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Nicaragua

Registro CA: NIC-012739

Instancia: Corte Suprema de Justicia. Sala de lo Civil

Número de expediente: PC-2020-0002-0295-A

Fecha de resolución: 13/10/2020

Materia: Común

Voces: CANCELACIÓN DE ASIENTO REGISTRAL


FALSEDAD DE INSTRUMENTO PÚBLICO
NULIDAD

Interpuesto Por Contra

Número de Expediente: 000049-ORS2-2019 CO

AUTO RESOLUTIVO No. 295

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA. SALA DE LO CIVIL. Managua, trece de octubre


del dos mil veinte. Las ocho y veintinueve minutos de la mañana.

ANTECEDENTES DE HECHO:
1.- Mediante escrito presentado a las once y veinticinco minutos de la mañana,
del día diecinueve de octubre del año dos mil dieciocho, ante la Oficina de
Recepción y Distribución de Causas y Escritos (ORDICE) del Complejo Judicial de
Somoto, el abogado Ronald José Acevedo Castellón, en su calidad de abogado y
defensor público de la señora ERLINDA SALVADORA MATUTE GONZÁLEZ, quien
es mayor de edad, casada, maestra, con domicilio en Palacagüina municipio del
departamento de Madriz, identificada con cédula número 324-091160-0000A,
demandando en la vía ordinaria con pretensión de falsedad de instrumento
público, acumulada de forma subsidiaria pretensión de nulidad de instrumento
público y cancelación de asiento registral, a la señora ROSA AMPARO
FERNÁNDEZ RUBIO, quien es mayor de edad, casada, ama de casa, con domicilio
en Palacagüina municipio del departamento de Madriz, identificada con cédula
número 481-200571-0002H. 2.- El proceso, fue incoado ante el Juzgado de
Distrito Civil Oral de Somoto Circunscripción Las Segovias, y se le dio la

