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Doctrina, Legislación.
Jurisprudencia y Modelos
Compila:
HUGO HUAYANAY Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos
CHUQUILLANQUI
Volumen II
PARTICIPANTES
. E- - : -emando Montoya Alberti; JorgeAvendaño Valdez; Daniel Echaiz Moreno; Ricardo BeaumontCallirc
a -. a a . a a j _
a - a - a a - a a a: José Silva Cueva; José Cesare Sifuentes; Oswaldo Arias Montoya; Sydney Bravo Melgar;
¡■i ' Ia a a a r r~A a : ~ 55 Va-mque: Roxana Jiménez Vargas-Machuca; Carlos Gomero Rigacci; Cesar Ramos Padilla;
a ~ ; a :a ; e a a F gueroa Bustamante; Juan Blossiers Mazzini; Cesar Ramos Padilla.
Contratos
Civiles y M odernos de Empresa
Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos
Volumen II
C O M P IL A
Huso Huavanav Ch.
C O M IT É ASESOR DE H O N O R
Oswaldo Hudskopf Exebio
Ricardo Beaumont Callirgos
Ulises Montoya Alberti
Jack Bigio Chrem
Hernando Montoya Alberti
MFC Editores
CONTRATOS CIVILES Y MODERNOS DE EMPRESA
Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos
Volumen II
Impreso en Perú Printed in Perú
© Compilador
Hugo Huayanay Chuquillanqui
© Derechos de Edición
MFC EDITORES E.I.R.L.
Jr. Miguel Aljovín 159 - Lima 1
4285941-4260819
D edicatoria:
A la Universidad Mayor de San Marcos,
. Universidad del Perú, Decana de América, en el 459
Aniversario de su fundación
(12 de Mayo de 1551 - 12 de Mayo de 2010).
El año 1999, cuando aún era estudiante del último año de Derecho en la Universidad
Nacional Mayor de San Marcos, decidimos conjuntamente con algunos alumnos del Taller
Fénix,1trabajar un proyecto de Libro compilatorio sobre los tipos contractuales más usuales,
convocando para ello, a los catedráticos más renombrados en dicha materia.
Hoy en día, habiendo transcurrido cerca de nueve años desde aquella fecha, ya se
han editado dos ediciones de esta obra y cada vez mejoradas2. Es en ese sentido que una
vez mas, ante la tremenda acogida del gran público -que prácticamente ha agotado dichas
ediciones a pocos meses de salir al mercado- hemos tenido a bien publicar una tercera
edición, cosa bastante inusual en el campo de la edición de libros compilatorios en nuestro
país pero sin duda, explicable por lo interesante del tema y la calidad de los contenidos.
Por ello, continuando con la idea primigenia del presente libro, la cual es constituirse
en una vitrina académica que exponga los más importantes y usuales tipos contractuales
de esta área fundamental del derecho, a cargo de los juristas y catedráticos más importantes
del Perú, hemos realizado una intensa actualización y mejoras en los aspectos legislativos
y jurisprudenciales de cada tipo contractual; así mismo, hemos ampliado el número de
ensayos y de sus autores3; todo ello pensado en brindar al denodado lector, una fuente de
consulta muy útil y rigurosamente didáctica.
HUGO HUAYANAY
Director de ESDEN
Escuela Superior de Derecho, Empresa & Negocios
TOMO II
ÍN D IC E
Presentaciones Introductorias:
• Introducción al Estudio de los
denominados Contratos Modernos Max Arias-Schreiber Pezet+.................... 21
• Contratos Modernos y Reforma Económica Hernán Figueroa Bustamante................. 29
• La Contratación Masiva y la Crisis de la
Teoría Clásica del Contrato Carlos Soto C oaguila............................... 51
índice
Por lo general estas llamadas nuevas figuras contractuales se mencionan por alguna
ley o convención pero no se encuentran legisladas, es decir, no están dotadas de una
estructura legal normativa donde se prevean sus reglas, modalidades, efectos, plazos o
condiciones, modos interpretativos de ciertos actos, reglas de caducidad o extinción, etc.
Es nuestra opinión que deben crearse y expedirse leyes especiales para aquellos
contratos o instituciones que por constituir fondo inalienable del derecho comercial no
puedan integrar el derecho común; en otras palabras, es necesario legislar a través de
leyes especiales sobre materias concretas mercantiles, primero porque su fondo inalienable
no puede ser recogido por el derecho común, y en segundo lugar porque ello permite su
rápida modificación y adecuación a una realidad mercantil que evoluciona, transforma y
se perfecciona contractualm ente, evitándose de este modo un desfase entre el
ordenamiento jurídico y la realidad.
En conclusión, puede afirmarse, sin temor a error, que nos hallamos frente a una
obra ciertamente importante en el ámbito del Derecho contractual, donde tradicionales
categorías científicas son sometidas a revisión e integradas, -junto a nuevas (o renovadas)
instituciones- en un sistema coherente y armónico que posibilite a la institución contractual
cumplir, habida cuenta de las circunstancias del momento, la función componedora de
intereses contrapuestos que justifica su existencia. Se trata de una relevante contribución
a la revisó de esa fundamental y compleja parcela del Derecho.
r
PRÓLOGO A LA SEGUNDA EDICIÓN
( 2002 )
O Pontificia Universidad Católica del Perú, Doctor en Derecho. Consejero del Estudio Echecopar.
Doctor Honoris Causa por la Universidad Privada San Pedro de Trujillo. (2002). Ex-Presidente
del Jurado de Honor de la Magistratura. Presidente Honorario y Miembro de la Comisión
Especial Encargada de Elaborar el Anteproyecto de Ley de Reforma del Código Civil de 1984.
Presidente del Consejo Superior de Arbitraje del Centro de Conciliación y Arbitraje Nacional e
Internacional de la Cámara de Comercio de Lima. (2001-2003). Miembro de Número de la
Academia Peruana de Derecho.
(+) Fallecido el 10 de agosto del 2007.
16
perfecciona. Sin embargo, está tan difundido el concepto de que el contrato es lo que
obliga a las partes, que se identifica el contrato con la relación jurídica creada por él y se
habla generalmente, como he dicho, de resolución del contrato o de cumplimiento del
contrato. Debo confesar que con harta frecuencia me olvido del distingo e incurro en el
error que ahora critico.
La obligatoriedad de la relación jurídica es lo que motiva a las personas a recurrir a
los contratos para asegurar el cumplimiento de los acuerdos de voluntad celebrados entre
ellas.
Para los efectos de este prólogo resulta indispensable conocer que los contratos se
clasifican, atendiendo al criterio de su regulación, en típicos y atípicos. El contrato típico
es aquel que tiene una regulación legal propia que lo identifica respecto a los demás. Por
contraposición, es contrato atípico el que, no obstante tener una identificación propia y
reunir los requisitos necesarios para ser contrato, no ha merecido aún recepción legislativa
mediante una disciplina particular. El contrato atípico viene a ser el producto de las
necesidades e imaginación de las partes que, en uso de la libertad que concede el artículo
1354 del Código civil, crean un contrato diferente a los ya regulados para normar sus
relaciones.
El concepto de tipicidad corresponde tradicionalmente a la tipicidad legal. Estos
conceptos corresponden a la tipicidad legal o legislativa, como por ejemplo, el contrato de
compraventa que está regulado por el Código Civil, no puede generarse, al menos nunca
lo ha sido, de una manera espontánea. Es inadmisible que el legislador considere, de
pronto, que debe crear un tipo de contrato y lo regule en el ordenamiento legal, sin otro
sustento que su convicción personal. La realidad es que la tipicidad legal se nutre de
contratos atípicos creados por los particulares al margen de la ley, con características
propias y distintas de los tipos legislativos.
Pero no es suficiente que se creen estos contratos en forma aislada, esporádica,
sino además que posean una reiteración, frecuencia y uniformidad que determinen que la
doctrina o la jurisprudencia los reconozca como correspondientes a una realidad
socioeconómica. Como, por ejemplo, el contrato de factoring, cuyos alcances ha estudiado
minuciosamente la doctrina
Se atribuye a BETTI el haber otorgado a los contratos que reúnen estas condiciones
una tipicidad especial, que subentra en la tipicidad legal, la cual podría ser llamada “tipicidad
social”.
Hoy en día esta clase de contratos tiende a universalizarse, dentro del concepto de
la globalización en que se encuentra el mundo.(*)
Tratar sobre los aspectos generales de todos estos contratos es tarea que exige un
libro sobre cada uno de ellos.
4) Es constitutivo.
7) Es oneroso.
precio residual, esto es, la diferencia entre lo que ha pagado por el arrendamiento y el
precio pactado.
Su naturaleza jurídica es sui generis, pues tiene elementos de varios contratos,
incluyendo cláusulas accesorias.
Entre sus caracteres destacan:
3) Es constitutivo.
4) Es mercantil y de empresa.
5) Es complejo.
6) Es de administración.
7) Es de cambio.
8) Es oneroso.
11) Es formal.
3) Es complejo.
4) Es constitutivo.
5) Es conmutativo.
6) Es oneroso.
7) Es de tracto sucesivo.
10) Es literal y formal, debiendo constituirse por escritura pública (Art. 319 del Decreto
Legislativo N° 319).
Basta citar el caso de Kentuky Fried o de Mac Donald’s, para darnos cuenta de lo
que constituye la franquicia en nuestro medio. Su importancia, cada vez mayor, hace inútil
cualquier comentario adicional.
5) Es constitutivo.
6) Es oneroso.
10) Es en principio consensual, pero conviene que conste siempre por escrito, dada su
importancia y diferentes modalidades.
de riesgos, en forma tal que las partes contratantes se juntan con un criterio de
coparticipación que asume diferentes formas y matices.
Su importancia es notable y ha merecido detenida atención en recientes leyes en el
Perú, dadas las inmensas posibilidades de explotación de recursos que se encuentran en
el país y que la necesidad de reunir grandes capitales y tecnología muy avanzada, así
como una gran experiencia en operaciones técnicas, comerciales, financieras, industriales
y de todo orden.
Su naturaleza jurídica es muy compleja, pues reúne una serie de elementos que lo
hacen sui generis.
Sus caracteres jurídicos fundamentales son:
4) Es a título oneroso, dados sus fines y las grandes inversiones que exige.
6) En general, las partes concurren en las ganancias como en las pérdidas, en función
del valor de sus participaciones. Esto, desde luego, es materia de lo que en definitiva
acuerdan dichas partes.
8) Se caracteriza por la recíproca lealtad entre las partes, una de las cuales es la que
lleva el peso de la gestión.
INTRODUCCIÓN
I. CONTRATOS COMERCIALES
Contratos de Colaboración Empresarial.- Como sostiene Arrubla Páucar2, son
los celebrados por empresas especializadas en una actividad económica que cooperan
con otras para la producción de determinados bienes y servicios.
1. SPOTA, Alberto: “Instituciones de Derecho Civil”. Ediciones Depalma. Buenos Aires. 1976.
2. ARRUBLA PÁUCAR, Jaime: “Contratos Mercantiles”. Bogotá. 1992.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 31
Por este contrato dos o más personas naturales o jurídicas establecen una
relación jurídica consistente en explotar un negocio, proyecto en común o desarrollar
una actividad económica específica por un tiempo determinado, sin constituir una
sociedad o persona jurídica, acordando los asociados aportar bienes materiales,
asumir gastos, participar en las utilidades resultantes del mismo, así como responder
por las pérdidas en forma solidaria e ilimitada.
Características:
- Autónomo.
- Consensualidad.
- Informalidad.
- Ejecución continuada.
- Onerosidad.
Debe recordarse que el D. Leg. 662 que contiene normas sobre estabilidad
jurídica a las inversiones extranjeras, contempla la aplicación del joint venture como
inversión de riesgo.
2. Engineering
3. Franchising
Como opina Zanelli7 por este contrato una sociedad matriz o principal
promueve y constituye una serie de empresas autónomas vinculadas a fin de
encomendarles la producción o venta de sus productos o servicios, permitiendo
que sean ofrecidos al consumidor a precios más accesibles.
4. Know How
Como sostiene Knapp10, el Know How puede ser técnico, conformado por los
conocimientos adquiridos para la producción de bienes y comercial o de gestión
que contribuye en la dinámica administrativa y comercial de las empresas.
6. Sindicación de Acciones
10. KNAPP, José: “El contrato de Know How”, Buenos Aires, 1990.
CONTRATOS (ünctrina. Legislación. Jurispruaonaj y Modi'los) 35
8. Contrato Estimatorio
Este contrato debe su nombre ala suma de dinero que ambas partes estiman
que, llegado el caso, el receptor de la cosa objeto del contrato, pagará al transmitente
quien a su vez la entrega para su eventual venta o devolución.
Una parte transfiere una o más cosas muebles a la otra y ésta se obliga
apagar el precio, salvo que se restituyan las cosas en el plazo establecido
11. CALLE FIOCCO, José Manuel: Diario Oficial El Peruano, Lima, Perú.
12. GASTALDI, José María: “El Contrato de Concesión Privada", Bs.As. 1974.
13. DÍAZ BRAVO, Arturo: "Contratos Mercantiles", México, 1990.
36 Contratos Modernos y Reforma Económica / Hernán Figueroa Bustamante
Como señala Molas,14 por este contrato, una persona jurídica se encarga de
fomentar los negocios de uno o varios comerciantes, acerca al principal con los
clientes, los visita permanentemente y los instruye directamente.
Existen asimismo figuras afines como los Forward, los contratos Stand los
documentos representativos de dichas mercaderías.
14. MOLAS, Ana María: “Contratos Comerciales Atípicos", Difusora Bibliográfica, Bs.As., 1983.
15. FONT VILLALTA, Montserrate: “Instrumentos Financieros Internacionales”, Madrid, 1992.
16. COSTA RAN, Luis: “Nuevos Instrumentos Financieros”, Editorial Esic, Madrid,1992.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 37
Existen asimismo figuras afines como los Forward, los contratos Stand By,
los Swaps o permuta financiera, etc.
OTROS CONTRATOS
El Derecho Comparado plantea otras figuras contractuales como expedición,
participación, pensión completa, exposición, forestación, crucero, excursión, parasociales,
producción y distribución de películas cinematográficas, de nuestra artística, de gestión
fiduciaria, cesión de deudas, portaje, prestación de servicios informáticos, hardware y
software; ejecución de proyectos, consulto rías o diseño, montaje, desarrollo gerencial y
supervisión de obras, el merchandissing que contribuye a la mejor organización y eficiencia
de las Empresas en la prestación de servicios.
SUPTIPOS DE CONTRATOS
Surgen diversas variantes de las que pueden ser objeto los contratos nominados
con las cláusulas atípicas, que no alcanzan a modificar el resultado práctico económico
que persiguen.
Entre ellos se pueden considerar la construcción de obras civiles, los contratos de
publicidad.
Por los criterios expuestos, estimamos que el desarrollo legislativo de los contratos
modernos en el Perú permitirá su regulación con estabilidad jurídica, contribuyendo a la
modernización económica del país.
e) El Banco está autorizado unas veces y obligado otras, a realizar pagos por cuenta
del cliente.
g) El Banco tiene la obligación de guardar secreto sobre las operaciones que el cliente
le confía.
1. Underwriting
2. Factoring
b) Históricamente, se debe recordar entre los siglos XIII a XIX los productores
ingleses a través de su factor americano recibían multiplicidad de servicios,
incluyendo adelantos sobre facturadores a cargo de com erciantes
norteamericanos.
c) Partes:
f) El comerciante debe transferir la totalidad de las facturas que tenga por cobrar
al factor, quien si está de acuerdo en aceptar la lista de clientes cuyas facturas
fueron transferidas, se encarga de cobrarles.
3. Leasing
26. BUONOCORE, Vicenzo: "El Leasing”, Editorial Abeledo Perrot, Buenos Aires, 1991.
27 . CIFUENTES, Eduardo: “El Leasing”, Editorial Macchi, Bs. As., 1992.
42
Si el cliente no hace uso de tal opción, debe restituir el bien objeto del negocio
a celebrar uno nuevo.
3.3. Sale and lease back. El propietario vende un inmueble a una financiera y
luego ésta vuelve a alquilarlo y venderlo al fabricante que era el primer cliente.
3.4. Lease and purchase: Alquilar y comprar. Porej. el fabricante concede material
que se alquila a una empresa. Se distingue del alquiler tradicional porque en
el leasing se da en locación algo que ya pertenece al propietario y que se
compra a pedido del usuario para luego alquilárselo. En el arrendamiento el
locador está obligado a entregar el bien en buen estado y asumir su reparación
en caso de deterioro. En el leasing no existe esta obligación.
Existe una legislación sobre el tema, como por ejemplo, el D. Leg. 299 y su
correspondiente Reglamento, DS 559-84-EFC. Se requiere una estrecha
colaboración de las empresas de intermediación financiera, para permitir aun
sector de la población realizar mayores operaciones de leasing.
4. Contrato de Forfaiting
Por ejemplo, un exportador, que quiere vender una fábrica y equipo en dos o
tres años, utiliza los servicios del forfaitery lo hace participar contractualmente. Los
títulos se transfieren al forfaiter en propiedad, para el cobro.
El forfaiter cobra una comisión por cada uno de los servicios. Los títulos
circulatorios de la compra-venta internacional pueden ser negociados, lo que
constituye un importante atractivo.
28. GHERSI, Carlos Alberto: “Contratos Civiles y Comerciales”, Bs. As., 1991.
44 Contratos Modernos y Reforma Económica / Hernán Figueroa Bustamante
5. Fideicomiso
Clases:
6. SECURITIZACIÓN
33. PAOLANTONIO, Martín: “Fondos Comunes de Inversión”, Ediciones Depalma, Buenos Aires.
1994.
34. VERCHIK, Ana: “Mercado de Capitales". Ediciones Macchi, Buenos Aires, 1993.
35. LÓPEZ ROCA. Luis Fernando: “Nuevos Productos Fiduciarios”, Bogotá, 1993.
46
Características
a. Para los emisores de los títulos valores: Asegura un menor costo de obtención
de fondos por la separación de determinados activos de la empresa, permite
un uso más eficiente y un mayor manejo del crecimiento de la cartera y mejora
la relación financiera de los activos y pasivos, el resultado financiero.
De esta manera; los bancos transfieren a los compradores de los títulos los
riesgos del crédito, la tasa de interés de cambio y liquidez.
7. Contrato de Hedging36
8. Spreading
9. Confirming
Puede actuar sin recurso (se confía al exportador el pago de las mercancías
contra documentos de embarque o abriendo un crédito documentario) o bien
refacturando la compra de mercancías por cuenta del exportador y venta al
importador aplazo.
Facilita el cambio inmediato, sin riesgo, que aporta agilidad suficiente a las
transacciones comerciales.
10. Trading
Como señala Costa Ran,38 esta operación permite la transferencia del riesgo,
mejorar la eficacia y liquidez de los mercados, incrementar la confianza de los
inversionistas, contribuyendo al funcionamiento adecuado de la economía.
36. FONT VILLALTA, Montserrate: “Nuevos Instrumentos Financieros", Madrid, 1992; y Diez de
Castro, Luis. Obra Citada (supra 17).
37. MARZORATI, Oswaldo: “Sistemas de Distribución Comercial”, Lima, 1992.
38. COSTA RAN, Luis: Obra citada.
48 Contratos Modernos y Reforma Económica / Hernán Figueroa Bustamaote
3
El Arbitraje es el proceso por el cual se obtienen resultados provechosos de
la existencia de precios diferentes por el mismo producto, en el mismo momento,
pero en mercados diferentes.
Los contratos de futuro son acuerdos por los cuales las partes intervinientes
se obligan a la compra o venta de un número determinado de bienes o títulos aun
precio y en fecha futura estipulada.
Como señala Costa Ran,40 entre los commodities, como activos no financieros
tenemos los productos agrícolas, metales, minerales, energía, petróleo y entre los
activos financieros las tasas de interés, divisas, valores, índices bursátiles.
12. Swap
12.2 Swap de Tasa de Interés (Interest Rate Swap) Se permuta el interés fijo
por un interés variable, constituyendo instrumentos de garantía probada
para reducir el riesgo respectivo. Se requiere que la tasa de interés no
descienda.
1. Contrato de CAP: Contrato por el cual una entidad financiera puede ofrecer a una
empresa contratante la fijación de un tope máximo a las tasas de interés en las
operaciones de endeudamiento, con una vigencia determinada, a cambio de una
comisión anual pagadera al inicio de cada período.
3. Contrato Floor: Se identifica con un seguro contra la baja de las tasas de interés,
teniendo gran utilidad en la inversión. El pago de una prima asegurará que la entidad
bancaria se hará cargo de la diferencia existente entre la tasa del día y la tasa
mínima garantizada, cuando la primera desciende.
LA CONTRATACIÓN MASIVA Y LA CRISIS DE LA TEORÍA
CLÁSICA DEL CONTRATO
Carlos Alberto Soto Coaguila
“Cuando una institución humana, creada por el hombre para el servicio del hombre,
comienza a escribir su nombre, con letras de molde, cuando una institución humana
cristaliza, se abstrae de la historia que le dió origen y pretende ser un valor universal,
entonces hay algo que se quiebra y que se pierde: nuestra capacidad de inventiva y de
respuesta frente a situaciones nuevas”.
(DE TRAZEGNIES G.( Fernando. La Transformación del Derecho de Propiedad. En: “El
Derecho”. Lima, Fondo Editorial de la PUCP, 1978, N° 33, p. 104.)
INTRODUCCIÓN
1. Cfr. REAL ACADEMIA ESPAÑOLA. Diccionario de la Lengua Española. Madrid, Editorial Espasa
Calpe, S.A., 1992, tomo I, p. 597.
2. Sobre las diferentes acepciones del término “crisis” puede consultarse el trabajo de los
profesores Atilio Aníbal ALTERINI Y Roberto LOPEZ CABANA, La autonomía de la voluntad
en el contrato moderno, Buenos Aires, Abeledo-Perrot, 1989, pp. 12-16. Para estos autores,
la crisis del contrato no es tal, sino es una crisis de la autonomía de la voluntad.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 53
6. Cfr. DIEZ-PICAZO, Luis: Derecho y masticación social. Tecnología y Derecho privado. (Dos
esbozos). Segunda edición. Madrid, Editorial Civitas S.A., 1987, p. 42.
7. Según el art. 1351 de nuestro Código Civil, “El contrato es el acuerdo de dos o más partes
para crear, regular, modificar o extinguir una relación jurídica patrimonial”.
8. También denominados por la doctrina como contratos paritarios o discrecionales.
9. Puede consultarse el trabajo de NICOLAU, Noemí Lidia. Tecnología y masificación en el
derecho contractual. En Revista Jurídica Argentina La Ley. Buenos Aires, 1992, tomo 1992-B,
p. 767.
10. Cfr. FERRI, Luigi: Lezione sul contratto. Seconda Edizione. Bologna, Nicola-Zanichelli S.p.A.,
1987, p. 112.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y M f tft'fo s jj 55
Esto ha llevado a algunos autores como Martín-Ballestero a afirmar que “el concepto
clásico, el concepto teórico del contrato se sigue manteniendo por inercia o por pereza
mental y se sigue formulando en los textos y enseñando en las aulas”1'. Marco Aurelio
Risolía por su parte afirma que “La crisis del contrato alcanza tanto a su formación como
a sus efectos y repercute en los dos grandes principios que rigen la institución en los
códigos liberales: 1o) La libertad contractual; 2o) La fuerza obligatoria del vínculo.”1
12
Nuestro Código Civil de 1984 ha enfrentado este fenómeno incorporando, al interior
de las normas relativas al Consentimiento13, instituciones como el contrato por adhesión,
las cláusulas generales de contratación, los contratos de hecho y la oferta al público.
Podemos deducir, entonces, que lo más importante para el legislador sigue siendo el
acuerdo de voluntades, resaltando la autonomía privada, manteniendo la teoría tradicional
del contrato, donde existe oferentes y aceptantes que negocian su contenido. Sin embargo,
parece que el legislador olvidó que actualmente la mayor parte de las relaciones de las
personas que se traducen en contratos se realizan dentro del esquema de la “contratación
masiva”, donde no hay negociación y la concertación es despersonalizada, anónima; y la
libertad contractual - e inclusive algunas veces la libertad de contratar- no existe o se
encuentra reducida a su mínima expresión.
Frente a esta perspectiva, Alfredo Bullard opina q ue "... el diseño del contrato aludido
esta hecho para responder a un liberalismo de corte “artesanal”14; agregando que “... la
contratación en masa ha rebasado por completo los marcos de la concepción tradicional
de “contrato” con lo que quedan dos posibles salidas: o le damos al concepto “contrato”
un contenido distinto al de ser un simple acuerdo de voluntades, para poder englobar a la
llamada “contratación en masa”, o creamos una nueva terminología que permita explicar
a cabalidad este nuevo fenómeno”15.
15. Ver BULLARD GONZALEZ, Alfredo: Contratación en masa. ¿Contratación? Ob. cit., p. 58.
16. Cfr. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel: Estudios sobre el contrato privado. Lima, Cultural
Cuzco S.A., 1983, tomo I, p. 42.
17. Véase MESSINEO, Francesco: Doctrina General del Contrato. Buenos Aires, Ediciones Jurídica
Europa-Amérlca, 1952, tomo I, p. 1.
CONTRATOS (Doctrina, l egislación. Jurisprudencia y Modelos) 57
Por último, esta Teoría General del Contrato, que podemos denominarla
Clásica o Tradicional, descansa en los siguientes principios reconocidos por la
doctrina civilista: la autonomía privada, la igualdad de las partes, la fuerza
obligatoria, la buena fe y el efecto relativo. En este sentido, Diez-Picazo18 es claro
al indicar que la teoría tradicional o clásica del contrato “[...] considera al contrato
como “un acuerdo de voluntades de dos o más personas (duorum vel plurium
consensus) dirigido a crear o bligaciones entre ellas (“ad constituendum
obligationem”)”.
18. Ver DIEZ-PICAZO, Luis: Fundamentos de Derecho Civil Patrimonial. Segunda edición. Madrid,
Editorial Tecnos, S.A., 1988, vol. I, pp. 93-96.
19. En relación al concepto de contrato paritario o discrecional la doctrina es uniforme. Consúltese:
DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel. Estudios sobre el contrato privado. Ob. Cit., tomo I, p.
50 y ss.; también El contrato en general. Lima, Fondo Editorial de la Pontificia Universidad
Católica del Perú, 1993, tomo I, p. 52; DIEZ-PICAZO, Luis. Fundamentos de Derecho Civil
Patrimonial. Ob. Cit., vol. I, p. 96; JOSSERAND, Louis. Derecho Civil. Buenos Aires, BOSCH
y Cía. Editores, 1950, tomo II, vol. I, p. 31; SPOTA, Alberto G. Instituciones de Derecho Civil -
Contratos. Buenos Aires, Ediciones Depalma, 1975, vol. I, p. 222.
20. Por su parte, el artículo 140 del Código Civil expresa que: “El acto jurídico es la
manifestación de voluntad destinada a crear, regular, modificar o extinguir relaciones
jurídicas”. Sin embargo, ante las críticas de la doctrina respecto a una innecesaria repetición
de conceptos y la falta de sistemática entre el acto jurídico y el contrato, la Subcomisión
de Contratos Parte General de la Comisión de Reforma del Código Civil peruano presidida
por el Dr. Manuel de la Puente Y LAVALLE ha propuesto la modificación del artículo 1351
con la siguiente redacción: “El contrato es un acto jurídico plurilateral referente a una
relación jurídica obligacional de carácter patrimonial” (Ver CONGRESO DE LA REPUBLICA.
Propuestas de Reformas al Código Civil elaboradas por las Subcomisiones. Lima, 1997.
También puede consultarse el libro publicado por el Instituto de Investigación Jurídico-
Notarial “INDEJ” intitulado Reforma del Código Civil peruano. Doctrina y Propuestas, Lima,
Gaceta Jurídica Editores, 1998).
58 La Contratación Masiva y la Crisis da la Teoría... / Carlos Alberto Seto C. |
Por su parte, el profesor Carlos Cárdenas sin definir este fenómeno jurídico,
señala que la contratación en masa aparece para facilitar el comercio de bienes y
servicios a gran escala24.
21. Cfr. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel: El contrato en general. Ob. Cit., tomo III, p. 71.
22. Cfr. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel: El contrato en general. Ob. Cit., tomo III, p. 75.
Sobre la finalidad de la contratación masiva, su modalidad, recomendamos el artículo del
mismo autor Las cláusulas generales de contratación y la protección al consumidor. En:
THEMIS, Revista de Derecho editada por estudiantes de la Facultad de Derecho de la Pontificia
Universidad Católica del Perú, Lima, 1995, N° 31, pp. 15-22.
23. Cfr. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel. Nuevas tendencias en la contratación moderna. En:
Revista Peruana de Derecho de la Empresa. Lima, Asesorandina, 1988, N° 30, p. 13.
24. Ver CARDENAS QUIROS, Carlos: Las cláusulas generales de contratación y el control de las
cláusulas abusivas. En: IUS ET VERITAS, Revista de Derecho editada por estudiantes de la
Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Católica del Perú, Lima, 1996, Año Vil, N°
13, p. 20. De igual parecer es Manuel de la Puente {El contrato en general, Ob. Cit., tomo III,
pp. 71-77).
59
Pero, ¿qué son los costos de transacción?25. Para Alfredo Bullard “[...] los
costos de transacción son los costos de celebrar un contrato, y que en ciertas
circunstancias son tan altos que pueden evitar que se perfeccione el acuerdo, o
llevar a que éste se perfeccione en términos ineficientes.”26. Según este autor, la
idea básica del concepto de costos de transacción consiste en que usar el sistema
contractual cuesta; es decir, que el uso del mercado contractual no es gratuito.
25. El término ‘costes de transacción’ es el corazón del Teorema de COASE, que se encuentra
recogido en el trabajo de su autor Ronald COASE, The problem ofthe Social Cost. En: The
Journal of Law and Economics, 1990, Vol. 3, pp. 1 a 44.
26. Cfr. BULLARD, Alfredo: “Al fondo hay sitio!" ¿Puede el Teorema de Coase explicarnos el
problema del transporte público? En: THEMIS, Revista de Derecho editada por estudiantes
de la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Católica del Perú, Lima, 1992, Segunda
Epoca, N° 21, p. 96.
60 La Contratación Masiva y la Crisis de la Teoría .../C arlos Alberto Soto C.
Celebrar cada contrato implica incurrir en una serie de costos que deberán analizarse
con la finalidad de que los beneficios obtenidos sean superiores, pues muchas
veces puede ocurrir que los costos son mayores y no despreciables y, por lo tanto
hacen que la solución contractual sea inviable o ineficiente27.
27. Cfr. BULLARD G., Alfredo: “Firme primero, lea después! La contratación masiva y la defensa
del consumidor”. En: Derecho Civil Peruano. Perspectivas y problemas actuales. Lima, Fondo
Editorial de la PUCP, 1993, p. 19. Del autor, consúltese también: “Ronaid Coase y el Sistema
Jurídico. Sobre el Nobel de Economía 1991" y “Al fondo hay sitio!” ¿Puede el Teorema de
Coase explicarnos el problema del transporte público?" En: Estudios de Análisis Económico
del derecho. Ob. Cit., pp. 126-127 y 145-149, respectivamente. Puede consultarse también:
POLINSKY, Mitchell. Introducción al Análisis Económico del Derecho. Barcelona, Editorial
Ariel, S.A., 1985, p. 24; y TORRES LOPEZ, Juan: Análisis Económico del Derecho. Madrid,
Editorial Tecnos, S.A., 1987, pp. 50 a 55.
28. “Artículo 1390.-El contrato es por adhesión, cuando una de las partes, colocada en la alternativa
de rechazar o aceptar íntegramente las estipulaciones fijadas por la otra parte, declara su
voluntad de aceptar. ”.
29. “Artículo 1392.- Las cláusulas generales de contratación son aquellas redactadas previa y
unilateralmente por una persona o entidad, en forma general y abstracta, con el objeto de fijar
el contenido normativo de una serie indefinida de futuros contratos particulares, con elementos
propios de ellos.
30. “Artículo 1396.- En los contratos ofrecidos con arreglo a cláusulas generales de contratación
aprobadas por la autoridad administrativa, el consumo del bien o la utilización del servicio
genera de pleno derecho la obligación de pago a cargo del cliente, aun cuando no haya
formalizado el contrato o sea incapaz.".
31. Cfr. ARIAS-SCFIREIBER PEZET, Max: Exégesis del Código Civil de 1984. Lima, Gaceta Jurídica
Editores, 1995, Tomo I, pp. 154 y ss.
32. Cfr. CARDENAS QUIROS, Carlos y MARTINEZ COCO, Elvira: La humanización del contrato,
la defensa del consumidor y las cláusulas generales de contratación, En Revista Peruana de
Derecho de la Empresa, Lima, Asesorandina, 1988, N° 27, p. 159. Véase también: CARDENAS
QUI ROS, Carlos. Las cláusulas generales de contratación y el control de las cláusulas abusivas,
en IUS ET VERITAS, Revista de Derecho editada por estudiantes de la Facultad de Derecho
de la Pontificia Universidad Católica del Perú, Lima, 1996, Año Vil, N° 13, p. 20.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 61
1993)33 señalan que las modalidades de la contratación masiva son los contratos
por adhesión, las cláusulas generales de contratación y los contratos de hecho o
conductas sociales típicas. Para Manuel de la Puente (desde 1991) las cláusulas
generales de contratación son la modalidad de la contratación masiva34.
Ante ello, de inmediato surge la inquietud, ¿cómo hablar de la crisis del contrato
cuando acrece su número, se diversifican sus especies y se abulta su contenido
obligatorio?
33. Cfr. BULLARD G., Alfredo: Contratación en masa. ¿Contratación?. En: THEMIS, Revista de
Derecho editada por estudiantes de la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad católica
del Perú, Lima, 1989, N° 15, p. 47. Asimismo: BULLARD G., Alfredo. ¡Firme primero, lea
después! La contratación masiva y la defensa del consumidor. Ob. Cit., p. 40.
34. Empero, Manuel de la Puente indica que “[...] si bien la contratación en masa ha propiciado
que se utilice el contrato por adhesión en este tipo de contratación no es el único campo
donde el contrato por adhesión juega su rol, de tal manera que no es conveniente que se
considere como uno de los elementos para establecer el concepto de este contrato el de su
uso masivo”.
En cambio, son “[...] las cláusulas generales de contratación, [... las que] han sido creadas o
concebidas para satisfacer, ellas sí, las necesidades de la contratación masiva. No existe en
las cláusulas generales de contratación el carácter impositivo del contrato por adhesión sino,
por el contrario, su utilización obedece al propósito de facilitar y agilizar la contratación.”. Ver
DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel: El contrato en general. Ob. Cit., tomo III, p. 31.
35. Cfr. RISOLIA, Marco Aurelio. Soberanía y crisis del contrato. En nuestra legislación civil. Ob.
Cit., pp. 116-117.
62 La Contratación Masiva y la Crisis de la Teoría... / Carlos Alberto Soto
Para este autor, la crisis del contrato se presenta como una crisis de la
autonomía de la voluntad, de su fuerza obligatoria y de la igualdad jurídica de las
partes contratantes, todos ellos pilares fundamentales de la teoría clásica del
contrato.
Causas de orden moral, que hoy en día tienen una mayor sensibilidad,
pues los contratos deben ser instrumento de realización del bien común. Hay un
tránsito de una moral individual a una más social. Sin embargo, ello no quiere decir
que los contratos no sean obligatorios entre las partes; por el contrario, deben
respetarse y cumplirse, pero deben buscar la justicia y la equidad antes que lo
deseado individualmente.
Muchos son los autores que se han ocupado de la crisis del contrate/", otros
prefieren referirse a la decadencia del contrato42 y algunos, más radicales, hablan
de la muerte del contrato*3.
b) La contratación masiva.
40. Si bien nuestro Código Civil de 1984 incorporó la teoría del ‘dirigismo contractual’ o intervención
del Estado en el artículo 1355 señalando que “La ley, por consideraciones de interés social,
público o ético puede imponer reglas o establecer limitaciones al contenido de los contratos”,
dentro de una concepción social; con la dación de la Constitución Política de 1993,
específicamente su artículo 62 se declara la santidad de los contratos, al establecer que “los
términos contractuales no pueden ser modificados por leyes u otras disposiciones de cualquier
clase".
41. Véase RISOLÍA, Marco Aurelio: Soberanía y crisis del contrato, Ob. Cit.\ y, RIPERT, Georges.
E/ régimen democrático y el Derecho Civil moderno. Puebla - México, Editorial José M. Cajica
Jr„ 1951.
42. Véase DE BUEN LOZANO, Néstor: La decadencia del contrato. México, Editorial Porrúa,
1986.
43. Véase GILMORE, Grant The death ofcontract. Columbus, Ohio State University Press, 1974.
64 La Contratación Masiva y la Crisis de la Teoría... / Carlos Alberto Soto C.
44. Este autor prefiere utilizar la denominación de “autonomía privada” en lugar de “autonomía de
la voluntad”. En razón de que “[...] la autonomía debía recaer en el elemento que daba lugar
a la existencia del acto jurídico, que no era necesariamente la voluntad sino el poderío privado
de crear (regular, modificar o extinguir) relaciones jurídicas, cualquiera que fuera el criterio
que hiciera efectivo ese poderío. Por ello, se consideró más apropiada la expresión de
“autonomía privada” (Cfr. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel. El contrato en general. Ob.
Cit., tomo I, pp. 260-261). En la doctrina italiana, FERRI es de igual parecer (Consúltese
FERRI, Luigi. La autonomía privada. Madrid, Revista de Derecho Privado, 1969, p. 5).
45. La teoría individualista “sostiene que los derechos subjetivos no derivan de un derecho
objetivo primordial sino de la esencia misma del hombre, por lo cual éste es totalmente
autónomo para regular sus intereses, que es lo que justifica la autonomía privada” (Cfr. DE LA
PUENTE Y LAVALLE, Manuel: El contrato en general. Ob. Cit., tomo I, p. 265).
46. La teoría normativista sanciona que “la autonomía privada le es concedida a la persona por
expresa delegación del ordenamiento jurídico, el cual, para no entorpecer el tráfico económico-
jurídico, confía a los particulares la autorregulación de sus Intereses, dentro de los cauces
que le señala dicho ordenamiento” (Cfr. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel. El contrato en
general. Ob. Cit., tomo I, p. 265).
47. Cfr. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel: El contrato en general. Ob. Cit., tomo I, p. 309.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 65
Cuando el legislador del siglo XIX estructuró la teoría general del contrato, lo
hizo en función de una ideología imperante: la concepción liberal e
individualista. El Estado, investido del ius imperium y teniendo la potestad de
regular todas las relaciones de los particulares consideró más apropiado y
conveniente -e n esos tiem pos- delegar a los particulares esta potestad para
que libremente contraten dentro de los límites que creyó necesarios. Así,
podemos constatar que los únicos límites que el Estado consideró necesarios
imponer a la autonomía privada fueron el respeto de las normas imperativas,
a los principios de orden público y a las buenas costumbres.
Sin embargo, las sociedades van siendo cada vez más complejas, al
extremo de llegar a un abuso de la autonomía privada de unos contratantes
sobre otros, así como el debilitamiento de la concepción liberal e individualista
cedió el paso a una corriente de contenido más social y humano. En este
contexto, el Estado, titular de la potestad de regular las relaciones de los
particulares, decidió intervenir para lograr la igualdad jurídica entre los
contratantes y proteger a la parte más débil, con lo cual no hizo otra cosa que
reducir y limitar la autonomía privada48.
48. Un ejemplo del ius imperium del Estado puede encontrarse en la admisión de los Contratos
en Favor de Tercero, donde los efectos de los contratos no sólo afectan a las partes
contratantes, sino que pueden beneficiar y aún perjudicar a terceros. El aforismo romano
res Ínter alios acta alios nocere ñeque prodesse potest (los contratos no pueden beneficiar
ni perjudicar a terceros) es derogado por la Ley. (Véase DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel.
Estudios sobre el contrato privado. Ob. Cit., pp. 197 y ss.). Del autor puede consultarse su
trabajo intitulado: ¿Pueden los contratos favorecer o beneficiara terceros? En “SCRIBAS.
Revista de Derecho”, Instituto de Investigación Jurídico-Notarial “INDEJ”, Arequipa, 1996,
Año I, Nro. 2, pp. 43-50.
66 La Contratación Masiva y la Crisis de la Teoría... / Carlos Alberto Soto C.
Hoy en día resulta imposible que la empresa moderna, para intercambiar sus
bienes y productos, negocie con cada uno de los potenciales clientes y consumidores
el contenido de cada contrato a concertarse. No cabe la menor duda que los
empresarios (productores) buscan reducir los costos de transacción evitando celebrar
contratos con cada uno de los contratantes, pues criterios mínimos de racionalización
y de organización empresarial explicarían la necesidad imperiosa de una contratación
masiva o en masa.
49. Ver DIEZ-PICAZO, Luis: Masificación y contrato. En: Daños. Primer Congreso Internacional
de Daños en Homenaje al Dr. Jorge Mosset Iturraspe. Buenos Aires, Ediciones Depalma, s.f„
p. 10.
50. Cfr. ALTERINI, Atilio Aníbal: Contratos. Civiles-comercíales-de consumo. Teoría General. Buenos
Aires, Abeledo-Perrot, 1998, p. 125.
CONTRATOS (Doctrina, I ugislacJón, Juri.sprudencij y Modalc 67
51. Preferimos utilizar el término de autonomía privada, por ser más apropiada en el campo del
derecho contractual.
52. Sobre el tema puede consultarse SPOTA, Alberto G. Instituciones de Derecho Civil. Contratos.
Buenos Aires, Depalma, 1975, vol. I, p. 20; DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel. El contrato
en general. Ob. Cit., tomo I, pp. 259 y ss.; ALESSANDRI RODRIGUEZ, Arturo y SOMARRIVA
UNDURRAGA, Manuel. Curso de Derecho Civil. Santiago de Chile. Editorial Nascimento,
1942, tomo IV, p. 27.
53. Un dogma, según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española es una “[...]
Proposición que se asienta por firme y cierta y como principio innegable de una ciencia. [...]
Verdad revelada por Dios, y declarada y propuesta por la Iglesia para nuestra creencia. [...]
Fundamentos o puntos capitales de todo sistema, ciencia, doctrina o religión.” (Cfr. Diccionario
de la Real Academia de la Lengua Española. Vigésima primera edición. Madrid, Editorial
Espasa-Calpe, S.A., p. 545).
54. Recomendamos el trabajo de los profesores Atilio Aníbal ALTERINI y Roberto LOPEZ CABANA,
intitulado La autonomía de la voluntad en el contrato moderno, Ob. Cit.
68 La Contratación Masiva y la Crisis de la Teoría... / Carlos Alberto Soto C.
SPOTA es más claro cuando afirma que la libertad de contratar sanciona que “se contrata
porque se quiere y se contrata con tal persona porque así se desea” (Ver SPOTA, Alberto G.
Ob. Cit., vol. I p. 22).
57. También denominada por la doctrina como libertad de configuración interna.
58. Nuestro Código Civil de 1984 la ha consagrado en el artículo 1354.
“Artículo 1354.- Las partes pueden determinar libremente el contenido del contrato,
siempre que no sea contrario a norma legal de carácter Imperativo.”.
Igualmente esta libertad se encuentra proclamada y garantizada por la Constitución Política
de 1993 en su artículo 62.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 69
que no deseen el servicio telefónico no contrataran con esta empresa. Para algunos
estudiosos del Derecho como el profesor De la Puente59, en estos casos se trata de
contratos necesarios por adhesión; es decir, que su celebración es inevitable en
razón de que determinados bienes y servicios se encuentran provistos por empresas
monopólicas y el contratante no tiene otra alternativa. Recordemos que para este
autor los contratos por adhesión no cumplen la finalidad de la contratación masiva
aunque observen algunas características de la contratación en masa.
Por otra parte, consideramos que los contratos por adhesión constituyen una
modalidad de la contratación masiva, en tanto permiten agilizar el tráfico masivo de
bienes y servicios, buscan el acceso de todas las personas en el intercambio masivo
y contribuyen a la reducción de los costos de transacción en la contratación. En
suma, cumplen con todas las finalidades y funciones del nuevo sistema de
contratación.
59. Véase DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel: El contrato en general. Ob. Cit., tomo III, pp. 27
y ss.
70 La Contratación Masiva y la Crisis de la Teoría... / Carlos Alberto Soto C.
60. Labeón, en el D. 18,1,21 escribe que “[...] ante la oscuridad de una pacto antes que al
comprador, debe perjudicar al vendedor, que lo ha expresado, pués pudo haberlo expresado
con claridad desde el primer momento” y Paulo, en el D. 50, 17,172 afirma que “En la
compraventa, el pacto ambiguo debe interpretarse en contra del vendedor”.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos)]
61. El principio “interpretatio contra stipulatorem" sentencia que “[...] cuando en las estipulaciones se
duda que es lo que se haya hecho, las palabras han de ser interpretadas en contra del estipulante”
(Ver: DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel. El contrato en general. Ob. Cit., Tomo III, p. 252).
62. Por el principio ‘favor debitoris"se entiende que cuando la cláusula o convención sea ambigua
o dudosa, entonces deberá interpretarse en favor del deudor o quién haya contraído la
obligación. En suma, esta regla “[...] tiene como eje la idea de ayudar a la parte más débil,
que se supone sea el deudor, apoyándose en un criterio de benignidad” y aplicándola, la
interpretación de las cláusulas dudosas en los contratos en base a CGC deben favorecer al
deudor o débil jurídico que no ha elaborado las CGC (Ver: DE LA PUENTE Y LAVALLE,
Manuel. El contrato en general. Ob. Cit., Tomo III, p. 254).
63. Véase el capítulo referente a la Finalidad de las CGC
64. Cfr. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel: Las cláusulas generales de contratación y la
protección al consumidor, Ob. Cit., Nro. 31, p.16.
65. En una entrevista el profesor Eduardo BENAVIDES expresa que la Parte General de los
Contratos del Código Civil peruano tiende a proteger y tutelar al contratante débil, idea que no
comparte. (Los contratos en debate, Revista Derecho y Sociedad, Lima, Cultural Cuzco S.A.,
1997, Segunda Etapa, Año VIII, Nro. 12, pp. 157 a 158).
66. Cfr. STIGLITZ, Rubén S. y STIGLITZ, Gabriel A. Contratos por adhesión, cláusulas abusivas
y protección al consumidor. Buenos Aires, Ediciones Depalma, 1985, p. 46.
67. Ver. BORDA, Guillermo A. Manual de contratos. Ob. Cit., pp. 58 y 59. Del mismo autor, Tratado
de Derecho civil. Parte General II. Ob. Cit., pp. 140 y 141.
72 La Contratación Masiva y la Crisis de la Teoría... / Carlos Alberto Soto C.
68. Cfr. BULLARD G„ Alfredo. /Firme primero, lea después! La contratación masiva y la defensa
del consumidor. Ob. Cit., pp. 15 a 51.
69. Cfr. ALTERINI, Atilio Aníbal: Ob. Cit. p. 38.
CONTRATOS (D 7Ctm.a. I agitlaemn Jur %irgdanc<a y Modo 73
El rol del Derecho debe tender a que exista una igualdad jurídica.
Empero, si existe una desigualdad, entonces debe preocuparse por igualar a
los sujetos de la relación contractual para que no sólo sean iguales ante la
ley, sino que además su situación jurídica y los efectos derivados de los
contratos que conceden sean equilibrados. En este caso, la base sobre la
cual debe determinarse si existe una parte débil en la contratación debe ser
eminentemente objetiva y no subjetiva.
70. Este presupuesto de la teoría general del contrato se encuentra contemplada en el artículo
1361, que señala:
“Artículo 1361.- Los contratos son obligatorios en cuanto se haya expresado en ellos.
Se presume que la declaración expresada en el contrato responde a la voluntad común
de las partes y quien niegue esa coincidencia debe probarla.”
