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Introducción
“Ninguna idea para un nuevo negocio llega totalmente
delineada. Cuando surge está semicruda, y debe seguir
un proceso”.
Clayton Christensen.
Armar un Plan de Negocio lo ayudará a definir con la mayor claridad posible cuál es
su negocio, cuales son los recursos que necesite y, finalmente, le proporcionará un
plan de acción para ponerlo en marcha.
1. Identificación del negocio y el análisis cuantitativo y cualitativo del
mercado.
Tener un plan de negocios es tener claro hacia donde usted desea llevar su negocio
y cuando usted lo tenga claro y esté por escrito, otras personas podrán saber y
entender cuál es su visión y cómo piensa llegar a cumplirla.
“En segundo nivel está el prestigio empresarial que adquiere la persona al tener un
negocio exitoso, sentido de pertenencia, la recuperación de la inversión y el
posicionamiento. Pero como objetivo principal una persona busca invertir en un
proyecto de vida y un negocio patrimonial que le dé sustento por varios años”,
advierte el experto. Para elegir el mejor negocio, se puede tomar en cuenta:
10.- Ubicación.
El plan de negocios es una formal de los objetivos de negocio, recogidos por escrito
en un documento, que desarrolla, sistematiza e integra las actividades, estrategias,
análisis de la situación del mercado y otros estudios que son necesarios para que
una idea de negocio se convierta en una empresa viable.
Las principales aplicaciones que presenta un plan de negocio son las siguientes:
Dentro de la información que puede conseguirse con este tipo de investigación está:
•Qué marca prefiere: posicionamiento
•Cómo compra: dónde, cuándo, con qué frecuencia.
•Por qué compra: motivadores de compra
•Por qué no compra: inhibidores de compra
•Con quién compra: centro de compra
•Historias de vida
•Entrevista en profundidad
•Etnografía
•Investigación Acción Participación
•Teoría Fundada
•Benchmarking
Investigación interna
Proceso de la investigación
Los pasos para desarrollar una investigación, cualquiera que sea, son los
siguientes:
Conocer la competencia quiere decir que voy a comparar mis productos con los de
los competidores para:
Para investigar a mis competidores, podría hacer un recorrido por los centros de
abastecimiento, por ejemplo supermercados y observar las marcas de los productos
y presentaciones disponibles
El Objetivo General del análisis FODA es definir como inciden estas fuerzas y a
partir de ello potenciar las posibilidades tratando de:
• Aprovechar Oportunidades.
• Potenciar las Fortalezas.
• Contrarrestar Amenazas.
• Disminuir Debilidades.
Con base en el análisis sobre el ámbito interno y el entorno externo, se elabora una
lista para cada uno de los grupos de factores mencionado. Del cruzamiento de esas
cuatro listas se obtiene la estrategia o estrategias posibles a seguir.
De esta forma:
1.6.1. De producto
1.6.2. Precio.
Los precios de venta constituyen para las empresas uno de los factores más críticos
para lograr un adecuado retorno del capital invertido. El buen éxito de las
operaciones de una empresa depende en gran parte del conocimiento y empleo
correcto de las técnicas de fijación de precios.
Por tanto, una política de precios racional debe ceñirse a las diferentes
circunstancias del momento, sin considerar únicamente el sistema de cálculo
utilizado, combinada con las áreas de beneficio indicadas. Para una más fácil
comprensión indicaremos que estas áreas quedan dentro de un contexto de fuerzas
resumidas en:
Objetivos de la empresa.
Costes.
Elasticidad de la demanda.
Valor del producto ante los clientes.
La competencia.
1.6.3. Promoción.
Para diseñar nuestra política de marketing debemos tener en cuenta los factores
más representativos del entorno de un país:
•Demográfico. La evolución del crecimiento vegetativo, la creciente incorporación
de la mujer al mundo laboral, reducción del tamaño de los hogares, mayor poder
adquisitivo, tercera edad, aumento de la población de emigrantes, etc.
•Económico y social. Aumento del nivel de vida, mayor valoración del ocio, las
tasas de desempleo y otros aspectos influyen en la actividad comercial del país.
Los canales de distribución se definen como las diferentes etapas que la propiedad
de un producto atraviesa desde el fabricante al consumidor final. Por ello los
cambios que se están produciendo en el sector indican la evolución que está
experimentando el marketing, ya que junto a la logística serán los que marquen el
éxito de toda empresa.
Aquí el elemento clave radica en la transferencia del derecho o propiedad sobre los
productos y nunca sobre su traslado físico. Por tanto, no existe canal mientras la
titularidad del bien no haya cambiado de manos, hecho muy importante y que puede
pasar desapercibido.
Canal Recorrido
Directo Fabricante ----------------------------------------------------------------------------------> Consumidor
Corto Fabricante ----------------------------------------------------------------> Detallista -> Consumidor
Largo Fabricante ------------------------------------------> Mayorista > Detallista -> Consumidor
Doble Fabricante > Agente exclusivo ---------------- ---> Mayorista > Detallista -> Consumidor
La empresa puede escoger una de las tres siguientes estrategias para cubrir el
mercado: mercadotecnia indiferenciada, mercadotecnia diferenciada y
mercadotecnia concentrada.
a) Mercadotecnia indiferenciada.
El empresario ofrece productos y servicios que son de uso general, es decir, que se
consumen independientemente de las características del cliente. Como ejemplo, en
una tienda de abarrotes se venden productos como pan, leche, tortillas, refrescos,
cigarros, entre otros, que son consumidos por toda la gente.
b) Mercadotecnia diferenciada.
En este caso, se ofrecen productos y servicios que toman en cuenta las distintas
preferencias de los clientes. Por ejemplo, si una tienda vende leche, puede tener
distintas marcas y además variedades como leche semidescremada, light, entera,
condensada, etcétera.
c) Mercadotecnia concentrada.
En marketing, como en cualquier otra actividad gerencial, toda acción que se ejecuta
sin la debida planificación supone al menos un alto riesgo de fracaso o amplio
desperdicio de recursos y esfuerzos. Si una acción no planificada tiene éxito, nos
deberíamos preguntar qué hubiésemos conseguido de más al operar bajo un plan.
Intentar que un proyecto triunfe sin servirse de un plan de marketing es como tratar
de navegar en un mar tempestuoso sin cartas marítimas ni destino claro.
El plan de marketing proporciona una visión clara del objetivo final y de lo que se
quiere conseguir en el camino hacia la meta, a la vez informa con detalle de la
situación y posicionamiento en los que nos encontramos, marcándonos las etapas
que se han de cubrir para su consecución. Tiene la ventaja añadida de que la
recopilación y elaboración de datos necesarios para realizar este plan permite
calcular cuánto se va a tardar en cubrir cada etapa, dándonos así una idea clara del
tiempo que debemos emplear para ello, qué personal debemos destinar para
alcanzar la consecución de los objetivos y de qué recursos económicos debemos
disponer.