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17 Tango Nuestro Charlo
17 Tango Nuestro Charlo
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CHARLO
in lugar a dudas, la de Charlo es m El misterio lia rodeado el origen de Cliarlo. El
una de las voces más completas decía llamarse —atribuyéndose un linaje aristocrá-
1 con que na contado el tango. tico— Carlos José Pérez de la Riestra. No obstan-
Desde el punto de vista técnico, te, en su partida de nacimiento (fechada en la bo-
puede decir- naerense Puáii en 1906, un
se que las año después del naci-
mejores miento) figura como hijo
del canto porteño son las de Carlos Fidel Pérez
de Carlos Ciardel —por so- Bamentos y Teresa Urdi-
bre todas—, Mercedes Si- nola Fresdenoso. Eviden-
moiie, Cliarlo y Edmundo temente, el apellido De la
Rivero. Por su parte, Cliar- Riestra brilla por su ausen-
lo se inició en un estilo com- cia, y 110 faltó quien señala-
pletamente gardeliano (escú- ra que rué tomado por el
chese, por ejemplo, su graba- cantor del propietario de la
ción de Las vueltas de la vi- estancia donde llegó al
da, de 1928), del que rué mundo y en la que su padre
desprendiéndose sabiamente habría sido empleado,
para llegar a ser, inconfundi- quizá, mayordomo. La
blemente, él mismo. Es de- adopción de ese segundo
cir, para convertirse en el in- apellido parece ser relati-
menso intérprete que todos vamente tardía, ya qtie en
hemos admirado por su ex- las partituras de sus pri-
celente tesitura, su innega- meras composiciones y en
ble afinación, su particular tim- algunos de sus discos iniciales
bre, su casi virtuosismo. Pero seríamos injus- aparecía " Carlos J. Pérez (Charlo)".
tos si no lo tuviéramos en cuenta, también, como Carlos José Pérez Urdinola nació en la estancia
un buen ejecutante de piano, acordeón, guitarra y La Piedad —no en El Avestruz como se dijo erró-
violín, y un rinísimo compositor, que a veces escri- neamente en muchas oportunidades — de la pro-
bió sus propias letras. vincia de La Pampa, entre las localidades de Gua-
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Rencor
1932
Rencor, mi viejo rencor,
déjame olvidar su cobarde traición,
¿no ves que no puedo más,
que ya me he secao de tanto llorar?
Deja que viva otra vez
y olvide el dolor que ayer me cacheteó,
rencor, yo quiero volver
a ser lo que fui; yo quiero vivir.
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Viejas alegrías, La barranca ) o con letras propias Venezuela —donde se lo consideró "el sucesor de
(Sin cariño, No me olvides, Anoche estaba curda, Garder—, Panamá, Cuba, Brasil, Francia, Bélgi-
Tango en Colombia ). En otros géneros musicales ca, Portugal —donde cantó en portugués, lo que ya
produjo, por ejemplo, Oro y plata (milonga- liabía becbo durante sus actuaciones en Brasil—
candombe, con Manzi), ¡Pim, pum, ra- y España, donde residió durante varios
taplán! (foxtrot, con letra propia), años. Finalmente, se presentó en
¡No hay tierra como la mía! Colombia, donde el público lle-
(milonga, con Cadícamo), ;ó a llevarlo en andas por las
El viejo vals (vals, con Jo- calles y de donde volvió
sé González Castillo) y con uno de sus últimos
Tu pálida vo2 (vals, con éxitos: su Tango en Co-
Manzi), además de lombia .
obras en los más diver- Considerado como una
sos ritmos, desde las bu- gloria viviente del tango,
lerías, pasando por el bo- en sus últimos años reci-
lero, basta el rock lento. bió el reconocimiento por
"Viajero incansable" — su extensa y valiosísima la-
como dice su tango Ave de bor. Al celebrar sus 50 años
paso—, realizó innumerables con el tango, se lo homenajeó en
giras por dos continentes, lo cual lo el Teatro Solís, máximo escenario
tuvo alejado del país durante considerable montevideano. En 1968, radio Excelsior
tiempo. Su primera actuación en el exterior me en lo convocó para un ciclo en el que cantó, tocó e
el Uruguay, al que siguieron Cbile, Bolivia, Perú, llistorió su vida. En 1990, se lo nombró académi-
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RONDANDO
TU
co de honor de la Academia Nacional del Tango.
ESQUÍA
Por entonces, y desde nacía años, era una figura
clásica de la calle Lavalle, por los alrededores de lidad le hizo reconocer que ya hombreaba 85 y que
SADAIC. Erguido y con su pinta intacta, quería la vida se pianta, como dice el tango. Y se fue para
nacer creer que los años para él 110 pasaban, y lo lo- siempre, lo cual es sólo un modo de decir: Charlo
graba; parecía haber hallado el secreto de la eterna sigue viviendo en su voz eternizada por la magia del
juventud. Pero el 30 de octubre de ese año, la rea- disco.
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Tango en Colombia
1956
Salí a buscar una esperanza,
un cariño, una ilusión...
busqué y todo era niebla en mi alma,
busqué con la gran fe de encontrarla,
después Dios la puso en mi camino
y el destino nos unió.
Viví, viví lo que era mi sueño,
juró, juró que yo era su dueño,
después, después sólo tango y llanto,
aguardiente y nada más.