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Pie plano y pie equino.

López González Alejandra Grisell 1509


Pie Plano

Es uno de los principales motivos de


consulta en ortopedia pediátrica.

Es la pérdida del arco plantar


longitudinal, de modo que al caminar
se apoya toda la planta en el suelo, un
pie normal que se apoya en solo tres
puntos: la cabeza del 1er
metatarsiano, el talón y el borde
externo.
Pie plano laxo
(fisiológico)

Esperable en el recién nacido y el niño menor (4-5


años)

Se manifiesta por la prominencia de la almohadilla


grasa del arco interno. La deformidad es blanda,
flexible e indolora, lográndose formar el arco
cuando el examinador extiende el primer ortejo en
forma pasiva.
Tratamiento
Se ha tratado con plantillas correctoras que apoyan
el arco longitudinal y además corrigen el valgo del
calcáneo.

● Un niño con pie plano exible sin síntomas


importantes puede usar zapatos corrientes, no
requiere tratamiento si no presenta molestias.
Tratamiento

Zapatos especiales Fortalecer musculatura plantar


Solo se utilizarán zapatos especiales o Los estudios no han demostrado que el uso de
plantillas en los niños que tengan dolor plantillas o calzados especiales alteren la evolución
de los pies planos. El 80% de los pies planos exibles
intenso y persistente, o en aquellos que
se resolverá en forma espontánea. Lo que resulta de
desgasten o deformen rápidamente un mayor utilidad es el motivar la actividad física de los
calzado de uso habitual. niños en la que utilicen activamente sus pies y
fortalezcan la musculatura plantar.

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Pie equino

Es una deformidad del pie humano en la que este se


encuentra permanentemente en una posición de
flexión plantar, en aducción e inversión, el retropié en
varo, con el hueso del tarso calcáneo invertido por lo
que el paciente afectado cuando camina apoya la
región anterior del pie (marcha de puntillas
normalmente se caen) y el talón no entra en contacto
con el suelo.
Se asocia...
El pie equino generalmente no es una
deformidad aislada, suele acompañarse de
otras alteraciones, si se asocia a un pie
varo, se llama pie equinovaro o pie zambo
y cuando se combina con deformidad en
valgo se denomina pie equino valgo.

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Causas

Trastorno congénito.
1 Al momento de nacer.

Parálisis de músculo tibial anterior.


2

Secuela de otro padecimientos.


3 Esclerosis múltiple y la distrofia muscular de Duchenne.
El tratamiento se basa en medidas ortopédicas y de
rehabilitación, en algunos casos se recomienda la
cirugía.
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Diagnóstico

Radiografía no necesaria. Semana 20 de embarazo.


El médico reconoce el pie equino varo Es posible observar con claridad la
poco tiempo después del nacimiento, mayoría de los casos de pie equino
simplemente observando la forma y el varo antes del nacimiento durante
posicionamiento del pie del recién una ecografía de rutina en la
nacido. En algunas ocasiones, es semana 20 del embarazo.
posible que el médico pida una
radiografía para saber con exactitud
cuán grave es el pie equino varo, pero
generalmente la radiografía no es
necesaria.

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El objetivo del tratamiento es mejorar la
apariencia del pie del niño y su funcionamiento
antes de que el niño aprenda a caminar, con la
esperanza de prevenir discapacidades a largo
plazo.

Algunas opciones de tratamiento son:

● Estiramientos y un yeso (método


Ponseti)
● Cirugía

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Método Posenti
Tratamiento más frecuente:

● Médico moverá el pie del bebé a una posición


correcta y luego lo colocará en un yeso para
mantenerlo en su lugar.
● Reposicionará y volverá a colocar un yeso en
el pie de tu bebé una vez a la semana durante
varios meses.
● Realizará un procedimiento quirúrgico menor
para alargar el tendón de Aquiles (tenotomía
percutánea del tendón de Aquiles) hacia el
final de este proceso.
Método Posenti

Después de haber realineado la forma del pie se deberá


mantener por los siguientes métodos:

● Hacer ejercicios de elongación con el bebé


● Colocarle zapatos especiales y dispositivos de
inmovilización
● Asegurarte de que tu hijo use los zapatos y los
dispositivos de inmovilización todo el tiempo
que sea necesario, por lo general todo el
tiempo durante tres meses y luego por la
noche y al momento de la siesta hasta por tres
años
Bibliografía

● Orrego M, Morán N. Ortopedia y traumatología básica. Santiago: Universidad de los Andes, Santiago
de Chile. 2014. P. 147-148.
● Rodríguez O, Vilalta i Vidal I. Valoración del niño con problemas ostopédicos relacionados con la
marcha. Actualizaciones. 2008.

● Fortune J, Paulos J, Liendo C. Ortopedia y traumatología. Facultad de Medicina. Escuela de Medicina.


2005.

● Firpo C. Manual de Ortopedia y traumatología. Capítulo XXI. Afecciones más comunes del pie. 2010.
Argentina: Editorial Dunken.

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