Está en la página 1de 7

0

RESPONSABILIDAD INTERNACIONAL DEL ESTADO POR ACTOS ILÍCITOS.


CONCEPTO. CLASIFICACIÓN.

La responsabilidad internacional es una institución que impone al Estado que ha


realizado un acto ilícito, en perjuicio de otro, la obligación de reparar el daño causado.

Implica dos niveles de relación entre dos Estados: 1. La existencia de una obligación
contenida en una norma internacional (norma primaria) que es violada por un Estado,
por acción u omisión; y, ese hecho ilícito hace nacer en el Estado perjudicado el
derecho a reclamar la reparación del Estado infractor (norma secundaria).

La responsabilidad en el derecho internacional va más allá de las consecuencias


dañinas del ilícito internacional. Se configura con la comisión misma de la ilicitud.

CLÁUSULA CALVO → Es la estipulación que se coloca en contratos celebrados entre

Estados y particulares por la cual las deudas y controversias sean resueltas por los
tribunales competentes del Estado, de conformidad con su derecho y no podrán dar
lugar a ninguna intervención diplomática o reclamación internacional. Es decir, el
extranjero renuncia a la facultad de presentar a su gobierno un reclamo válido que
permita el ejercicio de la protección diplomática, pues se encuentra obligado a
presentarlo ante el Estado con el cual contrato.

El Estado lesionado. El concepto general es que es lesionado cualquier Estado


afectado en sus derechos por un hecho internacionalmente ilícito de otro Estado. Es
de notar que si el hecho ilícito constituye un crimen internacional, son lesionados todos
los demás Estados de la comunidad internacional.

1
Características del proyecto:
1. No tiene por objeto el contenido de las normas primarias de la responsabilidad.
2. Tampoco se pronuncia respecto del tipo de fuente de la obligación.
3. Constituye un marco que permite determinar si se han infringido las obligaciones de
un Estado y qué consecuencias tiene esa infracción para otros Estados.
4. Las consecuencias que se regulan son las que entraña un hecho
internacionalmente ilícito como tal.
5. Solo trata la responsabilidad de los Estados y no de otros sujetos.
6. Trata toda la esfera de la responsabilidad internacional de los Estados.

El texto consta de cuatro partes:


1. El hecho internacionalmente ilícito de un Estado.
2. El contenido de la responsabilidad internacional de un Estado.
3. El modo de hacer efectiva la responsabilidad internacional de un Estado.
4. Las disposiciones generales aplicables a todos los artículos.

Se fijan los criterios de atribución en el Cap. III, que consta de ocho artículos:
establece la norma básica de la responsabilidad directa que atribuye al Estado el
comportamiento de sus órganos, los que pueden corresponder al Poder Ejecutivo, al
Legislativo, por aplicación irregular de leyes fiscales a extranjeros, de requisa o
expropiación de bienes sin indemnización, o al Judicial por denegación de justicia a un
extranjero.

LA RESPONSABILIDAD DE UN ESTADO EN RELACIÓN CON EL HECHO DE


OTRO ESTADO.

Se da en los siguientes supuestos:


1. Por la ayuda o asistencia a otro Estado en la comisión de un hecho
internacionalmente ilícito.
2. Por dirigir y controlar a otro Estado en ese tipo de acto.
3. Por coaccionar a otro Estado par que cometa un ilícito internacional.

2
1. El consentimiento → Un Estado no puede reclamar contra el hecho de otro para el
cual prestó previamente su consentimiento: dicho consentimiento equivale a un
acuerdo entre las partes que ha quitado fuerza a la obligación en el caso particular.
Por supuesto que no vale contra las obligaciones de jus cogens.

2. Las contramedidas → Se refieren a las represalias, acciones que serían ilícitas si


no fuera por el hecho de que el Estado contra el cual van dirigidas ha cometido
anteriormente, contra el que toma la contramedida, un hecho también ilícito.

