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Alianzas estratégicas:
opciones para el
crecimiento de la empresa (II)

20 Estrategia Financiera Nº 237 • Marzo 2007


[ www.estrategiafinanciera.es ] Caso de Estudio

Llevar a cabo una alianza estratégica no exige que una empresa cambie su cultura, sino
reconocer que hay diferencias y saber convivir con ellas a partir del diálogo y el entendimiento
¿Está su empresa preparada para competir cooperando?

, África Ariño
IESE

al y como presentábamos en la primera parte ESTRUCTURA DE LA ALIANZA


T de este artículo*, encontrar. empresas con
culturas semejantes, especialmente si los so-
cios son de distintas nacionalidades, resulta bastante
La clasificación tradicional de las posibles estruc-
turas de una AE consiste en distinguir las alianzas es-
difícil. No obstante, para conseguir que la alianza es- tratégicas de capital y las que no incluyen capital,
tratégica (AE) sea efectiva basta que exista una acti- sino que son puramente contractuales. Entre las pri-
tud de entendimiento y se preste atención al diseño meras se encuentran tanto el intercambio cruzado de
de la alianza. Para ello, una vez elegido el socio po- acciones de los socios como la participación conjunta
tencial, es el momento de iniciar las negociaciones de los socios en el capital de una joint venture. Las
que culminarán en el diseño de la AE. alianzas estratégicas que no incluyen capital impli-
Los potenciales socios inician el proceso de ne- can un acuerdo a plazo relativamente largo instru-
gociación con determinadas expectativas acerca del mentado mediante algún tipo de contrato. El inter-
comportamiento que la otra parte adoptará(1). Es- cambio accionarial supone un compromiso muy im-
tas expectativas se han formado a partir de las ca- portante por parte de ambos socios de entrelazar sus
racterísticas demográficas e institucionales del so- futuros, y frecuentemente es contemplado como
cio, la reputación de que goza y las experiencias paso previo a una futura fusión. Nos ocuparemos
que ambas partes hayan tenido en ocasiones ante- aquí de la decisión de optar entre una joint venture y
riores. La negociación de la AE confirmará o rectifi- un acuerdo que no involucre capital.
cará tales expectativas. A estos efectos, la negocia- La decisión de establecer una joint venture o una
ción se puede caracterizar por la amplitud y la in- alianza estratégica puramente contractual es de im-
tensidad del proceso de entendimiento mutuo, lo portancia, ya que la estructura resultante implica dis-
cual podemos denominar el “ancho de banda” de la tintos incentivos y mecanismos de control para re-
negociación. La negociación puede ser un proceso gular los intercambios que se producirán. Los criterios
de “banda ancha” en el que se explora el valor de la para tomar esta decisión son múltiples y hay que
AE propuesta y se busca confirmar las propias ex- considerarlos todos en conjunto para poder valorar
pectativas acerca del socio, o bien un proceso de cuál de las opciones es más conveniente. Aquí trata-
“banda estrecha” enfocado en las tareas específicas
y los recursos necesarios para alcanzar el resultado
esperado y sin buscar de manera activa el mutuo Ficha Técnica
entendimiento.
Cuando los socios enfocan la negociación como
un proceso de “banda ancha” es más probable que AUTOR: Ariño, África
ésta culmine en un acuerdo que concretará los ele- TÍTULO: Alianzas estratégicas: opciones para el crecimiento de la empresa (II)
mentos del diseño de la AE que si la negociación re-
FUENTE: Estrategia Financiera, nº 237. Marzo 2007
sulta ser un proceso de “banda estrecha”. Múltiples
son los aspectos a tener presentes a la hora de dise- LOCALIZADOR: 20/2007
ñar la AE. Entre ellos se incluyen la estructura de la RESUMEN: En esta segunda parte se presenta la continuación del análisis
AE, la complejidad del contrato que regulará los in- sobre las alianzas estratégicas como opción de crecimiento para las empresas
tercambios que se producen, la estructura de capital y familiares. Se consideran aspectos como la importancia del diseño de las
financiación, la estructura del consejo de administra- alianzas, las relaciones con los socios y los elementos necesarios para afrontar
los cambios del entorno.
ción y la formación del equipo. Examinaremos ahora Junto a consideraciones generales aplicables a alianzas de cualquier tipo de
cada uno de ellos. empresa, se plantean aspectos específicos a considerar por parte de las em-
presas familiares.
* Estrategia Financiera: “Alianzas estratégicas: opciones para el creci- DESCRIPTORES : Caso de estudio, gobierno corporativo, gestión de costes,
miento de la empresa (I)”, nª 236, Febrero 2007. riesgo económico, joint venture.
(1) Véase Ariño, A., J. de la Torre y P. S. Ring (2001).

