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estudios

Educar para vivir saludablemente y


acompañar sanamente
José Carlos Bermejo Higuera, M.I.
Director del Centro San Camilo (Centro Asistencial y de Humanización de la Salud).

Síntesis del artículo


Educar bien es imprescindible para generar salud y prevenir enfermedades y conductas antiso-
ciales. El autor se fija especialmente en tres aspectos: educar la resiliencia, el uso de la palabra y el
acompañamiento.

Abstract
Educate well is essential to create health and prevent illness and antisocial behaviour. The author is
especially focused on three areas: to educate resilience, dialogue and accompaniment.

Si una palabra es usada hoy abundante y to, o que una conducta –digna o no– de una
generosamente en numerosos contextos, persona (dignidad ética).
esa es: dignidad. Decimos espontáneamen-
Pero lejos de adentrarnos en disquisiciones
te: ¡no es digno!, ¡hay que promover una
filosóficas en estos párrafos, nos interesare-
vida digna!, ¡es indignante!, hay que promo-
mos por la promoción de una vida humani-
ver una muerte digna, una salud a la medida
zada (digna) desde la responsabilidad que los
de la dignidad humana.
seres humanos tenemos de educar para preve-
Y si una palabra es compleja de desentra- nir, de educar para acompañar en situaciones
ñar, esa es precisamente la dignidad. Es cla- complejas en las que, de no hacerlo, se corre
ro que no es lo mismo la dignidad intrínseca el peligro de vivir a medio gas, sin sacarle el
de todos los seres humanos que la cualidad jugo a la vida, a la salud biográfica que tene-
de dignidad de una persona a la que recono- mos en nuestras manos como tarea y respon-
cemos un nivel (dignidad) que inspira respe- sabilidad, no solo como experiencia biológica.
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1 Educar para prevenir que está bien decir y lo que no se debe decir.
Pero muy raramente se les enseña a escuchar.
Escuchar la narración de cómo se ha senti- Y quizá el defecto más grave de las relaciones
do uno educado, especialmente en la infan- interpersonales sea no saber escuchar, la fal-
cia, permite constatar la estrecha relación ta más grave de nuestra formación educati-
entre educación y salud. Recuerdo la narra- va. Nos han enseñado quizá incluso a ense-
ción de la infancia de algunos enfermos pasa- ñar, pero no nos han enseñado a escuchar.
da en medio de grandes carencias educativas; Así nos vamos convenciendo de que lo que
recuerdo dificultades relacionales, emociona- tenemos que decir es siempre más importan-
les y afectivas presentes en la edad adulta, y te que lo que tenemos que escuchar.
narradas también en relación inmediata con el
modo como fueron educados en la infancia. Enseñar a escuchar es enseñar a dialogar.
Escuchar significa asumir interés por el otro,
Sí, recuerdo a Juan, enfermo de sida, a quien ponerle en el centro del diálogo, liberarse de
su padre nunca le exigía nada ni se interesaba por prejuicios, observar con todos los sentidos,
él; recuerdo a Julia, prostituta, que vivió con su acoger la diversidad, leer detrás de las pala-
madre drogadicta; a Rosa, que padece depresión bras, permitir al otro autoafirmarse, omitir el
y que cuenta cómo su madre nunca le permitió juicio moralizante.
tener límites o que se le notaran; a Ana, que pade-
ce anorexia y que nunca se sintió querida por su Se enseña a escuchar dando ejemplo de
madre; a Pedro, que tiene úlcera péptica y cuyo empatía, es decir, poniendo en acto la capa-
padre era tan exigente que le infundió un mie- cidad de entrar en el mundo del otro y mani-
do espantoso a cometer errores; recuerdo a un festar la comprensión que seamos capaces de
preso, que había matado al dueño de una tien- alcanzar. En el proceso de aprendizaje de toda
da en un robo, cuyo padre nunca aparecía por conducta nueva, contar con un referente es
casa y cuya madre se aislaba y no estaba nunca inmensamente útil. Por eso, las personas que
con los hijos pequeños y adolescentes… saben escuchar se convierten en una auténti-
ca aula viviente que enseñan en su entorno.
No. No es que la enfermedad o la conducta
de un individuo sea la consecuencia directa de Enseñar a escuchar es prevenir, porque
la educación recibida. Creo en la libertad y no quien no escucha ni se siente escuchado,
en el puro determinismo. Pero, sin duda, hay no sale de sí, no permite que otros entren
una estrecha relación entre educación y vida en él, vive en soledad y esta genera, antes o
sana, saludable, digna. después, células malignas en la relación con
el mundo, consigo mismo y con los demás.
El conocido autor de Inteligencia emocional, Escuchar, sin duda, es, además, terapia efi-
Daniel Goleman, no duda en relacionar la edu- caz en toda dificultad, fármaco privilegiado
cación, en particular el analfabetismo emocio- y estimulante de los recursos internos e ins-
nal, con la salud, al menos con la salud psíquica. trumento para ofrecer soporte emocional.
Por eso, educar constituye un reto preventivo.
Educar bien significa generar salud y prevenir 1.2 Educar emocionalmente
enfermedades y conductas antisociales.
Enseñar a escuchar permite enriquecer y hacer
1.1 Educar a la escucha y al diálogo más profundas nuestras relaciones. Pero ense-
ñar a manejar los sentimientos permite alcan-
Es frecuente oír a padres y educadores expre- zar calidad en la comunicación y salud emo-
siones exhortativas relacionadas con el uso de cional para llevar una vida digna de nuestra
la palabra. A los niños se les intenta enseñar lo condición humana.
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Educar en el manejo de los sentimientos información, la posibilidad de conseguir lo
garantiza el éxito de la vida en pareja, en gru- deseado al instante, a golpe de tecla. Por otra
po, del trabajo en equipo, de la capacidad de parte, no son pocos los padres y educadores
afrontar conflictos internos e interpersonales. que argumentan como motivo para satisfa-
Enseñar a controlar y encauzar asertivamen- cer a los niños el hecho de que al menos estos
te la agresividad, a manejar y hacer fecunda tengan lo que ellos no pudieron, por vivir en
la soledad y la tristeza, a sacarle partido al momentos de mayor precariedad y meno-
miedo y la ansiedad, a compartir sanamente res recursos. El error craso está en creer que
la alegría, a elaborar el significado de la cul- satisfacer todas las expectativas es educativo
pa… constituye un auténtico reto educativo. y que educar al éxito vistoso y triunfante no
pasa factura desagradable.
No es frecuente que los estilos formativos
incluyan el adiestramiento a la manifestación En efecto, otro reto de la sociedad de hoy
de las emociones, a la generación de confian- viene dado por la necesidad de enseñar a con-
za e intimidad emocional. Quizás los mismos vivir con el deseo no siempre satisfecho, a inte-
padres y educadores fueron educados tam- grar la frustración y a aprender del fracaso.
bién en la represión, el silencio emocional o En el fondo, la educación tanatológica pre-
la selva expresiva de los sentimientos. sente en algunos lugares supone el coraje de
Enseñar a ser asertivos, a autoafirmarse res- aceptar que la pérdida, el fracaso, la vulnera-
petando a los demás, constituye una oportuni- bilidad, el límite y la muerte forman parte de
dad preventiva de neurosis, depresión, anore- la vida. Vivir a ciegas no puede ser saludable.
xia, dependencias, y todo tipo de enfermeda- Educar ignorando que el límite forma parte
des, porque nuestro cuerpo reacciona también de la vida, como lo forma el fracaso, es caer
en función de nuestro corazón y nuestro sis- en una educación que llevará a la inmadurez.
tema inmunitario entiende también de bien- En el fondo, no se trata de otra cosa, ni más
estar y malestar emocional. Por eso también ni menos, que educar a ser fieles a la realidad
hay que educar a escuchar al corazón. misma y a la creatividad responsable.
Sin duda hay muchos factores que concu-
Si educar significa acompañar a desarro-
rren en los procesos morbosos físicos o psi-
llar las facultades intelectuales, emocionales,
cológicos. Pero nadie puede poner en duda
afectivas y morales de una persona, los edu-
que, entre ellos está la educación emocional y
cadores y formadores habrán de poseer las
afectiva. No estamos proponiendo un exhibi-
competencias que desean ver nacer y crecer
cionismo emocional en la familia o en la escue-
en los educandos.
