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SUPERVISOR DE OBRA

El objetivo de la supervisión de una obra implica lograr que esta se ejecute dentro del
plan establecido, respetar los más altos estándares de calidad, hacer un correcto
manejo del presupuesto, velar por la seguridad de los trabajadores, cumplir con los
plazos de tiempo establecidos y muchas otras cosas más.
Esta persona debe ser capaz de resolver los problemas que se presentan durante el
desarrollo de la construcción. Por esta razón, debe ser alguien proactivo y que sepa
identificar a tiempo los riesgos y daños que pueda sufrir tanto la construcción como el
personal. Debe cumplir con diferentes roles, ya que es la persona encargada de forma
directa de un proyecto. Encargarse de dirigir, controlar y supervisar el proyecto en
cuestión de inicio a fin, así que prepárate bien para afrontar esa responsabilidad.
Una buena supervisión podrá realizarse de manera correcta siempre que esté bajo la
administración de una persona responsable y, al mismo tiempo, que cuente con el
apoyo de una empresa que responda por las condiciones generales de la operación y
provea todos los recursos necesarios para llevar a cabo la ejecución de la obra.
Por ejemplo, si una constructora no respeta las políticas de seguridad y no provee los
recursos básicos mínimos para evitar posibles daños, entonces, será casi imposible
para el supervisor realizar una labor eficiente.
Otro ejemplo que podemos citar es el caso en el que los materiales lleguen con retraso
o no sean los más adecuados para el trabajo. Cuando esto sucede, la persona
encargada de supervisar la obra debe hacer un reclamo y solicitar un nuevo pedido de
materiales con lo cual se dificulta el cumplimiento de los tiempos y los planes de
ejecución.

LAS FUNCIONES DEL SUPERVISOR DE OBRA:


Como hemos mencionado anteriormente, un supervisor de obras debe ser un
profesional bastante íntegro y con conocimientos en distintas ramas, ya que dirigir un
proyecto de construcción no solo se trata de colocar bloques encima de otros, sino que
es una labor exhaustiva que va mucho más allá.

 Revisar los planos y las especificaciones.


 Coordinar el trabajo de los subcontratistas y otros trabajadores.
 Garantizar que el trabajo se realizar de acuerdo con los planos y las
especificaciones.
 Mantener la obra segura y limpia.
 Mantener a los superiores informados del progreso.
 Completar el proyecto a tiempo y dentro del presupuesto.
 Garantizar que la obra sea todo un éxito y cumplir las cláusulas contractuales.
Como es bien sabido, en casi todos los proyectos se establece la manera en la
cual estos se llevarán a cabo y los resultados esperados.
 Velar por el desarrollo del proyecto en todo momento, es decir, de principio a
fin. Esto incluye las modificaciones y cambios inesperados.
 Administrar los recursos que han sido otorgados. Esto incluye tanto los
recursos materiales como los recursos humanos.
 Ser comunicativo e informar sobre los avances de la obra tanto al cliente como
al contratista y, así mismo, solicitar todo lo que se requiere para una buena
ejecución.
 Asesorar tanto en el ámbito técnico como administrativo.
 Verificar que todo cumpla con los estándares más altos de calidad. O al menos
que los resultados no tengan una calidad menor a la esperada.
 Cumplir con los tiempos.
 Resolver los contratiempos y conflictos que se puedan presentar.
PERFIL DE UN SUPERVISOR DE OBRAS:
Ser un profesional en la materia de construcción y tener la capacidad de supervisar y
vigilar el cumplimiento del contrato establecido, así como verificar la ejecución correcta
de un proyecto.

Conocimiento técnico: En lo que refiere a las competencias técnicas, mayormente


suelen solicitar personas que tengan la experiencia y el conocimiento de todos los
procedimientos de construcción.

Por otro lado, también se considera como competencia técnica la habilidad de leer los
planos y de programar y cuantificar los recursos para la construcción.
El aspecto tecnológico no debe pasar desapercibido en el perfil del supervisor de
obras, ya que para un trabajo más eficiente debe hacer uso de programas de cómputo
y aplicaciones específicas relacionadas a la ingeniería civil.
Finalmente, debe tener conocimientos en fabricación y montaje de estructuras, uso de
montacargas, instalaciones eléctricas, hidráulicas, sanitarias, pisos industriales y
acabados especiales.

Habilidades interpersonales: Uno de los principales recursos a primera mano del


supervisor, es la administración del capital humano. Por lo tanto, se requiere que el
jefe de obras tenga las habilidades necesarias para relacionarse con su equipo de
trabajo. Esta es una de las claves del éxito para todo proyecto de construcción.
Sin duda alguna, el supervisor desempeña un papel fundamental, debido a
que representa la máxima autoridad en la obra. No obstante, es más que obvio que el
simple hecho de que esta persona lleve puesto un casco de un color diferente no es
suficiente para que todos lo reconozcan como la principal autoridad.
Dicho esto, el supervisor es el responsable de hacer que su autoridad se mantenga en
todo momento y bajo cualquier circunstancia. La única manera de que esto se logre es
que se trate de una persona que sea capaz de guiar a sus subordinados de forma
armoniosa y exitosa a lo largo de todo el proyecto.
A medida que el supervisor se involucre con su equipo, dé órdenes acertadas y
oportunas y no pierda el liderazgo, podrá mantener su autoridad y así enfrentar y
superar todos los desafíos.