71. Cfr. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel. El contrato en general. Ob. Cit., tomo I, p. 419.
72 . Cfr. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel. El contrato en general. Ob. Cit., tomo I, pp. 420
421.
74 La Contratación Masiva y la Crisis do la Teoría ... / Carlos Alberto Soto C. ]
73. Cfr. JOSSERAND, Louis: Derecho Civil. Buenos Aires, BOSCH y Cía Editores, 1950, tomo II,
vol. I, p. 281.
74. Cfr. RIPERT, Georges: El régimen democrático y el Derecho Civil Moderno. Ob. Cit., p. 251.
75. Cfr. RISOLÍA, Marco Aurelio: Ob. Cit., pp. 131 y ss.
76. Sobre el tema recomendamos el trabajo del profesor Manuel de la Puente, El contrato en
general, Ob. Cit., tomo I, p. 421.
77. Puede encontrarse todo el desarrollo de su teoría en su artículo intitulado ¿Cuando es bueno
incumplir un contrato? La teoría de incumplimiento eficiente: ejecución forzada vs. Pago de
daños. En Estudios de Análisis Económico del Derecho. Ob. Cit., pp. 165-206.
78. Cfr. BULLARD GONZALEZ, Alfredo: ¿Cuándo es bueno incumplir un contrato? La teoría de
incumplimiento eficiente: ejecución forzada vs. Pago de daños. Ob. Cit., p. 169.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 75
Los profesores Cooter y Ulen señalan que “el rompimiento del contrato es
más eficiente que el cumplimiento del mismo cuando el costo de su cumplimiento
excede los beneficios para todas las partes involucradas”80. Las razones para este
incumplimiento se deben a una contingencia que hace que los recursos necesarios
para ejecutar el contrato sean más valiosos en otro uso alternativo. Estas
contingencias pueden ser de dos tipos: que ocurra un golpe de suerte que haga
que el incumplimiento genere más beneficios que el cumplimiento; o que se produzca
un desafortunado accidente que imponga un mayor costo al cumplimiento que al
incumplimiento. Por ejemplo, una mejor oferta.
¿Qué tiene que ver el incumplimiento eficiente con la crisis del contrato
y la fuerza obligatoria?
84. Cfr. BORDA, Guillermo A. Manual de Contratos. Décimo séptima edición actualizada. Buenos
Aires, Editorial Perrot, 1995, p. 54.
85. Citado por DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel: El contrato en general. Ob. Cit., tomo II, p. 24.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 77
En tal virtud, la buena fe se presenta como una noción única. Pero penetrando
en la técnica jurídica, la buena fe pierde su unidad. Combinada con las reglas
técnicas, que influyen en un sentido o en el otro, la buena fe sólo puede ser definida
en función del mecanismo jurídico al cual se integra. En este sentido, no existe una
definición precisa de la buena fe.
Juan Torres López expresa que “el derecho de contratos no es otra que la
maximización total del valor conjunto del cambio a través de la reducción de los costos de
transacción asociados a los intercambios de prestaciones no simultáneas, a las diversas
contingencias que puedan aparecer a lo largo de la vida de la promesa y a la incompleta
información de la que se dispone”90.
En este sentido, expresa del profesor Alterini que es indudable que el derecho y la
economía son disciplinas que se correlacionan e interpenetran. Empero, este autor expresa
que “No parece discutible que la interrelación entre el Derecho y la economía debe privilegiar
el perfil axiológico”91.
88. Sobre el principio de la buena fe en nuestro Código Civil recomendamos los trabajos de
los profesores: RUBIO CORREA, Marcial. Prescripción, Caducidad y otros conceptos en
el Código Civil, Lima, Fundación Manuel J. Bustamante de la Fuente, 1987, pp. 233-300 y
JIMENEZ VARGAS MACHUCA, Roxana. Análisis sistemático del concepto de Buena Fe
en el Código Civil de 1984. Próxima a publicarse en la Revista de Derecho “Advocatus” de
la Universidad de Lima.. En Derecho Comparado, son importantes los estudios de DE
LOS MOZOS, José Luis, El principio de la buena fe, Barcelona, Bosch, Casa Editorial
S.A., 1965; WIEACKER, Franz, El principio general de la buena fe, Madrid, Editorial Civitas,
S.A., 1982.
89. Ver DIEZ-PICAZO, Luis: Masificación y contrato. Ob. Cit., p. 11.
90. Cfr. TORRES LOPEZ, Juan: Análisis Económico del Derecho. Ob. Cit., pp. 59-60. Puede
consultarse también POLINSKY, A. Michael. Introducción al Análisis Económico del Derecho.
Ob. Cit., pp. 39-44.
91. Cfr. ALTERINI, Atilio Aníbal: Contratos... Ob. Cit., p. 45.
CONTRATOS (TU '"n i I egi -h> •!” Jim, prudcv-,* y Moai'‘ "> ■ 79
Argentina es uno de los pocos países que cuenta con un Código Civil
decimonónico, elaborado por D. Dalmacio Vélez Sarsfield y vigente desde 1871.
Sin embargo, este cuerpo legal ha sufrido modificaciones, pero sin duda la gran
reforma fue la de 1968 impulsada por el Dr. Guillermo A. Borda y que revitalizó el
viejo Código Civil. Pese a que el fenómeno de la contratación masiva en ese entonces
no era una fantasía sino una realidad, no se introdujo ningún artículo que respondiera
directamente a este problema, solamente se modificó el artículo 1198 incorporando
el principio de la buena fe.
Sobre el particular, el Doctor Guillermo Borda nos confesó que sin duda no
se incorporaron varias instituciones que ya tenían vida propia porque el tiempo era
el peor enemigo. Él sabía que la reforma debía realizarse mientras se encontraba
ocupando el cargo de Ministro del Interior y que en cualquier momento podía ser
removido. He ahí la razón de la no inclusión del nuevo fenómeno de la Contratación
Masiva: el tiempo.
El Derecho positivo argentino no tiene una sola norma sobre este nuevo
fenómeno contractual; no obstante, los operadores del Derecho vienen enfrentando
y resolviendo el problema de la contratación en masa, aplicando la clásica Teoría
General del Contrato, el Principio de la Buena Fe y las normas relativas a la
Protección del Consumidor sobre cláusulas abusivas. Sobre el particular, el profesor
Carlos Gustavo Vallespinos sostiene que para solucionar el problema de la
contratación moderna “[...] es necesario vincular el art. 1.148 con lo dispuesto por
el art. 1.152 del Código Civil [argentino ...] aunque, por cierto, el camino más
adecuado sea el de la reforma legislativa [.. .]”92; por su parte Atilio A. Alterini señala
que debe tenerse presente lo preceptuado por el artículo 1198 del Código Civil
argentino que impone que los contratos deben celebrarse, interpretarse y ejecutarse
de buena fe y de acuerdo con lo que verosímilmente las partes entendieron o
pudieron entender, obrando con cuidado y previsión93. Por ello, añade Alterini que
“En el Sistema argentino, [...] en tanto se pugna por llevar a un Código único civil y
comercial la regulación de los contratos de contenido predispuesto o sujetos a
condiciones generales, y la descalificación de las cláusulas abusivas, [... el]
tratamiento específico ha sido incorporado por la ley del consumidor.”94.
92. Ver VALLESPINOS, Carlos Gustavo: El contrato por adhesión a condiciones generales. Buenos
Aires, Editorial Universidad, 1984, p. 304.
93. Ver ALTERINI, Atilio A.: Las condiciones generales de la contratación y cláusulas abusivas
(Argentina-Paraguay). En Las condiciones generales de la contratación y las cláusulas abusivas
de la Fundación BBV, Madrid, Editorial Civitas, S.A., 1996, p. 84.
94. Ver ALTERINI, Atilio A.: Las condiciones generales de la contratación y cláusulas abusivas
(Argentina-Paraguay). Ob. cit., p. 83.
80 La Contratación Masiva y la Crisis do la Teoría... /Carlos Alberto Soto C.
95. Cfr. ALTERINI, Atilio A.: Las condiciones generales de la contratación y cláusulas abusivas
(Argentina-Paraguay). Ob. Cit., p. 72.
96. Cfr. VALLESPINOS, Carlos Gustavo: El contrato por adhesión a condiciones generales. Ob.
Cit., pp. 229 y ss.
97. Cfr. FARIÑA, Juan M.: Contratos comerciales modernos. BuenosAires, Editorial Astrea, 1993,
pp. 105 y ss. ’ ’
98. Cfr. REZZONICO, Juan Carlos: Contratos con cláusulas predispuestas. Buenos Aires, Editorial
Astrea de Alfredo y Ricardo Depalma, 1987, pp. 205 y ss.
99. El texto de la Nota de Elevación de la Comisión Redactora al Poder Ejecutivo se encuentra
publicado en la Revista La Ley, intitulado “Proyecto de Código Civil y Comercial. Nota de
Elevación de la Comisión Redactora al Poder Ejecutivo. (18 de diciembre de 1998)”, Buenos
Aires, Editorial La ley, Año LXIII, N° 245, pp. 1-3. Estas fuentes también pueden encontrarse
en el libro del profesor Atilio Aníbal ALTERINI, Contratos.. Ob. Cit., pp. 109 y ss., texto publicado
el 3 de julio de 1998.
CONTRATOS (Domina. ! ogislación, Jurisprudencia y Morirlos) 81
Estas excepciones, según el artículo 970, no rigen para los contratos por
adhesión.
100. En igual sentido se ha expresado el Presidente de la Comisión de Reforma del Código Civil
Peruano, Dr. Jorge Muñiz Ziches y el Dr. Max Arias-Schreiber Pezet, Consultor de la misma.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 83
8. LA REALIDAD Y EL DERECHO
La contratación masiva, concebida como un nuevo sistema de contratación, viene
a constituirse en nuestro Sistema Jurídico como un nuevo paradigma'0' en el Derecho
Contractual.
La contratación privada se encontraba incólume hasta la aparición de la sociedad
de masas, y con ella, la producción masiva de bienes y servicios. Entonces, el paradigma
contractual tradicional o clásico se vio resquebrajado, y debido a la exigencia de la sociedad
surge un nuevo fenómeno contractual: la contratación masiva.
Thomas Kuhn señala que cuando las instituciones vigentes han dejado de resolver
con eficacia los problemas planteados por un nuevo contexto es que se produce una
revolución científica1102 que conlleva al rompimiento de los paradigmas. En nuestro
0
planteamiento, la revolución es de carácter contractual. La contratación masiva viene a
sustituir parcialmente a la contratación paritaria o clásica.
Sin embargo, la aceptación del nuevo paradigma contractual se enfrenta a la teoría
clásica del contrato, en tanto exige una redefinición del Derecho Contractual.
Es indudable, que el cambio social103, así como la producción masiva de los bienes
y servicios, ha generado un nuevo sistema en el intercambio de bienes y servicios: la
contratación masiva.
Según Diez-Picazo, toda «revolución» tecnológica e ideológica “[...] comporta el
descubrimiento y la generalización de una serie de técnicas y de una serie de ingenios,
que son puestos al servicio del hombre, para que, utilizando los bienes materiales y las
101. Según KUHN “Un paradigma es lo que los miembros de una comunidad científica comparten,
y, recíprocamente, una comunidad científica consiste en hombres que comparten un
paradigma”, en este sentido, los paradigmas se constituyen como “realizaciones científicas
universalmente reconocidas que, durante cierto tiempo, proporcionan modelos de problemas
y soluciones a una comunidad científica” (Ver KUHN, Thomas S. La estructura de las
revoluciones científicas. Madrid, Fondo de Cultura Económica, 1975, p. 13).
102. Para KUHN “las revoluciones científicas como episodios evolutivos de carácter no acumulativo
en los que un nuevo paradigma, incompatible con el anterior, viene a sustituir al antiguo, total
o parcialmente.” (Cfr. KUHN, Thomas S. Revoluciones en el pensamiento. En: NISBET, Ftobert,
KUHN, Thomas S., WHITE, Lynn y otros. Cambio social. Versión española de Leopoldo Lovelac.
Madrid, Alianza Editorial, 1979, p. 144).
103. Robert NISBET señala que “Cuando hablamos de cambio social hacemos referencia a
sucesivas diferencias en el tiempo de alguna relación, norma, función, status o estructura
social: por ejemplo, la familia, la iglesia, la nación, la propiedad, el rol de la mujer, el status del
padre, la comunidad aldeana.” (Cfr. NISBET, Robert. Introducción: El problema del cambio
social. En: NISBET, Robert, KUHN, Thomas S., WHITE, Lynn y otros. Cambio social. Ob. Cit.,
p. 13).
84 La Contratación Masiva y la Crisis de la Teoría... / Carlos Alberto Soto C.
104. Véase DIEZ-PICAZO, Luis: Experiencias Jurídicas y Teoría del Derecho. Barcelona, Editorial
Ariel, 1982, p. 301.
105. Los cambios en la dinámica económica pueden considerarse “como el paso de una economía
tradicional a una economía desarrollada" (Consúltese DIEZ-PICAZO, Luis. Experiencias
jurídicas y teoría del derecho. Ob. Cit., pp. 315-318)
106. Para este autor, el primer punto de cambio en la dinámica económica es el derecho de las
obligaciones.
107. Cfr. DIEZ-PICAZO, Luis: Experiencias jurídicas y teoría del derecho. Ob. Cit., pp. 317-318.
108. Para Borda “No hay crisis del contrato, hay una evolución que debe ser saludada como un
hecho auspicioso porque procura una más perfecta realización de la justicia” (Ver. BORDA,
Guillermo A. Manual de Contratos, Ob. Cit., p. 21). Por el contrario, Risolia afirma la “existencia
de una crisis del contrato, de una decadencia de su soberanía” (Ver RISOLÍA, Marco Aurelio.
Ob. Cit., p. 124).
109. Cfr. DIEZ-PICAZO, Luis: Experiencias jurídicas y teoría del derecho. Ob. Cit., p. 304.
110. Cfr. GARRIGUES, Joaquín: Contratos Bancarios. Madrid, Imprenta Aguirre, 1975, p. X.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 85
7. CONCLUSIONES
El progreso económico y el desarrollo tecnológico han originado una alteración en
las estructuras sociales: un cambio social. En este contexto, la contratación privada, basada
en un sistema de intercambio paritario, ha cedido ante la exigencia de la sociedad por
acceder al mercado en forma masiva, para dar paso a un nuevo sistema de contratación:
la contratación en masa.
Para nosotros, la Teoría Tradicional o Clásica del Contrato se encuentra en crisis,
pero ésta entendida en un sentido positivo, pues el contrato se encuentra en un estado de
evolución y de redefinición de sus funciones como consecuencia del surgimiento de un
nuevo Sistema de Contratación: la contratación masiva. En este sentido, los presupuestos
o pilares fundamentales que sirven de basamento a la teoría clásica no soportan las
nuevas construcciones: el fenómeno jurídico de la contratación masiva. La autonomía
privada, la igualdad jurídica, la fuerza obligatoria contractual, la buena fe y el efecto relativo
de los contratos son nociones que han sido configuradas para responder a un sistema de
contratación válido, el contrato paritario o discrecional, pero la realidad es distinta. Los
contratos, mayoritariamente, ya no se celebran o conciertan dentro del clásico esquema
del contrato paritario; los contratantes, en la mayoría de casos, ya no son determinados,
debido a que han aparecido en el escenario contractual nuevos sujetos protagonistas del
intercambio de bienes y servicios: la empresa y los consumidores.
La autonomía privada, sostenida por las libertades de contratar y contractual, ya no
se encuentra incólume. Las partes ya no negocian el contenido de los contratos. En la
contratación masiva, nos encontramos ante la disyuntiva de “lo tomamos o lo dejamos”.
Pese a los esfuerzos de los legisladores por incorporar dentro de la Teoría General
del Contrato normas relativas a este nuevo fenómeno, consideramos que ello no es
suficiente, en razón de que no se trata de ver este nuevo sistema de contratación como
una excepción. Actualmente, la contratación masiva es la regla. La excepción, son los
contratos paritarios. Si esto es de conocimiento del legislador, consideramos que no tiene
sentido seguir manteniendo dentro del Ordenamiento Jurídico una teoría que no responde
a una realidad mayoritaria. No negamos la validez de sus postulados en cuanto se aplican
a los contratos clásicos o paritarios. Pero, reiteramos, esto constituye la excepción. No
hay razón para tratar de encasillar el fenómeno jurídico de la contratación masiva dentro
del esquema tradicional, ello sería cerrar los ojos ante la realidad.
El derecho no puede tratar de preverlo todo. Los cambios en la realidad se presentan
cuando menos se piensa y de formas que nadie se imagina. La contratación masiva es un
ejemplo vivo. El operador del Derecho tiene que estar atento a las necesidades y exigencias
de la sociedad. La función del derecho es dar solución al conflicto de las personas de una
111. En el Prólogo al libro de Alfredo BULLARD G.: La relación jurídico patrimonial. Reales vs.
Obligaciones. Lima, Ara Editores, 1991, p. 13.
La Contratación Masiva y la Crisis de la Teoría... / Carlos Alberto Soto C.
manera más justa y equitativa; en este sentido, sus estructuras no pueden ser estáticas,
tienen que ser dinámicas.
En suma, tal como están las cosas, es indispensable que el legislador revise las
viejas estructuras de la teoría clásica del contrato, las que no deben ser consideradas
como dogmas. Por el contrario, se ha vuelto necesaria una reformulación de la teoría del
contrato en donde puedan contemplarse a los sistemas de contratación, paritario y masivo,
pero sin pretender encuadrar una dentro de la otra, más bien sí retroalimentarse
mutuamente.
Los juristas argentinos en el novísimo Proyecto de Código Civil de 1998, han
enfrentado el fenómeno de la contratación masiva, admitiéndola como un nuevo sistema
de contratación, hecho que fortalece nuestra hipótesis, en tanto no niegan la existencia de
dos formas de contratar: paritaria o discrecionalmente (como la denominan en el proyecto)
y masiva o predispuesta (como prefieren denominarla). Es importante y trascendental
este proyecto que, de convertirse en ley, colocará a nuestro hermano país a la vanguardia
en materia de legislación civil.
r
Civiles y Modernos de Empresa
Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos
Se dice que desde hace más de ocho siglos, los comerciantes, aprovechando la
ocasión de sus viajes al extranjero, aceptaban mercancías de sus vecinos con el objeto
de venderlos en sus viajes, actuando a nombre propio pero por cuenta e interés ajeno y
obteniendo una retribución a cambio del servicio.
(*) Abogado por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Magister en Derecho Administrativo
y Doctor en Derecho. Estudios de especialización en Derecho Mercantil en la Universidad de
Salamanca—España y de Post-grado en Comercio Exterior en la Escuela de Administración
de Negocios (ESAN). Ex-Decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de Lima. Profesor
Principal en la Facultad de Derecho de la Universidad de Lima. Profesor de la Maestría en
Derecho Empresarial de Universidad de Lima y de la Escuela de Post Grado de la Universidad
Nacional Mayor de San Marcos. Miembro de la Comisión elaboradora de la Ley General de
Sociedades. Ex Presidente del Directorio de Servicios Postales del Perú (SERPOST), Ex
Director de CONASEV, CONACO; CENTROMÍN Perú, Arbitro del Centro de Arbitraje y
Conciliación de la Cámara de Comercio de Lima, del Centro de Arbitraje del C.A.L., de
Consucode, Capeco. Miembro del Instituto Peruano de Derecho Mercantil. ’
90 El Contrato de Comisión Mercantil y s u ... / Oswaldo Hundskopf Excbio
uso de comisionistas ocasionales para dar paso alas agencias o empresas que se dedican
al impulso y realización de la contratación masiva, las cuales con la ayuda de los medios
de comunicación modernos -llámense comunicación electrónica, microondas, satelital,
etc.- han incrementado en progresión geométrica el campo de aplicación de la Comisión
Mercantil.
Ahora bien, luego de esta breve reseña es fácil explicarse el por qué un contrato tan
antiguo no ha perdido su vigencia a través del tiempo. Sin embargo, la existencia de
múltiples posiciones doctrinarias divergentes respecto a la naturaleza jurídica de la
Comisión Mercantil, hacen necesario un análisis al respecto.
A su vez. Manuel Broseta Pont sostiene que “ La com isión es, pues, un m andato
en e l que concurren ciertas notas e s p e c i a l e s considerando las siguientes: a) en
primer lugar, la comisión consiste en la intervención en un acto o en la estipulación de
un negocio jurídico (no de cualquier servicio), en el que el comisionista declara su
propia voluntad, bien sea en nombre propio o en el del comitente; b) en segundo lugar,
1. Artículo 237°.- “Se reputa comisión mercantil el mandato, cuando tenga por objeto un acto u
operación de comercio, y sea comerciante o agente intermediador del comercio el comitente
o comisionista”.
2. GARRIGUES, Joaquín: “Curso de Derecho Mercantil,"Tomo II, sexta edición, Editorial Porrúa,
México, 1984, pág. 102.
3. Estas figuras se encuentran reguladas en los artículos 238°, 239° y 240° del Código de
Comercio.
4. BROSETA P.ONT, Manuel: “Manual de Derecho Mercantil” 5ta. Edición, Editorial Tecnos S.A.
Madrid, 1983, pág. 420.
CONTRATOS iDoctrinu le g 'C iicio r Ju^p'udrnr ,j y Monci^sl 91
el encargo debe tener por objeto un acto de comercio; c) en tercer lugar, el comitente
o comisionista debe ser comerciante. Según el mencionado autor, por el contrato de
comisión se establece entre las partes una relación instantánea (léase eventual) y no
duradera o de tracto sucesivo, criterio con el cual no nos encontramos de acuerdo, al
no encontrarse ajustado a la realidad actual, puesto que hoy en día la naturaleza de
esa relación dependerá del número y naturaleza de las operaciones para las que se
confiera.
Todas aquellas acciones que puedan derivarse del contrato surtirán efecto
entre el comitente y el tercero contratante, ya que debido a la figura de la
representación, es el comitente quien realiza el acto jurídico objeto de la comisión,
razón por la cual en caso de incumplimiento el tercero no podrá accionar contra el
comisionista.
5. Artículo 240°.- “Si el comisionista contratare en nombre del comitente, deberá manifestarlo;
y si el contrato fuera por escrito, expresarlo en el mismo o en la antefirma, declarando el
nombre, apellido y domicilio de dicho comitente.
En el caso prescrito en el párrafo anterior, el contrato y las acciones derivadas del mismo
producirán su efecto entre el comitente y la persona o personas que contrataren con el
comisionista; pero quedará éste obligado con las personas respectivas entre el comitente y el
comisionista.”
92 El Contrato de Comisión Mercantil y s u ... / Oswaldo Hundskopf Exebio
Por otra parte, la comisión mercantil presenta una particularidad con respecto
a su aceptación. Si bien es cierto que las ofertas en el ámbito contractual no generan
un vínculo obligacional, la doctrina ha optado por imponer al comisionista una
obligación precontractual rigurosa: en caso que luego de recibido el encargo, decida
no aceptarlo, deberá comunicarlo al comitente por el medio más rápido posible
(teléfono, fax, e-mail. etc.), debiendo confirmarlo en todo caso, por el correo más
próximo al día en que recibió la comisión. En caso que no lo hiciere. Quedará
obligado a indemnizar por los daños y perjuicios que por ello sobrevengan al
comitente (Artículo 241 °). El eit motiv de esta obligación se encuentra en el carácter
profesional del comisionista, razón por la cual -según la doctrina- el comitente tiene
derecho a presumir que el comisionista, al no responder, está aceptando su encargo,
ya que su actividad habitual es precisamente realizar estos encargos.
9. RIPERT, George: “Tratado Elemental de Derecho Comercial”, Tomo IV, (Traducción de Felipe
zola de Cañizares). Bs. As.. Argentina, 1954, Tipográfica Editora Argentina S.R.L pg. 95.
10. Decreto Legislativo N° 861. de fecha 22 de octubre de 1996.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 95
Bolsa que actúa como contraparte. Sirva de ejemplo la obligación establecida en el inciso
c) del artículo 196° de la Ley del Mercado de Valores.11 A su vez, respalda nuestra
posición el artículo 9o del Reglamento de Operaciones en Rueda de Bolsa, al señalar que
las operaciones obligan a las sociedades intervinientes al cumplimiento de lo que se hubiere
estipulado, salvo que las mismas hubiesen sido dejadas sin efecto por la Dirección de
Mercados.
