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e L M A e o s O T O B O R D A

Perteneció Clímaco Soto Borda a un grupo Al' rememorar la obra del amigo y lamen-
que ha sido, a no dudarlo, la constancia más tar, por nosotros, una vez más su ausencia de-
firme y elevada de la cultura, el ingenio y la finitiva, no podemos menos de congratularnos,
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intelectualidad colombianas. En los días que por él, de que no le hubiera tocado actual' en el
precedieron a nuestra última contienda civil, medio contempol'áneo.
Bogotá pudo enseñorearse de contar con una Es tan intenso y ha sido tan rápido e incon-
agrupación de hombres dilectos, dedicados ex- tenible el cambio verificado en los últimos años
clusivamente a la producción espiritual, con en relación con el arte, las aspiraciones y 108
una constancia, un fervor y una eficacia que no productos del espíritu, que para una persona
será posible contemplar otra vez. como Soto Borda -toda gracia, sentimiento y
Julio Flórez, Alfonso Caro, Enrique Alval'cz espiritualidad-, la vida de nuestros días hubie-
Henao, Eduardo Echeverría, Rivas Frade, Al- ra sido una tortura sin ejemplo.
varez Jiménez, los Martínez Rivas, Luis María Actualmente el Arte, el Ensueño y el Inge-
Mora, Eduardo Ortega, Jorge Pombo, Diego nio son trajes pasados de moda que nadie echa
Uribe, Julio de Francisco y otros astros de pri- sobre sí por el temor de aparecer ridículo. En
mera magnitud, a cuyo alrededor giraban, costumbres, necesidades y perspectivas se ha
como satélites, unos cuantos admiradores y as- experimentado también un cambio tan radical
pirantes a intelectuales, constituían ese inolvi- que los que estamos presenciando esa trasfor-
dable cenáculo del buen decir y del mejor mación permanecemos atónitos.
pensar. El '1cntido de la vida es muy diferente Clel
Clímaco Soto Borda fue una de las figura::; de hace tres lustros. En todo domina un escep-
más atrayentes de ese círculo, pues a más de ' ticismo disolvente que no tiene otra mira que
ser el saleroso calemburista que todos conoce- el egoísmo desenfrenado. Un individualismo
mos, y de poseer en grado sumo gracia y do- mal entendido hace que se prescinda de todo
nosura, era al propio tiempo un poeta de sen- aquello que no produce utilidad inmediata. La
timiento hondo y de delicadeza inimitable. Para fórmula de la felicidad consiste en el disco de
muchos es desconocida esta faz de la persona- oro, y es éste el único ideal que se persigue y
lidad de Soto, ya que la m,aestría con que ma- anhela. El derl'umbamiento de lo que constituía
nejaba el chiste, la nota cómica y el epigrama las bases de las costumbres y los anhelos sanos,
ahogaba al sentimental sincero y convencido. ha sido de proporciones tan desmedidas que
Véase por ejemplo el siguiente soneto que hasta en 1 propio santuario del hogar se nota
revela un poeta de sentimiento profundo: la influcncia nefasta del medio ambiente actual.
El embate más rudo de las nuevas costum-
VIERNES SANTO bres lo ha recibido el Arte. La arquitectura
i Las tres! Un triste monte del Quind1o. de líneas ondulatorias y motivos elegantes ha
Negro el azuL .. ni un canto, ni un acento. sido sustituída por las aglomeraciones de ce-
Turbio el air'e y el sol su ojo sangriento
con pesar y rencor clava en el río.
mento y ferretería que constituyen el progreso
En este monte, Gólgota sombrío,
moderno. La estatuaria tiende a volverse ca-
me enclava un gran dolor y al son del viento ricatura corpórea. La poesía inspira sonrisas
grita mi Porvenir como un lamento: despectivas y se la reemplaza por conjuntos de
díme Pasado, ¿dónde está lo mío? palabras que tienen la apariencia externa de los
Cristo, ¡ cómo tu muerte revel'enciol versos, pero que carecen de armonía, de ritmo
todo aquí de la cumbre hasta el abismo
te rinde culto en lúgubre silencio ... y de sentido. Entre esos renglones triviales que
y en la ciudad, donde el placer anida, llenan hoy las páginas literarias de los diarios,
nos matan a los dos a un tiempo mismo solamente se encuentran disparates vulgares
el pueblo alegre ... y la mujer que olvida. y frases abstrusas.
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La música, el Arte divino, es la que ha sufri- consejo y su estímulo con decisión paternal.
do más lamentables a\'atarcs. Las "Sonatas", Era el primero en celebrar los donaires y espi-
los "Nocturnos", las "Sinfonías" y tantas otra.'\ l'itualidades ajenos, y, sobre todo, el afecto que
obras de los verdaderos maestros, sólo se es- guardaba por la autora de sus días -nobilísi-
cuchan como balbuceos tímidos. En ma matrona bogotana-, era un
cambio, por toda la redondez ejemplo vivo y permanente de
del planeta sientan s us rea- la selección de Sll espíritu .
les las estridencia::; del A ella dedicó muchos
chárleston y los acor- versos y artículos,
des del tango, esa entre los que recor-
danza de negros d a m o s las si-
que hoy día cons- guientes estro-
tituye la nota f a s , escritas
por excelencia en unet épo-
y triunfa lo ca en que to-
mismo en los dos los inte-
salones aris- lectuales de
t o c r á tices la capital es-
que en los t a b a n pen,
a n t r o s de die n t e s de
placer vigila- unos juegos
dos por la po- florales, cuyos
licía. preparativos se
L a pintura llevaban a efec-
con temporánea
4~o to con pompa inu-
sitada.
no necesita de di-
iJUjo y sus últimas Dijo así el inspirado
creaciones las forman
emplastos de color colocados A ti, que no me besas como Judas,
sobre el lienzo sin método ni ar- diosa ajena a las lúbricas pasiones,
monía. que de mi amor y de mi fe no dudas,
a ti, mi viejo sol, van mis canciones,
Los que conocimos con intimidad a
CLll\'IACO
Soto Borda y tuvimos ocasión de apre- S o T o Cada palabra tuya es una orquesta
ciar la bondad de su espíritu y la leal- BORDA que al perdón y al ensueño nos convida :
tad de sus afectos, comprendemos que en los juegos florales de mi vida.
tienes que ser la reina de la. fiesta,
en el actual medio ambiente ese astro
de luz propia hubiera sido un verdadero inac-
Para Soto Borda, doña Magdalena constituía
tual, un contrasenLido permanente, ya que en
el centro primordial de su vida. Su amor por
estos momentos se desconocen la emoción del
lla era no sólo filial, pues tenía mucho de frlJ,-
sentimiento y la emoción intelectual.
terno y no poco de compañerismo. Uno y otra
Clímaco, bajo la aparente máscara de una se complementaban formando una pareja
despreocupación elegante, era un espíritu no- irreemplazable donde se confundían estrecha-
ble, de exquisita sensibilidad que abrigaba sen- mente el amor, el afecto, el cariño y la más
timientos e ideas llenos de benevolencia. desinteresada amistad.
Amigo inmejorable, sabía corresponder al La producción de Clímaco fue numerosa y
afecto de los suyos con auténtica lealtad. Don- variada, descollando en todos los géneros que
dequiera que él veía un neófito que se iniciaba ensayó.
en el escabroso campo literario, le prestaba su Versos, cuentos, artículos variados, epigra-

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mas, obras teatrales y novelas, enriguecieron congresistas y ministros, que recopiló en el vo-
la literatura colombiana y llevaron por donde- lumen denominado "Siluetas parlamentarias".
quiera emociones, buen humor, sátira, donosu- Fundó y escribió activamente en "El Rayo X",
ra y espiritualidad. "El Carnaval", "Oriente" en unión de Julio Fló-
A raíz de la guerra de los mil días, el doctor rez, "La Barra" y "El Diluvio", periódicos que
Luis María Mora (Moratín) consen'aba como muestran en todas sus secciones, desde el edi-
recuerdo de la campaña una lezna, ensartada en torial hasta l~ gacetilla, la fina sal de su re-
un tapón de corcho . Esta genialidad de Mora- dactor.
tín se hizo popular entre el numeroso grupo
Fueron incontables los artículos y cuentos
de literatos y poetas, sus amigos, y alguno de
que escribió y que se hallan dispersos en dia-
ellos lanzó la idea de hacer un concurso de
rios y revistas. De algunos de ellos formó un
sonetos a la lezna del joven humanista.
pequeño volumen bautizado "Polvo y Ceniza".
Los sonetos presentados fueron muchos v
En sus últimos años dio a la estampa el libro
entre ellos había numerosos de mérito autén-
de poesías "Salpique de Versos" y la novela
tico. Obtuvo el premio el siguiente, obra de "Diana Cazadora", obra que es un modelo de
Soto Borda, que lo constituye una misiva di-
amenidad y buen humor donde pone de presen-
rigida por la lezna de Gallissot, un popular fran- te, para castigarlos con agudos pinchazos epi-
cés fabricante de calzado cuyos zapatos y
gramáticos, muchos de nuestros vicios sociales.
botas tenían en ese entonces gran aceptación,
Esta novela, a más de su mérito indiscutible,
tl la célebre lezna del doctor Mora:
es un exponente gráfico de la vida bogotana
Bella 'es tu suerte, hermana. Mi destino, qué ingrato. ele comienzos elel siglo, revela un espíritu de
Tú, vibras en la diestra del poeta-guerrero; observación Rin ejemplo y créa personajes que
yo, en puros cueros vivo, metida entre un zapato, gozan de vida propia.
de punta con la aguja y en manos de un obrero ...
Ninguna vaina tienes encima; no tu olIato Dejó inédita la novela "Jonás Benjumea",
insultan la vil Unta y el maloliente cuero; cuyos originales conservamos casi en su tota-
tú en el día descansas . .. Yo, solamente un rato, lidad. Por los dos capítulos de esta novela que
mientras está sobando la pita el zapatero. publica hoy SENDEROS se podrá colegir el
Dile a Mora que bote el corcho. Que contigo chispeante espíritu que en ella predomina.
le dé un piquete máximo a todo el gremio amigo
y que forme una pétíola con tu acero después. También queremos copiar en seguida algunas
El ave conduct.ora serás del pensamiento, poesías inédit;;¡s o poco conocidas de CIímaco, a
y a la cabeza ent.onces servirás de instrumento fin de que pueda apreciarse de manera palpa-
mientras que yo les sirvo de instrumento a los pies.
ble la mnltipl icidad de su ingenio.
Sus chistes, sus gracejos, sus frases y hasta Apréciese el donaire y fina picardía de la si-
su mismas actitudes eran como monedas de guiente:
cuño propio que nadie confundía y todos apre-
EL ESCANDALO
ciaban como oro de buena ley. La oportunidad
de sus ocurrencias y la rapidez de sus conceptos Cierta chica muy guapa,
eran proverbiales. Todos aquellos que querían de unos ocho años,
que un dicho o un epigrama circulara de boca confesaba sus culpas ante la reja
del padre Batíos.
en boca con la rapidez del relámpago, se lo La lista de sus faltas
acomodaban a Soto, y el efecto era mágico. era tan tonta,
Muchas de sus frases, ideas y epigramas han que la mano del padre, para absolverla
quedado consignadas en sus obras; pero, como ya estaba pronta.
Gran pecador sentfas'e
toda fórmula escrita, al pasar al papel han per- el franciscano
dido mucho de su oportunidad y gracia. Clíma- ante aquella alma pura, que se agitaba
co, como se dice de Osear Wilde, valía mucho bajo su mano.
De repente la chica,
más hablado que escrito. con voz sincera,
Se inició muy joven como escritor de sutil dijo: acúsome padre, de otro pecadO:
observación y fino ingenio en los bocetos sobre que soy hombrera!

