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TEMA 7: LA RESTAURACIÓN BORBÓNICA: IMPLANTACIÓN Y

AFIANZAMIENTO DE UN NUEVO SISTEMA POLÍTICO (1874-1902).


TEMA 8:PERVIVENCIAS Y TRANSFORMACIONES ECONÓMICAS EN EL
SIGLO XIX. UN DESARROLLO INSUFICIENTE.
Preguntas cortas:
1. -¿Qué político español fue responsable de la desamortización durante la Regencia
de María Cristina?
Juan Álvarez de Mendizábal.

-Explique el concepto de desamortización.

La desamortización es el asentamiento de la propiedad privada de la tierra, dando fin a su


amortización. Esta consistía en la vinculación de la tierra a instituciones nobiliarias,
eclesiásticas y municipales, por lo que los directores de esas instituciones no podían
venderlas, sólo disfrutar de sus rentas. La desamortización consistió en dos procesos
paralelos: la desvinculación de las tierras, que pasan a ser propiedad privada, por lo que
podían ser vendidas, medida tomada en la desamortización de Mendizábal de 1836; y la
expropiación por el Estado de los bienes del clero regular, del clero secular y de los
Ayuntamientos y su venta en pública subasta, aprobadas por Mendizábal en 1836, por
Espartero en 1841 y por Madoz en 1855 respectivamente.

2. -¿Qué político español fue responsable de la desamortización durante el bienio


progresista? Pascual Madoz. -Explique el concepto de desamortización. (misma
respuesta que la anterior).
3. -¿Cómo se denomina la etapa histórica en la que son protagonistas Cánovas y
Sagasta? Restauración.

-Describa brevemente el funcionamiento del sistema caciquil.

El sistema caciquil era un sistema electoral corrupto, en el que las elecciones eran
manipuladas, utilizando para ello herramientas como la compra de votos, la
falsificación de actas, adulteración del censo y la coacción del electorado. En esta
última era básica la labor de los caciques, personajes que en una comarca o
provincia determinada detentaban una gran influencia y poder económico. El
caciquismo se ejercía en toda su dimensión en las zonas rurales. Solían ser grandes
propietarios y copaban los cargos municipales, por lo que controlaban de hecho el
trabajo, los sorteos de quintas, el reparto de contribuciones y los trámites
burocráticos y administrativos, elementos todos ellos con los que chantajeaban a la
población. La dinámica de la manipulación electoral era la siguiente: una vez
decidido el cambio por los dos partidos dinásticos, el ministro de la Gobernación
elaboraba la lista de los candidatos que debían ser elegidos (“encasillado”),
enviándola a los alcaldes y caciques para que garantizaran su elección por los
métodos ya citados.
-¿Cómo se denomina el pacto por el que quedaba reconocido el turno entre los
partidos liberal y conservador para gobernar el país durante la Restauración? El
Pacto del Pardo de 1885.

-Describa brevemente el funcionamiento electoral que favorecía este turnismo.

El sistema electoral era corrupto, utilizando para ello herramientas como la compra de
votos, la falsificación de actas, adulteración del censo y la coerción del electorado. En esta
última era básica la labor de los caciques, personajes que en una comarca o provincia
determinada detentaban una gran influencia y poder económico. El caciquismo se ejercía en
toda su dimensión en las zonas rurales. Solían ser grandes propietarios y copaban los
cargos municipales, por lo que controlaban de hecho el trabajo, los sorteos de quintas, el
reparto de contribuciones y los trámites burocráticos y administrativos, elementos todos
ellos con los que chantajeaban a la población. La dinámica de la manipulación electoral era
la siguiente: una vez decidido el cambio por los dos partidos dinásticos, el ministro de la
Gobernación elaboraba la lista de los candidatos que debían ser elegidos (“encasillado”),
enviándola a los alcaldes y caciques para que garantizaran su elección por los métodos ya
citados.

5- ¿Qué líder político cubano encabezó la insurrección cubana junto a Antonio Maceo y
Máximo Gómez en 1895 con el «Grito de Baire»? José Martí.

-Explique brevemente las consecuencias del Tratado de París de 1898.

Por este tratado España reconoce la independencia de Cuba, bajo protectorado de EEUU,
le cede a este país las islas de Puerto Rico y Guam, y le vende las Islas Filipinas. Esto
supuso el fin del imperio ultramarino español, lo que sumió a la sociedad y a la clase política
española en un estado de desencanto y frustración que dio origen a propuestas de reforma
de la mano del movimiento del Regeneracionismo. Sin embargo, su fracaso llevó a la crisis
progresiva del sistema de la Restauración y finalmente a su caída en 1923, año que se
estableció la Dictadura del general Miguel Primo de Rivera.

6. -¿Qué movimiento intelectual y político surgió como consecuencia del Desastre del 98?
El Regeneracionismo.

-Explique las consecuencias para España de la crisis del 98 en los ámbitos económico,
político e ideológico.