Sobre la base de lo antes expuesto, resulta claro que la comisión mercantil con
representación no podría incorporar la figura jurídica que regula la relación que surge
entre un agente de intermediación y su cliente en las operaciones que aquellos realizan
en mecanismos centralizados de negociación. En primer lugar, existiría una contradicción
entre la representación del comisionista, el cual quedaría obligado a proporcionar la
identidad del comitente según lo regulado por el artículo 240° del Código de Comercio,
y el deber de reserva, regulado en el artículo 45° de la Ley del Mercado de Valores.12
Este deber de reserva se basa en el principio de reserva bursátil definido por José Tola13
como aquel en virtud del cual debe evitarse que trascienda el conocimiento del nombre
de los compradores y vendedores de los títulos que se negocian en los mecanismos
centralizados de negociación, así como que se suministre cualquier información sobre
dichos comitentes.
Por otra parte, al analizar la comisión mercantil sin representación, se aprecia que
el comisionista actúa en nombre propio al celebrar el negocio objeto de la comisión,
permitiendo una formación objetiva de precios, puesto que el tercero contratante no llega
a conocer la identidad del comitente. Esto trae como consecuencia una disminución en
los costos de transacción en el mercado de valores, debido a que bajo este supuesto no
se hace necesario el adquirir información sobre el tercero contratante, así como constituir
garantías de debido cumplimiento, conceptos que recargarían considerablemente los costos
contractuales. Al interpretar la relación entre los Agentes de Bolsa y los inversionistas
contratantes como una comisión m ercantil sin representación, se genera como
consecuencia que, aún en el caso que el inversionista contratante no cumpla con proveer
los fondos necesarios para la ejecución del acto, el agente intermediario se encuentra
obligado a cumplir su prestación.
Por otro lado, las Sociedades Agentes de Bolsa deben constituir una garantía a
favor de la Comisión Nacional Supervisora de Empresas y Valores (CONASEV) en respaldo
de los compromisos que asume frente a sus comitentes por las operaciones y actividades
realizadas fuera de bolsa e independientemente de sus contribuciones al Fondo de Garantía
de la respectiva bolsa.'4
Diversos .autores respaldan la tesis que las relaciones entre los Agentes de Bolsa
y los inversionistas contratantes deben ser reguladas como una comisión mercantil sin
representación. Podemos citar a José Tola Nosiglia, Fernando Zunzunegui,15Ulises Montoya
Manfredi16 y Fernando Vidal Ramírez,171 8 entre otros.
El hecho de que las relaciones entre los Agentes de Bolsa y los inversionistas
contratantes (léase comitentes) se repute como una comisión mercantil sin representación,
determina que la Sociedad Agente de Bolsa sea quien asuma las responsabilidades en
caso de incumplimiento de los encargos realizados en bolsa, sin embargo, no por esta
razón libera a los comitentes de toda responsabilidad.
En una operación bursátil en la cual se relacionen por encargo de sus respectivos
comitentes dos Sociedades Agentes de Bolsa, y tomando en cuentan las comisiones sin
representación que se ejecutan con motivo del contrato celebrado, ante un eventual
incumplimiento de la segunda Sociedad Agente de Bolsa, la primera se encontrará
legitimada para exigirle el cumplimiento de su prestación. Sin embargo, debido a que la
primera Sociedad Agente de Bolsa se encuentra obligada frente a su comitente ante el
mencionado incumplimiento, éste tiene una vía por medio de la cual puede accionar contra
la segunda Sociedad Agente de Bolsa.
Al revisar el derecho de obligaciones nos encontramos frente a la figura prevista en
el inciso 4 del artículo 1219° del Código Civil, la llamada acción subrogatoria u oblicua.13
Es así como, si bien es cierto que la relación obligatoria surgida se da entre las Sociedades
Agentes de Bolsa contratantes que negocian valores en nombre propio por cuenta de sus
comitentes, así como de éstos frente a sus respectivas Sociedades Agentes de Bolsa,
mediante la así denominada acción subrogatoria u oblicua, el comitente de la primera
Sociedad Agente de Bolsa se encontrará plenamente facultado para dirigirse contra la
primera Sociedad Agente de Bolsa y exigirle el cumplimiento de su prestación.
Podemos concluir entonces, que las relaciones que surgen del contrato celebrado
entre los agentes de bolsa y sus comitentes para actuar como intermediarios en la
negociación de valores mobiliarios deben ser calificados como comisión mercantil sin
representación, siendo la Sociedad Agente de Bolsa la única que deba afrontar las
responsabilidades de las operaciones que se realicen en dicha negociación, sin perjuicio
15. El mencionado autor las define como “Comisión Bursátil”, calificándola como un supuesto
especial de comisión con representación indirecta, en la que el comisionista contrata en nombre
propio sin declarar quien es el comitente.
16. MONTOYA MANFREDI, Ulises: “D e re c h o C o m ercia l", Tomo II, Lima, Editora y Distribuidora
Jurídica Grijley E.I.R. Ltda., 9na. Edición Aumentada y Actualizada, 1998, pág. 357.
17. VIDAL RAMIREZ, Fernando: “La B o ls a de V a lo re s”, Lima, Perú, Cultural Cuzco S.A., Editora,
1998, pág. 330.
18. Artículo 1219.- “E s e fe cto de la s o b lig a c io n e s a u to riz a r a l a c re e d o r p a ra lo s ig u ie n te :
(...)
4. Ejercer los derechos del deudor, sea en vía de acción o para asumir su defensa, con
excepción de los que sean inherentes a la persona o cuando lo prohíba la ley. El
acreedor para el ejercicio de los derechos mencionados en este inciso, no necesita
recabar previamente autorización judicial, pero deberá hacer citar a su deudor en el
juicio que promueva”.
98 El Contrato de Comisión Mercantil y s u ... / Oswaldo Hundskopf Exebio
de las acciones que los comitentes tengan contra aquélla, en virtud de la acción subrogatoria
u oblicua contemplada en el Código Civil.
BIBLIOGRAFÍA
• CODIGO DE COMERCIO.
• VIDAL RAMIREZ, Fernando: “La Bolsa de Valores”, Lima, Perú, Cultural Cuzco
S.A., Editora, 1998.•
ASPECTOS LEGALES
MODELO DE CONTRATO DE
COMISIÓN MERCANTIL DIRECTA
Señor Notario:
Sírvase extender en su Registro de Escrituras Públicas, una de COMISIÓN
MERCANTIL DIRECTA, que celebran:
ANTECEDENTES
CLÁUSULA PRIMERA.- EL COMITENTE es una persona jurídica de derecho
privado, constituida bajo el régimen de la Sociedad A nónim a................. que tiene como
objeto social la comercialización de equipos informáticos. Y dispone EL COMITENTE de
.............. lotes importados de computadoras ............. , marca ........................ modelo
........................ año de fabricación....................y .........................
De otra parte, EL COMISIONISTA es una persona natural dedicada a la actividad
de comisionista mercantil, de amplia experiencia y de reconocida acreditación.
Las partes contratantes acuerdan que la vigencia del presente contrato puede
terminar con anterioridad a la fecha prevista en esta misma cláusula, en caso que EL
COMISIONISTA cumpla íntegramente con el encargo asignado antes del vencimiento del
plazo señalado.
El laudo del Tribunal Arbitral será definitivo e inapelable, así como de obligatorio
cumplimiento y ejecución para las partes.
DOMICILIO
Sírvase agregar usted Señor Notario lo que fuere de ley, inscribiendo el presente
contrato en su registro de escrituras públicas.
COMITENTE EL COMISIONISTA
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 103
J URISPRUDEN CIA
S e r v ic io s g u E p u e d e n c o n s id e r a r s e c o m is ió n m e r c a n t il
“(...) Que de las definiciones contenidas en los citados documentos, puede inferirse
que para la existencia de una operación de exportación, es necesario el desarrollo de una
actividad, por un sujeto domiciliado en un país, a favor de otro que domicilia en un país
distinto y a cambio de una contraprestación;
Que en ese sentido, para calificar una operación como exportación de servicios,
resultaba relevante determinar si el consumo de éstos se había producido en el exterior,
por lo que era Indispensable determinar el criterio de vinculación que nuestra legislación
adoptaría para gravar tal consumo;
Que en el caso de autos, la Administración ha verificado que la recurrente había
prestado servicios en el país a favor de personas no domiciliadas, las cuales pagaban una
retribución a la recurrente como contraprestación;
Que ante la falta de precisión en la norma del Impuesto General a las Ventas respecto
a los requisitos que debía cumplir una operación para calificar como exportación de
servicios, se debe concluir que la actividad desarrollada por la recurrente implica una
exportación de tal naturaleza, por lo que procede dejar sin efecto los reparos formulados
por los períodos anteriores a la vigencia del Decreto Supremo N° 269-91-EF;
Que en ese orden de ideas, cuando lo ley hacía referencia a «.. que dichos servicios
sean utilizados económicamente en el exterior», debe entenderse que se estaba refiriendo
104 El Contrato de Comisión Mercantil y s u .. ./ Oswaldo Hundskopf Exebio
C o m is ió n m e r c a n t il : O p e r a c io n e s g r a v a d a s c o n e l IGV
Sumíl i a - Para establecer si un producto es consumido o utilizado en el
país, deberá tomarse en cuenta el lugar donde el usuario lleve
a cabo el primer acto de disposición del producto. Conforme
a lo cual, la comisión mercantil en la condición de agente de
compra, realizada por un domiciliado, no califica como una
u tiliza ció n de se rvicios en el país, ya que se estaría
disponiendo del servicio en el extranjero.
RTF N° 225-5-2000
(28/03/2000)
Tribunal Fiscal
I. INTRODUCCIÓN
Tal como los derechos subjetivos en general, los derechos sobre los signos distintivos
(entiéndase como signos distintivos la marca, patente, nombre comercial,) son susceptibles
de ser transferidos. Así mismo, el derecho a utilizar un signo distintivo puede ser objeto(*)
(*) Abogado por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Magister en Derecho Administrativo
y Doctor en Derecho. Estudios de especialización en Derecho Mercantil en la Universidad de
Salamanca-España y de Post-grado en Comercio Exterior en la Escuela de Administración
de Negocios (ESAN). Ex-Decano de la Facultad de Derecho de la U. de Lima. Profesor Principal
en la Facultad de Derecho de la Universidad de Lima. Profesor de la Maestría en Derecho
Empresarial de la Universidad de Lima y de la Escuela de Post Grado de la Universidad
Nacional Mayor de San Marcos. Miembro de la Comisión elaboradora de la Ley General
de Sociedades. Ex Presidente del Directorio de Servicios Postales del Perú (SERPOST),
Ex-Director de CONASEV, CONACO; CENTROMÍN Perú. Arbitro del Centro de Arbitraje y
Conciliación de la Cámara de Comercio de Lima, del Centro de Arbitraje del C.A.L., de
Consucode, Capeco. Miembro del Instituto Peruano de Derecho Mercantil.
108 Contratos de Licencia sobre Signos Distintivos / Oswaldo Hundskopf Exebio
Existen por lo tanto, dos tipos básicos de contratos mediante los cuales circulan los
derechos para el aprovechamiento económico de los signos distintivos en general: los
contratos de cesión, en virtud de los cuales el titular de un signo distintivo transfiere a un
tercero sus derechos sobre los mismos y los contratos de licencia, en los que el titular
retiene sus derechos sobre el signo distintivo, autorizando únicamente su utilización o
explotación.
II. DEFINICIÓN
1. CASADO CERVIÑO, Alberto: “Relieve del control de la licencia de Marca”, pág. 125.
2. CABANELLAS, Guillermo: “Derecho de Marcas”, pág. 61.
3. CABANELLAS, Guillermo: “Derecho de Marcas”, pág. 367.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 109
- Mientras que los derechos del licencitario son por naturaleza limitados en el
tiempo, los del cesionario de un derecho no tienen más límite que el que
marque la vida de dicho derecho.
1. Las patentes.
Del contrato de licencia se derivan, con carácter general, una serie de ventajas
tanto para el licenciante, como para el licenciatario. El beneficio del licenciante pude ser
doble. Por un lado percibirá el canon o royalti que haya acordado con el licenciatario, que
representa la contraprestación de la autorización concedida por el licenciante. Pero,
además del canon el titular del signo distintivo se beneficiará del incremente de la notoriedad
del “Goodwill” del mismo como consecuencia de su uso por el licenciatario, siempre que
adopte las medidas necesarias para velar por un adecuado uso del signo, y de la creación
de nuevas posibilidades de venta para sus productos o servicios distinguidos en el caso
de licencia de marca.
Más difícil es la situación en el caso de daños sufridos por terceros con los
cuales el licenciante no tiene relación contractual alguna: en tal efecto los terceros
perjudicados sólo podrán accionar sobre la base de algún tipo de responsabilidad
extracontractual.
1. Pago de regalías
Cabe señalar que el pago de regalías no resulta una obligación implícita del
contrato, pues como se ha visto existen las licencias de carácter gratuito.
2. Obligaciones de no competir
Del mismo modo la Ley de Propiedad Industrial regula de forma más específica
lo relacionado con los contratos de licencia.
3. Código Civil
El Código Civil en su art. 884 del Código Civil. Señala que las propiedades
incorporales se rigen por la ley especial. De este enunciado se desprende claramente
la aplicación supletoria de este cuerpo legal. Así mismo es importante señalar que
el mencionado artículo debe concordase con el art. 886 inc. 6, el mismo que señala
que son muebles los derechos patrimoniales de autor, inventor, de patentes, nombres,
marcas y similares.
LEGISLACIÓN APLICABLE
CONTRATO INTERNACIONAL DE
LICENCIA SOBRE SIGNOS DISTINTIVOS
ANTECEDENTES:
TIPO DE LICENCIA
DE LA SUBLIBENCIA
ASISTENCIA TÉCNICA
OBLIGACIONES DE LICENCIATARIO
REGALÍAS DE LICENCIA
DÉCIMO CUARTO.- EL LICENCIATARIO se compromete a pagar, en calidad de
regalías de licencia, e l ... % del precio facturado a sus clientes por los objetos vendidos
sobre la base de la licencia -con deducción de eventuales descuentos e impuestos
sobre la venta (v.g. impuestos sobre el volumen de las ventas), excepto los descuentos
sobre pago al contado- con entrega ex fábrica sin embalaje. Los gastos accesorios,
tales como......se descontarán en cuanto hayan sido facturados a los clientes por
separado.
EL LICENCIATARIO se compromete a pagar la suma d e ........ % por cada objeto
vendido sobre la base de la licencia.
EL LICENCIATARIO se compromete a pagar en calidad de regalías de licencias,
los siguientes importes al .... de c a d a ...........
LICENCIA MÍNIMA
DÉCIMO QUINTO.- Con independencia de las ventas realizadas efectivamente por
EL LICENCIATARIO, el monto total de las regalías de licencia no deberá ser inferior a:
................en el primer año
................en el segundo año
................ en los años terceros
Cuando el contrato haya estado en vigor por menos de 12 meses dentro de una
año calendario, se procederá a un correspondiente ajuste de la licencia mínima.
120 Contratos de Ucencia sobre Signos Distintivos / Oswaldo Hundskopf Exebio
IMPUESTOS
DÉCIMO SEXTO.- Los impuestos directos que se exijan en el país de EL
LICENCIATARIO sobre los pagos efectuados al LICENCIANTE con arreglo a este contrato,
serán de cargo de EL LICENCIANTE. Los impuestos sobre el volumen de operaciones
percibidos sobre esos pagos en el país de EL LICENCIATARIO, serán de cargo de este.
Cuando por la ley del país de EL LICENCIATARIO los impuestos sobre el volumen
de operaciones tengan que ser pagados por EL LICENCIANTE, EL LICENCIATARIO deberá
apoyar a EL LICENCIANTE en el cumplimiento de todas las obligaciones y formalidades.
Los impuestos directos y los impuestos sobre el volumen de operaciones que se
exijan en el país DE EL LICENCIATARIO sobre los pagos efectuados a EL LICENCIANTE
con arreglo a este contrato, correrán a cargo de EL LICENCIATARIO.
Cuando por la ley del país de EL LICENCIATARIO los impuestos sobre el volumen
de operaciones tengan que ser pagados por EL LICENCIANTE, EL LICENCIATARIO deberá
apoyar a EL LICENCIANTE en el cumplimiento de todas las obligaciones y formalidades.
DEL SEÑALAMIENTO
DÉCIMO SÉPTIMO.- EL LICENCIATARIO se obliga a numerar correlativamente
todos los objetos que fabrique sobre la base del contrato de licencia y que entregue a sus
clientes, y a aplicarles un rótulo que rece: “Licencia ....... (Eventualm ente) EL
LICENCIATARIO está autorizado (obligado) a aplicar al objeto, a más de su propia marca,
la marca de EL LICENCIANTE, registrada por este con fe c h a ...... e n .......
DE LA LIQUIDACIÓN Y PAGO
DÉCIMO NOVENO.- La liquidación por las regalías de licencia se efectúa al final de
cada trimestre calendario. EL LICENCIATARIO está obligado a enviar dentro de un mes
de vencido cada plazo de liquidación, una rendición de cuentas completa y a remitir el
importe resultante dentro de ese mismo plazo.
b) El importe que se ha de pagar deberá girar en .... La conversión tendrá que hacerse
al tipo de cambio vigente el último día de plazo de liquidación.
Las partes se pondrán de acuerdo de todas las medidas que se han de tomar para
impedir que terceros realicen una imitación del objeto de la licencia.
La parte que decida entablar una demanda soportará las eventuales costas; por
otra parte, será ella la que se beneficie de las sumas que la acción devengue. La otra
parte le proporcionará en caso necesario las autorizaciones y firmas que se requieran.
Cuando las dos partes estén de acuerdo en accionar conjuntamente, las costas y los
beneficios resultantes se debieran entre ellas en la proporción siguiente:
* Todas las controversias de este contrato o en conexión con él, serán resueltas con
carácter definitivo y efecto obligante conforme a la Ordenanza de Transacciones y
arbitraje de la Cámara Comercio, por uno o más árbitros designados con arreglo a
dicha Ordenanza, con exclusión de la vía judicial ante los tribunales estatales.
* Todas las controversias que surgieren de este contrato o en conexión con él, serán
resueltas con carácter definitivo y efecto obligante conforme a la Ordenanza de
arbitraje del ORGALIME. La misma regla se aplicara igualmente a la decisión sobre
la competencia del tribunal arbitral y la validez del compromiso arbitral.
LICENCIANTE LICENCIATARIO
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 123
J u r is p r u d e n c ia
C o n t r a t o d e l ic e n c ia d e u s o d e u n a m a r c a c o m e r c ia l :
D e f in ic ió n
RESOLUCIÓN N° 0599-2005-TPI-INDECOPI
EXPEDIENTE N° 177971-2003
P r o t e c c ió n d e n o m b r e c o m e r c ia l
RESOLUCIÓN : N° 387-1998-TPI-INDECOPI
Publicado: 19 de junio de 1998
Tribunal de Defensa de la Competencia y de la Propiedad Intelectual
Expediente : N° 259819
Accionante : GRAN FIDUCIARIA S.A. / Emplazado: AFP HORIZONTE S.A.
1. INTRODUCCIÓN
El contrato de licencia de know how y, en general, todos los contratos que transfieren
tecnología, constituyen desde hace mucho los vehículos Ideales para transmitir información
y conocimientos de aplicación Industrial y comercial, entre las empresas.
Hoy en día la importancia del know how no está en discusión, pero sí, lo referente a
su naturaleza jurídica y si debe o no ser considerado un derecho de propiedad, pues,
(*) Abogada por la Universidad de Lima. Máster en Derecho Empresarial por la Universidad de
Lima (2003). Diplomada en Estudios Avanzados en Derecho Civil (DEA) por la Universidad
Carlos III de Madrid (2007). Master en Droit por la Université Catholique de Louvain-La-Neuve
en Bélgica (2007).
126 El Contrato de Ucencia de Know How y la Regulación / Olga Alcántara Francia
dependiendo de ello, la protección jurídica variará. Por eso hemos creído conveniente
abordar en primer lugar el tema mencionado, así como lo referente al contrato de licencia
y luego, en los ítems posteriores, analizar la importancia del cumplimiento de las
obligaciones poscontractuales de confidencialidad y no competencia, y la necesidad de
su regulación en el Perú.
Gómez Segade4 5, se opone a quienes afirman que el know how es una simple
situación de hecho. Según la opinión de este autor estaríamos frente a un bien que
posee valor patrimonial y aptitud para ser objeto de negocios jurídicos; estaríamos
en presencia de un auténtico bien inmaterial, de una idea fruto de la mente humana
que se plasma en objetos corpóreos (fórmulas, diseños, apuntes, esquemas, etc.),
pero sobre el cual no recae un derecho de exclusiva. Este bien inmaterial se identifica
con la figura del secreto industrial, el cual está protegido por normas de competencia
desleal que no otorgan derechos de exclusiva, constituyéndose en una protección
fundamental, a diferencia de otros bienes inmateriales.
4. Artículo 117 del decreto legislativo 823: “Son susceptibles de protección como secreto
industrial tanto el conocimiento tecnológico integrado por procedimientos de fabricación y
producción en general, como el relativo al empleo y aplicación de técnicas industriales,
resultantes del conocimiento, experiencia o habilidad intelectual que guarde una persona
con carácter confidencial y que le permita obtener una ventaja competitiva o económica
frente a terceros”.
5. GÓMEZ SEGADE, citado por LAQUIS, Manuel Antonio: ¿ E s e l k n o w h o w u n d e re c h o de
Revista del Derecho Industrial 10-12, 1982, p. 291.
p ro p ie d a d ?
128 El Contrato de Licencia de Know How y la Regulación / Olga Alcántara Francia
- El titular del know how tiene el derecho .de que nadie use ni disponga
de su know how contrario a derecho, con el deber correlativo si los
terceros lo obtuvieron impropiamente.
- El titular tiene el privilegio de usar y disponer del know how y los terceros
deben respetarlo lo haga o no.
- El titular tiene la facultad de disponer del know how por venta y licencia,
y de obtener una orden judicial contra el uso o disposición del know
how por parte de terceros, que lo obtengan impropiamente; asimismo,
por los daños y perjuicios correspondientes.
Por otro lado, es en el artículo 122 que se considera el know how como
objeto pasible de contratación, pues, reconoce el derecho de aquél que guarde
un secreto industrial de licenciarlo o cederlo a terceros.
8. MASSAGUER, citado por CHULIA VICENT, E.: “Aspectos jurídicos de los contratos atípicos”.
Tomo I. Barcelona: Bosch, 1994, p. 220.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Junumnionna y Modelos' 131
y, con este fin, se obliga a ponerlo en su efectivo conocimiento; en virtud del cual el
licenciatario o receptor también se obliga, por su lado, a satisfacer un precio cierto
en dinero o en especie, fijado normalmente en forma de suma de dinero calculada
en función del volumen de fabricación o ventas de productos o servicios realizados
con empleo de know how licenciado.
9. ARGERI, Saúl: “Contrato de know how”. Revista jurídica Argentina La Ley. Tomo C, 1981, p.
1.225.
132 El Contrato de Ucencia de Know How y la Regulación / Olga Alcántara Francia
Kleiderm acher11, tiene una opinión contraria. De acuerdo con este autor, la
determinación del régimen de responsabilidad aplicable se define por la fuente de la que
nacen las obligaciones incumplidas, careciendo de importancia si el contrato ha expirado
o no. Según su criterio:
10. ALTERINI, Atilio Aníbal citado por KLEIDERMACHER, J. Franchising. Aspectos económicos
y jurídicos. Buenos Aires: Abeledo Perrot, 1993, p. 181.
11. KLEIDERMACHER, J. Op. cit., p. 181.
134 El Contrato de Licencia de Know How y la Regulación / Olga Alcántara Francia
• Obligación de confidencialidad
• No podrá publicitar los productos en tales territorios, así como tampoco podrá
establecer en ellos ninguna sucursal ni mantener en estos ningún almacén
de tales productos.
3.2. Tratamiento legislativo en el Perú: Decreto Ley 26122 y Decreto Legislativo 823
A diferencia del decreto legislativo 823 que en su artículo 117 protege sólo el
secreto industrial, el decreto ley 26122, en opinión de Kresalja15 se interesa en los
secretos empresariales, es decir, los que pueden tener carácter tecnológico,
comercial o financiero. La protección jurídica está orientada a evitar, en primer lugar,
su utilización ilegal y, fundamentalmente, proteger la posición adquirida por un
competidor en base a su propio esfuerzo.
16. Coincide con nuestro parecer Baldo Kresalja, quien además afirma que en el Perú no existe
norma alguna que se ocupe de la violación de secretos después de la terminación del vínculo,
quedando sujeto a lo que las partes puedan directamente acordar.
138
En el último párrafo, la ley regula una situación especial que puede también
presentarse en la realidad. Se establece en la norma que no es indispensable, para
configurar el supuesto de violación de secretos, la participación del infractor en el
tráfico económico y la relación de competencia con el titular del secreto. La deslealtad,
en todos los casos, se consuma por el hecho de la comunicación, pues la ley, como
ya expresamos, está destinada a proteger la titularidad legítima sobre el secreto.
Desconocemos las razones por las cuales el legislador no se ocupó del tema,
sin embargo, pensamos que luego del transcurso de casi ocho años de vigencia de
la Ley de Competencia Desleal es necesaria una revisión, toda vez que ya se han
presentado algunos casos de incumplimiento poscontractual.
una sanción pecuniaria o indemnización por dicha violación, entonces el titular deberá
exigir el pago o reparación y la cesación de los actos violatorios, ya sea a través de
un procedimiento judicial o arbitral.
Si existiera una regulación legal adecuada, este problema tendría quizá una
solución feliz. Veamos por qué.
tendremos más alternativas en el mercado que nos permitan obtener confort y rapidez
en los servicios, entre otros.
5. CONCLUSIÓN
ASPECTOS LEGALES
ANTECEDENTES
OBJETO
OBLIGACIONES DE LA LICENCIANTE
Queda entendido que los salarios y demás obligaciones sociales de los dos
empleados antes referidos serán de cuenta exclusiva de la LICENCIANTE, quedando
liberado, EL LICENCIATARIO de cualquier responsabilidad por dichos conceptos.
PAGO Y REGALIAS
Esta regalía se hará efectiva mediante pagos trimestrales y sobre las ventas brutas,
para lo cual EL LICENCIATARIO facilitará a LA LICENCIANTE toda la información, libros,
facturas, etc., que sean precisos para determinar el importe a pagar.
Queda entendido que el pago de la regalía será obligatorio a partir del segundo año
de vigencia de este contrato, es decir, a partir d e l......... d e ............. d e .............
NOVENO: El presente contrato tendrá una duración de .... años, contados a partir
de esta fecha.
DÉCIMO: Una vez finalizado el plazo de duración pactado, las partes podrán
prorrogarlo de común acuerdo.
DÉCIMO TERCERO: En caso de conclusión del contrato sea cual fuere la causa,
EL LICENCIATARIO se compromete a devolver a LA LICENCIANTE toda la documentación
recibida en este acto y la que pueda recibir en un futuro en relación con el know how
cedido, y a abstenerse de continuar empleando en su producción las fórmulas y
procedimientos desarrollados por LA LICENCIANTE.
DÉCIMO CUARTO: En caso de dudas sobre la interpretación o ejecución de este
contrato, las partes se someten a arbitraje de derecho conforme a la decisión de tres
árbitros, que serán designados; uno por cada una de las partes y el tercero de común
acuerdo por los dos árbitros restantes.
DÉCIMO QUINTO: Las partes señalan para todos los efectos, los domicilios
especificados en la parte introductoria del presente documento, y se someten al fuero de
los jueces y tribunales de la ciudad d e .....
En fe de lo anterior las partes han firmado este contrato de know how. En señal de
conformidad ambas partes suscriben el presente documento a lo s .......... días del mes
de.............de..............
LICENCIANTE LICENCIATARIO
144 El Contrato de Licencia do Know How j la Regulación / Olga Alcántara Francia j
J URISPRUDEN CIA
Información Confidencial
Sumilla.- Constituye información confidencial aquella cuya divulgación
implicaría una ventaja significativa para un competidor o
tendría un efecto significativamente desfavorable para la
persona que proporcione la información o para un tercero del
que la haya recibido. No corresponde declarar la reserva y
confidencialidad de la información, toda vez que no se ha
verificado la existencia de elemento o material informativo
alguno cuya divulgación im plique otorgar una ventaja
significativa a los com petidores u ocasionar un efecto
significativamente desfavorable para la solicitante.
RESOLUCIÓN : N° 0065-2004/TDC-INDECOPI
EXPEDIENTE : N° 001-2002-CDS
S p o n so rin g . M o t m a g iq u e . Q u i a e n fin a c q u is
d é fin itiv e m e n t s o n d ro it d e c ité d a n s I ’u n ive rse
d e la co m m u n ica tio n .
F ra n g o is Ftouffiac?
1. Abogado. Ms. en Derecho con mención en Derecho Civil Empresarial por la Universidad
Privada Antenor Orrego (Trujillo). Diplomado Internacional en Derecho de Contratos. Diplomado
en Derecho Empresarial Comercial. Socio Fundador del Estudio Jurídico Silva Cueva &
Asociados. Consultor de diferentes instituciones públicas y privadas. Autor de numerosos
artículos en diferentes revistas nacionales y extranjeras.
2. En el prólogo al libro de SAHNOUN, Pierre y DOURY, Nathalie; Comment chercher un sponsor:
modo d'emDloi. 2o ed., Chotard et Associes, París, 1990, p. 15.
148 El Contrato de Esponsorízación / José Luis Silva Cueva
1. NOTAS PRELIMINARES
Es sabido que uno de los fenómenos más llamativos del derecho patrimonial de
hoy es la aparición, en los últimos años, de una larga serie de contratos nuevos, muchos
de los cuales se han importado del derecho anglosajón, mientras que otros son solamente
nuevas variedades de los tipos contractuales tradicionales, como es el caso del contrato
de esponsorízación, que exam inarem os con claridad y profundidad en nuestra
investigación.
Parece que este fenómeno se debe a la razón económica de la “externalizaclón” de
funciones y servicios que antes realizaban directamente las empresas, en tanto que ahora
suelen encargarse a terceros, señaladamente a otras empresas especializadas en
determinados servicios. Es este fenómeno económico el que ha impulsado, en el plano
jurídico, una tenaz multiplicación de los contratos; pues, como consecuencia del mismo,
los tipos tradicionales se han desdoblado y subdividido dando lugar a nuevas figuras
contractuales que, aunque adquieren pronto un nomen iuris propio, en muchas ocasiones
apenas reciben un régimen jurídico fragmentario e incompleto.
Una de las nuevas figuras, es el contrato de patrocinio publicitario, que es la
d en o m in a ció n legal del c o n tra to co no cid o h a b itu a lm e n te com o c o n tra to de
esponsorización, en cuya virtud el patrocinado se obliga a realizar una actividad deportiva,
benéfica, cultural, científica u otra análoga, a cambio de un precio y con la singular
obligación de colaborar en la publicidad del patrocinador. Contrato que, con ser de una
tipicidad social bien definida cuenta con un régimen jurídico propio tan escaso como vago,
que es lo que se trata de esclarecer en este proyecto y postulación como incorporación a
la legislación peruana.
En la legislación comparada, el problema se complica, tal es el caso español, que
por la dificultad añadida que representa el nuevo régimen del mecenazgo previsto por el
Título II de la Ley 30/1994, de 24 de noviembre, que contempla una figura de función casi
idéntica a la anterior, pero de estructura y naturaleza completamente diferentes. Se trata
del llamado convenio de colaboración empresarial en actividades de interés general, por
el que el patrocinador da una ayuda económica a una entidad sin fin de lucro, a cambio de
difundir la participación del patrocinador, al objeto de realizar actividades de índole
semejante a las que hemos apuntado antes. Es claro que, según estas definiciones legales,
el nuevo convenio de colaboración es casi igual que el patrocinio publicitario, pero es
igualmente claro que su régimen es, sin embargo, bien distinto del que se aplica a este
último. Nos encontramos, pues, ante figuras paralelas pero muy diversas entre sí. VICENTE
opina que ante el primer caso estamos ante una donación modal; en el otro, en cambio,
nos hallamos frente a un típico contrato oneroso3.
De aquí surge, por consiguiente, entre otras cosas, el motivo de este trabajo, que
responde al esquema clásico de la doble mirada, una externa y otra interna. En cuanto a
la primera, anhelamos hacer una breve presentación de los datos normativos básicos, el
trabajo comprenderá un amplio y detallado estudio del concepto de esponsorización, sus
principales características, sus relaciones con figuras afines y, muy especialmente, la
difícil delimitación entre el patrocinio y el mecenazgo. Por lo que respecta a la última,
aclarados - según, la doctrina española- así los rasgos del contrato de esponsorización,
3. EL FENÓMENO ESPONSORIZACIÓN
Si se preguntara a alguien ajeno al mundo jurídico qué es la esponsorización,
probablemente aventuraría una definición bastante simple, pero, a la vez, coincidente con
su acepción técnica y nos diría que esponsorizar es financiar o ayudar económicamente
a alguien para que pueda llevar a cabo su actividad, de carácter deportivo, científico o
cultural, con la finalidad de que se sepa.
Desde un punto de vista técnico-jurídico, GALGANO lo ha definido como “el contrato
por el que un empresario, esponsor, con la finalidad de aumentar la notoriedad de sus
signos distintivos, entrega una cantidad de dinero, o de bienes y servicios, al organizador
de manifestaciones deportivas o de iniciativas culturales, de espectáculos televisivos,
etc., o de un personaje individual del deporte, del espectáculo (esponsorizado), para que
éste publicite, en el modo previsto en el contrato, los productos o la actividad del
empresario”6.
Estamos pues ante un fenómeno socioeconómico que en los últimos años está
teniendo una gran importancia, la cual es debida a factores diversos, tales como la escasez
de recursos públicos así como el interés que para el esponsor representa el que la sociedad
le reconozca su labor de promotor y de patrocinador de determinadas actividades de
interés general; reconociendo que en la esponsorización se mide en publicidad.
Hemos extraído del internet -d e las páginas oficiales-, algunas noticias que nos
amplía el panorama de la esponsorización y de los millones que están en juego. Veamos, el
Valencia, club de fútbol de Primera División de la Liga Española firmó un contrato de 300
millones de pesetas con la empresa Metrored hasta el 30 de junio del 2002. El mejor golfista
del mundo, Tiger Woods, de veintitrés años, firmó con Nike por 90 millones de dólares, el
contrato es de cinco años. Nike también firmó con la selección brasileña de fútbol por 160
millones de dólares. El Manchester United es el club de fútbol que recibe la mayor
esponsorización en la historia del fútbol; los 30 millones de libras esterlinas que le da la
empresa de telecomunicaciones Vodafone por aparecer cuatro años en su camiseta. El
contrato de Audi con el Club alemán Bayern Munich -vigente desde el 01 de junio de 2002
hasta el 30 de junio de 2008-, por el cual le suministrará 50 automóviles para los jugadores
y la directiva, además de 5 millones de euros, por temporada, por derechos publicitarios.
Como se sabe este club de fútbol tenía un contrato con Opel, la competencia de Audi, que
recién finalizaba el 30 de junio de 2003; sin embargo, tuvo que resolver por las dificultades
económicas que sufre la sucursal de la General Motors. De todas maneras y como todo
dinero es bienvenido, el esponsor principal es la Deutsche Telekom que pagó 120 millones
de euros hasta el 2008 (20 millones por temporada), por la publicidad en las camisetas.
En el Perú8, Cervecería del Sur, compañía que anunciaba su producto -Cerveza
Cuzqueña— en la camiseta del Club Universitario de Deportes, firmó un convenio que
incluía publicidad en camisetas, buzos, maletines, chalecos de entrenamiento, la tarjeta
de crédito —que nunca se hizo realidad—; el propósito de esta acción de marketing era
aumentar la simpatía hacia la marca y mejorar su posicionamiento en el mercado limeño.
JUAN DE ANDRÉS, Amado: Mecenazgo y patrocinio: las claves del marketing del siglo XXI.
EDITMEX, Madrid, 1993, p. 9
Vid. Mucho más que camisetas: el mercado de sponsor crece en el país. Business. Mercados
Consultora y Publicaciones S.A. Año 2, N° 7, Abril 1995; pp. 60-63.
CONTRATOS f Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 151
Ahora, vemos los resultados, los logros son bastante tangibles, superaron las metas de
cremiento previstas en más de 50% y además elevaron significativamente la participación
de la cerveza en el mercado limeño. Además, Cervecería del Sur apoya al deporte de la
Tabla, las competencias automovilísticas y el Tenis.
Antes, a la camiseta del Club Universitario de Deportes, la esponsorizaba Anchor,
que como se recuerda, era un producto importado que para cuya introducción utilizó la
camiseta del club.
Todo este fenómeno antes descrito se conoce como esponsorización9, en efecto,
se puede observar que esta última forma de darse a conocer una empresa es más
“respetuosa” con el consumidor, a quien siempre se dirige la publicidad, porque no le
muestra abiertamente su producto o su servicio y le incita directamente al consumo, sino
que le proporciona un espectáculo de su gusto y a la vez que el espectador lo contempla
se siente agradecido a quien lo ha hecho posible, el esponsor. Esta persona, sin ser muy
consciente de ello, pasa de mero espectador a consumidor virtual de los productos del
esponsor, a quien, al menos, le va a otorgar su reconocimiento. Dado este mecanismo de
simpatía que en el espectador se produce es por lo que la publicidad se consigue de
manera indirecta, a través de la actividad desarrollada por el deportista, del éxito de una
restauración. A esta forma de publicidad se la conoce como de retorno, porque vuelve a la
empresa mediante actividades que no son en sí publicitarias10.
El esponsor ha conseguido así su pretensión: la revaloración de su imagen de marca
para distinguirse de otras empresas del mismo ramo, de la competencia11. El mensaje lanzado
de manera sutil e indirecta comienza a dar sus frutos; ha puesto a su favor al espectador y
esta buena disposición le garantiza al menos dos cosas. De un lado, la mencionada mejora
de imagen, porque va a hablar bien de él, y de otro, aumento de ventas, si el espectador
decide comprar un producto de ese mercado. En este sentido se ha dicho, con razón, que la
esponsorización es una técnica de comunicación a doble escala, ya que, de un lado, tiene
a revalorizar la imagen de marca y, de otro, a aumentar las ventas12.
Por lo tanto, la esponsorización es un instrumento publicitario alternativo, la cual,
contemplada, sólo desde este prisma ha contribuido a una cierta confusión sobre la figura.
Así, los autores que han estudiado este fenómeno desde el exclusivo punto de
vista del marketing publicitario, caen en profundas contradicciones desde la óptica jurídica13,
especialmente cuando identifican al esponsor con el mecenas. Así, a la vez que no pierden
ocasión para proclamar la intención de “ayuda” y la finalidad de mecenazgo de la empresa
20. Para LOBATO GÓMEZ, A proxim ación a la figura del “m erchandising”. Revista de Derecho Mercantil.
No. 195, 1990, p. 137, todos los anglicismos no son más que unos barbarismos, lo cual en parte
es cierto, pero también es verdad que en muchas ocasiones las traducciones literales no llegan a
precisar del todo la figura, tal y como ocurre con la de m erchandising, traducida por licencia
colateral o mercadeo. Una buena lista de contratos terminados en “ing”, en MALAURIE, Philippe
y AYNES, Laurent; D ro it civil. Les contrats spéciaux. 2° ed., Cujas, París, 1988, p. 40, y en BIN,
Marino; La circoiazione internazionaie d e i m od e lli contratualli. En Francesco GALGANO; Contratto
e Impresa. No. 2, 1993, CEDAM, Padova, p. 476, con una amplia lista de contratos de empresa
con ‘tonalidad exótica ". Con modelos, ROSSI, Cario; N u o vissim i contradi. FAG Milano, 1983. En
España, CHULIÁ VICENT, Eduardo y BELTRÁN ALANDETE, Teresa; A sp e cto s Juríd ico s de los
C ontratos A típicos. Bosch, Barcelona, 1995, T.ll.
21. Sobre el significado y sentido de la sp o n sio , IGLESIAS, Juan; D e re c h o rom a n o . In stitu cio n e s
d e D e re c h o p riv a d o . Ariel, Barcelona, 1985, p. 387, “la sp o n sio , en su primera aplicación, es
una promesa solemne que hace el fiador al acreedor, y no al deudor a éste; el o b lig a tu s es el
s p o n s o r”; PUGLIESE, Giovanni; In s titu z io n id id iritto rom a n o . 2° ed., Giappichelli, Torino, 1998,
pp. 149 y ss.; GUARINO, Antonio; D iritto p riv a to rom ano. 9° ed., Jovene, Napoli, 1985, p. 858
y D'ORS, Alvaro; D e re c h o p riv a d o rom a n o . 8° ed., EUNSA, Pamplona, 1991, p. 485. Para un
estudio detenido sobre la institución, CORNIOLEY, Pierre; L e s o rig in e s d e la sp o n sio . Labeo
Rasseana Diritto Romano. 1989-1, pp. 28 y ss.
22. Así se expresa, través de artículos, los españoles, Juan Bautista JORDANO BAREA; Los
c o n tra to s a típ ic o s (1953); C o n tra to s m ix to s y u n ió n d e c o n tra to s ("1951), CASTRO LUCINI,
L o s n e g o c io s ju ríd ic o s a típ ic o s (1974), Renato CLARIZIA: C o n tra d i in n o m in a ti (1988). Por su
parte, LAPOYADE, op. Cit., p. 130, el contrato de esponsorización es un contrato evidentemente
innominado. En igual sentido, el italiano, Enzo ROPPO, I “n u o v ic o n tr a d i' fra a u to n o m ía p riva ta
e in te n /e n ti d e l le g is la to re . N o tre m in im e (1992) y CHULIÁ y ALANDETE, op. Cit., T.l y T.ll.
23. Critica la menciona equivalencia, GIACOBBE, Emanuela; A tipicitá d e l contrado e sponsorizzazione.
Rivista di diritto civile. 1991, fase. 4 (agosto), pt. 2, p. 400. COLLART DUTILLEUL, Frangois y
DELEBECQUE, Philippe; C o n tra ts civ ils e t c o m m e rcia u x. 2° ed., Dalloz, Paris, 1993, p. 11, al
referirse a las nuevas figuras contractuales dicen que algunos de estos contratos tienen en la
vida negocial un nombre, pero carecen de regulación legal, como le ocurre al contrato de
franquicia. Por el contrario, hay otros que no tienen nombre ni entran en ninguna categoría
conocida: son absolutamente innominados.
24. GHESTIN, Jacques; Traite de d ro it civil. L e s o bligations. L e s effe ets d u contrat. Libraire Generale
du Jurisprudence, París, 1992, p. 99.
25. Así, ROPPO; DE NOVA, Giorgio; I n u o v i co n tra d i. Rivista di diritto civile. 1990, fase. 4 (agosto),
pt.2, pp. 497 y ss. En el mismo sentido, el español RIVERO en su artículo C ie n a ñ o s de
J u ris p ru d e n c ia s o b re c o n tra to s e n e sp e cia l. Revista Crítica de Derecho Inmobiliario. No. 626,
1995, p. 69, que se refiere a ellos como los contratos de nuevo cuño.
154 El Contrato de Esponsorización / José Luis Silva Cueva
Con todo, muchos de estos contratos, como se ha dicho, nos dejan una sensación
de deja vu28. Impresión que ha sido un arma de doble filo pues, por una parte, ha propiciado
los diversos intentos de reconducción a los esquemas ya pensados por el legislador,
pero, por otra, su particularidad suele sobresalir respecto de éstos, lo que en muchos
casos justifica su atipicidad.
26. Mantienen esta terminología TERRE/WEILL, D ro it civil. L e s o b lig a tio n s. 3° ed., pp. 46-47. En
el mismo sentido, CRISCUOLI, //contratto. Milano, 1992, p. 25, señala que el contrato típico
es aquel que la ley tiene en cuenta, dándole un nombre, por lo que también se le llama
“nominado”.
27. Art.1354.- Libertad contractual
“Las partes pueden determinar libremente el contenido del contrato, siempre que no sea
contrario a norma legal de carácter imperativo”.
28. Se muestra sumamente crítico con la pretendida novedad de muchas de estas figuras, FERRI,
Giovanni B.; C o n tra tto e n e g o z io : da un re g o la m e n to p e rc a te g o rie g e n e ra li ve rso u n a d iscip lin a
p e r tipi?. Relazione al Congresso del civilisti italianl sul tema: “La civilistlca italiana dagli anni
'50 ad oggi tra crisi e rlforme legislative”, Venezia, 23-26 giugno 1988. Rivista di diritto
commerciale e del diritto aenerale delle obbliaazioni. 1988, fase. 9-12 (dicembre), pt. 1, pp.
421-430.
29. SANTOS BRIZ, Jaime; L o s c o n tra to s civile s. N u e v a s p e rsp e c tiv a s . Comares, Granada, 1992,
p. 326.
30. GALGANO, Francesco; II c o n tra tto n e lla so c ie tá p o s t-in d u s tria le . Relazione al Congresso del
civilisti italiani sul tema: “La civilistica italiana dagli anni '50 ad oggi tra crisi e riforme legislative”,
Venezia, 23-26 giugno 1988. Rivista di diritto commerciale e del diritto aenerale delle
obbliaazioni. 1988, fase. 9-12 (dicembre), pt. 1, pp. 343.
| CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 155
7. ATIPICIDAD LEGAL
Este dato puramente táctico, junto con otros, ha dado pie a la doctrina para afirmar
que el contrato de esponsorización presente una fuerte tipicidad social. Lo cual es cierto,
por varias razones, como vamos a ver a continuación.
31. VICENTE DOMINGO, Elena: El contrato de esponsorización. Civitas, Madrid, 1998, p. 25,
afirma que “carece de una regulación legal apropiada”.
156 El Contrato de Esponsorización / José Luis Silva Cueva
La elaboración del concepto (tipo social) se debe a Emilio Betti quien la acuñó en
su obra Teoría general del negozio jurídico, publicada en 1950. Este concepto ha sido
recogido por los españoles GETE-ALONSO y JORDANO, quien afirma que la tipicidad
social es aquella que tiene por base las concepciones dominantes en la conciencia social
de la época en los varios campos de la economía, de la técnica y de la moral, y es
individualizada por obra de la doctrina.
Cuando se afirma que un determinado contrato tiene tipicidad social, significa que
dicho contrato se encuentra identificado, que tiene un nombre que hace referencia a cierto
esquema contractual, nacido de una forma espontánea, pero que carece todavía de una
disciplina normativa individualizada. Por tanto, el nomen, como identificación puramente
conceptual, si bien pudiera ser un primer paso para lograr una tipicidad legal, también es
cierto que pudiera muy bien quedarse ahí y no satisfacer el contenido jurídico de la figura.
Nomen es un indicio que coopera a la identificación social del contrato y a que en su
circulación en el tráfico -tipicidad social- se le llama por el mismo nombre.
Con todo, a pesar de que el contrato social mente típico no termine siendo un contrato
reconocido y regulado por la ley, la tipicidad social tiene un importante papel, pues cumple
no sólo una función interpretativa, sino también la relevante función integradora, conferida
por el artículo 1352 del Código Civil peruano. De esta forma, la tipicidad social puede
orientar al juez sobre la manera más correcta de solucionar el conflicto, lo que en opinión
de la doctrina “permite aplica lo que se ha llamado tipicidad social, es decir, normas
practicadas en el tráfico con habitualidad en este tipo de contratos”. De donde se deduce
que lo interesante es la previa existencia del fenómeno de identificación social porque, de
un lado, implica que se está procediendo a un genérico reconocimiento de su licitud,
como ya apuntábamos, y, de otro, resulta un elemento clave en la integración del contrato.