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Caso de Estudio
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remos cada uno de estos criterios de manera inde- zas estratégicas habitualmente involucran múlti-
pendiente, pero queremos insistir en que la decisión ples socios y pueden funcionar bien como acuer-
debe tomarse a la luz de todos ellos, valorando cuáles dos puramente contractuales, ya que la lógica do-
tienen más peso en cada situación: minante es la misma para todos los socios: alcan-
zar los beneficios de un mayor volumen. Dado
• Socios alternativos existentes. Si hay pocas em- que la convergencia de intereses es clara, un
presas con las que podría llevarse a cabo la AE acuerdo contractual puede resultar suficiente
que se pretende es preferible llevar a cabo una para aunar las actuaciones en provecho del con-
joint venture, ya que resulta más difícil al socio junto.
retirarse de la misma que zanjar un acuerdo pu-
ramente contractual. En cambio, si hay múltiples Hay algunas situaciones en que no resulta claro si
empresas con las que podría efectuarse es mejor optar por una empresa conjunta o por una
la AE, el hecho de perder al socio AE puramente contractual. Es el caso de las alianzas
tiene menor relevancia, por estratégicas en que los socios tienen vínculos previos
lo que bastaría una y el de las alianzas estratégicas entre socios de dis-
alianza estratégica con- tintos países. Por lo que se refiere a la existencia o no
tractual. de vínculos previos entre los socios, hay quien argu-
menta(3) que si tales vínculos no existen es preferible
• Nivel de inversión en formar una joint venture que permitiría un mayor
activos específicos. Cuando control del socio, y dejar las alianzas estratégicas pu-
los activos en los que se in- ramente contractuales para situaciones en que ya
vierte son de uso muy especí- existan tales vínculos y presumiblemente los socios
fico para la actividad en cues- confíen uno en otro. Por el contrario –y nos adscribi-
tión es preferible una joint ven- mos a esta segunda visión–, hay quienes piensan que
ture. La dificultad de dar otro uso si no hay relaciones previas es preferible proceder de
a dichos activos puede suponer manera incremental e iniciar una relación menos
un incentivo para que uno de los comprometida desde el punto de vista de su reversi-
socios intente sacar el máximo pro- bilidad; conforme la relación se afiance y surja la con-
vecho del otro, cuya alternativa sería fianza mutua, los futuros proyectos de cooperación
obtener un valor casi nulo de los ac- podrán realizarse a través de una joint venture preci-
tivos en cuestión si la relación se inte- samente porque la confianza generada permitirá asu-
rrumpiera. El hecho de compartir los mir este mayor compromiso.
beneficios que resulten de la joint ven- Argumentos similares se esgrimen en cuanto a las
ture supone un incentivo que evita com- alianzas estratégicas que involucran a socios de dis-
portamientos de tipo oportunista. tintas nacionalidades respecto a las domésticas. En
un contexto internacional es más difícil que la repu-
• Necesidad de coordinación de activi- tación de los socios sea mutuamente conocida que
dades. Cuando las necesidades de coordi- en el contexto doméstico. De esta forma, unos abo-
nación entre los socios son altas resulta pre- gan por la formación de una joint venture que facilite
ferible formar una joint venture, ya que dicha el control, mientras que otros adoptan el enfoque in-
coordinación se realiza de manera más eficaz crementalista antes planteado.
y eficiente en el contexto de unas relaciones
jerárquicas que en el de unas meras relaciones COMPLEJIDAD DEL CONTRATO
contractuales. Una alta necesidad de coordinación
puede provenir de un ámbito de colaboración que
DE LA ALIANZA
sea amplio, bien por el número de productos, bien Un buen contrato es consistente con el propósito
por el de unidades funcionales y/o geográficas in- de la AE y con los intereses de los socios, lo cual re-
volucradas. También depende del nivel de interde- quiere que los socios se esfuercen por clarificar cuáles
pendencia entre las tareas que uno y otro socio son dichos intereses. Aun así, diseñar un contrato que
deban llevar a cabo. anticipe todas las posibles eventualidades no es facti-
ble, por muy complejo que sea el contrato. De hecho,
• Número de socios. Cuanto más elevado sea el nú- toda AE presenta incertidumbres asociadas tanto al en-
mero de socios, más conveniente es llevar a cabo torno como al comportamiento de los socios. Los tér-
una joint venture. Cuanto mayor es el número de minos de un buen contrato facilitarán remedios para
socios, más difícil es que sus intereses converjan y los supuestos previsibles, así como procesos para resol-
más complicado comprobar que cada cual cum- ver los imprevisibles. El Cuadro 3 ofrece una panorá-
ple con su parte(2). De nuevo en este caso, el he- mica de los temas legales básicos que un contrato
cho de compartir los beneficios que resulten de la
joint venture incentiva evitar comportamientos
oportunistas. Como excepción, cabe señalar las (2) Véase García-Canal, E., A. Valdés y A. Ariño (2003).
alianzas estratégicas de masa crítica. Estas alian- (3) Gulati, R. (1995).

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Cuadro 1. Temas legales básicos a contemplar en el contrato de una alianza

Temas relativos al establecimiento:


• Temas preliminares:
— Acuerdo de confidencialidad.
— Cláusula que prohíba negociar en paralelo con un competidor.
• Diseño de la alianza:
— Propiedad (aplicable sólo a joint ventures):
– Contribuciones de los socios igualitarias (propiedad y control al 50/50): provisiones para salir de posibles bloqueos.
– Contribuciones de los socios no igualitarias: provisiones que establezcan la necesidad de contar con la aprobación del socio minoritario en de-
cisiones cruciales.
— Consejo de administración y comité de dirección (aplicable sólo a joint ventures):
– Proporción de consejeros y directivos procedentes de cada empresa.
– Cualificaciones mínimas a exigir.
– Si la otra parte puede poner objeciones a una persona en particular.
– Nivel de remuneración.
— Estatutos sociales (aplicable sólo a joint ventures): deben recoger los acuerdos entre los socios en temas como:
– Aprobación de decisiones.
– Emisión, transferencia y venta de acciones.
– Nombramiento de consejeros, etcétera.
— Domicilio social (aplicable sólo a joint ventures) y asesores externos tales como abogados y auditores.
• Partes contratantes y marco contractual:
— Identificación de las partes.
— Objeto del acuerdo.
— Cuerpo del acuerdo especificando las obligaciones y restricciones impuestas a los socios.
— Cláusulas acerca de la firma y fecha del contrato.
— Calendarios detallando elementos del contrato.
— Cláusula indicando que ningún otro documento ni acuerdo oral forma parte del contrato de obligado cumplimiento; si hubiera algún documento
que se pretenda forme parte del contrato, debería incluirse con el mismo.
• Cláusulas de desempeño:
— Deberes y obligaciones de los socios.
— Calendario de desempeños concretos.
• Restricciones sobre los socios:
— Cláusulas de no competencia.
— Acuerdos de confidencialidad, incluyendo que cualquier declaración pública acerca de la alianza debe ser aprobada por todas las partes.
— Propiedad y licencias de los derechos de propiedad intelectual.
• Responsabilidades:
— Acuerdo del extremo hasta el que las partes son responsables, por ejemplo fijando determinada cantidad de dinero.
— En caso de fuerza mayor, acuerdo del tiempo hasta el que la situación se puede prolongar antes de buscar un nuevo socio o disolver la alianza.
Temas posteriores al establecimiento:
• Cambios en el contrato:
— Cláusula que establece que los cambios en el contrato deben hacerse por escrito y con la firma de ambas partes.
— Procedimiento de control de un cambio: calendario, nivel directivo que debe estar de acuerdo con el cambio.
— Número mínimo de reuniones formales para revisar los temas relativos a la alianza.
— Consideración de la transferencia del acuerdo y las obligaciones que conlleva a un tercero.
• Resolución de disputas:
— Procedimiento de escalada del conflicto.
— Recurso a los tribunales:
– Jurisdicción.
– Legislación a aplicar.
• Disposición de las acciones (aplicable sólo a joint ventures):
— Circunstancias en las que se pueden emitir nuevas acciones y quién las puede suscribir.
— Transferencia de acciones entre los socios o a un tercero.
— Tratamiento de todas las acciones de un socio como un bloque.
— Restricciones a la transferencia de acciones a terceros.
— Procedimiento de valoración de las acciones.
— Circunstancias que provocan la transferencia de acciones.
• Terminación:
— Disposición de las acciones (aplicable sólo a joint ventures).
— Circunstancias en las que puede terminarse el acuerdo, incluyendo qué constituye un incumplimiento que conlleva la conclusión de la alianza.
— Consecuencias de la terminación: qué sucederá con el personal, los derechos de propiedad intelectual, los activos y los contratos y obligaciones.