La derrota frente a EEUU y la pérdida de las últimas colonias de ultramar supusieron


grandes consecuencias para España. En el terreno económico, España perdió los
mercados coloniales, aunque esta consecuencia negativa se vio compensada por la
disminución del déficit público, al desaparecer los gastos de mantenimiento de las colonias,
y por la repatriación de capitales de los colonos, que incentivó la inversión. Además,
surgieron industrias para compensar la falta de suministro colonial de ciertos productos,
como el azúcar. En el terreno político, las consecuencias fueron las críticas al régimen de la
Restauración, en un primer momento desde el movimiento regeneracionista y después por
el crecimiento de las fuerzas políticas al margen del sistema: republicanos, movimiento
obrero socialista y anarquista, y movimientos nacionalistas vasco y catalán. Para frenar esta
oposición, se acabó estableciendo la dictadura de Miguel Primo de Rivera en 1923. Por
último, a nivel ideológico, se inició un debate sobre España como nación que, desarrollado
por el Regeneracionismo y la Generación del 98, en buena medida aún se mantiene.

Preguntas de desarrollo:

2.La guerra colonial y la crisis de 1898.


LA LIQUIDACIÓN DEL IMPERIO COLONIAL: CUBA Y FILIPINAS.
-El imperio colonial ultramarino español.
Tras la independencia de la mayoría del imperio a principios del siglo XIX, solo Cuba, Puerto
Rico y Filipinas permanecieron bajo dominio español. Cuba y Puerto Rico se basaban en la
agricultura de exportación, especialmente en azúcar y tabaco, con mano de obra esclava.
Estas colonias fueron altamente lucrativas, especialmente Cuba, que se convirtió en el
principal productor mundial de azúcar. Sin embargo, las duras leyes arancelarias impuestas
por España convirtieron a estas colonias en un mercado cautivo para los productos
españoles, perjudicándolas frente a opciones más baratas en los Estados Unidos. En Cuba
y Puerto Rico, la hegemonía española se centraba en la defensa de los intereses de una
élite esclavista, mientras que en Filipinas, el dominio español se basaba en una pequeña
presencia militar y en el poder de las órdenes religiosas, debido a la escasa población
española y la inversión de capital en la región.
-El problema cubano y la guerra con Estados Unidos.
La Guerra Larga (1868-1878), culminada con la Paz de Zanjón, marcó un primer indicio
serio de las aspiraciones independentistas cubanas. La falta de reformas contribuyó al
desarrollo del anticolonialismo, encabezado por José Rizal en Filipinas y José Martí en
Cuba. Tras el intento fallido de Maura de establecer una verdadera autonomía para Cuba,
estalló la revuelta liderada por Martí, iniciando la Guerra en Cuba tras el "Grito de Beire" en
1895. A pesar de los esfuerzos tanto de Martínez Campos como del General Weyler, la
insurrección persistió. La intervención estadounidense en apoyo a los rebeldes cubanos se
debió a intereses económicos, ya que Cuba era líder mundial en producción de azúcar, y a
razones geoestratégicas, buscando controlar el Caribe y Centroamérica. El conflicto que se
avecinaba en Cuba representaba la lucha entre un imperialismo en decadencia, el español,
y uno emergente que definiría el futuro, el estadounidense. La explosión del navío Maine en
el puerto de La Habana, que provocó la muerte de 260 marineros estadounidenses,
desencadenó una intensa campaña periodística y llevó a Estados Unidos a declarar la
guerra a España. La guerra resultó en una fácil victoria para Estados Unidos, que conquistó
Cuba, Puerto Rico y Filipinas. España firmó la Paz de París en 1898, cediendo a EE.UU.
Puerto Rico, Filipinas y Guam. Cuba alcanzó la independencia bajo la "protección"
estadounidense, con la Enmienda Platt y la base militar de Guantánamo.
La sustitución del dominio español por el norteamericano generó un fuerte descontento en
las antiguas colonias. Estados Unidos enfrentó guerras en Filipinas (1899-1902) y el
sentimiento antinorteamericano creció en Cuba. Desde la perspectiva española, la pérdida
de las últimas colonias fue conocida como el "Desastre del 98", que influyó
significativamente en la conciencia nacional. La irresponsabilidad de los gobiernos de la
Restauración llevó a una situación que resultó en la muerte de decenas de miles de
españoles, primero en la guerra contra los insurrectos cubanos y luego en la guerra contra
Estados Unidos, una confrontación que España no podía afrontar. A pesar de la derrota,
económicamente no se puede hablar de un desastre: El fin de la guerra permitió al ministro
Fernández Villaverde abordar reformas necesarias en el sistema de impuestos y en la
emisión de deuda, lo que saneó la situación de la Hacienda y generó superávit. La pérdida
de las colonias implicó una repatriación de capitales que se invirtieron en la economía
peninsular. España mantuvo su escasa presencia en los mercados latinoamericanos. Sin
embargo, la derrota y la pérdida de más de 50.000 combatientes provocaron una intensa
conmoción en la sociedad española. Políticos, opositores, intelectuales y la generación del
98 experimentaron la pérdida de las colonias como un desastre nacional, lo que marcó
