Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
1. Generalidades
La inspección de las reses destinadas al consumo humano comprende dos fases: inspección
in-vivo, la que consiste en realizar un examen cuando los animales a beneficiarse llegan al
recinto del matadero, la segunda fase, comprende todas las actividades ejecutada a nivel
de canales, vísceras y productos cárnicos obtenidos del sacrificio de los animales, o sea la
inspección post mortem.
Este primer examen de los animales destinados al sacrifico es muy importante desde el
punto de vista higiénico, ya que sin él no sería posible realizar una inspección racional de
las canales, porque muy bien sabemos que existen muchas enfermedades cuyo diagnóstico
postmorten es sumamente difícil de precisar, por cuanto las lesiones anatomopatológicas
son poco manifiestas, tal es el caso de la rabia, el tétanos, septicémia, estados febriles,
consideradas peligrosas para el hombre. Además, la inspección in-vivo impide que animales
fatigados por el transporte o por largas caminatas sean sacrificados sin un descanso
prudencial para que se recuperen y recobren su normalidad. Si los animales son faenados
en este estado de fatiga, las carnes pierden calidad y su conservación es más precaria y por
lo tanto prohibidas para el consumo.
Los animales que han de sacrificarse estarán concentrados en los corrales o alojamientos
de descanso, antes de la hora límite de admisión, el veterinario jefe debe instruir
adecuadamente al personal para que no sucedan admisiones fuera de la hora señalada (con
excepción de los sacrificios de urgencia), la anarquía en este sentido va en detrimento del
buen nombre de la institución.
1. Que la salud pública es adecuadamente protegida frente a los riesgos tanto biológicos
(bacterias, virus, parásitos) como químicos, que lleva consigo el consumo de carne no apta
para tal fin.
4. Que los matarifes y los trabajadores del matadero y de las industrias cárnicas sean
protegidos frente a las enfermedades zoonóticas.
5. Que las industrias cárnicas y el público consumidor estén seguros de que no reciben carne
de calidad inferior y de que se aprovecha adecuadamente este valioso alimento.
7. Que el manejo adecuado de los animales antes y después del sacrificio reduce los
accidentes, lesiones y pérdidas tanto en los animales vivos como en los productos obtenidos
en su carnización, asegurándose que aquellos reciben un trato humanitario.
4. Alteraciones de la piel: al tomar la piel con los dedos se forma un pliegue que el soltarlo
recupera nuevamente su posición, debe demostrar elasticidad en un animal sano, fijará
además su atención en heridas, sarna, tiña, tumores y otras alteraciones propias de la piel.
5. Aparato digestivo: debe prestarse atención a cualquier signo que indique dolencia como
los siguientes: si los labios se muestran secos o calientes, es signo de fiebre, si están
ampollados y hay saliveo, puede tratarse de fiebre añosa o estomatitis. Las alteraciones
intestinales graves, se caracterizan por los siguiente: el animal afectado no rumia, hay
timpanismo por lo consiguiente, el excremento se presenta blando, mal oliente y
decolorado, pudiendo presentar diarrea sanguinolenta, residuos de mucosa intestinal o
piógenas.
7. Aparato genital: los órganos genitales deben juzgarse clínicamente y con mucha
detención, fijando se atención en: flujo vaginal con tumefacción y congestión de la mucosa
en los casos de metritis, vesículas localizadas en las partes externas de los genitales en el
exantema coital, tumefacción de la vulva con escurrimiento sanguinolento en abortos o
parto distócico.
9. Examen de la glándula mamaría: se debe tener presente que las mamas son vulnerables
presentándose: vesículas en los pezones en la fiebre añosa, tumefacción y enduración de la
glándula con infarto del ganglio supramamario, en los casos de TBC; inflamación de la
glándula, acompañado de síntomas generales en la mamitis.
El examen in-vivo de los temeros se hace muy sencillo, ya que, a las generalidades de los
bovinos adultos, el veterinario fijará su atención en la inspección del ombligo,
articulaciones, cojeras o claudicaciones.
En caso por ejemplo que se presente arqueado, con deposiciones mal olientes, negruzcos,
con estrías sanguinolentas y acompañados de síntomas generales puede sospechar de una
peritonitis o de una enteritis, frente a cuyos casos sabrá dar el destino correspondiente a
estos animales.
Al igual que para los bovinos pondrán mucha atención al estado nutricional, así como
observancia de todos los sistemas revisados a fin de garantizar la condición sanitaria de esta
especie. Por regla general tendrá presenta los siguientes signos: tumoraciones de los
ganglios linfáticos o faríngeos, alteraciones que se observan en los casos de TBC y de
carbunco bacteriano, tumefacción del escroto en castraciones contaminadas, articulaciones
aumentadas de volumen en la TBC, y peste porcina crónica: manchas rojas localizadas en
los bragas, lomo orejas, acompañadas de síntomas generales en los casos de peste porcina,
mal rojo, etc. cojeras, pezuñas hemorrágicas en la fiebre añosa, fiebre temperatura superior
a los 39.9°C no se los puede autorizar al sacrificio, pues son carnes tóxicas para el
consumidor.