la, sino la consideración de la relevancia que
ha de tener el mundo de los sentimientos en Los formadores que solo hablan, pero que
todo proceso educativo. actúan de un modo visiblemente contradic-
torio, boicotean el mismo mensaje que pre-
1.3 Educar a la realidad tenden transmitir.
Uno de los límites que percibo en mi entorno Cuando se trata de enseñar, de generar
es la tendencia a satisfacer todas las expecta- salud mediante la educación, la vía del tes-
tivas y deseos de los niños y jóvenes. Y cada timonio, abierto siempre a la creatividad y al
vez más, también de los adultos. cambio que se produce en el diálogo, es la pri-
El desarrollo maravilloso de la tecnología vilegiada. Por eso, ser buen educador se con-
permite a muchos el acceso inmediato a la vierte en ser buen “compañero de aprendiza-
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je” porque la verdad y la bondad se alumbran cación para la prevención) hacia una menta-
en el encuentro interpersonal y la persona se lidad de promoción de estilos de vida digna
hace en la relación. y saludable, también la resiliencia nos pro-
porciona un cambio de mentalidad: de pen-
2 Educar a vivir la resiliencia sar en las dificultades a pensar en las posibi-
lidades. Un camino hacia constructos positi-
Algunas preguntas de interés para promover vos y posibilistas.
una educación relacionada con llevar una vida
digna y afrontar saludablemente las adversi- La capacidad de los sujetos para sobrepo-
dades podrían ser: nerse a períodos de dolor emocional –la res-
iliencia– nos interpela la propia responsabili-
• ¿Mantengo un cierto equilibrio emocional dad en la gestión de las actitudes y estilos de
en los vaivenes de la vida? vida, también ante lo inevitable. Al evocar la
• ¿Veo las dificultades solo como un «marrón» responsabilidad –capacidad de dar una res-
o como una posibilidad de aprender, de puesta personal– surge un planteamiento que
mejorar, de hacerme más fuerte? va más allá de la educación sanitaria para pro-
• ¿Me quedo anclado o encuentro nuevas mover la salud mediante el compromiso por
formas de satisfacer mis necesidades del llevar una vida digna y saludable.
momento?
En este sentido, América Latina va por delan-
• ¿Cómo interpreto lo que me pasa? ¿Cuánta
te. La Organización Panamericana de Salud es
importancia le doy? ¿Sé relativizar?
más proactiva en la consideración de la impor-
• ¿Me veo a mí mismo como alguien capaz tancia del autocuidado, de la vinculación salu-
de superar los momentos adversos o como dable en el grupo y en la comunidad, de los
alguien frágil e inseguro? estilos de vida saludables. Se entiende que
• ¿Quién es el responsable de lo que me pasa toda medida preventiva exitosa depende de
en la vida? ¿Los demás, el mundo, Dios, una sociedad que facilite el equilibrio entre
yo...? el desarrollo personal y las conductas de ries-
• ¿Puedo encontrar caminos alternativos y go, lo cual requiere la activación de progra-
probar formas diferentes de actuar? mas encaminados a fortalecer los factores de
protección y la resiliencia.
Plantearse estas y otras posibles pregun-
tas reclama una serie de elementos propios Cuando en el ámbito psicológico, en los
de la resiliencia, de la que hoy se habla más años 70, Michael Rutter, directamente inspira-
que hace pocos años, tales como: el equilibrio do en el concepto de la física (que es la capa-
ante la tensión, el compromiso y el desafío, la cidad de los materiales para volver a su posi-
superación, la significación y valoración que ción original tras ser deformados al aplicar
hacemos de lo que nos sucede, la visión posi- una fuerza sobre ellos), introdujo el término
tiva de uno mismo, la responsabilidad ante la resiliencia, que se define como la capacidad
vida, la creatividad… de los sujetos para sobreponerse a tragedias
o períodos de dolor emocional, como resis-
2.1 Resiliencia y educación para una vida tencia al sufrimiento, e incluso como resul-
saludable y digna tar fortalecidos por el mismo, quizás no era
Si la educación para la salud ha vivido un pro- consciente de hasta qué punto podía gene-
ceso evolutivo desde una concepción centrada rar líneas de reflexión para la promoción de
en la enfermedad (educación sanitaria, edu- una vida digna y saludable.
