de fojas 109 en
contra de la sentencia de dos de septiembre de dos mil ocho, escrita a
fojas 108.

Regístrese y devuélvase.

Redacción a cargo de la Ministro señora Araneda.


N° 7270-2008. Pronunciado por la Tercera Sala de esta Corte
Suprema, Integrada por los Ministros Sr. Héctor Carreño, Sr. Pedro
Pierry, Sra. Sonia Araneda, Sr. Haroldo Brito y el Abogado Integrante
Sr. Benito Mauriz. No firman, no obstante haber estado en la vista de
la causa y acuerdo del fallo el Ministro señor Carreño por estar con
permiso y la Ministro señora Araneda por esta con feriado legal.
Santiago, 11 de noviembre de 2010.

Autorizada por la Secretaria de esta Corte Sra. Rosa María Pinto


Egusquiza.

En Santiago, a once de noviembre de dos mil diez, notifiqué en


Secretaría por el Estado Diario la resolución precedente.

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