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tramitación establecida por la ley de conformidad con el régimen procedimental
contenido en el Código Procesal Civil de la República Nicaragua (CPCN) vigente
al momento de interponerse la demanda. Mediante auto de las once y
veinticuatro minutos de la mañana del día treinta y uno de octubre del año dos mil
dieciocho, se le dio intervención de ley al abogado Ronald José Acevedo
Castellón, se admitió la demanda interpuesta y se emplazó a la parte demandada
para que contestará la misma en el plazo de treinta días, todo de conformidad
con el artículo 426 CPCN. Mediante escrito de las diez y cincuenta y dos minutos
de la tarde, del día dieciocho de enero del año dos mil diecinueve, la señora ROSA
AMPARO FERNÁNDEZ RUBIO, a través de su apoderado general judicial el
abogado Gary Antonio Bayres Urbina, contestó de forma negativa demanda
interpuesta en su contra, opone además las excepciones de ilegitimidad de
personería activa y cosa juzgada, proponiendo a su vez medios de prueba. 3.-
Mediante auto de las doce y cuarenta y dos minutos de la tarde del veintiocho de
enero del año dos mil diecinueve, se le dio intervención de ley al abogado Gary
Antonio Bayres Urbina, en su calidad de apoderado general judicial de la señora
ROSA AMPARO FERNÁNDEZ RUBIO, se tuvo por contestada la demanda, y se
convocó a las partes a audiencia inicial a las nueve de la mañana del día seis de
febrero del año dos mil diecinueve, audiencia en la cual las partes manifestaron
su interés de resolver la controversia por métodos de resolución de conflictos,
por lo cual se les remitió a las oficinas de la DIRAC ubicadas en el Complejo
Judicial de Somoto. Por auto de las once y treinta y cuatro minutos de la mañana
del trece de marzo del año dos mil diecinueve, por no haber llegado las partes a
ningún arreglo, se convocó nuevamente a audiencia inicial, para el día veinte de
marzo del año dos mil diecinueve, a las ocho de la mañana. Audiencia en la cual,
el Juzgado de Distrito Civil Oral de Somoto de la Circunscripción Las Segovias,
dictó auto definitivo a las nueve y diez minutos de la mañana, del día veinte de
marzo del año dos mil veinte, mediante el cual se declara con lugar las
excepciones de defectos de capacidad, representación o postulación promovidas
por la parte demandada, se declara si lugar la excepción de cosa juzgada, se deja
a salvo el derecho a apelar y de intentar nuevamente la acción que en derecho
corresponde y se remiten las diligencias a la oficina de archivo central para su
debido resguardo. 4.- Inconforme con el auto definitivo anterior, la parte actora
señora ERLINDA SALVADORA MATUTE GONZÁLEZ, a través del abogado y
defensor público Ronald José Acevedo Castellón, mediante escrito de las doce y
cincuenta y siete minutos de la tarde del veinticinco de marzo del año dos mil
diecinueve, presentó Recurso de Apelación. Recurso al que se le dio el trámite
procedimental contenido en el Código Procesal Civil de la Republica de
Nicaragua, por lo que el Juzgado de Distrito Civil Oral de Somoto de la
Circunscripción Las Segovias, lo admitió mediante auto de las diez y cincuenta y
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cinco minutos de la mañana del veintisiete de marzo del año dos mil diecinueve.
La Sala Civil del Tribunal de Apelaciones de la Circunscripción Las Segovias, le
dio al recurso el trámite establecido por la ley, hasta culminar con resolución de
las diez y veinte minutos de la mañana del seis de junio del año dos mil
diecinueve, por la cual se falla (se cita parte conducente): “I- Ha lugar
parcialmente a la apelación intentada por la señora ERLINDA SALVADORA
MATUTE GONZÁLEZ, contra el auto resolutorio dictado por el juez de distrito para
lo Civil de Somoto, Madriz, a las nueve y diez minutos de la mañana del veinte de
marzo del año dos mil diecinueve. II.- Revóquese la parte resolutiva (Fallo),
numeral 1), y en su lugar se dicta: No ha lugar a la excepción de defectos de
capacidad, representación o postulación que ha promovido el Dr. Gary Antonio
Urbina, en su calidad de apoderado de la señora ROSA AMPARO FERNÁNDEZ
RUBIO, motivo por el cual continúese con el juicio hasta concluir con sentencia, si
las partes tienen interés de impulsarlo. III.- Se confirma la parte resolutiva (Fallo)
número 2) de la sentencia recurrida, en el sentido que No ha lugar a la excepción
de cosa juzgada promovido por el abogado BAYRES URBINA, en su calidad de
apoderado general judicial de la señora ROSA AMPARO FERNÁNDEZ RUBIO,
tomando en cuenta que estamos en presencia de juicios civiles de diferente
naturaleza……”. 5.- A las diez y veinticinco minutos de la mañana del dos de julio
del año dos mil diecinueve, el abogado Gary Antonio Bayres Urbina, en su calidad
de apoderado general judicial de la señora ROSA AMPARO FERNÁNDEZ RUBIO,
presentó escrito interponiendo Recurso de Casación contra la resolución de las
diez y veinte minutos de la mañana del seis de junio del año dos mil diecinueve,
dictada por la Sala Civil del Tribunal de Apelaciones de la Circunscripción Las
Segovias. La Sala en referencia, mediante auto de las nueve y diez minutos de la
mañana del cuatro de julio del año dos mil diecinueve, admitió a trámite el
Recurso de Casación interpuesto. La parte recurrida señora ERLINDA
SALVADORA MATUTE GONZÁLEZ, a través del abogado y defensor público
Ronald José Acevedo Castellón, en fecha veinticuatro de julio del año dos mil
diecinueve, a las ocho y cinco minutos de la mañana presentó escrito de
contestación de agravios. 6.- Mediante resolución dictada a las diez y treinta
minutos de la mañana del veinticuatro de julio del año dos mil diecinueve, la Sala
Civil del Tribunal de Apelaciones de la Circunscripción Las Segovias remite las
diligencias y le concede a las partes el plazo de cinco días, para que se personen
ante la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia a hacer uso de sus derecho. Por
escrito de las ocho y treinta y seis minutos de la mañana del treinta y uno de julio
del año dos mil diecinueve, por el abogado Gary Antonio Bayres Urbina, en su
calidad de apoderado general judicial de la señora ROSA AMPARO FERNÁNDEZ
RUBIO, se personó ante esta Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia. Subiendo
los autos con fecha diecinueve de agosto del año dos mil diecinueve. Al respecto,
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estando el caso de resolver.