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Quizás tampoco Boris Cyrulnik, que amplió Ayudarán a la educación de la resiliencia la
el concepto de resiliencia observando a los potenciación de la reflexión crítica y del deba-
supervivientes de los campos de concentra- te, que promueven la interiorización de los
ción, a los niños de los orfelinatos rumanos valores y la responsabilidad en el pensar y
y a los niños de la calle bolivianos. Él mismo, actuar. Incluso ante los viejos problemas se
con tan solo seis años, escapó de un cam- puede ser creativos y avanzar en la reflexión.
po de concentración, mientras el resto de su
Será útil cultivar el optimismo y construir
familia murió; pasó a ser un niño huérfano y
relatos de esperanza, no solo promover las
su propia historia le llevó, siendo ya neurop-
malas noticias y hacerse “correveidiles” del
siquiatra, a interesarse por el fenómeno de la
caso del telediario que amplifica lo negativo
resiliencia. Fue capaz de retomar un tipo de
y no hace noticia de lo positivo.
desarrollo después de una herida traumática,
fue capaz –dicho con sus palabras– de “vol- Las investigaciones sobre resiliencia no dejan
ver a la vida”. lugar a dudas: se construye a través de relacio-
nes personales afectivas y seguras. Un alum-
no que se sienta marginado, invisible o estig-
2.2 ¿Se puede educar la resiliencia?
matizado, probablemente tendrá un compor-
La respuesta es claramente sí. Se empieza por tamiento inadecuado, habrá internalizado la
la familia y se sigue por la escuela. La escuela sensación de “yo no puedo”, y se descolga-
que es capaz de brindar afecto y apoyo, esta- rá de la institución escolar. Por el contrario un
blecer y transmitir expectativas elevadas, y alumno que sienta que la escuela es un ámbi-
brindar oportunidades de participación sig- to afectivo, que tiene sensación de pertenen-
nificativa, aporta condiciones que alientan el cia y que se siente reconocido, probablemen-
afrontamiento exitoso de las crisis. te se esforzará y se comprometerá con la ins-
titución escolar.
Existen diversas escuelas anglosajonas y lati-
noamericanas que están aplicando la herra- La resiliencia se forja, por otro lado, cuan-
mienta de la resiliencia a la organización esco- do las personas se abren a nuevas experien-
lar, al desarrollo del currículo, al diseño de las cias y actúan de forma interdependiente con
tutorías, a la participación de las familias o al los demás. De ahí que diversas investigacio-
desarrollo profesional de los docentes. nes encuentren que las personas resilientes
se caracterizan por su competencia social, su
En el estado español son prácticamente
capacidad para resolver problemas de forma
inexistentes las experiencias o programas
creativa, por su autoestima, su optimismo y por
para el desarrollo de la resiliencia, pero tam-
un deseo de independencia. Si esto es así, la
bién es cierto que, aunque no con ese nom-
capacitación en estas habilidades interpersona-
bre, en determinadas escuelas se ha venido
les, tan útiles para la vida, educa a la resiliencia.
estimulando actitudes y llevando a cabo prác-
ticas que pueden considerarse resilientes. Una de las aportaciones más interesantes
del enfoque de la resiliencia tiene que ver con
En la escuela, como en cualquier otra par-
el protagonismo de los actores, pues refor-
cela de la vida, aunque no sea fácil, se puede
mula las relaciones de poder, consideran-
introducir el enfoque de la resiliencia, liberar
do al otro no como beneficiario de una ayu-
la imaginación, reflexionar, debatir, analizar
da, sino como co-responsable y autor de su
y embarcarnos en una búsqueda utópica del
aprendizaje, de sus acciones, en definitiva, de
sentido de la genuina educación.
su vida. De ahí que la resiliencia en la escue-
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la se promueva también otorgando al alum- tiempo que dedicamos los profesionales del
nado, a sus familias y a los docentes, autoría acompañamiento (educadores, profesiona-
y responsabilidad en el proceso educativo. les de la salud, de la intervención social, del
acompañamiento espiritual…) a prepararnos
La cultura occidental ha cargado las tintas
para dirigirnos a los destinatarios de nuestro
en la capacidad y responsabilidad individual
acompañamiento, particularmente cuando
como pilar del cambio personal y social. En
pensamos en situaciones complejas que pue-
la escuela, desde la perspectiva de la resilien-
den poner en peligro la dignidad de la perso-
cia, hablar de la responsabilidad individual al
na y el modo digno de vivir.
