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Doce Pasos

Índice y cronograma

INTRODUCCIÓN……………………………………………………………………….……………...…… 6
1. Qué es la Estimulación Temprana
2. Un Desarrollo Multifacético e Integral
3. Metodología de la Estimulación Temprana
4. Estimulación Temprana en Situaciones Especiales
5. Evaluación y Seguimiento en la Estimulación Temprana
6. Actividades al Aire Libre
7. Antes de Empezar…

PRIMER MES………………………………………………………………………………………………. 18
1. Contacto Piel con Piel
2. Contacto Visual
3. Música Relajante
4. Masaje Suave
5. Sonidos Naturales y Conversación
6. Movimientos y Estiramientos Suaves

SEGUNDO MES……………………………………………………………………………………………..48
1. Continuación de Actividades Previas
 Contacto Piel con Piel
 Música Relajante
 Masaje Suave
2. Volteo y Cambio de Posiciones
3. Canciones, Rimas y Discursos
4. Seguimiento Visual de Objetos
5. Estimulación Táctil

TERCER MES………………………………………………………………………………………………. 66
1. Continuación de Actividades Previas
 Volteo y Cambio de Posiciones
 Seguimiento Visual de Objetos
 Estimulación Táctil
2. Estimulación Facial e Interacción Social
3. Sonajeros y Juguetes con Sonidos
4. Conversaciones Bidireccionales Básicas

CUARTO MES……………………………………………………………………………………...………..81
1. Continuación de Actividades Previas
 Volteo y Cambio de Posiciones
 Estimulación Táctil
2. Juegos con Espejos
3. Juegos Avanzados de Estimulación Auditiva
4. Tiempo de Conversación y Lectura
5. Estimulación de la Motricidad Fina

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José M Pérez Navarro

QUINTO MES…………………………………………………………………………………………….. 100


1. Continuación de Actividades Previas
 Juegos con Espejos
 Tiempo de Conversación y Lectura
 Estimulación de la Motricidad Fina
2. Ejercicios de Rodamiento
3. Juegos de Imitación Simple
4. Nomenclatura de Objetos Simples

SEXTO MES…………………………………………………………………………………….………… 115


1. Continuación de Actividades Previas
 Ejercicios de Rodamiento
 Juegos de Imitación Simple
2. Juegos de Causa y Efecto
3. Juegos de Esconder y Mostrar
4. Conversaciones Interactivas

SÉPTIMO MES………………………………………………………………………………….……….. 129


1. Continuación de Actividades Previas
 Juegos de Causa y Efecto
 Conversaciones Interactivas
 Juegos de Esconder y Mostrar
2. Ejercicios de Gateo
3. Imitación Avanzada de Gestos y Sonidos
4. Juegos de Clasificación Simple
5. Nomenclatura Avanzada de Palabras

OCTAVO MES…………………………………………………………………………………….……… 148


1. Continuación de Actividades Previas
 Ejercicios de Gateo
 Nomenclatura Avanzada de Palabras
 Juegos de Clasificación Simple
 Conversaciones Interactivas
2. Estimulación de la Postura y el Equilibrio
3. Estimulación del Sentido del Humor
4. Estimulación de la Inteligencia Emocional

NOVENO MES………………………………………………………………………………….…...…… 163


1. Continuación de Actividades Previas
 Estimulación del Sentido del Humor
 Estimulación de la Inteligencia Emocional
2. Fomento de la Movilidad Independiente
3. Juegos de Imitación y Roles
4. Juegos de Encaje y Construcción
5. Juegos de Nomenclatura y Asociación

DÉCIMO MES………………………………………………………………………………...….………. 182


1. Continuación de Actividades Previas
 Juegos de Encaje y Construcción

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Doce Pasos

 Juegos de Nomenclatura y Asociación


 Juegos de Imitación y Roles
2. Juegos Avanzados de Clasificación
3. Juegos de Movilidad y Obstáculos
4. Juegos de Reconocimiento de Partes del Cuerpo
5. Estimulación de la Autonomía en la Alimentación

UNDÉCIMO MES……………………………………………………………………………….……..... 202


1. Continuación de Actividades Previas
 Estimulación de la Autonomía en la Alimentación
2. Juegos de Encaje y Resolución de Problemas
3. Estimulación del Caminar
4. Seguimiento de Instrucciones Complejas
5. Imitación de Actividades Cotidianas
6. Exploración Musical y Auditiva
7. Juegos de Emparejamiento y Asociación

DUODÉCIMO MES…………………………………………………………………………….….……. 230


1. Continuación de Actividades Previas
 Juegos de Encaje y Resolución de Problemas
 Estimulación del Caminar
 Seguimiento de Instrucciones Complejas
 Imitación de Acciones Cotidianas
 Exploración Musical y Auditiva
2. Juegos de Construcción y Equilibrio

CONCLUSIONES……………………………………………………….……………………..………… 237

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José M Pérez Navarro

7. Antes de Empezar (MUY IMPORTANTE)…


Antes de comenzar es necesario ser conscientes de una serie de aspectos clave:

Compromiso y Desafíos: Del Juego a la Maestría


La estimulación temprana, si bien para el bebé implica juegos y actividades
lúdicas, no se limita simplemente a jugar. Para el cuidador representa una tarea
exigente que demanda dedicación y esfuerzo. Es crucial que sea consciente de
que el proceso no será sencillo y que es probable que encuentre momentos de
frustración a lo largo del camino. Es importante aceptar que, en la mayoría de los
casos, los primeros intentos de realizar una actividad no saldrán según lo
planeado. Sin embargo, el manual es muy didáctico y con el tiempo logrará
dominar la implementación de las actividades; tras unos meses, se habrá
convertido en todo un experto/a en estimulación temprana. Es fundamental
evitar sentirse frustrado o mostrar enfado, ya que estas emociones pueden
transmitirse al bebé y complicar el proceso. La estimulación temprana es el
mejor regalo que se le puede ofrecer a un hijo/a. ¡Mucho ánimo!

Calidad sobre Cantidad


La estimulación temprana no consiste en aplicar una gran cantidad de
actividades de manera aleatoria, lo cual terminaría agotando tanto al bebé como
al cuidador. Más bien se trata de seleccionar y aplicar las actividades adecuadas,
aquellas basadas en evidencia científica que sabemos que son efectivas en
momentos específicos del desarrollo. Esto se hace siguiendo los principios de la
psicología del desarrollo infantil, asegurando así que las intervenciones sean
pertinentes y beneficiosas para el crecimiento y aprendizaje del niño/a.

Garantía de Éxito
El programa de estimulación temprana es efectivo, y se lo puedo garantizar con
total certeza. Esta afirmación no se basa en mi opinión personal, sino en los
cientos de estudios que han demostrado la eficacia de las actividades
seleccionadas. Puede estar seguro/a de que mediante la aplicación adecuada de
las actividades descritas en los siguientes capítulos potenciará de manera
significativa el desarrollo de su hijo/a en numerosos ámbitos.

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Doce Pasos

Desarrollo Holístico y Efecto Sinérgico


Todas las actividades propuestas son útiles. El cerebro se desarrolla de manera
holística. Así, la estimulación de áreas específicas mediante actividades
concretas induce un desarrollo global en el resto del cerebro. Este fenómeno es
lo que explica el efecto sinérgico observado con la aplicación de la estimulación
temprana, en el cual el beneficio final observado es mayor que la suma de los
beneficios individuales aportados por el conjunto de actividades. El programa
está diseñado para estimular diferentes áreas cerebrales de manera repetida con
actividades que han demostrado su eficacia en estudios científicos.

Flexibilidad, Adaptación y Personalización


Aunque el programa está estructurado cronológicamente y las actividades están
detalladamente descritas, para su correcta implementación es fundamental
reconocer que cada bebé es único. Por ello, se recomienda ajustar el programa a
las necesidades individuales de cada niño/a. Por ejemplo, si observamos que un
bebé completa una actividad con facilidad, podemos enfocarnos más en el resto
de actividades. Por otro lado, si al final del mes observamos que al bebé aún le
cuesta realizar alguna actividad, podemos extender su duración. Esto último no
debe ser motivo de preocupación. Al igual que los adultos, los bebés difieren en
sus preferencias, necesidades y habilidades. Ningún bebé se mostrará habilidoso
en todas las actividades: algunos mostrarán mayor habilidad en ciertos tipos de
actividades mientras que otros requerirán más trabajo en diferentes áreas. Es
importante trabajar tanto las debilidades como las fortalezas. Del mismo modo,
una actividad puede continuar realizándose de manera indefinida si resulta
placentera tanto para el bebé como para su cuidador.

Tiempo de Juego Libre y Necesidades Básicas


La crianza es un equilibrio delicado entre guiar y permitir, entre enseñar y
observar. En el afán de proporcionar lo mejor para sus hijos/as, algunos padres
pueden caer inadvertidamente en la trampa de la sobreestimulación, impulsados
por la motivación y el deseo de ver a sus hijos/as alcanzar su máximo potencial
desde muy temprana edad. Dejar tiempo para el juego libre es fundamental. El
descanso y el tiempo no estructurado son tan importantes como las actividades
de aprendizaje. El tiempo de inactividad permite a los niños/as descansar,
imaginar y recargar energía, lo que es vital para su salud física y mental, como lo
demuestra el hecho de que un recién nacido puede llegar a dormir hasta 20 horas
al día. La supervisión excesiva o la presión para alcanzar ciertos hitos puede
disminuir su autoestima y su capacidad para pensar y actuar de forma
independiente.

