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Moderna Universal 2

Crisis del S.XVII: Brotes verdes, calvinismo


Tema II Población europea S.XVII
1.-Introducción.

AÑOS. CAUSAS. LOCALIZACIÓN.


1596-1603 Peste atlántica. -Dejó importantes huellas en le
mediterráneo, incidiendo especialmente
en el Norte de Italia
1618-48. Descenso de la Aparición de la trilogía: hambre, guerra,
población en la peste= MUERTE).
Europa Central y en el
Mediterráneo,
vinculado con la
Guerra de los Treinta
Años.
1647-52. Peste. -Incidencia en el Mediterráneo.
1654-60. Guerra del Norte de -Báltico y la Europa Oriental.
Europa.
1690-1715. Última fase de -Especialmente sensible en Francia,
decrecimiento aparición de crisis de subsistencia(1693-
económico. 1694) y 1709-1710.

Años. Acontecimientos.
1640-42 y Excesivas lluvias en castilla.
1645-47.
1640. En esta década algunos cambios extremos de carácter climático:
-en méxico, lluvias torrenciales.
-en felipinas escasas lluvias de tal modo que no se pudo sembrar la cosecha de arroz en 1642.
-1640 en china parece ser el año más seco registrado en los últimos cinco siglos.
-junto a estos acontecimientos climáticos los fríos y sequías insólitos en la década de
1640 dieron lugar a tres de las peores cosechas registradas en los pasados siglos.
Lo que da lugar a la denominada: “ pequeña edad del hielo “.

El S.XVII es analizado desde distintas perspectivas, descartándose el planteamiento inicial de una


decadencia total, existiendo unos espacios que suponen un motor económico importante como
Países Bajos o Inglaterra (gran potencia a escala mundial).
1er problema es el escaso incremento de la productividad (elemento principal la agricultura). La
agricultura es el elemento vital que alimenta a la población, y es directamente proporcional al
progreso económico, así como el factor demográfico. La capacidad de producción alimentaria esta
directamente ligada a la capacidad para mantener a la población.
En la demografía del AR existen diferentes lagunas en ciertos territorios, considerándose las fuentes
parroquiales como las más fiables, conservándose documentación sobre diezmos y demás. Las
fuentes para los tipos de trabajos serán datos de diezmo sobre la producción, creación de diferentes
empleos, etc.
La población en este siglo tiende a decrecer (crecimiento menor al 5%, en comparación al 30% del
S.XVI y el 50% del S.XVIII), concentrándose el poco crecimiento en Europa del norte (por mayor
crecimiento económico) hasta mediados de siglo.
2.-Causas del estancamiento de la población en el siglo XVII.

Ya desde el S.XVI se ven problemas demográficos por dificultad para luchar contra las epidemias,
debido a que el principal problema es evitar el contagio, más frecuente en el entorno urbano. El
principio principal para prevención del contagio era el aislamiento mediante cordones sanitarios,
utilizando al ejército para evitar la entrada y salida de la ciudad; este método se seguiría utilizando
en los siglos siguientes. Al escaso crecimiento demográfico se le suman las malas cosechas y la
peste atlántica, dejando esta última una importante huella en países mediterráneos, donde se observa
un retroceso de la población; a todo ello se suma la presencia de conflictos bélicos.
En los años centrales incidirían estos factores tanto en el mediterráneo como en Europa central,
destacando la guerra de los 30 años. De esta forma remarcaríamos como causas de esta crisis las
guerras, el hambre y la peste, que también se harían notar en Europa del Norte; ya a finales de siglo
también veríamos la guerra de Sucesión en la monarquía hispánica con la entrada al poder de los
Borbones. Todo ello da lugar a una constante crisis de subsistencia acrecentada por una
conflictividad continuada en Europa.

2.1.-Las consecuencias de los movimientos migratorios.


