36 Cómo interpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios
* Pero de toda la enseñanza de Jesús y de todas las
prácticas, Mateo ha destacado con fuerza que el cumplimiento de la voluntad de Dios pasa sobre todo por el amor al prójimo, especialmente a los más necesitados, en los cuales el mismo Jesús está presente (25, 31-46). b) Marcos * Es el Evangelio más antiguo. Contiene una presentación breve y simple de Jesús para comunidades jóvenes, que todavía no tenían una narración de la vida y de las enseñanzas del Maestro. La gran pregunta que responde Marcos es "¿quién es Jesús? ". Pero la responde de una manera narrativa, sin definiciones ni explicaciones. Por eso el lector debe dejarse llevar por las narraciones e introducirse en las escenas, como si fuera parte de ellas, para dejarse cautivar y enseñar por Jesús. * Al mismo tiempo que presenta a Jesús, nos invita permanentemente a ser sus discípulos. De hecho, el término discípulo aparece permanentemente en este Evangelio. Marcos nos dice qué es y cómo es un verdadero discípulo. También Io hace a través de narraciones, y no tanto a través de normas o leyes. Los personajes nos invitan a identificamos con las actitudes correctas de un discípulo y a evitar las que no responden al seguimiento de Jesús. En los personajes del Evangelio podemos reconocer nuestros propios miedos, egoísmos, errores y resistencias frente a Jesús. * En Marcos aparece frecuentemente Jesús pidiendo secreto, sobre todo después de realizar algún prodigio. Este "secreto mesiánico" muestra que Jesús no quería ser admirado o seguido como un gran curandero, o hacerse famoso como un mago espectacular o como un político exitoso. Más bien quería que Io reconocieran corno el servidor Victor Ma Fernández 37 humilde y sufriente que venía a entregar su vida por nuestra salvación. * Este Evangelio tiene dos grandes partes, y el centro está en 8, 29, donde Pedro confiesa a Jesús como el Mesías. Toda la primera parte nos va mostrando quién es Jesús hasta llegar a la confesión de Pedro, donde todo termina de aclararse. A partir de esa confesión comienza la segunda parte que se orienta a la Pascua. Por eso Jesús comienza a anunciar su muerte y su resurrección. * Resalta el dominio de Jesús sobre el poder del mal opresor. En la época de Marcos había mucha gente supersticiosa, llena de temores, que buscaba sentirse segura frente a posibles amenazas. Creían que permanentemente estamos acosados por "malos espíritus" que nos perturban. Marcos no se detiene a discutir esas creencias, pero se preocupa por mostrar que, si depositamos nuestra confianza en Jesús, podemos estar seguros. Además, se ve que Jesús ha dado poder a sus discípulos para dominar todas esas realidades oscuras (3, 15; 6, 7). Por otro lado, la gente esperaba que cuando llegara el Mesías se produjera una lucha entre las fuerzas del bien y las fuerzas del mal, y creía que el Mesías iba a dominar sobre esas fuerzas del mal. Por eso, en el Evangelio de Marcos, Jesús aparece frecuentemente mostrando su dominio sobre los "demonios" (I, 24-27; 5, I- 20, etc.) y sobre todos los peligros que puedan amenazar a los elegidos (13, 17.20.22.27). c) Lucas * Es el Evangelio que más destaca la misericordia del Padre para invitarnos a la conversión. En el capítulo 15 hay dos parábolas de la misericordia (la moneda perdida y el hijo pródigo) que están sólo en este Evangelio; y Jesús en la 38 Cómo interpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios pasión aparece pidiendo perdón para los que lo maltrataban (23, 34). Pero también presenta varios ejemplos de pecadores penionados (7, 36-50; 18, 13-14; 19, 1-10; 23, 3943). por eso mismo, en todo el Evangelio, se destacan las palabras: "convertirse" o "conversión". En 22, 61-62 se resalta la mirada de Jesús a Pedro invitándolo a la conversión. * Al mismo tiempo es el Evangelio que más nos invita a ser misericordiosos con el prójimo, como respuesta a la misericordia que el Señor tiene con nosotros. Por eso, se lo suele llamar "el Evangelio de la misericordia". La parábola del buen samaritano, por ejemplo, se encuentra sólo en Lucas (l O, 29-37), pero podemos destacar otros textos típicos de Lucas como 3, 10-11; 6, 36-38; I l, 41. La misericordia, que se expresa como compartir los bienes con los pobres, es también una invitación al desprendimiento o a la pobreza (12, 33; 14, 33; 16, 13.19-31; 19, 8). * Los pobres aparecen especialmente valorados (6, 20- 23; 7, 22), y como objetos de un amor preferencial (14, 13) a diferencia de los ricos y satisfechos (6, 24-26; 12, 13-21; 18, 24). Destaca la generosidad de la viuda pobre (21, 1-4). * Al mismo tiempo, aparece una clara motivación a la escucha atenta de la Palabra, a la contemplación y a la alabanza (1, 67; 2, 20; 8, 15; 10, 38-42; 11, 28; 18, 1; 24, 53), poniendo como modelos al mismo Jesús (3, 21; 5, 16; 6, 12; 9, 18; 11, l; 22, 41) y a su madre María (1, 46-51; 2, 19.51). * Presenta toda la vida de Jesús como una permanente subida a Jerusalén, para mostrar que toda la obra de Cristo estaba orientada hacia la entrega total en la cruz. Su permanente donación generosa culmina naturalmente en la entrega de su propia vida. Victo r Afatme/ 39 * Sin embargo, todo el Evangelio es una invitación a la alegría (1, 14.44.47; 2, 10; 10, 17.20.21; 15, 5.7.9.10.23. 