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M O N T E V ID E O , S ETIE M B R E í\o DE 1948

c. jw ✓

R E V IS T A H U M O R IS T IC A , Q U IN C E N A L , U R U G U A Y A , SO L T E R A
C O N D O M IC IL IO E N LA CALLE C E R R IT O 68 5 , M O N T E V ID E O
20
CENTESIMOS
UNA BOCA H E R M O S A
C ON Dr. W E S T 'S ESPU M O SA

u s i e e n s e g u id a s e m e va a
i a v a u e s o s d ie n t e / , aio q u ie r o vAMO,VAMO, v iE J A /
QUE OCIANDO SEA GRANDE TENGA LAS CO/UPAí SACÍOASE
LA d e n t a d u r a como su p a d r e , ^ S o m . o d io s a , s o n . / /
QUE PADECE PROPiO UNA C iuPA'
B O M B A R D iA m /P A R E C E / y -

oj¿£Y,NAMl

CREMA ESPUMOSA
Y
CEPIH0 DENTAL CONQUISTAN EL
CONTINENTE
Yo he conocido cantores

P E LO D U R O
Redacción
que era un gusto el escuchar
J - is tr a c ió n : mas no quieren opinar
y se divierten cantando;
C e r rito 685 - E sc. 7
pero yo canto opinando
T e lé fo n o : 8-51-55 q u e es mi modo de cantar.
Año V 1? de S etiem bre de 1948 N? 103
MARTIN FIERRO

“PELODURO” EN LA EMBAJADA A RIO


EN UN E M O TIV O ACTO DEM O CRATICO
FUE DESIGNADO NUESTRO REPRESENTANTE

N
OS alumbraba una bombita de catorce bujías y y escudado y con todas esas otras cosas que
media, pero a la que nadie le hubiera dado ni le quitan la apariencia de cachada y dan la segu­
siquiera doce de tan conservada que estaba. Ferrei- ridad de que es algo formal.
ro leía el diario en voz alta; Suárez escribía a má­ Los tres tipos se miraron. Yo creo —es una opi­
quina con el sobretodo puesto; El Hachero... (nun­ nión personal— que era un gesto parecido a ese de
ca se sabe exactamente donde está El Hachero) pa­ los boliches cuando se debe un par de vueltas y
rece que revisaba un catálologo de fotografías. Nos­ nadie mosquea: “¿A ver quien levanta esto?” . . .
otros nos comíamos los papeles de “Cabeza” Mar­ Suárez leyó la invitación entusiasmado, no hay
tínez. que quitarle. La sometió a la consideración de los
—Ché, ¿efectivamente serán las ratas que hacen presentes, exalto la significación que tiene pata
ese ruidito? PELODURO esa incitación del Primer Magistrado
Los tipos miraron para abajo de la mesa. Se mi­ y sin duda iba a decir, llevado por la fuerza v el
raron los pies. Suponían
que, a lo mejor, eran ellos luego de su oratoria.. . .
mismos los que rascaban “ ¿Juráis mis bravos
el suelo con las uñas. Pero “ redimir la patria
comprobado que no, vol­ Con Esto te Digo Todo “ doquier siguiendo
vieron a lo suyo. Volvió Montevideo, agosto 24 de 1948. “ mis gloriosas huellas?...*
Marius a leer y Pelo si­
guió escribiendo y El Ha­ Señor Director de PELODURO. Presente. Cuando como un solo
De mi alta consideración: hombre, se levantó El
chero a dar vueltas las ho­
Hachero y le dijo con ese
jas de los catálogos bajo la Pláceme dirigirme a Vd. para invitar, por gesto de persuación y-de
bombita de oscuridad que su intermedio, a un periodista representante
bondad que tiene al mis­
ahora empezaba a hacer de esa publicación, a fin de que integre la mo tiempo:
guiñadas capciosas, (yo comitiva que en el corriente mes viajará a
diría que libertinas). — Río de Janeiro. —¿Por qué no vas vos,
Suárez suspiró y dijo (pa­ Ruégole que — en el caso de que esta in­ Mono. . . ya que estás ves­
tido?...
labras textuales): vitación sea aceptada — se comunique de in­
—Si al menos pudiera mediato a esta Secretaría el nombre del co­ Ferreiro quitó la vista
terminar esto antes de que misionado asi como los datos de su creden­ de su diario y se puso los
se apague la luz!. . . cial cívica y carnet de identidad, los cuales lentes para mirarlos. Des­
resultan imprescindibles para confeccionar el pués se los sacó y volvió a
Entonces sonó el tim­
pasaporte respectivo. leer. La bombita de ca­
brazo. Era el momento
Quedo muy reconocido a la urgencia con torce bujías y media (pe­
histórico. Era la invita­
que se sirva responde este asunto, a tiempo ro nadie se las dá ¿eh? Pa­
ción de la Presidencia de
que lo saluda con alta consideración rece que tuviera mucho
la República para ¡r a
Río, que llegaba con to­ menos.) La bombita se­
JUAN CARLOS SCHAURICHT guía haciendo guiñadas.
das las de la ley; es decir
Secretario
con el sobre membretado
EL R A T A I
P E L O D U R O — 1
“ Crónicas de la Ciudad ~ ---------- --------------------------------------------
D ECADENCIA CE LA MORAL
------------------------------------------------------------------------------ Por EL HACHERO-
OS esfuerzos desesperados que se vienen reali­ ma que le dió la iniciativa:
I zando por mantener en pie al boxeo, no hacen
más qu€ confirmar que estamos frente a una decli
—Clavá la uña que este bárbaro es capaz de dar­
nos una paliza.
nación tal en el interés popular por este deporte Pero en cualquiera de los dos casos queda de
que podría llegar, incluso, a su desaparición definí manifiesto una actitud negativa por parte del indi­
tiva. No se cuenta con más de tres o cuatro pugilis viduo, opuesta diametralmente a la reacción lógica
tas relativamente nuevos, y para integrar los progra­ del varón, que es aguantarse allí.
mas es fuerza echar mano de viejos profesionales a No soy tan lírico como para sostener el romanti­
quienes hace ya muchísimos años se les pasó la hora. cismo de aquellos ojerosos que pedían en sonetos
La decadencia es, pues, absoluta, total. Yo creo un zapatito a su amada para ponerlo en la mesita
ver en esto la expresión de una época en que tam­ de luz con un ramo de flores adentro. (Ahora se
bién ha decaído el espíritu de sacrificio. Porque el me ocurre que de ahí debe haber surgido el modis­
boxeadqr es, por sobre todo, un sacrificado. Lo es mo “floreros” para distinguir a los zapatos y que
en su vida diaria, obligado a guardar permanente­ luego, por extensión, pasó a los pies). Ni lo soy
mente un régimen especial, a entrenarse todos los tampoco para creer que una mujer que se entrega
días, a ¡Observar un método riguroso, y lo es, luego, es siempre una “niña engañada”. Los que pensaban
en el propio ring, donde se debe a un público que así tenían sus razones porque trataban con damas
ha pagado por verlo. de otra educación más religiosa y, en consecuencia,
El púgil no puede, como el futbolista, por ejem­ más débiles que las actuales. Todavía el teatro suele
plo, permitirse ciertas licencias en su preparación, ofrecernos la visión de aquellos días. Todavía ve­
porque con ello sufre su salud que es la mejor de­ mos irrumpir en el escenario alguna vieja damita
fensa que posee frente al enemigo. El boxeador, tina que llega corriendo a pasitos breves, sacudiendo sus
vez en el ring, no puede quedarse quieto como el carnes opulentas. Lleva una manita puesta sobre el
jugador que ve pasar por al lado suyo la pelota pecho y con el otro brazo se da impulso, agitándolo
y no se „preocupa por alcanzarla. El tiene que mo­ igual que si estuviera dirigiendo una orquesta. Y se
verse constantemente porque si no lo hace ya se detiene de golpe al tocar el otro extremo, empinán­
encargará su rival de “moverlo”; él tiene que lu­ dose en la puntúa de sus pies gordos como buñue­
char, en'fin, presentar combate y combatir porque los y estira el pescuezo en actitud curiosa, sorpren­
no le es„ permitida otra cosa. Y para ello hay que dida, para decir alegre, infantilmente:
tener una moral fuerte, un noble espíritu de sacrifi­ —Mamita, mamita: la batarasa puso un liuefo (que
cio. La ausencia de él se quiere decir un giiébo).
advierte también en mu­ Así eran de tiernas y
chos otros episodios de la graciosas. Pero hay debe­
vida común. Ahora mis­ CUENTO DE APARECIDO mos colocar a la mujer en
mo, la prensa dió noticia el mismo plano nuestro.
de un drama pasional, en Sin embargo, confieso
el que fué actor un mozo que soy, sí, lo suficiente
que sorprendió a su novia lírico como para creer
hablando con otro hom que en presencia de una
bre. Dicen las crónicas mujer, no se puede, en
que ése otro hombre se manera alguna, pegar una
dió a la fuga. Probable­ rajada como la del mozo
mente haya hecho bien en que nos ocupa.
disparar,, El tipo tiene Sin duda que desde
que haber pensado: atrás ella le veía las sue­
—-Aquí no me quedan las en el aire.vgolpeándo-
más que dos caminos: o le en la nuca, tocando
el novio me rompe el al­ apenas las baldosas como
ma o yo se la rompo a él. si estuvieran calientes. Se­
Y ninguna dé las dos si­ guramente que le ha vis­
tuaciones es mayormente to el saco volándole de
plausible, por una mujer atrás y la corbata, suelta
que nos engaña a ambos. al viento chicoteándole
Entonces escogió el ca­ . . . y aquel tranvía que sajió de 8 de Octubre
el lomo. Y lo ha imagi­
mino del medio. Posible­ llegó a la Aduana! Palabra de honor que no le nado al llegar al café,
mente haya sido ella mis­ miento!. . . (Pasa a la Pág. 4)
VAN PELODUR0 Y EL PULGA CAMINO DEL BUEN HUMOR

CUANDO NO PUEDEN IR SOLOS LOS ACOMPAÑA GENIOL

v> r'».>11*
r h r r

GENIOL
CALMA... ENTONA... DESCONGESTIONA!
"Peloduro" V is itó a lo s T ío s d e la P a tr ia
Las distintas notas muestran que so­
mos insistentes en nuestras visitas
a los lugares donde se nos trata bien.
Ni echándonos sal abajo de ia silla
nos vamos. Estas fotos documentan
que tanto nos filtramos en la mesa
austera del Presidente de la Cámara,
como en la sencilla bancada comu
rusta, como en cualquier otro lado.
¡Qué embromar!

después de la corrida, pálido, de­


mudado, tratando de aparen­
tar compostura. Los ojos se
le salen de las órbitas, la ca­
beza le resulta desproporcionada­
mente grande para el cuerpo. Los
muchachos lo encuentran desme­
jorado y tienen razón. Parece un
truco fotográfico. Entonces humi­
llado, confundido, desalentado y
culpable, quiso excusarse y empu­
jó una puerta. De atrás le devuel­
ven el empujón, como si hubiera
chocado con un resorte. Luego,
una voz que se levanta como si
viniera del suelo: “Geente”. Y su
ridículo será total. Y preferirá
mil veces haberse jugado la para­
da frente al novio, aunque fuera
por una mujer que los engaña­
ba a los dos... El Hachero ★
4 — P E I . O D Ü R O
★ LAPRINCESA DE SEBOYA *

La cebolla está a dos cincuen­ Gardel era un vidente. Lo intu­ en descubrir el contrabando de ce­
ta el kilo. Digan si no es para llo­ yó hace muchos años cuando cantó bollas argentinas, pues ha sido
rar! aquello: “Perdoná si al evocarte confeccionado un “test” de lloro-
se me planta un lagrimón”. . . nes que especifica la cantidad de
☆ secreción que corresponde a tantos
No cabe duda de que hay que ☆
tener mucha “tela” para comprar kilos de introducción fraudulenta
A la cabeza le llaman “cebolla”.
cebollas. de cebollas.
Pero en este país (excepción he­
☆ cha de los intelectos de esta casa) ☆
Antes se usaba despectivamente Damos por descontado que nues­
no hay una que valga lo que la tros lectores saben que hay cebo­
la expresión “es una telita de ce­ original.
bolla” para referirse a un traje lla “blanca” y “colorada”. Se te­
☆ me, justificadamente, una coinci­
gastado. Ahora, una telita de ce­ ¿Y qué me decís de aquella ct¡tn-
bolla. . . ¿Cuánto cuesta? dencia y la cebolla décenvira.
cioncita que debía: “Soy el pobre ☆ .
☆ cebollero, que vende cebolla y IIay que hacer justicia a la ce­
Era un bacán. Le dijó a la no­ a jo ...” ¿Pobre? Sinvergüenza, za- bolla de verdeo, que ha venido a
via: “Contigo pan y cebolla”. ragüeta, atorrante, por no decirte quebrar en parte la Jauja (un yin-
☆ otras cosas! fís, Don Ricardo) de los que creían
¿Las lágrimas de cocodrilo lle­ ☆ que iban a engordar del todo sus
garán a valer tanto como las lá­ No creemos que las autoridades bolsillos a base de la angustia po­
grimas de cebolla? aduaneras tengan mucho trabajo pular.

* * * * * * » » *

E N T R E
E L L A S

—¿Y qué tal tu nue


va conquista?
-¡Magnífico! Tiene
un olor a cebolla que
apesta.

★ ★ ★ ★ ★ ★ ★ ★ ★

r> r n ti .. o
------ La Solfa --------------— ---------------- ---------------- -----
A PEJAR DEL ALTO COSTO,
M IC H O S SE H IC IE R O N SU AG O STO
*
---------------------------------- ------ — -------- Por RAPP-------
GOSTO ha pasado:
A el mes de más fama,
temido-'y malvado,
algún gallo estrecho
que niegue maltrecho -
que también se han hecho
friolentó y resfriado, su agosto los “chorros"? • • se ejecutan con tanta asi­
que al más escamado duidad en la radio esas co­
lo deja de cama, ¿Habrá quien podrá
negar a conciencia, sas a base de corneta que
—la lari-lará— no le gustan a nadie?
pasó, ya se ha ido,
—se dice— hace dias, que hecho sin quizá
su agosto se habrá ☆
con las averias
de su cometido ya la Coincidencia? . . .“Cutesa” ha destinado un
y el tan discutido ¿Y a quien no le cabe, libre tránsito para los direc­
asunto, gemido por más que sea angosto tores de los diarios en vez
de las minorías. que en este deschabe de dárselo a los pinches que
ya leve ya grave ' son, en realidad, los que
Por su proceder, se hicieron su agosto tienen que ir y venir?
no lo pueden ver los que ya se sabe?
y habla con despecho ☆
de él más de un maltrecho ¿No será, señores,
y aunque ya está hecho por lo mencionado, ■las mujeres , —que tienen
lo quieren hacer. que hay opositores un espíritu cútico tan agu­
que en sus rojas flores do—, usan esos tirabuzonci-
Y, pruebas al canto, al país —no llores— tos en el pelo?
o mejor al llanto lo ven agostando?
¿quién es que discute ☆
* * * ★ * * £ * * * . £ * £
que en-ese entre ‘tanto .no se prohíbe también el
se hizo sin quebranto VENENO TELEFONICO tránsito por 18 a esos seño­
su agosto la U.T.E.? res que salen los dimingos
en una cachila y no dejan
iQuiénes no advirtieron andar a nadie?
que los empresarios
de los que murieron ☆
)' todos los diarios
con los funerarios . el color de los trigales es ru­
avisos plagiarios bio y el trigueño es lo
su agento se hicieron? opuesto?
m
¿Quién es el tan guiso ☆
que en su tontedad
se muéstra remiso las radio tocan una música
a creer, sumiso tan larga, como Preludio de
que también se hizo un aviso?
su ogasto la Ancap?

¿Habra algún feroz
sujeto* señores, .“La Razón” no dice quien
que me diga ante Dios es su director o redactor
que sü agosto, o dos, responsable?
no se Jiicier'on los —Vieras querida... me han con­
especuladores? tratado para hacer la película “Cleo- ☆
patra y la Serpiente”.
¿Habtií —ni sospecho— — ¿De veras? ¿Y quién hace de ■si está prohibido fumar en
entre tantos zorros, Cleopatra? los tranvías igual se fuma?
6 — F E L O D U R O
~Foto-Oleos de la Calle -------------- * '

* DOBLAJE *
--------------------- ----- ------------------------------------------- ----------Por TRIPP

N UNCA trato con niñas. Por eso, talvez es que


he tardado tanto en darme cuenta que son
“dobladas” como las películas. He visto que la ma­
naban como martillazos lanzando lejos sus ecos, ért
la noche silenciosa y húmeda. Además iba golpean­
do con el diario en la pared. Y chiflando. Así que,
yoría de las jovencitas nuestras extraen del cine, desde la distancia ya me habrían visto. Pero la piba
lo mismo que las modas del vestido, los gestos y tenía un gesto estudiado, medido y vió la oportu­
actitudes de las artistas. Y al presentársenos estas nidad de darle salida. Apenas me les acerqué, pues, , .
artificiales, falsificadas, pierden al mismo tiempo aspiró hondo entreabriendo la boquita en un ges­
aquéllas, naturalidad, espontaneidad, lógica. Es de­ to de sorpresa, me miró aterrada y cruzó las manitas
cir que nos las devuelven también “dobladas”. Fre­ contra el pecho en una actitud instintiva de de­
cuentemente no ponen relación' entre el gesto y la fensa. Sus lindos ojos oscuros me acusaban, sus la­
palabra, entre la expresión física y la hablada. Y bios temblorosos imploraban piedad. ..
ese es el inconveniente. Adiviné. Era sin lugar a dudas una escena co­
Uno las ve de lejos y le resultan encantadoras piada de una película. Quizás aquella donde “la
por la diversidad de matices que imprimen a su muchacha” es sorprendida por el villano mientra!
rostro. Uno ve traducido en 'ellos desde la piedad revolvía los papeles büscando las cartas compróme
hasta el desprecio, desde el terror al desdén. Ya pa­ tedoras que le escribió enamorada. O tal vez aque
rece que estuvieran frente a un cuadro de dolor, lia otra donde, por el espejo de su tocador ve fran.
frunciendo el ceño, como de heroísmo, apretando quear la ventana al bandolero de nariz aplastada,
los labios y los puños, como de abnegación, suavi­ cruel y repulsivo, que viene a arrebatarle la honra.
zando la expresión. Pero en ese momento están di­ Era eso, seguramente...
ciendo probablemente:
—Ah sí! Yo soy una persona que todos los lunes Pero la molestia la pasamos. El muchacho la
me corto las u ñas... atrajo contra si y me miró con ese gesto entre abom­
Ellas aprenden unos gestos interesantísimos en bado y agresivo que tienen siempre los novios al pa­
el cine que después tratan de repetir, con preferen­ sar bruscamente de una escena de amor a otra im­
cia frente a su novio. Lo más probable es que no prevista, porque no han tenido tiempo para despo­
se produzcan las situaciones propicias para ello, pues jarse de aquella expresión de ternura y de adoptar la
en la media luz de un zaguán o simplemente a la otra. Yo, abochornado, humillado, hice lo posible
sombra de los árboles no se presenta una gran va­ por conservar la compostura y continué tieso, er­
riedad de material que digamos. Pero lo acomodan guido, como si llevara una maceta en la cabeza; a
a cualquier momento. Ellas saben también “doblar” pasos lentos, pausados, como al compás del Bolero
la realidad. Lo pude experimentar. Noches atrás es­ de Ravel. ..
taba una pareja apretadita contra un portón, en • El “doblaje” de la pebeta nos había ridiculizado
una calle donde no pasaba un alma. Mis tacos reso- a todos.

A gil ... Gracioso ... Primaveral/...


Aparecerá el Número Próximo de

LELODLLO
üL 22 DE SETIEMBRE. — CON PROFUSION DE NOTAS
DEL VIAJE PRESIDENCIAL A RIO DE JANEIRO

Y las consabidas flores, forúnculos


y demás frutos de estación
P E L O D U R b — $
y el no ser había escogido esto úl­
HINCON F O L K L O R I C O timo. Sin embargo, aquí se produ­
ce un nuevo nudo. Pues. ..
EL TA N G O PSIC O LO G IC O
“ Antes de morir
Mocosita" (Muñequita) “ alguien lo oyó cantar así:

ENCIERRA altos valores psico­


lógicos el tango de Víctor Soli­
ño y Matos Rodríguez, titula­
“M i mocosita:
“ No me dejes morir
“ Mi mocosita: no me dejes mú-

“ Volvé al cotorro
\TÍ r

do '‘Mocosita”. Tiene un alias que “ Volvé al cotorro “ que no puedo vivir...”


no agrega mayores elementos de ” que no puedo vivir”. . .
juicio: “Mi Muñequita”, con lo Con esto se plantea el interesan­
que nos recuerda esos avisos fúne­ Y aquí viene el problema psí­ te problema de si se debe ser o
bres: “Juan Pérez (Juaneito)”. Los quico. El tipo no quiere morir, pe­ no ser, o ser medio y medio o de
que sin duda no han tenido en ro sin ella no puede vivir. Lo que hacer alguna concordancia, en fin.
cuenta que todos los Juanes son equivale a hallarse entre la vida y Es un problema que queda en pie.
Juancitos. Pudo haberse evitado. la muerte, entre el ser y no ser,
Pero es solo un detalle. Los ver­ que es la situación mas difícil se­ (1) “To be or not to be” (Shakes­
sos de Soliño nos hablan de un gún la opinión de los más caracte­ peare) ‘‘¿En qué país estamos?’*
payador al que se le fugó la moco- rizados escritores (1). Entonces... (Jess). “¿Al último somos todos ló­
sita, o sea Ja muñequita —para ser eos, José?” (Ramón Collazo). “A la
más explícitos— y entonces es lan “ Dormía tranquilo el conven­ pucha, barrilete” (Juan C. Casalá).
grande Su dolor que, para olvidar­ te j . [tillof
la, se pone á pensar todo el día nada turbaba el silencio de la
en ella: ' J‘ ’1 [noche
“ cuando se oyó sonar EL CONSEJO GRATIS
t tirado en el catrera “ allá en la oscuridad
■no hace más que llorar, y “ el disparo de una bala fatal.” Señor Radioescucha:
*en alguna ocasión.
f to escucha esta canción: T Era el payador que entre el ser Cuando oiga que le
silba la radio en el tan­
go canción “ La Pasto­
ra ”, no llame a un téc­
nico. Se trata de un pa­
jarito que figura en el
libreto. Fíjese bien.

QUE CEBOLLAS!
El Ingeniero Sócrates del Ca­
ño, visto el cariz político de la
"cebolla Planea” y la “Cebolla Co­
lorada estudia en su laboratorio
las posibilidades de crear una “ce­
bolla Peñarol” y una “cebolla Na­
cional’’, para darle un simpático
cariz deportivo a la dicha legum­
bre. A su respectiva vez, la inquie­
tud de Pintin Castellanos quiere
llevar al folklores la obtención del
tipo Magaldi”, en contraposición
0 la cebolla d j D u ra nte tip o “ Gm*
*

«
p ib a s cartas d e -i E)iccíoiiarío del D isparate
por PEPE REPEPE
m m m m / SINTETIZAR. - Acción de
► SOBRIO. — Régimen por la
ponderar la belleza de una mu­ úlcera.
jer haciendo delicada abstrac­
STA golviendo el gauchaje ción del busto.
E que se jué pa la Limpiada
y es justo que muy cansada
*! SOCIETARIO. - Que com­
parte con uno un nggocio y no
SINTOMA. — Prescripción se aviva que lo estamos lim­
yegue, de tan largo viaje. médica de no tomar copas du­ piando. Contratacción de socio-
Alguno sólo a coraje rante cierto tiempo. otario.
moviendo muñeca y maña
se jué pa la tierra extraña SINUOSO. — Italianismo > SOCRATES. - Célebre filó­
a pasear lindo y barato, que quiere decir: “sinhueso” o sofo griego que tomaba la filo­
' mas. ¿pa que sirve el retrato sea la lengua. sofía con yuyos. Son (conoci­
si ¡a mina está en España? das sus doctrinas con Guaco,
i / SISMOLOGIA. — Logia ma­ ron Pegulo y con Genciana.
El juego e’ Polo no escondo sónica que cree en los terremo­ Cuando quiso tomarla con Ci­
qu’estaba un poco en desuso; tos y otras supersticiones. cuta murió frente a sus discípu­
los de aquí son como buzo: los, cayendo sobre el mostrador
¡siempre se van por el fondo! SISTEMATICO. - Cebar el de mármol que Fidias (enton­
Y un nadador que en lo hondo mate con algún sistema. ces no había Laviere Vitaca y
se ha metido en andurriales el otro) construía en la antigua
y al dimostrar lo que vale ^ SITIO. — Contestar afirma­ Grecia.
lo ansí bien sentao tivamente al hermano de la vie­
qu’es pal agua cual pescao¡ ja- A SODOMA. —Antigua ciudad
si no lo sacan no sale! de Palestina donde se llevaba a
SOBORNABLE. - Que tie­ cabo la Semana Criolla de en­
Unos pocos con coraje ne cualidades intelectuales co­ tonces. Dios la destruyó porque
justifican su inclusión, mo para ingresar a la Soborna los gauchos convirtieron la do­
pa menguar el papelón de París. ma en un verdadero relajo.
dr los toros en el viaje.
Se dice que hubo relaje
al elegir esos tales;
mas yo me consuelo V males
y a mi saber me le atraco
y paso cual chancho flaco
Soñando con los maizales.

Este Uruguay es sin par


pa tuito bicho viviente
porque teniendo buen diente
minea falta que mascar. URUGUAY 772
C A SI C I U D A D E I A
Está de moda el viajar TEI EF. 8 8 4 - 9 3
de arriba, sigurmiente, TASAMOS BIEN SU VIEJO RECEPTOR CO N SU LTEN O S
y aún no comprendo que hay
[ gente
que grita que da hasta grima, + * * * * * * * ■ * * ★ ☆ ★ * * ★ * * #
porque el gauchaje se arrima
como hacer saltar la banca, lo hace con el ojo abierto.
para él Sol que más caliente.
y si el Destino lo estanca Tero de àura les alvierto
mostrándole mala cara, que yo me meto en el tarro;
La gente se está avivando eyos marchati entre varas y en otra Olimpiada agarro
está demás el decir, pero echaos en la retranca. viaje aunque me digan colo,
y hay gaucho capaz de dir Tuito el mundo se echa a muerto porque soy pa/ Water-polo
pa’delante, riculando. y boynrtlo en la corriente: igual que chancho pal barro.
Tuitos pasan calculando si se muere de repente REGU STIANO REGUSTO.
£ J íl SJLSLJL8j e J
G u an í Agradece por Nuestro Intermedio

EMOS recibido de París, no


H un niño como ustedes su­
pondrán y nosotros esperábamos,
o, s

sino una carta de nuestro redac­


tor corresponsal en Francia y “ho-
noris causa” por añadidura, Don - S® s
Alberto Guani. » wu.'s i
o „ — S S> c — :S
El Dr. Guani, que iniciara su
carrera periodística en los albores ®« »-s O.«
a *grjS O
\Q _cí >
• So.
/■ O «
de este siglo, y conoce por tanto Nm
'O 2M « ►.2."
bien el paño, agradece por nues­ « M*** J a,
tro intermedio (ustedes lo verán u * * « - *»0.
como es fácil comprobar en ia co­
pia fascimilar adjunta) a todos
..fsS'iil
7 c2 ®
| e’B qo.s
I
aquellos que han glosado su ac­
to jubilatorio (quedan, pues, avi­
sados, “El Día”, Don Juan An­
drés, “El Diario”, “El País”, ‘El | g O»
Debate”, San Ildefonso, y otras pu­ „ O » S ’go.
g£ § o
blicaciones más o menos foresta­
les.)
S“a¡3*" &
■§
Para todas aquellas personas 3 2^ » §u «2
que no poseen microscopio que -i rt CJ •*T—
? CT3 u ®
suponemos son los menos, trans­ Ò « Ow •* 8 S
'o O e is
cribimos en cuerpo diez, el texto -J fi MTi
de tan importante comunicación: a . o
>Z5« TJ O) <9
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____ ' o Jmw
o o e a u a, W
!
¿
“París, 21 de Julio £ - _ *¡9»i— < 18„s tA
O O
Señor Don Mario Ferreiro J -IJ-S s §
si
i Montevideo
Querido amigo: o t» «TI I
En usted agradezco a todos
aquellos que han glosado mi acto
jubilatorio con alegre simpatía.
Si, “partir —como dicen los fran­ tí
ceses—, e’ est mourir un p e u ...” Í3 J 3
jubilarse en ciertas circunstancias - S S - 5 ! “ '”
(me refiero a las espirituales) no ágí:H«4
tiene nada ni de triste, ni de nos­ ÍS! 3.
o. ®
tálgico, ni agónico. Es más bien
ponerse a volar fuera de la j&itla
oficial... “reprendre la liberté...”
y, la libertad, como decía Don
Quijote, es uno de los más pre­ 3 0 ©
ciosos dones que a los hombres
dieron los cielos.
A usted y a los ilustres escrito­
res de “Peloduro” mis afectuosos
recuerdos.
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V0 - F U O D U B O
me decía el Tirano Rozas, que se ha hecho amigo
y dice que Perón es un tirano, que los santos no
deberían quemarse nunca. Pero se quemardh. Y los
daños fueron de doscientos mil pesos. Decía Pepe
Botellas que si tres' santos quemados valen nada,
más que doscientos mil pesos, un día que se queme
este nosocomio cerebral, no dan ni dos vintenes por
nosotros. Y tengan en cuenta que nosotros jjo tene­
mos seguro. Si , sí. Ni nos pagan. Que fe-vamos
a hacer. Más vale santo que loco. Y vale poco. ¡Oy,
dios!
----------- O - —

Ahora está todo arreglado.'No tenemos el proble­


ma del dólar. Si Lelo Arroyo Torres ■(escribo Lelo
en lugar de Ledo por que me olvidé de hacer la D)
no les puede explicar a los diputados ese lio, que
no se preocupe por nosotros. Estamos de acuerdo. Lo
apoyamos de todo corazón y de todo bolsillo. No
precisamos dólares para nada. Para nada. Nos arre­
glamos con la moneda que acuñó ayer de tardecita
Polke, en un rinconcito, en combinación con Su­
perviene. Fueron ejemplares únicos, que lanzamos
a la circulación de inmediato. Todas las monedas

CqueUANDO terminó el desfile de la locomoción, me


dijo Cristóbal Colón, que era un disparate, por
no había desfilado la Niña, y habían pasado
pasaron fácilmente. Después cuando le tJÜisimos
dar la coima al gallego, nos bañaron, de burros que
son. Uno les hace fiduciario y ellos le tiran agua.
cuatrocientos ochenta y ocho camiones de la Ancap, ¡Salve uno al mundo de esta mañana! ¡Lelo tiene
que hacen creer que defiende al país, pero no lo- razón! ¡Viva Lelo!
comociona a nadie. Por que es cierto, como decía
Genta. Tomando un ómnibus, un auto, un camión,
una bicicleta, un carro, un caballo, una carreta, o
cualquier cosa de las que desfilaron, uno llega a
la casa. Más temprano o más tarde, pero llega. Y
tomando de la Ancap es cuando uno no llega. No HAY GUSTOS!
hay derecho a que se quieran copar la fiesta de
la locomoción, después de encopar a los asistente’'
Protesta general por unanimidad.
------O------
A Río de Janeiro no vamos ni yo, ni Isidrito,
ni Juan de Dios Filiberto, ni los demás. Parece
una excepción por que somos nosotros, y a nadie
le importa de nuestra vida. Pero es importante, por­
que yendo tantos, es un disparate que no nos lleven.
Haríamos un papel lucido, como decía Gerona, que
estaba comiendo la servilleta de López Testa, ene
apenas llegó pidió la bicicleta de Francois para ver
si ganaba. No hay derecho. En la ciudad de los
morros uno puede hacer otras cosas que aquí, en
la ciudad de los Batlle. Pero en fin. Nos han aban­
donado a nuestra propia suerte. Lo único que nos
queda como consuelo, son las regatas. El bote no
ha llegado. Pero igual. Flay tiempo hasta que llue­
va, por que si nó no tenemos ni río ni nada. Le
llamamos el Río de la Plata por que pasa frente a —Y qué le pasa a Justino? ¿Está de lutof
— No, tonta. Quiso hacerse un traje color
la pieza de Charlone. carne.
------O------

Cuando se quemó la iglesia de San Francisco. * * * '■ * « «


P E L O D U R O —

i

EL; M O S T R A D O R E N D E M O N I A D O
Y E A V E R D A D T R I L NT A D O R A
----------------------------------------------- Por M A R IU S -----------------------------------------------
1
E habían encajado un mostra­ carlos allí, con resultado negativo. saltar sobre su cubierta metálica.
L dor rarísimo. Mostrador “Fix”
“doublé”, como ustedes quie­
Y el hombre del mostrador, como
vendía muy buena caña y grappa
Y una falsa que rechazaron allí
fué cambiada como legítima en
ran llamarle, pero severo hasta desconocida por el gusto a grappa donde jamás había entrado la
más no poder. Con esa severidad que tenía, hacía su buen negocio plata en forma de moneda.
de amigo que quiere reventar al a base de pesos papel, sin que ja­ Y ahí fué cuando surgió la sos­
amigo. Moneda que sobre él tinti­ más ninguna otra suerte de espe­ pecha. La sospecha, más tarde
neaba, moneda que era devuelta, cie monetaria se le desbalace para comprobada, de que lo falsificado
acusada de falsedad total. el cajón de la timbreante registra­ era el mostrador.
Aquello llegó a alarmar a la dora. Y resultó cierto. Pero fué una
población flotante de aquella es­ Lo raro era que en el boliche legítima, porque la clientela, per­
quina. No hubo rueda donde no deenfrente aceptaban como bue­ dido aquel encanto, se olvidó has­
se comentara, con el consabido nas las monedas rechazadas. Allí ta del inolvidable sabor de la
aspaviento de ademanes, la segui­ el mostrador las aceptaba por el grappa.
dilla de los que iban a beber pa­ tintineo a plata que despedían al M ARIUS
gando con monedas falsas.
Se llegó a suponer, por parte
de la seccional respectiva — que
diría Durante, — que una plaga
numerosa de monederos falsos ha­
bía sentado, no sus reales, sino
sus1 pesos, por aquel barrio hasta
SE EXPLI
entonces tan ajeno a semejantes
manejos.
Los comentarios y las detectives-
cas andanzas de los vigilantes y los
Sherlok Holmes de “poche”, imi­
tadores de aquel episodio de Pe-
trus, movieron la atención de la
floreciente barriada (como solía
llamarla el periódico local) ex­
tendiéndose luego por la ciudad,
en forma de persistente neblina
de comentarios.
Así fué como lejanísimos parro­
quianos venían a echar su mone­
da sobre el mostrador, que las re­
chazaba sistemático y serio. Todas,
las de a peso, la de cincuenta, laf
inocentes de veinte, con su trigui-
to a cuestas, resultaban falsas dq
toda falsedad al restallar sobH
^quel inexorable mostrador. Hu
bo quienes se enredaron en discn
siones que duraron meses, sir
conseguir que el mostrador canta­
ra una buena entre tanta lluvií
de monedas.
Hombres de cinto repleto de
"fierros”, que suelen llamar aho­ — ¡En extraño! Veo durante el viaje, a unos lindos niños, y me acuer.
ra a los de a peso, venían a vol- do de mis niños. Veo una linda mujer, y me olvido de mi m u je r...
MLü" p f L O D U R O
los Partes de Don MENCHACA

★ UN ROBO UE BUEYES ★
_____________ Por SIMPLICIO BOSADILLA
"Puntas del Arrayán Chico, mallo 5 de 1896. la muerte donde los tales suelen cohavitar, o sea
Señor Juez de Paz de la Cétima Sesión bibir, como se dise en términos bulgares, antes de
don Endalecio Camejo. pasar a nuestra dina e insolbente custodia, modes­
Mano propia y urjente tia aparte.
Uustrísimo majistrado: ; Bolbiendo al ñudo sentral del asunto que mo-
tiba este amistoso parte, paso iso lato a espesifi-
carle que los predichos raspas ya sitados inflijieron
C OMO fiel serbidor de las leyes del páis que
ambos dos representamos en estas bastas la­ descaradamente las leyes de la onestidá, abijeatean-
titudes autoritarias, cumplo con el grato dever de do una yunta de rovustos y bien havidos bueyes ara­
embiarle por mano propia del sarjento Malaquías dores, cullos bueyes responden a los bonitos nom­
Ramos, y en calidá de ladrones combitos y confe­ bres de “Aparcero” y “Naranjo”, siendo el dañinea­
sos de robo inlícito, a los presos Ebaristo Albaiez, do nada menos que don Onorato Caldera, besino
mis conosido por el apodo de “Luna Llena” a cau­ de mucho arraigo y de basto capital pribado, que a
sa de la enaudita redondez del rostro de su cara, más de su dinidá moral de hombre a la antigua,
y un moreno que le disen “El Jeta , sin duda poi dueño de una estansia donde nunca faltan un buen
el enorme grosor que lusen allá en él las estre- catre y un churrasco gordo para la polecía, hostenta
midades de afuera de la boca, o sea los labios, co­ el mérito espesial de haver metido las paletas ante
mo se dise bulgalmente, y cullo berdadero nombre el Superior Govierno para que nombrara Gefe Po­
y apelatibo ni él mismo sabe, pues cuando el in­ lítico al atual Usía, Comandante don Anjelino Pi­
frascrito lo enterrogo para los efetos fileatoiios del mienta, cullo pelaje partidario y altas miras almi-
caso, dijo que en el almanaque había traído De­ nistratibas tenemos yo y usté el onor de compartir.
gollación, pero que después comenzaron a llamar­ Esperando que su jeneroso corazón no valle a
le Goyo, y al último terminaron nombrándolo Gre­ traisionarlo, hasiendo que se compadezca de los de-
gorio, y que como nunca fue bautizado ni escrito, licuentes y les aplique una condena de prisión ve-
y carece de padres, hermanos y otros desendientes ncbola en dentaria, olbidando que la yunta abijea-
sanguíneos, inora el apelatibo que le toco de na- teada es pátrimoño lijítimo de un hombre tan gau-
sencia, el cualo apelatibo tampoco le hiso falta como don Onorato, quedo, como siempre, dispues-
nunca jamás en la vida, porque a él Dios y todo cho, tan mano abierta y tan amigo de la autondá
el mundo lo conosen por “El Jeta”, apodo que por to a haserlc una piernita en cualisquier asunto ofi-
ser más corto sinifica una economía considerable de sial o particular que se cuadre, pues para alindar­
saliba. Bista esta defachatez del deponente, que es nos unos a otros estamos los cristianos en el mun­
un negro alfabético y de escasa capasidá celebral, do, y más cuando representamos al Govierno del
demás está el desirlo, este entachable serbidor de la páis, y, hablando criticamente, cuando renguearnos
patria se bió en la triste de la misma pata en lo
necesidá de tener que tocante a opinión.
aplicarle unos planchazos
A ruego del comisario don
libianos, para enceñarle a
Segundo Menchaca, por no
respetar la autoridá legal
por mí costituída, pero V o l a n d o h a c i a Río saber firmar:
sin machucarlo mucho, a
ESMERALDO ZIP ITR 1A *
fin de ebitar la maladi-
sencia besinal, tan afeta a Escribiente”
cargarnos la romana a u P. D. — No ie embío por
nosotros, los sacrificados
comisarios rurales, acha­
PE LO DU RO” el portador los cuerpos del
cándonos la autoría de delito m otibantes, o sean lo»
cuanta peladura o ras- bueyes, en razón de que lo»
ponsito lusen en su per­
ofrecerá el miércoles 22 del que lu­ mismos se me han traapa.
sonal idá corporal los de- pelado. Pero estes tranquila
licuentes que se onrran ce una versión especial y exclusiva nomás, ifue irán en cuant«
en ocupar nuestro hinjié- aparezcan. — VALE.
nico calabozo, siempre de “0 G i g a n t e que Apoliya”.
más acojedor y doscnte Por la copia:
que las aripucas de ma- SIMPLICIO BOSADILLA
* ES UNA LASTIMA, AMIGO... *
• Por pAUL fLLA— — ---------- —

M
ARCELO trepó aceleradamente
PEMANON (interrumpiendo) — A PEMANON —. . . . Y qué le voy a
las escaleras del ‘‘Central Mon­ ver joven perm ítam e... Dejémelo
go Banck” llevando entre sus hacer! Si fué otro ¿dónde lo voy a
v e r ... yo acomodo mis cosas a mi agarrar?... Tendré que trabajar sin
delgados dedos un portafolios... manera y al abrirlo me daré cuen­
ftlientras tanto, afuera, lo aguardaba ta . . . ganar durante ¡meses! Por favor, jo­
alguien que tras su disfraz de paisa­ ven, permítame... sabré resignar­
MARCELO — Es que si se da cuen­ me. . .
no, lo había visto entrar en el men­ ta va a ser una lástim a...
cionado lugar. La vestimenta de quien CONTT AMUSA — Lo qué?!! Por MARCELO — ...V e a am igo... a
aguardaba la salida de Marcelo era Mué?... mí me parece muy bien que sepa re.
tan perfecta y su maquillaje tan bien PEMANON — C la ro !!... A ver; a signarse... porque, ¿sabe?!... Uste­
logrado que el más diestro detective /e r- •• permítame que me fijo ...
no habría podido- advertirlo... pero des perdieron tiem po... porque yo...
MARCELO — Pero. . . va a ser una no fui al banco a retirar p la ta ... fui
nosotros tuvimos que averiguarlo pa­ lastima el haber perdido tiem po... a depositar!! ! . . .
ra que usted lo sepa, lector. . . era. . .
era el terrible y temido cuentista:
Contt Amusa!! ! . . .
En el interior del banco Marcelo
Se hallaba haciendo las operaciones
que le había encomendado su jefe de
fá b ric a ... y cuando hubo terminado
LLAMELE:
sa lió ... Dentro del bar que hay fren­
te a todos los bancos, Contt Amusa
“ TROCCOLI’S BANQUETES”
observaba los movimientos de su pre­ “ TROCCOLI HO U SE ”
sunta víctima y sus ojos casi esca­
paron de su órbita en el Instante en “ PALACIO TROCCOLI”
que viá en la puerta a Marcelo.
Marcelo, comenzó a caminar calle
abajo y ni bien había recorrido me­
dia cuadra, ‘‘el paisano” le cerró el
O SIMPLEMENTE:
paso y comenzó a hablarle...
— Mire joven yo sé que Vd. me vió “ LO D F T R n CC 0 L I ”
recoger este portafolios pero por fa­
v o r ... contiene plata y Vd. compren­
d a ... yo recién llego de afuera y la
necesito... o h ! ! ! . .. ahí llega el
dueño: no me delate por fa v o r... ire­
mos a medías...
En eso llega “el dueño del porta­
folios” (entre nosotros: “ Pemanón”
o sea el “secretario” de Contt Amu­
sa) que, simulando no conocerlo, di­
ce: — Por favor señores... acabo de
perder un portafolios con dinero, soy
cobrador y no me pertenece... Us­
tedes no lo vieron, por casualidad.
* Entonces el cuentista mostrando
I' que encontró” y abriéndolo para
que el otro vea lo que contiene le
pregunta:
' “-Este no es ¿verdad?...
— N o !... pero era parecido...
MARCELO — Todos los portafolios
Son ¡quales!
PEMANON — S í... pero quleno Vd. puede estar seguro de que bou Carmelo, “ gustoso
de* que reconocerla el mío entre
m ii. . y cordial’ como sus propios “ Canelones” le ofrecerá
Cf'N T T AMUSA — Si lo reconoce
er mil; más fácil entre dos (A mejor servicio de
M ' ~'n) Vd. jo ven ... muéstrele el
SU??- ' !!
MARCELO — Sí pero es q u e ...
(A »»*= altura Marcelo ya se "avivó”
BANQUETES
tle lo que Iba a suceder... Es­
taba 1 r o: cuando lo mostrara, un TROCCOLI: SAN JOSE 1065
manotó- y : zás! adiós portáfo. B A N Q U E T E S Y V I AN D A S
líos. .).
G 1 0 R I 0 S A ANCIANIDAD
H oras de A n sied ad
..______— —por EL HACHERO -------------—
STAMOS viviendo horas de ansiedad y misterio.
E Horas dramáticas, cargadas de expectativa, va­
cias de realidades. Estamos viviendo corno en
un pozo. Enorme, vacio, oscuro, donde los ojos, cie­
gos, tienen extrañas alucinaciones; donde el latir
sordo de los corazones tiene ecos horribles que gol­
pean las sienes.
En los ranchos, las viejas le encienden velas a
la Virgen y permanecen ante ella extáticas, poseí­
das. El cuadro es macabro.
Las comadres le pinchan los ojos al retrato de
Obdulio.
Las curanderas espolvorean con cenizas de mo­
chuelo, el pañuelo de Paz y venden uñas de lagarto
macho contra la yeta.
Vivimos un momento de dudas, de esperanzas,
de superstición, de angustias.
☆ ☆ ☆
A
SI me dibuja el panorama presente mi viejo ami-
..go el sordo mientras caminábamos lentamente
por los alrededores de “Los Aromos”.
Fuimos allá, porque el sordo, que es peñarolen-
te, no pudo soportar más esta incertitud. El quería
ver a sus muchachos, aunque fuera. Se conformaba
con verlos y recibir de sus labios una esperanza.
Nada más.
Pero ese pueblito desierto, ese silencio pesado
de sus jardines solitarios, despertó en el espíritu
de mi amigo un nuevo temor, una nueva, melanco­ Acaba de cumplir 80 años de su fructífera existencia e
estimado correligionario don Amatisto Bienvenido de
lía, un más acentuado pesimismo. Cerro. Vida ejemplar la suya, es de las que honran al
Hay un ambiente de tragedia; una calma pre­ País "y al Partido a que pertenece. Contaba solamente
ñada de malos augurios. ocho años de edad cuando empezó a destacarse por sus
De repente se oye allá lejos, una voz dolorida: grandes dotes de fumador. Poco después, y siendo un
"Es más amargo...o...ó adolescente apenas, se hizo hincha de Central al que
siguió en todas las alternativas de su vida sin desfalle,
el despertá...ar” cer jamás, aún ante los momentos de mayor adversidad
Después cruza un perro lanudo, sucio, cansado. pasando más tarde, — en el segundo decenio de este si­
—Lindo perro p’hacer dulce! glo_ a constituirse en un destacado y consecuente ra­
dioescucha. Al saludar a este encumbrado servidor del
Después, nada. Partido por su distinguida actuación civilista no podemos
☆ ☆ "fr ocultar nuestra profunda convicción de que se morirá de
L Sordo lleva apostados tantos paquetes de ciga­ un momento a otro, siguiendo la tradición impuesta a es­
E rros que, si gana, va a tener que instalar un salón
de lustrar.
tos casos, cuando la prensa festeja una ancianidad glo­
riosa como la suya. Vayan, pues, a sus deudos, nuestros
pésames más sentidos.
Pero no es eso lo que le preocupa. Hay tantas
habladurías en el ambiente que, por fuerza, lo ha­ - A - * * * * * * * * * * * * * * * * * *
cen a uno desconfiado. Cada casa; en fin, oculta figuras tenebrosas que
Se habla de compras y ventas de. jugadores, de hilvanan planes sombríos.
sobornos, de traiciones, de mil manejos urdidos en Cree eso y no hay manera de disuadirlo.
Más aún; es hasta peligroso intentarlo, porque
la sombra.
Y él, que es de otra época, cree firmemente en entonces se expone uno también a jer considerado
todo eso. enemigo o espío.
A través de cada puerta cree adivinar una cons­ ☆ ☆ ☆
piración. A través de cada ventana él vé como se fgSTE paseo nuestro es, más que tal una inves­
prepci'a uva pócima, un veneno, una atadura o una tigación.
salazón. Damos vueltas y vueltas y no nos apartamos cid
★ FUTBOL LITERARIO *

tados en grado sumo por la inadap­ rico, etc., a ese útil d e gom a forra»
IENTRAS el M inisterio de Ins­
M trucción Pública no adopte me­
didas que tiendan a solucionar
el alarm ante problema, de la desocu­
tación a las exigencias de la lucha,
que sindicaba el centro medio adver­
sario, carente de eficacia en la res­
do de cuero, que usan en el estadio»
Más adelante dice el tipo:
"Para que Progreso, corroborara en
pación intelectual, se irá dando casos ta y deficitariamente elocuente en las cifras esa primacía, se necesitó
como el que pasamos a tra n sc rib ii. el envío del útil a posiciones de avan­ llegar al primer cuarto de hora de la
levantado de la crónica deportiva, de zada”. i etapa decisiva, cuando Alberto Da*
“El P la ta ” al com entar, días pasa­ E stos albores, que viene a ser un a guer lució sus dotes de vulnerados”»
dos, el em pate (el título, básicam en­ especie de am anecer cacareado por No lo dice el cronista, pero supo*
te inglés le llam a “draw ” ) del parti­ el pito del referee, dió lugar, como nem os que Daguer h ab la sido expul.
do entre los team s de Racing y P ro­ el lector lo está viendo, a que se em­ sado de la cancha, por su inicuo p ro .
pezaran a emitir ataques, en un a lu ­ ceder. Y un poco m ás adelante (a vefr
greso: cha que correspondería sin duda a la
“ Racing y Progreso protagonizaron los del medio, córranse!') sigue di»
m ism a emisión (curso legal de la A.
un partido cuya característica pri­ Ú. de F.) bajo el contralor de u n sín­ eiendo este im ponderable estilista:
mordial radicó en el afán indeclina­ dico que como se ve era el centro “ ...deparando esto, instantes emo.
ble que derrocharon las veintidós pie­ medio adversario, el cual, carente de tívos al obligar constantemente a la
zas, en procura de adjudicarse los eficacia en la resta, se m ostro ta n visita, que cedió posiciones cuando
puntos”. deficitariamente elocuente en el en­ Flores en último recurso manoteó el
E sto es em pezar a decir las cosas vío del útil, como superávitm ente m a­ esférico dentro de la zona vital, re.
con academ ia, y con un indeclinable caneadores, sqrnos todos los que lla­ poetándole ello a Racing, la niveliza.
afán de levantar el nivel literario de mamos hall, pelota, peseadilla, esfé­
clon ecuánime del tanteador”.
“deportes” donde se suele dar, tan
sin gracia como escuetam ente, la fría A porte literario que nos librará, efll
inform ación objetiva. El cronista, ★ A A ' f r T A á ☆ ★ ’¿r ☆ A adelante de la vulgar expresión da
pues, sigue en poder de la pelota lite­ “penal” con que los cronistas corrien.
raria, digamos asi, y nos hace este tes definen la infracción com etida
bellísimo pase de cuchara: dentro del áre a o, diríamos, contagia,
“Tanto albiverdes como auri-rojos, dos del estilo del colega, en esa zona
acumularon virtudes de idéntica si­ que m arcan los aledaños del arco.
militud, que se materializaron en esos Y term inam os, volviendo a lo del
guarismos que señalan en el epílogo, principio. H e aquí un escritor cuya
“sumas ¡guales”. pluma se está sobrando en la faena
Cerrado con tal virtuosism o el ba- de rela tar un vulgar m atch de foofc.
lancet'e inform ativo, el cronista se ball. Secco E llau ri tiene el deber de!
hace nuevam ente de la bol para con­ ofrecer m ejor destino a estos intelec.
tarnos el desarrollo de las. acciones:
tuates refugiados en las crónicas de.
“ Desde sus albores el encuentro
adquirió un ritmo ágil y veloz, inci­ portivas.
diendo en ello, aparte de la virtud P ero y a sabemos como son los m i.
mencionada, la excelente disposición nistros. Hablamos, decimos, gritam os,
del árbitro en el sentido de no retar­ pero no nos dan “ útil”, como diría
dar las ejecuciones de sus fallos. Pro­ este malogrado escritor. O sea, pelo,
greso, sin necesidad de preámbulos, ta, como decimos nosotros.
comenzó a emitir sus ataques, facili­

♦ ☆ ★ ☆ ★ i r * * * * * * * * * * * * * * ' * * * * * * * * * * * * * * * * * * *

lugar donde se alojan los jugadores. Es una manio­ ción, se hunde en la casa, para aparecer de nuevo,
bra del sordo. enseguida.
Realmente, es una situación extraña.
Cae la noche y empieza a inquietarme la idea Sale un hombre. Cruza la calle con esc baso
de que mi socio resuelva quedarse allí para seguir nervioso de quien va a cometer un delito. I i/rlva
de cerca todos los movimientos del enemigo, ahora a cerciorarse de que nadie lo observa y, ya seguro
favorecido por la oscuridad. de que está solo, descarga una lata de basura en
Estaba en eso y se lo dije,' cuando Sigilosamente el medio del camino.
se abre una puerta y asoma una cabeza que escu­
driña la noche con recelo y misterio. ☆ ☆ ☆
O sentí que el sordo desfallecía como \i <le un
Mi socio me dá un manotón obligándome a pe­
garme a un tejido cubierto de enredaderas. El hace Y solo golpe le hubieran tronchado sus más (¡uni­
das ilusioi
lo propio.
La cabeza misteriosa, hecha su primera explora­ , I II ICIII lio
m o u u M » - i
B E C A S DE LA “CAMARICO EONDATION"
5. ser¡be ZOILO CAMARCO -
E VISTO por las fotografías to; el tratamiento de empachos, ras: embriaguez, desacatos, hábiles
H que salen en los diarios que
muy a menudo van médicos de
fracturas, venceduras, quebradu­ interrogatorios, cambios de ideas,
ras y cerraduras de heridas; los malentendidos, diferencias racis­
nuestro país en uso de becas- a pronósticos y montas para la reu­ tas, políticas y futbolísticas.
perfeccionarse a Norte América. nión del dom ingo... ¡perdón!: Tercera mitad: Estudio de la
Me parece que debemos respon­ los pronósticos y evolución de los sangre. Subgrupos y sus grupos:
der a esta gentileza con actos santiguados, maleficios, desgarro­ sangre de horchata, sangre azul,
iguales. Yo creo que sería muy nes, ntalpisares y recaldaduras ya sangre en el ojo, sangre cruzada,
criticable egoísmo de mi parte — de huesos ya de tendón. Los cur­ sangre y arena (en tecnicolor), ven­
del que yo mismo no podría de­ sos, si no llueve, durarán un año, ganza y sangre (de terror). —Exá­
fenderme— si me negara a que dividido en cuatro mitades y re­ menes humorales: el buen humor,
mis curaciones y diagnósticos se partidas así las asignaturas: el mal humor, el humor del dia­
difundieran fuera de mi país. Por Primer mitad: Estudio del idio­ blo, el humorismo. Análisis de al­
eso, y después de una larga con­ ma popular, usos del folklore na- gunos humoristas: Juan de Dios
versación tenida con la maestra ti vista, expresiones, juramentos, Peza, Juan de Dios Filiberto,
de la escuela de este pueblo, la maldiciones uso y abuso de la Campoamor. (Lectura obligatoria
educacionista Sta. Pretérita Per­ malapalabra. Texto: Berro Gar­ por lo menos de un pedazo de
fecta, he resuelto conceder becas cía. obra).
para ser aprovechadas por médi­ Segunda mitad: Estudio del es­ Cuarta mitad: Estudio de la
cos norteamericanos de las mis­ queleto, principalmente cabeza, conciencia. Diversos métodos: mi­
mas ciudades donde van los nues­ tronco y extremidades. Uso de los rándolo fijo al tipo, mirándole la
tros: Nueva York, Filadelfia, Cle­ huesos y abuso de los mismos. cartera, las ropas, el deber el ha­
veland, Detroit, Ford, Doblefae- Causas más frecuentes de fractu- ber. Diversas escuelas: Freud y
ton, Superluxg y otras ciudades
de nuestra gran hermana del Nor­
te.
Desde la fecha, pues, se crean
becas anuales en la The Camar-
go Fundation en The Velasqucz c o n g r u e n c ia s
City Corporation. Ya he hablado
con el vasco Zumelzularreta y en
la fonda y pensión de su propie­ A este punto, al salir de la timba, El fideero sólo iba al cine a ver
dad se le daría hospedaje a los be­ lo siguió la policía. E ra un punto y películas de corto metraje: le gusta,,
carios. La ropa blanca debe ser seguido. , ban las “cintltas”.
por su cuenta, así como los chi-
El nuevo rico mandó hacer en su
clets y otros extras. jardín un reloj de sol, pero con som­
Me parece bien eso de agradar al
prójimo, p e r o ... ¿por qué no empie.
Se necesita para optar a la be­ brilla. za el prójimo prim ero?
ca ser menor de 40 años porque
Dígase lo que se diga, el ronquido
después de esa <edad el sujeto, es música de cám ara. Cuando aquel doble cinematográ­
mismo letrado, es como matungo fico rompió su papel, el director ds
endurecido y ya no agarra tro­ Aquel hombre se dedicaba a las la película le dijo: Este papeT se do­
te nuevo. Las becas serán por un operaciones de bolsa: vendía can­ bla, pero no se rompe.
guros.
año si el tipo se aguanta con los
mosquitos y el agua de este pue­ La cebra es un caballo que se sen-
E rase que era un príncipe encan­
blo. Podrá concurrir a mi cón­ tado. (Encantado de la vida q*e lle­ t§ en un banco de plaza recién pim.
tado.
sul t? : ' a ver, es decir objetivar, vaba).
es dvA.i, -char una ojeada, a los Un jugador est.aba tan cansado de Un tuerto ve más que uno porqu»
dif .»i casos que por allí cir­ la vida que terminó haciéndose un nosotros no le encontramos más qu#
culan na adía en procura de mi solitario. un ojo y el nos ve dos.
ciencia, y conciencia. Fiarán así la
clínica y la policlínica del mal cíaA porqueaquel herrero lo detuvo la poli­
siem pre andaba fraguan­
Se conoce el caso de una pobre mu­
jer: estaba ahogándose y la salvó a
de ojo, la bichadura, el malasien- do algún “golpe”. nado.
/
Camargo. Diferencias entre yo y
él, entre yo el superyó, entre yo HAEDO EN EL V A TIC A N O
y vos, vos y él, entre yo y yo mis­
mo, el yo, mi, me, conmigo y tú,
ti, te, consigo. Ejercicios obligato­
rios de yoyó.
***
La parte prática de este curso
se dictará en mi consultorio clíni­
co sito frente a la plaza de Vclaz-
quez pared por medio con la pe­
luquería de Perdomo. La parte
teórica de desarrollará en la boti­
ca del finao Peñalva que ahora re­
gentea mi hija mayor idónea en
botica. Allí entre cueros de lagar­
tos, dientes de víboras, sanguijue­
las y otras yerbas se dará el curso
teórico. No hay todavía cursos de
Seminario porque los curas no
han instalado todavía ninguno en
este pueblo.
Terminados los cursos teórico-
prácticos y también los práctico-
teóricos, la The Camargo Funda­
ro n le hará dar al becario un via­
je por todo el país visitando cu­
randeros, adivinas, echadoras de
cartas, madresmarías y padresvilas. No se trata de una escena teatral de ópera. Es Haedo en el Vaticano ro­
Finalmente visitará el Hospital de deado de un Interesante coro, no sabemos si al salir o al entrar porque nos­
Clínicas, para ver gratis un parti­ otros nunca estuvimos allí.
do de fútbol.
Va por cuenta de la The Camar­
go Fandation la cama y comida
del becario. Este se pagará el la­ Hay que Saber Quién es Quién
vado y planchado, café, extras y
propinas. No se dan divisas. Las
divisas pueden volver a traer di­ (Diccionario de personalidades BALSAN, Carlos. De Peñarol,
ferencias políticas y el becario ne­ más o menos “self made man” Habla por radio y también en la
cesita tranquilidad para estudiar compilado por Inocencio Ga- sede, en el palco oficial, en la
la ciencia que profesa. llup. Copyrright 1946.47-48. esquina, en la Tribuna Popular,
Third Edition). ---------------------- en la casa, en el tranvía, en Sueños
Las solicitudes para las becas
deben dirigirse a Velazquez, a y en todo. Habla y habla. Le di­
nombre del Consejo Directivo de BADU, Augusto César. Aboga­ cen Don Carlos algunos. Otros le
la Eundation, integrado por el Se­ do. Fué personaje en la época-de dicen xjkhg! kjjgftü hjgkjkjkjkjkj!
ñor Comisario de la localidad, la Dictadura de Terra. Ex Minis­ - -0

Don Ruperto Cañizas, el Presi­ tro. Cultivaba la elegancia de los BALZO, Hugo. Es el Nibio Ma­
dente de la Junta Auxiliar y co­ griegos y tenía la desaprensión de rino Bellini del mutilo. Ha reco­
propietario cíe la Carnicería de la Petronio cruzada con un poco de rrido los continentes, no con su
plaza Don Transfiguración Perdo­ la expresión romana de Nerón. Se piano a cuestas sino con su músi­
mo, y el Agrónomo regional e divertía mandando amigos a la Is­ ca en ristre. Uruguayo, petizo, gor-
inspector de fa Ancap Don Ma­ la de Flores, y esperaba los días dito y pelado. Se diferencia d«
merto Acuña. que había tormenta, por «fue se Pintin en que sabe tocar y siem­
imaginaba las que estarían pasan­ pre toca cosas escritas por oiroí
Estos señores decidirán entre do. Ahora vive, en plena juventud,
colegas como Beethoven, Bnch, y
los inscriptos. Si hay más de diez un sereno descanso que le viene
antes, cuando acompañaba al pla­
se harán dos series, yendo a la bien al país que le vino bien a
no Jos conciertos de la «'ñora Mif-
final los dos primeros de cada se­ él. ller, tocaba vidalitas y alguna quf
rie. Hay medallas hasta el tercero. 0
- -
otra composición de Canino IJp.
ESCENAS

PRE
CLASICAS

— Míralo si no es un
amor este maridito mío!
Viene de sacar las en.
tradaa para el clásico.

*■*★ *★ ☆ *☆ ■*

EL PROXIMO NUMERO DE

PELO D U RO
___ ¡___^ _____ ISS3BS5 ...................................... . ......... .'.5SBS

A parecerá el M iércoles 2 2 d e S e tiem b re e n


ver d el 15 C o m o C orresp ond ería, D eb id o
a l V i a í e d e N u e s t r o D ir e c t o r a R í o

RESERVE SU EJEMPLAR
¡AJO! por RAPP
Una señora dama que en procura
los otros días jué de un verdulero,
tratando de surtirse con esmero
de lo que el vitlgo da en llamar verdura
escuchó al proveedor que, caradura
le decía con tono algo chancero:
“No hay ajos ni cebollas, doña, pero
tampoco va a llorar, esté, segura”.
Ante lo cual, mostrando su fiereza,
la dama al verdulero en la cabeza
le dió con un fregón de limpiar ollas.
Y olvidando de pronto la escasez,
la obsequió el verdulero —¡hombre soez!—
con varias ristras de ajos y cebollas.
-■-Estoy escuchando las olimpíadas de Lon­
dres, ¿sabes? Porque resulta que mi radio es
RAPP tan ordinaria que trae las noticias atrasadas.

M o n te v id e o en
el A ño 2.000
N
OS vemos en la obligación de sus­
pender esta sección por cuanto el
acreditado Observatorio Flama-
rión de Mercedes nos comunica que
tras pacientes investigaciones en las
manchas del sol (hors tintorería) es
de su autorizada opinión afirmar que
no va a haber año dos mil; que del PARA PRACTICAR Y
1999 se salteará al año 2001.
De manera que de confirmarse es­
ESTUDIAR EN SU C A S A
te autorizado pronóstico, nuestra sec­ Nuestros alumnos reciben GRATIS TO-
ción desde el próximo número se lla­ DO EL MATERIAL Indispensable para
mará “ M O N T E V I D E O EN EL realizar una práctica suma.
AÑO 2001”. • ente provechosa. El motor
Queda hecha la aclaración que mar. de un cilindro, herramientas
ea la ley. para el mismo y las
valiosas lecciones
enviadas, q u e d a n de
MUY PRONTO propiedad del alumno
Vd. será un Técnico Moderno
Los cursos del Instituto Americano de Motores (por correspondencia)
aparecerá son completos y únicos en el MUNDO, que TáíATAN la PRACTICA
en forma PERFECTA, respondiendo a fe MODERNA TECNICA de la
HORA PRESENTE, para ser un PERFECTO TECNICO - MECANICO.
ATILIO PI Grande S O L I C I T E I N F O R M E S HOY M I S M O

« p flo r D ire c to r d e l
★ IN S T IT U T O A M E R IC A N O D E M O T O R E S
F ilia l U R U G U A Y : A ndes 1230. M o n tev id eo
La cam paña com pleta „ K « é 5°-le Q u ie ra r e m itir m e a v u e lta d e c o rre o , G R A T IS
Y S IN C O M PR O M ISO A LG U N O D E M I PA RTÍ.', su Folleto
U n c o n s e jo q u e p u e d e s ig n if ic a r s u p o r v e n ir ” .
4 e l gran p i l o t o en
NOMBRE ...........................................................................
f ila s de N a c io n a l CALLE ............................ ..........................................................................

LO CA LIDA D ......................- - - .................................. (P el. 19-LX-48)


V I E N D O FI LMAD EN L E E N O S A I R E S
Nuestro redactor PANCHO
TERAPIA, visita los sets
argentinos y nos da en esta
nota su impresión sobre la
filmación de una “Roda­
da” (1) de López Lagar.

A las 17 y 10 del día viernes


pasado, tuve la feliz idea de ir a
ver filmar a las galerías “Emelco”
de Buenos Aires, donde estaba yo
como de pasada. Se filmaba “El
Reloj de Amianto”, una pelícu­
la truculenta donde- actúa el ce­
lebrado galán Pedro López Lagar,
acompañado de la deliciosa actriz
Amelia Bence.
Cuando llegué, López Lagar es­
taba inclinado hacia una figura
que descansaba tranquilamente so­
bre un montón de diarios. (Vie­
jos).
El actor se le acercó, la tocó—
temblorosa su mano —y dijo:
—¡Muerta!
Una ráfaga de frío y un tem­
blor corrió por los presentes. (Que
eran como 17).
El director de la película gritó:
—Cierren esa puerta que nos va­
mos a morir todos de una pleu­
resía!
La puerta fué cerrada y todos B e liv G ra b le , se lla m a esta S rla . q u e fu é e n tr e v e r a d a po*
n u e stro 'c o rre sp o n sa l e x clu siv o en c u a lq u ie r p a rte , P a n c h o T e ra ­
dejaron de temblar. El Dire se di­ p ia. D ice P an c h o , q u e la e n c o n tró en B uenos A ires, p a se a n d o con
rigió a López: L i a in d u m e n ta ria , p o r F lo rid a y C o rrie n te s. L a llev o a u n b a r y
—¿Cómo dijo Yd.? le p re g u n tó : . . .. _
— ¿C u ál es su m a x im a a sp iració n ?
López Lagar, repitió, sin dejar — E l c ig a rrillo , d ijo ella.
de mirar con ojos azorados a la — ¿L e g u sta se r e s tre lla d e cine?
__¡ A y y y ... ñ a to . M uchísim o!
figura caída, que era nada menos — ¿E n to n ces, p o r q u é no a p re n d e ?
que una morocha fenomenalmen­ — P o rq u e m e alc a n z a con esto.
Y le v a n tó la s p ie rn a s co lo cá n d o las so b re la m esa. E l mozo del
te bonita: b a r, g ritó e n to n c e s, lig e ra m e n te d e so rie n ta d o :
—¡Muerta! __¡U n p a r de p ie rn a s con c a n e sú y u n c o rta d o sin p o llera,
—No puede ser —gritó el Direc­ mar<A hí se p ro d u jo el tu m u lto y dice n u e stro co -irre sp o n sa b le que
tor. ¡Corten.. . Corten! Eso no es­ n erd ió de v ista a B etty .
tá en el papel. La señorita Mar­
ta debe desvanecerse solamente y * * ☆ * ☆ ★ * ★ * * ★ * * * * ☆ ★ ☆ * * * ☆ ★ ☆ ★ ★
no morir. Hay que tener más
responsabilidad con lo que se ha­ pez Lagar, indicando los que es­ sentes se llevaron la mano izquier­
ce en el cine. No estamos cocinan­ taban bajo el cuerpo de Marta da a la boca, en el gesto de asom­
do choclos, señorita Marta! Scott, la bella corista yanqui con­ bro y miedo que indica el “Ma­
La señorita Marta prosiguió de­ tratada especialmente para “El nual del Buen Extra’', de Eladio
cididamente callada y caída. Reloj de Amianto”. — Y le juro Casinetti.
—En el papel está — argüyó Ló- que está muerta! Todos los pre- —¡Para eso se le paga a Vd. se-
1 2 —- P E L O D U R O
fíorita Scott? Para que se muera vio se arrepiente. (1) Hay -que conocer el lenguaje de
en medio de la filmación? ¡Leván­ —Yo haría una proposición — los sets. “Rodada” no quiere decir
tese Vd! ¡Está suspendida! dijo a su lado el asistente de direc­ que López Lagar- se haya venido al
—No está suspendida, está ción. En los próximos trece films suelo con caballo y todo. R odar n a
m uerta. . . — insistió López, ya a que hará nuestra empresa, deben film es “estar realizándolo”. El ca.
esta altura lívido como un arroz. aparecer mujeres muertas por di­ bailo, que generalm ente es el d irec.
—¡Maldita sea! — bufó el direc­ versas causas. ¿Y si aprovechamos tor, no rueda nunca. Más bien sa
tor. Habrá que introducir cam­ ¡rara filmar esas escenas antes que acomoda, cada vez más, en razón di­
bios en el libreto! ¡A ver, un li­ la señorita Scott deba ser entre­ rec ta a su acapacidad para el ma­
bretista acá, rápido! — (Presto, un gada a sus deudos? caneo.
utilero apretó un timbre azul.)
Se abrió una puerta y de la
puerta brotaron siete hombres M aravillo sas P á g in a s de un M úsico In m o rtal
despeinados y barbudos, con sen­
dos lápices en las diestras y sen­
dos cigarrillos en las siniestras...
caras.
"La Música es mi Vida"
(GLINKA)
—¡La señorita Scott ha cometi­
do la irresponsabilidad de morir­
se en medio de la filmación, con­
traviniendo así las cláusulas del
contrato. T ornen Vds., el libreto
y arréglenlo para que López La­
gar aparezca dándole cianuro en
lugar de soda, para que reaccio­
ne del golpe que le diera el chi­
no ladrón de relojes!
Los libretistas salieron corrien­
do con el libreto en mano de uno
de ellos. Medio minuto después
uno se asomó gritando:
-Tendremos que hacer que Ló­
pez Lagar en lugar del novio de
ella sea espía! De otro modo no
tendría causas para matarla!
El dire clamó:
_—No importa. Quizás sea un no­
vio con causas para el asesinato!
Y miró sombríamente en su tor­ S u p e rp ro d u c ció n S o v ié tica
no, produciendo un vértigo en
los presentes. López Lagar pali­ Ce A l H U SO P IC IlR fS
deció. Alguien dijo:
* * ¿r
—¡Con causas para matarla!
La hermosa señorita Scott esta­
ba sumamente sugestiva con su Desde mañana jueves en el
atavío de soiree y su imperturba­

Cine RENACIMIENTO
bilidad de cadáver. El dire la en­
caró, rugiéndole:
—¡No se mueva ahora! Vamos
a filmar la escena en que su no­

* * * * * * * * * * * * ☆ ★ ☆ ★ * * ☆ * ☆ *
LA ESCASEZ DE AJOS CEBOLLAS ES UNA
Y
PRUEBA DEL ADELANTO DE NUESTRA CULTURA
LA CANTERA *
NARRACION +
Per JUAN TARUGC

OSA más porfiada que el sor­ Lo único que faltaba era hacer la —¡Te hacés millonario!
Calegador.
do Milco, no he visto. Ni más
En una ocasión se re­
escritura y “poner” la cantera. Le
comunicó el hecho a Errasquín,
—Si, pero, la gente y la plata de
donde la saco?
sintió con el bolichero porque lo que se entusiasmó.Quedó mal c<*n —¡Vamos a medias. De cada pe­
contradecía en los apuntes de la Galera, porque éste le dijo que so me das dos reales!
libreta. Peor estuvo cuando por eso no podía hacerse, y que iban —¿Y la escritura?— argumenta­
salirse con la suya, casi se le pu­ a concluir, todos presos. “Eso lo ba Errasquín, simulando escribir,
drió una pierna. La misma lógica decís vos, le replicó, pero yo tengo con un dedo, sobre la tabla de la
la aplicaba a sus semejantes, co­ derecho, como todo oriental, a mi mesa.
mo se prueba en Chamuyo, que tierra.” Después desistió por falta —¡Epa! Con quién crés que es­
no sé que clase de enfermedad de finanzas, y debido a que el per­ tás tratando?
tenía, y él lo quiso curar con yer­ sonal contratado, Bachicha y el fi­ Finalmente se arreglaron. El sor­
ba carnicera. Esto que les voy a nado Erasmo, no se presentaron do Mileo llevó a Errasquín hasta
contar, ocurrió, más o menos, por falta de garantías. Así fué la cantera cuyas dimensiones esta­
cuando el finado Errasquín te­ que se la ofreció en venta a Erras­ ban señaladas con cañitas corona­
nía lechería. Errasquín era, para quín. Este, 4e principio no acep­ das por tiras de papel. Después,
aclarar, de los que comen el que­ tó, por ser cosa de rascar vinte­ Errasquín trajo puntas, macetas,
so con cáscara. Tan sucio andaba, nes. Más, el sordo estaba tan en­ y cinco individuos que comenza­
que de las solapas del saco, se le tusiasmado, que convenció a ron a escarbar el suelo de piedra.
podían, con un cuchillo afilado, Errasquín, y despertó, su siempre Pero bien dicen que el diablo
sacar lonjas de grasa. Lo que co­ atenta codicia. Después de largas nunca duerme. Se dió la casuali­
mía, puchero de pescado, no le deliberaciones, cerraron trato en dad que el chueco Ramos, que
costaba nada, porque todas las el bdliche “Pueblo de Cariño”. hacía dos años Errasquín lo había
tardes, cañas al hombro, bajaba Por el traspaso, Errasquín le da­ denunciado en la Junta porque
a la costa. Además de la lechería, ría diez pesos. andaba podando los árboles dé
tenía tres o cuatro casas alquila­ —¡Para llegar al nivel tenes co­ la calle por cuenta de él, pasara
das, aunque solía decir que era mo cien metros, por veinte de an­ por allí. Así fué, como a los tres
muy pobre. De la manera más días de iniciados los trabajos en la
cho, saca la cuenta!— gritaba el
inocente, lo hizo engayolar, (EL) sordo. cantera; y a la hora larga de que
el sordo Mileo. Para el sordo, las pasara el chueco, vinieron dos
tierras del Estado eran “de todos”; Errasquín mascaba un pucho guardias civiles, mándanos por un
lo único que se exigía era ser de chala y sudaba. señor oficial, y arrearon con todos
“ uruguayo puro” y tener con qué —Y si viene un torremote o no paia la comisaría.
alambrar, y trabajar, la parcela puedo ir tan abajo? Que si n o ...
elegida. Esta convicción la adqui­
rió, por trasmisión oral, <^e su
abuelo, muerto, cuando él conta­
ba seis, a los noventa años de
edad, que supo cuartear diligen­
cias, de Rocha a S*n Carlos, y oyó
mentar los tiempos en que Arti­
gas quiso entregar los campo?,
“realengos" a los gauchos. Come
muchos habrán visto, el costado
noreste del Cerro de Montevideo,
está careado por una serie de po­
zos, y canteras, abandonados. Una
tarde, el sordo, que volvía de un
entierro, y cortaba camino por el
Cerro, le vino la idea de la can­
tera. Eligió un pedazo lindo, jun­
to a la calle Cuba —buscando tam­
bién la comodidad del transporte.
| 4 w P f i t O D U B °
* Cirilo, el inolvidable Campbell*
en fin, que nunca nos ha fal­
tado la “sal del program a”, que
ahora prom ete estar condimen­
tada por m íster Randolph, el
inventor de las goleadas. . . en
Las Acacias.

El Embrujo de
las Camisetas
La historia es siempre la
mism.a viejo, como es el mis­
EL CLASICO mo mi sobretodo, pese a los
“dado - vuelta” de todos los
años . ..
D ehtro de 100 horas, con 10 minutos de tolerancia regla­ Tendremos huelga de sepul­
m entaria, se abrirá otra vez la tapa mágica del túnel del Esta­ tureros y cerveceros; habrán
dio y Veremos salir por él al inefable m ister Galloway, seguido aumentado el precio de las en­
por diez jugadores de fútbol y por Narciso Rivero, en medio de tradas justo cuando a la gente
la explosión vibrante de las tribunas, al grito de: ¡Peñarol... Pe- debierah pagarle para aguan­
ñarol!... ta r los partidos, pero el domin­
Después habrá un momento de tranquilidad, mientras los go, viejo, si no llevás el “cal­
cracks aurinegros se alinean frente a los fotógrafos, y casi en zador”, ¡entrarás al Estadio!
seguida será el nom bre de: ¡Nacional... Nacional!..., el que atro­ Es que la gente es “jaule­
nará el espacio, m ientras once blusas blancas y Aníbal Ciocca, ra ” . . . y los dirigentes lo sa­
pisan el verde pastito... Ese será el prólogo de unj nuevo clási­ ben.
co, repetido desde hace cerca de cincuenta años. Y el domingo tem pranito,
Como siempre, el espectáculo verdadero estará en la multi no habrá en el Estadio un cla-
tud, que desde temprano desbordará las inmensas tribunas, des­ rito ni para pegar un sello . , ,
pués de pagar tres pesos las entradas de cinco reales, mientras Los peñarolenses, en cierto
el almuerzo lo ha constituido un par de frankfurters, o acaso modo optimistas poque saben
media docena de sandwiches... que hay huelga de “peluque­
¿Pero qué importa? ros”, y aso inspira confian­
z a ...
Lo im portante es no perder ni un “m acramé” de Luis E r­ Los nacionalófilos, más des­
nesto, ni estar ausentes cuando Obdulio se adelante a “ patear” paciosos, tratarán de llegar
un foul cerca del área, m ientras se escucha volar hasta las mos­ cuando ya el excepcional “Bi­
cas que andan por el centro... gote” García, asome por el tú­
nel . . . Total, se dirán los hin­
chas de Nacional, “el espec­
táculo comienza cuando Atilio
llega . . . ”
La Sal del Programa cordar la “intoxicación con los
rabióles” y el “dopping” exce­ Y tendremos como siempre,
sivo que preparó con el café la más grande fiesta popular.
Es que la historia se repite, La que hace latir acelerada­
a través de los largos años que Athuel Velázquez, dos desgra­
cias que le ocurrieron a Peña- m ente los corazones, la que es
han transcurrido desde que los capaz de poner nervioso a Jo­
“ingleses locos” hicieron rodar rol: después, aquella seguidilla
de cuatro goles que, como un sé García, un suponer . . .
la prim era pelota, allá por P un­ Nosotros, deseando conocer
ta C a r r e t a s . . . molde, recibió Nacional desde
1935 a 1838... impresiones sobre el gran par*
Hemos tenido y hemos visto tido que se acerca, salimos a 1$
todo. De lo más i>U*vo, dt “KM6o for/^a
*««• mu», «iA1 quinquenio
_i* ae•»_
Calle para preguntarle a 14
m m a tm ta rt, tMjrqiKMI» Jl* $ Irieolowg pasando por lo d« g e n te qué le parece el c lá sic o .!
LA TARJETA DE VISITA
LA OPINION DEL PUEBLO
En Avenida Italia, cerca del de P ereyra y conocido de
Estadio, encontramos el prim e­ Paz . . . ”.
ro de la serie de “interviúva- — “ ¡Qué Paz ni qué Pereyra!
dos”. E ra un viejito simpático. Mire, usted sabe que en este
Lo abordamos. país, la gente busca cábalas
•—“ ¿Q¿ié tal amigo ¿Va al hasta en la sopa! Entonces, el
Estadio el domingo?” m artes para la “chica”, te for­
El hombre puso una cara m an el número con el score, y
m ás desagradable que una “pi­ ¡záz! a la cabeza! Y . . . ¿sa­
fia ” de Rivero . . . Pero en se­ be? .. El doble cero no sale
guida conitestó: nunca!”
— “¿Yo? ¡Jamás !Hoy en día, —Entonces . . . ¿usted? . . ”
m i amigo, no se vé fútbol. ¡Eso —“S í . . . ssss . . . yo llevo
es una parodia !Y un “acha­ juego! ¿Le apunto algo?”
q u e”, el precio de las entradas!
!Ah . . . mis tiempos!
¡El finadito Porte! Piendibe- Casi en- seguida, detuvimos Combine las letras que contie­
ni, nunca pudo pasarlo! a o tro : ne esta tarjeta, de modo que re­
— “Bueno, pero vea que el —“ ¡Qué cara de satisfacción, sulte el nombre y apellido de un
domingo juega Riephoff, que amigo! ¡Usted, ya tiene la en­ jugador de Peñarol.
es un maestro, y W álter Gómez trad a para el clásico!”. (La solución en la página 28)
y Míguez, y . . . ”. —“¿Está loco? Yo, no quie­
—“ ¡Nada, nada ¡Nosotros, ro líos. Además yo no veo na­ * ☆ ★ ☆ ★ ■ * * * * * * *
los de antes, los que vimos da!”
fútbol de verdad, no claudica­ — “Ah . . . ¡perdone! ¿Sufre
rem os jam ás!” de la vista?” • Hay que conservarse !
Aquí, a esta altu ra del repor­ — “No, señor, pero no quie­
ta je callejero, nuestro entre­ ro discusiones, ni dudas, yo no Atilio y el pibe Miguez, lucha­
vistado fué víctim a de un in­ me meto, yo no vi nada, señor!” rán por el balde de yerba.
oportuno estornudo. El tipo —“Pero usted . .. ¿usted
sacó entonces el pañuelo del quien es?” ☆
bolsillo y con él, cayó un pape- —“Yo soy linesman, señor!”
lito azulado, cuidadosamente • ¿Será o no será?
doblado.
Entonces, nos agachamos Ahora sí, podremos comprobar
instintivam ente, y se lo alcan­
zamos. Como, sin querer, el pa- ESCUCHE si realmente Oscar Miguez es un
gran centre forward, o, como di­
pelito se nos abrió en la mano,
tuvimos que decirle ruboro­ ría Fariña, si es apenas “una sen­
sos:
— “Tome, que la*va a per­
“El Circo Aéreo” sación” . ..