En definitiva, si bien la pérdida completa de la condición de la atipicidad de un
contrato es un fenómeno que no se agota con la tipificación social lo cierto es que “los
convenios que han venido cuajando en tipos sociales bien definidos, de significación
conocida y firme”, “han logrado escapar de la nebulosa de los negocios atípicos, gracias
a su utilización continuada, a su importancia social o a una especial elaboración doctrinal”,
palabras que se adaptan perfectamente al contrato de esponsorización, como apunta DE
CASTRO. Fenómeno que JORDANO agrega, de este modo las figuras jurídicas tienen su
origen no en la fantasía de los juristas o del legislador, sino en la capacidad creadora de
los particulares y en las necesidades impreteribles del tráfico, encontrando una primera
disciplina en los usos antes que en la legislación, al buscar la armonía con el Derecho
vivo.
a) En la Unión Europea
b) En España
32. Por todos. DE GIORGI. María Vita: S p o n s o riz z a z io n e e m e ce n a tism o , Padova, CEDAM, 1988,
pp. 93 y ss.; CASCINO, Luigi. Tutela Pello s p o n s o r n e IT o rd in a m e n to g iu rid ic o s p o rtiv o e neIT
o rd in a m e n to g iu rid ic o statale. Rivista di diritto sportivo, fase. 3-4 (dlcembre), 1991, pp. 252
254. En España, CHULIÁ y BELTRÁN: op. cit., p. 510.
33. Esta es la opinión de SANTAELLA LÓPEZ, Manuel: E l n u e v o d e re c h o d e la p u b lic id a d . Madrid,
Civltas, 1989, pp. 171 ss. En contra CORREDOIRAY ALFONSO, op. cit., p. 162. Crítico con
la falta de regulación legal del patrocinio publicitario en la Ley de publicidad, LÓPEZ MENUDO,
Francisco. P a tro c in io d e p ortiv o : Im p lic a c io n e s ju ríd ic o -p ú b lic a s . Revista especializada derecho
deportivo. (1), enero-junio, 1993, p. 14, y DÍEZ-PICAZO. E l c o n tra to ... cit., p. 9.
34. Ocurre en estos casos, como señala DE LOS MOZOS, op. cit., p. 453, “que los negocios
atípicos son aquellos que aun descansando como los anteriores en una tipicidad social, y aun
viniendo nombrados por el legislador (nominados en sentido terminológico, no en el jurídico)
no son objeto de una regulación legal, o ésta aparece deficiente o incompleta ...”.
158 El Contrato de Esponsorízación f José Luis Silva Cueva
como paso previo al estudio de sus caracteres, anticipar, siquiera sea de manera
breve, una reseña de los elementos del contrato que aparecen recogidos en la
definición legal. Los elementos personales del contrato en examen son el
patrocinador y el patrocinado. Estos elementos pueden aparecer bajo diversas
modalidades; así, puede suceder que ambos tengan la condición de personas físicas,
que ambos sean jurídicas o que uno de ellos sea persona física y el otro sea persona
jurídica. Respecto a los elementos reales, éstos vienen determinados, siguiendo la
dicción del art. 24, de una parte, por la ayuda económica que el patrocinador presta
para la realización de la actividad del patrocinado; y, de otra parte, por la colaboración
del patrocinado en la publicidad del patrocinador. Con relación a los elementos
formales del contrato de patrocinio, no exige el art. 24 ningún requisito especial de
forma, será aplicable entonces el principio general de libertad de forma35 recogido
en el art. 51 del Cco36 y el art. 1.278 del Ce español37.
35. Para una visión panorámica sobre la forma de los contratos mercantiles, Véase BROSETA
PONT, Manuel. M a n u a l de D e re c h o M e rca n til. 10a ed., Madrid, Tecnos, 1994, pp. 444 ss.;
RUIZ DE VELASCO Y DEL VALLE, Adolfo. M a n u a l de D e re c h o M e rca n til. Bilbao, Ediciones
Deusto, 1992, pp. 541 ss., y URÍA GONZÁLEZ, Rodrigo. D e re c h o M e rca n til., 24a ed., Madrid,
Marcial Pons, 1997, p. 1887.
36. CÓDIGO DE COMERCIO. Artículo 5 1 Será válidos y producirá obligado y acció en juicio los
contratos mercantiles, cualesquiera que sean la forma y el Idioma en que se celebren, la clase
a que correspondan y la cantidad que tengan por objeto, con tal que conste su existencia por
alguno de los medios que el Derecho civil tenga establecidos [...].
37. CÓDIGO CIVIL. Artículo 1.278.- Los contratos serán obligatorios, cualquiera que sea la forma
en que se hayan celebrado, siempre que en ellos concurran las condiciones esenciales para
su validez.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 159
c) En Italia
d) En Francia
e) En Portugal
f) En Macao
9. SU NATURALEZA JURÍDICA
El iter natural para dotar de régimen jurídico a las instituciones que en el Derecho
positivo lo tienen deficiente o no lo tienen es el de indagar acerca de su naturaleza jurídica.
Así, con la asimilación a otras figuras, se logra, a veces, dotar a la figura analizada de un
régimen concreto.
Para los autores nacionales que se han dedicado al tema, opinan que habría una
subsunción en algún tipo contractual de la categoría de prestación de servicios38, contrato
atípico puro39, contrato publicitario y contrato complejo40
En la doctrina española, se discute si se está ante un contrato de publicidad41, de
difusión42 o de creación publicitaria43; se busca si tiene analogías con los contratos de
sociedad44 y de arrendamiento de obras o de servicios45, sin embargo, atribuyen una
fisonomía o naturaleza jurídica propia o un contrato que ha de subsumirse en la fisonomía
de otro u otros tipos contractuales46.
42. Ley 34/1988, de 11 de noviembre, General de Publicidad. Artículo 19°.- “C o n tra to de d ifu sió n
p u b lic ita r ia e s a q u é l p o r e l q u e , a c a m b io d e u n a c o n tra p r e s ta c ió n fija d a e n ta rifa s
p re e s ta b le c id a s , u n m e d io se o b lig a e n fa v o r de u n a n u n cia n te o a g e n c ia a p e rm itir la u tiliza ció n
p u b lic ita ria de u n id a d e s de e s p a c io o de tie m p o d is p o n ib le s y a d e s a rro lla r la a c tiv id a d té cn ica
n e c e s a ria p a ra lo g ra r e l re s u lta d o p u b lic ita rio ”.
43. Ley 34/1988, de 11 de noviembre, General de Publicidad. Artículo 22°.- “C o n tra to d e cre a c ió n
p u b lic ita ria e s a q u é l p o r e l que, a c a m b io d e u na co n tra p re s ta c ió n , una p e rs o n a física o ju ríd ic a
s e o b lig a en fa v o r de u n a n u n c ia n te o a g e n c ia a id e a r y e la b o ra r un p ro y e c to d e ca m p a ñ a
p u b lic ita ria , u n a p a rte d e la m is m a o c u a lq u ie r o tro e le m e n to p u b lic ita rio ”.
44. El art. 116 del Código de Comercio define el c o n tra to de C o m p a ñ ía como aquel p o r e l c u a l dos
o m á s p e rs o n a s s e o b lig a n a p o n e r en fo n d o c o m ú b ienes, in d u s tria o a lg u n a d e e sta s cosas,
p a ra o b te n e r lu c ro , s e rá m e rc a n til, c u a lq u ie ra q u e fu e s e s u cia se , s ie m p re q u e s e h a ya
c o n s titu id o c o n a rre g lo a la s d is p o s ic io n e s d e e ste C ódigo. Por su parte, el art. 1.665 del
Código Civil define el c o n tra to d e s o c ie d a d como aquel p o r e l c u a l d o s o m á s p e rs o n a s se
o b lig a n a p o n e r e n c o m ú n dinero, b ie n e s o in d u stria , co n á n im o d e p a rtir e n tre s í la s gan an cia s.
45. El art. 1.544 del Código Civil prescribe: E n e l a rre n d a m ie n to d e o b ra s o se rvicio s, una de las
p a rle s s e o b lig a a e je c u ta r u n a o b ra o a p re s ta r a la o tra un s e rv ic io p o r p re c io cierto.
46. VIDAL, E l c o n tra to de p a tro c in io p u b lic ita rio e n e l d e re c h o español, Bosch, Barcelona, 1998
p. 92.
CONTRATOS f Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 163
10. EL V O C A B L O E S P O N S O R IZ A C IÓ N Y SU D IF E R E N C IA C O N EL
MECENAZGO Y PATROCINIO
Del contrato de esponsorización51 se ha dicho que es el heredero directo del
tradicional mecenazgo52. Evolución, que como describe FRANCESCHELLI, es un lento
passaggio que consiste en que la causa de la atribución patrimonial no es la mera liberalidad
sino la entrega a cambio de retorno de publicidad53. No obstante, aun siendo ésta la
opinión mayoritaria, también hay quien mantiene que estamos ante un fenómeno totalmente
nuevo cuyo origen se encuentra en la industrialización54 y en el afán de las empresas de
encontrar formas de darse a conocer diferentes de las tradicionales que distingan de las
de la competencia. A nuestro juicio, ambos puntos de vista son compatibles, ya que siendo
cierto que la esponsorización en sentido propio responde a criterios empresariales pues
se utiliza como un instrumento para lograr publicidad, sin embargo, su origen se identifica
con el del mecenazgo o patrocinio.
En cuanto al mecenazgo, es sabido que tiene su origen hacia el año 70 a.J.C., y
que su significado y nombre se deben a Cayo Clinio Mecenas, rico ciudadano romano,
ministro y amigo del emperador Augusto, quien hacia aquel año se distinguió por la
protección y ayuda que prestó a diversos escritores y artistas. Posteriormente, siendo
Trajano emperador, se sigue apoyando de forma altruista a diferentes artistas y arquitectos
de la época, como a Plinio el Joven55.
55. Evolución que describen GOBIN, op. Cit., pp. 15 y ss.; JUAN DE ANDRÉS, op. Cit., pp. 15 y
ss., y DE LORENZO, E l n u e v o d e re c h o d e fu n da cio n e s. Madrid, 1993, p. 355.
56. Sobre esto, BIANCA, op. Cit., p. 15; PLAT-PELLEGRINI y CORNEO, op. Cit., p.11 y
LAPOYADE, op. Cit., p. 125.
57. PLAT-PELLEGRINI y CORNEC, op. Cit., p. 12, el cual afirma que “Isabelle de Castille, devenue
l'un des grands sponsors de l'histoire”.
58. Se trata del punto 8 de la Exposición de Motivos.
59. Vid. VATTIER FUENZALIDA, L a s n u e v a s lib e ra lid a d e s d e m e ce n a zg o . Anuario de Derecho
Civil. No. 3, 1996, pp. 1057-1072. Se destacan en el trabajo las siguientes liberalidades de
mecenazgo: 1) la constitución de entidades sin finalidad lucrativa, en particular de fundaciones;
2) las donaciones a favor de ciertas entidades no lucrativas; 3) la adquisición de obras de arte
para oferta de donación; y 4) el convenio de colaboración empresarial.
CONTRATOS {Doctrina, Legislación, Jurisprudencia * Modo 165
60. SAENZ DE MIERA, op. Cit., p. 80; BIGLIAZZI GERI, BRECCIA, BUSNELLI, NATOLI, Diritto
Civile, Turín, 1989, T.lll., p. 668. Sin embargo, Rafael GIBERT SÁNCHEZ DE LA VEGA,
catedrático de la Universidad de Madrid y académico, el cual, en el prólogo al libro de ALVAREZ
VIGARAY, E l d e re c h o c iv il e n la s o b ra s d e C e rvan te s, Granada, 1987, recuerda el momento
cuando le conoció de chiquillo y comenta: “...hijo de maestra viuda, María del Carmen Vigaray,
presentándomelo, prematuramente miope y con el aspecto más oscuro, atónito y atónico que
conocí en Granada, ciudad de mozos avispados y listos, relampagueantes. Este no parecía
de especial lucidez. Su madre, sí; en su mirada, tras los lentes, brillaban la bondad y la
sagacidad. Parecía decirnos sin palabras: confíen en mi niño. Fue como su esponsor” (A este
párrafo le siguen páginas de sinceros elogios). En el trabajo se utilizan indistintamente
esponsorización y patrocinio publicitario.
61. Desde mi punto de vista, siempre que el patrocinio no vaya calificado de publicitario es lo
mismo que el mecenazgo. En contra, parece manifestarse CORREDOIRA y ALFONSO, op.
Cit., p. 28, que identifica el patrocinio con la esponsorización.
62. Se trata de la sentencia de 17 de marzo de 1982. Una crítica de esta sentencia en LAPOYADE,
op. Cit., p. 125, “Au vrai, l'usage du terme anglais, solidement ancró et historiquement justifié,
montre qu'une fois de plus la régle de droit s'avéere bien tardive”. En un breve comentario a
esta sentencia, PLAT-PELLEGRINI y CORNEC, op. Cit., p 12, afirman que pese a que
“parrinaije” traduce fielmente el término sp o n s o rin g , todavía está poco-utilizado.
63. PIQUET, op. Cit., p. 124.
166 El Contrato de Esponsorización / José Luis Silva Cueva
mejora de la imagen del benefactor64. Ahora bien, en la práctica, las diferencias entre
ambas figuras no son tan netas y claras como pudiera parecer a primera vista, siendo
muchas veces imposible mantener deslindado el significado de ambas expresiones65.
En In gla terra se em plean los té rm ino s “ sp on sorship ” y “p a tro n a g e ” , en
correspondencia con las palabras francesas “sponsorincf’ y “mécénat d'entreprise" y a las
italianas “sponsorizzazione” y “patrocinio” (o “mecenatismo”. TOWNLEY y GRAYSON
definen el “sponsorship” de este modo: “El patrocinio supone una relación comercial,
aceptada mutuamente entre dos o más partes, en la cual una de ellas (patrocinador)
busca promover la imagen de su empresa, sus productos o servicios asociándose ya con
una persona individual, ya con su acontecimiento (sujeto o evento patrocinado)” 66.
En la doctrina norteamericana la terminología es más compleja. Así se habla de
una manera indiscriminada de “patronage", “philantrophy”, “grant-making”, “giving”, “gift”,
“support", “sponsorship”, “underw riting”, “contribution", “d onation”, etc. Y, como
consecuencia de ello, se emplean también los términos de “donof, “patrón”, “funder”,
“sponsor”, “underwríter”. El término “sponsoring” se usa en el sector de la televisión y
asociado a los deportes; la voz “patronage” se asocia a las artes; y el término “underwriting”,
que procede del ramo de los seguros y de la publicidad, se usa sobre todo en los supuestos
de patrocinio de programas televisivos. De todos modos, las voces referidas se utilizan,
vulgarmente, de una manera intercambiable, sin demasiadas pretensiones de precisión67.
En España, para designar a la persona que presta ayuda económica para la
realización de actividades deportivas, benéficas, culturales, científicas, etc., en contrapartida
a la colaboración publicitaria que el beneficiario de la ayuda debe prestar, se suelen utilizar
diversos vocablos: “esponsor, “mecenas”, “filántropo” y “patrocinador”. A modo de ejemplo
reseñamos que en el Diccionario de la Real Academia Española, el patrocinio68se identifica
con “amparo, protección, auxilio”; y la voz patrocinador69 con “defender, proteger, amparar
y favorecer”, sin embargo la nueva edición contiene ya las voces esponsorización70 y
esponsorizar71, aunque a este último se le relaciona con “patrocinar”.
a) Esponsorización y partnership
b) Esponsorización y m erchandising
La línea de división de las dos figuras es tan frágil que hay autores que
consideran al product placement como una especie más de la esponsorización. Es
ésta una forma de publicidad oculta ya que consiste en la muestra de un determinado
producto en un espectáculo, en una película o en un evento cultural, sin que sea
fácilmente reconocible, pues no se anuncia, sino que aparece como producto de
consumo. El ejemplo más elocuente es el del Arman que llevaba Richard Gere en
American gigoló, si bien entre nosotros es cada vez más habitual esta forma oculta
de hacer publicidad a la vez que se financia un programa televisivo. Como ha
afirmado COSTANZA, “la esponsorización se aproxima a la publicidad oculta, o a
aquella forma de publicidad en la cual un bien o un producto se muestra en
circunstancias particulares de forma que se hace apetecible al consumidor”.
Existen otros casos de inserción publicitaria que tienen menos vida. Así, los
espacios que son tomados por los empresarios en los lugares en los que se llevan
a cabo eventos de gran concurrencia.
esponsorización, cuyo perfil tiene rasgos que lo distinguen de la figura del mecenazgo,
como a continuación vamos a analizar.
74. En este sentido, LÓPEZ MENUDO, P a tro c in io d e p o rtiv o : Im p lic a c io n e s ju ríd ic o -p ú b lic a s .
Revista Española Derecho Deportivo. No. 1, Julio 1993, p. 11; y, LANDABEREA, op. Cit., p.
26, e incluso identifica esponsorización o patrocinio con mecenazgo; DIEZ-PICAZO, E l
contra to ...cit., p. 6. Por el contrario, distinguen ambos fenómenos, CORREDOIRA Y ALFONSO,
op. Cit., 26. Asimismo, distingue ambas manifestaciones “de la filantropía social” de otra bien
distinta como son las fundaciones. Para otros, como SZYBOWICZ y MAGISTRALI, op. Cit.,
p. 16, todo es lo mismo pues las diferencias son despreciables: “utilizaremos indiferentemente:
mecenazgo, esponsorización, padrinazgo, colaboración...”.
75. En este sentido, INZITARI, op. Cit., p. 248; GIORGI, op. cit., pp. 4 y 90; BIANCA, op. Cit.,
p.112 y FRANCESCHELLI, op. Cit., p. 79. En Francia, GOBIN, op. Cit., p. 68.
76. FRANZOSI, Mario; L a s p o n s o riz z a z io n e cu ltú ra le : p rim e note. II foro padano. 1988, fase. 1
(marzo), pt. 2, pag. 39-41; GIORGI, op. Cit., pp. 48 y ss„ y BIANCA, op. Cit., pp. 51 y ss.
77. LAPOYADE, op. Cit., p. 2, también denominado a ffa ire co m e rcia l, BIANCA, Mirzia' O p
576.
78. GOBIN, op. Cit., p. 16.
79. En estos términos, DIEZ-PICAZO, op. Cit., p. 8.
80. En el punto 6 de la Exposición de Motivos, textualmente: “est une personne qui apporte une
aide financiére désintéressée á un artiste ou á un organisme culture!, les libérant ainsi du
souci du gagne-pain et leur permettant de se consacrer entiérement á la production artistique”.
CONTRATOS {Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 171
d'intervention, leur temps, leur argent, ou les deux á la fois, á la création artistique, á son
épanouissement, á sa protection”81.
De las definiciones de las dos figuras contrapuestas, podemos extraer una sencilla
conclusión; el punto de partida de ambos es el mismo: la financiación de actividades de
naturaleza cultural. Pero esta financiación puede terminar en sí misma, como ocurre en el
mecenazgo, o hacerse con un objetivo publicitario, como pasa en la esponsorización82.
En nuestro marco jurídico, como hemos tenido ocasión de ver, son varias las
normas que nombran y definen el fenómeno esponsorización y que contribuyen a
distinguir - y a veces a confundir- la esponsorización del mecenazgo.
Una vez más, resaltan las notas esenciales del contrato de esponsorización
en este tipo de patrocinio publicitario televisivo: la ayuda que entrega el esponsor,
con la finalidad o a cambio de publicidad o promoción de los signos distintivos y de
la actividad del esponsor.
En esa medida, parece viable la aplicación del régimen sobre esta clase de contratos
previsto dentro del mencionado Código en los artículos 142686,142787, 1428,142988; 143089,
143190, 143291 y 143392
Sin embargo, dada la forma en que suelen ejecutarse las prestaciones a cargo de
ambas partes, la eventual aplicación del art. 142893 del Código civil (relativo a la exceptio non
adimpleti contractus o excepción de contrato no cumplido), podría requerir de cierta precisión.
nombre del esponsorizado, o permitir que, sin exigir alguna otra contraprestación adicional,
aquel promocione su empresa o sus productos con la calidad de esponsor oficial de un
determinado evento.
En este acápite seguimos al autor nacional VEGA quien afirma: “es poco coherente
sostener que, si la obligación que asume el auspiciado es la de realizar una clara alusión
al esponsor (preparando los sets televisivos o colocando carteles con el nombre del
esponsor), -lo que trasunta una indiscutible prestación de hacer a su cargo- en esta caso
sí será aplicable el art. 1757 del Código Civil, ya que entonces se calificaría al contrato de
esponsorización como una modalidad de la prestación de servicios, mientras que en otras
hipótesis -com o la descrita en el párrafo anterior, en la que la prestación es un no hacer-
el contrato de esponsorización carecería de un debido encuadramiento dentro de las
categorías de prestación de servicios previstas en el Código’’ 98.
Y es que, más allá de esta imposibilidad de encontrar una clasificación en la que se
enmarque el contrato de auspicio, estamos -nos dice- frente a un contrato atípico puro99,
por la novedad de prestaciones que involucra.
La doctrina, que tanto ha dedicado esfuerzos a la ideación de un método de
aplicación de las normas de los contratos típicos a los contratos atípicos, ha propuesto
diversas opciones, según se trate de un contrato típico puro, es decir, con elementos del
todo nuevos, ya sea que se trate de un contrato atípico mixto, o sea, de un acuerdo que
involucre elementos similares a los de algunos contratos típicos, que concurren con
elementos ajenos a cualquier figura regulada dentro del respectivo ordenamiento.
Para los contratos atípicos mixtos se han formulado los métodos de la absorción y
de la combinación. De acuerdo al primero, es menester determinar cuál es la prestación
principal que contiene el contrato atípico mixto para aplicar el régimen del contrato típico
que contempla dicha prestación como la que lo caracteriza y distingue de los demás.
Según el método de la combinación, dado que no es siempre posible establecer cuál es la
prestación principal en un contrato atípico mixto, con el riesgo de subordinar deberes que
son igualmente importantes, es más adecuado aplicar individualmente, a cada prestación,
el tratamiento del contrato típico que da lugar a un débito igual. No obstante, sería
extremadamente dificultoso, por no decir improbable, que dicha aplicación sea pacífica y
libre de serios obstáculos, hasta llegar al punto de invocar normas incompatibles o
contradictorias.
Por ello, en la doctrina alemana -que ha estado a la vanguardia en este tópico- se
ha sugerido el uso prudente de la analogía, a fin de evitar que se obtengan conclusiones
reñidas con la naturaleza del contrato atípico mixto.
Para el caso de los contratos atípicos puros, en cambio, se ha deslizado la opción
de recurrir a la analogía, para lo cual es indispensable identificar el régimen del contrato
típico que más se les aproxima.
100. El s u b ra y a d o es nu e stro .
176 El Contrato de Esponsorización / José Luis Silva Cueva
Al respecto Pepsico señaló que: “Pepsico Inc. Sucursal Perú celebró un contrato de
Prestación de Servicios Publicitario con la empresa Panamericana Televisión S.A.(...).
En virtud del referido contrato Panamericana Televisión S.A. se obligaba a prestar
servicios publicitarios a favor del (sic) nuestra empresa, otorgándonos el derechos de
transmitir avisos publicitarios para promocionar nuestro producto dentro del programa “R
con R” en el segmento “Canta y Gana” (...).
101. El s u b ra y a d o e s nu e stro .
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 177
Una primera cuestión se presenta si -dentro del caso propuesto- uno de los
jugadores de aquella asociación futbolística sale al campo de juego con indumentaria en
la que no se exhibe el nombre del esponsor. Este incumplimiento, ¿supone que la
inejecución es atribuible a la organización auspiciada?.
Del mismo modo, si el conductor de un programa televisivo, que ha sido instruido
por los organizadores para que mencione reiteradamente el nombre del esponsor e inste
a los concurrentes para que muestren el producto entregado por el esponsor y, llegado el
momento, no cumple, ¿quién debe responder?.