margen de la comunidad es un error, pues
nos hace perder el contacto con lo común e Recuerdo haber escuchado en una conferen-
interpersonal, contribuyendo a la fragmenta- cia que para hablar con el paciente, por ejem-
ción y alienación que tantos docentes, alum- plo, sería necesario estudiar oratoria. Lo escu-
nado y familias experimentan en nuestros ché con sorpresa, pues no sé si aquel hombre
días. En la escuela el valor asociativo se refle- que hablaba tan bien estaba echándose un
ja en la conexión organizativa y en los proce- piropo a sí mismo o estaba diciendo algo que
sos de comunicación, que promueven la con- yo no era capaz de comprender. Y menos en
fianza, la tolerancia, la cooperación y la tras- los tiempos que corren, en los que la oratoria
cendencia de nuestras acciones. brilla por su ausencia en… el mundo mundial.
Y, una vez más, digamos que el sentido del
3.1 La oratoria de los griegos
humor es una cosa muy seria. Por eso, cuan-
do la escuela se plantee seriamente educar La oratoria, entendida como el arte del buen
en el sentido del humor, se estará plantean- hablar siguiendo determinadas reglas, tiene
do objetivos tanto cognitivos como socioa- su origen en Grecia, más específicamente en
fectivos. La educación de la creatividad y del la antigua filosofía griega. En aquel tiempo la
pensamiento alternativo, el desarrollo de la oratoria era parte integral de la formación cul-
empatía, la confianza, la resolución de conflic- tural y ha sido objeto de estudios por muchas
tos, e incluso la autoestima, están relaciona- personas en cuya profesión estaba incluido el
das con aprender a reírnos de nosotros mis- arte de hablar en público.
mos y aprender a aceptar nuestras imperfec- En contraste con esta realidad, hoy la orato-
ciones y focalizarnos en nuestras fortalezas. ria se utiliza más específicamente en campos
Y si todo esto es posible en la escuela, ¿no como la administración, el marketing, secto-
será necesaria una educación para la resilien- res privados, medios de comunicación y, sal-
cia en las Facultades de ciencias sociales y de vo excepciones, jamás es parte de un entre-
la salud y en las mismas estructuras presta- namiento educativo permanente.
doras de servicios? Seguro que sí. En Grecia destacaron los sofistas en el siglo
IV a. C. y, a diferencia de Sócrates (que utili-
3 Educar para usar la palabra zaba la mayéutica, el arte de interpelar dialo-
gando), se interesaban por el arte de conven-
“Si tengo que dirigir un discurso de dos cer a través de la palabra.
horas, empleo diez minutos en su prepara- Ahora bien, si hoy dijéramos que oratoria
ción. Si se trata de un discurso de diez minu- es exclusivamente el arte de convencer, sería-
tos, entonces me lleva dos horas...”. Así se mos parciales. En realidad, podríamos pensar
expresaba Winston Churchill. Me pregunto el en ella como la ciencia que se ocupa de la for-
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ma en que una persona expresa y transmite fianza, atraemos o producimos rechazo, gene-
su mensaje con el deseo de que este sea efi- ramos atención o aburrimos, hacemos pensar
caz, con afán de persuadir, pero sin manipu- o matamos la curiosidad. Con ella hacemos
lar o subestimar a quien lo escucha. reír o llorar, generamos indiferencia o senti-
mientos intensos.
Queda lejos de las profesiones de ayuda
aquel arte tan cultivado en la antigüedad. Con la palabra, damos vida o generamos
Basta pasarse por una facultad de medicina, muerte. Tiene, efectivamente, el poder de
de enfermería, de trabajo social, de teolo- una espada afilada. Que la palabra llega a tener
gía, de magisterio… y ver cómo se comuni- tanto poder que de ella puede depender la
ca en las aulas, tanto profesores como alum- vida o la muerte, nos lo enseña la experien-
nos. Con frecuencia, un colorido power-point cia, y con sencillez lo ilustra esta fábula leve-
que se lee (si el tamaño de letra es suficiente- mente cambiada y recogida en nuestro libro
mente grande) ha sustituido al arte de comu- “Regálame la salud de un cuento”:
nicar con entonación, de explicar con pasión,
Un grupo de ranas viajaba por el bosque y,
de provocar interés por el tema, de interac-
de repente, dos de ellas cayeron en un hoyo
cionar… Ya he escuchado a varios grupos de
profundo. Las ranas se reunieron alrededor
alumnos de medicina su hartura del power-
del hoyo. Cuando vieron cuán hondo era el
point que permite que un profesor “llegue
hoyo, dijeron a las dos ranas caídas que, a
y lea” sus diapositivas y los alumnos se dis-
efectos prácticos, se debían dar por muertas.
pongan a la carrera de escribir velozmente.