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de AE debería contemplar, algunos de los cuales tra- • Alta importancia estratégica de la AE. Estas
taremos con más detalle en adelante. Aunque está alianzas estratégicas suponen mayores riesgos
pensado para joint ventures bilaterales, las mismas que otras más periféricas, por lo que el incentivo
consideraciones son aplicables a las alianzas estra- a especificar el ámbito de la AE y clarificar los de-
tégicas contractuales (excepto las cláusulas relati- rechos y obligaciones mutuos es también mayor.
vas a las participaciones) y a las alianzas estratégi- Este tipo de alianzas estratégicas requiere mayor
cas multilaterales (si bien la negociación de éstas atención y claridad respecto a la forma en que la
probablemente será más compleja que la de alianzas AE terminará, para así disminuir el riesgo de crear
estratégicas bilaterales). un competidor y para evitar que recursos que son
El diseño del contrato plantea un dilema. Por una valiosos vayan a parar a manos de un tercero. Ha-
parte, cuanto más complejo es el contrato, menor es- bitualmente, los directivos controlan más estas
pacio queda para un comportamiento oportunista
al presentarse acontecimientos imprevistos. Por otra
parte, cuanto más complejo es el contrato, más cos-
toso resulta. Es necesario, por tanto, alcanzar un Un buen contrato es consistente con
equilibrio entre los costes de negociar, controlar y
hacer cumplir un contrato complejo, por una parte,
y por otra, aminorar la posibilidad de comporta-
el propósito de la AE y los intereses
mientos oportunistas. Las siguientes condiciones
aconsejan el diseño de contratos más complejos(4): de los socios, lo cual requiere un
• Altas inversiones en activos de uso especí- esfuerzo por clarificar los intereses
fico a la AE. Si una empresa invierte en activos
que son muy específicos a la AE, el socio puede
amenazar con terminar la misma, lo cual haría
que la empresa perdiera el valor de esos activos
específicos. Cuanto mayor sea el valor de la
pérdida potencial, más beneficioso es negociar alianzas estratégicas, estableciendo los mecanis-
contratos complejos que contemplen las conse- mos adecuados para ello y determinando las ma-
cuencias de una terminación de este tipo. neras de resolver las disputas y el modo de dirigir
el buen desarrollo de la AE.
• Existencia de relaciones previas entre los so-
cios. Cabe pensar que cuando los socios han ESTRUCTURA DE CAPITAL Y FINANCIACIÓN(6)
mantenido relaciones en el pasado, la confianza
generada a través de las mismas permitiría el Las consideraciones de esta sección se aplican
uso de contratos de menor complejidad. Además, principalmente a las joint ventures. Las opciones más
al haber trabajado juntos los socios, su compor- inmediatas para la financiación inicial incluyen la sus-
tamiento es más predecible gracias a las rutinas cripción de acciones ordinarias con aportación de te-
de trabajo conjunto ya establecidas. Sin em- sorería o bien con la transferencia de activos o tecno-
bargo, precisamente porque los socios tienen un logía y los préstamos de los accionistas. Los socios
mayor conocimiento mutuo están en condicio- deben tener presentes las consideraciones fiscales, así
nes de prever más contingencias futuras que como la posibilidad de financiar los proyectos de la
queden recogidas en los términos contractuales, joint venture a través de terceros.
resultando así los contratos más específicos y De mayor interés específico son las reflexiones
complejos. acerca de la financiación a futuro. Es necesario acor-
dar por adelantado los límites temporales y moneta-
• Duración preespecificada de la AE. Cuando el rios dentro de los cuales los socios están dispuestos a
horizonte temporal de la AE se especifica de an- comprometerse a proporcionar financiación adicio-
temano, se presentan mayores preocupaciones nal. De no hacerlo así, podrían encontrarse en situa-
acerca de temas como la propiedad de los des- ciones poco gratas.
arrollos tecnológicos conjuntos, el uso de infor- También es conveniente acordar los medios por los
mación confidencial, así como la forma en que que se facilitará financiación adicional, así como las
concluirá la AE. Además, siempre y cuando el ho- condiciones en las que los socios estarán obligados a
rizonte temporal no sea excesivamente largo, es cumplir estos compromisos. Cuando el negocio de la
más fácil prever circunstancias futuras que pue- joint venture es de nueva creación, cabe plantearse que
den afectar a la AE. En cambio, cuando la fecha los socios se comprometan a financiarla durante de-
de finalización de la AE está indeterminada, es
mucho más costoso tanto prever las condiciones
económicas a futuro como establecer las cláusu- (4) Véase Ariño, A. y J. J. Reuer (2004).
las contractuales adecuadas. (5) Basado en Campbell, E. y J. J. Reuer, obra cit.
(6) Esta sección se basa en Freshfields Bruckhaus Deringer (2001).

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terminado número de años. En este caso conviene pre- cuándo; qué presupuestos y planes de negocio deben
parar un calendario detallado donde se especifiquen ser aprobados. En lo que sigue comentaremos aspec-
las contribuciones, la forma de financiación y los acon- tos importantes a tener en cuenta en el diseño del
tecimientos que obligarán a cumplir el compromiso. Si consejo de administración y del comité de dirección
por el contrario los socios no se comprometen a facili- bajo el supuesto que el primero sea un órgano de su-
tar financiación a futuro, es preferible especificarlo ex- pervisión.
plícitamente.
Si el compromiso de otorgar financiación a fu- • Consejo de administración. Trataremos en pri-
turo es clave para la joint venture, deben establecerse mer lugar de algunas consideraciones generales
los procedimientos a seguir en caso de incumpli- para después hacer referencia a aspectos especí-
miento del compromiso. Se puede contemplar el pago ficos de joint ventures igualitarias donde los so-
de intereses de demora, la pérdida de derechos de cios comparten la propiedad al 50% y de joint
voto, de veto o de nombramiento de consejeros, así ventures con un socio mayoritario:
como la reducción de la participación en capital.
También puede interesar especificar si las otras partes — Consideraciones generales:
tienen o no la obligación de aportar los fondos que
faltan durante el período intermedio. – Los consejeros por parte de los distintos so-
cios deben tener un rango comparable en sus
LOS ÓRGANOS DE GOBIERNO Y DIRECCIÓN empresas respectivas. De lo contrario, no
tendrán la misma capacidad de decisión, lo
DE LA AE cual es una fuente de conflictos.
Al igual que en la sección anterior, las conside- – Como en todo consejo de administración,
raciones de ésta se aplican principalmente a las joint cualquier consejero se debe al bien de la
ventures. La estructura de los órganos de gobierno y joint venture en su conjunto y no al de
dirección debe ser tal que el equipo de quien le haya nombrado. En ocasiones pue-
dirección tenga el poder de decisión den producirse situaciones difíciles y puede
adecuado, a la vez que los intere- resultar conveniente que determinados te-
ses de los socios queden prote- mas se decidan a nivel de la junta general
gidos. Es natural que el de accionistas (donde se encontrarán los so-
equipo directivo desee cios y podrán resolver sus diferencias) en
mantener una cierta au- lugar de a nivel de consejo de administra-
tonomía, pero ésta no ción.
debe usarse en contra de los – Es de gran importancia determinar el uso que
legítimos intereses de los socios. pueda hacerse de la información confiden-
Hay que evitar tanto que la joint ven- cial. Si un consejero debe quedar libre para
ture cobre una vida propia completamente compartir información con otras personas de
desligada de los intereses de los socios como su empresa, esto ha de reconocerse clara-
ahogar la iniciativa del equipo directivo. Para al- mente en los documentos legales, impo-
canzar el necesario equilibrio hay que reflexionar niendo las obligaciones de confidencialidad
acerca de dos temas: la centralidad de la joint ven- a nivel de empresa socio.
ture para la estrategia y actividades de los socios y
el grado de complejidad y volatilidad de su entorno. — Joint ventures igualitarias: cuando los so-
Cuanto más clave sea la actividad de la joint ven- cios comparten la propiedad de la joint ven-
ture para los socios, más necesario se hace el con- ture a partes iguales, lo habitual será que
trol; cuanto más complejo y volátil el entorno, ma- tengan un mismo número de asientos en el
yor es la necesidad de autonomía del equipo direc- consejo de administración, lo cual da lugar a
tivo para así agilizar la toma de decisiones. Así, un potencial bloqueo en la toma de decisio-
habrá que establecer si el consejo de administración nes. El reto consiste en evitar que esto su-
tiene un papel activo en la dirección de la joint ven- ceda. Entre los mecanismos de desbloqueo se
ture (mayor control) o si es más bien un órgano de encuentran:
supervisión (mayor autonomía).
En cualquier caso, el modo de relacionarse el con- – El voto dirimente del presidente: Este meca-
sejo de administración (CA) y el comité de dirección nismo no goza de gran aceptación, ya que
(CD) debe quedar claramente establecido(7): qué de- supone inclinar la balanza del control hacia
cisiones debe tomar el comité de dirección, cuáles el una de las partes. Sin embargo, se puede
consejo de administración y cuáles deben referirse a amortiguar con presidencias rotativas entre
nivel de las empresas socio; cuáles serán las líneas de los socios.
dependencia; qué información debe presentarse y – El voto dirimente de un consejero indepen-
diente: La dificultad estriba en encontrar una
persona con la experiencia adecuada que sea
(7) Esta sección se basa en Freshfields Bruckhaus Deringer (2001). aceptable por ambas partes.

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– Referir el asunto a un tercero, que podría ser • Comité de dirección. Las consideraciones para
un experto en el tema en cuestión o un árbi- decidir acerca del poder a delegar al comité de di-
tro: Este mecanismo no resulta adecuado rección y el poder que puede acumular el directivo
cuando las diferencias entre los socios se de- principal son las mismas que en el caso de cual-
ben a que tienen enfoques del negocio dis- quier empresa. Las responsabilidades en la direc-
tintos. ción no tienen por qué ser proporcionales a la es-
– Referir el asunto a los directivos máximos de tructura de la propiedad. Es decir, una joint ven-
las empresas socio: en ocasiones esto puede ture igualitaria no necesariamente tiene que tener
resultar lo más práctico, ya que el deseo de el mismo número de directivos nombrados por
evitar que el asunto escale hacia arriba puede cada socio. Incluso una de las partes puede asumir
mover a los consejeros a alcanzar un la responsabilidad completa del día a día a través
acuerdo. de un contrato de gestión con la joint venture.
Puede suceder que ninguno de estos meca-
nismos funcione y que las diferencias sean tan En muchas ocasiones esto no se comprende co-
profundas que las partes decidan poner fin a la rrectamente y se piensa que la estructura directiva
joint venture. Trataremos el debe corresponderse con la es-
tema en una sección tructura de la propie-
posterior. dad: lo que es habi-
tual en los órganos
— Joint ventures de gobierno se
con un socio aplica inadecua-
mayoritario: damente a los
en este tipo, lo órganos de di-
natural es que rección. Así se
el socio mayori- procedió en la
tario pretenda AE que Renault
tener la última mantuvo con
palabra y controlar Volvo. Se crea-
la toma de decisiones. ron una serie de
Si bien los socios minoritarios quedan prote- comités operativos
gidos por las disposiciones legales de protec- igualitarios. Con criterios de decisión distintos (por
ción de accionistas minoritarios vigentes a ejemplo, los ingenieros de Renault valoraban el di-
nivel general, es conveniente estipular pro- seño y la repercusión en costes, mientras que los
tecciones contractuales que vayan más allá de Volvo se guiaban por los temas de seguridad), se
de los mínimos. Una manera de hacerlo es es- generaban conflictos que la propia estructura de
tablecer que los socios minoritarios tengan igualdad impedía resolver. Posiblemente habría re-
derecho de veto en temas de especial impor- sultado más eficaz que determinados comités ope-
tancia, como son un cambio en los estatutos, rativos hubieran estado dominados por personas
la ampliación de capital, compras y ventas de de Renault y otros por gente de Volvo, en función
activos de importancia, cambios significati- del tema de que se tratase.
vos en la naturaleza del negocio, inversiones
de capital o compromisos contractuales que FORMACIÓN DEL EQUIPO
excedan los límites acordados inicialmente, lí-
mites de los préstamos, un reparto de divi- A la hora de formar el equipo que dirigirá la AE
dendos por debajo de lo acordado, nombra- hay que plantearse una serie de temas que resultan
miento y cese de directivos clave, etc. Ejercer importantes: ¿contar con gente de las empresas socio
el derecho de veto puede conducir al bloqueo o con gente de fuera? ¿Cómo atraer buenos profe-
de una decisión. Puede evitarse introduciendo sionales a la AE? ¿Interesa que haya rotación de per-
los mecanismos comentados en el caso de las sonal en la AE?
joint ventures igualitarias. Una primera decisión es hasta qué punto contar
con personas de las empresas socio para dirigir y lle-
Se puede establecer una salvaguarda aún var a cabo la AE. En ocasiones, los activos que se
mayor consistente en una opción vendedora por aportan a la AE residen en las personas. Por ejemplo,
la que el accionista mayoritario está obligado a el conocimiento del mercado no se encuentra única-
comprar las acciones del minoritario si éste mente en unas bases de datos ni el “know-how” de
ejerce la opción (habitualmente al precio que se un producto se codifica sin más en unos planos. Hay
obtenga de una fórmula estipulada). También se un conocimiento de naturaleza tácita que es difícil de
puede establecer una cláusula por la que se obli- articular y transmitir y que es poseído (individual o
gue al accionista mayoritario a incluir las accio- colectivamente) por las personas que trabajan en una
nes del minoritario en caso de venta de las suyas organización. Cuando sea así, necesariamente habrá
a terceros. que contar con ellas dentro de la AE. En todo caso,

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los directivos procedentes de una de las empresas so- tancia para su propia empresa. De no ser así, presta-
cio deben evitar adoptar una actitud de “nosotros rán menor atención a las mismas, lo cual redundará
frente a ellos”. De hecho, el uso de esta jerga es un en perjuicio de la AE y, por tanto, de la propia em-
indicador de falta de entendimiento entre los socios. presa. De ahí que una tarea primordial de la dirección
Una pregunta que surge con frecuencia es si el sea comunicar internamente el porqué y la importan-
directivo principal de la AE debe proceder de alguna cia de la AE.
de las empresas socio o si es preferible que sea un
externo. Si bien hay pocos estudios al respecto, la CUIDAR LA RELACIÓN CON EL SOCIO
evidencia empírica(8) parece indicar que las alian-
zas estratégicas multilaterales en las que el direc- Consecuencia de las relaciones mantenidas en la
tivo principal procede de una de las empresas son etapa de la negociación –y en su caso consecuencia
más efectivas que aquellas en que esta persona es también de otras relaciones previas–, los socios ini-
un externo; sin embargo, no sucede así en las alian-
zas estratégicas bilaterales. Un directivo principal
interno conoce mejor las tareas de la AE que uno
externo. Por tanto, está en mejores condiciones de
controlar las aportaciones de los socios, su compor-
tamiento, etc., contribuyendo así al éxito de la AE.
Este efecto positivo queda neutralizado en las alian-
Cuanto más complejo es un contrato,
zas estratégicas bilaterales, en las que un directivo
principal procedente de una de las empresas socio menor espacio queda para un
puede tener una visión más parcial que introduzca
desequilibrios en la AE. comportamiento oportunista al
Para el éxito de la AE es de interés que las perso-
nas que participen en la misma tengan un alto nivel
de profesionalidad (cualquiera que sea el nivel jerár-
presentarse imprevistos
quico que ocupen). Desearán ser transferidas a las ac-
tividades de la AE según cómo perciban que este en-
cargo afectará a su futuro desarrollo profesional. Es
triste el comentario del director de recursos huma-
nos de una joint venture entre dos empresas multina- cian la andadura de la AE con determinado nivel de
cionales muy conocidas: “Cuando recibo una llamada calidad de su relación. La calidad relacional –elemento
del departamento de recursos humanos de [uno de clave en el desarrollo de una AE– hace referencia a la
los socios] sugiriendo que piense en contratar a de- medida en que los socios se sienten cómodos entre sí
terminada persona de su empresa, pienso: “Si me la y están dispuestos a basar sus relaciones en la con-
ofrecen, ¿qué tendrá de malo?””. En esa empresa se fianza mutua(9). Al inicio de una AE, la calidad rela-
percibía de manera generalizada que las asignaciones cional puede ser más o menos neutra. Sin embargo,
a joint ventures eran un recurso fácil para retirar del conforme se desarrolla la AE, la calidad relacional
negocio principal a personas de valía profesional evolucionará en dirección positiva o negativa. Las ex-
cuestionable. Por el contrario, en una empresa espa- pectativas iniciales acerca del futuro comportamiento
ñola con joint ventures en países con economías del socio van cambiándose poco a poco por percep-
emergentes, creían que enviar allí a sus directivos era ciones acerca de cómo se comporta de hecho.
una buena forma de identificar los que tenían mayor Las evaluaciones que los socios hacen de sus
potencial a futuro: “Si envías a alguien a Rusia y allí constantes interacciones van modificando el nivel de
tiene éxito, lo tendrá en cualquier sitio”. Recibir una la calidad relacional. Si el socio mantiene sus com-
propuesta para participar en una AE tenía lecturas promisos incluso en circunstancias en que le resulta
muy distintas en uno y otro caso. En el primero, un costoso hacerlo así, las expectativas de la empresa
buen directivo la rechazaría; en el segundo, la acoge- acerca del comportamiento futuro del socio mejoran.
ría con convicción. Por el contrario, si ante la menor dificultad el socio
Una AE supone una oportunidad de aprendizaje actúa velando sólo por sus intereses, dichas expectati-
importante, tanto para las personas a nivel individual vas empeoran. Pero la empresa no sólo modificará sus
como para la organización a nivel colectivo. Se plan- expectativas acerca del comportamiento futuro del
tea aquí una disyuntiva: por una parte, cuanta más socio, sino que ajustará su propio comportamiento
gente entre en contacto con la AE, más oportunida- respondiendo a tales expectativas. Conforme mejora
des de aprendizaje se presentarán; de otra parte, una la calidad relacional, los socios se hacen más toleran-
rotación elevada del personal asignado a la AE puede tes a las pequeñas desviaciones que se produzcan res-
suponer tener que reiniciar la relación prácticamente
de nuevas.
Por último, debe tenerse presente que todas las
personas cuya actividad guarde relación con las acti- (8) García-Canal, E. et al. (2003)
vidades de la AE deben ser conscientes de su impor- (9) Ariño, A. et al. (2001)

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Nº 237 • Marzo 2007 Estrategia Financiera 29
Caso de Estudio
Alianzas estratégicas: opciones para el
crecimiento de la empresa (II)

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pecto a lo previsto. Por el contrario, si la calidad rela- jando que ellos llevaran a cabo el trabajo de des-
cional va empeorando, la empresa puede adoptar un arrollo para más adelante intentar apropiarse del
comportamiento que responda sólo a sus propios in- producto. La reacción de la empresa fue retirar sus
tereses, deteriorando cada vez más la relación. recursos. Con el tiempo, el acuerdo concluyó y nin-
Las interacciones entre los socios mantienen la guna de las empresas alcanzó los objetivos que tenía
relación en constante evolución. A mayor importancia en relación a la AE.
El segundo ejemplo se refiere a la comisión de
una acción perjudicial para el socio y está tomado
de la primitiva AE entre las aerolíneas Northwest y
Para alcanzar el necesario equilibrio KLM(10). En una ocasión, un directivo de KLM invitó a
comer al máximo representante del sindicato de pi-
lotos de Northwest y le dio a entender que los inte-
hay que reflexionar acerca de dos reses de KLM y los del sindicato eran los mismos, si
bien no coincidían con los intereses de los principales
temas: la centralidad de la joint accionistas de Northwest. Estos se enfurecieron, ya
que pensaron que KLM había ido de espaldas y exi-
venture y el grado de complejidad y gieron a KLM que firmara un acuerdo por el que que-
dara limitada la participación de KLM en Northwest
volatilidad de su entorno si no querían que la AE peligrara.
En definitiva, los comportamientos de las empre-
sas participantes en una AE, el modo como los socios
perciban esos comportamientos y cómo reaccionen a
los mismos influyen directamente en el nivel de cali-
dad relacional, el cual se modifica conforme avanza la
del objeto de una interacción, mayor será su impacto relación. En palabras del director financiero de Merck,
en el nivel de calidad relacional. Las motivaciones “los elementos que hacen que [una AE] tenga éxito
atribuidas a la otra parte se hacen relevantes, así son prestar atención, dedicar tiempo y tener una
como también si determinado comportamiento se buena química a nivel personal”(11).
considera intencionado o inadvertido. Los socios se
adaptarán constantemente al estado de la situación, PRESTAR ATENCIÓN A LOS CAMBIOS
bien resolviendo los conflictos y reforzando su rela-
ción, bien actuando en interés propio y condenando Conforme avanza la AE, los socios pueden descu-
la AE al fracaso en el medio plazo. brir que los términos del contrato no se adaptan a
De esta discusión se desprende que si bien el sus intereses como habían previsto y puede hacerse
comportamiento cooperativo es necesario para el aconsejable una modificación del mismo. Sin em-
buen término de una AE, éste no se produce de ma- bargo, renegociar un contrato conlleva ciertos costes
nera automática. Los directivos de la empresa actua- no despreciables, por lo que es aconsejable sólo en
rán de manera cooperativa siempre y cuando espe- determinadas circunstancias que pueden agruparse
ren que los directivos del socio se comporten de ma- en dos categorías: condiciones iniciales y condiciones
nera recíproca. Conforme la relación avanza, cada ex post(12).
socio aprende acerca del otro y toman forma deter- Las condiciones iniciales que inciden en la necesi-
minadas normas de reciprocidad. dad de renegociar un contrato y en el coste de la re-
Pero es posible cooperar en unos aspectos y no negociación incluyen las siguientes situaciones:
en otros. Es más, la falta de cooperación puede ser
por omisión de actos que podrían ser beneficiosos • Estructura inadecuada de la AE. A la hora de
para el socio o por comisión de actos perjudiciales estructurar una AE como de capital o puramente
para el mismo. Dos ejemplos ilustrarán este punto. contractual, se pueden cometer errores. Un po-
El primero se refiere a la omisión de una acción be- sible error es establecer una AE de capital para
neficiosa para el socio. Una empresa del sector de una relación relativamente sencilla(13). Ya he-
componentes de automoción tenía un acuerdo de mos hablado antes de la AE que Amazon.com y
investigación conjunta con una empresa de otro Toysrus.com establecieron en 2000 para la venta
país. Con el paso del tiempo, los directivos de la pri- de juguetes “on-line”. Amazon gestiona la tienda
mera observaron que la empresa socio no aportaba virtual, lleva a cabo la distribución y atiende el
los recursos esperados. Sospecharon del tema y vie- servicio a los clientes, mientras que Toys-R-Us
ron en él un indicio de que el socio podía estar de- es responsable de las compras de mercancía. La
relación está estructurada como un acuerdo
contractual por el que Toys-R-Us financia los ju-
(10) Tully, S. (1996) guetes que se encuentran en los almacenes de
.(11) Coy, P. (1999). Amazon y registra las ventas como propias. A
(12) Esta sección se basa en Ariño, A. y J. J. Reuer (2004). cambio, paga a Amazon un porcentaje para cu-
(13) Williamson, O. E. (1991). brir los costes de atención de los pedidos, ade-

