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REALISMO POLÍTICO

Maquiavelo es un autor que podemos situar dentro del realismo político, un modelo que postula el
principio de que los estados se conducen por el principio de interés nacional. Lleva cabo un análisis
de la dinámica política no subyugado a principios de carácter moral o principios altruistas. El estado
es el poder político y las relaciones de poder juega un papel decisivo en la defensa de sus intereses.
Ocasionalmente, pueden provocarse y tensiones entre la moral y la política; en estos casos, se da
prioridad al éxito político de la decisión tomada.

ES IMPORTANTE SABER, que si un gobernante pretende hacer primar el interés y la defensa del
estado, pueden darse circunstancias en las que pudiera plantearse la conveniencia de unas normas
jurídicas, morales y económicas que en condiciones normales resultan de utilidad. En estos casos,
Maquiavelo tiende a justificar la búsqueda del éxito político y el empleo de los métodos más
realistas y eficaces para el logro y el mantenimiento del poder, aun mediante el empleo de
prácticas que pudieran ser consideradas como contrarias a la ética, como son el engaño o la
simulación.

Es claro que la visión realista tiene una concepción HOBBESIANA de las relaciones internacionales.
Sin embargo, Hobbes por su parte, sostiene en su estado de naturaleza un caos que antecede a la
sociedad políticamente organizada y muestra a un hombre egoísta y pesimista que necesita de la
coacción de la ley para su organización y regulación. Ese ente regulador llamado Estado, tampoco
garantiza la armonía pues está regulado por la fuerza, la violencia y el egoísmo. Esta etapa de las
cosas es asimilable al contexto internacional en donde prevalece el desorden y la anarquía. (Ortiz
2000, pp. 100 - 111). Hobbes plantea la imposibilidad de una justicia global sin que exista también un
gobierno global- (Sen 2009, p. 57).

TEORIA DE SISTEMAS
Se afirma en general que la tecnología y la sociedad moderna se han vuelto tan complejas que los
caminos y medios tradicionales ya no son suficientes (5), imponiéndose la necesidad de actitudes
holísticas, o de sistemas, y generalista, o interdisciplinaria.

También se comparte la idea de que la Teoría General de Sistemas reúne los conceptos más
elementales y abstractos del procedimiento que por su generalidad resultan comunes a todo ámbito
de estudio.

El derecho fue considerado a la luz del este modelo y en los años sesenta se lo concibió como un
programa de inputs, en el sentido de que a determinadas informaciones se respondía con
determinadas decisiones preestructuradas, y ello aunque el número y diversidad de las demandas
(inputs) sea muy grande (demandas civiles, ejecuciones, denuncias, querellas, etc.). Concretamente,
el input preestablecido tenía una respuesta positiva y el que no lo estaba, negativa.

Ernesto Grün refiere que “Creemos que hoy en día con el avance de los diseños de sistemas por
computadoras, se podría por lo menos comenzar a bosquejar esta multifacética figura, generando un
modelo estructural-funcional, estático y dinámico a la vez, con indudable provecho tanto para la
enseñanza como para la experimentación y simulación de procesos jurídicos”.
Esta afirmación, revela en el autor, la adopción, dentro del enfoque sistémico, de una tendencia hacia
los modelos mecanicistas y organísmicos, en el caso bajo el modelo del “autómata”. Aquí vale tener
presente que el enunciado general de la teoría de los autómatas es que los aconteceres que pueden
definirse con un número finito de “palabras” son realizables por un autómata (máquina de Turing). En
consecuencia, el autómata puede por definición, realizar una serie siempre finita de acontecimientos
(por larga que sea), pero no una infinita, con lo cual, el enunciado de Grün es pasible de la crítica
formulada en el párrafo anterior, pues no tiene en cuenta lo incalculable del derecho.

EL ESTRUCTURALISMO
Evidentemente estructura ha entrado de lleno en nuestro vocabulario y particularmente en aquel
relacionado con una problemática social así como se ha introducido recientemente en las ciencias
del hombre.