Las dos ranas no hicieron caso a los comen-
Y queda lejos de estas profesiones de ayuda
tarios de sus amigas y siguieron tratando de
aquel arte tan cultivado en otros tiempos de
saltar fuera del hoyo con todas sus fuerzas.
sentarse juntos y hablar unos minutos (¡tam-
Las otras ranas seguían insistiendo en que sus
poco tantos!) sobre lo que está sucediendo,
esfuerzos serían inútiles. Finalmente, una de
lo que está en juego en el mundo personal y
las ranas puso atención a lo que las demás
social del paciente, del destinatario del acom-
decían y se rindió. Se desplomó y murió. La
pañamiento.
otra rana continuó saltando tan fuerte como
le era posible. Una vez más, la multitud de
3.2 El poder de la palabra
ranas le gritó que dejara de sufrir y simple-
Nadie pondrá en duda, sin embargo, el poder mente se dispusiera a morir. Pero la rana sal-
de la palabra en las relaciones que se produ- tó cada vez con más fuerza hasta que final-
cen en el acompañamiento humano. La efica- mente salió del hoyo.
cia de un tratamiento, la fidelidad a su segui-
miento, el impacto emocional de una mala Cuando salió, las otras ranas le pregunta-
noticia, la reacción de una familia ante un fra- ron: ¿No escuchaste lo que te decíamos? La
caso o una situación inesperada, y mil situa- rana les explicó que era sorda. Ella pensó que
ciones más, están en estrecha relación con el las demás la estaban animando a esforzarse
modo como los agentes del acompañamiento más para salir del hoyo.
manejen la comunicación, utilicen la palabra.
3.3 Usar bien la palabra
Y es que la palabra tiene un poder impresio-
Resulta difícil hacer recomendaciones sinté-
nante. Con ella construimos una especie de
ticas para hacer un buen uso de la palabra sin
aureola en torno a nosotros y a lo que deci-
caer en el riesgo de que sean simples recetas
mos. Con ella inspiramos confianza o descon-
con escasa eficacia.
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Sin embargo, es sabido que hablar con segu- 4 Educar para acompañar
ridad (sin altanería), expresando claramen- En España se está abriendo camino la for-
te el mensaje (sin tecnicismos innecesarios), mación en counselling. En 2014 surgía la
teniendo en cuenta al auditorio y sus carac- Asociación H, de ACHE: Asociación de counse-
terísticas (también en la comunicación “dos a lling humanista de España, de la mano de un
dos”), haciendo síntesis, comprobando que se grupo de profesores y exalumnos del máster
es comprendido, preparándose debidamente en counselling del Centro de Humanización
el tema, hablar con orden… son algunas cla- de la Salud de la Facultad de Educación Social
ves importantes. y Trabajo Social en la Universidad Ramón Llull
Empezar por un “no”, utilizar muchos “pero”, (Barcelona). Todo un hito en la historia de la
que con frecuencia anulan todo lo dicho ante- formación en esta forma de relación de ayu-
riormente, usar un tono monótono, no mirar da, cada vez más reconocida, pero aún de
a la cara, no considerar el lenguaje no verbal y manera insuficiente.
el contacto físico, y otras tantas variables, pue-
Se trata de un campo privilegiado para la
den arruinar la eficacia de una comunicación.
formación de profesionales que acompañan
Ya puede ser sabio un agente del acompaña- a personas en situación de dificultad, para
miento en sus diversas formas posibles, ama- adquirir actitudes y habilidades que den efi-
ble y dulce incluso, erudito como él solo, que cacia al acompañamiento y se superen así
si no se interesa por algo más que la informa- formas de ayudar superficiales, moralizan-
ción y las razones, perderá mucho de su valor tes, directivas, ineficaces.
personal y profesional.
