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ÚLTIMO PRIMER DÍA

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“ULTIMO PRIMER DIA”
(UPD)

El último año de la secundaria representa para los y las estudiantes una instancia de múltiples
festejos, ya que sumado a los que tradicionalmente se encuentran dentro del calendario es-
colar, como ser la semana del estudiante, las presentaciones de la promo, fiesta de egresados;
desde hace un tiempo a la fecha se sumó la iniciativa de festejar el último primer día de clases
más conocido como UPD.

Este festejó como su nombre lo expresa se trata de celebrar el primer día del inicio de clases.
En donde los mismos estudiantes, se reúnen la noche previa al comienzo de clases para dar
inicio a la celebración y continuar al día siguiente en las escuelas.

Esta celebración como muchas de las mencionadas, toma las características de las formas de
festejo propias de cada grupo de jóvenes. Esto puede incluir entradas a la escuelas con música
o batucadas, banderas, cotillón, disfraces, presentación del buzo de egresados, etc. A esto pue-
den sumarse situaciones relacionadas con el consumo de alcohol u otras sustancias.

En este sentido resulta clave reflexionar y elaborar estrategias en relación al rol que cumple la es-
cuela en torno a esta celebración, como un espacio de contención y acompañamiento para los y
las estudiantes. Ya que, a menudo estos festejos exponen a la escuela a situaciones que interpe-
lan la práctica cotidiana y a su vez generan preocupación dentro de las instituciones educativas.

Por otra parte, estos festejos y las diversas formas que adopta el UPD pueden ser consideradas como
ritos, prácticas que se constituyen simbólicamente como una forma de pertenencia. Es así que clara-
mente estos ritos actúan en la subjetividad individual de las adolescencias afirmando las relaciones
entre pares, el sentido de pertenencia dentro del grupo y fortaleciendo la identidad plural.

De tal manera, resulta fundamental como docentes entender a estos festejos como mandatos
que forman parte de la construcción de las identidades grupales y que deben ser acompaña-
dos por las y los adultos que tenemos el rol de transitar a la par estos procesos de construcción.

Para ello, es clave desde la escuela habilitar espacios de diálogo y escucha que permitan inter-
pelar, reflexionar y construir acuerdos en relación a estas celebraciones.

Por otro lado, es necesario entender al momento de generar estos espacios que tanto el UPD
como la mayoría de los festejos se encuentran atravesados por una lógica de consumo, que de
alguna manera propicia los escenarios para que los consumos adquieran un lugar sumamen-
te significativo y central en el desarrollo de estas celebraciones.

Por tal motivo la ausencia de la figura docente ante este escenario muchas veces representa
un vacío que agrava aún más la situación.

En este sentido resulta clave no sólo habilitar espacios a los y las estudiantes, para acompañar,
alojar y resignificar estas celebraciones, sino también construir entre adultos/as (directores/
as, docentes, auxiliares, etc) instancias de intercambio acerca de las sensaciones que generan
estas fechas y proponer modos alternativos para acompañar a los y las estudiantes.

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A continuación brindamos algunas preguntas orientadoras para trabajar entre personas adul-
tas antes del inicio de clases.

¿Cómo fue el cierre de las personas adultas de su propio ciclo escolar?

¿Qué recuerdan de esos días?

¿Qué sensaciones les genera a las personas adultas el cierre, la finalización de esta eta-
pa de estudios por parte del estudiantado?

¿Qué les gustaría compartir con el grupo o los grupos de estudiantes que egresan a lo
largo del año?

¿Cómo les gustaría a las personas adultas transitar el primer y último día de clases?
¿Qué experiencias consideran que puede ofrecer la escuela para iniciar y cerrar ese ciclo

Este tipo de celebraciones representa para las instituciones una instancia que interpela la co-
tidianidad de las prácticas educativas, ya que son momentos que ponen en tensión algunos
acuerdos de convivencia y en este sentido la postura adoptada por las personas adultas resul-
ta una decisión clave al momento de recuperar estos acuerdos y resignificar estas celebracio-
nes dentro de un marco institucional.

En este sentido, es importante reflexionar, repensar y reformular las concepciones históricas


que tenemos acerca de la “autoridad” como una figura que llega para “imponer disciplina” ya
que sin duda estas concepciones representarán un obstáculo al momento de construir acuer-
dos junto a los y las estudiantes.