FUNDAMENTOS DE DERECHO:
1.- Rola en los folios del 19 al 21 del Cuaderno de Segunda Instancia, el escrito
presentado a las diez y veinticinco minutos de la mañana del dos de julio del año
dos mil diecinueve por el abogado Gary Antonio Bayres Urbina, en su calidad de
apoderado general judicial de la señora ROSA AMPARO FERNÁNDEZ RUBIO. En
primer orden, esta Sala logra observar que de forma expresa en el caso de autos
el abogado Bayres Urbina, no interpuso Recurso de Casación, pues en el primer
párrafo del escrito relacionado se limitó a manifestar: “Con instrucciones
expresas de mi poderdante señora ROSA AMPARO FERNÁNDEZ RUBIO, de
generales en el proceso por no estar de acuerdo con la sentencia N° 18, dictada
por el Tribunal de Apelaciones Circunscripción Las Segovias, el seis de junio del
año dos mil diecinueve, a las diez y veinte minutos de la mañana”. No obstante lo
anterior, esta Sala procede analizar el recurso. 2.- En segundo orden, esta Sala
Civil del Supremo Tribunal considera necesario expresar que para la procedencia
de los recursos, el recurrente debe cumplir tanto con presupuestos de
procedencia, como con requisitos de admisibilidad, todos señalados
expresamente en la norma. En este sentido, uno de los presupuestos de
procedencia es la recurribilidad de la resolución, al respecto el doctor Juan
Montero Aroca, en su texto “Tratado de los Recursos en el Proceso Civil” señala:
“La admisión del recurso sólo es posible si la resolución recurrida por la parte es
susceptible de impugnación y precisamente por el recurso que la parte
interpone” (2014: 55). En lo que respecta al recurso de casación, este
presupuesto de recurribilidad en nuestro sistema procesal civil, se encuentra
regulado en el artículo 563 CPCN que reza: “Solo serán recurribles en casación
los autos que pongan término al proceso y hagan imposible su continuación, y las
sentencias dictadas en segunda instancia en los siguientes casos: 1) Conforme
la cuantía fijada por la Corte Suprema de Justicia; 2) Cuando la cuantía fuera
inestimable; y 3) Cuando la resolución del recurso presente interés casacional
independientemente de la cuantía”. Limitando de esta forma el Recurso de
Casación a este tipo de resoluciones: sentencias y autos definitivos. 3.- Partiendo
de lo anterior, es preciso expresar que nuestro sistema procesal civil es claro en
la clasificación de las resoluciones judiciales, así, adquiere el carácter de
sentencia, “la resolución que ponga fin al proceso, en primera o segunda
instancia, una vez que haya concluido su tramitación ordinaria prevista en este
Código. También se resolverán mediante sentencia, la renuncia, la aprobación
judicial de transacciones y convenios, los recursos extraordinarios y otros medios
de impugnación” (artículo 191.4 CPCN). En esta misma línea, José Rifá Soler
citados por el doctor William Tórrez en su texto “Derecho Procesal Civil
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(Conforme al Nuevo Código Procesal Civil)” las define como “el modo normal y
ordinario de finalización del proceso. Esta se constituye en la resolución judicial
que resuelve de forma definitiva estimando o desestimando, ya sea total o en
parte, la pretensión ejercita por el demandante y resolviendo todos los puntos
litigiosos que hubieren sido objeto de debate” (2015: 361). Al respecto, esta Sala
Civil del Supremo Tribunal considera que la resolución de las diez y veinte
minutos de la mañana del seis de junio del año dos mil diecinueve, si bien fue
dictada por la Sala Civil del Tribunal de Apelaciones de la Circunscripción Las
Segovias, no se podría considerar una sentencia, puesto que cabe recordar que
en el caso de autos el proceso incoado entre la señora ERLINDA SALVADORA
MATUTE GONZÁLEZ, de generales expresada en la vía ordinaria con pretensión
de falsedad de instrumento público, acumulada de forma subsidiaria pretensión
de nulidad de instrumento público y cancelación de asiento registral, en contra de
la señora ROSA AMPARO FERNÁNDEZ RUBIO, no ha culminado con su
tramitación ordinaria, en tanto que en Primera Instancia se ha llegado apenas
hasta la audiencia inicial (ver folio 95 y 96 del Cuaderno de Primera Instancia), es
decir no se ha practicado prueba alguna que permita estimar o desestimar las
pretensiones de las partes, ni en Primera Instancia, mucho menos a la Sala Civil
del Tribunal de Apelaciones de la Circunscripción Las Segovias. 4.- Ahora bien,
cabe analizar si la resolución recurrida por el abogado Gary Antonio Bayres
Urbina, en su calidad de apoderado general judicial de la señora ROSA AMPARO
FERNÁNDEZ RUBIO, es un auto a través del cual se está poniendo término al
proceso, es decir de tipo definitivo. Sobre este punto, el CPCN en su artículo
191.3 dispone de forma clara: “También revestirán la forma de auto, las
resoluciones que pongan fin a las actuaciones de una instancia o recurso, antes
que concluya su tramitación ordinaria”, cabe también citar el artículo 192 CPCN
conforme al cual “Son resoluciones definitivas las que ponen fin a la primera y a
la segunda instancia”. Al respecto de los autos de tipo definitivo, el doctrinario
Luis Alfredo de Diego de Diez en el texto “La Apelación en el Código Procesal Civil
Hondureño” expresa: “Son los que truncan el proceso antes de que concluya su
tramitación ordinaria. Tanto da que dejen imprejuzgada la cuestión de fondo del
litigio (autos de contenido procesal), como que den por terminado el proceso y
solucionado el conflicto extinguida la controversia entre las partes, aunque se
deba a una causa ajena al juzgador (autos de contenido sustantivo)” (2012: 145).
Partiendo de las anteriores, definiciones esta Sala Civil del Supremo Tribunal es
del criterio, que la resolución de las diez y veinte minutos de la mañana del seis
de junio del año dos mil diecinueve, dictada por la Sala Civil del Tribunal de
Apelaciones de la Circunscripción Las Segovias, no es un auto definitivo, en tanto
que lejos de dar por terminado el proceso de forma extraordinaria, ordena en el
punto II del fallo “continuar con el juicio hasta concluir con sentencia, si las partes
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tienen interés de impulsarlo” (ver folios del 9-12 del Cuaderno de Segunda
Instancia). 5.- Del análisis realizado, esta Sala Civil del Supremo Tribunal concluye
que la resolución de las diez y veinte minutos de la mañana del seis de junio del
año dos mil diecinueve, dictada por la Sala Civil del Tribunal de Apelaciones de la
Circunscripción Las Segovias, al ordenar la continuación del proceso es un auto
no definitivo, todo de conformidad con el artículo 191.3 CPCN, que dispone:
“Adoptará la forma de auto, toda resolución motivada y fundada que decida sobre
recursos contra providencias, sobre admisión o inadmisión de demanda, de
reconvención y de acumulación de pretensiones y procesos, sobre presupuestos
procesales, admisión o inadmisión de la prueba, medidas cautelares, nulidad o
validez de las actuaciones y cualesquiera cuestiones incidentales, tengan o no
señalada en este Código tramitación especial”. En este sentido, al no ser la
resolución impugnada ni sentencia, ni auto definitivo, se encuentra marginada
totalmente del Recurso de Casación, conforme el ya citado artículo 563 CPCN,
por lo que en el caso que nos ocupa el Recurso de Casación interpuesto por el
abogado Gary Antonio Bayres Urbina, en su calidad de apoderado general judicial
de la señora ROSA AMPARO FERNÁNDEZ RUBIO, incumple con uno de los
presupuesto de procedencia como lo es el de recurribilidad de la resolución. Por
lo anterior, esta Sala Civil del Supremo Tribunal se encuentra totalmente vedada
para entrar a analizar el fundamento del Recurso de Casación en mención.

