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OBSTETRICIA

sónico Doppler. Para ello se emplea un transductor que es avanzada y el cuello delgado, se facilita la valoración
emite ultrasonidos y un sensor para detectar el cambio de semiológica. Por ello, esta apreciación es más fácil en la
la frecuencia del sonido reflejado. Las señales ultrasónicas presentación de vértice.
son representadas gráficamente en un papel de registro di-
señado para este propósito (FIGURA 17-5) (Cunningham Descenso de la presentación
y cois., 1996a).
También por medio del tacto vaginal se valora el grado
de descenso de la presentación en la pelvis y se analiza el
Exploración vaginal progreso del parto en relación con el tiempo transcurrido.
Por medio del tacto vaginal durante el período de dilatación Para valorar este descenso se relaciona el punto más pro-
se valoran la dilatación del cuello uterino, la presentación minente de la presentación con el plano de las espinas ciá-
y posición fetal, el grado de descenso de la presentación y ticas de la pelvis media (consultar Capítulo 1: Anatomía del
las características de la pelvis. aparato genital femenino, mama y pelvis ósea- y Capítulo
10: Modificaciones fisiológicas del embarazo).
Durante el período de dilatación es preciso analizar cada
Dilatación del cuello uterino dos a tres horas la dinámica uterina, la condición materna,
El proceso de dilatación cervical no sigue una progresión la condición fetal y el progreso del parto, con el objeto de
uniforme. Los primeros centímetros de dilatación demoran determinar la conducta que se deberá seguir.
más en producirse que aquéllos después de que se alcan-
zan los 4 cm. Por esto se sostiene que la dilatación cervi- Posición materna
cal responde a un proceso de progresión uniformemente
acelerada que progresa en forma diferente según el tipo de En los servicios de obstetricia latinoamericanos es costum-
presentación y el grado de encajamiento de la presentación bre que el período de dilatación se conduzca con la madre
fetal. en cama en decúbito dorsal o decúbito lateral. Sin embar-
go, esto no es indispensable, especialmente durante las
Los tactos vaginales deben realizarse con medidas de
primeras horas. Más aún, existen investigaciones clínicas
asepsia rigurosa (guantes estériles, aseptización genital,
que han demostrado que el trabajo de parto se acorta e
etc.) muy especialmente cuando las membranas ovulares
incluso sería menos doloroso al mantener a la madre en
están rotas. posición de pie, caminando o sentada (Díaz y cois., 1980).
En los casos de rotura prematura de membranas se debe
No se debe olvidar que durante el tercer trimestre del
restringir al máximo posible el número de tactos vaginales
embarazo se produce la compresión de la vena cava inferior
durante el trabajo de parto. por el útero grávido, que alcanza su máximo entre las 36 y
Para apreciar el grado de adelgazamiento, consistencia 38 semanas. Esta compresión produce el llamado síndro-
y dilatación del cuello uterino por medio del examen vagi- me de hipotensión supina, caracterizado por hipotensión
nal, se debe palpar el cuello contra el polo fetal presenta- arterial, taquicardia, palidez y fatiga, fenómeno que ocurre
do. De esta manera, especialmente cuando la dilatación aproximadamente en el 10% de las embarazadas en posi-

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FIGURA 17-5. Hoja de monitoreo fetal continuo con transductor externo durante el trabajo de parto. En la parte superior
de la figura, el registro de la frecuencia cardíaca fetal, y en la inferior, el registro de la dinámica uterina.

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Capítulo 17 El paño

ción supina. Por ello, toda madre en trabajo de parto debe Partograma y prueba de trabajo
lateralizarse de preferencia hacia la izquierda con un ángulo
de parto. Curvas normales de parto
mayor a 15° (Lacassie, 1999). Actualmente existen eviden-
cias de que la lateralización mejora la oximetría de pulso y La representación gráfica del trabajo de parto fue una idea
el gasto cardíaco en pacientes con anestesia regional (Car- original de Emanuel Friedman, quien concibió un gráfico
bonneycols., 1996; Danilenko-Dixon y cois., 1996). que relacionaba la dilatación cervical y el descenso de la
Ha sido demostrado que la deambulación de la madre presentación en función del tiempo (Friedman, 1981). El
durante el trabajo de parto acorta significativamente la du- análisis gráfico, denominado partograma, es una técnica
ración del período de dilatación si se compara con la posi- simple para organizar la información obtenida del examen
ción en decúbito horizontal en cama. Un estudio prospecti- físico en un formato de fácil interpretación y con valor pre-
vo multicéntrico de 334 madres con bajo riesgo obstétrico, dictivo (FIGURA 17-6). Al comparar las características de
demostró que la posición vertical de la madre durante el un trabajo de parto individual con los límites de normali-
período de dilatación del cuello uterino (sentada, parada o dad obtenidos en grandes poblaciones, se puede prever un
deambulando) acortó este período en el 25% en relación trabajo de parto disfuncional. La interpretación de la curva
al grupo control, que se mantuvo en posición horizontal en del partograma se facilita cuando la información relevante
está disponible en el gráfico (uso de ocitocina, anestesia,
cama.
RAM, cambios en la posición fetal). Estas curvas son sólo
Estos estudios permiten ofrecer a la madre en trabajo descriptivas y no identifican la etiología de la anormalidad
de parto, sin riesgo obstétrico, caminar, estar en posición del trabajo de parto (Cohén & Brennan, 1995).
de pie o sentada, durante el trabajo de parto; siempre que
las membranas ovulares permanezcan intactas (bolsa de Durante el trabajo de parto normal, la dilatación cervical
agua). En caso de rotura de membranas la madre debe sigue una curva de forma sigmoide, que tiene tres fases:
permanecer en cama (Schwarcz y cois., 2008). a) la parte inicial con poca progresión en la modificación
cervical, denominada fase latente y que ocupa dos tercios
del tiempo total del trabajo de parto; b) la parte intermedia,
Analgesia y anestesia obstétrica donde la curva adquiere una pendiente importante debido
a la rápida progresión de la dilatación, incluye dos fases:
El manejo del dolor durante el trabajo de parto es uno de fase aceleratoria y fase aceleratoria máxima; y c) la parte
los elementos más importantes para el bienestar materno y final de la curva sigmoide, donde la velocidad de dilatación
fetal. Debemos recordar que el dolor intenso generado por es lenta nuevamente y se conoce como fase desaceleratoria
la actividad uterina es capaz de modificar la hemodinamia (FIGURAS 17-7 Y 17-8).
y la ventilación de la paciente. El estímulo simpático puede
ser tan intenso que genere vasoconstricción, taquicardia y La representación gráfica del descenso de la presenta-
aumento de la presión arterial. La hiperventilación secun- ción corresponde a una curva con forma de hipérbole, en la
daria al estímulo nociceptivo produce vasoconstricción pe- cual hay una fase inicial con poco cambio, y luego otra de
riférica e hipercapnia, lo que puede producir desplazamien- rápido progreso, cuyo comienzo coincide con el inicio de la
to de la curva de disociación de la hemoglobina; todo lo fase desaceleratoria de la dilatación; en este punto ambas
anterior puede tener un efecto deletéreo sobre la circulación líneas se intersectan (FIGURAS 17-7 Y 17-8).
placentaria (Lacassie, 1999). Las ventajas de la anestesia
podrían resumirse entonces en una franca disminución del
estrés, con la consiguiente disminución en la liberación de Anormalidades en las curvas de parto
sustancias vasoactivas, disminución del consumo de oxíge- Las anormalidades del trabajo de parto se clasifican en
no materno, disminución de la sobrecarga cardiovascular y el partograma de acuerdo al período en que ocurren. En
disminución de la hiperventilación. una perspectiva general se denominan según exista una
Durante la fase de dilatación se emplea la anestesia epi- falla en el mecanismo, es decir, si no se realiza una de-
dural. Esta técnica ofrece la ventaja de provocar un bajo terminada etapa, o bien, si hay una detención o prolon-
bloqueo simpático y motor, por lo cual no interfiere con gación en la realización de dicha etapa. Algunos ejemplos
la dinámica uterina. Sí interfiere con el período expulsivo, se observan en la FIGURA 17-9 (Arias, 1993; Cohén &
produciendo un aumento de partos instrumentales sin au- Brennan, 1995). Desde un punto de vista académico, en
mentar el índice de cesáreas (Chesnut y cois., 1987). Sin la TABLA 17-1 se detallan las anormalidades del trabajo de
embargo, esta anestesia permite que se pueda actuar sobre parto que son deducibles del uso correcto del partograma.
la dinámica uterina aumentando su intensidad y frecuen- En la actualidad, en la mayoría de las maternidades de
cia; además, la relajación de las partes blandas pehneales Chile, el Ministerio de Salud ha promovido la utilización de
facilita el avance del ovoide fetal al no ofrecer resistencia una ficha perinatal, la cual pretende ser el único documen-
derivada de la contractura muscular por dolor (consultar to de registro utilizado en todo el país y cuyo análisis se
Capítulo 26: Anestesia en obstetricia). realiza en forma centralizada mediante programas compu-