Valores y actitudes: En un gran número de ocasiones, el fracaso de un proyecto no


se origina por fallas técnicas, sino por falta de ética profesional.
Esto se debe a que, por lo general, el desempeño de las labores del supervisor se ven
inevitablemente influenciadas por sus valores y actitudes. Por lo tanto, esta
competencia puede ser la más importante de las tres de este listado.

3 COMPETENCIAS FUNDAMENTALES DEL SUPERVISOR:

1. No aceptar favores: Primero que nada, es recomendable que no reciba


favores de ningún tipo, ni obsequios o invitaciones por parte de sus
subordinados, puesto que puede verse comprometida su relación labora
2. Correcto manejo y solución de conflictos: Por otro lado, el debido manejo y
solución de conflictos y la comunicación eficaz es fundamental durante toda la
ejecución del proyecto de construcción.
Todos sabemos que es completamente inevitable que se presenten ciertas
controversias o conflictos en el campo de trabajo. Además, estas pueden ser
generadas por los trabajadores, la organización o el dueño
Por consiguiente, en lugar de enfocarse al cien por cien en evitar este tipo de
situaciones, es mejor a manejarlas y resolverlas.

3. Mantener un ambiente armonioso y profesional: Independientemente de


qué es lo que haya sucedido, mantener un ambiente laboral armonioso y
profesional es indispensable para resolver los conflictos. Estas son las tres
competencias que debe tener todo supervisor de obras. Y al momento de
seleccionar a la persona más indicada, el reclutador debe prestar mucha
atención a cada una de estas competencias, ya que, a final de cuentas, la
debida finalización del proyecto dependerá en gran parte de esto.

LOS ASPECTOS MÁS IMPORTANTES, COMO LO SON:


 Alcance.
 Plazos.
 Equipo.
 Recursos.
 Metas.

OBJETIVOS PRINCIPALES
Son bastante claros. A continuación, encontrarás los más importantes:

Administrar los costos: Es importante mantener un control de los gastos que genera
todo proyecto, ya que la base para comenzar y terminar una obra es el presupuesto
cuyo monto total debe corresponder con el monto establecido en el contrato.

Cumplir con los plazos de tiempo: Vigilar el paso del tiempo siempre puede ser una
de las máximas preocupaciones para el supervisor, ya que dependiendo de la manera
en que se administre este invaluable recurso, el proyecto podrá finalizar dentro del
periodo de tiempo estipulado.
En la mayoría de los contratos, además del presupuesto aprobado, se establece el
tiempo de finalización, por lo tanto, el supervisor debe realizar todas las actividades
dentro de los plazos previamente establecidos. En caso contrario, el supervisor deberá
informar del retraso y exigirle al contratista que adopte todas las medidas necesarias
para cumplir con lo estipulado.

Verificar la calidad: La calidad final de una construcción, se aprecia de principio a fin.


Este es uno de los aspectos que cualquiera puede observar a simple vista, sin
importar si es experto en la materia o no. Para alcanzar este objetivo, es necesario
que el supervisor verifique la calidad de la obra en todos sus aspectos.
Hoy en día, para que un proyecto sea considerado una obra de calidad, debe cumplir
con las normas técnicas y reglamentarias vigentes. Estas pueden variar de acuerdo al
país y al tipo de proyecto que se desea construir.

ACCIONES QUE DEBE TOMAR


Cuenta las siguientes acciones a la hora de dirigir un proyecto:

Acciones de Prevención: Resulta sumamente importante tener en cuenta las


acciones preventivas antes de comenzar a desarrollar un proyecto, ya que, en caso de
hacerlo, el riesgo de sufrir daños en la obra y accidentes laborales disminuye
considerablemente. Las acciones de prevención fueron diseñadas especialmente para
que se cumplan todos los requisitos previos a la ejecución antes de llevarse a cabo.
Por ejemplo: una acción preventiva es la revisión de la calidad de todos los materiales
antes de comenzar a utilizarlos, hacer pruebas de presión a las tuberías, comprobar
que se construye sobre una estructura sólida y firme, e incluso verificar que el personal
a cargo tenga todo su equipo de protección personal.
Acciones de Verificación: Llegado a un punto más avanzado en medio de la obra, el
supervisor podrá darse cuenta si las acciones preventivas que ejecutó en un principio
fueron implementadas de forma correcta. Para poder verificar esto, debe inspeccionar
el trabajo ya realizado.
Este tipo de acciones pueden llevarse a cabo de forma sistemática o selectiva.
Acciones Correctivas: Por lo general, cuando la obra no ha cumplido con los
protocolos necesarios, el supervisor del proyecto está en la obligación de tomar
acciones correctivas con el objetivo del debido cumplimiento de los planes de
construcción.

Es realmente muy importante poder corregir las fallas a tiempo, puesto que, si las
acciones correctivas no se implementan, puede generar un impedimento parcial o total
de la continuación del proyecto, o peor aún sufrir daños catastróficos.
En conclusión, estas tres acciones no deben ser pasadas por alto, ya que son
fundamentales para llevar a cabo una buena supervisión de la obra.

CONCLUSION

A modo de conclusión, podemos decir que la tarea de un supervisor de obras es


bastante exigente y todo un desafío, puesto que una buena supervisión requiere de
tener conocimientos, habilidades, sentido común y ser muy precavido.
Convertirse en un supervisor exitoso implica tener sobre la espalda el peso del fracaso
o éxito de la obra. Esto requiere de mucha experiencia en la materia, la habilidad de
asumir responsabilidades y, por supuesto, mucha resiliencia.

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