Laura Victoria Santamaría Trujillo, Julian Julian Arroyabe Mares.

Análisis lingüístico II
Español, Guillermo Echeverri.

La naturaleza de la cosa y el lenguaje de las cosas

En el texto de Hans George Gadamer “Verdad y método II”, se analiza el punto en

común entre la filosofía y los modelos metodológicos actuales en relación con dos
expresiones que poseen cierta similitud semántica “La naturaleza de la cosa” y “el lenguaje
de las cosas” expresiones que por su semejanza producen cierta complejidad en su
entendimiento. Gadamer explora la naturaleza de la comprensión y la interpretación,
especialmente en el contexto de la interpretación textual. Este análisis se realiza a través de
explorar los conceptos de cosa, naturaleza y lenguaje que son fundamentales para entender su
enfoque hermenéutico, además de su relación lingüística con Richard Rorty, Jackobson y su
importancia formativa.
A partir de estos conceptos, Gadamer comienza a desglosar la comprensión que el
entorno posee de las expresiones “La naturaleza de la cosa” y “el lenguaje de las cosas”, en el
cual se expone a la naturaleza y a las cosas como conceptos que poseen su propia identidad
que responde a su motivo de origen y el nombramiento que estos reciben por parte de las
personas, además de aclarar cómo el ser humano tiene cualidades que lo distinguen de las
cosas de su cotidianidad.
Por un lado, el apartado del texto de Gadamer desarrolla cómo las cosas poseen por sí
mismas o por si solas un ser que se utiliza pero que es inalterable por el ser humano, es decir,
posee unos propósitos que no va a sucumbir al capricho de las personas, este evita el uso
incorrecto que se le quiere dar al ente.Sin embargo, a la hora de analizar “el lenguaje de las
cosas” Gadamer propone dos ideas, la primera, en la cual expresa que las cosas no tienen
propio ser ya que se encuentran bajo el dominio del hombre y la segunda, que las cosas nunca
pueden ser lo que son por sí solas.
Por otro lado, señala como la naturaleza de la cosa o el lenguaje de las cosas son una
expresión que rechaza la arbitrariedad en el uso del concepto, la arbitrariedad que presentan
las suposiciones de las personas, el capricho de las negaciones y el empecinamiento en la
opiniones personales, es decir, estas expresiones se cierran a que las personas las usen como
herramientas para suplir sus necesidades discursivas, para así no caer en el error de una
subjetividad sin racionalidad.
Dentro del texto de Gadamer se pueden encontrar similitudes con ciertos autores
como lo es Jackobson. Este propone que el lenguaje es un sistema que utilizamos (no un
medio) para producir o expresar aquellos pensamiento que poseemos a partir de unas
Laura Victoria Santamaría Trujillo, Julian Julian Arroyabe Mares. Análisis lingüístico II
Español, Guillermo Echeverri.

funciones que permiten desarrollarlos, se vincula con Gadamer debido al uso del lenguaje,
que con sus propias reglas, puede ser utilizado para dar uso de la función poética en la cosa,
además, ambos autores comprenden el lenguaje como una pieza fundamental para los
fenómenos culturales.

Existe una correlación con el libro “contingencia, ironìa y solidaridad” en el capítulo

La contingencia del lenguaje, presentado por Richard Rorty. Esta corresponde con la
interpretación de contextualidad de Gadamer, en tanto que para poder comprender algo se
debe tener en cuenta el contexto en el que este se ubica. El lenguaje es contingente y cambia
con el entorno cultural e histórico, no obstante, las comprensiones de lo que nos rodea
también viven en esa contingencia, y se ven influenciadas por el lenguaje y su aplicabilidad.

La importancia de este apartado en la formación se aborda en la misma línea de

pensamiento de la experiencia de la lectura según Jorge Larrosa, esta se asemeja a un viaje
introspectivo que nos permite adentrarnos en la naturaleza de la cosa y el lenguaje de las
cosas. Para Larrosa, leer no es simplemente decodificar palabras impresas en una página, sino
un proceso interactivo donde el lector se involucra activamente con el texto. Al mismo
tiempo, Gadamer sostiene que nuestra comprensión del mundo está mediada por el lenguaje y
la interpretación, y que esta comprensión se desarrolla a través de un proceso dialógico.

Cuando leemos, nos involucramos en un diálogo con el texto y además, con la

naturaleza de las cosas que el texto trata de capturar. Esta interacción entre el lenguaje del
texto y nuestra comprensión de la realidad contribuye a una comprensión enriquecida y
dinámica de la naturaleza de la cosa. Así, la experiencia de la lectura se convierte en un acto
hermenéutico en el cual la naturaleza de la cosa se despliega a través del lenguaje, y nosotros
como lectores participamos activamente en este proceso de descubrimiento y comprensión.