La nueva Asociación, que espera constituir-
En cambio, las razones claras y palpables, se en un movimiento de fomento de la for-
expresadas con sencillez, pero dichas con el mación en esta forma de relación de ayuda
corazón y al corazón, generarán un atractivo tan importante para las profesiones relacio-
que facilitará la consecución del objetivo en nadas con el sufrimiento humano y con los
las relaciones en el campo de la salud. En la voluntarios que acompañan en situaciones
tensión entre razón y corazón, el corazón sue- de necesidad, promete buen futuro. Ya son
le ganar la batalla, particularmente cuando la muchas las personas que han pasado por el
fragilidad humana asoma por algún rincón. máster en counselling por Tres Cantos (Madrid)
La escasez de información, lo mismo que y por Barcelona, buscando con esfuerzo cua-
la sobredosis de información, es una variable lificar su profesión o abrirse camino en lo que
que no inspira seguridad en la persona acom- podrá ser en el futuro una nueva profesión.
pañada. Transmitir incertidumbre para asegu-
rarse de que pase lo que pase “ya estaban avi- 4.1 Qué tipo de formación
sados”, no parece ser una sana motivación. En ciertos contextos de promoción del coun-
Asegurar con mirada firme que se está selling se debate sobre el tipo de formación
haciendo todo lo posible, que hay verdadero que tienen que tener los counsellors y las per-
interés, interés desinteresado, que la palabra sonas que acompañan en situaciones de vul-
no es un escondrijo, sino la encarnación de la nerabilidad y que buscan el modo de llevar
misma persona buscando el bien, saliendo de una vida digna. No falta quien afirma que lo
sí, generará salud en el destinatario y, a buen importante es hacer una experiencia perso-
seguro, también en quien la pronuncia. nal de ser ayudado, experimentando el proce-
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so interior que se realiza mientras alguien te dad o prejuicios, sino acompañando a discer-
acompaña en el generar algún cambio saluda- nir ponderando y deliberando en medio de la
ble. Otros insisten sobre la necesidad de partir complejidad de la vida moral.
de una formación consistente en alguna dis- Otro aspecto importante de la metodolo-
ciplina humanista, que garantice un conoci- gía será la experiencia. En efecto, no se apren-
miento psicológico y antropológico del ser den técnicas solo por conocerlas. Es necesario
humano, que fomente la comprensión de la entrenarse, dejarse supervisar, hacer prácti-
condición humana vulnerable. cas con tutor, con compañero, con actor, con
Hay quien considera que es necesaria una usuario real… pero siempre dejándose inter-
pelar: por uno mismo, por otros miembros de
titulación universitaria previa (entre las cuales
los procesos formativos y por los expertos en
puede estar también la psicología, obviamen-
supervisión. El aprendizaje por modelado es
te), y hay quien rebate esta cuestión reclaman-
un buen recurso. El análisis de casos (diálo-
do de nuevo la importancia de la experiencia
gos, videos) ayuda eficazmente; pero, sobre
en los procesos formativos en counselling.
todo, la supervisión del formando en coun-
A mi modo de ver, además de una seria selling, sea en cámara de Gessell o con cual-
formación previa al counselling, mucho más quier otro recurso.
fácilmente verificable en quien ha pasado por Y una tercera clave fundamental es el desa-
una formación académica de licenciaturas o rrollo personal del consejero. Es difícil acom-
similares, se requiere un tiempo que supere pañar en el sufrimiento si no se hace intros-
las experiencias “oasis” que a veces se pro- pección, si no se toma conciencia de cómo se
ducen en cursos intensivos y breves (pocos gestionan los sentimientos propios, cómo se
meses). Se requiere, asimismo, entrar en con- tienen integradas las propias dificultades vivi-
tacto con la literatura básica de las fuentes. No das en el pasado, cómo se están afrontando
basta con oír hablar de Rogers y de la impor- los propios conflictos en el presente. El auto-
tancia de centrarse en la persona. Aprender conocimiento, la asertividad, la regulación
counselling, aprender a ayudar en situacio- emocional, el desarrollo moral del conseje-
nes complejas, requiere tiempo y esfuerzo. ro, son imprescindibles para un buen apren-
Yo diría que es difícil. dizaje en couselling.

