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LOS PROCESOS DE EVALUACIÓN HOY

Uno de los temas que han resultado más complejos de entender para los
profesores, padres de familia y estudiantes ha sido la evaluación. En
especial porque se trata de un proceso distinto al del pasado en donde el
referente eran los conocimientos adquiridos. Ahora lo que se busca
evaluar son las competencias y no de la forma numérica tradicional,
sino en forma literal, más cualitativa, observando cómo cambian los
comportamientos y actitudes de los estudiantes, cómo aprovecha los
conocimientos que va aprendiendo en aplicaciones en situaciones de
la vida cotidiana, cómo va consolidando un aprender a aprender y
cómo consolidan un conjunto de aprendizajes que podrán utilizar un
tiempo más tarde, cuando sea necesario.

Estrategias clave para sostener el nuevo enfoque de la evaluación:

1. Dialogar con los estudiantes para clarificar, compartir y favorecer


que comprendan los objetivos de aprendizaje y los criterios de
evaluación.

2. Diseñar debates, preguntas y tareas en las clases que provean


evidencias de aprendizaje sin necesidad de realizar instancias únicas
de evaluación, aquellas que conocemos como “pruebas”.

3. Ofrecer retroalimentación a estudiantes que les ayuden a mejorar


sus aprendizajes

4. Promover que los estudiantes dialoguen con sus pares y


colaboren mutuamente en la resolución de sus tareas. Esto puede
entenderse como procesos cooperativos donde un estudiante le
enseña a otro lo que sabe “hacer bien”.

5. Promover que los estudiantes sean dueños de sus aprendizajes,


que definan sus propios objetivos a partir de conocer las metas
previstas de aprendizaje, que establezcan planes, monitoreen sus
procesos, recopilen y orienten sus acciones para lograr sus
aprendizajes.
6. La construcción de un vínculo de confianza entre profesores y
estudiantes, una fluida comunicación y un intercambio de ideas,
preguntas y reflexiones. Los estudiantes tienen que construir su
propio significado de los mensajes que reciben, hacer algo con
ellos, analizarlos, formularse preguntas, discutir con otros y conectarlo
con sus conocimientos previos.

7. La evaluación para el aprendizaje es formativa no sólo para las y los


estudiantes, sino también para las y los profesores: al mirar las
producciones y desempeños de sus estudiantes pueden reorientar su
enseñanza.

8. El feedback, es un elemento humano clave para sostener ese vínculo,


a través de la recogida de evidencias y la retroalimentación,
desarrollando la competencia de Aprender a Aprender en el alumnado.
Desde un fuerte reconocimiento al sentido y la función pedagógica de
la evaluación como proceso

9. La evaluación con sencillez y humanidad, debe aterrizar en la


realidad del alumnado y las familias, del docente y los centros
educativos, y del contexto actual. En este marco es en el cual la
evaluación habrá de ser más humana, reforzando su vínculo con el
alumnado para sostener y acompañar “el ahora” y preparar el
presente-futuro.

10. Se ha de cuestionar lo que es aprender, “aprender no es el


curso, la materia (…) aprender es competencia”. Un cambio de foco
que favorece la creación de nuevas oportunidades y ritmos para todos
los alumnos, que utiliza herramientas como los portafolios de
aprendizaje para acompañar su desarrollo integral y competencial.

11. Una escuela para todos, en la que los instrumentos de la


evaluación van más allá de un examen, son cualitativos y cuantitativos,
fomentan proyectos, mesas, investigaciones, abren las posibilidades a
la opción grupal, sin ofrecer únicamente un único camino cerrado y
lineal, y el profesor es un acompañante.

En esta dimensión de clarificar finalidades y funciones, se establecieron


convergencias tales como que:
 Entre las finalidades de la evaluación está la de ayudar al alumno a
desplegar su propia trayectoria como aprendiz, de la
autorregulación del aprendizaje y la autonomía.
 Evaluamos para incluir no para excluir al alumno del sistema.
 La evaluación tiene la función de mostrar dónde estamos, cómo
mejorar, favorecer la inserción social, la participación, el compartir y
celebrar. Con otras palabras, permite identificar itinerarios formativos
en la dirección de un aprendizaje comprendido y vivido por un alumno
activo en el proceso.
 Evaluar significa aprender, la evaluación es una herramienta
pedagógica, y el docente un arquitecto de la experiencia de
aprendizaje.

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