der. Es una entrada para la ☆


Olímpica . . . ”. ★
• La gran leyenda
TODAS LAS NOCHES .. .y cuando yo era chiquitito,
Una cuadra más al centro, aquella vez que la reserva de Na­
pasados al segundo: DE 21 a 24 cional le ganó a la de Peñarol. . .
—“E s t e ... d i g a ...
— “ ¿Quién? ¿Yo?”
—“Sí, usted. ¿Qué le parece ★ ☆
el partido del domingo?”
—“Mire, lo único que le di­
• Exposición
go, es que ojalá salgan cero a Y MARTES, JUEVES Y
cero . . . ” . Los tiempos han cambiado. Esta
“¿Cero a cero? Pero, ché, SABADO DE 15 a 17 vez Nacional expondrá el cuadro,
sin goles, ¡no hay emociónj pero jio al pintor.
Ah, ya caigo! Usted es amigo Es que Cándales, está en Italia,..
26 — P E L O D U R O
ROMPECABEZAS FUTBOLISTICO
7RANDES CONCURSOS
“PELODURO”
C O C K T A IL DL L E T R A S Las tres preguntas
de este número
En este cocktail de letras encontrarán los apellidos de diez Son las que van a continua­
punteros de O división y cinco zagueros de Nacional y cinco de ción:
Peñarol de 1932 en adelante.
— ¿Qué club uruguayo
Ejemplo: ZIOFAZ — FAZZIO venció en el año 1931 al
equipo húngaro U jpest
»Encontrar la solución de este Cocktail de Letras en 20 minu­ por 3 a 1 ?
tos, revela una rapidez mental mediana; en 15 minutos, buena, en
12 minutos o menos, excelente. ■ 2^ — ¿En qué año no se dispu­
tó la Copa Uruguaya?
(Véanse las soluciones en la página 2- I _______
— Nacional tuvo un punte­
1 TRIOSE t ro de nacionalidad
2 SIPON! 2 austriaca en prim era
3 BIBINAFA 3 división ¿Recuerda
4 DIVOESI 4 quién era?
5 MORODEP 5
6 ISLAEGAI 6
7 LILABLAV 7
8 NENAZERDH 8
9 DINORAL *9 • Torre de Babel
10 OLGALUB 10
11 NAVISACES 11 En el clásico del fútbol urugua­
12 TINADESIGU 12 yo, intervendrán argentinos, italia­
13 AVENACEZ 13 nos, paraguayos, brasileños, un
14 c a R l o s g o d ín 14 inglés. . . en una palabra, que pa­
15 RADARAB 15 ra dentro de poco, en la cancha
16 FLITCHEF 16 se necesitará un intérprete!
17 OROFLI 17
18 ARABERC 18 ★ ☆ ★ ☆ ★ * * ■ * * * * ■ * *
19 SELMARO 19
20 LILACAD 20

• ¿Qué hará Castro? alentar a Schiaffino gritándole


“¡Fuerza, Pepe!”, a lo mejor em­
Este será un nuevo clásico para pieza a hacer fuerza José G arcía...
la historia. Ahora, que si fuera
para la historieta. . . entonces,
¡primero Mandrake! • ¡Peligro!

• Confusión Y si jugara Perico Colture, lo


mejor que podría hacer el zurdo
Lo peligroso para los hinchas Orlandi, es hacerse pintar la cara SOLUCION DE LAS PALABRAS
CRUZADAS DEL NUMERO
de Peñarol, es que cuando quieran de Zapirain... ANTERIOR

★ ☆ ★ ☆ ★ ☆ ★ ☆ ★ ☆ ★ ☆ ★ ☆ ★ ☆ ★ à * itic

Basándose en lo que ahora cuestan, es para sospechar


que los ajos deben tener dientes de oro
P E L O D U R O — 27
• Incógnita
t
Dicen que Rivero marcará a Escuche los comentarios y
Luis Ernesto Castro. . .
;Oué
C~v color de tiza utilizará?
I pronósticos de las Caire
• Bigote
La defensa de Peñarol tratará ras a cargo de
de que Atilio García "no m oje’
esta vez'. .. Vale decir, que trata­
rán de “secarlo” . . .
FORTUNATO
• E lV iejito
.. .y aquel espectador creyó que
a primera hora no jugaban más
las reservas, sino los teams de Ve­
En C X 50 Radio
jeranos, cuando vió salir a Alejan­
dro Morales. ..

L a C a p i t a l
NICOLA!
f u e un terror de los golcros,
j quién Peñarol bien pagó.. Todos los días de reunión
£e fué mal en Los Horneros.
a las 10 horas
£1 “mister” también lo probó...
Retornará en Platense, cañonero,
Q es que Nicola se acabó? • Sismo
- -------- -
Hace pocos días se registró un
SOLUCION DEL SOLUCION DE terremoto en Buenoe Aires. El de
Montevideo ya se acerca. . .
COCKTAIL DE LETRAS LA TARJETA El domingo se encontrarán Rie-
1 BRITOS Juan Antonio Schiaf[¡?w phofff y Gambetta. . .
2 PINTOS
3 FABBINI
4 VISIEDO Periodismo orientador, informativo, ágil
5 PERDOMO y responsable, hace:
6 IGLESIAS
7 VILLALBA
8
19
HERNANDEZ
ORLANDI
“Glosas Deportivas”
10 BURGALLO
11 CANAVESSI
12 DEAGUSTINI
13 CAZENAVE SIEMPRE A LAS 13 Horas
16 SCANDOGLIO
15 BARRADA
16 CHIFFLET
ly RIOLFO CX 28 RADIO IMPARCIAL DE
S CABRERA MONTEVIDEO
Í 9 MORALES \

Q GADILLÁ > o
LA ENCICLOPEDIA DEL FUTBOL EN
LAS P A L A B R A S C R U Z A D A S *
H O R I Z O N T A L E S

- N om bre de un cam peonato noc­


1. tu rn o en que intervienen B rasil,
A rgentina y U ruguay.
- C antidad de torneos por la Copa
7. U ruguaya que obtuvo R anipla
Juniors.
- Uno de los colores de la casaca de
8. un club que descendió a la serie
B hace pocos años y que volvió a
la división superior a la tém pora-
da siguiente.
- Ju g a d o r argentino que actuó en
10. D efensor hace unos años. Como
su apellido, se denom ina un ins­
trum ento m usical de teclado y
cuerdas m etálicas.
12. - Iniciales de un puntero derecho
qu e tuvo N acional.
- Iniciales de un jugador uruguayo
14. que luego de actuar en la A rgen­
tin a v arias tem poradas, jugó en
P eñarol h asta el año 1947.
- Iniciales de un jugador de D a­
15. nubio.
- Ju g a d o r que de Sud A m érica pa­
16. só a P eñarol. Su apellido es igual
al nom bre que se le dá a la asti­
lla resinosa, que se em plea como
antorcha.
- Iniciales de u n play er que jugó
17. en Bella V ista, en P eñ aro l y lo
sorprendió la g uerra en Europa.
- Así se le llam a a un club de p ri­
20. - m e ra división. A plícase ese nom ­
b re a la persona soñadora y ro ­
m ántica que lleva una vida de im ­
previsión y desorden.
— Club u ru g u ay o qu e fu é con quien Boca J u .
21. - P lay e r que brilló en R iver P ía te argentino y
que luego fué eficaz ju g ad o r en P eñarol. Com- * niors jugó su p rim er p artid o in tern acio n al en
binando las le tras de su apellido surge el nom ­ B uenos A ires. G anó el equipo m ontevideano
b re que se aplica al que era n a tu ra l de la an ­ por 2 a 1.
tig u a gran región de E uropa que com prendía lo — G u ard av alla d e u n equipo q u e intervino en u n
lo que hoy form a la F rancia, y la Saboya, la * torneo sudam ericano en M ontevideo. Sin salir
Suiza y toda la p arte de la A lem ania y de los cam peón, m antuvo su v alla in v icta p o r raro
P a'ses Bajos a orillas del Rin. m ilagro. P u ede decirse q ue en el últim o m atch
m antuvo u n duelo él sólo contra los cinco a r ­
22. - N om bre de un actual jugador de P eñarol. Le­
yéndolo a la inversa, se transform a en el nom ­ tilleros celestes.
b re de un cuadrúpedo indígena del A frica y del — Iniciales de u n ju g a d o r de D anubio.
S. O. del Asia.
— Iniciales de u n ex g u ard av alla de R am pla J u .
niors.
V E R T I C A L E S 13. — P rim e r capitán y delegado qu e tuvo N acional.
Si no lo recuerdan, les diremos que com binan,
do las letras de ese apellido se puede fo rm ar el
2 , — Es como u n a persona antipática. N adie lo p u e­ nom bre de la ciudad de D avid y de Jesús.
de pasar. A ctúa en un club de 1? división. Jg — Ex dirigente del Colegio de A rbitros. Con las
— A podo de un crack uruguayo que fué conside­ letras de su apellido puede form arse el nom bre
rado como uno de los m ás científicos jugadores que se aplica al docum ento bancario qu e orde­
que actuó en la A rgentina. na un pago.
4 — Ju g a d o r de D efensor, cuyo apellido es igual al 19. — A pellido de u n ju g ad o r de C entral.
de u n a enferm edad.

MUY PRONTO APARECERA ATILIO EL GRANDE


P U . Q D u. B Oj ~ Ä fl.

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Fidelidad "*iÿA;
en tos relatos
Responsabilidad er*
lös comentarios*

CX24 la VOZ d ir AIRE


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BUENO HASTA LA ULTIMA GOTA — DOS AMERICANOS


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Dos Figuras Veteranas en
los Grandes Encuentros

Aníbal Pan, el eflolsnts firrpuro


naclonolófllo y " f l Ruso" Rlep
phof, brillante Inslder aurlnrgro,
volverán a s#r slementos do oran
atracción en el próximo encuentro
«.Iónico. Dea modalidades! Paz, la
arrlndftd, la aobrlodad, la solven­
cia. Ulepphof, el hombre endemo­
niado, ti avieso, peligroso. Dos tem-
pri.intentos distintos. Pero dos
oracks.
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