Un aspecto metodológico importante es la


4.2 Interiorizar las actitudes
sana combinación entre teoría, praxis y desarro-
llo personal. Un buen conocimiento de algu- Mientras que el coaching insiste mucho en téc-
no de los modelos existentes, fundamentado nicas para acompañar a las personas a con-
teóricamente, con una antropología de fondo seguir sus metas y desarrollar sus potencia-
que ayude a comprender la complejidad del lidades, el counselling se centra mucho en el
ser humano y su mundo interior, relacional, poder de las actitudes, con su dimensión cog-
su vulnerabilidad psicológica, afectiva, pare- nitiva, afectiva y conductual.
ce imprescindible. Será difícil también for- En efecto, no basta con haber oído sobre
marse bien sin asomarse a la psicopatología, la importancia de la empatía, de la conside-
para saber derivar y gestionar los trastornos ración positiva y de la autenticidad como trí-
de personalidad y otras patologías. Será nece- pode fundamental (tríada rogeriana) para el
sario también conocer lo suficiente para ges- counselling. Las actitudes requieren un proce-
tionar los conflictos éticos no con impulsivi- so de exploración de sus implicaciones desde
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el punto de vista teórico. Bien es sabido que 4.3 Necesaria introspección


la palabra “empatía” sufre una gran inflación, Aprender a ayudar pasa necesariamente por
y es confuso el significado de la aceptación mirarse por dentro y hacerse experto en vul-
incondicional de la persona si no se explora nerabilidad. Estamos hechos de la misma
y matiza, como es complejo el concepto de madera los seres humanos. Somos todos dis-
autenticidad sin trabajarlo conceptualmente. tintos, pero la comprensión de los dinamis-
Mientras no se haga un trabajo teórico sobre mos internos y de nuestras “sombras”, será
estas actitudes y sus implicaciones y límites siempre un recurso inestimable para ayudar
(definir: delimitar), la formación en counse- a otras personas en el abordaje de situacio-
lling tendrá algo pendiente. Son demasiados nes que generan sufrimiento.
los autores, artículos y en ocasiones libros,
La introspección es una puerta al progre-
que manejan de manera confusa estos con-
so y transformación personal, es central en
ceptos. Quizás nos encontremos en un bos-
términos de nuestro desarrollo personal y
que conceptual que reclama luz y confronta-
espiritual. Sin la capacidad de asimilar lo que
ción entre tendencias complementarias y, a
aprendemos y de reflexionar profundamente
veces, divergentes.
sobre lo que somos, lo que sentimos, lo que
Pero la formación en las actitudes clave vamos aprendiendo de nosotros mismos y
para desarrollar las competencias del coun- sobre los principios del conocimiento espiri-
sellor tiene que pasar también por el adiestra- tual, no podemos desarrollarnos como ayu-
miento en la dimensión comportamental de dantes efectivos. Podemos pensar y hablar de
las actitudes. De ahí la necesidad de las prác- desarrollo personal del consejero, pero este
ticas. No se aprende espontáneamente a des- pasará siempre por el desarrollo espiritual, por
plegar la empatía en situaciones tan divergen- la autoobservación en silencio, por el discerni-
tes como uno se puede encontrar en el coun- miento. La introspección es la base de nues-
selling. Ni se aprende a validar sentimientos tra estabilidad personal, especialmente fren-
igualmente cuando estamos ante una perso- te a las adversidades, y también es la posibili-
na triste o cuando estamos ante una perso- dad de hacer cambios y explorar formas más
na agresiva, en los diferentes momentos de profundas de nuestro ser. Imprescindible en
la curva de la hostilidad… el aprendizaje del counselling.

“Cada maestrillo tiene su librillo”, dice la sabi- Por eso, los buenos planes de formación
duría popular, y por lo mismo, cada alumno existentes en España contemplan esta dimen-
habrá de encontrar el modo de desarrollarse sión con diferentes estrategias que la favo-
genuinamente, para no caer en el fingimien- recen. No todos por igual; de ahí la necesi-
to de poseer algunas técnicas y repetir cual dad de elegir bien entre la oferta circulante.
papagayo algunas reformulaciones encontra- Promover una vida digna pasa por educar
das en manuales que pueden reducir la téc- a la prevención, acompañar como tutores de
nica a una mera caricatura de formas de res- resiliencia en la adversidad, y este acompaña-
ponder que fomentan la eficacia en la auto- miento requiere una formación específica en
nomía de los ayudados. educadores y agentes sociales y espirituales.

José Carlos Bermejo Higuera

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