Estructura es orden, ordenamiento según ciertas reglas, pero es también, para decirlo con A. Jacob
la “dependencia entre los hechos de un sistema” o como lo expresa Frosini para la ciencia jurídica, si
el derecho es el conjunto de formas en que se objetiva la acción y forma la entendemos no como lo
opuesto a “contenido” o “materia, sino como forma interna de la acción misma, estructura es esa
forma interna de la acción. Este último, al menos, es el sentido que deberíamos darle a “estructura”
en el campo de la ciencia jurídica como veremos al finalizar este desarrollo.

La estructura entonces es esa armazón interna cuyo equilibrio, además, en un momento dado
depende de la permanencia de sus elementos, íntimamente trabados entre si e interdependientes y
que, en caso de desaparecer o ser eliminados implican un cambio total de la estructura misma.

I. EL DERECHO COMO CIENCIA DE ESTRUCTURAS

El derecho es una ciencia de estructuras; no quiero con ello decir que sólo el Derecho lo sea. La
ciencia en general, funciona a base de estructuras. Sólo que esto último no podríamos descubrirlo
sino cuando empezamos a usar el término con un contenido particular.

Lo que afirmo es que el Derecho es un fenómeno necesariamente de estructuras. Lo será la norma,


individualmente considerada; lo son las instituciones jurídica, particularmente consideradas, y dentro
de un Código; lo son los códigos; los sistemas de Derecho Público y de Derecho Privado; lo es el
DERECHO todo.

El jurista, sin meditar sobre ello, ha estado haciendo ciencia fundamentalmente de estructuras. Es un
sentido metodológico, ha sido siempre un estructuralista. La única diferencia es que hoy en día ha
ampliado el campo de la estructura, esencialmente cambiándola, al comprender que hay todo un
proceso dialectico, de interacción, entre comunidad y norma, en el que se debe basar
fundamentalmente la investigación científica.

“De modo que .dice FROSINI- parafraseando el título de una obra del filósofo ingles Bernard
Bosanquet, que definía la lógica como una “MORFOLOGIA DEL PENSAMIENTO “, se puede decir
que la mas iluminada investigación contemporánea el derecho hoy se manifiesta como una
“MORFOLOGIA DE LA ACCIÓN”, como un desarrollo de estructuras, que constituyen “la lógica de
la acción humana en la vida social”.

No debemos olvidar que el Derecho es un sistema dentro del que las partes no adquieren
significación ni son definibles sino “en función de todo coherente”. Parafraseando a FROSONI, un
ordenamiento jurídico tota es una estructura, es decir “un organismo viviente”, apercibido de
caracteres de autorregulación y de continuidad dinámica (recordemos que el Derecho tiene sus
propios sistemas de cambio, FORMAL O EMPÍRICO).

EL POST ESTRUCTURALISMO

• POSESTRUCTURALISMO Y DERECHO
Más en concreto, se pretende argumentar la aptitud del aparato filosófico de Michel Foucault
para tal fin, sugiriendo algunas vías de proyección de su «análisis estratégico del poder»
sobre las formas jurídicas. Sin duda, la etiqueta «posestructuralismo» requiere no pocas
aclaraciones en cuanto a su significado y posibilidades de atribución. No obstante
adoptaremos, con Harcourt (2007), una definición de mínimos para identificar, con tal
expresión, aquel estilo de filosofía crítica afanado en explorar los momentos de deslizamiento
en nuestros sistemas de significación, las grietas que atraviesan nuestro conocimiento,
nuestras formas de producir «verdad». Hurgando en esas fisuras y deslizamientos, el
posestructuralismo propone una actitud de extrañamiento hacia nuestras prácticas rutinarias –
tanto en entornos expertos como mundanos de acción–, revelando su no necesidad, su
contingencia, sus vías de conformación, de consolidación y, por lo tanto, también de su
posible superación. El giro posestructuralista –como puede advertirse en Foucault, Deleuze,
Derrida y Butler, entre otros– cuestiona los parámetros de verdad que actúan como sustrato
del pensamiento. En concreto, como ha subrayado Butler (2007), el pensamiento
posestructuralista es ante todo un asalto a los anhelos de totalidad y universalidad que
prefiguran el pensamiento y enmascaran la diversidad irreductible de la realidad. Apoyándose
en el extrañamiento que el estructuralismo operó sobre la vinculación entre significantes y
significados, el posestructuralismo avanza insistiendo en el momento diferencial de las
significaciones particulares, la contingencia radical de sus prácticas de significación.
La mirada posestructuralista sobre el Derecho descubre principalmente un problema
epistemológico, el de la identificación de los modos de saber que permiten la operatividad
concreta y múltiple de las formas jurídicas. Por ello el Derecho se ve problematizado en primer
término a través de la dicotomía generalidad/particularidad.