Al respecto, debe tenerse en consideración que para el acreedor resulta del todo
irrelevante que la actividad que posibilite el retorno publicitario la realice el organizador
mismo o las personas de las que se vale. Si es posible -e , inclusive, indispensable- que
el organizador cuente con la participación de terceros, con los cuales el esponsor no
tiene ningún vínculo, dicha intervención va aún más allá de la teoría que postula la
equivalencia de comportamientos entre deudor y terceros (auxiliares, ayudantes, etc.),
puesto que el esponsor (al igual que el organizador) saben, desde el inicio, que la
actividad no será ejecutada por el esponsorizado de modo directo, sino por medio de
otras personas.
Tampoco es importante que entre la organización y los sujetos que llevan a cabo la
actividad de alcance público exista una relación de subordinación o dependencia.
El organizador esponsorizado es, en todos los casos, quien se encuentra en mejor
situación para determinar lo necesario y la forma en la que debe cumplirse con el retorno
publicitario. El esponsor no puede ejercer ningún control sobre los terceros que contrate
la organización.
De ahí que la falta de cumplimiento podría ser reclamada al esponsorizado, esto
es, al organizador del evento, sin perjuicio de la acción de regreso que éste intente frente
al sujeto del cual se sirvió.
Sería injusto acoger la alegación del organizador (esponsorizado) en el sentido de
que él no ha sido quien ha incumplido, ya que entonces el esponsor quedaría obligado a
seguir una acción reparatoria contra un tercero -dependiente o no del esponsorizado-
con el cual no tiene relación alguna. La acción que habría de intentar el esponsor, en este
caso, sería por responsabilidad aquiliana o extracontractual, lo que lo sujetaría a todas las
consecuencias del régimen de esta fuente de responsabilidad (destacándose un plazo
prescriptorio menor al de la responsabilidad contractual). A ello se añadiría que el
esponsorizado se encontraría en una situación ventajosa puesto que le bastaría afirmar
que se sirvió de un tercero para liberarse.
La posibilidad de pactar la solidaridad entre el organizador y las personas de las
que se vale, frente al esponsor, parece, por lo demás, inaplicable e innecesaria.
El esponsor podrá alegar la responsabilidad del organizador esponsorizado,
amparándose en el artículo 1325 del Código civil104. Como se dijo, en nada gravita que los
terceros sean dependientes o no del esponsorizado.
Sin embargo, las partes son quienes configuran el plan prestacional a cargo
del esponsorizado y gozan de libertad para estipular las cláusulas que estimen
adecuadas a sus intereses. Con todo, ninguna de ellas debe estar reñida con el
elemental principio de la buena fe.
El pago del daño emergente parece no presentar mayor dificultad, cosa que
no necesariamente ocurre tratándose de la reparación del lucro cesante.
MODELO DE CONTRATO DE
AUSPICIO PARA UN EQUIPO DEPORTIVO
ANTECEDENTES
PRIMERA.- LA AUSPICIADORA es una persona jurídica de derecho privado
constituida bajo el régimen de la sociedad comercial de responsabilidad limitada cuyo
objeto principal es dedicarse a la comercialización d e ...................
OBLIGACIONES DE LA AUSPICIADORA
CUARTA.- LA AUSPICIADORA se obliga a entregar la suma de... para la participación
en el cam peonato...... por el año del c lu b ............. dirigido por LA AUSPICIADA; siendo
las fechas de las entregas de las cuotas las siguientes:
OBLIGACIONES DE LA AUSPICIA
SÉPTIMA.- LA AUSPICIADA se obliga, a hacer uso y exhibir la indumentaria deportiva
a que se refiere la cláusula sexta del presente contrato con la m arca..... correspondiente
al producto comercializado por LA AUSPICIADORA en cada uno de los encuentros que
sostenga el club deportivo dirigido por LA AUSPICIADA, a los jugadores y técnicos del
club.
EXCLUSIVIDAD
DÉCIMA.- LA AUSPICIADA se obliga expresamente a no contratar el auspicio de
otras empresas auspiciadoras para los lugares ya reservados y convenidos con LA
AUSPICIADORA, bajo pena de resolución del presente contrato.
PLAZO
DÉCIMO PRIMERA.- Las partes acuerdan que la duración del presente contrato
será del campeonato d e ..... de la temporada del año...........
3. La falta de rendimiento del club dirigido por la auspiciada que permita preveer que
no alcanzara una de las primeras cinco posiciones del campeonato aludido.
SOLUCIÓN DE CONFLICTOS:
DÉCIMO SÉPTIMA.- En caso de discrepancia en la interpretación o ejecución del
presente contrato o de surgir un conflicto que no pueda ser resuelto directamente por las
partes, estas podrán someterse a un laudo definitivo e inapelable que será emitido por un
tribunal arbitral compuesto por tres especialista de fútbol.
El Tribunal tendrá un plazo máximo de sesenta días calendario para resolver,
pudiendo señalar los plazos para la presentación de la demanda arbitral, la contestación,
reconvención y contestación a la misma, así como para la actuación de las pruebas que
necesariamente habrán de ser ofrecidas con la demanda y la contestación, reconvención.
El laudo que expida el Tribunal será definitivo e inapelable.
Todos los gastos e impuestos que genere este contrato serán de cuentan de LA
AUSPICIADORA, salvo los que obligue la ley.
LA AUSPICIADORA LAAUSPICIADA
Nota.- En el anexo señalado debe figurar las características, y modelos de la vestimenta que LA
AUSPICIADORA deberá proveer a LAAUSPICIADA.
CONTRATOS (Dnctrirui, l oginlaann Jurisprudencia y Modales) 185
J URISPRUDEN CIA
C o ntrato d e a u s p ic io ( e s p o n s o r iz a c ió n ): D e f in ic ió n
RTF N° 7010-2-2003
EXPEDIENTE N° 2019-2000
De acuerdo con los términos del contrato celebrado el 1 de febrero de 1996 por el
recurrente con Petroperú S.A., el mismo se configura como un contrato de auspicio, en
virtud del cual el sponsor o auspiciador entrega una suma de dinero o determinados bienes
útiles al auspiciado para que éste desarrolle la actividad pública que le es habitual,
comprometiéndose, básica pero no excluyentemente, a exhibir o portar, durante la ejecución
de la actividad, el nombre, marca o emblema del sponsor.
Cabe indicar que mediante el contrato de auspicio, el auspiciado obtiene el
financiamiento de su actividad habitual de alcance público o masivo, y a cambio, el sponsor
obtiene publicidad a través de dicha actividad, esto es, un vehículo de comunicación
empresarial hacia los consumidores de sus bienes y servicios que son, en este caso, los
espectadores.
En cuanto a las prestaciones que corresponden al auspiciado, si bien son de diversa
índole, todas ellas tienen como fin el publicitario, esto es, el aumento del número de
personas que consuman los bienes que fabrica o los servicios que presta el auspiciador,
quien aprovecha de la actividad de alcance público que despliega el auspiciado como
vehículo apto de transmisión de señales empresariales.
En consecuencia, en el caso de autos, los servicios que contrató el recurrente
(auspiciado) tienen carácter comercial, más aun cuando éste se comprometió a que dichos
servicios serían prestados por todo su equipo (piloto, copiloto y equipo de auxilio), y no en
forma individual.
Así, el objeto de la prestación de los servicios en cuestión fue permitir el uso de la
imagen de un equipo de carreras de autos con fines comerciales, específicamente
publicitarios, no así el trabajo personal del recurrente, por lo que los ingresos percibidos
no califican como rentas de cuarta categoría, sino de tercera categoría (...)”.
EL CONTRATO DE COEXISTENCIA MARCARIA
José Paulo Césare Sifuentes
1. INTRODUCCIÓN
La existencia de dos marcas similares o idénticas trae consigo el riesgo de confusión
en perjuicio del consumidor, pues crea un estado de ¡ncertidumbre en la medida en que
afecta su derecho a la libre elección de productos o servicios. Por ello es necesario
determinar el riesgo de confundlbilidad atendiendo a dos factores: la identidad o grado de
semejanza de los signos que constituyen las marcas enfrentadas y la naturaleza de los
productos o servicios a los que habrían de aplicarse dichas marcas. Asimismo, deberá
tomarse en cuena la regla de la especialidad, pues la semejanza o identidad de los signos
causará confusión en la medida que protejan productos o servicios; idénticos o que
pertenezcan a una misma clase, en caso contrario, el consumidor no podrá suponer que
existe algún nexo entre el origen empresarial de los productos o servicios en cuestión.
El Indecopl1 efectúa el cotejo (comparación) entre dos marcas o signos en base al
análisis de tres elementos: desde el punto de vista gráfico, es decir, la forma de
estructuración de la misma, si es verbal o denominativa, si es figurativa o mixta; desde el
punto de vista fonético al comparar el mayor o menor parecido en el sonido de las marcas
2. OTAMENDI, Jorge: “Derecho de marcas”, Buenos Aires Abeledo Perrot, Segunda edición
1995. p. 159.
3. Los criterios para apreciar la confundibilidad están señaladas en los artículos 131°, 132°,
133° y 135° del Decreto Legislativo N° 823.
4. Manual para el examen de registrabilidad de marcas en las oficinas de propiedad industrial
de los países andinos. Indecopi, 1996, p. 37.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos! 189
extingue el obstáculo que impedía a uno de los titulares acceder al registro de su signo
distintivo.
Sin embargo en algunos supuestos el mero acuerdo entre las partes o el retiro de
una observación al registro no es suficiente para que éste sea concedido, pues podría
presentarse el caso de marcas idénticas que distingan productos o servicios idénticos. En
este caso, sí serían confundibles para el público consumidor, por lo tanto, dicho acuerdo
no podría obviar la aplicación de una norma de orden público.
Tal como hemos referido, las obligaciones de las partes son básicamente de
no hacer, por ejemplo, los contratantes convendrán en no explotar indebidamente
las marcas, ni ejercer actos de competencia desleal uno respecto de otro.
5. HEREDIA MENDOZA, Rosa Elena: “Los acuerdos de coexistencia en el ámbito del derecho
de marcas”, en Gaceta Jurídica, Tomo 35, Octubre de 1996.
190 El Contrato de Coexistencia Marcaría / José Paulo Césare Sifuentes
6. ARIAS-SCHREIBER, Max: “Contratos, parte general”, Gaceta Jurídica, Tomo I, 1998, p. 46.
7. GUTIERREZ CAMACHO, Walter: “Los contratos atípicos’’, en lus Et Praxis N° 30 Enero-
Diciembre de 1999, p. 116.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 191
ANTECEDENTES
CLÁUSULA PRIMERA.- LA EMPRESAAes una persona jurídica de derecho privado,
constituida bajo el régimen de la sociedad anónima, cuyo objeto social principal es la
edición y comercialización de textos e insumos editoriales de naturaleza contable y
económica.
CLÁUSULA SEGUNDA.- LA EMPRESA B es una persona jurídica de derecho
privado constituida bajo el régimen de la sociedad anónima, cuya actividad principal es la
edición, publicación, comercialización, y distribución de libros jurídicos.
CLÁUSULATERCERA.- LA EMPRESAA registró con fecha........................ la marca
de servicio................, para distinguir la edición de textos y revistas (Clase 41) inscrita el
............................en el Tomo 28, Folio 43 del Registro, así como el registro de la marca de
producto “ ..................’ para distinguir productos de imprenta, etc (Clase 16) inscrita el
..............en el Tomo 101, Folio 128 del mismo Registro.
CLÁUSULA CUARTA.- Actualm ente LA EMPRESA B, viene tram itando el
Expediente N ° ............... (INDECOPI) que contiene la solicitud para el registro de la
marca de servicio “ ............... ” , en la clase 41, la cual distingue la edición de textos y
revistas.
al amparo del articulo 1430 del Código Civil En consecuencia, la resolución se producirá
de pleno derecho cuando una de las partes comunique, por ca ria notarial, a la otra que
quiere valerse de esta cláusula.
LA EMPRESA LA EMPRESA
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 195
JURISPRUDEN CIA
C o e x is t e n c ia , m a r c a r ía : D e f in ic ió n
Sum illa.- El acuerdo de Coexistencia Marcaría, puede ser definido como aquel por el
dos titulares llegan a un acuerdo económico para que coexistan sus
respectivas marcas, subsistiendo el riesgo de confusión, con lo que se priva
al consumidor de su derecho a elegir libremente entre los productos del
mercado, de acuerdo a su origen empresarial.
RESOLUCIÓN: 0043-2005-TPI-INDECOPI
Expediente N° 173571-2003
Tribunal de Defensa de la Competencia y de la Propiedad Intelectual
Puede darse, sin embargo, el caso de que dos titulares lleguen a un acuerdo
económico de coexistencia de sus respectivas marcas pero que el riesgo de confusión
subsista, con lo que se privaría al consumidor de su derecho a elegir libremente entre los
productos del mercado, de acuerdo a su origen empresarial, además el consumidor puede
verse expuesto a adquirir un producto o servicio que no posea la calidad o alguna otra
característica esperada. Para impedir lo anterior, el artículo 158 del Decreto Legislativo
8231 establece expresamente que las partes en un procedimiento podrán acordar la
coexistencia de marcas similares para productos de la misma clase, siempre que, en
opinión de la oficina administrativa competente, la coexistencia no afecte negativamente
el interés general de los consumidores.
P r o b l e m a s d e c o n f u s ió n : C o e x is t e n c ia d e m a r c a s s im il a r e s
PARA PRODUCTOS D E LA M IS M A CLASE
Sum illa.- Puede darse sin embargo el caso de que dos titulares lleguen
a un acuerdo económico de coexistencia de sus respectivas
marcas pero que el riesgo de confusión subsista, con lo que
se privaría al consumidor de su derecho a elegir libremente
entre los productos del mercado, de acuerdo a su origen
empresarial, además el consumidor puede verse expuesto a
adquirir un producto o servicio que no posea la calidad o
alguna otra característica esperada. Para impedir lo anterior,
el a rtículo 158 del D ecreto Legislativo 823 establece
expresamente que las partes en un procedimiento podrán
acordar la coexistencia de marcas similares para productos
de la misma clase, siempre que, en opinión de la oficina
a dm in istrativa com petente, la coexistencia no afecte
negativamente el interés general de los consumidores.
RESOLUCIÓN : N° 1001-2004/TPI-INDECOPI
Expediente : N° 128588-2001
Tribunal de Defensa de la Competencia y de la Propiedad Intelectual
Los términos Agencia y Medios no parecen técnicamente los mejores para los fines
de una normatividad jurídica aunque tienen el mérito de ser claros. Respecto a “Agencia”
la realización de la publicidad no es sólo posible por empresas o personas jurídicas como
parecería entenderse de dicho término que incluso es utilizado por el Decreto Legislativo(*)
(*) Abogado. Notario de Lima (La Molina). Magíster en Derecho, mención en Derecho Civil y
Comercial. Ex Juez Titular del Segundo Juzgado Especializado en lo Civil de Lima.
1. B R O S E T A PONT, M a n u e l: “M a n u a l d e D e re c h o M erca n til''. Edil. T ecnos. M ad rid , 1983.
200 Los Contratoa de Publicidad / Oswaldo Arias Montoya
2. TIPICIDAD
“También está limitada, de manera mediata, por el Artículo V del Título Preliminar
del mismo Código, que establece que es nulo el acto jurídico contrario a las leyes que
interesan al orden público o a las buenas costumbres”. Es decir que existen límites a
estos contratos aún cuando los mismos no se encuentren tipificados.
3. NATURALEZA MERCANTIL
Dado que quienes se han dedicado al análisis de esta clase de contratos lo han
hecho desde una óptica comercialista o mercantil, siempre se ha aceptado sin dudas que
tal es la naturaleza de los contratos de publicidad. Sin embargo esto podrá discutirse por
las siguientes razones:
REZZONICO, Luis María: “Estudio de los Contratos en nuestro Derecho Civil”. Editorial de
Palma. Tomo II. Buenos Aires-Argentina, 1967.
DE LA PUENTE Y LA VALLE, Manuel: “El Contrato en General”, Biblioteca para leer el Código.
CONTRATOS (Pe tn-id I egislanon Jurisprudencia y Mrdelos) 201
tráfico comercial éste se halla tan inmerso en la vida civil de las personas, que sería
estéril tratar de diferenciar lo que la vida misma ha convertido en una sola realidad:
es necesario regir el Derecho Comercial por normas civiles y es necesario que el
Derecho Civil contemple aspectos comerciales, para otorgar seguridad jurídica a
todos los implicados en estas complejas relaciones obligacionales, y en especial a
los terceros que sufren muchas veces las consecuencias de las mismas.
- Pero fundamentalmente, porque en nuestro caso concreto cada vez es más evidente
que numerosos contratos de publicidad no tienen como finalidad el lucro o la ganancia
como es la norma en los contratos mercantiles. Más aun, tal vez estos contratos de
publicidad cuya finalidad es ajena al lucro mercantil sean aquéllos que en
determinadas ocasiones conciten la mayor atención del público. Nos estamos
refiriendo en particular a los contratos de publicidad relacionados con campañas
políticas electorales que en el tiempo de su duración se convierten en verdaderos
centros del interés ciudadano; sería absurdo encontrar finalidades mercantiles o de
lucro en el propósito de dichos contratos (hablar de “vender la imagen del candidato”
podrá ser aceptado técnica o sociológicamente, pero no jurídicamente). La finalidad
es la de difundir, convencer y hasta seducir pero no la de tener beneficio mercantil.
En Argentina REZZONICO (op. cit.) trata del tema pero en forma escasa y
refiriéndose únicamente a la modalidad del Contrato de Difusión Publicitaria al
que denomina contrato de publicidad, asimilándolo a las reglas de la locación de
obra.
c) Por su autonomía: Son contratos principales puesto que no dependen de otro que
les preceda.
h) Por su riesgo: son contratos conmutativos, pues incluso consideramos que debería
prohibirse la aleatoriedad en los mismos.
5. ARIAS SCHREIBER, Max: “Exégesis del Código Civil Peruano de 1984”. Ediciones San
Jerónimo. Lima 1988.
Los Contratos de Publicidad / Oswatdo Arias Montoya
6. R E L A C IÓ N DE LO S C O N T R A T O S DE P U B L IC ID A D C O N O T R O S
CONTRATOS TÍPICOS
Las nuevas figuras contractuales que han surgido se inspiran en contratos
tradicionales, pero llegan a constituirse en contratos con una identidad definida por la
aceptación general y por la elaboración teórica que se realiza en tomo a ellos. Siendo
varios los contratos de publicidad nos vamos a detener en ver sus relaciones con los
contratos tradicionales en cada caso.
8. CONCLUSIONES
Los Contratos de Publicidad, si bien se enmarcan dentro del ámbito del Derecho
Mercantil o Comercial, por ser especialmente contratos de colaboración empresarial y
contribuir en tal sentido a la celeridad del tráfico comercial; a pesar de ello, debido a la
complejidad de la vida social, a la utilización de medios de comunicación masivos y
particularmente a la existencia de asociaciones voluntarias no mercantiles, que requieren
de la publicidad para expresar sus opiniones y pronunciamientos, dichos contratos
trascienden el ámbito mercantil y necesariamente afectan relaciones de Derecho que
pertenecen al campo civil. Este trabajo ha servido para constar que debe hacerse un serio
análisis para distinguir cuáles son en concreto los sistemas de contratación publicitaria
que se utilizan actualmente, cuáles son las modalidades que requieren tipificación y
especialmente determinar las características que configuran dichos contratos. De nuestra
investigación hemos detectado modalidades como el Contrato de Suministro Publicitario,
de Creación Publicitaria, de Difusión Publicitaria y otros más; sin embargo creemos que
es necesaria una acuciosa elaboración jurídica doctrinal que ayude a ver con más claridad
toda esta compleja realidad.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 207
ANTECEDENTES
COMPETENCIA ARBITRAL
CLÁUSULA DÉCIMO SEGUNDA.- En lo que respecta a las posibles controversias
que pudieran suscitarse en torno a la ejecución e interpretación del presente contrato,
éstas serán sometidas a arbitraje, mediante un Tribunal Arbitral integrado por tres expertos
en la materia, uno de ellos designado de común acuerdo por las partes, quien lo presidirá,
y los otros designados por cada uno de ellos.
Si en el plazo de (...) días de producida la controversia, no se acuerda el
nombramiento del presidente del Tribunal Arbitral, éste deberá ser designado por el Centro
de Arbitraje Nacional y Extranjero de la Cámara de Comercio de Lima, cuyas reglas serán
aplicables al arbitraje.
El laudo del Tribunal Arbitral será definitivo e inapelable, así como de obligatorio
cumplimiento y ejecución para las partes y, en su caso, para la sociedad.
En señal de conformidad las partes suscriben este documento en la ciudad de
........ a lo s ..........días del mes d e ............... del 20..
EL AUSPICIADOR EL AUSPICIADO
Los Contratos de Publicidad / Oswaido Arias Montoya
ANTECEDENTES
CLÁUSULA PRIMERA.- LA EMPRESA es una persona jurídica de derecho privado
constituida bajo el régimen de la sociedad..... cuyo objeto social principal es la creación
de campañas de publicidad que permitan difundir los productos y servicios de sus
anunciantes, y también, crear, posesionar y fortalecer la imagen publicitaria de un candidato
político.
CREACIÓN DE LA CAMPAÑA
EXCLUSIVIDAD Y PREVENCIÓN
producirá de pleno derecho cuando una de las partes comunique, por carta notarial, a la
otra que quiere valerse de esta cláusula.
COMPETENCIA ARBITRAL
EL CANDIDATO LA EMPRESA
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 213
J u r is p r u d e n c ia
P u b l ic id a d y c o m p e t e n c ia d e s l e a l
RESOLUCIÓN 0347-2006/TDC-INDECOPI
1. PRELIMINAR
He aquí un relato hipotético que ilustra una situación cada vez más frecuente:
(*) Abogado por la Universidad de Lima. Maestría en Derecho de la Empresa por la Pontificia
Universidad Católica del Perú. Presidente de Echaiz Estudio de Abogados. Catedrático de la
Pontificia Universidad católica de Perú y de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas.
Miembro asociado del Instituto Peruano de Derecho Mercantil. Web: www.echaiz.com E-mail:
daniel@echaiz.com.
1. El autor desea agradecer la colaboración de su asistente de investigación académica, Ana
María Neciosup Cajas, para la preparación de este trabajo.
216 El Contrato de Outsourcing / Daniel Echaiz Moreno
«Durante el ejercicio 2006 hemos facturado 220 millones de dólares en los seis
países donde tenemos presencia y como consecuencia de dicho crecimiento,
hemos inaugurado nuevas áreas en la empresa y tendremos que seguir
haciéndolo, las mismas que, si bien no representan parte de nuestro core
businestf, se requieren a efectos de proseguir nuestro crecimiento en el mercado.
que genera valor para la empresa y sus grupos de interés. Empero, es imposible referirse
al contrato de outsourcing sin antes abordar sus antecedentes que se relacionan con los
conceptos trabajo y globalización, lo que jurídicamente ahora nos lleva hacia el Derecho
Laboral y el novísimo Derecho Global6. Sobre el particular, existen dos posiciones que
explican el nacimiento del outsourcing:
a) Por un lado, siendo la posición más aceptada, aquella que explica que el outsourcing
nace incipientemente en los años 70 del siglo pasado con la revolución post
industrial, encontrando su punto de ebullición dos décadas después con la revolución
informática, culminando con el modelo fordista7. Durante este período, la empresa
estadounidense se convierte en gran empresa, dedicándose no sólo a su negocio
principal, sino también a actividades satelitales que, aunque no son esenciales, sí
son necesarias. Y es el modelo post-fordista el que, de acuerdo a Raffaele De Lúea
Tamajo8, posibilita la flexibllización laboral, transformando los cimientos del entonces
tradicional Derecho Laboral.
b) Por otro lado, aquella que sostiene que en Italia la economía informal es la creadora
de la especialización flexible, antecedente del outsourcing', en efecto, surgió a
propósito de la inform alidad del sector agrario en su paso a la economía
agroindustrial, donde la pequeña empresa agraria necesitaba de servicios
especializados del sector informal (por tener menor costo de servicios) y de donde
nace la entonces incipiente figura del outsourcing.
Son dos entonces las tesis que explican la aparición del outsourcing: la economía
de gran escala y la economía informal; sin embargo, es la primera de ellas la que ha
recibido mayor aceptación por parte de la doctrina.
