El trabajo en equipo es la colaboración de individuos para alcanzar un objetivo común.
El trabajo en equipo surge de la necesidad de mejorar rendimientos, actitudes y la
lealtad del grupo de trabajo y ocurre cuando un grupo de personas tratan de cooperar, utilizando sus habilidades individuales y aportando retroalimentación constructiva, más allá de cualquier conflicto que a nivel personal pudiera haber entre los individuos.
Los cuatro elementos que favorecen el trabajo en equipo son:
Comunicación efectiva: Facilita la transmisión de información, ideas y feedback entre
los miembros del equipo.
Coordinación: Permite la organización y sincronización de actividades para lograr la
meta compartida.
Confianza: Fomenta un ambiente de apoyo mutuo y creencia en las habilidades y
compromisos de los demás miembros del equipo.
Compromiso: Motiva a los integrantes a contribuir activamente, asumiendo
responsabilidades y participando en la toma de decisiones.