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Sendero s

- jHombrCl'a! ¡Oh pecadora! siguiente soneto, t itulado con las tres cifras
Clamó el francisco. que representan un conocido específico :
Ya h ombrera, y ¡tan pequeña!, y puso cara
de basilisco.
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- Hombrera soy, seguía
la penitente; Carne de aVEntureros y malsines,
lo soy desde chiquita, con todo el mundo. carne a la vez del 9, el 1, 'el 4;
constantemente. pronto serás del mundo en el teatro
-Qué escándalo, ¡Dios mío!, Colombina de muchos Arlequines.
gritaba el padre. Ave errante de cenas y de cines,
Y esto lo ignoran todos, y hasta lo ignora tendrás, futura carne de anfiteatro,
la misma madre! <.ntre un vaso y un beso un "te idolatro"
-Mi madre no lo ignora ... y en el auto . . . chalinas y chelines.
- ¡Por J es ucristo ! ¡Qué tos!, qué lividez, sin voz, sin pelo,
-No lo ignora... al contrario, qU'e casi siempre los ojos como túneles; el fuerte
mamá me ha visto ... ris-ras que da al rajar el escalpelo ...
-¿ Y no hacen 'e n tu casa ¿Quién es aquella trágica vencida?
por reprenderte? -¿Aquélla? Es ella . . y va para la muerte
-Mientras más me regañan, padre, yo lo hago a dormir los insomnios de la vida.
mucho más fuerte.
- i Dios Santo !, siguió el fraile,
Al rememorar en estas líneas a un intelec-
¡ qué horror, qué exceso!
Hombrera esta criatura. Díme, chiquilla , tual de nombre imperecedero, queremos tam-
¿qué cosa es eso? bién consagrar un recuerdo al amigo bueno que
-¿Quiere saber mi padre alentó nuestros primeros pasos en la literatura.
lo que es hom brera?
Bájese la capucha y en un momento
El tuvo la benevolencia de corregir las inicia-
salga aquí afuera. ciones de nuestra pluma, y a pesar de la dis-
Salió el padre, queriendO salir al punto crepancia de edades, publicó en honor nuéstro
de sus asombros. páginas pletóricas de belleza y amabilidad, y
·-IHombrera. es hacer esto, dijo la chica ,
... y alzó los hombros. en todo momento nos distinguió con su afecto
firme, constante y desinteresado.
y nótese el fondo amargo, en medio de la J ORGE BAYONA P OSADA
c1onOFmra y gracia de la forma, que guarda el Bogotá, 1935.

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