Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El derecho al esparcimiento está explícitamente mencionado en el artículo 31 de la Convención sobre los Derechos del Niño
(1989) (…). El esparcimiento es entendido como un tiempo de crecimiento personal, creación, recreación y participación en la
sociedad”.
¿Cómo organizar el tiempo? Plantear la organización del tiempo por semana y en función de
metas sobre la base de roles elegidos, puede favorecer que la y el joven puedan cumplir con lo
que se proponen, así por ejemplo, se puede proponer: “comentar con mi madre y mi padre lo
que hice en el colegio” (rol de hija o hijo), “jugar con mi hermana/o menor por lo menos dos
veces” (rol de hermana/o), “leer tres capítulos del primer libro del plan lector”, “practicar los
temas de matemáticas y ciencias”, “repasar las clases de historia y economía” (rol de alumna/o),
“organizar una salida al cine con amigas/os” (rol de amiga/o) y “bajar videos de mi grupo
favorito” (rol con una misma o uno mismo). En un organizador físico o agenda virtual se podrían
asignar días y horas tentativas para desarrollar cada meta, así como considerar un espacio de
comodín (bloque de 2 o 3 horas libres) y dejarlo disponible para cualquier eventualidad. La
planificación debe ser realista y práctica; es decir equilibrada entre responsabilidades y
recreación, así como flexible para adaptarse a posibles cambios. Al concluir la semana, es muy
útil propiciar que la o el adolescente evalúe cómo le fue, que identifique cómo se sintió con los
resultados obtenidos para así fortalecer su motivación y que además reflexione sobre aquello
que le permitió y/o dificultó el logro de sus meta para considerarlo en la siguiente semana y con
Después de leer o escuchar los textos, realiza lo siguiente: