¿Qué importancia tiene la aplicación de métodos y técnicas para la mejora del proceso

de enseñanza aprendizaje y sobre todo, cómo es posible que ayuden a consolidar una
educación de calidad? Uno de los objetivos más valorados y perseguidos en el ámbito
educativo durante décadas, es lograr que los alumnos se conviertan en individuos
autónomos, independientes y autorregulados. No obstante, hoy en día parece que los
planes y programas de estudios de los distintos niveles educativos están enfocados en
promover estudiantes que cuenten con una amplia variedad de conocimientos
conceptuales pero con insuficientes herramientas que les permitan enfrentar por sí
mismos situaciones de aprendizaje que conllevan la reflexión, interpretación y
resolución de problemas.

Por lo tanto, es fundamental reconocer y valorar el rol que desempeña el docente en la

identificación, planificación y aplicación de métodos y técnicas adecuadas para la
formación íntegra del alumno. En la actualidad se determina la necesidad de una
educación centrada en el individuo que aprende, lo cual exige analizar la enseñanza
como un proceso que se encarga de orientar el aprendizaje; es decir, que el objetivo
principal de la educación es generar ambientes favorables para que los educandos no
solo adquieran saberes sino también, desarrollen habilidades, destrezas y valores, qu e
les permitan actuar de manera independiente, innovadora y comprometida, para
solucionar las problemáticas a las que se enfrentarán en su entorno personal,
académico, social y laboral.

En todo caso, es necesario reconocer que para alcanzar este propósito se requiere de
la implementación de métodos y técnicas que propicien un aprendizaje intencional,
reflexivo, consciente y autorregulado, orientado por objetivos y metas propias, como
consecuencia de las interacciones sociales y la comunicación que se propicia en el
contexto y por ende, tome en cuenta la diversidad de los educandos. Desde el punto de
vista educativo, es primordial que el docente utilice herramientas propias de esta
generación para motivarlos y desarrollar las capacidades a partir de sus características,
estilos y ritmos de aprendizaje que ayuden a generar situaciones significativas.

Con este trabajo se busca satisfacer el conocimiento y aprendizaje de los diferentes

métodos y técnicas de enseñanza. Así como también, la organización de acuerdo a las
actividades desarrolladas en clase y la búsqueda permanente del mejoramiento en la
calidad del aprendizaje.

En primer lugar, es importante conocer en qué consiste el método y a qué hace

referencia la técnica, lo que ayudará a establecer sus características, a facilitar la
comprensión entre estos dos conceptos y a favorecer su aplicación en el au la.
Tradicionalmente se ha utilizado el término “método de enseñanza” para definir las
acciones que el maestro realiza y las cuales están orientadas a organizar la actividad
práctica y cognoscitiva del estudiante para que asimile los contenidos de la educación.
Según González (2012) “Un método de enseñanza es el conjunto de técnicas y
actividades que un profesor utiliza con el fin de lograr uno o varios objetivos educativos,
que tiene sentido como un todo y que responde a una denominación conocida y
compartida por la comunidad científica” (p. 96).

En cambio, desde una perspectiva amplia, se entiende por “técnica de enseñanza” al

conjunto de actividades que el profesor organiza para facilitarle a los alumnos la
construcción del conocimiento. Cabe mencionar que las técnicas de enseñanza se
encuentran en constante relación con las características personales y habilidades
profesionales del maestro. Como por ejemplo, su formación social, sus valores
familiares, su lenguaje y su formación académica. Además, forma al docente su propia
experiencia de aprendizaje en el aula.

En mi opinión, los métodos de enseñanza que deben ser reconocidos y que sin duda
tienen que estar en el repertorio de los docentes, son los siguientes: el aprendizaje
basado en problemas, el aprendizaje basado en proyectos, él método de casos, las
simulaciones dramatizadas o través de las tecnologías, el método de situación, las
discusiones, las dinámicas de grupo y el aprendizaje colaborativo en el aula, entre
otros. Considero que todos los métodos pueden combinarse con analogías,
demostraciones, mapas conceptuales y gráficos para beneficiar el desarrollo y la
comprensión de las actividades formativas.
En definitiva, los métodos señalados anteriormente se caracterizan por involucrar al
estudiante en la construcción de su aprendizaje porque se requiere de la investigación,
el análisis y la participación del individuo. Por tal motivo, se estimula el autoaprendizaje,
la argumentación, la toma de decisiones, se propicia el desarrollo de habilidades
interpersonales y el trabajo en equipo. Así mismo, se fortalece la autonomía, el sentido
crítico y reflexivo. A partir de situaciones reales o ficticias que favorecen la motivación y
la creatividad.

A continuación, se describen algunas de las técnicas más utilizadas hoy en día en

distintos ambientes de formación, actualización y profesionalización de los docentes.
Aunque cada profesor, encuentra en su experiencia, en su saber y en su ingenio, las
acciones convenientes que lo ayudarán a fortalecer los aprendizajes en el aula. Como
por ejemplo: el debate dirigido, la lluvia de ideas, la técnica expositiva, entre otros. A mi
parecer, estas técnicas determinan de manera ordenada la forma de llevar a cabo un
proceso y sus pasos definen cómo deben ser guiadas las acciones para conseguir los
objetivos propuestos.

En todo caso resulta necesario reconocer que según teorías recientes (BIGGS, 2005),
el aprendizaje no se impone ni se trasmite mediante la enseñanza directa, sino que se
construye mediante los procesos que desarrollan los estudiantes según el tipo de
actividades que realizan en cada contexto académico. Lo importan te es que el profesor
conozca las claves metodológicas que determinan el aprendizaje profundo y evite que
su forma de enseñar esté estimulando el aprendizaje superficial. En ello radica la
calidad de su actuación como docente.

Por último, habría que considerar que los métodos y técnicas se aplican para resolver
las necesidades, las problemáticas que se suscitan en la práctica educativa y sobre
todo, se pretende favorecer el aprendizaje. Cabe señalar que existen distintas
actividades que contribuyen en la comprensión de contenidos y en el desarrollo de
habilidades. Por tal razón, la finalidad didáctica de cada una de estas formas de
planificar y desarrollar las actividades es distinta, requiere estrategias y recursos
diferentes y exige, tareas diversas a docentes y estudiantes (DE MIGUEL, 2006).
Referencias

• Alcoba González, J. (2012). La clasificación de los métodos de enseñanza en

educación superior. Contextos Educativos, 15. Madrid.

• BIGGS, J. (2005). Calidad del aprendizaje universitario. Madrid: Narcea.

• DE MIGUEL, M. (coord.) (2006b). Metodologías de enseñanza y aprendizaje

para el desarrollo de competencias. Madrid: Alianza Editorial.

• Díaz-Barriga A. Frida, Gerardo Hernández Rojas (2002). “Estrategias para el

aprendizaje significativo: Fundamentos, adquisición y modelos de interven ción”.
En: Estrategias docentes para un aprendizaje significativo. Una interpretación
constructivista. McGraw-Hill, México, pp.231-249.