24.32; 19, 6; 24, 41.52), que también aparece mucho en los Hechos. El saludo a María nos recuerda cl anuncio de Sof 3, 14, y todo el Evangelio muestra que aquellas promesas de alegría mesiánica se cumplen en Cristo. * Comienza a aparecer más el Espiritu Santo. Es el que fecunda a María (1, 35), llena a Isabel (l, 41) y a Zacarías (I, 67). Es lo que hay que pedir en la oración (l l, 13) y Jesús estaba lleno del Espíritu Santo (l, 15; 3, 22; 4, I), que lo impulsaba con su fuerza (4, 14) y lo alegraba (IO, 21). Esta presencia y acción del Espíritu Santo reaparecerá mucho en los Hechos, impulsando a los primeros cristianos. d) Juan * Es el más elaborado de los Evangelios, que muestra a Jesús hablando de un modo muy simbólico. Destaca varias veces que Jesús no era comprendido y que tenía que aclarar lo que decía (2, 20-21; 3, 3-4; 4, 10-11.32-34; 6, 51-52; 8, 21-22.32-33; IO, 6). Cuando aparece la incomprensión, surge también la pregunta: "¿qué más hay detrás de esto?" Así Juan quiere mostrar que para comprender a Jesús necesitamos el Espíritu (13, 7; 14, 26; 16, 12-13). * Pero varios símbolos que utiliza eran muy aprecia- dos para los judíos, porque estaban tomados de las festivi- dades populares, sobre todo de la fiesta de las chozas. Los símbolos de esta fiesta eran propios de los cuarenta años que el pueblo había pasado en el desierto: la choza donde Vivían cuando armaban los campamentos, el agua que nece- sitaban para beber, el pan y la carne que Dios les daba como alimento, y la luz del fuego que encendían por las noches. En el Evangelio aparece Jesús poniendo su choza entre no- 40 CÓmointerpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios sotros en su encarnación (l, 14), dándonos el pan y la carne de la Palabra y la Eucaristía (6, 1-58), derramando el agua de vida que es el Espíritu (4, 10-15; 7, 37-39; 19, 28-34) e iluminando nuestra oscuridad (8, 12; 9, 1-41). También las incomprensiones y otros detalles de este Evangelio nos co_ locan en el marco del caminar por el desierto, como que- riendo mostrar que aun en medio de las asperezas e insegu_ ridades de nuestra vida, se hace presente el poder de Jesús, su llamado, sus signos de vida nueva. * Todos los prodigios son presentados como signos de algo más profundo: la multiplicación de los panes presenta a Jesús como alimento espiritual, la curación del ciego como luz de nuestras vidas, la resurrección de Lázaro como la vida para nosotros, etcétera. * Los personajes también suelen representar grupos amplios de personas: la samaritana representa a todos los samaritanos, Tomás representa a los incrédulos, Nicodemo a los inseguros, el discípulo junto a la cruz representa a todos los discípulos fieles, etcétera. * A veces, en las cosas que Jesús dice y hace, se pueden encontrar dos niveles que son igualmente valiosos: un primer nivel, que tiene una enseñanza importante, y otro nivel mas I profundo o espiritual. Por ejemplo, en 2, 13-22 el primer nivel es la defensa del Templo como lugar de oración. El segundo nivel va más allá: Jesucristo es el gran Santuario, porque en él nos encontramos con el Padre (14, 9). En el capítulo 6, el primer nivel es la multiplicación de los panes que refleja la compasión de Jesús por la gente, pero en el nivel más profundo Jesús mismo se ofrece como pan de V'idL En 19, 25-28 tenemos un primer nivel, donde se destaca el afecto filial de Jesús que, como todo hombre piadoso, se preocupa por el futuro de su madre; pero, en un segundo Vidor Femündez 41 nivel, el discípulo representa a todos los discípulos que acogen a María como su propia madre, y ella pasa a ser la madre de todos. Por eso, no hay que pensar que el texto debe interpretarse de una manera o de la otra, sino que el modo de escribir de Juan incluye las dos cosas en una misma figura. * Juan presenta a Jesús como el Hijo del Padre. Se ve cómo toda la predicación de Jesús se orienta al Padre y todo su ser está referido al Padre. De hecho, la palabra "Padre" aparece 137 veces en este Evangelio, mientras en Marcos la encontramos sólo 18 veces. * La invitación a la fe es constante. Aunque la palabra fe no aparece nunca, mientras el verbo creer está 98 veces. Eso indica que la fe, en Juan, no es tanto la aceptación de una doctrina canónica sino sobre todo un movimiento del corazón que se apoya en la verdad de Jesús, es una relación personal del que vive "en él", y por él se dirige al Padre. Jesús como revelador del Padre es la "Luz" (9, 5; 12, 46), o la "Verdad" (14, 6; 18, 37) o la "Palabra" que manifiesta al 1.14). El Espíritu nos introduce plenamente en él Padre (1, (16, 13). Notemos que la expresión "verdad" aparece 25 veces, mucho más que en los demás Evangelios (sólo una vez en Mateo y tres veces en Lucas). Pero este "creer" es inseparable