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PRIMER MES

El Desarrollo Psicomotor del Bebé Durante el Primer Mes


El desarrollo psicomotor durante el primer mes de vida del bebé es un periodo
crítico lleno de cambios y adaptaciones significativas. Este desarrollo abarca
tanto las capacidades motoras, que implican el movimiento y el control físico,
como las habilidades sensoriales y perceptivas que el bebé utiliza para
interactuar con su entorno.
Desde el nacimiento, el bebé posee reflejos innatos que son fundamentales para
su supervivencia y desarrollo. Según Piaget (1952), estos reflejos son parte de la
etapa sensoriomotora, que abarca desde el nacimiento hasta aproximadamente
los 2 años de edad. Durante las primeras semanas de vida destacan el reflejo de
succión, esencial para la alimentación, y el reflejo de agarre, que es la tendencia
a cerrar la mano y agarrar cualquier objeto que toque la palma. Investigaciones
recientes sugieren que estos reflejos no solo cumplen funciones biológicas
fundamentales, sino que también son precursores del aprendizaje
sensoriomotor (Feldman, 2015). Feldman destaca cómo las interacciones
tempranas y repetitivas comienzan a formar los cimientos para el desarrollo
cognitivo y emocional a través de estos reflejos.
A nivel motor, los movimientos del recién nacido son en gran medida
involuntarios o reflejos. Sin embargo, hacia el final del primer mes comenzamos
a ver una disminución de estos movimientos reflejos y un inicio gradual hacia el
control voluntario del movimiento, aunque este proceso es lento y se
desarrollará plenamente en los meses y años subsecuentes (Thelen, 1981). La
teoría de Thelen sobre el desarrollo motor propone que este no sigue solo una
secuencia fija, sino que es el resultado de la interacción entre múltiples sistemas
del cuerpo, la motivación del niño y el entorno. Diversos estudios
contemporáneos han seguido explorando la transición de movimientos reflejos

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Doce Pasos

a movimientos controlados voluntariamente. Iverson (2010) proporciona


evidencia de que el desarrollo motor en los bebés es un proceso integrado que
influencia y es influenciado por otras áreas del desarrollo, como la comunicación
y la interacción social. La investigación de Iverson subraya la importancia de un
entorno estimulante que fomente tanto la exploración motora como las
oportunidades de interacción social para apoyar este desarrollo integrado.
En el aspecto sensorial y perceptivo, los bebés ya son capaces de escuchar desde
el nacimiento y prefieren sonidos complejos como el habla humana a otros
sonidos (DeCasper & Fifer, 1980). La investigación sobre la preferencia de los
bebés por sonidos como el habla humana ha avanzado significativamente, con
estudios que muestran cómo esta preferencia facilita el aprendizaje temprano
del lenguaje y el desarrollo cognitivo (Kuhl, 2004). Kuhl propone que la
exposición a patrones de habla variados y enriquecedores en los primeros meses
de vida es fundamental para el desarrollo de habilidades lingüísticas complejas.
En cuanto a la visión del recién nacido es limitada, pero pueden ver objetos a una
distancia de aproximadamente 20 a 30 centímetros, lo que justamente
corresponde con la distancia entre el rostro de la madre y el bebé durante la
lactancia (Bushnell, 1982). Esta capacidad visual facilita el importante vínculo
temprano entre el bebé y sus cuidadores. Los bebés tienen una preferencia
innata por rostros humanos antes que otros estímulos visuales, un fenómeno que
Johnson y Morton (1991) denominaron "sesgo de configuración facial". Esta
preferencia por rostros humanos desempeña un papel importante en el
desarrollo temprano de las habilidades sociales y emocionales. Leppänen y
Nelson (2009) han investigado cómo la capacidad de los bebés para procesar
estímulos faciales afecta su desarrollo social y emocional, concluyendo que la
preferencia por rostros humanos y la capacidad para discernir expresiones
emocionales desenpeñan un papel fundamental en el aprendizaje social.
En cuanto al desarrollo emocional y social en el primer mes, aunque los bebés no
pueden comprender emociones complejas, responden de manera instintiva a la
comodidad y el cuidado. El llanto es su principal medio de comunicación, y
aunque al principio puede parecer indiferenciado, los cuidadores comienzan a
identificar diferentes tipos de llanto que indican hambre, dolor o necesidad de
atención (Brazelton, 1962). Esta interacción temprana es fundamental para el
desarrollo de un apego seguro, como describe la teoría del apego de Bowlby
(1969), sugiriendo que la calidad de la relación temprana con los cuidadores
tiene un impacto duradero en el desarrollo emocional y en las relaciones futuras.
En resumen, el primer mes de vida del bebé es un período crítico de desarrollo
psicomotor, sensorial y emocional. La investigación moderna destaca la
interconexión entre estos dominios de desarrollo, sugiriendo que un enfoque
integrado y receptivo en el cuidado de los recién nacidos es esencial para apoyar
su crecimiento y desarrollo óptimo. La comprensión de estos procesos complejos
continúa evolucionando, ofreciendo perspectivas más profundas sobre cómo los
bebés se adaptan y responden a su entorno desde el comienzo de la vida.

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Actividad 1: Contacto Piel con Piel

Objetivos
1. Fomentar el Vínculo Afectivo: Esta actividad principalmente estimula el
lazo emocional entre el bebé y sus padres a través del contacto directo.
Esta conexión es importante para el desarrollo emocional y social del
recién nacido.
2. Estimular la Regulación Térmica: Aprovechar la capacidad del cuerpo
humano para compartir calor, ayudando al bebé a mantener una
temperatura corporal estable, especialmente importante en los primeros
días de vida cuando aún están desarrollando la capacidad de regular su
temperatura.
3. Promover la Lactancia Materna: El contacto piel con piel es clave para
estimular los reflejos de succión del bebé, facilitando el inicio y el éxito de
la lactancia materna. Este contacto cercano también ayuda a incrementar
la producción de leche en la madre.
4. Estimular el Desarrollo Sensorial: Mediante el tacto, la audición y el
olfato, el bebé empieza a explorar el mundo. Escuchar la voz de sus padres
y sentir el calor de su piel son estímulos fundamentales para su desarrollo
sensorial.
5. Apoyar el Bienestar Psicológico: Reducir el estrés tanto en el bebé como
en los padres, promoviendo sentimientos de calma y seguridad. Esto es
crucial para el bienestar emocional y psicológico de toda la familia.

Materiales
• Manta Suave: Una manta ligera pero cálida para cubrir al bebé durante el
contacto piel con piel, asegurando que se mantenga a una temperatura
agradable sin sobrecalentarse.
• Ropa Cómoda para el Padre/Madre: Vestimenta que permita un fácil
acceso al pecho para facilitar el contacto piel con piel sin restricciones.
• Portabebés Suave (Opcional): Para momentos en los que el padre o la
madre necesiten tener las manos libres, pero quieran mantener el
contacto cercano con el bebé.
• Almohada de Apoyo (Opcional): Puede ser útil para proporcionar
comodidad adicional al adulto y al bebé durante periodos prolongados de
contacto piel con piel, especialmente en posiciones sentadas o reclinadas.

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Doce Pasos

Estos materiales, simples pero esenciales, contribuyen a crear una experiencia


de estimulación temprana positiva y confortable tanto para el bebé como para
los padres, enfocándose en el objetivo principal de fortalecer el vínculo afectivo
y apoyar el desarrollo saludable desde los primeros días de vida.

Descripción de la Actividad
El contacto piel con piel, conocido también como método canguro, es una técnica
de cuidado posnatal que ofrece múltiples beneficios tanto para el recién nacido
como para los padres, mejorando el vínculo afectivo, facilitando el inicio de la
lactancia materna y contribuyendo a la regulación térmica del bebé. Para
maximizar la efectividad de esta práctica, es importante crear un ambiente
tranquilo y cómodo, reduciendo al mínimo las distracciones y los ruidos
ambientales. Esto ayuda a que tanto el bebé como el padre o madre puedan
relajarse y disfrutar del momento de conexión profunda. Se puede alternar entre
los padres para realizar el contacto piel con piel, de manera que el bebé pueda
beneficiarse de la conexión con ambos. Además, aprovechar este tiempo para
hablarle cariñosamente al bebé o cantarle canciones de cuna puede estimular su
desarrollo auditivo y fortalecer el vínculo emocional. La voz de los padres,
familiar y reconfortante, es una de las primeras formas de comunicación que el
bebé reconocerá y responderá.
Es recomendable mantener la práctica del contacto piel con piel de forma regular
durante los primeros meses de vida, extendiendo la duración de las sesiones
conforme el bebé y los padres se sientan más cómodos con la actividad. No hay
un límite de tiempo estricto para cada sesión; sin embargo, es beneficioso
asegurar al menos unos minutos de contacto ininterrumpido. Durante este
tiempo, se puede observar y responder a las señales del bebé, como intentos de
buscar el pecho, lo que puede facilitar una lactancia materna exitosa.
Para aquellos momentos en que estar recostado no sea práctico, utilizar un
portabebés suave que permita el contacto piel con piel mientras se realizan otras
actividades puede ser una excelente alternativa. Elegir un portabebés adecuado
que soporte la posición vertical y mantenga al bebé seguro y cómodo contra el
pecho del portador, permite continuar con esta práctica incluso en movimiento.
La higiene también juega un papel importante; asegurarse de que tanto la piel
del bebé como la del padre o madre estén limpias antes de cada sesión de
contacto piel con piel contribuirá a un entorno saludable para el bebé. En días
más cálidos, es crucial monitorizar la temperatura del bebé para evitar el
sobrecalentamiento, ajustando la cantidad de ropa o mantas según sea necesario.
Finalmente, este tiempo de calidad juntos es también una oportunidad para que
los padres se sientan más empoderados y competentes en su nuevo rol,

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fomentando una actitud positiva hacia la crianza. El contacto piel con piel no solo
beneficia al recién nacido, sino que también promueve una recuperación más
rápida de la madre después del parto y reduce el riesgo de depresión posparto.
En resumen, incorporar esta práctica en la rutina diaria es una forma maravillosa
de nutrir el desarrollo temprano del bebé y fortalecer los lazos familiares desde
el principio.

Frecuencia Recomendada
Para maximizar los beneficios del contacto piel con piel se recomienda realizar
esta práctica de manera regular desde el momento del nacimiento. Idealmente,
debería comenzarse inmediatamente después del parto, continuando durante
las primeras horas y días de vida del bebé. Después de este periodo inicial es
beneficioso mantener el contacto piel con piel varias veces al día durante los
primeros meses de vida. Aunque no hay una duración específica obligatoria para
cada sesión, sesiones de al menos 20 a 30 minutos pueden ser especialmente
beneficiosas, siempre prestando atención a las necesidades y señales del bebé.

Posibles Dificultades y Soluciones


• Dificultad para encontrar tiempo: Familias ocupadas o con otros hijos
pueden encontrar desafiante dedicar tiempo al contacto piel con piel.
Solución: Se puede practicar mientras se realizan otras actividades
sedentarias, como ver televisión o leer, utilizando un portabebés para
mantener al bebé cerca.
• Incomodidad física: Ya sea por cesárea o sensibilidad en la zona del
pecho, algunos padres pueden experimentar incomodidad. Solución:
Ajustar la posición, utilizar almohadas de apoyo o empezar con sesiones
más cortas puede aliviar la incomodidad.
• Calor: En climas cálidos, tanto el bebé como el cuidador pueden sentirse
incómodos o sudorosos. Solución: Asegurarse de que el ambiente esté
fresco, ajustar la cobertura del bebé y limitar la duración del contacto
pueden ser estrategias efectivas.

Beneficios Adicionales
• Mejora en la calidad del sueño del bebé: El contacto piel con piel puede
ayudar a regular los patrones de sueño del bebé, promoviendo un sueño
más largo y de mejor calidad.

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Doce Pasos

• Desarrollo de un sistema inmunológico más fuerte: La cercanía física


y el contacto entre el bebé y el cuidador pueden contribuir a fortalecer el
sistema inmunológico del recién nacido.
• Reducción de llanto: Los bebés que disfrutan de contacto piel con piel
regularmente suelen llorar menos, ya que se sienten más seguros y
confortados.
• Fomento de la capacidad cognitiva y emocional: Diversos estudios
sugieren que el contacto temprano y frecuente piel con piel puede tener
efectos positivos en el desarrollo cognitivo y emocional a largo plazo del
bebé.
• Beneficios para la salud mental de los padres: Además de fortalecer el
vínculo con el bebé, el contacto piel con piel puede reducir el estrés y el
riesgo de depresión posparto en los padres, promoviendo una sensación
de bienestar y competencia parental.

Fundamentación Teórico-empírica
El contacto piel con piel, también conocido como método canguro, es una
práctica recomendada ampliamente por pediatras y expertos en el desarrollo
infantil debido a sus múltiples beneficios demostrados para el recién nacido y
sus padres.
Desde la perspectiva fisiológica, el contacto piel con piel ayuda a regular la
temperatura corporal del recién nacido. Los bebés, especialmente los
prematuros, nacen con una capacidad limitada para mantener su temperatura
corporal debido a la inmadurez de su sistema termorregulador. La cercanía física
con los padres actúa como una fuente natural de calor, estabilizando la
temperatura del bebé de manera más eficiente que muchos incubadores
(Ludington-Hoe & Swinth, 1996). Esta regulación térmica es importante para
mantener al bebé en un estado de bienestar y promover una transición saludable
a la vida fuera del útero.
Además, el contacto piel con piel estimula la liberación de oxitocina tanto en el
bebé como en los padres. La oxitocina, frecuentemente denominada la "hormona
del amor", facilita el apego emocional y refuerza los lazos afectivos entre el bebé
y sus cuidadores (Uvnäs-Moberg, 1998). Esta hormona promueve sentimientos
de amor y conexión y tiene efectos tranquilizadores, reduciendo el estrés y
promoviendo una sensación de calma. En el contexto de la lactancia materna, la
oxitocina desempeña un papel esencial al estimular la liberación de leche de las
glándulas mamarias, facilitando así el reflejo de eyección de la leche y apoyando
una lactancia exitosa (Klaus & Kennell, 1982).
Los beneficios del contacto piel con piel se extienden más allá de la regulación
térmica y hormonal. Varios estudios indican que los bebés que experimentan

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contacto piel con piel regularmente con sus padres muestran mejores patrones
de sueño, con una mayor facilidad para alcanzar el sueño profundo y menos
episodios de despertar (Feldman, Eidelman, Sirota, & Weller, 2002). Esto no solo
contribuye al desarrollo neurológico del bebé sino que también mejora el
bienestar general, permitiendo un desarrollo óptimo.
En términos de desarrollo cognitivo y emocional, el contacto piel con piel ha
demostrado tener efectos positivos significativos. La estabilidad emocional y la
reducción del estrés en el bebé pueden contribuir a un mejor desarrollo
cognitivo y emocional a largo plazo. La seguridad emocional que proporciona el
contacto constante y afectuoso con los padres es fundamental para el desarrollo
de la autoestima y la confianza, elementos clave en el desarrollo emocional
saludable del bebé (Bigelow, Power, MacLellan-Peters, Alex, & McDonald, 2012).
En resumen, el contacto piel con piel es una práctica basada en evidencia que
ofrece múltiples beneficios para el recién nacido y sus padres. Facilita una
transición paulatina a la vida fuera del útero, promueve la lactancia materna y
establece las bases para un fuerte vínculo afectivo. Además, contribuye
significativamente al desarrollo físico, cognitivo y emocional del bebé, ofreciendo
una base sólida para su crecimiento y desarrollo futuro.

Actividad 2: Contacto Visual

Objetivos
1. Fortalecer el Vínculo Afectivo: Establecer un fuerte lazo emocional
entre el bebé y los padres mediante el contacto visual directo y las
interacciones positivas, como sonreír y hablar, para promover un sentido
de seguridad y conexión.
2. Estimular el Desarrollo Visual: Aprovechar la capacidad del recién
nacido de ver a corta distancia para fomentar el enfoque visual y el
seguimiento de objetos, aspectos cruciales para el desarrollo visual
temprano.
3. Promover la Atención: Ayudar al bebé a seguir con la mirada objetos en
movimiento, preparando el terreno para habilidades de atención
compartida, importantes para el aprendizaje y el desarrollo social.
4. Estimular la Cognición Temprana: A través de la interacción y el juego
visual, se busca apoyar el desarrollo cognitivo inicial, incluyendo la
percepción, la atención y el reconocimiento de patrones.

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5. Fomentar la Comunicación Preverbal: Utilizar la interacción cara a cara


para estimular las primeras formas de comunicación, reconociendo la
importancia de las expresiones faciales y los sonidos en el desarrollo
lingüístico y comunicativo.

Materiales
• Juguetes con Colores Contrastantes: Objetos o juguetes que presenten
contrastes fuertes, como blanco y negro o colores primarios vivos, para
captar la atención del bebé y estimular su visión.
• Juguetes Móviles: Pequeños móviles o juguetes colgantes que puedan
moverse suavemente dentro del campo visual del bebé, idealmente con
elementos que tengan contraste de colores o patrones interesantes.
• Manta o Alfombra de Juego: Una superficie cómoda y segura para
acostar al bebé durante los momentos de juego visual y asegurar que tanto
el adulto como el bebé estén en una posición cómoda.

Descripción de la Actividad
La interacción visual y emocional entre padres y bebé es fundamental para el
desarrollo temprano, no solo fortaleciendo el vínculo afectivo sino también
estimulando el desarrollo sensorial y cognitivo del recién nacido. Durante las
rutinas diarias como la alimentación, el cambio de pañales, o incluso los
momentos de tranquilidad, es importante aprovechar la oportunidad para
establecer contacto visual directo con el bebé, manteniendo una distancia óptima
de 20-30 cm que coincide con su capacidad de enfoque visual en sus primeras
etapas de la vida.
Una sonrisa, una mirada cariñosa o el simple acto de hablarle cariñosamente al
bebé le brinda seguridad y confort, y además contribuye significativamente a su
desarrollo emocional y cognitivo. Para enriquecer estos momentos, incorporar
juguetes con patrones de alto contraste en blanco y negro o colores brillantes
puede ser especialmente estimulante para la vista del bebé. Estos objetos,
cuando se mueven lentamente dentro del rango visual del bebé, no solo captan
su atención, sino que también fomentan la habilidad de seguir objetos en
movimiento, una habilidad crítica para el desarrollo visual.
Introducir elementos con texturas suaves o ligeramente táctiles puede también
ser beneficioso, siempre que se presenten en un contexto de seguridad y bajo
supervisión directa. Por ejemplo, pasar suavemente un pañuelo de tela sobre la
piel del bebé mientras se mantiene el contacto visual puede estimular su
percepción táctil y visual simultáneamente.

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Otra práctica enriquecedora es la de narrar las actividades que se están


realizando, ya sea el cambio de pañal o la preparación para la alimentación, en
un tono calmado y cariñoso. Esta narración no solo prepara al bebé para lo que
viene, creando un ambiente de previsibilidad y seguridad, sino que también
introduce suavemente al bebé en el lenguaje, fomentando la comprensión y el
vínculo emocional.
La clave de estas actividades es la regularidad y la consistencia, integrando estos
momentos de conexión visual y estimulación sensorial en la rutina diaria del
bebé. Esto no solo ayudará al desarrollo visual y cognitivo del bebé, sino que
también reforzará el vínculo afectivo entre el bebé y sus padres, estableciendo
una base sólida para su desarrollo emocional y social. Al adaptar las actividades
a las respuestas y el ritmo del bebé, los padres pueden garantizar una experiencia
enriquecedora que beneficia el crecimiento y el bienestar del bebé en sus
primeras etapas de vida.

Frecuencia Recomendada
Se recomienda incorporar esta actividad en la rutina diaria del bebé varias veces
al día, especialmente en momentos de interacción cercana como la alimentación,
el cambio de pañales, o antes de la hora de dormir. Cada sesión puede durar
desde unos pocos minutos hasta lo que sea cómodo para el bebé, observando
siempre sus señales de interés o fatiga. La regularidad y la repetición son claves
para fomentar el desarrollo visual y cognitivo, así como para fortalecer el vínculo
entre el bebé y sus padres.

Posibles Dificultades y Soluciones


• Distracciones y falta de atención del bebé: Puede que el bebé se
distraiga fácilmente o parezca desinteresado. Solución: Asegúrate de que
haya poca distracción visual y sonora alrededor para mantener la atención
del bebé. Prueba diferentes juguetes o actividades hasta que encuentres lo
que más le interesa.
• Fatiga o sobreestimulación del bebé: Los recién nacidos pueden
cansarse o sobreestimularse rápidamente. Solución: Limita las sesiones a
períodos cortos y observa las señales del bebé para hacer pausas o detener
la actividad si parece agitado o llora.
• Dificultad para captar la atención del bebé con los juguetes: Algunos
bebés pueden no seguir visualmente los objetos de inmediato. Solución:
Comienza con juguetes que estén muy cerca de la cara del bebé y muévelos
lentamente para captar su atención. La paciencia y la experimentación con
diferentes objetos pueden ser útiles.

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Doce Pasos

Beneficios Adicionales
• Mejora de la coordinación mano-ojo: A medida que los bebés
comienzan a seguir objetos con la mirada, también comienzan a coordinar
sus movimientos de manos hacia donde miran, lo que es fundamental para
el desarrollo motor.
• Desarrollo de la percepción de profundidad: La interacción con objetos
a diferentes distancias ayuda a los bebés a desarrollar la percepción de
profundidad, una habilidad visual crítica.
• Estimulación del desarrollo emocional: La interacción positiva y el
contacto visual durante estas actividades promueven el bienestar
emocional del bebé, haciendo que se sienta más seguro y apreciado.
• Fomento de la habilidad para reconocer patrones: El uso de juguetes
con patrones contrastantes estimula la capacidad del cerebro del bebé
para reconocer y diferenciar patrones visuales, un precursor importante
de la lectura y el reconocimiento de objetos.

Fundamentación Teórico-empírica
El primer mes de vida de un bebé representa un período crítico en el cual se
sientan las bases para el desarrollo social, emocional y cognitivo. Durante este
tiempo, la capacidad de los bebés para reconocer rostros y responder a ellos
desenpeña un papel fundamental. Esta predisposición hacia los rostros humanos
es un aspecto innato del desarrollo humano, que ha sido ampliamente estudiado
y documentado en la literatura científica. Según estudios como los de Johnson et
al. (1991), los recién nacidos reconocen las caras y además prefieren mirarlas
sobre otros patrones visuales. Esta predisposición es importante para el
desarrollo social y emocional, ya que facilita el primer vínculo entre el bebé y sus
cuidadores.
El contacto visual es una de las formas más tempranas y significativas de
comunicación entre los bebés y sus padres. El intercambio de miradas establece
una base para el desarrollo del apego seguro, un concepto introducido por
Bowlby (1969) en su teoría del apego. A través del contacto visual, los bebés y
los padres establecen una conexión emocional profunda, que Bowlby argumenta
ser fundamental para el desarrollo emocional saludable del niño.
Además, la investigación ha demostrado que el contacto visual activa áreas del
cerebro asociadas con el procesamiento emocional y social. Por ejemplo, un
estudio de Farroni et al. (2002) encontró que las áreas del cerebro involucradas
en el procesamiento de la información social y emocional son más activas cuando

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José M Pérez Navarro

los bebés participan en el contacto visual directo. Esto implica que el simple acto
de mirar a los ojos de un bebé no solo es importante para su desarrollo visual,
sino también para su capacidad de procesar y responder a las señales sociales y
emocionales.
El papel del contacto visual en el desarrollo temprano se extiende más allá de la
conexión emocional, influyendo también en el desarrollo del lenguaje. Estudios
como los de Kuhl et al. (2003) argumentan que la interacción cara a cara, que
incluye tanto el contacto visual como la comunicación verbal, es esencial para el
desarrollo del lenguaje. Durante estas interacciones, los bebés escuchan el
lenguaje y observan los movimientos faciales y bucales, lo que les ayuda a
comenzar a formar las bases de la comunicación verbal y no verbal.
En resumen, la capacidad de los bebés para reconocer y responder a los rostros
humanos desde el primer mes de vida es una piedra angular del desarrollo social,
emocional y cognitivo. A través del contacto visual y las interacciones cara a cara,
los bebés aprenden a formar vínculos emocionales, desarrollar la atención visual
y sentar las bases para el lenguaje y la comunicación. Este proceso complejo y
multifacético subraya la importancia de las primeras interacciones sociales y
emocionales en el desarrollo humano.

Actividad 3: Música Relajante

Objetivos
1. Estimular el Desarrollo Auditivo: Exponer al bebé a una variedad de
sonidos y melodías para fomentar la habilidad de escuchar y diferenciar
sonidos, crucial para el desarrollo del lenguaje.
2. Promover la Relajación y el Bienestar: Utilizar la música suave y las
melodías tranquilas para crear un ambiente que calme al bebé,
ayudándolo a relajarse y a sentirse seguro.
3. Fortalecer el Vínculo Afectivo: A través del canto y la interacción
musical directa con el bebé, fortalecer la conexión emocional entre el bebé
y sus cuidadores.
4. Fomentar la Coordinación Audio-Visual: Ayudar al bebé a asociar
estímulos auditivos con visuales, una habilidad importante para el
desarrollo cognitivo y sensorial.

Materiales

28
Doce Pasos

• Reproductor de Música: Un dispositivo para reproducir música suave,


como un teléfono móvil, una tableta o un reproductor de música digital,
con una selección de canciones de cuna y melodías tranquilas.
• Altavoz de Volumen Controlable: Un altavoz con capacidad para ajustar
el volumen a un nivel bajo y seguro, asegurando que la música sea suave y
no sobresalte al bebé.
• Lámpara de Luces Tenues Cambiantes (opcional): Una lámpara o
dispositivo de iluminación que pueda cambiar de color suavemente,
preferiblemente al ritmo de la música, para añadir un componente visual
a la experiencia auditiva.
• Manta Cómoda: Una superficie suave y segura donde el bebé pueda
acostarse o ser sostenido mientras participa en la actividad,
contribuyendo a su sensación de comodidad.

Descripción de la Actividad
La música suave y las canciones de cuna tienen un poder especial para calmar y
consolar a los bebés, además de estimular su desarrollo cerebral de manera
temprana. Al integrar melodías armoniosas y ritmos lentos en la rutina diaria del
bebé, no solo se fomenta un ambiente de tranquilidad, sino que también se
aprovecha la oportunidad para estimular su desarrollo auditivo y cognitivo.
Seleccionar una gama de canciones de cuna y melodías suaves que incorporen
una variedad de instrumentos musicales puede ayudar a enriquecer la
experiencia auditiva del bebé, permitiéndole familiarizarse con diferentes
sonidos y tonos. Al cantarle directamente al bebé, se crea un vínculo afectivo más
fuerte, ya que la voz familiar del padre, la madre o el cuidador brinda una
sensación de seguridad y confort. Esta práctica no solo es beneficiosa para el
bebé, sino que también puede ser una experiencia emotiva y gratificante para los
padres, fortaleciendo el vínculo emocional con su hijo.
Para complementar la experiencia auditiva con una estimulación visual suave,
puedes utilizar una lámpara de luces tenues que cambie de color al ritmo de la
música, capturando la atención del bebé y fomentando la concentración. Estas
luces, especialmente si se mueven lentamente y con suavidad, pueden ayudar al
bebé a desarrollar habilidades de seguimiento visual y a distinguir entre
diferentes colores. Es importante asegurarse de que el volumen esté a un nivel
bajo para no sobresaltar ni incomodar al bebé. La idea es envolverlo en un manto
de sonidos suaves que invite al relax y al bienestar, no solo durante momentos
de juego tranquilo, sino también como parte de la rutina de preparación para
dormir.
Experimentar con diferentes tipos de música puede revelar preferencias
particulares del bebé. Algunos pueden responder mejor a melodías clásicas,

29
José M Pérez Navarro

mientras que otros pueden preferir sonidos de la naturaleza o canciones de cuna


tradicionales. Observar las reacciones del bebé a diferentes melodías puede ser
una guía útil para personalizar la experiencia musical.
Además, incorporar el tacto suave, como acariciar o masajear delicadamente al
bebé al ritmo de la música, puede enriquecer aún más esta actividad de
estimulación temprana, brindando una experiencia sensorial completa que
estimula el tacto, la vista y el oído. Esta práctica no solo es placentera para el
bebé, sino que también puede ayudar a aliviar posibles molestias o tensiones,
promoviendo una sensación de relajación y bienestar general.
En resumen, combinar la música suave con una iluminación tenue y el tacto
cariñoso puede crear una atmósfera enriquecedora y tranquilizadora para el
bebé, apoyando su desarrollo sensorial, emocional y cognitivo de manera
holística desde los primeros días de vida.

Frecuencia Recomendada
Para los recién nacidos, la exposición a música suave y canciones de cuna puede
ser una parte diaria de su rutina, idealmente durante momentos de calma como
antes de la siesta o la hora de dormir. No existe una duración exacta para cada
sesión; sin embargo, períodos cortos de 10 a 15 minutos pueden ser suficientes
para captar la atención del bebé sin sobreestimularlo. La clave es observar las
reacciones del bebé y adaptar la frecuencia y la duración de las sesiones según
sus respuestas y necesidades.

Posibles Dificultades y Soluciones


• Sobreestimulación del bebé: Algunos bebés pueden sentirse abrumados
por la música o los estímulos visuales. Solución: Reducir el volumen de la
música, simplificar los estímulos visuales o acortar la duración de la sesión
puede ayudar a prevenir la sobreestimulación.
• Dificultad para mantener la atención del bebé: Es posible que el bebé
se distraiga fácilmente o no muestre interés. Solución: Cambiar el tipo de
música o el color de las luces puede ayudar a encontrar algo que sea más
del agrado del bebé. La paciencia y la experimentación son clave.
• Falta de recursos o materiales: No todas las familias pueden tener
acceso a dispositivos de música o lámparas de luces cambiantes. Solución:
Cantarle al bebé es una alternativa maravillosa y gratuita que no requiere
de ningún material. Para los elementos visuales, se pueden utilizar objetos
cotidianos con colores brillantes o patrones contrastantes.

30
Doce Pasos

Beneficios Adicionales
• Desarrollo de la memoria auditiva: La repetición regular de ciertas
melodías puede ayudar al bebé a reconocer y recordar sonidos específicos,
lo que es un primer paso importante en el desarrollo de la memoria.
• Estimulación de la expresión facial y vocal del bebé: La interacción
musical anima al bebé a responder con sonrisas o vocalizaciones,
promoviendo el desarrollo de habilidades de comunicación tempranas.
• Reducción del estrés para los padres: Escuchar música suave y cantar
canciones de cuna no solo beneficia al bebé, sino que también puede tener
un efecto calmante en los padres, reduciendo los niveles de estrés y
mejorando el bienestar emocional.
• Promoción de habilidades de reconocimiento espacial y temporal: A
través de la percepción de los patrones rítmicos y melódicos de la música,
se fomenta el desarrollo temprano de habilidades de reconocimiento
espacial y temporal en el bebé.

Fundamentación Teórico-empírica
La influencia de la música en el primer mes de vida de un bebé es un área de
estudio fascinante que abarca aspectos del desarrollo neurológico, cognitivo,
emocional y social. Diversos autores y teorías han contribuido a nuestra
comprensión de cómo la música afecta y beneficia el desarrollo temprano de los
infantes.
Desde el punto de vista neurológico, la música es un estímulo complejo que
involucra múltiples áreas del cerebro. La investigación ha mostrado que la
exposición a la música puede promover la plasticidad neuronal, es decir, la
capacidad del cerebro para formar y reorganizar conexiones sinápticas en
respuesta a experiencias. Según Patel (2003), la música puede servir como un
medio para ejercitar el cerebro, mejorando su capacidad para procesar sonidos,
un fundamento crítico para el aprendizaje del lenguaje y la comunicación. Esto
se debe a que la música comparte muchas características con el lenguaje,
incluyendo ritmo, tono y melodía, lo cual puede preparar al cerebro para los
aspectos sonoros del lenguaje hablado.
En términos de desarrollo cognitivo, estudios como el de Hannon y Trainor
(2007) han demostrado que la música puede mejorar la memoria y las
habilidades de aprendizaje en bebés. La repetición de patrones musicales y la
exposición a diferentes estructuras rítmicas puede ayudar a los bebés a
desarrollar habilidades de memoria temprana, lo que es esencial para el
aprendizaje futuro. Además, la música fomenta la coordinación motriz a través

31
José M Pérez Navarro

del movimiento, por ejemplo, al balancearse o golpear al ritmo, lo que contribuye


al desarrollo de habilidades motoras finas y gruesas.
Desde una perspectiva emocional y social, la música actúa como un puente para
la conexión y el entendimiento. De acuerdo con Trevarthen (2002), las
interacciones musicales entre el bebé y el cuidador, como cantarle al bebé o
bailar con él en brazos, no solo proporcionan estímulos auditivos
enriquecedores, sino que también fomentan un vínculo emocional profundo.
Estas actividades compartidas promueven la comunicación no verbal y la
sintonía afectiva, esenciales para el desarrollo de relaciones seguras y el
bienestar emocional del bebé.
La exposición temprana a la música también desempeña un papel fundamental
en el desarrollo del habla y la comunicación. Según la teoría de la "musilengua"
de Gordon (2000), la música y el lenguaje son dos modos de comunicación que
comparten una base común en los primeros años de vida. La exposición a una
variedad de estímulos musicales puede enriquecer la sensibilidad auditiva del
bebé hacia los sonidos y ritmos del lenguaje, preparándolo mejor para las etapas
iniciales del desarrollo del habla.
Además, la capacidad de la música para calmar y reducir el estrés es bien
conocida. Un estudio de Loewy et al. (2013) concluyeron que la música puede
tener efectos calmantes significativos en los recién nacidos, reduciendo el estrés
tanto para los bebés como para sus padres y fomentando momentos de calma y
conexión emocional. Esto se debe a que la música puede regular las respuestas
fisiológicas al estrés, como la frecuencia cardíaca y los niveles de cortisol,
contribuyendo a un estado de relajación y bienestar.
En resumen, la música desempeña un papel multifacético en el desarrollo del
bebé durante el primer mes de vida, influyendo en su crecimiento neurológico,
cognitivo, emocional y social. La música se establece como una herramienta
poderosa para el desarrollo temprano que contribuye al fortalecimiento de la
memoria y las habilidades de aprendizaje, la mejora de la coordinación motriz y
la promoción de la conexión emocional y la calma.

Actividad 4: Masaje Suave

Objetivos
1. Promover el Bienestar Físico: El masaje suave estimula el sistema
circulatorio, ayuda a la relajación muscular y puede facilitar el alivio de
gases y cólicos, contribuyendo al bienestar físico general del bebé.

32
Doce Pasos

2. Estimular el Desarrollo Sensorial: A través del tacto, una de las


primeras formas de comunicación y aprendizaje, el masaje ayuda a
desarrollar la conciencia sensorial del bebé, enriqueciendo su percepción
táctil.
3. Fortalecer el Vínculo Afectivo: La interacción cercana y cariñosa
durante el masaje profundiza el vínculo emocional entre el bebé y sus
padres, proporcionando una base sólida de seguridad y confianza.
4. Fomentar la Relajación y Mejorar el Sueño: El masaje puede reducir los
niveles de estrés en los bebés, calmarlos y, como resultado, mejorar la
calidad y duración de su sueño.
5. Estimular el Desarrollo Cognitivo y Emocional: Al hablar y mantener
contacto visual durante el masaje, se fomenta la interacción social
temprana y la comunicación, apoyando el desarrollo cognitivo y
emocional del bebé.

Materiales
• Aceite o Loción para Bebés: Producto hipoalergénico, preferentemente
bio, fabricado para bebés, que facilite el deslizamiento de las manos sobre
la piel sin causar irritación.
• Toallas Suaves: Para apoyar al bebé durante el masaje y cubrirlo después,
manteniéndolo cálido y cómodo.
• Pañuelo de Seda o Texturas Varias: Objetos con diferentes texturas para
estimular el sentido del tacto del bebé, siempre asegurándose de que sean
seguros y suaves.
• Reproductor de Música: Para poner melodías suaves o sonidos de la
naturaleza que ayuden a crear un ambiente relajante durante la sesión de
masaje.
• Ambiente Cálido y Tranquilo: Aunque no es un material tangible,
preparar un espacio que sea cálido, sin corrientes de aire y tranquilo es
esencial para una experiencia de masaje positiva.

Descripción de la Actividad
El masaje infantil es una práctica milenaria que ofrece beneficios tanto para el
bebé como para los padres, al ser una excelente manera de fortalecer los lazos
afectivos y promover el bienestar físico y emocional del recién nacido. Iniciar la
sesión de masaje asegurándose de que las manos estén limpias y calientes es
esencial, ya que las manos frías pueden ser incómodas para el bebé. Utilizar
aceites o lociones específicos para bebés, preferentemente hipoalergénicos y sin

33
José M Pérez Navarro

fragancias fuertes, puede ayudar a que tus manos se deslicen más suavemente
sobre la piel, además de hidratarla.
Crear un ambiente relajante es fundamental para el éxito de esta actividad. Elegir
un momento del día en que tanto el bebé como tú esteis tranquilos y no haya
prisa es ideal. La música de fondo tranquila, como melodías suaves o sonidos de
la naturaleza, puede ayudar a calmar al bebé y a ti, creando un ambiente sereno
que complementa la experiencia del masaje. La temperatura del ambiente debe
ser agradable, evitando corrientes de aire, para que el bebé se sienta cómodo
estando parcialmente desnudo durante el masaje.
Al masajear, comienza con movimientos suaves y rítmicos en las piernas,
avanzando hacia los brazos, la espalda, las manos y los pies. Cada área puede ser
masajeada con movimientos circulares suaves, pases largos y un ligero
amasamiento, siempre observando la reacción del bebé para asegurar su
comodidad. Es vital comunicarse con el bebé mediante el contacto visual y la voz
suave, reforzando el vínculo afectivo y proporcionando seguridad.
Experimentar con diferentes texturas durante el masaje puede ser una manera
enriquecedora de estimular el sentido del tacto del bebé. Elementos como toallas
suaves, pañuelos de seda, o incluso un cepillo de cerdas naturales suaves, pueden
proporcionar diversas sensaciones táctiles, fomentando el desarrollo sensorial.
Sin embargo, es importante introducir estos elementos gradualmente y observar
cómo responde el bebé a cada uno.
Concluir la sesión de masaje con un suave balanceo o mecer puede amplificar los
benefitos de esta actividad, ayudando al bebé a relajarse aún más y preparándolo
para un sueño reparador. Este momento de tranquilidad y conexión profunda es
también una oportunidad para que los padres se sientan más unidos a su hijo,
reconociendo el masaje como una herramienta poderosa para comunicar amor,
cuidado y seguridad.
El masaje infantil, con su combinación de tacto cariñoso, comunicación y
ambiente sereno, es una práctica enriquecedora que apoya el desarrollo
saludable del bebé y fortalece el vínculo emocional entre el bebé y sus
cuidadores, proporcionando un fundamento sólido para su crecimiento y
desarrollo emocional.

Frecuencia Recomendada
El masaje suave puede ser incorporado a la rutina diaria del bebé, idealmente
una vez al día, para maximizar sus beneficios. El mejor momento suele ser
después del baño, cuando el bebé está relajado pero alerta. Sin embargo, es
importante adaptar la frecuencia y el momento del masaje a las necesidades
individuales y las respuestas del bebé, evitando las sesiones cuando el bebé esté

34
Doce Pasos

demasiado hambriento, inmediatamente después de comer o cuando muestre


signos de querer dormir.

Posibles Dificultades y Soluciones


• Reacción adversa al aceite o loción: Algunos bebés pueden tener pieles
sensibles que reaccionen a ciertos productos. Solución: Realizar una
prueba de parche con el aceite o loción en una pequeña área de la piel del
bebé 24 horas antes del masaje para asegurar que no haya reacción
adversa. Considerar el uso de productos naturales y sin fragancias.
• Incomodidad o llanto durante el masaje: No todos los bebés reaccionan
de la misma manera al masaje. Solución: Es importante observar y
respetar las señales del bebé. Si se muestra incómodo o llora, es mejor
detener el masaje y probar en otro momento. La familiarización puede
requerir tiempo.
• Dificultad para encontrar un momento adecuado: La rutina con un
bebé recién nacido puede ser impredecible. Solución: No hay necesidad
de forzar una rutina estricta. Buscar momentos tranquilos cuando el bebé
esté relajado pero alerta y adaptar la duración del masaje a cómo se sienta
el bebé ese día.

Beneficios Adicionales
• Mejora de la digestión y alivio de cólicos: Los movimientos suaves del
masaje pueden ayudar a estimular el sistema digestivo, aliviando gases y
cólicos, lo que contribuye al bienestar general del bebé.
• Estimulación del sistema inmunológico: El masaje regular puede
fortalecer el sistema inmunológico del bebé, contribuyendo a una mayor
resistencia a las infecciones.
• Desarrollo de la conciencia corporal: A través del tacto y la interacción
física, el masaje ayuda al bebé a desarrollar una mayor conciencia de su
propio cuerpo, lo que es fundamental para su desarrollo motor y
coordinación.
• Estimulación de la producción de hormonas del bienestar: El contacto
físico durante el masaje estimula la producción de oxitocina, conocida
como la hormona del amor, tanto en el bebé como en el padre o madre,
fomentando sentimientos de bienestar y conexión emocional.

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José M Pérez Navarro

Fundamentación Teórico-empírica
El tacto, siendo uno de los primeros sentidos que se desarrollan en los bebés,
desempeña un papel fundamental no solo en su desarrollo emocional sino
también en su crecimiento físico. La importancia del tacto y el masaje en los
primeros meses de vida ha sido ampliamente documentada en la literatura
científica, destacando cómo estas interacciones táctiles pueden influir
positivamente en diversos aspectos del bienestar y desarrollo del recién nacido.
La estimulación táctil a través del masaje suave es beneficiosa para activar los
receptores táctiles de la piel, lo que a su vez puede mejorar la circulación
sanguínea, la digestión y los patrones de sueño del bebé. Field (2001) resalta que
el masaje infantil es efectivo para mejorar las funciones fisiológicas de los bebés,
señalando una reducción en los niveles de cortisol, lo que indica una disminución
del estrés. Además, esta práctica puede estimular el sistema nervioso autónomo,
contribuyendo a una mejor regulación del sueño y a la promoción de patrones
de sueño más saludables.
Diversas investigaciones también sugieren que el masaje puede tener un impacto
significativo en la reducción del llanto y en la promoción de interacciones
sociales más positivas. Un estudio realizado por Wheeden et al. (1993) concluyó
que los bebés que recibieron masajes regulares lloraban menos y mostraban
signos de mayor sociabilidad, como una mayor sonrisa y expresiones faciales de
contentamiento. Esto se debe a que el masaje puede aumentar los niveles de
oxitocina, la cual desempeña un papel fundamental en la formación de vínculos
afectivos y en la mejora de la interacción social.
Además, el masaje proporciona una experiencia sensorial enriquecedora para el
desarrollo del sistema somatosensorial del bebé. Según Montagu (1986), el tacto
es un canal de comunicación esencial en las primeras etapas de la vida, ya que
ayuda a establecer una comunicación no verbal entre el bebé y los padres. Esta
comunicación táctil es importante para el desarrollo emocional del bebé, ya que
fortalece el vínculo afectivo entre los padres y su hijo, proporcionando una
sensación de seguridad y confianza que es esencial para el desarrollo saludable
del apego.
El masaje infantil también desempeña un papel importante en el desarrollo
cognitivo y físico. Vickers et al. (2004) demostraron que el masaje puede tener
efectos positivos en el desarrollo cognitivo y motor de los bebés prematuros,
sugiriendo que estas intervenciones táctiles pueden ser particularmente
beneficiosas para los bebés en unidades de cuidados intensivos neonatales.
En conclusión, el tacto y el masaje en el primer mes de vida ofrecen múltiples
beneficios para el desarrollo emocional, físico y social de los bebés. Estas
prácticas no solo mejoran la circulación, la digestión y los patrones de sueño, sino
que también reducen el llanto, fomentan la interacción social y fortalecen el
vínculo afectivo entre los bebés y sus padres. La estimulación táctil es, por lo

36
Doce Pasos

tanto, una herramienta poderosa y esencial para apoyar el desarrollo integral del
bebé desde una edad temprana.

Actividad 5: Sonidos Naturales y Conversación

Objetivos
1. Estimular el Desarrollo Auditivo: Exponer al bebé a una amplia gama de
sonidos y ritmos para fomentar la habilidad auditiva, esencial para el
aprendizaje del lenguaje y la comunicación.
2. Fomentar la Comprensión del Lenguaje: A través de la narración y la
lectura, introducir al bebé a estructuras lingüísticas y patrones rítmicos
que son fundamentales para el desarrollo temprano del lenguaje.
3. Promover el Vínculo Afectivo: Estrechar el lazo emocional entre el bebé
y el cuidador mediante interacciones verbales positivas, proporcionando
al bebé un sentido de seguridad y amor.
4. Estimular la Cognición Temprana: Enriquecer el entorno auditivo del
bebé con variados estímulos verbales para apoyar el desarrollo cognitivo,
incluyendo la atención, memoria y reconocimiento de sonidos.
5. Desarrollar la Sensibilidad Lingüística: Introducir al bebé a diferentes
sonidos, incluidos los de otros idiomas, para desarrollar una sensibilidad
temprana a las variaciones en tono, ritmo y patrón.

Materiales
• Libros de Poemas y Cuentos Cortos: Selección de libros con textos
apropiados para bebés, que presenten ritmos suaves y sean agradables de
escuchar.
• Espacio Tranquilo y Cómodo: Un ambiente sereno donde el bebé pueda
escuchar y concentrarse en los sonidos sin distracciones externas.
• Alfombra o Manta para Tumbarse: Un lugar suave y seguro donde el
bebé pueda acostarse o ser sostenido mientras se interactúa con él.
Descripción de la Actividad
La interacción verbal es fundamental en los primeros meses de vida de un bebé,
siendo una poderosa herramienta para su desarrollo auditivo, cognitivo y
emocional. Hablarle a tu bebé en un tono suave y calmado crea un ambiente

37
José M Pérez Navarro

seguro y estimulante, donde cada palabra y sonido contribuye a su crecimiento.


Aunque el bebé no pueda entender el significado específico de las palabras, el
sonido de tu voz, la intonación y el ritmo del lenguaje le son útiles para comenzar
a comprender el mundo que le rodea. Incorporar sonidos suaves y agradables,
como susurros o murmullos, no solo calma y consuela al bebé, sino que también
agudiza su sentido auditivo. Durante los momentos tranquilos, narrar tus
acciones o describir lo que está sucediendo a su alrededor puede ser una
experiencia rica y envolvente. Esta práctica ayuda al bebé a asociar palabras con
acciones y objetos, un paso importante en el desarrollo del lenguaje.
La lectura de poemas cortos o cuentos en voz baja es otra maravillosa manera de
exponer al bebé a una rica variedad de sonidos y patrones rítmicos. Elegir textos
con un ritmo suave y melodioso puede ser especialmente calmante y puede
servir como una introducción temprana a la belleza del lenguaje. La poesía, en
particular, con su ritmo inherente y juego de sonidos, puede ser particularmente
estimulante y ayudar a desarrollar una sensibilidad temprana hacia las
variaciones tonales del habla. Alternar el habla con canciones introduce una
dinámica rica en variaciones tonales y ritmos, manteniendo la atención del bebé
y ofreciendo una experiencia auditiva más rica. Cantar no solo es una forma
efectiva de comunicar emociones y sentimientos, sino que también juega un
papel crucial en el desarrollo del reconocimiento de patrones auditivos y la
memoria musical del bebé.
Para enriquecer aún más esta experiencia, se puede experimentar con diferentes
idiomas o dialectos, si es posible. Escuchar una variedad de sonidos lingüísticos
puede aumentar la plasticidad neural del bebé y mejorar su capacidad para
diferenciar y aprender sonidos de lenguas extranjeras en el futuro. Esta
exposición temprana a múltiples patrones lingüísticos puede ser beneficiosa
para el desarrollo cognitivo y lingüístico a largo plazo.
Crear un ambiente de comunicación constante y cariñosa no solo beneficia el
desarrollo lingüístico y cognitivo del bebé, sino que también fortalece el vínculo
emocional entre el bebé y sus cuidadores. Al hablar, leer y cantar, se transmite
seguridad, amor y un sentido de conexión, fundamentales para el bienestar
emocional y el desarrollo saludable del bebé.

Frecuencia Recomendada
La actividad de hablar, leer y cantar al bebé es sumamente flexible y puede ser
incorporada fácilmente en la rutina diaria. Se recomienda interactuar
verbalmente con el bebé varias veces al día, especialmente durante momentos
de cuidado como el cambio de pañales, la alimentación y antes de dormir. La
lectura puede ser más efectiva en momentos tranquilos cuando el bebé está
relajado pero alerta, incluso si son solo unos pocos minutos al día. Cantar

38
Doce Pasos

canciones de cuna puede ser particularmente reconfortante antes de las siestas


y en la noche, ayudando al bebé a calmarse y prepararse para dormir.

Posibles Dificultades y Soluciones


• Falta de tiempo: Los padres y cuidadores pueden sentir que no tienen
suficiente tiempo para dedicar a estas actividades. Solución: Integrar la
comunicación en las actividades cotidianas. Hablar y cantar al bebé
mientras se realizan otras tareas puede ser igualmente efectivo.
• Inseguridad sobre qué decir o leer: Algunos pueden sentirse incómodos
o no saber cómo empezar. Solución: Utilizar libros de poemas o cuentos
cortos como guía; narrar las actividades diarias ("Ahora te estoy
cambiando el pañal", etc.) es otra manera fácil de incorporar el lenguaje.
• El bebé parece desinteresado o inquieto: Puede ser desalentador si el
bebé no reacciona o se distrae fácilmente. Solución: Recordar que la
exposición constante es beneficiosa, independientemente de la reacción
inmediata del bebé. Probar diferentes momentos del día puede ayudar a
encontrar cuándo está más receptivo.

Beneficios Adicionales
• Mejora de habilidades de escucha: La exposición regular al habla afina
la capacidad del bebé para escuchar y diferenciar sonidos, una habilidad
crítica para el desarrollo del lenguaje.
• Incremento de la capacidad de concentración: La atención dirigida
hacia la voz puede ayudar a desarrollar la capacidad del bebé de
concentrarse, beneficiosa para el aprendizaje futuro.
• Desarrollo emocional: La interacción positiva y afectuosa a través de la
voz fomenta un sentido de seguridad y bienestar emocional en el bebé.
• Estímulo para el desarrollo motor fino: Al intentar imitar sonidos o
movimientos de boca relacionados con el habla, el bebé puede empezar a
desarrollar habilidades motoras finas.

Fundamentación Teórico-empírica
La exposición temprana a la voz humana y a diferentes sonidos durante el primer
mes de vida de un bebé es fundamental para el desarrollo auditivo y lingüístico,
un período que establece las bases para procesos cognitivos y emocionales
esenciales. Esta afirmación se apoya en la investigación contemporánea y las
teorías del desarrollo infantil, que proporcionan una comprensión detallada de

39
José M Pérez Navarro

cómo la interacción verbal temprana contribuye significativamente al desarrollo


del cerebro, la adquisición del lenguaje y la formación de vínculos afectivos
(Kuhl, 2010).
Desde el nacimiento, los bebés muestran una preferencia natural por la voz
humana a otros sonidos, un fenómeno ampliamente documentado en la
literatura científica. DeCasper y Fifer (1980) fueron pioneros en demostrar este
interés innato, destacando cómo la preferencia por la voz materna se desarrolla
incluso antes del nacimiento. Esta atracción hacia la voz humana es importante
para el desarrollo auditivo, ya que activa y estimula áreas específicas del cerebro
responsables del procesamiento del lenguaje (Moon, Cooper & Fifer, 1993).
Escuchar hablar a los padres y otros cuidadores ayuda a los bebés a comenzar a
distinguir entre diferentes sonidos y patrones de lenguaje y sienta las bases para
la futura adquisición del lenguaje.
La comunicación verbal temprana trasciende el desarrollo cognitivo y
desempeña un papel vital en el bienestar emocional del bebé. La teoría del apego
de Bowlby (1969) resalta cómo las interacciones sensibles y receptivas con los
cuidadores crean una base de seguridad y bienestar. Este sentido de seguridad
es esencial para el desarrollo saludable del apego, con la voz humana
desempeñando un papel crucial, ofreciendo confort y seguridad.
Al responder a los sonidos y gestos del bebé, los cuidadores establecen un
"diálogo bidireccional" (Tamis-LeMonda, Bornstein, & Baumwell, 2001),
fundamental para enseñar al bebé sobre la reciprocidad y las bases de la
comunicación efectiva. Este intercambio inicial estimula el desarrollo lingüístico
e inculca habilidades comunicativas fundamentales, fomentando la participación
activa del bebé en la conversación y la experimentación con sonidos.
La investigación subraya la importancia de la variedad y riqueza de los estímulos
lingüísticos. Hart y Risley (1995) demostraron que la cantidad de palabras que
un bebé escucha en los primeros años de vida tiene un impacto significativo en
su éxito lingüístico futuro. Esto enfatiza la necesidad de una interacción verbal
rica y frecuente, no solo para estimular el desarrollo del lenguaje sino también
para enriquecer el entorno lingüístico y cognitivo del bebé.
Estudios recientes han continuado explorando la complejidad del desarrollo
auditivo y lingüístico en los primeros meses de vida. Algunas investigaciones
como las de Kuhl (2010) ofrecen una visión más profunda de cómo la exposición
temprana a múltiples idiomas puede aumentar la plasticidad cerebral,
sugiriendo que el cerebro de los bebés está especialmente preparado para
aprender y diferenciar sonidos de varios idiomas, lo cual podría tener
implicaciones significativas para el aprendizaje de idiomas en etapas posteriores
de la vida.
En conclusión, la exposición temprana a la voz humana y a diferentes sonidos no
solo es importante para el desarrollo auditivo, emocional y lingüístico de los

40
Doce Pasos

bebés en el primer mes de vida, sino que también establece una base sólida para
el desarrollo de vínculos afectivos seguros y habilidades de comunicación
efectivas. Estas interacciones tempranas, ricas en estímulos verbales y afectivos,
fomentan el desarrollo cerebral y la adquisición del lenguaje y tienen
implicaciones de largo alcance para el crecimiento cognitivo y emocional del
bebé, subrayando la importancia de la comunicación verbal temprana como un
pilar fundamental del desarrollo infantil.