De este modo, podemos pensar la autoridad como parte de un vínculo, «una autoridad que
se hace cargo de otras personas, y de su crecimiento y despliegue subjetivo, en el marco de
una relación de confianza que no es accesoria sino instituyente» (Ministerio de Educación de
la Nación, Autoridades que habilitan, 2021).
QUE HABILITAN
AUTORIDADES

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De esta forma se pretende pensar y construir de común acuerdo propuestas para celebrar el
UPD flexibilizando la dinámica habitual educativa pero sin perder de vista el encuadre institu-
cional. Estableciendo acuerdos conjuntos y sin dejar pasar por alto situaciones que se obser-
van y preocupan en relación al consumo de alcohol u otras sustancias que ponen en riesgo
la integridad de los y las estudiantes. Y fundamentalmente promoviendo la pedagogía del
cuidado, construyendo estrategias de cuidado entre pares, reflexionando en relación a los ries-
gos a los cuales se exponen los y las estudiantes en estas celebraciones y si es posible pensar
festejos cuidados y controlados dentro del encuadre escolar.

Por ello, compartimos las siguientes recomendaciones:

Brindar, desde la escuela, propuestas construidas en conjunto con el estudiantado.


Pueden ser actividades de reflexión en torno a la fecha y los festejos realizados el año
anterior o una convocatoria a estudiantes para planificar el comienzo de su último
año. Algunos ejemplos de actividades realizadas por distintas escuelas son recibirlos
con un desayuno o una merienda para celebrar el día; organizar la jornada en un lugar
amplio o abierto como un polideportivo del barrio en donde se puedan compartir ac-
tividades recreativas y de reflexión en torno a la etapa que están comenzando a cerrar
las personas jóvenes; trabajar en la elaboración de un mural que quede como marca
de su paso por la escuela.

Generar acuerdos entre personas adultas y estudiantes proponiendo un marco con-


sensuado sobre los festejos de ese día. En este punto es muy provechoso trabajar con
toda la comunidad educativa incluyendo también a las familias.

Fomentar espacios de participación como los centros de estudiantes o consejos escolares de


convivencia para dialogar y establecer acuerdos para la organización de estas celebraciones.

Abrir espacios de diálogo para conversar sobre cómo están transitando o quieren tran-
sitar la finalización de esta etapa: expectativas, necesidades, preocupaciones respecto
al futuro y sus proyectos de vida, etc.

Habilitar espacios para conversar sobre los sentidos de cada festejo y las formas de fes-
tejar donde se pueda problematizar el lugar de los consumos en estas celebraciones y,
al mismo tiempo, promover prácticas de cuidado entre pares.

Para continuar pensando y reflexionando con las y los estudiantes invitamos a trabajar con el do-
cumento TOMA LA VOZ. El cual se encuentra dividido por ciclos y ejes. Sugerimos en esta instan-
cia abordar los ejes 2 y 3 reformulando las actividades y relacionándolas con el festejo de UPD.

Link del material “Toma la voz”: https://www.educ.ar/recursos/157307/toma-la-voz


Link del material “autoridades que habilitan”: https://www.educ.ar/recursos/157475/autorida-
des-que-habilitan

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TOMÁ LA VOZ

Análisis de artículos periodísticos:


Las noticias periodísticas y el tratamiento de los medios masivos son otro insumo para favore-
cer los intercambios y problematizar los prejuicios y estigmas que usualmente recaen sobre
las juventudes.

Proponemos seleccionar, ya sea en medios de alcance nacional o locales, diferentes noticias


sobre las personas jóvenes y analizar cómo abordan las relaciones intergeneracionales, la mi-
rada sobre ellas y los consumos problemáticos en cada contexto en particular.

Es valioso ofrecer noticias que puntualmente relatan situaciones en torno al UPD para realizar
el análisis. Les proponemos algunas consignas para orientar el intercambio:

¿Cómo se caracterizan las celebraciones en los artículos?¿Cómo se describen a los y las ado-
lescentes que las protagonizan?¿Qué idea, representación de los y las adolescentes construyen
dichas noticias?Observen las imágenes que se incorporan. ¿Qué opiniones les surgen?¿Cómo
describirían ustedes, desde su perspectiva, lo que sucede en los festejos del UPD? ¿Qué les gus-
taría que las personas adultas conocieran sobre esa fecha y las celebraciones que organizan?

A partir de esta lectura, resultará interesante reflexionar sobre qué miradas acerca de las ju-
ventudes se muestran y cuáles son los hechos relatados; identificar si aparecen consumos de
sustancias, de qué manera, si se muestran prácticas de cuidado del cuerpo y de la salud en
adolescentes. Además, podemos preguntar al estudiantado si siente identificación con la for-
ma en la cual estos medios describen a las personas jóvenes y por qué.

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