Las más afectadas por la crisis serán las ciudades mediterráneas, que darían lugar a una fuerte
ruralización. A su vez, seguirán siendo importantes las ciudades capitales (residencia del monarca y
su cuerpo burocrático), a las que deberían acudir los súbditos para resolver sus asuntos, lo que
genera un crecimiento económico en dichas ciudades; estas a su vez agrupa toda la actividad
política (revisión de impuestos, títulos, cortes, etc.), centralizándose el poder y siendo el marco más
activo del S.XVII. Por otro lado las ciudades portuarias también ganan importancia por la actividad
comercial.
En el entorno urbano del NO europeo es vital también el desarrollo europeo (París, Londres y
Nápoles como las 3 principales), siendo las capitales donde se generaba la actividad de la corte con
abundante afluencia de diferentes profesionales (abogados, contables, médicos, etc.). Hacia
finalesde siglo aparecen numerosas ciudades con una importante concentración poblacional (38
ciudades, la mayoría capitales), relevantes en ámbitos religiosos, administrativos, políticos, etc.
También se observa una importante presencia de potencias española, francesa e inglesa en América,
debido a su potencial económico y la constante especulación comercial. A su vez, la crisis
demográfica también lleva a gran parte de la poblacional a emigrar a América; con ello se buscaba
la posibilidad de subsistir e incluso ascender y acceder a la propiedad de tierras.
Las causas de estos movimientos migratorios se dan por varias cuestiones: la colonización de
territorios como Sicilia severamente despoblados; el planteamiento de mejoras en territorios como
Países Bajos, que procuraron fabricar tierras al generar terreno mar adentro e introdujeron avances
en el ámbito agrícola como la lucha contra la permanencia de tierras en barbecho; zonas
despobladas previamente por las guerras a principio del S.XVII, que atrajeron a un amplio grupo
poblacional, destacando los suizos; la afluencia de mercenarios (suizos, escoceses) que trabajaban
para el mejor postor, en conflictos como podía ser la guerra de Flandes contra la monarquía
hispánica.
También encontramos causas de motivo religioso, habiendo una gran variedad de movimientos
poblacionales de este tipo como la expulsión de los moriscos por Felipe III (para obtener el favor
del papa); los hugonotes franceses calvinistas, siendo comerciantes con cierto poder económico que
fueron expulsados a finales de siglo, a pesar de que entre ellos se encontraban incluso nobles y
artesanos muy especializados; el establecimiento masivo de emigrantes protestantes en América del
Norte.

Otros motivos de crisis como el hambre, la crisis y la peste, que tendrían un notable efecto sobre la
población, serían sucedidos por una amplia recuperación demográfica durante la segunda mitad del
S.XVII. Esta recuperación se debe a factores como: la desaparición de la peste por las medidas
rigurosas de aislamiento; las mejoras en el clima, con lluvias más frecuentes y menos catástrofes; la
reducción de la conflictividad. Las zonas de mayor crecimiento serían Países Bajos e Inglaterra (con
un aumento del 25% respecto a principios de siglo), que se constituyen como mayores potencias
europeas; dicho aumento se agradece por la implementación en Países Bajos (y su rápida extensión
hacia Inglaterra) del sistema agrario trienal (ausencia de barbecho). Estos dos países evitarían así
generalmente las crisis de subsistencia, a excepción de los núcleos urbano. Algunas zonas de
Francia sufrirían, junto a la hambruna y las epidemias, una subida de los precios con su
consiguiente crisis de subsistencia, que darían lugar a la prohibición de exportación de cereales.
En las zonas más pobladas de Europa se crearían juntas para acordar el aislamiento militar de las
zonas mayormente pobladas

El S.XVII es así caracterizado por historiadores como Geoffrey Parker como el “Siglo Maldito”:
En este contexto, la peste no se lograría extinguir del todo

2.2. Los factores de carácter religioso.


La edad de matrimonio se retrasa por el incremento del celibato, generando un retroceso de la
natalidad.

2.3. Las consecuencias sociales.


En las ciudades, la mayoría amuralladas, se da una mayor concentración demográfica que propicia
el contagio. Las medidas de mayor efectividad fueron los cordones sanitarios, sin embargo no serían
suficiente como para combatir prácticas ciudadanas que acrecentaban los contagios (fuentes
conjuntas con falta de salubridad).

2.4. Sobrevivir en el siglo XVII: los planteamientos de G. Parker, circunstancias socio-económicas


y climáticas-la pequeña Edad del Hielo.
Parker relata una serie de medidas urgentes de subsistencia debido al descenso demográfico de
principios de siglos, en gran parte por las epidemias; en este contexto se desarrollaría una
agricultura exclusiva de subsistencia. También se reportan varias causas del descenso demográfico
como el incremento del suicidio (sobretodo en varones adultos), el surgimiento del infanticidio
como causa notable, la emigración, suicidio femenino (por partos fuera del matrimonio), el clima
junto con las malas cosechas.

Parker insiste en un duro clima, de grandes lluvias y con extremos cambios climáticos con épocas
de sequía en contraste. En el norte de China se registran los años más secos de los últimos cinco
siglos. Estos cambios climáticos no vienen solo, dando lugar a las peores cosechas registradas en el
siglo XVII. Todo esto ha hecho que este periodo sea denominado por algunos historiadores como
“la pequeña Edad del Hielo” debido, en gran medida, a tres mecanismos importantes en cuanto a su
consecuencias. En primer lugar, la producción alimenticia es incapaz de permitir la subsistencia de
una población que crece. Por otro lado, en el periodo de 1636 y 1646 las erupciones volcánicas
redujeron la energía solar de la Tierra, dando lugar a un enfriamiento de las zonas más cálidas de
Pacífico conocido como El Niño (😎). Estas situaciones dan lugar a un importante crecimiento del
suicidio (otra vez)

3.-Conclusiones.

TEMA III
SOCIEDAD EUROPEA S.XVII

1.- Las bases teóricas de la sociedad del siglo XVII.


La sociedad del siglo XVII es una sociedad estática, es decir, una sociedad muy jerarquizada en la
que la movilidad social es muy restringida, pero no absoluta a medida que avanza la centuria. Así,
es una sociedad jerárquica en la que la existencia de un orden natural establece unos grupos
concretos diferenciados por sus privilegios: nobleza, clero, burguesía, clases populares, marginados
y excluidos. Evidentemente, como sociedad compleja, la existencia de un orden requiere la
existencia de enfrentamientos, revueltas, problemas políticos, cambios y transformaciones.
Muchos conflictos en este siglo son de carácter coyuntural y local, que no afectan a todo un país o
territorio. Así, son muchas veces rápidamente sofocados, que nos habla de una violencia realizada
mediante motines hacia los representantes del rey por la subida de precios, escasez de alimentos,
entre otros.
El modelo jerárquico setecentista sigue el modelo clásico, con tres órdenes o estamentos, La
nobleza hereditaria con determinadas funciones (ejército, servicio al rey) son grandes propietarios,
experimentan en siglo XVII algunos conflictos con el monarca por la aparición de los validos. En
segundo lugar, nos encontramos con el clero, existiendo dos tipos de clero: regular y secular. Por
último, el pueblo llano es aquel que no tiene privilegios, encontrándonos con la burguesía, las clases
populares e incluso los marginados.

El marxismo habla de una sociedad regida jerárquicamente por los medios de producción, mientras
que otros autores como mousnier hablan del honor como modelo de división jerárquica (modelo ya
superado). Sea como fuere, sabemos que hay una sociedad jerárquica, estática y patriarcal.

2. Nobleza
La nobleza mantiene su prestigio en el siglo XVII dentro de su organización social:
Privilegio de exención fiscal: en teoría, no se paga impuesto. Sin embargo, en un siglo de enorme
conflictividad bélica, la guerra es un factor que consume muchos recursos que han de ser pagados.
Esas dificultades económicas hacen que el rey exija que, durante un tiempo determinado, tengan
que pagar impuestos.
- Capacidad judicial a nivel territorial para juzgar a sus súbditos.
- Privilegios de honor.
- Vinculación (mayorazgos)

No solo ocupa los cargos más importantes del ejército, sino que también tienen una preeminencia
social: al lado del monarca está la nobleza. Sin embargo, en un periodo de enorme crisis social, se
necesitan recursos, y los impuestos que paga la nobleza eventualmente son insuficientes. Por tanto,
ante la necesidad de recaudar, se produce un proceso de recaudación de recursos para mantener su
posición clave. Así, se desarrolla la venalidad de cargos y oficios (venta de cargos nobles al mejor
postor). A estos empleos podían acceder unos comerciantes que adquieren un papel importante y
unos recursos significativos. Esto es una vía de ascenso social para estos comerciantes (“la traición
de la burguesía”). Hay una renovación y replanteamiento de la élite para seguir reforzándose. Con
las dificultades propias de la centuria, se produce una desvalorización del favoritismo cortesano.
Simplemente el estar vinculado a una estirpe nobiliaria garantiza virtud, de nobleza y pureza de
sangre, suponiendo el desarrollo de algunas técnicas para conseguir títulos nobiliarios. En el caso
castellano, se creó una verdadera industria de genealogía (mucha de ella falsificada). También hay
una jerarquía noble: antigua, provincial y baja (vive, a finales del XVII, un proceso de
ennoblecimiento). Todos estos sectores, de la alta a la baja nobleza, presentan unos rasgos similares
teniendo en cuenta su jerarquía:
- Endogamia matrimonial
- Acceso al poder político
- Ejército en sus manos, normalmente
- Introducción en actividades comerciales, con enlaces con comerciantes en el XVII-XVIII

Suelen tener una gran importancia cultural (dueños de bibliotecas, preocupación por la música)
3. El clero
Dentro del clero, tanto católico como protestante, va a haber transformaciones en el siglo XVII. En
el primero, el Concilio de Trento es clave para la transformación del clero, suponiendo un mayor
control y atención respecto a las jerarquías eclesiásticas. El clero secular será el más destacado
frente al regular, que no vivirá reformas tan importantes. Respecto a los párrocos, el hecho de tener
una parroquia significa que una localidad tiene un poder y una actividad económica importante,
constituyendo un elemento de aglomeración de individuos de una población cada vez más
importante a su alrededor.

Va a ser un clero, a mediados del XVII, con mayor formación, debido entre otras cosas al
establecimiento de seminarios, donde se formaban en lenguas clásicas y comportamiento según la
obra religiosa, siendo de donde salió gran parte de la élite del clero secular. Así, el clero católico
sigue teniendo bastante poder a pesar de la división entre protestantismo y catolicismo,
especialmente el secular.
En este nuevo modelo de clero tendremos nuevos privilegios, siendo el más significativo aquel que
posibilita vivir con cierto desahogo. Esto se debe a la obligación de percibir una buena parte del
diezmo según la jerarquía eclesiástica. Esto supone que haya importantes propiedades que facilitan,
con dotes o donaciones, a sus descendientes. También reciben recursos por misas y celebraciones
litúrgicas. Asimismo, hay un número importante de clero que no tiene iglesias o recursos suficientes
para ser beneficiados, como los capellanes, que viven de la beneficencia que le dan el clero
establecido. Estos han de buscar otras vías, como la emigración a América en el caso peninsular.

El clero regular católico, masculino y femenino, se organiza en los conventos (muchos fundados por
la nobleza; donde recaen hija que no pueden contraer matrimonio), conventos que se decían a la
enseñanza y otros que subsisten por las actividades agrarias como forma de asegurarse la vida.

Respecto al clero protestante, existían diferencias con la Iglesia católica que hace que se consolide a
raíz de las luchas religiosas. Los poderes políticos a raíz de la reforma recogieron importantes
propiedades que pasaron del clero al poder de la monarquía, por lo que la riqueza de la Iglesia
protestante es una riqueza mucho menor. Por otra parte, el clero puede contraer matrimonio entre sí.
Al igual que en el catolicismo, el clero protestante tiene algunos privilegios:
En Inglaterra, los miembros más destacados del clero formaban parte de la Cámara de los Lores
En Dinamarca y Suecia, en los Parlamentos hay representantes del clero
Hay movimientos radicales importantes que llegan a ser expulsados, de los cuales no conocemos
mucho.

4. La burguesía y las clases sociales


La evolución de las burguesías no es uniforme. Las grandes monarquías europeas marcan las pautas
en las transformaciones que va teniendo un sector social cada vez más asentado. En territorios como
Inglaterra, el poder del dinero constituye un elemento distintivo a la hora de formar una nobleza
poderosa económicamente y cada vez con más influencia. Esto nos hace hablar de financieros y
grandes comerciantes en relaciones con colonias asiáticas, americanas y africanas. Es, por tanto,
una clase que presenta un importante dinamismo que se empieza a desarrollar en el siglo XVII.
En Inglaterra se conserva una nobleza tradicional, pero esta era más débil en Francia y Países Bajos.
Es en este último que se va a formar una mayoritaria burguesía, con una jerarquía en la que los
regentes ocupan el papel principal: rentistas que obtenían rentas de la actividad comercial, contaban
con una formación intelectual importante y eran cargos públicos de los municipios pequeños y
medianos. La burguesía de Ámsterdam era claramente empresarial en su estructura y estilo de vida,
con una actividad basada en tener una banca, especular con la bolsa y buscar formas de
enriquecerse. En un siglo de conflicto con la metrópolis hispánica, la burguesía consigue constituir
su importante presencia.
En el caso de Inglaterra, Londres vivió un fuerte desarrollo de la burguesía, muy arraigada en el
mundo urbano. En las primeras décadas del XVII, era una burguesía comercial y financiera que
apenas invertía en el mundo rural. En este siglo, los recursos económicos, en gran medida, estaban
vinculados al mundo agrario, por lo que la formación de esta burguesía supuso una novedad. A
finales del siglo, tenemos un ya importante proceso de enriquecimiento de la burguesía inglesa,
invirtiendo capitales que se producen en las tierras (gentry, inversiones campo-ciudad para mejorar
la producción agraria, dando lugar a una baja nobleza que va a ser fundamental en las revoluciones
inglesas).
Entre finales del siglo XVII y principios del XVIII, comienzan a existir conflictos entre una
poderosa burguesía y una nobleza que no ha evolucionado de la misma manera. Así, hay un ascenso
burgués, matrimonios entre burguesía y nobleza y burgueses que reciben títulos nobiliarios,
poniendo de manifiesto el poder del dinero y el dinamismo económico al que se vincula la
burguesía en Inglaterra.

En Francia, la burguesía era muy inferior respecto a la anterior. Por otro lado, era considerado un
sector plebeyo. Poco a poco, con el nacimiento de los válidos a lo largo del reinado de Luis XIII y
Luis XIV, se busca una compatibilidad entre condición de noble y actividad comercial, buscando un
estadio intermedio. A partir de la segunda mitad del XVII, el poder económico va a ser controlado
por la Corona mediante el proteccionismo. Las finanzas ocupan, como en Inglaterra, un papel
fundamental, destacando las relaciones con el poder real arrendando el cobro de impuestos.
Por lo tanto, esta burguesía no es provincial, sino que busca sacar mayores beneficios y son los
candidatos a enlazarse con la nobleza francés. Indudablemente, el proceso de ascenso social de los
burgueses franceses fue más rápido que en Inglaterra, empezándose a vender títulos nobiliarios en
gran cantidad y con gran rapidez (venalidad).

En segundo lugar, el mundo agrario es la masa social es la mayor europea. Este se empobreció cada
vez más en el siglo XVII. La base de la subsistencia es la producción agraria, por lo que, en un
periodo de crisis, se produjo un déficit de la caída de los alimentos por el uso del campesino como
mano de obra en los ejércitos y por los conflictos que arrasaron con las tierras. Esto, unido a la baja
producción, da lugar a un malestar social centrado en el sector menos favorecido. Asimismo, otros
sectores sociales como la burguesía y la nobleza, no permiten el uso de las tierras comunales al
apropiarse de ellas.
Dentro del propio campesinado, existen conflictos entre los campesinos de las distintas localidades
europeas por su oposición al reparto de impuestos, de los que quedan exentos la nobleza (salvo en el
XVII). Hay divisiones, también, entre el campesinado que tiene pequeñas o medianas propiedades
frente al jornalero. Los más desposeídos se quedaron prácticamente sin recursos para subsistir,
yendo estos jornaleros buscando actividades para subsistir. El campesino medio también se vio
afectado, especie meten porque se vio incapaz de pagar semillas, ganado o tierras, quedando
endeudado en manos de los grandes propietarios. La situación del campesinado que tenía contrato
agrario fue siendo cada vez más favorable al dueño que al campesino, por lo que todo se traduce en
extrema pobreza.

5. Marginados y excluidos
Los marginados y excluidos recorren Europa, especialmente sus ciudades, para subsistir. Son los
pobres por excelencia, expulsados del campo por la carestía y que recurren a las urbes para buscar
alimentos en los conventos (órdenes religiosas católicas). La ausencia de recursos hacía imposible
atender a estas masas de población, vistos en muchas ocasiones con recelo, especialmente cuando se
viven episodios de enfermedad, cuando se intenta incluso matar a los mendigos. La persona que no
trabaja ni produce es considerada un peligro para la sociedad. También hay otros marginados, ya sea
por religión (protestantes en el mundo católico), etnia (judíos, musulmanes, gitanos), y por su
condición de esclavo (sin derechos, considerados una herramienta de sus amos) o presidiario
(muchos de ellos pertenecientes a minorías marginales). Los excluidos no enlazan con el modelo de
sociedad que existía en Europa en el siglo XVII.

6.-La conflictividad social.


Conflictividad entre la vieja y la nueva nobleza. Jerarquía nobiliaria de > a <: Duque, siempre en la
corte y cercano al monarca, pudiendo ser incluso validos; marqués, también cercano a la corte;
conde; vizconde; barón. La compra de cargos públicos nobiliarios brindan la oportunidad de obtener
prestigio y la posibilidad de acumular patrimonio, ayudando a consolidar la riqueza de multitud de
grandes personalidades enriquecidas; sin embargo, al llegar a ser estos cargos hereditarios, se
generarán nuevas dinastías de cargos públicos, que de cierta manera limitarán la movilidad social.

