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El centro comercial Sambil en San Cristóbal ofrece estacionamiento gratuito después de las 9 pm los martes, miércoles y jueves para clientes que aún están en el centro comercial, pero algunos clientes escépticos no creen que sea gratis y insisten en pagar. Otros clientes escépticos asumen incorrectamente que el estacionamiento es gratis todos los días y se quejan cuando tienen que pagar. Lidiar con clientes escépticos no es fácil pero es importante para aprender a manejar situaciones difíciles.
El centro comercial Sambil en San Cristóbal ofrece estacionamiento gratuito después de las 9 pm los martes, miércoles y jueves para clientes que aún están en el centro comercial, pero algunos clientes escépticos no creen que sea gratis y insisten en pagar. Otros clientes escépticos asumen incorrectamente que el estacionamiento es gratis todos los días y se quejan cuando tienen que pagar. Lidiar con clientes escépticos no es fácil pero es importante para aprender a manejar situaciones difíciles.
El centro comercial Sambil en San Cristóbal ofrece estacionamiento gratuito después de las 9 pm los martes, miércoles y jueves para clientes que aún están en el centro comercial, pero algunos clientes escépticos no creen que sea gratis y insisten en pagar. Otros clientes escépticos asumen incorrectamente que el estacionamiento es gratis todos los días y se quejan cuando tienen que pagar. Lidiar con clientes escépticos no es fácil pero es importante para aprender a manejar situaciones difíciles.
El centro comercial Sambil de San Cristóbal, ofrece un servicio de estacionamiento
para que todas aquellas personas que los visitan puedan tener la tranquilidad y seguridad de que sus vehículos van a estar resguardados de la mejor manera. Buscando ayudar a sus visitantes, el estacionamiento del Sambil ha lanzado desde hace ya varios meses una promoción la cual consiste en que los días martes, miércoles y jueves después de las 9 pm, aquellas personas que aún se encuentra dentro del centro comercial, puedan retirarse sin tener que pagar el servicio, de igual manera los consumidores deben dirigirse a las taquillas del estacionamiento para procesar el ticket, pero sin cancelar nada. Muchas personas desconocen de esta promoción, por ello cuando se le informa que no debe cancelar nada, no lo creen, haciendo comentarios como “En serio, cóbrame”, “¿Por qué es gratis? No lo creo” “No, aquí esta el dinero. Ten”. Consumidores escépticos desconfiados de obtener un servicio gratis. A su vez, de la misma manera en el sentido contrario, existen consumidores que se dirigen los días lunes, viernes, sábados y domingos hacia las taquillas del estacionamiento pretendiendo obtener el servicio gratis, cuando existen días establecidos para la promoción, realizando comentarios como “Pero vine que días a esta hora y no me cobraron”, “¿Por qué me estas cobrando, te vas a quedar con el dinero?” “Llama al supervisor porque yo no voy a pagar nada” creyendo que los(as) cajeros(as) se van a quedar con el dinero cobrado. Muchas veces este tipo de consumidores tienden a ser groseros con los(as) cajer(as), olvidando por completo que ellas están ahí prestando un servicio y son ajenas a las tarifas que allí se manejan. Lidiar con los consumidores escépticos no es una tarea fácil, muchos de ellos se quejan del servicio del estacionamiento a pesar de tener buenas atenciones y proporciona seguridad a los vehículos, a pesar de ello este tipo de consumidores son esenciales para aprender a afrontar situaciones difíciles. Cada uno de nosotros al menos en una ocasión hemos sido consumidores escépticos, todos queremos saber el tipo de material de la camisa que deseamos comprar, si realmente los zapatos son de cuero o si la galleta que compramos realmente es de chocolate. Está bien ser un consumidor escéptico, pero recuerda ser amable con aquellos que te están proporcionando tiempo y atención. PERFIL Analiza cada pequeño detalle del producto antes de comprarlo. Su tendencia a cuestionar y analizar todo. Rechaza cualquier información sin corroborar y prefiere inspeccionar cada detalle. Es de naturaleza precavida y desconfiada. Valoran su dinero y no desean despilfarrarlo en compras innecesarias. La edad varía mucho, pero normalmente tienden a ser personas mayores a 30 años, quienes crecieron con criterios muy marcados y es difícil de hacerlos cambiar de opinión, sin embargo, no es imposible.