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En una primera etapa los colores son vivos y saturados. A mediados del siglo
XIII se produce una modificación profunda de la gama de colores y las
menudas figuras humanas se hacen más agitadas y libres y en el siglo XIV,
tras el descubrimiento del amarillo de plata los vitrales ganan en ligereza,
llenándose de un dorado que antes nunca tuvieron.
Pintura sobre tabla: aunque se ha dicho que la pintura gótica tiene su espacio
propio en los grandes vitrales de las Catedrales y en las miniaturas de los
libros, lo cierto es que la pintura propiamente dicha donde perduró fue en los
retablos, que son tablas pintadas o esculpidas que ornamentaban los altares
de las iglesias, y las tablas de devoción, de menor tamaño, que adornan las
iglesias y las casas particulares. La pintura sobre tabla, se impuso por toda
Europa. En el siglo XV era ya la forma pictórica predominante, suplantando
incluso a las vidrieras. Se ejecutaba al temple, que usaba como adhesivo el
huevo o la cola obtenida de los huesos de animales, hasta la última fase del
gótico, en la cual este fue cambiado por aceite, dando así lugar a la pintura al
óleo. El óleo sobre lienzo no se hizo popular hasta los siglos XV y XVI y fue el
punto de partida del arte renacentista.
Vitrales
¿Qué es un vitral?
Un vitral es una composición que está formada por pedazos de vidrio de
colores unidos con varillas de plomo y un armazón de hierro que lo sostiene. Para
realizar los detalles, como rostros, manos, claroscuros, etc. Utilizaban grisalla, que
es una mezcla de limadura de cobre y hierro con vidrio pulverizado. Este tipo de
arte se encontraba principalmente en las ventanas de capillas y catedrales.
Vitrales Góticos
Puesto que el arte gótico era de origen religioso, existían dos rasgos muy
característicos en sus expresiones artísticas: la altura, y la luz. La altura se puede
presenciar en la inmensidad de los templos y capillas, pero lo más importante, es
que para lograr el efecto de luz, cubrieron las ventanas de dichas capillas con
vitrales, expresando altura, luz y devoción religiosa en una sola composición.
Los vitrales cumplen en el período gótico un rol similar al de la pintura mural
en el románico. Aunque la pintura mural todavía existe en el arte gótico, nunca
presenta la misma importancia que los vitrales, debido a su predominancia de
color y dibujos iconográficos.
Los vitrales representaban escenas bíblicas, siendo fáciles de entender
para la población analfabeta. Expresaban principalmente escenas del evangelio,
del antiguo testamento, de la Virgen María y de varios santos.
Ejemplos