Para comenzar a hablar de la película, justamente es importante saber a que se refiere un
método y sobre todo en particular el método Grönholm, este último siendo la prueba más mencionada a lo largo de cinta. Cómo ya sabemos, un método es un conjunto de procedimientos, establecidos para gestionar la enseñanza, objetivos, técnicas, actividades, etc de una forma sistemática, ordenada y estructurada de una tarea en particular. En cuanto al método Grönholm en lo particular se trata de una técnica de selección de personal que trata de encontrar al mejor aspirante a través grupales y similares a un juego de roles, en donde alcanzarán un objetivo en común. En la película se nos muestra que el método deberá someter a los aspirantes a emitir con carácter y desde puntos de vista muy particulares, quien es el mejor candidato para ocupar un puesto directivo dentro de la empresa a la cual están acudiendo a “concursar” por una posición. Se verán obligados a buscar soluciones en equipo, encontrar a un “traidor” entre ellos, son sometidos a pruebas de estrés constante para conocer su verdadera naturaleza, mientras que el área de Recursos Humanos les hace preguntas y expone situaciones laborales en las que han estado involucrados los candidatos. Como nos podemos dar cuenta, sus fichas curriculares no son lo único que la empresa ha revisado de cada uno de ellos, la empresa ha mostrado su compromiso en la revisión y conocimientos de los puestos previamente ocupados por cada uno de los personajes, el compromiso con sus ideas, su capacidad de liderazgo o de solo seguimiento, sus habilidades para la comunicación, y sobre todo la forma en que cada uno se ha sacrificado para al alcanzar sus objetivos. Esta película nos demuestra que no todo se trata de conocimientos técnicos, de la obtención de títulos académicos y de la experiencia laboral, sino de las aptitudes que cada candidato posee para afrontar dificultades, la capacidad de manejar el estrés y solucionar problemas con pocos o nulos recursos. Aquí podemos evidenciar que en todo lugar siempre existen conflictos mal gestionados, un clima laboral excesivamente competitivo y un gran desgaste emocional. En conclusión, todos aquellos que estamos en la etapa laboral de nuestra vida y pretendemos competir por mejores posiciones, y en la empresa no existe un buen departamento de Recursos Humanos, solo estaremos expuestos a situaciones incomodas, altos niveles de estrés y perfilamientos de personal incorrectos. Quizá para muchas empresas es cómodo que los candidatos “se descarten solos”, sin embargo, esto puede provocar un nulo crecimiento en el personal, y en la compañía misma. Aunque la competitividad es buena, no siempre es la única opción para que se desarrollen mejores habilidades y más conocimiento.