TEORÍA DE LOS JUEGOS

La Teoría de los Juegos es un novedoso diseño, proveniente de las matemáticas y extendido luego a
la economía y el Derecho, que pretende analizar y explicar el comportamiento de los individuos y sus
interrelaciones. De esta manera, la Teoría de los Juegos sirve como un sistema de pruebas para
explicar y entender un determinado modelo en el cual interactúan personas frente a una determinada
situación ante la cual se agrupan y establecen relaciones de poder. En el presente artículo, el doctor
Sierralta busca fundamentar la aplicación de la Teoría de los Juegos al Derecho, por lo que realiza
una breve pero atinada descripción de sus principios básicos y propone un caso práctico para su
mejor entendimiento.
SU APLICACIÓN EN EL DERECHO

La aplicación del modelo al campo del Derecho es hasta la fecha escasa, cuando no inexistente.
Sólo algunos autores la han expuesto de alguna manera tangencial como J ohn Rawls, A Theory
ofjusitice, que en 1971 desarrolló los criterios económicos y jurídicos para la distribución de la
riqueza; o R.L. Birminghman, que en la revista Buffalo Law Review, presentó el artículo «Legal and
moral duty in game theory: common law contract and chinese analogies» en 1968; o Marsanyi que
entre 1975 y 1979 publicó diferentes artículos sobre justicia, moral y teoría de los juegos como «Can
the maxmin principie serve as a basis for mora lit y? A Critique of John Rawl' s theory».

En América Latina un importante libro precursor es el de Gregario Robles, editado en México D.F. y
que parte de principios estrictamente jurídicos relacionados con la teoría de los juegos.

El juego es el resultado de un acuerdo al que llegan determinados hombres en tomo a cómo habrían
de comportarse frente a un objetivo o un conflicto, respetando ciertas reglas. Este acuerdo es
evidentemente una convención. Una convención es un acuerdo de voluntades entre dos o más
personas en virtud de la cual deciden establecer determinadas obligaciones y derechos para
acometer una tarea común. Es indiferente el conjunto de condiciones del más diverso género que
subyacen o puedan subyacer a la convención. Una convención realizada, por ejemplo, a causa del
miedo no por eso deja de serlo. El juego es sustancialmente una convención, ya que las partes
intervienen en él una vez que se han puesto de acuerdo en cuanto al número de jugadores, las
reglas, el tiempo, el lugar, las sanciones y los objetivos.

La primera forma de creación del juego recuerda la manera de creación legislativa de los viejos
parlamentos y de los actuales congresos democráticos en las sociedades modernas. Su producto: la
ley, es la expresión del sistema jurídico romano-germánico. En tanto que la segunda forma es similar
a lo que sería el sistema jurídico del common-Iaw.

La convención en el Derecho como en el juego es el resultado de una decisión o de un conjunto de


decisiones, en virtud de las cuales se establece en qué espacio habrá de jugarse y en qué tiempo, ya
que ésta es una condición para que las reglas puedan aplicarse. Igualmente, en virtud de la decisión
creadora del ámbito que es el Derecho, se concreta el espacio de la acción jurídica, que es lo que
entendernos como la jurisdicción, la capacidad de las personas y las reglas de conducta. Antes de
elaborar la convención, ésta no existe y por consiguiente tampoco el juego ni el Derecho. Una vez
creada la convención mediante la decisión o conjunto de decisiones, puede decirse que ha surgido
un juego o un Derecho cuyo carácter principal es ser un marco de caracteres especiales y en el que
la acción ha de desenvolverse necesariamente en la forma convenida si los jugadores pretenden
efectivamente participar.

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