Importancia de la planeación educativa ante los nuevos desafíos

tecnológicos, la presencialidad y la distancia

Francisco Amilcar Lobo Hernández

Autor

Licda. Rosa Matilde Rivera de Martinez

Tutora

Sede San Salvador

Universidad de El Salvador

Facultad de Ciencias Naturales y Matemática

Ciudad Universitaria, San Salvador

16 de diciembre del 2022

 Importancia de la planeación educativa ante los nuevos desafíos
tecnológicos, la presencialidad y la distancia

El presente ensayo tiene como finalidad abordar teóricamente los elementos del
planeamiento didáctico en la educación presencial y a distancia. Pretendiendo conocer
aspectos a considerar en nuestra labor docente como formadores, de cara a las nuevas
exigencias educativas. Y dado que es un abordaje teórico, con brochazos de mi naciente
experiencia en el ámbito educativo lo abordó en tercera persona, dirigido a docentes que de
alguna manera se han adentrado a las nuevas formas de planeación didáctica, con la
incorporación de la educación a distancia en un ambiente virtual, con el uso de las
Tecnologías de la Información(TIC’s).

La planeación didáctica es el proceso que todos los formadores debemos desarrollar y

revisar diariamente, para valorar y evidenciar la promoción de la enseñanza y el aprendizaje,
sin importar la modalidad educativa, sea ésta presencial o a distancia. Para realizar la
planeación didáctica como docentes debemos manejar los conceptos de currículo, política
educativa, plan y programa de estudios. Cumpliendo por supuesto, con el modelo educativo
vigente, se abordan ahora nuevos conceptos para la docencia en la modalidad a distancia:
coordinador de cátedra, tutor, entre otros, son algunos ejemplos, por lo que, de acuerdo a su
función, tendrá mayor o menor injerencia en la planeación didáctica.

El planeamiento didáctico, según Volio, “se refiere a todo lo correspondiente a cada

materia o área en un espacio y lugar determinado” (Mello Carvalho 1975). Con el
planeamiento el educador es capaz de organizar las actividades a realizar en el aula, que le
faciliten su labor y que a su vez le permitan incorporar todos aquellos elementos que hacen
posible los procesos de enseñanza y aprendizaje de los estudiantes.

Por lo que, en cuanto a la planeación, como docentes podemos controlar situaciones

que favorezcan el aprendizaje de los estudiantes, atendiendo las diferencias individuales en el
aula y buscar la coherencia con las características y necesidades que presenta cada etapa del
desarrollo educativo. Sea que haya tenido una participación activa en la planeación o no, el
docente debe involucrarse y dar seguimiento a las etapas de diseño, ejecución y evaluación,

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que darán cuenta del desarrollo de conocimientos, habilidades, actitudes y aptitudes en el
estudiante, en función de los propósitos de aprendizaje establecidos.

Entre los más importantes componentes curriculares del planeamiento didáctico que
podemos enlistar están: objetivos generales, objetivos específicos, contenidos, actividades de
mediación, valores y actitudes, y criterios de evaluación. Cada uno de estos componentes
aseguran la labor docente en el aula, asegurando el alcance de los objetivos educativos
inmersos en una política educativa.

En consecuencia, para que logremos engranar estas modalidades, presencial y a

distancia, la planeación debe lograr objetivos que le permitan concretar los propósitos y
logros específicos del sistema educativo, expresar con claridad, lenguaje comprensible y
apropiado. Encaminarse a lograr actividades de mediación con estrategias y procedimientos
que faciliten el logro de los objetivos propuestos, teniendo secuencia lógica, incluir técnicas
activas y creativas que estimulen la expresión imaginativa y crítica del estudiante,
permitiendo que este pueda procesar la información, utilizarla, aprender de ella y resolver
problemas de su entorno.

Validando lo anterior con valores y actitudes de acuerdo con los lineamientos del
sistema educativo actual, contribuyendo al desarrollo socio afectivo y ético del estudiante.
mediante una educación integral donde se evidencien todos los ejes transversales. Generando
así aprendizajes significativos, los cuales se puedan evaluar mediante juicios de valor
acertados y en correspondencia con los objetivos propuestos.

En educación a distancia, podría pensarse que la planeación didáctica se realiza una

sola vez, y de ahí en adelante el programa opera de forma simple, repetitiva y automática; sin
embargo, en esta modalidad, ayudada en definitiva por los avances tecnológicos y sobre todo
por las TIC’s, el docente debe estar atento a las interacciones que se generan entre los
participantes en un ambiente cambiante y acelerado crecimiento de tecnologías, lo que
implica integrar propuestas para actualizar contenidos, así como las estrategias y recursos
diseñados.

Vivimos una nueva etapa en cuanto a la educación, la humanidad y la

multiculturalidad exige cambios, hay nuevos desafíos, la recién pandemia por COVID-19 ha
acelerado la adaptación tecnológica. Al menos en El Salvador, se camina en ese sentido, se
están dando pasos acelerados para llevar acceso tecnológico a todo lo ancho y largo del país,

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otro ejemplo visible es el hecho de que para el año 2023 la Universidad de El Salvador se
plantea un escenario dependiente en un alto porcentaje de las TIC, ya que será sede de los
juegos interfacultades de universidades latinoamericanas.

En los espacios virtuales de enseñanza y aprendizaje, la mediación adquiere una

particular importancia en virtud de que la relación entre el docente, el sujeto que conoce y el
contenido disciplinar está mediada por las tecnologías. En tal sentido, se asume un enfoque
de la didáctica que considera la intervención docente como mediadora entre el sujeto que
construye y el objeto de conocimiento.

En seguimiento con lo anterior, la planificación didáctica supone organizar la acción

mediadora no como un conjunto de acciones imprevisibles y desconectadas entre sí, sino
como la puesta en práctica de un plan bien pensado y articulado. En el que debe darse mucha
importancia al recurso didáctico y material que facilitará el aprendizaje.

Por tanto, como futuros formadores debemos empaparnos de información orientada a

generar adaptación didáctica, combinándola con nuestra experiencia, incorporando elementos
que aseguren el logro de los objetivos de la educación, sin barrera de modalidad, pues el reto
es evitar la improvisación, y mantenernos preparados para cualquier escenario.

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Lista de Referencia o Bibliografía

Mello Carvalho, I. (1974). EL Proceso didáctico. Buenos Aires, Argentina: Editorial

Kapeluz S.A.

Molina Bogantes, Z (2000). Planeamiento didáctico: fundamentos, principios y

procedimientos para el desarrollo, San José, Costa Rica: EUNED.

Adorno, T.W(1994). “El ensayo como forma”. En Notas de literatura. Barcelona: Seix
Barral.