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Entamoeba histolytica

Ciclo biológico

Murray, Rosenthal & Pfaller (2017). Ciclo biológico de Entamoeba histolytica.


[Ilustración]. Microbiología Médica. Campeche, México.

Después de ser ingeridos, los quistes pasan a través del estómago, donde la
exposición al ácido gástrico estimula la liberación del trofozoíto patógeno en el
duodeno. Los trofozoítos permanecen en la luz del colon, donde se dividen y
provocan una extensa necrosis local en el intestino grueso. Finalmente son
expulsados, algunos en estadio de quiste, a través de las heces fecales (Murray,
Rosenthal & Pfaller, 2017).
Giardia lamblia
Ciclo biológico

Murray, Rosenthal & Pfaller (2017). Ciclo biológico de Giardia lamblia. [Ilustración].
Microbiología Médica. Campeche, México.

El ácido del estómago estimula la rotura del quiste, con la liberación de trofozoítos
en el duodeno y el yeyuno, donde los microorganismos se multiplican por fisión
binaria. Los trofozoítos pueden unirse a las vellosidades intestinales mediante una
prominente ventosa ventral en forma de disco. Finalmente son expulsados,
algunos en estadio de quiste, a través de las heces fecales (Murray, Rosenthal &
Pfaller, 2017).
Trichomonas vaginalis
Ciclo biológico

Murray, Rosenthal & Pfaller (2017). Ciclo biológico de Trichomonas vaginalis.


[Ilustración]. Microbiología Médica. Campeche, México

Se transmiten teniendo mala higiene genital o manteniendo relaciones sexuales,


una vez dentro de la cavidad vaginal, los trofozoítos se multiplican mediante fisión
binaria y se alimentan del hospedero. Son expulsados a través de la orina y
secreciones vaginales/prostáticas, muriendo al contacto con el aire exterior.
(Murray, Rosenthal & Pfaller, 2017).
Balantidium coli
Ciclo biológico

Murray, Rosenthal & Pfaller (2017). Ciclo biológico de Balantidium coli.


[Ilustración]. Microbiología Médica. Campeche, México.

Consiste en la ingesta y rotura de los quistes infecciosos, y la invasión en el


revestimiento mucoso del intestino grueso, el ciego y el íleon terminal por los
trofozoítos. Finalmente son expulsados, algunos en estadio de quiste, a través de
las heces fecales. (Murray, Rosenthal & Pfaller, 2017).
Cytoisospora belli
Ciclo biológico

Murray, Rosenthal & Pfaller (2017). Ciclo biológico de Cytoisospora spp.


[Ilustración]. Microbiología Médica. Campeche, México.

Una vez ingeridos los ooquistes, los esporozoítos son liberados en el intestino
mediante la acción conjunta de la temperatura corporal, acidez del estómago (pH
2.0), sales biliares y enzimas digestivas, donde infectan predominantemente la
porción de yeyuno e león. Los esporozoítos invaden los enterocitos donde se
alojan de forma intracelular, pero extracitoplasmática llamada epicelular, donde se
protegen por una vacuola parasitófora y se transforman en trofozoítos que
posteriormente mediante la reproducción asexual producen 2 diferentes tipos de
merontes. Los merozoítos son liberados de la vacuola parasitófora (merontes tipo
1) y entran a otras células del epitelio intestinal en donde se desarrollan los
merontes tipo Il. Los merozoítos liberados de los merontes tipo Il se replican de
forma sexuada para producir microgametos y macrogametos. Los microgametos
fertilizan a los macrogametos produciendo el cigoto, quien madura en ooquiste de
pared delgada o gruesa conteniendo 4 esporozoítos. Se piensa que los ooquistes
de pared delgada son los causantes de las autoinfecciones en el hospedero,
mientras que los ooquistes de pared gruesa son liberados en las heces para
infectar nuevos hospederos y de esta manera completar el ciclo de vida. (Molina,
2019).
Cryptosporidium spp
Ciclo biológico

Murray, Rosenthal & Pfaller (2017). Ciclo biológico de Cryptosporidium spp.


[Ilustración]. Microbiología Médica. Campeche, México.

Cuando el hospedero ingiere ooquistes esporulados (maduros), estos se


desenquistan en el intestino y liberan esporozoítos, que se adhieren e invaden
células epiteliales del intestino delgado, principalmente a nivel distal de duodeno y
región proximal de yeyuno. Los esporozoítos y subsiguientes fases del desarrollo
se ubican dentro del citoplasma celular, en una posición supranuclear, rodeados
por una vacuola parasitófora. Los esporozoítos se transforman en trofozoítos, los
cuales por división nuclear asexual por merogonia, forman los merontes que
contienen los merozoítos. Se originan dos tipos de merontes. El tipo |, que
contiene de 8 a 12 merozoítos, los cuales penetran a otras células epiteliales y
forman los merontes de tipo Il, que contienen cuatro merozoítos. Una vez
liberados, éstos penetran a otros enterocitos y se inicia la fase sexual mediante la
diferenciación en macrogametocito (gameto masculino) y macrogametocito
(gameto femenino). El primero forma numerosos microgametos flagelados, uno de
los cuales va a fecundar al macrogametocito. El macrogametocito fertilizado se
transforma en cigoto, desarrollando una pared gruesa y resistente, y se convierte
en un ooquiste que contiene al esporonte. Los ooquistes inmaduros, no
esporulados, salen con las heces al exterior, donde el esporonte, bajo condiciones
adecuadas, se divide en dos esporoquistes, cada uno de los cuales tiene cuatro
esporozoítos (Molina, 2019).

Cycloscopora cayetanensis.
Ciclo biológico

CDC (2019)). Ciclo biológico de Ciclospora spp. [Ilustración] Centros para el


Control y Prevención de Enfermedades. Atlanta, Georgia.

Los ooquistes no infectantes son eliminados en la materia fecal por lo que no


puede ocurrir la transmisión directa fecal- oral, debido a que para que se dé la
esporulación se requieren de 1-2 semanas a temperaturas de 22 C a 32” C, dando
como resultado un Ooquiste esporulado. Durante la esporulación su contenido o
esporonte se divide en dos esporoquistes, cada uno con dos esporozoitos
alargados característicos del género Cyclospora. La infección se inicia a la ingesta
de los Ooquistes esporulados por alimentos contaminados, a su vez en la
presencia de bilis, tripsina y diversos factores gastrointestinales, se liberan los
esporozoitos y comienza el ciclo de merogonia, con dos tipos de merontes (Tipo |
y II) generados al interior del enterocito, cada nuevo merozoito entra a una célula
epitelial y es diferenciada en macrogametocito masculino o femenino, mismas que
se unen posteriormente y forman un cigoto que madura en un Ooquiste de pared
gruesa, rompiendo la célula hospedadora y esta es excretada en la materia fecal,
terminando en este punto el ciclo de vida (Molina, 2019)
Entamoeba Coli
Ciclo biológico

CDC (2019)). Ciclo biológico de amebas intestinales. [Ilustración] Centros para el


Control y Prevención de Enfermedades. Atlanta, Georgia.

Cuando el hombre ingiere agua O alimentos contaminados con quistes del


parásito, algunos de los cuales al llegar al intestino delgado inician una serie de
transformaciones que los convierten en trofozoítos. Una vez en el intestino grueso,
los trofozoítos proliferan y algunos se vuelven a enquistar. Finalmente, al salir
junto con las heces los quistes están listos para reiniciar su ciclo biológico (Molina,
2019).
Endolimax nana
Ciclo biológico

CDC (2019)). Ciclo biológico de amebas intestinales. [Ilustración] Centros para el


Control y Prevención de Enfermedades. Atlanta, Georgia.

Cuando el hombre ingiere agua O alimentos contaminados con quistes del


parásito, algunos de los cuales al llegar al intestino delgado inician una serie de
transformaciones que los convierten en trofozoítos. Una vez en el intestino grueso,
los trofozoítos proliferan y algunos se vuelven a enquistar. Finalmente, al salir
junto con las heces los quistes están listos para reiniciar su ciclo biológico (Molina,
2019).
Iodamoeba bütschlii
Ciclo biológico

CDC (2019)). Ciclo biológico de amebas intestinales. [Ilustración] Centros para el


Control y Prevención de Enfermedades. Atlanta, Georgia.