Son animales de abasto, que lo mismo que los anteriores, requieren del concurso del
veterinario quien realizará en ellos un examen in-vivo para destinarlas al sacrificio. De un
modo muy general, la conducta que se sigue es muy similar, entre las principales
alteraciones tenemos; tumefacción de la región correspondiente a las linfoglándulas, en la
oveja puede tratarse de linfoadenitis caseosa, pústulas color pardo negruscas en la cara
acompañada de lagrimeo en los casos de viruela, tumefacción caliente y mucosas
hemorrágicas, puede tratarse de carbunco hemático, zonas depiladas y presencia de
costras, puede ser presencia de sama, etc.
La inspección en vivo aporta una de las mejores enseñanzas para el veterinario clínico, dado
que no existe otro lugar más idóneo que al matadero, para comprobar que si llegaran al
matadero reses sospechosas de padecer alguna enfermedad infecto-contagiosa, el
veterinario titular procederá de acuerdo con las disposiciones legales sobre sanidad animal,
recomendándose a la vez que los mataderos cuenten con un Reglamento General de
Mataderos, para que en los casos de disconformidad en el dictamen facultativo de parte
del propietario de la res, tengamos los veterinarios un ampare legal sin ningún riesgo de
nuestra integridad.
Una vez sacrificada la res, empieza el verdadero examen de las carnes, el veterinario debe
desarrollar su técnica peculiar, la que será metódica y ordenada para conseguir la
información necesaria para el buen juzgamiento de la salubridad de las carnes.
Antes de tratar el acápite específico, daremos algunas reglas generales que debe cumplir el
Médico Veterinario Inspector en el cumplimiento de su noble misión:
Notará el estudiante que haremos incapié en el examen de carne o sea el post morten
quizás por la infraestructura que tenemos en el medio, debiendo ser nuestro juzgamiento
minucioso, recayendo principalmente sobre las vísceras por ser estos órganos los que
manifiestan de un modo más intenso los procesos patológicos, en cambio el parénquima
muscular reacciona muy débilmente. Se practica el examen de los órganos en el momento
mismo que es extraído de los canales, o lo antes posible de realizada esta operación,
revisando en líneas generales los siguientes aspectos:
Ganglios linfáticos mandibulares. - están situados a cada lado de la base mandibular, entre
el músculo esternocefálico y la parte ventral de la glándula mandibular. Mide de 3 a 4 cm.
de longitud. Para ubicarlo se practicará una incisión por el lado medial del ángulo del hueso
mandibular.
Ganglios linfáticos parotídeos. - Se encuentran en la parte posterior del músculo masetero
y está en parte cubierto por la extremidad dorsal de la glándula salival parotídea, mide de
4 a 5 cm. de longitud. Para incidido se hará un corte en la mitad de la línea que une al ángulo
externo del ojo con el conducto auditivo externo.
Ganglios linfáticos retro faríngeos.- Están situados por dentro del asta mayor de hioides,
entre la faringe y los músculos rectos ventrales de la cabeza; mide de 4 a 5 cm. para
examinar estos ganglios, la cabeza de la res se apoyará por la región frontal en la mesa, el
inspector se colocará frente al hueso occipital y practicará una incisión longitudinal en la
región media de la faringe, una vez dentro de la cavidad faríngea se efectuará una segunda
incisión, entre las astas mayores del hueso hioides.
Ganglios' linfáticos atlantales.- No se observa en la rutina, están situados debajo del ala del
atlas sobre el tendón del branquicefálico, miden de 3 a 4 cm. Es necesario tener presente
que para separar la cabeza de la canal los ganglios atlantales quedan sobre la porción
cervical. Los músculos maseteros deberán ser incididos en forma longitudinal y paralelo al
hueso mandibular, el corte debe ser preciso, a través de este observar larvas del cysticercus.
Para examinar los pulmones, se les colgará de un gancho que pase por los anillos de la
tráquea o simplemente serán colocados sobre la superficie de una mesa apoyados sobre su
cara diafragmática.
El examen estará dirigido a observar la superficie externa de los pulmones: color brillo,
inflamaciones, adherencias, etc. Después de esta visura externa se procederá a palpar sus
respectivos lóbulos, comprimiendo con los dedos el parénquima pulmonar. Por medio de
la palpación se constata la elasticidad del órgano, pudiendo a la vez constatar en su espesor
lesiones compactas nodulares, inflamaciones y otras que podrán ser precedidas por cortes
tan profundos y numerosos como sea", necesarios. Téngase en cuenta que el pulmón al ser
examinado no muestra lesión alguna no debe ser incidido caprichosamente sino en caso de
sospechas, pues los cortes indebidos desmeritan su aspecto y por consiguiente su valor
comercial, de todas maneras, el inspector tendrá en cuenta el poco valor de esta víscera.
Los resultados de la palpación obtenidos en el primer examen y continuado con la
exploración de los ganglios linfáticos, nos indicarán la necesidad de incidir los pulmones. El
juzgamiento incluirá el corte sobre el borde dorsal de la tráquea inspeccionando en esta la
mucosa, sus características y exudados.
Los ganglios mediastínicos están situados en la línea central o mediastínica, son en número
variado, recibiendo las siguientes denominaciones: