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MYERS.

“EMOCIÓN”

Las EMOCIONES son respuestas psicológicas del organismo entero.


Están conformadas por tres componentes: hay una interacción de estos componentes.
- Excitación fisiológica
- Reacciones expresivas (expresión exterior)
- Sentimientos y pensamientos conscientes (experiencia consciente)

1) FISIOLOGÍA DE LA EMOCIÓN:
Cuando estamos emocionalmente excitados, nuestro cuerpo está físicamente excitado.
Algunas respuestas corporales quedan tan a la vista que las percibimos con toda facilidad.
Se refiere a la excitación. El corazón empieza a galopar, la boca se seca, los músculos se tensan y se le hace
un nudo en el estómago.
A la vez, el cuerpo se moviliza también preparándose para la acción: para suministrar energía el hígado
libera una cantidad extra de azúcar en el torrente sanguíneo, para ayudar a quemarlo, se incrementa el
ritmo respiratorio para brindar el suplemento de oxígeno necesario. La digestión aminora, de modo que
cierta cantidad de sangre abandona los órganos internos para afluir a los músculos. Se dilatan las pupilas,
entra más luz a los ojos y aumenta la agudeza visual. Transpira más. En caso de resultar herido, su sangre
coagularía más rápido.

Sin esfuerzo conciente, la “respuesta”de su cuerpo al desafío que se presentaba ha sido coordinada y
adaptada a las circunstancias, o sea, ha preparado al cuerpo para la pelea o la huida.

El sistema nervioso simpático es el encargado de activar estas respuestas corporales.  Sus centros
neurales despiertan el cuerpo. Este sistema le ordena a las glándulas suprarrenales, localizadas sobre los
riñones, que liberen epinefrina (adrenalina) y norepinefrina (noradrenalina): hormonas que incrementan el
ritmo cardíaco, la presión arterial y el nivel de azúcar en sangre.

Una vez que pasó la emergencia, los centros neurales parasimpáticos producen los efectos contrarios, con
los que el cuerpo se calma. Aún cuando el sistema nervioso parasimpático haya inhibido toda liberación
hormonal, aquellas hormonas que ya se encuentran en el torrente sanguíneo no se anulan de inmediato,
la excitación perdura por unos instantes.

En muchas situaciones la excitación sabe adaptarse.


Una excitación prolongada, desencadenada por una tensión sostenida, le exige demasiado al cuerpo.
El estar muy poco excitado (ejemplo tener sueño) puede perturbar el rendimiento, pero el estar
sumamente exaltado puede redundar también en el fracaso.
(Según la ley de Yerkes-Dodson): nuestro desempeño en una tarea suele ser mejor cuando la excitación es
moderada, aunque esto varía con la dificultad de la tarea.

Los estados fisiológicos que acompañan a las emociones específicas:


La excitación física que acompaña a determinada emoción puede parecerse mucho a la que acompaña a
otra emoción.

Se sienten de modo distinto el temor, la ira, la tristeza. Desde el punto de vista cognoscitivo difieren.
Quien esté aterrorizado se sentirá con el pecho oprimido y contraído y con un nudo en la boca del
estómago. El iracundo se pondrá “rojo como un tomate” y experimentará una tensión interna. El
entristecido padecerá una especie de ahogo y se sentiría como vacío.
Es más, el aterrorizado, el colérico y el triste suelen tener aspectos distintos: blanco de miedo, a punto de
explotar o con toda la depresión encima.

Cada emoción tiene toda la traza de ser acompañada por diferentes pautas de actividad cerebral.
Distintas regiones del encéfalo toman a su cargo distintas emociones.
El miedo y la rabia han sido tmb vinculados con diferentes secreciones hormonales y con sutiles cambios
en la temperatura de los dedos.

En resumen, emociones tan distintas como el miedo y la rabia comprenden una excitación general de tipo
similar, por obra del sistema nervioso simpático. Pero, lo que va del mido a la rabia que uno siente, tiene
todo el aspecto de ser orquestado por la actividad de varias regiones encefálicas y varias hormonas.

2) EXPRESIÓN DE LA EMOCIÓN:
Podemos descifrar emociones del prójimo, “leemos”su cuerpo, escuchamos su voz y lo miramos a la cara.

Comunicación no verbal todos nos comunicamos, no sólo verbalmente, sino también de manera no
verbal. Si estamos irritados por ejemplo, nuestro cuerpo se tensa, apretamos los labios y hacemos gestos
con las cejas.
Mediante el silencioso lenguaje de la expresión no verbal, el cuerpo comunica sus emociones. A veces el
mensaje es directo y fácil de notar e interpretar, especialmente si es transmitido por el rostro. A veces el
mensaje es engañoso y otras veces ambiguo.
Una emoción puede ser expresada gracias a muchas posturas y gesticulaciones distintas y una postura
dada puede expresar emociones diversas.

A las personas les cuesta mucho anular la relación entre la emoción que experimenta y los gestos sutiles.
Ciertos músculos faciales son tan difíciles de controlar, mediante la voluntad, que pueden delatar la
emoción que la persona está tratando de disimular.

Efectos de la expresión facial no sólo las expresiones comunican emoción: la amplían.


La expresión libre de una emoción mediante señales exteriores, la intensifica. Quien se abandona a gestos
violentos incrementará la rabia que siente.

El manipular el movimiento es una moción que despierta emociónes decir que si una persona pone
expresión enfurruñada por un lapso de tiempo, los sujetos se sentían algo enfadados. Aquellos sujetos que
fueron inducidos a sonreír se sintieron más felices.