propuestas de reforma política y educativa, así como un mayor impulso de los
nacionalismos periféricos. La derrota de 1898 evidenció las limitaciones del régimen de la
Restauración y su incapacidad para afrontar los problemas sociales y la modernización del
país. El Regeneracionismo de Joaquín Costa fue una expresión de la renovada conciencia
nacional que buscaba la reforma del país, criticando el sistema caciquil y abogando por una
democracia basada en las clases medias y la modernización económica y social.
3. El régimen de la Restauración. Características y funcionamiento del sistema
canovista.
-LA CONSTRUCCIÓN DEL SISTEMA DE LA RESTAURACIÓN.
Comienza con el período de la Restauración en España, liderado por Cánovas del Castillo,
Alfonso XII y Sagasta. Cánovas, al asumir el liderazgo del Partido Conservador, trabajó para
establecer un sistema político seguro, aprovechando el deseo de paz en el país. Para
consolidar su proyecto, implementó una serie de medidas en 1875 para atraer a los
sectores más poderosos, incluida la Iglesia y el ejército. Una de las medidas clave fue el
restablecimiento del Concordato de 1851 para garantizar el apoyo de la Iglesia, así como
asegurar el respaldo militar. En este período, se logró un equilibrio donde el protagonismo
civil prevaleció sobre el militar, subordinando al ejército al poder civil y estableciendo su
misión de defender la independencia nacional sin intervenir en asuntos partidistas. El
fortalecimiento de la identificación del ejército con la Corona, con el rey como su jefe
supremo, contribuyó a la estabilidad del régimen. Cánovas también atrajo a diversos
sectores sociales y económicos, como la burguesía, terratenientes y profesionales urbanos,
ofreciendo promesas de orden social, estabilidad política y respeto a la propiedad. En
conjunto, estas medidas sentaron las bases para un sistema político conservador durante la
Restauración en España.
En diciembre de 1875, se convocaron elecciones por sufragio universal para establecer
Cortes Constituyentes en España, siguiendo lo estipulado en la Constitución de 1869. El
partido conservador, liderado por Cánovas, manipuló el proceso electoral, obteniendo una
amplia mayoría debido a la alta abstención. Esto permitió la implementación de un sistema
político conservador basado en un sistema parlamentario de tipo liberal, aunque
escasamente democrático. La Constitución de 1876, una combinación de la constitución de
1845 y la declaración de derechos de 1869, estableció una soberanía compartida entre el
Rey y las Cortes, con un Congreso elegido por sufragio censitario y un Senado con
senadores designados por el Rey y otros electos. La iniciativa legislativa residía en el Rey y
en ambas cámaras. La Constitución también incluyó una declaración de derechos similar a
la de 1869, pero con derechos limitados y posibilidad de suspensión en circunstancias
especiales. Hubo un retroceso en la tolerancia religiosa, estableciendo al catolicismo como
la religión oficial. Cánovas buscó incluir el mayor número posible de partidos en esta
constitución para evitar conflictos y golpes de Estado. Se convirtió en la constitución más
duradera del constitucionalismo español, vigente desde 1876 hasta 1931. Sin embargo, la
política de Cánovas fue restrictiva en términos de libertades y sociales, con medidas
represivas contra la oposición, cierre de periódicos, establecimiento de tribunales para
delitos de imprenta y restricción de la libertad de cátedra. La estabilidad del régimen se vio
favorecida por el fin de la III Guerra Carlista, con la rendición del ejército de Carlos VII en
marzo de 1876. Posteriormente, se abolieron los fueros de Navarra y las provincias vascas,
permitiendo enviar tropas a Cuba para poner fin al conflicto, aunque la Paz de Zanjón en
1878 no resolvió completamente la situación.
-FUNCIONAMIENTO DEL SISTEMA.
La Restauración en España se desarrolla desde 1875 hasta 1923, con la mayoría de edad
de Alfonso XIII, aunque la monarquía parlamentaria continúa hasta 1923, año del golpe
militar de Primo de Rivera. Durante la primera parte de la Restauración, se distinguen dos
etapas principales: el reinado de Alfonso XII (1875-1885) y la regencia de María Cristina de
Habsburgo (1885-1902). Durante el reinado de Alfonso XII, se establece un sistema político
con la alternancia en el poder entre los partidos Conservador y Liberal, conocido como el
sistema de turno. Tras su muerte en 1885, se inicia la regencia de María Cristina, durante la
cual se consolida el Pacto del Pardo entre Cánovas y Sagasta, asegurando la continuidad
del sistema de turno. Bajo el gobierno de Sagasta (1885-1890), se aprueban reformas
políticas significativas, como las libertades de cátedra, asociación y prensa en 1887, y el
sufragio universal masculino en 1890. Sin embargo, el sistema de turno sigue siendo
afectado por la manipulación electoral, aunque el sufragio universal permite que los
republicanos obtengan representación en las ciudades. La alternancia en el gobierno
continúa hasta 1897, año en que Cánovas es asesinado, marcando un hito en la historia
política de la Restauración.

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