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Diagrama que explica la función de la glándula pineal publicado en el libro El Tratado del
Hombre, de René Descartes
Las funciones de todas las glándulas eran totalmente desconocidas y
pertenecían al terreno de la especulación. Tal vez la única glándula que fue
reconocida empíricamente como asociada a una enfermedad fueron las tiroides:
la enfermedad de la gota fue bastante común durante la Edad Media, colándose
incluso a formar parte del canon anatómico de la representación de los humanos
en el arte bizantino. En el 990 d. C., Ali ibn Abbas al-Magusi fue el primer médico
en realizar una tiroidiectomía para tratar la gota; y si bien en 1500 y 1543 fue
dibujada, reconocida y descrita por Leonardo da Vinci y Andreas Vesallius, su
función no fue totalmente entendida sino hasta 1956.
Era imposible saber que estos órganos secretaban una sustancia que para la
medicina de aquel entonces era invisible. Hacia el siglo XIX, la medicina tenía
un nuevo paradigma sobre las enfermedades: eran causadas ya fuera por
microorganismos que se establecían en los cuerpos sanos cuando se exponían
a condiciones insalubres, o eran producto de una alimentación deficiente. Pero
existían ciertas enfermedades que no parecían tener una cura, como el
mixedema, una enfermedad de la piel. Estas enfermedades sin cura ni causa
aparente dieron pauta a la creación de enfermedades, como la histeria, asociada
a los repentinos cambios de humor en las mujeres. Si bien la histeria encajó bien
dentro de las ideologías misóginas de las sociedades del siglo XIX, la ausencia
de una causa y la enumeración sin fin de síntomas se convirtió en un problema
de salud pública: a una gran cantidad de mujeres se les removía el útero para
liberarlas de su mal, solución que a la larga creaba males reales.
La historia se desarrolla en dos actos más: el segundo periodo, o de la
endocrinología analítica, que constituye el descubrimiento de las hormonas y el
papel del sistema endocrino; y el tercer periodo, o de la endocrinología sintética,
que se refiere al establecimiento de la conexión entre sistema endocrino y
sistema nervioso.
SEGUNDO PERIODO DE LA ENDOCRINOLOGÍA: PERIODO ANALÍTICO
Arnold Adolph
1849 Comunicación a distancia de los testículos de capones.
Berthold
Sir Victor Horsley en el quirófano, en el Hospital Nacional, Queen Square, Londres | Wellcome
Images
La idea de inyectar y trasplantar tejidos sanos en personas enfermas empezaba
a popularizarse entre los médicos. Y la historia ahora se mueve a University
College London (UCL), donde Sir Victor Alexander Horsley (1857-1916)
comenzaba a trabajar como cirujano y administrador en el Hospital de University
College, en 1881. Horsley se enfocó en el estudio de la glándula tiroides y
realizaba experimentos con monos, a los que extirpaba la glándula y registraba
los cambios asociados con su pérdida para entender su función. Horsley pronto
descubrió que los monos desarrollaban mixedema, que es una acumulación de
mucopolisacáridos en la dermis, lo que causa hinchazón de la piel y razón por
la que recibe su nombre: del griego *myxa, «moco», y *óoidema, «hinchazón».
Horsley sugirió como tratamiento el trasplante de glándulas tiroideas de ovejas
a pacientes con mixedema. George Redmayne Murray (1865-1939), médico
inglés, fue uno de los estudiantes de Horsley y desarrolló la idea de su mentor
de modo menos invasivo: cortó en pedazos la glándula de un cordero y las puso
en ácido carbólico, dejo la preparación taponada durante toda la noche y luego
la filtró con un paño. Murray le llamó jugo tiroideo rosa y lo inyectó a una paciente
de mixedema con 46 años de edad: a los 3 meses de continuar con el
tratamiento, la condición había mejorado, así como su actividad.
Sir William Blyss realizando su experimento del “perro café”, c. 1900 | Wellcome Images
Fue también en UCL donde se realizaron los estudios que llevarían al
descubrimiento del sistema endocrino. William Bayliss (1860-1924) y su gran
colega, amigo y posterior cuñado, Ernest Starling (1866-1927), trabajaban juntos
cuando Starling fue nombrado profesor en UCL en 1899 junto con Bayliss, quien
ya trabajaba ahí desde antes. Ambos estudiaron el páncreas, órgano que se
pensaba estaba gobernado enteramente por el sistema nervioso (como se
pensaba también de los ovarios); descubrieron que cuando se colocaba ácido o
comida en el duodeno, el páncreas comenzaba a secretar líquidos en el
duodeno. Nombraron a esta sustancia como secretina y Starling propuso que en
el cuerpo debían existir muchas sustancias similares.
Ernst Henry Starling, fotografía de un óleo realizado en 1926 | Wellcome Images
En 1904, Starling y Bayliss asistieron a presentar su trabajo en las Cátedras
Croonianas, un simposio organizado por el Colegio Real de Médicos y la
Sociedad Real organizadas desde 1749; la cátedra se tituló La regulación
química de los procesos de secreción. Al año siguiente, Starling presentó en el
mismo simposio una cátedra titulada Sobre la regulación química de las
funciones del cuerpo, donde utilizó por primera vez la palabra hormona,
proveniente del verbo griego para excitar. Starling definió a las hormonas como
mensajeros químicos que al salir de la célula y viajar por el torrente sanguíneo
podían coordinar las actividades y el crecimiento de diferentes partes del cuerpo.
