COMPONENTES AMBIENTALES PRESENTES EN LA LEY 388 DE 1997

Verónica Jaramillo Saldarriaga Ordenamiento Territorial I 2023-02

La Ley 388 DE 1997 Tiene un objetivo clave el cual es armonizar diferentes

normas presentas en Colombia y que van en línea a los reglamentos
dispuestos para la construcción y urbanismo, al ejercicio de la curaduría
urbana, y las sanciones urbanísticas. Y así poder tener como enfoque los
planes de desarrollo municipal, compraventa y expropiación de bienes. Por eso
el estado cuenta con un papel importante en la Ley y este corresponde a
concretar e imponer los lineamientos que orienten las acciones de un país;
estos lineamientos se materializan en la Constitución, las Leyes y Normas y las
Políticas, las cuales se constituyen en una filosofía, incluyendo principios
básicos que se deben tener en cuenta para actuar sobre un tema. En el tema
del desarrollo sostenible, es al Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo
Territorial a quien le corresponde diseñar y proponer la Política Ambiental
Nacional, las Políticas Sectoriales y las Políticas de Vivienda, Desarrollo
Territorial, Agua Potable y Saneamiento Básico. Sin embargo, también en el
nivel regional la Corporación Autónoma Regional como Autoridad Ambiental, fija
los lineamientos de acción en la Región; y en el ámbito municipal, se fijan las
pautas de acción que respondan a las características locales, coherentes con
las determinaciones regionales y nacionales.
Esta Ley resalta la importancia que sin duda alguna tiene una seria gestión
ambiental, en pro de los resultados que se quieren obtener radica en un
adecuado aprovechamiento de las herramientas que se presentan. La
planeación, la participación de los agentes relevantes y la importancia dada a
los aspectos que no necesariamente son económicos, son claves en los
resultados y la minimización de conflictos. Dando autoridad a los municipios de
un ordenamiento territorial, el uso equitativo y racional del suelo, la
preservación y defensa del patrimonio ecológico y cultural localizado en su
ámbito territorial y la prevención de desastres en asentamientos de alto riesgo,
así como la ejecución de acciones urbanísticas eficientes, pero a su vez la
protección del medio ambiente como factor importante en el crecimiento de las
civilizaciones y así la prevención de desastres por malas prácticas de
crecimiento urbanístico.
Regula, entre otros aspectos, el ordenamiento territorial a nivel municipal y
distrital, concretando en su artículo 10 las determinantes que constituyen
norma de superior grado para la elaboración y adopción de los planes de
ordenamiento territorial. En la planeación del desarrollo municipal o distrital
debe a cuatro aspectos básicos: lo físico, lo económico, lo social y lo
administrativo; claro está, se infiere que el valor medioambiental estaría
incluido el aspecto físico; por lo cual: es importante también dejar por sentado,
que el concepto de “plan de desarrollo” en la actualidad, no es el mismo al que
se refiere esta ley de reforma urbana; pues en los actuales planes de
desarrollo, los constituyentes de 1991 incurrieron en el error grave de
desintegrar la planeación del desarrollo al hacer referencia a ella solamente en
sus aspectos económicos y sociales. Dejo por fuera los aspectos físicos,
desconociendo que la planeación integral del desarrollo comprende
conjuntamente los aspectos económicos, sociales, físicos y ambientales. Se
hace imprescindible que cualquiera de las entidades con facultad o iniciativa
legislativa, presente un proyecto que involucre nuevamente los aspectos
físicos, económicos y sociales; es decir vuelva a reintegrarse de manera
integral la planeación del desarrollo en los centros poblados.
La cesión urbanística, se define como una carga o imposición en cabeza de los
propietarios de la tierra, consistente en ceder al Estado para conformar
espacios públicos, un porcentaje de área de terreno perteneciente al lote o
predio susceptible de desarrollar, en ocasión a su decisión de habilitar dicho
predio para usos urbanos. También puede verse como una contraprestación en
ocasión a la futura utilidad que el propietario de la tierra espera tener por
ocasión a su ejercicio de urbanizar.

Uno de los principales problemas que se vive en Colombia frente al tema, y que
se convierte en uno de los retos de la normatividad, corresponde a la
ocupación informal, sincera y desordenada del territorio; aunque esta ley no ha
logrado erradicar estos problemas, sí ha contribuido a que se tome conciencia
de ellos y a que las autoridades cuenten con instrumentos apropiados para
combatirlos y que la ciudadanía pueda exigir su resolución por vías políticas o
judiciales.