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Caso de Estudio
Alianzas estratégicas: opciones para el
crecimiento de la empresa (II)

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más de una cuota anual(14). Para una relación signo de que los costes de una superestructura son
como la de Amazon.com y Toys-R-Us, que está mayores que los de una estructura insuficiente, ya
claramente especificada y que incluye una única que los primeros son costes reales –lentitud en la
actividad con escasas necesidades de coordina- toma de decisiones y costes organizacionales–,
ción, no se necesita la creación de una joint ven- mientras que los últimos son costes potenciales
ture con un consejo que supervise la colabora- –posible comportamiento oportunista. También
ción. De hecho, una superestructura ralentiza la hay evidencia empírica(20) que las empresas pe-
toma de decisiones y supone un elevado coste queñas son menos proclives
organizacional(15). que las grandes a
Pero también se puede cometer el renegociar el
error opuesto: estructurar un acuerdo contrato de una
puramente contractual cuando se AE frente a los
habría necesitado una AE de capi-
tal(16). Sony Ericsson
Mobile Communi-
cations (SEMC) es
el resultado de
la fusión de las
actividades de
telefonía móvil
de Sony y Ericsson, consti-
tuida en 2001 para hacer
frente al liderazgo de No-
kia en el sector. En el mo-
mento de su formación,
SEMC contaba con unos desajustes en la estructura
3.500 empleados a nivel de la alianza. Posiblemente es así porque las em-
mundial y unos ingresos conjuntos presas grandes tienen más poder y están, por
de 7.700 millones de euros aproximadamente(17). tanto, en mejores condiciones para adaptar sus
Para una relación compleja como SEMC, de ám- alianzas estratégicas con el tiempo.
bito muy amplio y altas necesidades de coordi-
nación, y en la que los derechos y deberes de los • Altas inversiones en activos específicos a la AE.
socios son difíciles de especificar ntes de que la El control próximo de todas las alianzas estratégi-
AE comience, un acuerdo puramente contractual cas de una empresa resulta costoso, por lo que los
no habría sido suficiente. Además, un acuerdo así directivos son selectivos a la hora de decidir cuáles
no habría podido ofrecer incentivos adecuados siguen más de cerca. De hecho, se involucran más
para evitar comportamientos de tipo oportunista en las alianzas estratégicas en que han compro-
por parte de los socios(18). metido recursos específicos que en las que requie-
En resumen, si la estructura de una AE es su- ren un compromiso de recursos más modesto y re-
perior o inferior a la que sería deseable, los benefi- versible. Por tanto, están más al tanto de las nece-
cios de adaptarla pueden superar los costes de re- sidades de cambio en las primeras. Además, dado
negociar el contrato. Hay evidencia empírica(19) que es más difícil dar un uso alternativo a esos ac-
que las renegociaciones son más frecuentes en los tivos, cambiar el contrato de estas alianzas estra-
casos en que se ha formado una joint venture tégicas y mantener dichos activos en uso justifica
cuando habría sido suficiente un acuerdo contrac- los costes de renegociar el contrato. Curiosamente,
tual, que en los casos contrarios. Esto puede ser las empresas pequeñas hacen más inversiones es-
pecíficas en sus alianzas estratégicas que las em-
presas grandes, y estas inversiones exigen más re-
negociaciones contractuales(21).
(14) Waters, R. (2000).
(15) Williamson, O. E. (1991).
• Baja complejidad contractual. Ya hemos comen-
(16) Véase Williamson, O. E. (1991); Oxley, J. E. (1997).
tado antes que hay razones para diseñar contratos
(17) Caso nº DG-1388-E, «Sony Ericsson Mobile Communications: A
New Challenge for Nokia» (A), IESE Business School, Universidad de alianzas estratégicas relativamente sencillos y
de Navarra. después ajustarlos conforme la colaboración
(18) Oxley, J. E. (1997). avanza y se dispone de mayor información res-
(19) Reuer, J. J. y A. Ariño (2002). pecto de las dificultades y las necesidades pecu-
(20) Reuer, J. J. y A. Ariño (2003), «Alliance dynamics for entrepreneurial liares de la relación(22). Por otra parte, los directi-
firms», IESE Business School, Universidad de Navarra, WP nº 526. vos quieren evitar los riesgos asociados a una re-
(21) Reuer, J. J. y A. Ariño (2003). negociación del contrato ex post y quieren diseñar
(22) Bleeke, J. A. y D. Ernst (1997). contratos más complejos para intentar reducir los
(23) Parkhe, A. (1993). comportamientos oportunistas(23). Los contratos

32 Estrategia Financiera Nº 237 • Marzo 2007


Caso de Estudio
Alianzas estratégicas: opciones para el
crecimiento de la empresa (II)

más sencillos requieren ser ajustados según la in- el entorno como éste, los directivos también adap-
formación se va haciendo disponible, mientras que tan sus comportamientos y, como hemos discutido
los más complejos contemplan un abanico más en la sección anterior, pueden provocar en sus so-
amplio de situaciones y a menudo incluyen proce- cios percepciones de comportamientos poco equi-
dimientos de ajuste a futuro(24), por lo que su re- tativos. Es decir, cuando los cambios en el entorno
negociación se hace menos necesaria. Intel se unió afectan a una AE, los directivos cambian sus apre-
a Rambus y apoyó la tecnología del chip de me- ciaciones sobre el valor de la misma(30). En estas
moria de Rambus, que era más rápido. Sin em- circunstancias, son más proclives a renegociar los
bargo, los fabricantes de ordenadores personales términos contractuales de manera que reflejen
preferían una memoria más lenta pero más barata. mejor las nuevas condiciones.
Cambiar la AE se hizo difícil, ya que Intel tenía una
obligación contractual que especificaba que su mi- En esta sección hemos revisado los aspectos que
croprocesador Pentium 4 debía utilizar una memo- marcan la diferencia para que una AE tenga éxito:
ria de Rambus(25). Hay evidencia empírica(26) que comprobar que la mejor manera de alcanzar el obje-
indica que los directivos son más proclives a rene- tivo es una AE; comprobar que el socio es adecuado;
gociar el contrato de una AE cuanto más simple prestar atención al diseño de la AE; cuidar la relación
sea éste. De hecho, puede haberse diseñado un con el socio y prestar atención a los cambios de cir-
contrato sencillo para dar flexibilidad a la relación, cunstancias. Aunque la AE tenga éxito, puede llegar el
a la vez que se evitan los costes de incorporar pro- momento en que se deba poner fin a ella. Y si no ha
visiones para contingencias futuras. tenido éxito, sino que se ha convertido en una fuente
de problemas, razón de más para finalizarla. Este es el
Hay dos condiciones ex post que también influyen objeto de la próxima sección.
en la necesidad de renegociar el contrato:

• Cambios en la estrategia de uno de los socios


LA FINALIZACIÓN DE UNA AE
que afectan a la AE. Al igual que en la situa- La finalización de una AE no implica que la misma
ción anterior, los directivos cambian sus valora- haya fracasado. La AE puede concluir porque así estu-
ciones de una AE cuando su empresa cambia de viera previsto de entrada o porque ya se hayan cu-
estrategia. La nueva estrategia(27) puede suponer bierto los objetivos con que se creó. En estos casos la
una menor valoración de los recursos aportados AE habría sido un éxito. También puede darse el caso
por el socio. Por ejemplo, la AE entre Laura As- que la AE termine porque se muestre una herramienta
hley y Federal Express Business Logistics Services ineficaz para alcanzar los objetivos previstos –lo cual
se vino abajo cuando FedEx cerró sus operacio- será menos probable si se han atendido a las conside-
nes europeas, que estaban en pérdidas. Por el raciones hechas en la sección anterior. Sea cual sea la
contrario, una AE puede resultar más valiosa para circunstancia, conviene reevaluar periódicamente la
sus socios. Conforme la joint venture Fuji-Xerox conveniencia de mantener la AE o darle término, y así
se fue haciendo más y más importante para el evitar caer en mantener viva la AE por inercia.
desarrollo de nuevos productos de Xerox, así Para que una AE sobreviva se tienen que cum-
como para el crecimiento de sus ventas, hubo di- plir dos condiciones: la primera, que los beneficios
versas renegociaciones orientadas a aumentar los potenciales de los recursos comprometidos en la
fondos a disposición de la joint venture de ma- AE sean superiores a los obtenidos por medio de
nera consistente con sus aspiraciones globales. formas organizacionales alternativas; y la segunda,
Las alianzas estratégicas se incardinan en las es- que los costes de coordinación y dirección de la AE
trategias de los socios y evolucionan con ellas, de sean lo suficientemente bajos para no exceder el
forma que cuando cambian las estrategias de los beneficio incremental respecto a las otras alterna-
socios también lo hacen las estructuras de las tivas. De esta forma, caben dos supuestos que
alianzas estratégicas(28). Por tanto, al reflexionar pueden aconsejar poner fin a una AE: si los objeti-
sobre una AE, se debe tener en cuenta el contexto vos para los que se creó la AE ya no se cumplen
en que operan, que viene marcado por las estra- por medio de ella y si los costes de la AE aumentan
tegias de los socios. superando sus beneficios.

• Cambios en el entorno que afectan a la AE.


Los cambios en el entorno pueden alterar la valo-
ración que los directivos hagan de una AE. Los re- (24) Luo, Y. (2002).
cursos a los que la empresa accede mediante la (25) Foremski, T. (2000).
AE pueden no ser tan valiosos tras un cambio en (26) Reuer, J. J. y A. Ariño (2002).
el entorno como lo eran antes, o por el contrario, el (27) Véase Zajac, E. J. y C. Olsen (1993); Doz, Y. L. (1996); Ariño, A. y J.
valor de dichos recursos puede aumentar(29). La de la Torre (1998).
colaboración entre Intel y Rambus perdió valor (28) Véase Koza, M. y A. Lewin (1998).
conforme el mercado prefirió microprocesadores (29) Véase Zajac, E. J. y C. Olsen (1993).
más lentos pero más baratos. Frente a cambios en (30) Véase Doz, Y. L. (1996); Ariño, A. y J. de la Torre (1998).

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Caso de Estudio
Alianzas estratégicas: opciones para el
crecimiento de la empresa (II)

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• Los objetivos para los que se creó la AE ya no decisiones del equipo directivo, comparado con
se cumplen de manera eficiente por medio de una empresa individual(32). Estos costes incre-
ella. Cuando esto sucede, el beneficio de perma- mentales se deben al hecho que los socios ejer-
necer en la AE disminuye, pudiendo llegar a ser cen un gobierno conjunto y que a veces los
inferior a sus costes. Se puede llegar a esta situa- acuerdos iniciales suscritos son incompletos, por
ción por motivos tanto internos como externos a lo que habrá que renegociarlos. Los costes de di-
la AE. Los motivos internos incluyen las “carreras rección y coordinación de la AE pueden aumentar
por diversas razones:

— Diferencias entre los socios que emergen


Si los costes de dirección y conforme avanza la relación: Objetivos in-
compatibles, distintas filosofías en la toma
de decisiones, diseño de sistemas de remu-
coordinación son muy altos, se neración no cooperativos, asimetría en el po-
der que cada socio ejerce en la AE, etc. El
deteriora la calidad y eficiencia caso extremo sería aquel en que se pone de
manifiesto un desacuerdo insoslayable entre
en la toma de decisiones los socios que desemboca en una situación
de bloqueo como la descrita en la sección
del equipo directivo acerca del consejo de administración de joint
ventures igualitarias.