Cuando el hombre ingiere agua O alimentos contaminados con quistes del


parásito, algunos de los cuales al llegar al intestino delgado inician una serie de
transformaciones que los convierten en trofozoítos. Una vez en el intestino grueso,
los trofozoítos proliferan y algunos se vuelven a enquistar. Finalmente, al salir
junto con las heces los quistes están listos para reiniciar su ciclo biológico (Molina,
2019).
Entamoeba gingivalis
Ciclo biológicos

CDC (2019)). Ciclo biológico de Entamoeba gingivalis. [Ilustración] Centros para el


Control y Prevención de Enfermedades. Atlanta, Georgia.

No se conoce ningún estadio de quiste para Entamoeba gingivalis; Los trofozoítos


viven en la cavidad bucal de los humanos y residen en las bolsas gingivales cerca
de la base de los dientes. No se consideran patógenos y se alimentan de bacterias
y otros desechos. Los trofozoítos se transmiten de persona a persona por vía oral
mediante besos o fómites (como utensilios para comer). La etapa de trofozoíto de
E. gingivalis es morfológicamente similar a la de E. histolytica. Se deben
diferenciar ambos, ya que ambos pueden expulsarse al toser en las muestras de
esputo (CDC, 2019).
Microsporidia
Ciclo biológico

CDC (2019)). Ciclo biológico de Microsporidia. [Ilustración] Centros para el Control


y Prevención de Enfermedades. Atlanta, Georgia.

La espora resistente, que puede persistir en el medio ambiente durante meses.


Luego, la espora germina y revierte rápidamente su túbulo polar que contacta con
la membrana de la célula huésped eucariota. Luego, la espora inyecta el
esporoplasma infeccioso en la célula huésped a través del túbulo polar. Dentro de
la célula, el esporoplasma entra en la fase proliferativa marcada por una
multiplicación extensa vía merogonia (fisión binaria o fisión múltiple), creando
merontes. La ubicación de esta etapa de desarrollo dentro de la célula huésped
varía según el género; puede ocurrir ya sea en contacto directo con el citosol de la
célula huésped (Enterocytozoon, Nosema), dentro de una vacuola parasitófora de
origen desconocido (Encephalitozoon), en una envoltura secretada por el parásito
(Pleistophora, Trachipleistophora ), o rodeado por el retículo endoplasmático de la
célula huésped (Endoreticulatus, Vittaforma). Después de la fase proliferativa, los
merontes experimentan una esporogonia en la que se desarrolla la gruesa pared
de esporas y el aparato de invasión, creando esporones y, finalmente, esporas
maduras cuando todos los orgánulos están polarizados. Cuando las esporas
aumentan en número y llenan completamente el citoplasma de la célula huésped,
la membrana celular se rompe y las esporas se liberan al entorno. (López, 2012).

Chilomastix mesnili
Ciclo biológico

CDC (2019)). Ciclo biológico de amebas intestinales. [Ilustración] Centros para el


Control y Prevención de Enfermedades. Campeche, México.

La etapa de quiste es resistente a las presiones ambientales y es responsable de


la transmisión de Chilomastix. Tanto quistes como trofozoítos se pueden encontrar
en las heces (etapas de diagnóstico). La infección se produce por la ingestión de
quistes en agua, alimentos contaminados o por vía fecal-oral (manos o fómites).
En el intestino grueso (y posiblemente en el delgado), la equitación libera
trofozoítos. Chilomastix reside en el ciego y/o el colon; generalmente se le
considera un comensal cuya contribución a la patogénesis es incierta (López,
2012).
Blastocystis spp.
Ciclo biológico

CDC (2019)). Ciclo biológico de Blastocystis spp. [Ilustración] Centros para el


Control y Prevención de Enfermedades. Atlanta, Georgia.

El ciclo comienza cuando el hospedero, ingiere alimentos o agua contaminada con


quistes infectantes de pared gruesa de Blastocystis spp. Al pasar por el tracto
digestivo, se desenquistan en el estómago, gracias a la acción de las enzimas y
de los ácidos presentes en el mismo. En el intestino se observa una forma
avacuolar sin envoltura o cubierta celular que al pasar por el intestino y situarse en
las células epiteliales se transforma en la forma multivacuolar. (Amaya, Trejos &
Morales, 2015).

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