de "amar", que también aparece con frecuencia. * Junto con la verdad, el otro gran eje del Evangelio es la vida plena que Jesús ofrece (IO, IO). Él es pan de vida, agua de vida, y la vida misma (1 1, 25). La palabra "vida" aparece 36 veces, mientras en Mateo se encuentra sólo 7 veces y 4 en Marcos. * En este Evangelio abundan las oposiciones. Por ejemplo: luz-tinieblas, carne-espíritu, verdad-mentira, etc. Pero todo esto está en el marco de una gran oposición del mundo a Jesús y a sus discípulos, como si todo fuera un gran 42 Cómo interpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios juicio contra los cristianos. En este evangelio no aparecen los escribas y los saduceos que discutían con Jesús, sino "los judíos", que se oponían a los cristianos en la época en que se escribió este Evangelio. Aquel momento era una época de fuerte confrontación, cuando los cristianos eran expulsados de la sinagoga (cosa que no sucedía todavía en la época de Jesús) y por eso esta situación está tan destacada. Pero cuando aparece la expresión "judíos", de modo negativo, no se refiere al pueblo judío en general, sino a las autoridades que acosaban y perseguían a los cristianos. De hecho, en Jn 7, 44-49 vemos claramente que mucha gente sencilla admiraba y seguía a Jesús, mientras algunas autoridades lo detestaban y planeaban detenerlo. * El Evangelio de Juan fue escrito en varias etapas, pero hay que distinguir sobre todo dos muy importantes: En la primera etapa se destaca la oposición de los judíos, que no aceptaban que Jesús fuera Dios igual que Yahvé (l, l; 5, 17-18; 17, IO; 20, 18). Por eso Jesús aparece diciendo ' 'Yo soy?' (8, 24.28.58; 13, 19), aplicándose a sí mismo el Nombre divino. En la segunda etapa, en cambio, la comunidad de Juan predica en zonas donde era sencillo aceptar la divinidad de Jesús, pero había una tendencia a despreciar o negar su verdadera humanidad. Preferían verlo como un ser celestial liberado de lo terreno, al cual nos unimos por una actitud espiritual de fe y conocimiento interior. Por eso en esta época se completa el Evangelio y se escriben las Cartas de Juan. Son textos donde aparece la palabra "carne" para destacar la humanidad concreta de Jesús (l, 14; 6, 51-56; I Jn 4, 2; 2Jn 7). En las Cartas también se resalta que la fe no es suficiente si no está unida al amor fraterno y solidario (l Jn 4, 7-8; 2 Jn 4-6). Es interesante comparar Jn 12, 35 con I Jn 2, ll, o JII Victor Manuel' Fernández 43 5, 24 con I Jn 3, 14. Los términos utilizados muestran la intención de precisar que la unión espiritual con Jesús no es auténtica si no hay amor al hermano. 6. El mensaje de toda la Biblia La intención general del autor es sumamente importante en algunos textos más difíciles, porque se refieren a costumbres propias de otra época que ya son parte del pasado y que han evolucionado. En esos casos, no podemos quedarnos sólo con un texto muy reducido sino que tenemos que considerar el mensaje general del libro donde está inserto, y conectarlo con el mensaje de toda la Biblia. Cada texto de la Biblia tiene un mensaje propio, pero a veces el significado de ese texto no se entiende sin conectarlo con toda la Biblia. Por ejemplo, el texto de Éx 21, 18-27, que tolera acciones agresivas y criminales. Sobre todo, en los versículos 20-21 dice que si alguien muele a palos a su esclavo no hay problema, con tal que no llegue a matarlo, "porque él lo ha comprado con su dinero". Este texto, que no sólo justifica la esclavitud, sino el trato violento a los esclavos, no tiene un mensaje divino para nosotros. Simplemente refleja las costumbres culturales de la época en que fue escrito. Allí sólo puede encontrarse un mensaje valioso teniendo en cuenta todo el libro del Éxodo, del cual forma parte. En ese libro, en realidad se suavizan las costumbres paganas de su época, que eran más crueles todavía, ya que autorizaban el asesinato de un esclavo, y quiere indicar que todos los detalles de la vida cotidiana deben tratar de responder a la voluntad de Dios. Por eso invita a respetar la vida de los esclavos. Pero, a su vez, esto seria insuficiente si no se tiene en cuenta todo Io que dice la Biblia sobre la esclavitud. Particularmente, la carta a Filemón, que invita a dar un trato fraterno a los siervos, 44 Cómo interpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios y sobre todo Job 31, 13-15 y Ef6, 9, que dan el fundamento para rechazar toda esclavitud: porque todos los seres humanos tenemos la misma dignidad ante Dios. Otro ejemplo: si sólo leemos Mt 5, 38-40 0 Rom 13, 1- 7, podríamos quedarnos con un mensaje pacifista que tolera cualquier opresión social. Por eso, es importante dejarse iluminar por Mt 20, 24-26, que rechaza la opresión injusta de los poderosos. De la misma manera, si leemos solamente Mt 4, 21-22; 8, 21-22; IO, 35-37 y 12, 46-53, podríamos justificar el desprecio y el olvido de los propios padres. Pero Mt 15, 1-9 nos sirve de correctivo, porque resalta que los que se creen entregados a Dios no deben olvidar el cuarto mandamiento. En esta línea, es importante tener suficientemente claras dos cosas: todos los textos, aun los más antiguos, tienen un mensaje profundo que siempre es actual. Pero al mismo tiempo hay un progreso en la Revelación que no anula ese mensaje antiguo sino que Io complementa. Por ejemplo, si leemos el libro del Éxodo, vemos que tiene un mensaje marcadamente social. En Éx 2, 23-24; 3, 7-10, se muestra que Dios quiere escuchar el clamor que brota de la opresión de un pueblo esclavizado y oprimido. Por eso, las leyes sociales del pueblo judío, se fundamentan en esa liberación social, como se confirma en Éx 22, 20-22 0 en Lev 19, 33- 35; 25, 35-43, etc. Pero luego, y también en el Nuevo Testamento, esa liberación se tomó como símbolo de una liberación espiritual, religiosa, sobre todo de la liberaciÓn del pecado (por ejemplo, I Cor IO, 1-11). Sin embargo, el mismo libro del Éxodo nos da pie para unir las dos cosas porque nos muestra que la salida de Egipto era también la liberación de los cultos paganos, el inicio del culto a YahVé' y que culmina en una alianza religiosa (Éx 3, 12; 19, 4-8)' Victor Manuel 45 Algo semejante sucede con Isaías 7, 14. Esas palabras tenían un significado en la época en que fueron escritas, y eran un consuelo y una esperanza para el pueblo de Jerusalén, que estaba cercado por reyes enemigos. Pero Mt l, 20-23 se Io aplica a Jesús. El mismo libro de Isaías justifica aplicárselo al Mesías, porque en 9, 5-6 las promesas se extienden a toda la dinastía de David, hasta el tiempo del Mesías, cuando llegará la paz sin fin. Esto nos muestra que la misma Biblia nos invita a descubrir que cada texto tiene un sentido propio, que es siempre actual, pero que también el texto queda abierto para ampliarse y dar lugar a nuevas interpretaciones ("relecturas"). Este es un principio importante de la interpretación bíblica, que tiene en cuenta que el Espíritu Santo no inspiró sólo una parte, sino la Biblia entera, y que en algunas cuestiones el pueblo ha ido creciendo en su comprensión de la voluntad de Dios, a partir de la experiencia vivida. 7. El contexto histórico y existencial Cada autor de la Biblia escribió en un momento de la historia donde sucedían cosas importantes que preocupaban o alegraban el corazón de los creyentes. Cada texto bíblico refleja una situación del pueblo o de la comunidad del escritor. Por eso es útil conocer lo mejor posible cuál era esa situación histórica y existencial, lo que estaba sucediendo en aquel momento, para entender mejor el mensaje que quería destacar el autor en esa situación. También por esta razón es importante tener a mano algún comentario a cada libro de la Biblia, que nos ubique en su contexto. Algunas Biblias traen una introducción donde explican algo de la época de cada uno de los libros y nos ofrecen datos interesantes. 46 Cómo interpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios Por ejemplo, en la Biblia de Jerusalén podemos leer una introducción al Apocalipsis que nos explica que fue escrito en una época violenta de las persecuciones romanas a los cristianos, y que, como todos los Apocalipsis, su objetivo es levantar el ánimo de los creyentes para que no bajen sus brazos y mantengan firme su fe en medio del desprecio y la agresión externa. Si no tenemos en cuenta esa situación posiblemente nos quedaremos en los detalles y no captaremos el mensaje profundo de los textos del Apocalipsis. También las notas a pie de página nos pueden dar una ayuda. Por ejemplo, en LC 5, 27-32 la nota que coloca la Biblia del Peregrino explica por qué en Israel el cobrador de impuestos era considerado un gran pecador: "Toma su oficio en arriendo de la autoridad romana y se aprovecha de él para enriquecerse a costa de la gente. Es ladrón y cola- boracionista". Eso ayuda a entender por qué era tan despreciado. Por otra parte, es útil tener en cuenta los datos de la geografia y los aportes de la arqueología. Por ejemplo, en LC 12, 55 se dice que el viento del sur trae el calor del desierto, ya que todas las narraciones de la Biblia suceden en el hemisferio norte (donde hoy están situados Israel, Turquía, Grecia o lugares vecinos), no lejos de África. Por eso, el viento sur lleva el calor y a veces la arena del desierto africano o árabe. Cuando leemos los Evangelios, vemos que en Cafarnaúm la gente espiaba a Jesús y toda la ciudad se enteraba de todo lo que él hacía y decía (Mc l, 33; 2, I. 13.16.18.24). Esos detalles se entienden mejor cuando nos enteramos que los arqueólogos han descubierto los restos de esta población, y nos informan que era una muy pequeña aldea, de unos trescientos metros sobre la costa del lago por Víctor Afana e/ Femü'ldez 47 doscientos metros de largo. Eso nos ayuda a ubicarnos mejor cuando leemos algunas narraciones de los Evangelios. Toda la información que podamos leer sobre los lugares de la Biblia, sobre las costumbres y sobre la historia, nos permitirán introducirnos mejor en lo que nos cuenta la Palabra de Dios, y así captar más de cerca Io que nos quiere transmitir. Muchas veces el contexto