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OBSTETRICIA

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Horas de trabajo de parto

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Presión arterial

Pulió
Posición materna

Intensidad contracciones
Duración contracciones

Dolor/local intens.
Líquido amniótico
Monitoreo tetal
Anestesia
Observaciones

FIGURA 17-6. Partograma, incluido en la ficha perinatal de los servicios de salud de Chile. En la parte superior se re-
gistra la dilatación y descenso de la presentación. En la inferior la información complementaria necesaria para tener en
cada control una visión global de la evolución del trabajo de parto.

tacionales. Dentro de esta ficha perinatal se encuentra un


partograma, en el cual se registra la evolución del trabajo
de parto (FIGURA 17-6).

Prueba de trabajo de parto


Ante cualquier anormalidad en la progresión del trabajo
de parto, surge la pregunta subyacente: ¿es adecuada la
pelvis de la madre para el paso del feto? Entonces, es la
proporcionalidad cefalopelviana lo que está en evaluación
durante el trabajo de parto. Dicha proporcionalidad se eva-
lúa mediante una prueba dinámica en la cual se otorgan
las condiciones óptimas para un trabajo de parto. Estas
condiciones incluyen que la paciente se encuentre en la
fase activa del parto, (con 4 cm o más de dilatación), diná-
mica uterina efectiva, membranas ovulares rotas y aneste-
sia peridural. En estas condiciones y al cabo de dos horas
2 4 6 8 10 de observación, se reexamina la paciente para determinar
Duración trabajo de parto (horas) la progresión de la dilatación cervical y del descenso de
la presentación. Si no existe una progresión favorable de
FIGURA 17-7. Diagrama original de E. Friedman, curva acuerdo a los valores de las curvas de Friedman, se estima
de trabajo de parto normal. como una prueba de parto fracasada y se procede a la
operación cesárea (FIGURA 17-9).

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Capítulo 17 El parto

Segunda etapa
Fase latente Fase activa -

1 -

O 5 10
Tiempo (horas)

FIGURA 17-8. Representación esquemática de la curva de parto normal. La relación existente entre los cambios cervica-
les, el descenso de la presentación y la duración del trabajo de parto. (Cohén WR. Labor and delivery. Assessment and
care of the fetus. East Norwalk, CT: Applelon & Lange, 1990).

10 -5
9 -4
8 -3
7 -2
o
6 -1 •O
5
4 +1 §
0^

3 +2 Jl
2 +3
1 +4

10 15
Tiempo (horas)

FIGURA 17-9. Anormalidades de las curvas de parto. La línea continua superior representa falla en el mecanismo de
descenso de la presentación; la línea inferior representa una fase latente prolongada. La línea discontinua representa la
progresión normal del trabajo de parlo.

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