— Interdependencia de las tareas: Cuanto ma-


yor sea esta interdependencia, mayor será la
necesidad de coordinación, solución de proble-
de aprendizaje” ya mencionadas al hablar sobre mas en conjunto y ajuste mutuo.
las alianzas estratégicas complementarias. Sucede
con frecuencia en alianzas estratégicas comple- — Dinamismo del entorno donde se desarrolla
mentarias en que los recursos aportados por al la AE: Cuanto mayores y más rápidos sean los
menos una de las partes son de naturaleza tácita, cambios en el entorno, más perjudicial será
por ejemplo, algún tipo de conocimiento. Una vez para la AE que su equipo directivo sea lento en
que la empresa internaliza ese recurso, puede re- la toma de decisiones en temas importantes.
sultarle más beneficioso llevar a cabo en solitario Si los costes de dirección y coordinación
la actividad en cuestión y finalizar la AE(31). son muy altos, se deteriora la calidad y eficien-
Los motivos externos incluyen tanto los cam- cia en la toma de decisiones del equipo direc-
bios en la estrategia u organización de uno de los tivo, pues el tiempo que dedican a negociar, lle-
socios como los cambios en el entorno, a los que gar a acuerdos y coordinarse, disminuye el
ya nos hemos referido en la sección anterior. Los tiempo disponible para las decisiones más im-
cambios en el entorno pueden producirse tanto a portantes que deben tomar: manejar los temas
nivel del sector (fuerte consolidación, disminu- operativos y estratégicos cruciales para que la
ción del crecimiento, etc.) como a nivel más am- AE logre los objetivos perseguidos por los so-
plio (cambios tecnológicos, políticos, económicos, cios. Esto afectará negativamente el desem-
etc.). peño de la AE y será un motivo para decidir su
término.
• Aumento en los costes de la AE. La estructura
organizativa de las alianzas estratégicas, sobre En ocasiones no es sencillo que los socios se pon-
todo cuando toman la forma de joint ventures, gan de acuerdo acerca de cuándo y cómo poner fin a
impone una carga mayor de costes de coordina- la AE, especialmente si la finalización viene provo-
ción y de dirección sobre el proceso de toma de cada por una situación de bloqueo entre los socios.
Por eso resulta muy conveniente estipular a nivel
contractual las circunstancias en las que la AE puede
(31) No obstante, conviene tener presente que es elección de los socios concluirse, incluyendo qué actuaciones constituyen
qué tipo de AE construir (véase Ariño, A., E. García-Canal y A. una ruptura del acuerdo suficientemente seria como
Valdés [1999]). Una alianza estratégica se convierte en una «carre-
ra de aprendizaje» no de forma automática, sino como conse- para proceder a finalizarla, así como qué sucederá
cuencia de la intención y del comportamiento de los socios. Si los con el personal, los activos, las obligaciones asumidas
socios conciben la AE como una relación a largo plazo y evitan conjuntamente, etc.(33). También conviene establecer
comportamientos oportunistas, la AE puede llegar a convertirse en
un «ciclo de aprendizaje» en que el mayor conocimiento mutuo
el mecanismo por el que se procederá a la finaliza-
permita a los socios identificar nuevas oportunidades de negocio ción, especialmente en el caso de joint ventures. Entre
a emprender conjuntamente. estos mecanismos se encuentran la venta de acciones
(32) Véase Pearce, R. J. (1997). de la parte en discordia a un tercero dispuesto a com-
(33) Véase Campbell, E. y J. J. Reuer (2001). prarlas y la “ruleta rusa”, por la que una de las partes

34 Estrategia Financiera Nº 237 • Marzo 2007


Caso de Estudio
Alianzas estratégicas: opciones para el
crecimiento de la empresa (II)

se ofrece a comprar las acciones de la otra a determi- BIBLIOGRAFÍA


nado precio pero con el riesgo de tener que vender
las suyas a la otra parte al mismo precio(34). En úl- • Alvarez, S. A. y J. B. Barney, “How entrepreneu-
timo término, se puede proceder a la liquidación de la rial firms can benefit from alliances with large
joint venture con venta de los activos. partners”, Academy of Management Executive,
15, 2001, págs. 139-148.
• Ariño, A., “Alianzas estratégicas. ¿Estamos pre-
CONCLUSIONES parados?”, Revista de Antiguos, IESE Business
En esta nota técnica hemos dado School, Universidad de Navarra, nº 81, 2001,
una visión panorámica de las págs. 24-28.
alianzas estratégicas. A pesar • Ariño, A. y C. García Pont, “Alianzas
de sus muchas ventajas, estratégicas”, en “La dirección inter-
las alianzas estratégicas nacional de la empresa”, Biblioteca
también presentan IESE de Gestión de Empresas, vol.
dificultades, que se 28, Deusto, Barcelona, 1997,
pueden aminorar págs. 41-62.
prestando aten- • Ariño, A. y J. de la Torre,
ción a temas “Learning from failure: To-
clave identifica- wards an evolutionary mo-
dos a lo largo del of collaborative ventu-
de la nota. No res”, Organization Science,
obstante, hay 9, 3, 1998, págs. 306-325.
que tener pre- • Ariño, A. y J. J. Reuer,
sente que una “Designing and Renego-
AE no tiene por tiating Strategic Alliance
qué ser perenne Contracts”, Academy of
y que terminarla Management Executive, 18,
no comporta su 3, 2004, págs. 37-48.
fracaso. • Ariño, A., J. de la Torre y P.
A estas alturas, S. Ring, “Relational quality: Ma-
el lector poco iniciado naging trust in corporate allian-
en la práctica de las ces”, California Management Re-
alianzas estratégicas estará view, 44, 1, 2001, págs. 109-131.
preguntándose: “¿Puedo per- • Ariño, A., E. García-Canal y A. Valdés,
mitirme el riesgo de llevar a cabo “Longevity of strategic alliances between com-
una AE?”. Sin embargo, la pregunta adecuada petitors: A dynamic value creation approach”,
es: “¿Puedo permitirme el riesgo de no llevar a cabo IESE Business School, Universidad de Navarra,
una AE?”. Y es así porque en un entorno de incerti- WP nº 404, 1999.
dumbre como el actual, marcado por el cambio tec- • Ariño, A., J. de la Torre, Y. Doz, P. S. Ring y G. Lo-
nológico, los procesos de internacionalización, las renzoni, “Process issues in alliance manage-
concentraciones sectoriales y los cambios regula- ment: A panel discussion”, Advances in Interna-
torios, la respuesta a los retos a que la empresa se tional Management: Managing Transnational
enfrenta con frecuencia viene de la mano de las Firms, vol. 14, Michael A. Hitt (editor), Elsevier,
alianzas estratégicas. Oxford, 2002, págs. 173-219.
Reflexione el lector: “¿Está mi empresa preparada • Bleeke, J. A. y D. Ernst, “The way to win in cross-
para competir cooperando? ¿Estoy yo personalmente border alliances”, Harvard Business Review, 69,
preparado?”. Para desarrollar la capacidad de cooperar 6, 1997, págs. 127-135.
es necesario atravesar un proceso de prueba y error. • Büchel, B., “Managing partner relations in joint
Si no se tiene experiencia, la recomendación es em- ventures”, MIT Sloan Management Review, ve-
pezar a colaborar en actividades que no son clave rano 2003, págs. 91-95.
para la posición competitiva de la empresa, por aque- • Campbell, E. y J. J. Reuer, “International alliance
llo de que es mejor hacer los experimentos con gase- negotiations: Legal issues for general mana-
osa. No hay que esperar a hacer alianzas estratégicas gers”, Business Horizons, 44, 1, 2001, págs. 19-
en el momento en que se hacen necesarias para la 26.
supervivencia de la empresa. Es preferible un entre- • Chi, T., “Trading in strategic resources: Neces-
namiento que permita enfrentarse a alianzas estra- sary conditions, transaction cost problems, and
tégicas progresivamente complejas. Frente a un fu- choice of exchange structure”, Strategic Mana-
turo cada vez más incierto, esta capacidad puede ser gement Journal, 15, 1994, págs. 271-290.
lo que marque la diferencia en relación a los compe-
tidores. A cooperar se aprende cooperando. Y mañana
será más tarde que hoy. 9 (34) [COPYRIGHT].

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Nº 237 • Marzo 2007 Estrategia Financiera 35
Caso de Estudio
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36 Estrategia Financiera Nº 237 • Marzo 2007

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