Escuela Básica Salvador Sanfuentes

Profesora responsable: Marcela Canio Peña

Asignatura. Lenguaje y Comunicación. 6º Básico

GUIA DE TRARAJO

LENGUAJE Y COMUNICACIÓN 6º BÁSICO

Nombre: fecha:

Objetivo: Leer y familiarizarse con un amplio repertorio de literatura para aumentar su conocimiento del
mundo, desarrollar su imaginación y reconocer su valor social y cultural.

Actividad: Lee el siguiente texto y luego realiza la actividad que está a continuación.

La fiebre de oro en Alaska

A lo largo de la historia, ha habido varias fiebres del oro. La más famosa es la

que ocurrió́ en California en el siglo XIX. La fiebre del oro 1 de Klondike fue un
fenómeno que atrajo a unos 100.000 hombres a la región de Yukón, Canadá,
entre 1896 y 1899. Yukón es un extenso territo- rio ubicado en el extremo
noroeste de Canadá, que limita al norte con el océano Ártico y al oeste con
Alaska (Estados Unidos). Hoy el territorio de Yukón es parte de Alaska. Alaska
es el más grande entre los estados que conforman los Estados Unidos de
América y es también uno de los menos poblados, dadas sus condiciones
geográficas y climáticas.

En los tres años que duró este fenómeno, unos 20.000 buscadores de oro y
otras 80.000 personas se desplazaron a las remotas e inhóspitas tierras
canadienses cercanas a la región de Alaska. De toda esta gente, solo unos
4.000 encontraron oro y menos de mil extrajeron lo suficiente como para
considerar cumplido el sueño de hacerse ricos. El resto encontró trabajo
poniéndose al servicio de quienes habían sido más afortunados, o se
reinventaron como proveedores de servicios y bienes indispensables.

Más de la mitad de los que emprendían el viaje hacia el helado norte

renunciaban antes de llegar a la meta y otros muchos se marchaban al cabo de
pocos días, incapaces de enfrentar las duras y extremas condiciones
geográficas y climáticas. Para los buscadores de oro habría sido imposible
sobrevivir sin contar con las miles de personas que hicieron posible sobrellevar
la vida en aquel remoto paraje. La zona era de difícil acceso y los buscadores
dependían de otras personas para poder sobrevivir. Los conductores de trineos
eran quienes hacían posible la conexión con el resto del mundo, sirviendo como
transportadores del correo y transportistas. Por eso los perros de trineo, los
caballos y las mulas llegaron a alcanzar precios excesivos, dada su gran
utilidad para el transporte del mineral extraído y la gran cantidad de provisiones
que debían llevarse para los largos viajes.

Jack London y la fiebre del oro

Uno de los escritores que supo captar mejor las vivencias de esos hombres que
siguieron la fiebre del oro fue Jack London, que de joven se sumó a los
aventureros en un viaje hacia el extremo norte. En uno de sus cuentos titulado
“Los buscadores de oro del norte”, explica los sufrimientos a los que fueron
sometidos los primeros hombres que llegaron al Yukón.

En él cuenta que: “Se olvidaron del mundo y de sus costumbres, así como el
mundo se olvidó de ellos. Se alimentaban de caza cuando la encontraban,
comían hasta hartarse en tiempos de abundancia y pasaban hambre en
tiempos de escasez, en su incesante búsqueda el tesoro amarillo.
 Cruzaron la tierra en todas las direcciones. Atravesaron innumerables ríos
desconocidos en precarias canoas de corteza, y con raquetas de nieve y perros
abrieron caminos por miles de kilómetros de silencio blanco, donde nunca antes
había andado un hombre. Avanzaron difícilmente, bajo la aurora boreal o el sol
de medianoche, con temperaturas que descendían hasta los -70 grados
viviendo en las dificultades de la tierra, de huellas de conejo y tripas de
salmón”.

1. Usa la información del texto para completar las siguientes oraciones:

a) La fiebre del oro fue un fenómeno que atrajo a muchos hombres porque:

b) La fiebre del oro fue un fenómeno que atrajo a muchos hombres, pero

fiebre del oro: Se conoce a la fiebre del oro como una migración en masa y
apresurada a partes específicas donde se piensa que hay mucho oro.

Alaska está escasamente poblada, con menos de una persona por cada 2
kilómetros cuadrados. La mayor cantidad de la población está concentrada
en las ciudades y pueblos de la costa. La población nativa incluye a los inuit,
los aleutas y los ame- ricanos nativos. El resto de la población la componen
inmigrantes provenientes de Estados Unidos, Canadá, y países de Europa y
Asia. Estos últimos llegaron en 1867 atraídos por el fenómeno de la fiebre del
oro.