Actividad 6: Movimientos y Estiramientos Suaves

Objetivos
1. Fortalecimiento Muscular y Flexibilidad: Mejorar la fuerza muscular y
la flexibilidad en las piernas, brazos, manos y pies del bebé mediante
movimientos suaves de pedaleo y estiramiento.
2. Estimulación Sensorial: Aumentar la consciencia sensorial del bebé a
través del tacto suave y el movimiento, fundamentales para el desarrollo
de la percepción sensorial.
3. Promoción del Bienestar Emocional: Fomentar una sensación de
seguridad y calma en el bebé al sostenerlo cerca y permitirle sentir la
respiración y el ritmo cardíaco del cuidador.
4. Desarrollo de la Coordinación: Ayudar al bebé a comenzar a desarrollar
coordinación y consciencia corporal a través de la práctica de
movimientos controlados y dirigidos.
5. Fomento del Vínculo Afectivo: Reforzar la conexión emocional entre el
bebé y el cuidador mediante interacciones físicas y verbales positivas
durante la actividad.

Materiales
• Manta Suave: Una superficie cómoda y segura donde acostar al bebé para
realizar los ejercicios de estiramiento y pedaleo.
• Aceite o Loción para Bebés: Para masajear las manos y pies del bebé, si
se desea, asegurándose de que sea hipoalergénico y seguro para su
delicada piel.

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José M Pérez Navarro

• Música Tranquila: Un reproductor de música con selecciones suaves


para crear un ambiente relajante durante la actividad. Esto es opcional y
debe usarse a un volumen bajo.
• Ambiente Cálido y Tranquilo: Asegurar que la habitación esté a una
temperatura agradable para el bebé, especialmente si se va a exponer su
piel durante los ejercicios.

Descripción de la Actividad
La estimulación temprana a través del movimiento es una manera efectiva de
fomentar el desarrollo físico y emocional del bebé desde sus primeros días de
vida. Esta actividad, centrada en movimientos suaves y controlados de las
extremidades del bebé, simula un ejercicio que no solo ayuda a fortalecer los
músculos sino que también promueve la coordinación y la consciencia corporal.
Al comenzar con el movimiento de pedaleo, imitas la acción de andar en bicicleta,
lo que es excelente para la movilidad de las articulaciones de las piernas y ayuda
a aliviar posibles molestias digestivas, como los gases. Los estiramientos suaves
de brazos y piernas, alternando con la flexión y extensión, contribuyen a mejorar
la flexibilidad y el tono muscular del bebé. Durante estos ejercicios, es
fundamental observar las reacciones del bebé y proceder con suavidad, sin
forzar ningún movimiento, para asegurar su comodidad en todo momento.
Masajear las manos y pies del bebé antes y después de los ejercicios de movilidad
no solo relaja y prepara los músculos para el movimiento, sino que también es
una excelente oportunidad para estimular el tacto, uno de los sentidos más
importantes en las primeras etapas del desarrollo. Este contacto físico cariñoso
ayuda a fortalecer el vínculo entre el bebé y el cuidador. Alternar los ejercicios
con momentos de calma, sosteniendo al bebé cerca del pecho, permite que
experimente la calidez y seguridad de estar cerca de ti. Sentir el ritmo de tu
respiración y latido del corazón tiene un efecto calmante y reconfortante, que
promueve el bienestar emocional y la sensación de seguridad del bebé.
Para enriquecer aún más la experiencia, se pueden incorporar elementos
visuales y auditivos suaves, como hablarle al bebé o poner música tranquila de
fondo. Esto no solo crea un ambiente relajado, sino que también estimula otros
sentidos, ofreciendo una experiencia de estimulación sensorial completa.
Además, variar los patrones de movimiento y la introducción gradual de nuevos
ejercicios ayuda a mantener la actividad interesante y desafiante para el bebé,
fomentando su desarrollo y adaptabilidad.
Es importante recordar que cada bebé es único y puede responder de manera
diferente a los estímulos. Por lo tanto, adaptar la actividad a las señales y
respuestas del bebé, asegurando que se sienta cómodo y seguro, es clave para
una experiencia positiva. Esta práctica no solo beneficia el desarrollo físico del

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Doce Pasos

bebé, sino que también juega un papel importante en su desarrollo emocional y


sensorial, ofreciendo un sólido fundamento para su crecimiento y aprendizaje
futuro.

Frecuencia Recomendada
Para los recién nacidos, es beneficioso incorporar estos ejercicios suaves de
movimiento y masaje varias veces a la semana, idealmente de 2 a 3 veces,
asegurándose de que el bebé esté relajado y receptivo. Cada sesión puede durar
entre 5 y 15 minutos, ajustándose a las señales del bebé. Es importante recordar
que el bienestar del bebé es primordial, por lo que si muestra signos de
incomodidad o fatiga, es mejor pausar la actividad y retomarla en otro momento.

Posibles Dificultades y Soluciones


• Incomodidad o llanto del bebé: Puede que el bebé se muestre inquieto
o llore durante los ejercicios. Solución: Asegúrate de que el bebé esté
alimentado, descansado y cómodo antes de comenzar. Si continúa
mostrándose incómodo, detén los ejercicios y prueba en otro momento.
• Falta de confianza en la ejecución de los movimientos: Los padres
pueden temer hacerle daño al bebé. Solución: Comenzar con movimientos
muy suaves y observar la reacción del bebé puede aumentar la confianza.
• Distracciones durante la actividad: Ruidos o interrupciones pueden
disminuir la eficacia de la sesión. Solución: Encuentra un lugar tranquilo
y cómodo donde puedas concentrarte en el bebé sin interrupciones.

Beneficios Adicionales
• Mejora del sistema digestivo: Los movimientos suaves pueden ayudar a
aliviar los gases y cólicos, promoviendo una mejor digestión y confort para
el bebé.
• Desarrollo de la consciencia corporal: Estos ejercicios ayudan al bebé a
ser más consciente de sus propias extremidades y de cómo moverlas, un
aspecto importante del desarrollo motor.
• Establecimiento de rutinas: Incorporar estos ejercicios en la rutina
diaria del bebé puede ayudar a establecer patrones de sueño más
regulares al promover la relajación antes de la hora de dormir.
• Fomento de la comunicación no verbal: A través de estos ejercicios, los
padres aprenden a leer y responder a las señales no verbales del bebé,
fortaleciendo la comunicación y el vínculo afectivo.

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José M Pérez Navarro

Fundamentación Teórico-empírica
La importancia de los movimientos y estiramientos suaves en los bebés durante
su primer mes de vida es crucial para el desarrollo de la propriocepción, un
componente esencial del sistema sensorial que juega un papel fundamental en la
percepción de la posición y el movimiento del cuerpo en el espacio. Este sentido
es vital para la coordinación y el equilibrio, estableciendo las bases para el
desarrollo motor futuro, incluyendo habilidades tan importantes como gatear y
caminar. Shumway-Cook y Woollacott (2001) enfatizan la relevancia de la
propriocepción para el control voluntario del movimiento, subrayando su papel
en el desarrollo de habilidades motoras complejas.
La práctica regular de ejercicios de movimiento en los recién nacidos no solo
apoya el desarrollo motor, sino que también promueve beneficios significativos
en su salud general. Algunas investigaciones han demostrado que actividades
como el masaje infantil, que incorpora estiramientos y movimientos suaves,
pueden tener efectos positivos en los patrones de sueño de los bebés, facilitar la
digestión y aliviar el malestar asociado con condiciones como los gases o el cólico
(Field et al., 1986). Estos beneficios se atribuyen a la estimulación del sistema
nervioso parasimpático, que induce un estado de relajación y bienestar en el
bebé.
Más allá de los beneficios físicos, la interacción a través de movimientos y
estiramientos suaves refuerza el vínculo afectivo entre el bebé y sus cuidadores,
un aspecto subrayado por la teoría del apego de Bowlby (1969). Las experiencias
de interacción positiva y el contacto piel con piel en los primeros meses de vida
son fundamentales para el desarrollo de un apego seguro, proporcionando una
base sólida para el crecimiento emocional y social del bebé.
Estudios recientes continúan destacando la importancia del contacto físico y el
masaje en el desarrollo temprano. Por ejemplo, algunas investigaciones sugieren
que el masaje beneficia el desarrollo físico y emocional, mejorando también la
atención y potencialmente el aprendizaje y la memoria en etapas posteriores de
la vida (Ferber, Feldman, & Makhoul, 2008). Estos hallazgos amplían nuestra
comprensión del impacto del tacto en el desarrollo integral del bebé.
La aplicación práctica de estos conocimientos en el cuidado diario de los bebés
puede variar, desde técnicas de masaje específicas hasta ejercicios de
estiramiento y movimientos guiados que los padres pueden realizar para
estimular el desarrollo sensorial y motor de sus hijos. Los profesionales de la
salud y terapeutas ocupacionales enfatizan la importancia de incorporar estas
prácticas en la rutina diaria del bebé, adaptando las actividades a las necesidades
individuales de cada niño para maximizar los beneficios (Case-Smith & O'Brien,
2015).
En conclusión, los movimientos y estiramientos suaves en el primer mes de vida
son fundamentales para el desarrollo de la propriocepción, la coordinación, el

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Doce Pasos

equilibrio y el bienestar general del bebé. Estas actividades no solo fomentan un


desarrollo físico saludable, sino que también fortalecen el vínculo emocional
entre el bebé y sus cuidadores, creando una base segura para el desarrollo
emocional y social. La integración de ejercicios de movimiento en la rutina diaria
ofrece beneficios integrales, respaldando el crecimiento y desarrollo óptimo del
bebé en sus etapas más tempranas de vida.

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José M Pérez Navarro

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