3. El caso fortuito y la fuerza mayor → El común denominador es que los Estados


podían quedar, por circunstancias ajenas a su voluntad en la imposibilidad de seguir la
conducta prescripta por la obligación, ya fuere materialmente, porque una fuerza
exterior se los impedía, o bien porque no pudieron percatarse de que el
comportamiento seguido configuraba el de la prohibición legal. Es importante que no
haya sido el propio Estado quien contribuyera intencionalmente o por negligencia a
producir la situación de imposibilidad material que le impide cumplir la obligación o
percatarse de la ilicitud del comportamiento observado.

4. Peligro extremo → Se refiere a la situación de necesidad en que se encuentra, no


el Estado, sino el órgano del Estado que está actuando, ya que la alternativa que se le
presenta es la de violar una obligación internacional del Estado que representa o en su
defecto poner en peligro su propia vida o la de las personas confiadas a su cuidado.
Hay una imposibilidad moral de obrar en cumplimiento del deber internacional. Se trata
que la conducta del órgano no sea atribuida al Estado.

5. Estado de necesidad del Estado → Ocurre cuando un interés esencial del Estado
se pone en peligro si ese Estado intenta cumplir con una cierta obligación
internacional. Si, para proteger ese interés esencial viola la obligación, se dice que
actúa en necesidad y por ende que su conducta está desprovista de ilicitud. El peligro
que amenace ese interés esencial debe ser grave e inminente y la conducta violatoria
de la obligación el único medio para conjurarlo. El Estado que lo invoca no debe haber
dado lugar él mismo al Estado de necesidad y el interés sacrificado del otro Estado no
debe ser, a su vez, uno de sus intereses esenciales. Con lo que se advierte la
comparación entre los intereses en juego –proporcionalidad- y la protección del más
importante. No puede ir esta excusa contra el cumplimiento de una obligación

3
internacional de ius cogens ni contra una obligación de un tratado en el que se ha
estipulado explícitamente que no se puede invocar.

6. La legítima defensa → Son dos premisas básicas para su admisibilidad jurídica: su


empleo sólo en los casos en que tenga finalidades defensivas, es decir, que adopte la
forma de oposición al ataque violento de otro sujeto y su carácter de excepción a una
norma por la que se reserva a una autoridad centralizada el monopolio o el cuasi
monopolio del uso de la fuerza. El principal problema que presenta es saber si ella se
circunscribe a la reacción contra un ataque armado. Según la CDI sí sería el caso.

EL CONTENIDO DE LA RESPONSABILIDAD INTERNACIONAL DE UN ESTADO.

Se refiere a las consecuencias que debe sufrir el Estado infractor, con sujeción a los
siguientes principios:
1. No se afecta la continuidad del deber del Estado responsable de cumplir la
obligación violada.
2. El Estado responsable debe hacer cesar el hecho y ofrecer garantías adecuadas de
no repetirlo, en orden a su prevención.
3. Surge la obligación de reparar íntegramente el perjuicio causado por el hecho
internacionalmente ilícito.
4. No se puede invocar las disposiciones de su derecho interno como justificación del
incumplimiento.

El Estado responsable no puede invocar las disposiciones de su derecho interno como


justificación del incumplimiento de las obligaciones que le incumben en virtud de la
presente parte, teniendo en cuento lo dispuesto en el artículo 27 de la Convención de
Viena.

La REPARACIÓN del perjuicio → Es consecuencia de la responsabilidad y


constituye un principio general de derecho. Se establece por acuerdo de partes, o bien
por sentencia judicial o arbitral de los diferentes tribunales y árbitros internacionales.