histórico o geográfico es lo que explica las diferencias que hay entre un Evangelio y otro. Porque los autores no tenían problema en modificar las narraciones para que la gente de sus comunidades pudiera comprenderlas mejor. Si comparamos Mateo con Lucas podemos encontrar algunos ejemplos claros: a) Las bienaventuranzas están en Mt 5, 1-12 y en LC 6, 20-23. Allí vemos que Lucas no menciona las persecuciones, porque su comunidad no era perseguida como la de Mateo. A su vez, insiste más en el tema de los pobres y los ricos porque había mayores diferencias sociales que en la comunidad de Mateo. b) En Mt 7, 24-27 se lee que el hombre sensato construyó su casa sobre la roca, porque Mateo vivía en una zona de poca lluvia, donde era suficiente que la base fuera firme. En cambio LC 6, 46-49 dice que el hombre cavó profundamente y que hizo cimientos, porque la comunidad de Lucas era de una zona donde solía haber fuertes lluvias e inundaciones. 8. Las estructuras del texto Pero muchas veces es muy dificil llegar a saber lo que sucedía realmente y lo que sentían hace más de dos mil años, cuando se escribía un texto bíblico. Estamos muy lejos y a veces es demasiado pretencioso querer entrar en la mente de un ser humano de un tiempo tan remoto y de una cultura tan 48 Cómo interpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios distinta. Por eso, lo más importante es analizar el texto bíblico tal cual lo tenemos y descubrir el mensaje que surge hoy de ese escrito. Para ello es necesario ver cómo está armado el texto, cómo funciona. En esta época no nos preocupamos mucho por darle una estructura a Io que decimos, pero en la antigüedad eso era más importante, porque pocas personas sabían leer, y la transmisión era sobre todo oral. Por eso se acostumbraba darles una "forma" a las cosas que se decían o se contaban, para que pudieran recordarse mejor y para que quedaran bien destacadas las cuestiones más importantes. Así se evitaba que el mensaje se deformara demasiado cuando pasaba de boca en boca. Hoy en día eso sucede con los chistes. Uno no puede cambiar el orden de Io que dice el chiste, porque puede perder la gracia. Es importante respetar ese orden que nos va llevando a un final cómico y sorpresivo. Cuando ese chiste pasa de boca en boca, siempre mantiene la misma forma, aunque puedan cambiar algunas palabras. En la antigüedad eso sucedía con todos los relatos, y por eso, para entenderlos bien, suele ser útil analizar la estructura que tienen. Antes mencionamos la importancia de detectar las palabras que se repiten. Esas palabras a veces están organizadas de tal manera que forman una estructura. Y esa estructura destaca algo. Por eso conviene analizar la estructura que nos permite reconocer la idea que queda destacada. Por ejemplo, si vemos que todo se concentra alrededor de una palabra, quiere decir que esa palabra nos da la clave para entender el mensaje central del texto. Veamos corno ejemplo algunas estructuras que podría tener un texto bíblico: Victor Manuel Fernández 4c) a) Estructura circular Es cuando todo un texto está armado para que en el centro se destaque una frase. Hay palabras de la primera parte del texto que se repiten en la segunda, y así queda en el medio una especie de corazón, que es Io que el autor ha querido resaltar. Para descubrir esta estructura hay que colocarles letras a las palabras que se repiten. Por ejemplo: Puerta (a) Casa (b) Cuarto (c) * Busca un descanso sereno Cuarto (c) Casa (b) Puerta (a) En este ejemplo vemos que se repite "puerta" al comienzo y al final. Poco después aparece "casa" que se repite antes del final. Más cerca del centro se repite "cuarto". Así, en el centro queda la frase: "Busca un descanso sereno". Entonces queda claro que todo Io que el autor escribió está armado para destacar esa idea. Vayamos a la Biblia, y veamos tres textos donde aparecen estructuras de este tipo: * En Gál 2, 15-17 vemos que se repite "pecadores" al comienzo y al final. Luego se repite "no por las obras de la ley" y después "fe en Jesucristo". ¿Qué queda en el centro?: Nosotros también hemos creído en él. Allí se ve claro que la intención de Pablo en este texto no era tanto que comprendamos una teoría, sino que tomemos conciencia de que nosotros no somos justificados por una ley, sino por nuestra fe personal en Jesús. 