SOCIEDAD Y MUNDO RURAL EN EL S.XVII EUROPEO

1.-Introducción: reflexiones sobre el estudio del campesinado europeo.


Falta de datos estadísticos para establecer generalizaciones, por lo que se estima que más del 70%
de la población vive en el mundo rural. La mayor parte de la población carecería entonces de
privilegios, pudiendo así establecer elementos de distinción y similitud entre: grandes
propietarios; nobleza; medianos propietarios (arrendatarios y encargados de la gestión de
grandes propiedades) o campesinos acomodados, que contarían con su propio sueldo y la
ostentación de ciertas propiedades, pudiendo considerarse un sector preceptor de lo que sería la
burguesía agraria; pequeños propietarios con pequeñas granjas y practicantes de la transhumancia,
pudiendo subsistir sin mayor problema; jornaleros, que constituyen el grupo mayoritario y están
condenados a vagar de un lugar a otro buscando la subsistencia. Esta sociedad rural estaría así
enormemente jerarquizada según el poder económico y el prestigio social.

2.- Factores que intervienen en la configuración de la vida campesina.


Existencia de clima mediterráneo que permite cultivos con nuevas transformaciones y más
demandados, siendo el cultivo estrella los cereales, cuyo precio no disminuye y por ello se
aprovecha este tipo de territorios.
Sin embargo, en la Europa septentrional, más inhóspita, se vería también reflejada el reclutamiento
militar de mano de obra campesina en la producción. Al ser la mayoría del ejército compuesto por
militares amateur y no estando preparada la estructura bélica para soportar el invierno, se daba una
itinerancia de este a través de las ciudades europeas, las cuales quedaban en bancarrota por soportar
el hospedaje de dicho ejército. La Pequeña Edad de Hielo en el S.XVII daría lugar además a una
disminución notable de la producción agraria en estos territorios.

2.1. El clima y la geografía.

2.2. Los factores humanos.

2.3. La sociedad rural en la Europa del siglo XVII: entre el cambio y la continuidad.

3.-Rasgos de la conflictividad social en el mundo rural europeo del siglo XVII: las protestas
campesinas.

MUNDO URBANO EN LA EUROPA DEL S.XVII

1.- La ciudad: definición y organización.


2.-La sociedad urbana: principales características.

2.1.-Pobreza, vagancia y delincuencia: la sociedad marginada.

2.2. Motines y control social.

7-2-24
La sociedad del S.XVII (resumen)
Justicia ordinaria dependiente del poder del rey, la cual se verá sometida a un proceso de
racionalización y burocratización.
En este momento también surgirá el problema del bandolerismo, existiendo un sector de
campesinos desarraigados que procederán a la delincuencia en los caminos entre aldeas para su
subsistencia. Esto será fruto de un gran porcentaje del campesinado en una situación de miseria y
marginalidad, que será propia de este siglo inestable e inseguro.
Esta conflictividad social también se dará debido al incumplimiento de promesas por parte de los
organismos de poder, teniendo a su vez cierto factor religioso al verse el poco apoyo de la Iglesia
hacia una multitud hambrienta; de este modo, se puede vislumbrar cierta ideología que subyace bajo
esta ola de delincuencia.

En las ciudades se produce la exclusión a los desplazados por el hambre y la hambruna, lo que daría
a la formación de los gremios en el sector artesanal; sin embargo, un conjunto de artesanos
desplazados ajenos a los gremios serían perseguidos y expulsados.
Un elemento causante de conflictividad será el hambre permanente, creadora de inseguridad y
conflictividad, generándose un ritual consistente en el levantamiento de los sectores populares; este
hecho daría lugar al concepto de “economía moral” acuñado por E.P. Thompson, que habla de este
tipo de revueltas a pequeña y mediana escala. Este tipo de conflictos, por su carencia de programa
de reivindicaciones a largo plazo y su liderazgo por miembros de otros sectores con intereses
propios, se verían rápidamente extinguidos, por lo que en la mayoría de casos se seguiría con la
mecánica usual sin generar ningún tipo de reflexión social; de esta forma, esta conflictividad se
vería con cada vez más frecuencia, generando una constante inestabilidad social.

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