DECISIÓN:
De conformidad con lo antes expuesto, artículos 143 inciso 2º) LOPJ; artículo 41
inciso 2º LCJ; y artículos 191,195, 197, 206, 563, 568 y 572 del Código Procesal
Civil de la República de Nicaragua. Los suscritos magistrados y magistradas de la
Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia, administrando justicia en nombre de la
República de Nicaragua, FALLAN: 1.- De oficio se declara inadmisible el Recurso
de Casación interpuesto por el abogado Gary Antonio Bayres Urbina, en su
calidad de apoderado general judicial de la señora ROSA AMPARO FERNÁNDEZ
RUBIO contra la sentencia dictada de las diez y veinte minutos de la mañana del
seis de junio del año dos mil diecinueve, dictado por la Sala Civil del Tribunal de
Apelaciones, Circunscripción Las Segovias. 2.- Se confirma en todas sus
extensiones el auto no definitivo de las diez y veinte minutos de la mañana, del
seis de junio del año dos mil diecinueve, dictado por la Sala Civil del Tribunal de
Apelaciones de la Circunscripción Las Segovias. 3.- Las costas respectivas son a
cargo de la parte recurrente, todo de conformidad con lo dispuesto en los
artículos 198 y 572 CPCN. 4.- Se les hace saber a las parte que contra este auto
no cabe recurso alguno. 4.- Cópiese, notifíquese y publíquese. Con testimonio
concertado de la presente resolución, vuelvan los autos a su lugar de origen. Este
auto está escrito en cuatro hojas de papel común. Firmadas, selladas y
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rubricadas por la secretaría de la Sala de lo Civil de este Supremo Tribunal. I.P.L.,
Y.CENTENO G., G. ARCE C., A. CUADRA L., ANTE MÍ: ANGELA SOTO SILVA., Sria.

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