Starling definió esta palabra sin entender del todo la naturaleza de la sustancia
que había encontrado: era clara la necesidad de tomar un enfoque químico para
entender la naturaleza de estos compuestos. Toda la primera mitad del siglo XX
fue dedicada a identificar la fuente y las propiedades químicas de las hormonas
del cuerpo. Al principio se pensó que cada glándula se especializaba en secretar
un tipo de hormona, por lo que las hormonas recibían el nombre de la glándula:
la hormona tiroidea o la hormona adrenal. Sin embargo, pronto se descubrió que
una glándula podía producir diferentes hormonas; a esto siguió una
nomenclatura funcional, donde las hormonas eran nombradas de acuerdo a la
función que realizaban, como la prolactina que inducía la lactancia en la mujer,
o la hormona del crecimiento. Pronto, este sistema también fue ineficiente
cuando se descubrió que una hormona podía tener diversas funciones
dependiendo del órgano sobre el que actuaban.
Al acuñar la palabra «hormona», Starling dio paso a diversas áreas nuevas de
investigación. El químico estadunidense Edward Calvin Kendall (1886-1972)
aisló la pre-hormona tiroxina (T4) de la tiroides, y trabajando en la Clínica Mayo
con el médico Philip Showalter Hench aisló el compuesto E de las glándulas
adrenales, que se empezó a emplear como tratamiento de la artritis reumatoide:
este compuesto se llamó después cortisona.
Tras nombrar estos compuestos que permitían la comunicación entre células, la
segunda mitad del siglo XX revelaría que las hormonas interactúan con las
membranas de las células, que las membranas mantenían una comunicación
con el núcleo de la célula, y que las hormonas permitían la transcripción de
proteínas para desencadenar respuestas metabólicas, y que el sistema nervioso
tenía control de la secreción de hormonas al existir una comunicación entre la
hipófisis y el hipotálamo, en el cerebro.
1922 Frederick Grant Banting Establece la primera clínica, privada, en tratar la diabetes.
Evelyn M. Anderson,
Describen la estructura y función de la hormona
James Bertram Collip y
1933 adrenocorticótropa, producida en la hipófisis y que regula la
David Landsborough
secreción de cortisol por la corteza de la glándula adrenal.
Thomson
TEJIDO EPITELIAL
Glándulas endocrinas: son aquellas que producen mensajeros químicos llamados hormonas
que ayudan a controlar como a regular partes, sistemas, aparatos y hasta órganos
individuales del cuerpo. Los órganos endocrinos también se denominan glándulas sin
conducto o glándulas endocrinas, debido a que sus secreciones se liberan directamente en el
torrente sanguíneo.
Glándulas exocrinas: Se refiere a las que no poseen mensajeros químicos sino que estos
envían sus secreciones por conductos o tubos -que son receptores específicos- como por
ejemplo los lagrimales, axilas o tejidos cutáneos. además las glándulas exocrinas son un
conjunto de glándulas que se distribuyen por todo el organismo, formando parte de distintos
órganos y aparatos y que producen diferentes sustancias no hormonales que realizan una
función específica. Las glándulas exocrinas secretan productos químicos a través de
conductos o tubos a un lugar determinado para realizar una función concreta, a diferencia de
las glándulas endocrinas. En algunas glándulas exocrinas se puede distinguir una parte
productora o secretora de la sustancia y otra parte excretora o que vehiculiza la sustancia a
un lugar determinado.
Clasificación de las glándulas exocrinas:
Según en número de células:
• Glándulas unicelulares: Están formadas por una sola célula secretora como las células
caliciformes o mucosas que se encuentran distribuidas entre las células cilíndricas del epitelio
de muchas mucosas como la del estómago.
• Glándulas pluricelulares: Están formadas por múltiples células, formando estructuras más o
menos complejas, adoptando morfologías características como:
o Túbulos o glándulas tubulares: La parte secretora tiene forma de tubo.
o Alveolos o glándulas alveolares: La parte secretora tiene forma de bolsa o alvéolo.
o Acinos o glándulas acinosas: La parte secretora es un conjunto de bolsas que drenan un
uno o varios túbulos.
o Mixtas: Es la combinación de las anteriores: Tubuloalveolar, tubuloacinar, etc.
Según la estructura que tengan los conductos excretores:
• Glándula simple: Si el conducto excretor es único.
• Glándula compuesta: Si el conducto excretor está ramificado.
Según el producto de secreción:
• Glándulas mucosas: El producto de secreción es moco o sustancia rica en proteínas, con
alta viscosidad.
• Glándulas serosas: El producto de secreción es suero o sustancia rica en agua y pobre en
proteínas, con baja viscosidad.
• Glándulas seromucosas: Producen secreciones mixtas, con viscosidad intermedia.
TOMADO DE: http://www.ciencia.net/enciclo_imprimir.jsp?id=dsfjugaruf87qa9cev5cqf
Las diferentes hormonas segregadas por las glándulas endocrinas pueden ser,
Por su naturaleza química, de diversos tipos: aminoacídicas, peptídicas,
Proteínicas, glucoproteínicas y esteroideas. Esta diferente composición química
Explica que para la síntesis de cada hormona existe un tipo especializado de
Célula endocrina, de ahí la relación que se observa entre el número de células y
Hormonas en las diferentes glándulas endocrinas.
POR EL MODO DE SEGREGAR.