50 Córno interpretar y cótno cotnunicar la Palabra de Dios Otro ejernplo tenetnos en Mc I, 21-27. En la primera y en la segunda ntitad se repiten en este orden: "'Rulos estaban asotnbrados"-' ¿Qué queda en el centro? Lo que se destaca es la contt•sión que hace el hontbre poseído: Ilas venido a acabar con nosotros. Sé eres el Santo de Dios. De este modo, todo el relato busca que reconozcamos que Jesús tiene el poder de Dios para liberarnos de nuestros tnales Illás profundos. Pasenu»s ahora al Antiguo Testamento. ya que allí 3, 20-40. Allí. Io que se repite son los distintos nombres de Dios, que dejan una frase destacada en el centro: i'ahvé Ó: 26) Altisimo (v. 35) Señor (v. 36) • c:Quién 'Ilioy eso se hi:o? (i: 37a) Señor (v. 371') Altisimo (v. 38) 40) 1.0 intetesante es que esa frase que se destaca en el cs una cita del Saltito que tecuetda el poder de Dios. cuando él dijo su palabra y las Cosas a existir Por lo tanto. ventos que el autor quiso destacar el l.antentaciones 3 venia hablando de los Inensaje de esa cita. gtatnde,s su frintientos vividos por el pueblo y de la que no había lintonccs. la cita del Salino nos recuerda que Dios es todopodenoso, y si pudo crear cl uniwtso con su sola tiene poder ayudamos a en estas curunstancias terribles. Vidor Ala nue/ Fernández 51 El Salmo 66 también tiene una clara estructura de este tipo. b) hilo estructural El "hilo" es una frase o un estribillo que aparece varias veces en un texto y une todas las partes. Cuando un texto tiene un hilo, allí puede estar resaltado el mensaje central. Por ejemplo, en Heb 3, 7—4, ll se repiten dos estribillos: "No endurezcan sus corazones" y "no entrarán en mi descanso". Esos dos estribillos incluyen una exhortación y una advertencia que nos invitan a obedecer para poder entrar en el descanso de Dios. c) hilo progresivo En algunos textos, el "hilo" que se repite es la misma frase, pero que va cambiando de significado a medida que uno avanza, de manera que la frase no significa lo mismo al comienzo que al final. Un caso típico es el Salmo 42-43. No son dos salmos, sino uno solo, porque los une el mismo estribillo, que aparece tres veces: "¿Por qué estás triste alma mía, por qué te inquietas. Espera en Dios y volverás a alabarlo. Salud de mi rostro, iDios mío!" Cuando el estribillo aparece al comienzo, es un lamento amargo, un grito de angustia. Luego el salmo nos lleva a expresar lo que llevamos dentro y a dejar brotar nuestra sed de Dios que vale más que todc lo demás. Entonces, la segunda vez que se dice el estribillo se convierte en una expresión de deseo y de esperanza. Luego la oración se concentra cada vez más en Dios y se dirige más directamente a él, con lo cual se produce un encuentro espiritual y la esperanza se vuelve feliz. Por eso, la última vez que se pronuncia el estribillo es como diciendo: "Ya no tiene sentido que estés triste, que te inquietes. Sólo confia en él". 52 Cómo interpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios d) Cambios internos En algunos textos se descubre en algún momento u cambio interno en el lenguaje y en el tono. Eso sucede todo en algunos salmos de confianza. Comienzan con un expresión de dolor, de abandono, de angustia, pero en momento parece que todo cambia, y la oración se vuelv serena y hasta feliz. Esto desconcierta al lector, pero indic que el Señor ha escuchado la oración y ha devuelto la paza corazón del creyente que suplicaba. De ese modo, estos salmos invitan a orar con profunda sinceridad y confianzq sabiendo que el Señor puede devolvernos la paz. Por ejemplo, veamos el salmo 31. Hasta el versículo 1 9 aparece una súplica llena de preocupación y de lamento. Pero a partir del versículo 20 encontramos alabanza, gratitud y una exhortación a confiar en Dios. Lo mismo sucede en el Salmo 73, porque hasta el versículo 22 predomina una perspectiva negativa, recordando una situación dolorosa, pero desde el versículo 23 encontramos una paz agradecida y una gozosa experiencia espiritual, porque Dios ha aliviado el corazón angustiado. e) Detalles que rompen estructuras Algunos textos tienen una estructura muy clara y un ritmo bien marcado. Pero aparecen algunos detalles que interrumpen esa estructura y ese ritmo. Eso significa que hay que prestar mucha atención a esos detalles, porque son cosas que los autores han querido destacar. Por ejemplo, si leemos la genealogía de Jesús de Mt l, 1-16, vemos que allí aparecen unos detalles que rompen la estructura, sobre todo unas mujeres. En aquella época en las genealogías sólo aparecían nombres de varones. Si uno quitara esas mujeres, el texto tendría más ritmo y armonia• r cro precisamente Mateo quiso agregar esas mujeres de Vido r Manuel Fernández 53 manera que quedaran resaltadas y nos preguntáramos para qué están puestas. Son mujeres que recuerdan momentos dificiles de la historia del pueblo judío, y algunas de ellas tenían que ver con una situación de pecado o con algo que no respondía tan claramente a los esquemasjudios de la época de Mateo. Por ejemplo, en l, 3 aparece de una manera llamativa: "y la madre de éstos fue Tamar". No había ninguna necesidad de aclarar eso. De hecho, en la mayoría de los nombres no se dice quién era la madre. Pero si vamos a ver quién era esta "Tamar", encontramos el relato de Gn 38, donde se ve que ella quedó embarazada de Judá haciéndose pasar por una prostituta. En el versículo 5 de la genealogía dice: "Su madre fue Rahab". En Jos 1-2 vemos que Rahab era una prostituta famosa de Jericó. En el mismo versículo 5 aparece otra mujer, que se destaca por ser extranjera, de Moab, uno de los pueblos enemigos de Israel. Sin embargo, ella también entra en la historia de los reyes judíos. Pero en el versículo 6 encontramos una larga frase que se destaca notablemente, porque corta mucho el ritmo de la genealogía: "David fue padre de Salomón, y la madre de éste fue la que había sido mujer de Urías". Es evidente que aquí se quiere remarcar algo. Y Io que sobresale es el famoso pecado del rey David, que se enamoró de la mujer de Urías, y para quedarse con ella mandó al marido a la guerra, en la primera fila (2 Sam I l). Otro detalle que rompe la estructura es un momento muy doloroso de la historia del pueblo de Dios: es la mención del destierro er. Babilonia (l, 11-12). Pero lo importante es que toda esa compleja historia, donde no falta el pecado y el dolor, termina en Jesús. Así Mateo quiere mostrar que Dios también saca algo bueno de los males de la historia, y que de toda esa historia del pueblo él hizo surgir el fruto más precioso: Jesús. Lo mismo puede hacer con nuestra propia historia. Como vemos, una genealogía, que 54 CÓmo interpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios parece una lista aburrida de nombres, puede contener precioso mensaje, si lo sabemos descubrir. Otro ejemplo de un texto donde aparecen detalles que rompen el ritmo y la estructura, es el himno de Colosenses (Col l, 15-20). Parece que todo el himno era una alabanzaa Jesucristo como Señor de toda la creación. Pero hay dos detalles que llaman la atención porque no tienen que ver con esa figura "cósmica". Son dos versículos que se refieren a la Iglesia (v. 18) y a la sangre que derramó Jesús en la cruz (v. 20). ¿Para qué se agregaron esos dos detalles? Si lo pensamos bien podemos darnos cuenta. Se agregaron para "bajar" a Jesús a la tierra, para conectarlo con la vida comunitaria y con su historia terrena, bien humana, donde tuvo que derramar su sangre. Si leemos algún comentario a este texto descubriremos que, en la época en que fue escrita la carta, había grupos muy "celestiales", que imaginaban a Jesús muy alto, muy elevado, grande como el universo, pero olvidaban que era un ser humano concreto y que Io encontramos en la comunidad de la Iglesia. Un último ejemplo: si miramos el Padrenuestro, veremos que hay un detalle que rompe por completo la estructura y el ritmo del texto. Es cuando le pedimos al Padre que perdone nuestras ofensas. Allí se agrega "asi como nosotros hemos perdonado a nuestros deudores " (Mt 6, 12). Hasta hay que hacer un esfuerzo para poder decir toda esa súplica sin respirar. Eso indica que se ha querido destacar sobre todo ese detalle: que no podemos pedir perdón si no estarnOS dispuestos a perdonar. Esto se confirma, ya que al final del padrenuestro el Evangelio de Mateo sigue: "Porque si ustedesperdonan a los demás sus ofensas, el Padre celestial losperdonarü también a ustedes. Pero si no perdonan a los ,lemüs, tampoco el P ad'? perdonará las ofensas de ustedes Vidor Manar/ Femández 55 (Mt 6, 14-15). Esto nos obliga a destacar que en la versión de Mateo esta oración, donde nos dirigimos a Dios como Padre, debe ser al mismo tiempo la oración de los hermanos reconciliados. Hemos visto sólo algunos ejemplos, y no quiere decir que tengamos que buscar estas estructuras en todos los textos que leamos. Lo importante es que estemos atentos para ver cómo funciona un texto y qué es Io que queda remarcado en él. 9. Elegir sólo una "unidad" del texto A veces sucede que no podemos encontrar la idea principal del texto y nos parece que hay muchas. Lo que pasa es que hay textos que tienen varias partes o y cada una tiene un mensaje principal. Por ejemplo, el capítulo 15 de san Lucas tiene tres parábolas. Son parecidas, pero son tres. Las dos primeras (la oveja perdida y la moneda perdida) tienen un mensaje semejante, pero la tercera, que es la del hijo pródigo, tiene un mensaje más rico que está en fuerte conexión con la introducción del capitulo. Allí se destaca más nuestra dificultad para alegrarnos cuando Dios tiene misericordia de los hermanos pecadores, como les sucede al hermano mayor envidioso (LC 15, 25-30) y a los fariseos (LC 15, 1-2). Si uno toma el capítulo 6 de san Juan, hay que dividirlo en varias partes, y cada una de esas partes tiene un mensaje propio, aunque todo el capítulo hable del pan de vida. Para evitar una predicación complicada y llena de ideas distintas, conviene elegir sólo una de esas partes y analizarla bien. Así la predicación tendrá unidad y será más contundente. 