Se ADOPTAN LAS SIGUIENTES MODALIDADES:


1. RESTITUCIÓN → restablece la situación que existía antes del hecho ilícito, siempre
que no sea imposible o desproporcionada.
2. INDEMNIZACIÓN → Corresponde cuando el daño no es reparado por la restitución.
Consiste en el pago de una suma de dinero para cubrir todo el daño, incluido el lucro

4
cesante y la satisfacción.
3. SATISFACCIÓN → Tiene lugar en la medida en que el perjuicio causado por el
ilícito ni pueda ser reparado mediante restitución e indemnización , particularmente
cuando se trata de la afectación de un perjuicio inmaterial. Consiste en el
reconocimiento de la violación de la norma primaria, una expresión de pensar, una
disculpa formal o cualquier otra modalidad.
CONTRAMEDIDAS.

Las contramedidas son algo escabrosas ya que favorecen al Estado fuerte en relación
con el débil y porque no existe un debido control de su legalidad. La historia de las
relaciones internacionales está plagada de abusos de las llamadas “represalias”. Por
adopción de contramedidas el proyecto se entiende que el Estado lesionado no
cumple con una o varias de sus obligaciones para con el Estado autor de un hecho
internacionalmente ilícito con objeto de inducirlo a cumplir sus obligaciones en relación
con las consecuencias de un hecho ilícito. Mientras el Estado requerido no dé
cumplimiento a sus obligaciones y siempre que su actitud renuente la haga necesaria,
es válido el derecho a adoptar una contramedida. La práctica internacional establece
que los fines permitidos de una contramedida son obtener la cesación del hecho ilícito
y la reparación en sentido amplio y de ninguna forma constituye una sanción contra el
Estado autor.

Las condiciones previas a la adopción de las contramedidas son:


1. negociación, medidas transitorias → El Estado lesionado debe cumplir con la
obligación de negociar, pudiendo tomar las medidas transitorias necesarias para
preservar sus derechos.
2. el arbitraje obligatorio → El Estado lesionado que tomó la contramedida debe
aceptar el procedimiento de arbitraje obligatorio que establece el proyecto. El arbitraje
versará sobre la legalidad de la contramedida adoptada por el Estado lesionado.

En cuanto a las condiciones sustantivas y prohibiciones son:


1. la proporcionalidad → Las contramedidas no deben ser desproporcionadas al
grado de gravedad del hecho internacionalmente ilícito ni a los efectos de éste sobre el
Estado lesionado. Pero no es fácil encontrar los criterios de evaluación de la
proporcionalidad. El proyecto adoptó una expresión negativo, por lo que entonces la
proporción sólo puede apreciarse de manera aproximada en relación con el grado de
la gravedad de la infracción (dos factores: importancia del interés que protege la
obligación y la gravedad de la infracción misma) y los efectos del hecho ilícito sobre el

5
Estado lesionado.
2. contramedidas prohibidas → Son las que impliquen la amenaza o el uso de la
fuerza, prohibidos por la Carta de las Naciones Unidas las medidas extremas de
coacción política o económica enderezadas a poner en peligro la integridad territorial o
la independencia política del Estado que haya cometido un hecho internacionalmente
ilícito las que impliquen cualquier comportamiento que infrinja la inviolabilidad de los
agentes, locales, archivos y documentos diplomáticos y consulares, las que vulneren
derechos humanos fundamentales las que contravengan una norma imperativa de DIP
general.

Sus características, son:


1. En estos casos no es posible diferenciar entre normas primarias y secundarias
porque solo hay normas primarias, ya que la responsabilidad surge sin violación de
una obligación.

2. La conducta que origina este tipo de responsabilidad no se atribuye al Estado, pero


se desarrolla en su territorio o bajo su control.

3. El daño pasa a ser una condición esencial en este tipo de responsabilidad, y es lo


que permite su exigibilidad. Dicho daño pasa para ser tenido en cuenta debe ser
“sensible” (o sea, considerable).

4. En cuanto a la reparación, no se aplica el criterio de la integridad, ya que se tiene en


cuenta la licitud de la conducta, y que se trata de una actividad socialmente útil.

5. El cese de la actividad no se justifica.

También podría gustarte