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Teoría clásica de la sociología de

la educación de M. Weber
Dentro de las teorías clásicas de la sociología de la educación, nos encontramos con tres
grandes autores: E. Durkheim, K. Marx y M. Weber. Cada uno orienta sus estudios a ámbitos dis-
tintos, pero sin embargo, los tres trabajan el mismo campo. Mientras que E. Durkheim se centra
en los “hechos sociales” y la “solidaridad social” para diferenciar la sociedad tradicional de la mo-
derna, K. Marx lo atribuye a la distribución por clases sociales y la imposición de las ideologías de
los grupos dominantes. Así pues, M. Weber realiza su teoría de la dominación y el poder, donde
presenta tres tipos de dominaciones: carismática, tradicional y legal, que corresponderán con los
distintos estilos de educación que diferenciaba: “educación carismática”, “educación humanísti-
ca” y “educación especializada”.

La educación carismática

La educación carismática trata de fomentar las cualidades innatas del individuo. De esta
forma, se centra en despertar, cuidar y desarrollar las habilidades que poseemos cada uno,
con la ayuda de un maestro que nos guíe. Si bien es cierto que dicha educación parte de un
nivel de trabajo superior, al tener ya una base y una facilidad de aprendizaje mayor, excluye a
gran parte de la población, por lo que no es un sistema integrador. La educación carismática
nos la encontramos entre la élite de la sociedad, que destacan por sus “dones”, como es el
caso de la música (cantantes, músicos, compositores, etc.) deporte (natación, gimnasia artís-
tica, atletismo, etc.), teatro y espectáculo (actor, mago, humorista, etc.), letras, pintura,…

La educación especializada

La educación especializada parte del aprendizaje de conocimientos y distintos saberes,


para llegar al dominio de una materia y así poder empezar a razonar sobre ella, resolviendo
problemas e interrogantes que se planteen. La educación especializada se encuentra, salvo
excepciones, al alcance de todo el mundo. Además permite evolucionar en todo tipo de cam-
pos, pero lo que parece una ventaja, también trae consigo un importante inconveniente.
Dada la estructura y la organización social en la que nos encontramos inmersos, sólo unos
pocos individuos pueden dedicarse expresamente a continuar con esta educación, como los
científicos e investigadores, por lo que todas las personas que comienzan con este sistema,
sólo podrán alcanzar unos conocimientos mínimos sobre su especialidad, para adentrarse lo
antes posible al mundo laboral. Esta educación es llevada a cabo por el grueso de la pobla-
ción, si bien cabe destacar algunas profesiones como los investigadores de Ingeniería Genéti-
ca, Células Madre, medicina, que últimamente están desarrollando importantes avances.

La educación humanística

La educación humanística se encuentra íntimamente relacionada con la tradición y la


transmisión de conocimientos no especializados de generación en generación. Se trata de
una educación rica en valores y que actualmente tiende a desaparecer.

Teoría Clásica de la Sociología de la Educación de M. Weber 1


Así pues, este tipo de sistema estanca y no deja evolucionar el saber, siendo el conformis-
mo una de sus características. Del mismo modo, aunque las costumbres se
“institucionalicen”, no quieren decir con ello que sean buenas, aunque contribuyen a la
cooperación, reunión, patriotismo,… Este tipo de educación se da de una manera especial en
un ámbito rural, y es propio de profesiones artesanales que últimamente se están perdiendo
debido a los procesos de mecanización, como los que trabajan la madera, el barro, el vidrio,
el textil, cuyas empresas y técnicas suelen pasar de padres a hijos.

Con todo esto, y una vez estudiado los diferentes tipos de educación que plantea M.
Weber, podemos deducir que la educación especializada predomina en nuestro sistema actual,
aunque no debemos olvidar que en la realidad social en la que nos desenvolvemos, se encuen-
tran los tres tipos mezclados en diferente medida atendiendo a la personalidad y conducta de
cada uno de nosotros.

Este hecho se caracteriza por el ansia de evolución y justificación de todo lo sucedido a


través de la ciencia y la razón, por lo que no es de extrañar, que ante un acontecimiento
determinado, lo primero que se pida es una argumentación científica, cobrando gran relevancia
las ciencias frente a otros tipos de creencias y especulaciones. Esto se debe al “pacto” que existe
en la sociedad, por el cual, todo lo que provenga de la racionalización se considera verdadero.

Bibliografía:

PECOURT GRACIA, J. (2011). Teorías clásicas y contemporáneas de sociología de la educación. En


BELTRÁN, J. y HERNÁNDEZ, F.J.(coords.),Sociología de la Educación. Madrid: McGraw-Hill,pp.17-30.

Carlos Herraiz Ayllón


Primero de Primaria - Grupo A

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