Esto ocurre porque nuestra cara feliz o triste le envía señales a nuestro sistema nervioso autónomo.
Ciertos gestos pueden afectar nuestras emociones. Las diversas emociones están vinculadas con estados
corporales diferentes.

Cuando se le pedía a sujetos que hicieran una serie de gestos y sostuvieran la expresión unos 10 segundos,
se analizó que cambios producidos en el ritmo cardíaco y en la temperatura de los dedos mientras ellos
iban cambiando de expresión.
Con expresión de miedo: el ritmo cardíaco aumentaba pero la temperatura no cambiaba.
Expresión de enojo: subían a la par el ritmo cardíaco y la temperatura de la piel.
Expresión de disgusto: provocó pocos cambios en el ritmo cardíaco.
3) EXPERIMENTANDO EMOCIONES:
Miedo, ira y felicidad. ¿Qué funciones atienden esas emociones y en qué influye la experiencia que de ellas
tenemos?
Las emociones no solo meramente un asunto de excitación física o gestual, también están influidas por
nuestras interpretaciones del acontecimiento que suscita la emoción.
Nuestras emociones se arman a partir de nuestro estado fisiológico, nuestros actos expresivos y nuestras
experiencias conscientes. (Los 3 componentes).

MIEDO:
El miedo es a veces como un veneno. Nos atormenta, nos quita el sueño, restringe y distrae nuestro
pensamiento. Se puede asustar a alguien de muerte. Este tipo de miedo irracional puede contagiarse.

Pero la mayoría de las veces el miedo constituye una respuesta adaptativa. El miedo prepara nuestro
cuerpo para escapar del peligro.

Se puede tener miedo a cualquier cosa. Podemos aprender a temer de casi todo.
Podemos estar biológicamente preparados para aprender ciertas cosas más rápidos que otras. Los
humanos aprendemos pronta y fácilmente a temer a las serpientes, arañas y los barrancos. Pero tenemos
poca predisposición a temer a los coches, a la electricidad (cosas que en nuestra sociedad moderna son
mucho más peligrosas).

El temor que experimentan ciertas personas ante algo que, específicamente, siempre despierta miedo,
puede ser mayor que el de otras personas.
En algunas personas, el miedo a ciertos objetos o a determinadas situaciones cobra tal intensidad que
anula toda posibilidad que pueda quedarle a esa persona de hacerse cargo del momento. Ej: fobias.
En general, ciertas personas parecen ser más temerosas, más asustadas ante la idea de situaciones
terroríficas o molestas que otras. Algunos suelen no ser tan temerosos como la mayoría.

IRA:
¿Cómo la gente tendría que manejar la ira? Al darle “combustible”físico y verbal a ciertos actos la ira no es
de buena adaptación.
A menudo ocurría que su cólera los inducía a discutir el asunto con el ofensor, y así lograban aliviar la
situación que sino se hubiese agravado. Tales expresiones de cólera daban la sensación de ser mejor
“adaptadas”que el estallido hostil por sí mismo o que limitarse a guardarse el sentimiento iracundo.
Hasta el estallido hostil es mejor que tragarse la ira e ir acumulándola. Es la ira oculta la que hiere.

Liberación emocional o catarsis se da al expresar la emoción.


Expresar nuestra cólera nos puede calmar temporariamente, toda vez que el hacerlo no nos deje
sintiéndonos culpables o angustiados.

Puede haber ocasiones en los que expresar cólera puede crear más cólera. Puede desencadenar venganza
y convertir un disgusto menor en un conflicto de proporciones. Por otra parte los ademanes violentos
pueden incrementar la ira. El enojo puede verse incrementado por obra de las palabras enfadosas.

Es decir, que a veces expresar ira puede calmar por un tiempo o puede aumentar la hostilidad.
Cuando las expresiones agresivas de enojo nos calman, pueden terminar formando hábito la próxima
vez que tenga cólera es casi seguro que volverá a hacer lo que en la oportunidad pasada contribuyó a
calmarlo.

¿Cuál es entonces el buen modo de manejar la ira?


Si quiere aflojar la agitación iracunda, primero espere. Porque todo sucede en el cuerpo, todo lo que va
para arriba tiene que volver a bajar. Toda excitación emocional bajará si se espera lo suficiente.

Segundo, trate la ira de un modo tal que no se vuelva el sujeto crónicamente enojado por cualquier
molestia y de modo que tampoco quede enojado.

La ira puede beneficiar las relaciones cuando le motivo de enojo es expresado de manera tal que
promueve la reconciliación antes que la represalia. Comunicación clara y fundamentada acerca de las
irritaciones importantes. Dar a conocer lo que uno siente puede contribuir a resolver los conflictos que
desencadenan el enojo.

FELICIDAD:
-La gente que se siente feliz ve el mundo como menos peligroso, toma decisiones más fácilmente y dice
estar satisfecha con su vida entera.
-Cuanto más felices nos sentimos mayores son las ganas que tenemos de ayudar al prójimo.
-Quienes están de buen humor en un día determinado no habían tenido ningún “mal rato”durante ese día.
-A su vez, hasta cuando se vive una tragedia, en general, no deprime el humor de modo permanente. Por
ejemplo: quienes se quedaron ciegos o paralíticos suelen recobrar niveles casi normales de felicidad diaria.
-También es temporario el efecto de acontecimientos positivos por demás.

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