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Introducción:
- Si nuestra vida completa se compilara en un libro o película para dar testimonio de Jesús,
estarías satisfechos con el resultado.
- Si Jesús fuera el que diera testimonio de nosotros ¿Qué diría?
Desarrollo:
- ¿Cómo es posible que el precursor de Jesús tenga dudas sobre el ministerio de Jesús?
- Pone de manifiesto lo errado que era el pensamiento sobre quién sería el mesías (v.16-
17).
- Dónde está el juez poderoso y soberano que Juan esperaba.
- Desde la cárcel juan envía a dos de sus seguidores a preguntar a Jesús si realmente es el
que ha de venir (La necesidad de dos testigos Dt 19:15). (V.18-19).
- Juan mismo se vió afectado por el anuncio del Reino, ya que estaba en la cárcel
(EXPLICAR).
- Jesús no le responde directamente, le invita a ver lo que está ocurriendo: la liberación de
muchos (pero no la Juan) (v.22).
- Jesús muestra que las profecías se han cumplido.
- No se trata de Juan Bautista, se trata el Reino de Dios anunciado por Jesús.
- ¿Qué clase de testimonio dio Juan el Bautista aquí? Nada cercano al primero.
- Jesús pregunta a la multitud, que buscaban ver cuándo seguían a Juan Bautista. (no iban a
ver a un hombre débil o a un hombre lujoso) A un profeta (V.24-26).
- Puede que la duda de Juan debilitara su imagen frente a las personas, pero Jesús les
muestra lo que él piensa de Juan el Bautista.
- Juan Bautista es el mayor de los profetas, es quien anunció a Cristo (V.28).
- Aún con todo eso, la grandeza de Juan no se iguala a la de quienes creerían después de él.
- De esta forma Jesús afirma el ministerio y la fe de Juan el Bautista (La gente buscó
bautizarse según lo testificado por Juan) (V.29).
Conclusión:
- Anunciando a Cristo,
- reconociendo que él es el hijo de Dios y superior a nosotros,
- aceptando su sacrificio por nuestros pecados,
- quizás hasta hemos estado en riego por su causa, al igual que Juan el Bautista.
- Cuando recibimos una noticia terrible que nos saca de nuestra comodidad,
- Cuando las cosas no ocurren como queremos,
- Cuando estamos cansado y damos excusas de nuestro ministerio,
- Cuando miramos a nosotros mismo y no la obra de Dios en general. Al igual que Juan el
Bautista.
Jesús también da testimonio de nosotros, como más dichosos que Juan (v.28):