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Parcial Filosofia Política
Parcial Filosofia Política
6/10/2015
Pregunta 1.
Según entiendo, para Hobbes las leyes de naturaleza son los comportamientos, basados
en la disposición del espíritu, que deberían presentarse con regularidad en las personas
racionales para que decidieran abandonar el estado de Naturaleza y sumarse al pacto que
evitaría la guerra de todos contra todos.
Para Hobbes estas leyes no son arbitrarias sino que están fundamentadas en una
comprensión científica de lo que los hombres son, de los principios que explican sus
elecciones y sus actitudes.
Según el autor inglés, las personas estamos movidas por nuestros deseos. Tenemos
pasiones que nos movilizan. Sus objetos varían pero los principios que nos mueven como
individuos a conseguir lo que deseamos pueden conocerse científicamente. Somos
movidos por diferentes objetos, pero todos tenemos apetitos y deseos que queremos
satisfacer.
Las diferentes pasiones que sentimos nos mueven a la acción, y la voluntad es el resultado
de la deliberación más próxima a la acción que finalmente realizamos. En este sentido la
razón aparece como el cálculo que realizamos para decidir qué curso de acción
seguiremos.
El poder aparece entonces como la capacidad que tiene cada persona de satisfacer sus
deseos. Aparecen en el Leviatan dos tipos de poder, el natural y el instrumental. El natural
se refiere a las capacidades que las personas tienen por si mismas, sus habilidades
espontaneas. En cambio el poder instrumental depende del reconocimiento de los otros,
creo que implica ya un grado de civilidad.
En el estado de naturaleza se produce así la situación en que todos los individuos tienen el
derecho de usar su poder como quieran para conservar su vida, haciendo uso de todos los
medios que consideren apropiados. Es decir utilizando su poder.
Pero al mismo tiempo el deseo de poder es incesante. No hay para Hobbes un momento
en que nos sentimos satisfechos con lo que hemos alcanzado. La felicidad es un momento
y al siguiente queremos ya algo distinto. Con esta definición de felicidad, los recursos son
de por si escasos, ya que el deseo es insaciable.
Esta aspiración a satisfacer los anhelos propios de cada uno, desata entonces un estado de
guerra de todos contra todos. Nadie tiene suficiente poder como para establecer un
dominio permanente sobre los demás y ninguno está dispuesto a reconocer que el otro es
más que el mismo.
En esta situación de guerra generalizada -la guerra civil que Hobbes pretende resolver-
ninguna persona es libre, ya que se multiplican los impedimentos externos para la
realización de nuestras aspiraciones.
Si, en este estado de violencia, un número suficiente de personas decide al mismo tiempo
comprendan que les conviene abandonar parcialmente el cumplimiento de sus deseos
para preservar un espacio de seguridad para vivir. Si esto ocurre y consiguen con eso un
grado suficiente de satisfacción, entonces se produce la chispa que da vida al Leviatan.
El Estado, aparece aquí como el poder superior al que todos se obligan a respetar y que a
su vez garantiza con la fuerza el cumplimiento del pacto.
En contrapartida el estado debe asegurar que cada persona recibirá una cuota de poder
instrumental, es decir de reconocimiento por los otros, de honor, que le permita cumplir
con un mínimo de deseos que hagan que la vida tenga sentido.
Esto implica entonces que un grupo puede rebelarse contra el Estado si considera que no
está recibiendo la cuota de poder mínima que haga su vida tolerable. En qué momento la
rebelión es irracional y necia y en qué momento es justa, entiendo que será establecida
por cada sociedad ya que los objetos de nuestras pasiones según Hobbes varían con las
personas y con el tiempo.
Pregunta 2
Este proceso que va del estado de Naturaleza al establecimiento de la sociedad, las leyes,
las magistraturas y la legitimación de las desigualdades tiene varias etapas. En cada una de
ella los seres humanos van consiguiendo comodidades que luego no pueden abandonar y
se transforman en necesidades. Es importante señalar que para Rousseau, la desigualdad
no se resolvería renunciando a estas comodidades necesarias sino elaborando otro tipo de
pacto social.
Los seres humanos van pasando de un estado natural a la familia, donde aparece la vida
en grupo, el amor. De ahí a reunirse en grupos mayores como tribus o naciones que sería
una especie de situación equilibrada en la que viven los salvajes.
Luego aparece la fundamental división del trabajo y la dependencia mutua entre los
agricultores y la metalurgia. Aparece la necesidad del reconocimiento de otros y el
trabajar para otros.
Finalmente con la apropiación de la tierra para la agricultura se producen las diferencias
entre ricos y pobres. Entre aquellos que han ocupado las tierras y los que no han podido
apropiarse de nada y tienen que trabajar para los primeros para poder vivir, con lo cual
pierden su libertad.
En esta situación es que los ricos, que tienen más para perder que los pobres, elaboran el
engaño del pacto, para proteger sus propiedades y su seguridad del robo y de la rebelión
de los pobres.
Los pobres, más simples que los ricos y más ingenuos son estafados con la promesa de
seguridad y de que cada uno conserve lo suyo, pero en una situación que ya es de
desigualdad y que queda fijada institucionalmente.
Por eso es que el pacto inicuo puede quebrarse porque permite a los ricos apropiarse de
más de lo que necesitan y deja a los pobres en situación de dependencia y de falta de
libertad.
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