56 Cómo interpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios ¿Con qué criterio se dividen las partes para poder elegi una de ellas? Con los mismos criterios que utilizamos par, detectar la idea principal. Normalmente se van haciendo dos cosas al mismo tiempo, hasta que uno detecta una unida bien delimitada y también su mensaje central. Por ejemplo a) Si un texto tiene una estructura clara (Col l, 15-20). b) Si hay una expresión al comienzo que se repite al fina (Heb 13, 7-17). c) Hay expresiones que normalmente aparecen cuando comienza una nueva unidad ("Por eso... , Cuando...", "Después de esto...", "Entonces..."). d) Las palabras que se repiten son útiles, porque cuando uno ve que desaparecen unas palabras y comienzan a repetirse otras nuevas, es porque allí comienza una nueva unidad. Por ejemplo, en Heb 3, 1-6 se repite varias veces "casa". Otro ejemplo: en el discurso de Juan 6, donde Jesús está hablando del pan de vida, de golpe empieza a repetir que hay que "comer su carne y beber su sangre" (Jn 6, 51b-54). Eso es una novedad importante que indica que ha comenzado una nueva unidad y que ahora hay un nuevo mensaje. e) Cuando aparece una nueva introducción (Mt I l, 25). f) Cuando cambia el protagonista (Hech 6, 8). g) Cuando hay un estribillo que se repite (Sal 42-43). Estos y muchos otros indicios concretos nos permiten detectar cuándo comienza y termina una unidad bien diferenciada de las otras. Ése es el texto que hay que analizar para encontrar un mensaje central. Victor Ma n lle/ Femández 57 IO. Escribir una frase breve y simple Una vez elegida la unidad y detectada la idea principal, hay que escribir esa idea, resumir en una sola frase cuál es el mensaje central del texto. Esto es clave para la brevedad de la predicación (Ecli 32, 8: "Resume tu discurso, di mucho en pocas palabras"). Debe ser en lo posible una frase con sólo uno o dos verbos conjugados. Si no es así, corremos el riesgo de tener varias ideas en la mente, y entonces la predicación será larga, confusa y desordenada. Pero además, será el signo más claro de que todavía no hemos llegado a descubrir el mensaje central, la idea principal del texto. Si no podemos sintetizar el mensaje del texto en una frase simple y breve, es porque todavía no hemos interpretado bien ese texto. Veamos algunos ejemplos de frases sintéticas: "Jesús nos da la verdadera paz" "Amamos a los demás como Jesús nos amó". "Comemos a Jesús para tener vida nueva". Cualquiera de estas tres frases permite desarrollar una predicación simple, porque en cada una de ellas hay una sola idea. Lo cual se manifiesta en esto: las frases tienen sólo uno o dos verbos conjugados. En cambio, miremos ahora esta otra frase: "El Padre Dios envió a su Hijo Jesús para salvarnos, y de esa manera nos alcanzó el perdón para que nosotros confiemos en su amor y así acompañemos y sirvamos a los demás". En esta frase no hay una idea, sino varias. Hay por Io menos seis mensajes: habla del envío de Jesús, de la salvación, del perdón, de la confianza en su amor, del 58 Cómo interpretar y cómo comunicar la Palabra de Dios acompañamiento a los demás y del servicio. Son demasiados temas para una predicación. Por eso, la frase tiene varios verbos conjugados: envió, alcanzó, confiemos, podamos. Además, aparece tres veces la "y", que también hace que la frase tenga varios temas en lugar de uno. La predicación que se haga a partir de esta frase será larga y complicada, con muchos mensajes. Así, la prédica podrá ser interesante, pero será compleja, no tendrá contundencia, y las personas no podrán recordar ni aplicar tantas cosas. En cambio, si toda la prédica está desarrollada en torno a un solo mensaje, que se destaca de varias maneras diferentes, entonces cuando la predicación termina las personas pueden decir muy rápidamente cuál fue el tema Si alguien les pregunta podrán explicar rápidamente de qué habló el predicador, y esa idea penetrará con fuerza en la mente y en el corazón de la persona, que se quedará meditando en eso. Pero si la prédica trata varios temas diferentes, la persona no podrá decir con espontaneidad cuál fue el mensaje, olvidará pronto Io que escuchó, o quizá se quedará sólo con una idea secundaria. Victor Ma n We/ 59 C. Reconocer para qué fue escrito ese texto Finalmente, para ser fieles al texto bíblico y dejar que la Palabra inspire profundamente la predicación, es necesario detectar el género literario del texto. Sólo así se termina de precisar bien qué quería transmitir el autor de ese texto. I. ¿Qué es un género literario? Los estudiosos de la literatura analizan los escritos y "poesía", "fábula", les ponen un nombre ("novela", "epopeya", "saga", etc.). Nosotros podríamos hacer lo mismo, pero no hace falta ponerle un nombre a cada texto bíblico. Eso lo harán los especialistas. No es algo necesario para entender un texto ni para la predicación. ¿De qué se trata entonces? Se trata de descubrir para qué el autor escribió ese texto. En realidad, eso es en definitiva el "género literario". Notemos que eso no es sólo la idea o mensaje que quiso transmitir el autor, sino para qué quiso transmitir ese mensaj e (¿para consolar? , ¿para estimular a un cambio de vida? , ¿para motivar la oración?). En definitiva hay que descubrir qué efecto quiso lograr el autor, que objetivo tenía cuando transmitía ese mensaje. Esto también es ser fiel al autor. Veamos un ejemplo. Quizá la idea principal, el mensaje central, sea éste: "Dios es todopoderoso Muy bien, pero ese mismo mensaje puede estar en un género sapiencial contemplativo, o en una exhortación moral, o en un texto apocalíptico, o en un salmo de adoración, o en un cántico de acción de gracias, o en una oración de súplica, etc. No es lo mismo. Eso cambia el sentido profundo del mensaje. Por