Está en la página 1de 2

9.

Sistema de defensa de libre competencia:

La Ley de defensa de la libre competencia es el Decreto Ley (D.L.) 211 de 1973. Antes se
llamaba ley antimonopolios.

El bien jurídico protegido es la “libre competencia”, el cual se puede especificar de dos


maneras:

a. Por medio de un LISTADO, con prácticas que se consideran per se atentatorias contra
la libre competencia, es decir, si se incurre en ellas no existe justificación que las valide
que individualice las prácticas prohibidas. Su inconveniente es que como la economía es
dinámica se tendría que estar renovando constantemente. La ley no tiene un efecto
retroactivo.
b. Por medio de una definición de carácter general: que se relaciona con el criterio de la
regla de la razón, es decir, se debe analizar cada conducta en particular y no se puede
determinar a priori si una conducta es atentatoria contra la libre competencia.
En la actualidad tiene mucho mayor aceptación la regla de la razón que la doctrina de las
prácticas per se. Sin perjuicio de eso, prácticas como las fijaciones de precios o la
limitación de la producción se consideran per se contrarias a la libre competencia.
El inconveniente de una definición de carácter general, es que se pierde certeza jurídica al
no saber si una práctica en concreto se encuentra sancionada o no. El juez tiene más
movilidad en base a este sistema.

En Chile tenemos un sistema mixto al establecer el bien jurídico protegido de la libre


competencia, ya que el D.L. 211 en su artículo 3° contiene una declaración de principios al
señalar que "el que ejecute o celebre, individual o colectivamente, cualquier hecho, acto o
convención que impida, restrinja o entorpezca la libre competencia o que tienda a producir
dichos efectos” será sancionado con las medidas que el decreto señala sin perjuicio de las
medidas correctivas o prohibitivas que respecto de dichos hechos, actos o convenciones
puedan disponerse en cada caso.

Sin embargo también contiene un listado de 3 ejemplos: carteles, abuso de posición


dominante y precios predatorios, aunque en la mayoría de los casos se aplica el principio
general.

En la actualidad el órgano que se encarga de conocer las causas en materia de libre


competencia es el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia.
Antiguamente los miembros no necesariamente eran expertos en materia de libre
competencia. En la actualidad un requisito básico es el conocimiento en materia de libre
competencia que deben tener los miembros del Tribunal.

El Tribunal está compuesto por 5 miembros. Lo preside un abogado designado por el


Presidente de la República de una nómina de 5 postulantes confeccionada por la Crte
Suprema.
Los otros cuatro integrantes son dos abogados y dos economistas. Dos son designados
por el Banco Central y los otros dos por el Presidente de la República de entre una
nómina confeccionada por el Consejo del Banco Central.

Las sanciones son de tipo pecuniarias y también existen sanciones penales.


Las sanciones pecunarias corresponden al treinta por ciento de las ventas del infractor
correspondientes a la línea de productos o servicios asociada a la infracción durante el
período por el cual ésta se haya extendido o hasta el doble del beneficio económico
reportado por la infracción. En el evento de que no sea posible determinar las ventas ni el
beneficio económico obtenido por el infractor, el Tribunal podrá aplicar multas hasta por
una suma equivalente a sesenta mil unidades tributarias anuales.

Los dineros por multas van para el fisco. Pero los que se ven efectivamente perjudicados
por las Prácticas Restrictivas de la Competencia pueden pedir indemnización de perjuicios
por medio de los tribunales ordinarios.

a. Empresa competitiva.
Aquella que se desenvuelve en un mercado donde se encuentran presentes una buena
parte de los requisitos de la competencia perfecta; atomicidad, homogeneidad, libre
entrada, información transparente y movilidad de los factores productivos.

Estas empresas son tomadoras de precio, es decir, toman el precio que existe en el
mercado y no son capaces de influir sobre él ya que no tienen poder de mercado.

Lo que tienen que procurar es llegar con sus productos en el momento más oportuno, es
decir, cuando los precios sean los más altos posibles.
Por ejemplo, en el caso de los agricultores que tienen producción de tomates, existe un
nivel de competencia fuerte, por lo tanto aceptan los precios y procuran venderlos a aquél
que sea el más adecuado.

b. Empresa competitiva imperfecta.


Dependiendo del grado de imperfección de la competencia, pueden influir más o menos
en los precios. Lo hará en la medida que haya menos sustitutos del producto que ofrezca.
También tiene que ver el momento más oportuno para ofrecer su producto

c. Empresa monopólica.
Es aquella que no tiene sustitutos o si los tiene son tan ineficientes que no compiten.
Las empresas monopólicas generan ingresos monopólicos: son aquellos ingresos que se
dan por la diferencia de los precios que puede fijar una empresa en calidad de empresa
monopólica, comparado con una empresa competitiva. Es la diferencia de ingresos entre
una empresa monopólica y una empresa de competitiva.

También podría gustarte