La nueva era del outsourcing
a) Por un lado, la empresa que contrata el outsourcing; en este caso nos adscribimos
a la denominación que le otorga la doctrina uruguaya, esto es, empresa cliente que,
en términos generales, es la que decide cuál es la actividad que se delegará a la
empresa de outsourcing.
b) Y, por otro lado, el outsourcer, que será a quien se le delega el core business, esto
es, la tarea de realizar la actividad de la empresa cliente porque cuenta con el
expertise del negocio.
b) Supervisar al outsourcer.
g) Coordinar la estrategia del negocio sin que esto cree una relación de subordinación
del outsourcer respecto a la empresa cliente.15
d) Retribuir al outsourcer.
e) Ser retribuido.
DHL & Fujitsu renovaron su contrato de outsourcing logístico por cinco años más
18. Viega, María José: Análisis de un contrato complejo: el outsourcing. Montevideo, s/e, 2002,
p. 7.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 225
f) Los bienes.- Los bienes de la empresa cliente que se necesitarán para la realización
de la tarea encomendada.
a) Focalización al core business.- Es, sin duda, el beneficio más notable del contrato
de outsourcing porque, al transferirse un proyecto o una actividad productiva o de
servicios, la empresa cliente puede dedicarse sin mayores preocupaciones a su
core business, lo cual conlleva, a su vez, a otros beneficios como mayor rentabilidad,
mejor calidad en el servicio, especialización de habilidades y adquisición de nuevas
tecnologías o conocimientcs, entre otros.
22- En:http://www.erp-spain.com/portal/erp-spain/listadonoticias/Controllfir?mvchandler=Dortals&
action=dispatch&idlnstance=40326§or id=&pAction=previfiw&idPortlet=57971&idPortal=
portal0&idSection=58010&lsflnit=null
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 227
27. Traducción: la ley apropiada es la ley que las partes han escogido expresa o implícitamente,
o aquella que le puede ser imputada en razón del lugar donde tengan una más amplia conexión.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 231
complementa la laguna del Derecho, considerando que las partes pueden someterse tanto
a las normas del Derecho hindú como al Derecho del territorio que ellos crean conveniente
y que, a falta de pacto, se regirán por las leyes hindúes.
ANTECEDENTES:
PRIMERA.- LA EMPRESA CLIENTE es una empresa que tiene como objeto social
la producción de alimentos.
DEFINICIÓN:
30. Nota del autor.- Este es un modelo de contrato de outsourcing que alude a empresas ficticias,
cuyos datos son también, en su integridad, ficticios, siendo su único propósito servir de modelo
contractual didáctico. Asimismo, conviene realizar dos precisiones: por un lado, redactar un
contrato de outsourcing supone, como todo contrato, analizar el caso específico y diseñar sus
cláusulas a la medida de la situación corporativa de las empresas, por lo que este modelo
debe tomarse solamente como una guía referencial, siendo indispensable la correspondiente
asesoría legal especializada; y, por otro lado, el contenido del contrato de outsourcing sería
distinto si contásemos con una regulación legislativa del mismo.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 235
OBJETO:
QUINTA.- Por el mérito del presente contrato y de conformidad con la voluntad de
las partes, LA EMPRESA CLIENTE encarga a EL OUTSOURCER la tarea de distribución
de pedidos, una vez obtenida la pick ¡n list del día, en todo el territorio peruano.
TERMINOLOGÍA:
SEXTA.- Entiéndase que los términos expresados en este contrato tienen el siguiente
significado:
1. P ick in list: Lista de distribución que contiene un completo detalle de todos los pedidos,
en cuyo legajo está la simulación (previsión de la venta) de cuántos ítems se venden,
sus componentes, los materiales y otros artículos, con la especificación de la
macroregión, departamento, provincia, ciudad, distrito y unidad a la que pertenece.
8. D espacho : Cuantificación de los pedidos que serán repartidos por cada unidad
automovilística.
PLAZO:
RESOLUCIÓN:
SISTEMA DE TRABAJO:
ASISTENCIA TÉCNICA:
DÉCIMO PRIM ERA.- LA EMPRESA CLIENTE se obliga a brindarle a EL
OUTSOURCER la asistencia técnica necesaria, dentro de lo que se incluye la información
sobre la forma de entrega de los productos, sus experiencias comerciales y los métodos
utilizados con el personal técnico.
DELEGACIÓN DE PERSONAL:
DÉCIMO SEGUNDA.- LA EMPRESA CLIENTE delegará a favor de EL OUTSOURCER
a tres trabajadores, en calidad de personal técnico, para el cumplimiento de las labores
especializadas materia de este contrato, cuyos gastos correrán por cuenta y a cargo de EL
OUTSOURCER una vez producida la transferencia. Dichos trabajadores son los siguientes:
SUPERVISIÓN:
RESPONSABILIDAD:
DÉCIMO SEXTA.- EL OUTSOURCER asume los gastos generados por la negligencia
y/o falta de previsión en el acceso a los puntos de la distribución, así como los gastos de
cualquier evento resultante de caso fortuito o fuerza mayor, obligándose a responder por
la entrega del bien o, en su caso, el bien sustituido por otro de iguales características.
INDEMNIZACIÓN:
DÉCIMO SÉPTIMA.- EL OUTSOURCER indemnizará a LA EMPRESA CLIENTE y
a sus socios, administradores y trabajadores por los daños y perjuicios irrogados, siempre
y cuando sean determinados por la autoridad competente.
CONFIDENCIALIDAD:
DÉCIMO OCTAVA.- EL OUTSOURCER esta obligado a guardar la confidencialidad
de los documentos que le fuesen confiados, así como los conocimientos y la información
técnica, financiera y comercial que le fuesen comunicados por LA EMPRESA CLIENTE,
incluyendo, sin limitación alguna, los nombres y la información de contacto de los clientes
y los datos técnicos. La obligación prevista en esta cláusula se extiende por cinco años
posteriores a la conclusión del presente contrato.
LEGISLACIÓN SUPLETORIA:
DÉCIMO NOVENA.- En todo lo no previsto por las cláusulas de este contrato rige
supletoriamente la legislación peruana vigente, especialmente el Código Civil y la Ley de
Propiedad Industrial, en lo que fuera aplicable.
COMPETENCIA JUDICIAL:
VIGÉSIMA.- Las partes contratantes declaran expresamente que, ante cualquier
controversia derivada de la ejecución del presente contrato, se someten a la competencia
de los jueces y tribunales de la ciudad de Lima.
En Lima, a los 16 días del mes de junio del 2007 se expiden tres ejemplares idénticos
de este contrato, los mismos que son suscritos por las partes en señal de conformidad.
J URISPRUDEN CIA
O u t s o u r c in g : P r im a c ía d e l p r in c ip io d e l a p r im a c ía d e l a
REALIDAD
I n t e r m e d ia c ió n l a b o r a l : C r it e r io s d e d if e r e n c ia c ió n c o n e l
OUTSOURCING
A.P. N° 1949-2004
Acción Popular
Sala de Derecho Constitucional y Social
Corte Suprema de Justicia de la República
A.P. N° 1949-2004
Tercero: Que tal como se advierte del artículo 1 de la Ley número 27626, el objeto
de esta norma es, además de cautelar adecuadamente los derechos de los trabajadores,
el de regular la intermediación laboral de la actividad privada, institución del Derecho del
Trabajo que supone un destaque de mano de obra, y bajo dependencia, de los trabajadores,
de los Services y cooperativa a la empresa usuaria.
Quinto: Que de la lectura del artículo 4 del Decreto Supremo 003-2002-TR, que
aprueba el Reglamento de la Ley número 27626, se aprecia que expresamente, esta
norma excluye del ámbito de la intermediación laboral, supuestos que no se asemejan a
la institución que es materia de regulación por la referida ley, esto es, los contratos de
gerencia conforme al artículo 193 de la Ley General de Sociedades, contratos de obra,
proceso de tercerización externa, contrato para hacerse cargo de una parte del proceso
productivo; pretendiendo en el fondo Identificar plenamente aquellas actividades que
resultan ser ajenas al objeto de intermediación laboral, finalidad que se ve corroborada
con lo señalado en su último párrafo, al precisar algunos elementos coadyuvantes a la
identificación de la tercerización de la mano de obra.”
r
EL CONTRATO DE FRANCHISING
(FRANQUICIA)
Sidney Alex Bravo Melgar1**
I. CONCEPTO
La definición que adopta UNIDROIT (Instituto de Derecho dependiente de las
Naciones Unidas, es la siguiente: “El Franchising es una operación de franquicia: Operación
contractual entre un franquiciante y un franquiciado, en la cual el franquiciante ofrece o es
obligado a mantener un interés permanente en el negocio del franquiciado, en aspectos
tales como el Know How y la asistencia técnica. El franquiciado opera bajo un nombre
comercial conocido, un método y procedimiento que pertenece, o que es controlado por el
franquiciante, y en el cual el franquiciado ha hecho o hará una inversión sustancial en su
propio negocio con sus propios recursos”.
El Franchising es un contrato de franquicia comercial; primer concepto surgido de
una sentencia surgida del tribunal de Bressier (Francia), en que se sintetiza la Franquicia
con una definición que luego tomó la Federación Francesa de Franchising.
Franchising. Se denomina como tal al método de cooperación entre una compañía
que ofrece una franquicia por una parte, y otra o muchas compañías que actúan como
franquiciadas, por la otra. Para el franquiciante esto involucra, primeramente, la propiedad
de un nombre de comercio, de símbolos distintivos, de una marca de comercio o servicio,
así como Know How que son confiados al Franchising.
En ningún país europeo de los grandes, tales como Alemania, Inglaterra, Suecia,
España ni en Suiza es posible hallar una definición legal del Franchising. Tampoco las hay
en el denominado “Pacific Rim”, ni Japón, ni Corea, ídem Taiwan.
III. PRECEDENTES
La jurisprudencia norteamericana, ha entendido que el pago de un honorario no
significa solamente el pago de una suma de dinero, porque cuando se inicia el sistema de
franquicia en Estados Unidos el capital que se requería para ingresar a una franquicia era
de aproximadamente US$ 20,000. Durante muchos años fue un “Land Mark”, con US$
20,000 no podía ingresar prácticamente a casi cualquier franquicia y esa suma de dinero
coincidía con los ahorros de los que estuvieron en guerra peleando en la segunda guerra
mundial, les permitía utilizar una enorme masa de personas que volcaban esos esfuerzos
en negocios. Esta forma de desarrollar la franquicia encontró un eco creciente y dio origen
a que no sólo el pago inicial fuese una suma de dinero, sino que podía venderse franquicias
246 El Contrato de Franchising (Franquicia) / Sidney Alex Bravo Melgar
donde el pago de dinero era simbólico, de un dólar, pero los ingresos del franquiciante
provenían de las comisiones que cobraban de los suministradores de equipos o materiales
al franquiciado y ese pago indirecto constituía prestaciones del franquiciado al franquiciante.
Esto dio origen a una serie de fallos jurisprudenciales en los Estados Unidos sobre problema
de las leyes que allí llaman “antitrust”, en donde se discutió si eran o no válidos los convenios
citados o “tie agreements”. Éste es un acuerdo por el cual quien toma una franquicia,
debe comprar sus suministros a una persona determinada. Se debatió durante mucho
tiempo si esto era o no legal, habiendo llegado la jurisprudencia a sentar lo que se denomina
la “per se rule” en virtud del cual no todos estos acuerdos son ilegales “per se”, sino que
son ilegales si se demuestra en qué grado se afecta la competencia.
Al mismo tiempo que se producía esta vertiente de la franquicia que involucraba
todo tipo de negocios, el Estado Federal no dictó ninguna ley de fondo ni patrocinó
leyes uniformes sobre franquicias. Sólo hay dos casos de legislaciones específicas,
negocios que en Estados Unidos son franquicias, que es el negocio de venta de nafta
que tiene una ley propia y la ley de concesionarias de automotores que tiene dos
artículos: “En el desempeño de un contrato de franchising, el otorgante debe celebrarlo
y actuar de buena fe”. Lo de celebrarlo es importante; porque en el derecho anglosajón,
los contratos se deben cumplir de buena fe, pero no hay un requisito legal que se
deba celebrar de buena fe; la buena fe se exige al cumplirlo, y esta ley exigió la buena
fe al celebrar los contratos del “franchise dealer agreement”, que nosotros traduciríamos
como concesión de ventas de automotores y que para los americanos es un franchising
de productos.
- La de productos,
- La de servicios, y
- La industrial.
normas para operar una empresa o prestar un servicio, conforme a un método, lo que no
está expresamente incluido en la definición europea.
Respecto al modo de otorgar las franquicias, se han desarrollado dos sistemas
diferentes: lo que se llama el “Development agreement” y el “Masterfranchisee agreement”.
El primero se distingue del segundo en un factor simple: se le concede a una persona el
derecho de explotar un producto en una región con la obligación de tener un cierto número
de locales propios.
El franquiciado debe desarrollar por ejemplo 8 locales en 8 regiones peruanas, en
cambio el “Master franchisee”, tiene la facultad de sub-franquiciar, aspecto que no puede
desarrollar el “Development franchisee”, pues este último tiene que asumir un riesgo
personal y controlar todos sus negocios. El “Master franchisee” tiene no sólo la facultad
de desarrollar negocios propios, vale decir abrir locales de su entera propiedad, conforme
al método del franquiciante, sino de sublicenciar a terceros esa misma franquicia. Actúa
como franquiciado y como franquiciante o subfranquiciante frente a terceros.
- La ley de petróleo norteamericana es tan amplia que cubre todo el aspecto del
negocio petrolero, y ahí el término franquicia significa un contrato entre la empresa
que refina el petróleo y su distribuidor, entre la refinadora y un minorista, entre el
distribuidor y otro distribuidor, o entre el distribuidor y un minorista es decir el dueño
de la estación de servicios que vende combustible al público. Todos ellos entran
bajo la ley de petróleo, que tiene las mismas características, excepto que regula
dos cosas muy discutidas en la doctrina europea, y en la jurisprudencia americana.
Allí se planteó el problema de la renovación en particular por la baja rentabilidad de
las estaciones. Esa rentabilidad se puede ver demorada en el tiempo por factores
no previstos por ninguna de las partes. Uno de los problemas discutidos fue si el
franquiciado tiene derecho a pedir una renovación de la franquicia, particularmente
en mercados en que la prestación de servicios se puede hacer en condiciones de
extrema necesidad, o en los que la forma en que se presta el servicio, no hace
variar significativamente la rentabilidad de la operación. Lo que se debatió en los
Estados Unidos es si el franquiciante en un negocio que es muy marginal en cuanto
a su rentabilidad, puede cancelar al franquiciado en cualquier tiempo y sin expresión
de causa cuando la inversión original es de cierta envergadura, y se llegó a la
conclusión de que debía haber una justa causa para hacerlo. Y este es un concepto
muy importante porque en Europa, donde no existe tal desarrollo, tampoco existe el
concepto de justa causa como recaudo en las leg isla cion es estaduales
norteamericanas, con alguna excepción. En otras la materia de la renovación o no
de la concesión es algo librado a la autonomía de la voluntad. Esta es la única
limitación que se tiene en el aspecto contractual. En el aspecto de lo que se
denominaría leyes “antitrust” o defensa de la competencia, existen muchos
inconvenientes en dos campos: la fijación de un precio cierto de reventa, que es
anatema para el Mercado común ya que no se puede tener ningún acuerdo por el
cual se exige a un distribuidor un precio fijo de reventa, porque es ilegal, o la separación
de mercados o la destrucción de la competencia que ellos llaman intermarca.
C O N T fíA T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 249
Mientras estos dos recaudos no existan, el convenio va a ser válido, pero ningún
convenio en el Mercado común que afecte a la competencia intermarca, es válido. Por el
contrario se sostiene que el Franchising favorece la competencia intermarca y destruye la
intermarca. Estos son los problemas que tiene la legislación europea.
Para analizar el punto de equilibrio desde la óptica del franchisor se debe analizar
que si él tiene que establecer su propio negocio (y más aún en el caso de que fuera un
extranjero) ha de incurrir en una cantidad de costos verdaderamente impresionante,
independientemente de que ya sabe que su negocio es un 90% exitoso. Le falta ese 10%
que tal vez conozca mejor el franchisee y que está conformado por las preferencias del
público de la región del franchisee y otros aspectos locales. El franchisor ya ha hecho su
o sus negocios, lo que le Interesa es seguir repitiendo su experiencia, no incursionar en
un terreno que desconoce, como es un país extranjero, pese a que hay publicaciones en
distintos idiomas de los estudios profesionales más prestigiosos, además de publicaciones
oficiales, y de cámaras empresarias; no es lo mismos la lectura de un papel o de leyes, y
la aplicación de las mismas en un territorio cuyas costumbres son totalmente desconocidas.
Desde el punto de vista del franchisor el negocio de habilitar franchiseeses realmente
el mejor que puede hacer, porque sus costos serán en general, sino nulos, mínimos. Tal
vez gastará en asesoramientos, tendrá algún representante en el país, además de estudios
de abogados y contadores... y nada más, porque en el fondo lo que va hacer él es prorratear
parte de su carga (que ya tiene por los negocios abiertos) entre una o más nuevas bocas
de ventas o de prestación de servicios.
En las operaciones del Franchising las inversiones son grandes pero permanecen
alentadas por una relación continua con el franchisor que se halla vendiendo y transfiriendo
un negocio exitoso, el empresario o el que va en camino de serlo, realmente tiene ganas
de invertir y si no le alcanza va a tomar un crédito porque, si el negocio es bueno, el capital
aparece de una u otra forma.
Es obvio que el franchisor antes de elegirlo como franchisee lo va a estudiar, a
radiografiar, no va a entregar su negocio exitoso a cualquiera. Por ello el futuro franchisee
tiene que cumplir bien sus deberes, es decir, presentar un proyecto sólido, utilizando las
técnicas usuales de plaza; debe prepararse una prefactibilidad, un P/E/R/T, debe ajustarse
a un cronograma para tener la obra e inaugurar en la fecha en que el franchisor se la
puede exigir, todo ello lo va a tener que hacer, pero eso es parte de esa relación continua.
En materia contable, el Franchising es tan nuevo que no hay normas que le sean
perfectamente aplicables, mas es necesario distinguir, tanto se trate del franchisor o del
franchisee, que ambos deben llevar sus registros y con eso comprender todo tipo de
anotación, razón y cuenta de negocios, en un estado casi inmaculado y transparente. El
franchisor deberá tener una carpeta de cada franchisee, con todos los detalles, como si
fuera una carpeta médica; desde que se inauguró hasta la actualidad; las ventas que hizo;
cómo le pagó los royalties, las auditorías que le fueron practicadas y cuáles fueron los
resultados, el personal con que cuenta, la higiene, etc. Mientras que por su parte el franchisee
va a tener que cuidar preeminentemente lo que en contabilidad es la exposición de motivos
de sus estados de cuenta, tomando esto como un principio. El tiene no sólo que abrir su
contabilidad a las auditorías que periódicamente le practique el franchisor, sino exponerla
de manera tal que no pueda haber dudas de todas y cada una de las operaciones que se
llevan a cabo. No es extraño que en un contrato de Franchising, el franchisor proponga plan
de cuentas, la metodología de las auditorías, la extensión, inclusive cuál va a ser la forma de
registrar las operaciones, qué sistema de computación se debe llevar para tratar de hacerlo
inexpugnable, algo que como se sabe no es posible, pero al menos que sea lo más
transparente y lo menos tentador posible para que nadie trate de saltar la cerca.
Todo esto requiere, por parte del franchisee, un nivel de análisis muy importante, por
lo general, cuando se hace un contrato, una vez firmado se guarda en un cajón, sea el
presidente de la empresa, sea del abogado o del contador, y no se vuelve a ver hasta que el
contrato termina o llega algún telegrama avisando alguna cosa. Así como en este contrato
deben intervenir interdisciplinariamente varios profesionales para su feliz firma y principio
de ejecución, también es cierto que una vez que el contrato está firmado, esas mismas
partes que intervinieron deben desmenuzarlo, adecuar ese contrato a lo que cada parte
deba hacer, sean empresarios, contadores, abogados, etc. para que en el tiempo el contrato
se cumpla cabalmente y no suceda como en muchos casos ha sucedido, que luego de
firmar el contrato se saludan, se dan la mano y se terminó. Allí empiezan los problemas.
En lo referente a los aspectos impositivos directamente relacionados con el impuesto
al valor agregado, los pagos por los conceptos involucrados en un contrato de franchising
no están alcanzados.
X. CARACTERES JURÍDICOS
Los principales caracteres jurídicos que enmarca el Franchising son los siguientes:
2) Es bilateral, ya que en sus relaciones existen dos sujetos que son el franquiciante
y el franquiciado.
3) Es un contrato atíplco, pues en el Perú no está regido por una normativa legal.
Mas en términos generales, este contrato se sujeta a las disposiciones generales
establecidas en el Código Civil.
7) Es de prestaciones recíprocas, ya que cada uno de los sujetos está obligado con
relación al otro.
8) Es oneroso, pues cada una de las partes sufre un sacrificio compensado por una
ventaja y genera, de consiguiente, enriquecimiento y empobrecimiento correlativos.
Como sucede con otros contratos, esta onerosidad no significa necesariamente
que exista equivalencia económica en las prestaciones y cabe siempre que haya
un desequilibrio real.
11) Comporta en cierta forma una operación de cambio, dado que su objetivo es
propiciar la transferencia de bienes y servicios y en suma, la circulación de la riqueza
y la multiplicación del trabajo, pero también es un contraste de cooperación, en la
medida que plantea una estrecha colaboración entre el franquiciante y el
franquiciado.
12) Es consensual, por aplicación de lo dispuesto en el artículo 1352° del Código Civil.
Pero en la práctica se celebra por escrito, dada su trascendencia económica y los
diferentes derechos y obligaciones que nacen como consecuencia de su
formalización y se cumple con frecuencia la forma de celebración por adhesión,
esto es sobre la base de cláusulas predispuestas (contratos-tipo).
15) Es un contrato moderno, puesto que su aplicación en strictu sensu recién hoy en
día se está patentizando diáfanamente en nuestro país.
254 El Contrato de Franchising (Franquicia) / Sidney Alex Bravo Melgar
XI. CLASIFICACIÓN
Según Nicolás Zullo el Franchising se divide en dos grandes categorías como
son:
a) Franchising de servicio
b) Franchising de distribución
En estos casos el franquiciante le indica al franquiciado los productos que tiene que
vender, con el aporte de una marca o enseña y varios servicios de organización y
venta. Se dan como ejemplos la venta de productos de alimentación, productos
textiles y análogos.
a) Franchising individual
b) Franchising regional
En este caso las partes deben ser muy cuidadosas, ya que en función del
franquiciado, su inversión será mucho mayor (honorario de ingreso, acuerdo y largo
plazo para la apertura de determinado número de unidades, etc.) y en el caso del
franquiciante, un territorio queda en manos de un solo franquiciado, lo que plantea
exigencias de calidad y otras debidamente analizadas.
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 255
Esta figura constituye una opción interesante para la implantación más rápida de
redes de penetración de mercado en países grandes como Brasil y Argentina, que
tienen en algunos casos muchas diferencias regionales.
d) Franchising de supervisión
Suele confundirse esta función con la del representante, pero el vínculo del
fran qu iciad o su pe rviso r es m ucho más estrecho, ya que su margen de
responsabilidad es mínimo y el poder de decisión prácticamente nulo. Esto va en
contra del Franchising mismo, donde se busca integración, compromiso y eficiencia.
El franquiciado supervisor tiene que hacer una inversión inicial baja, ya que no
suele obligarse a instalar una unidad propia y recibe parte de los honorarios de
ingreso y de los demás servicios cobrados por el franquiciante.
256 El Contrato de Franchising (Franquicia) / Sidney Alex Bravo Melgar
b) Falta de flexibilidad en los negocios, cuando se tiene una red propia es fácil
cambiar los productos o servicios, así como las estrategias de mercado y
otras modificaciones.
Se pone como ejemplo el de una unidad propia que puede ser cerrada de la
noche a la mañana, lo que no cabe hacerse con una unidad franquiciada.
- Economía de escala;
propio y tener que seguir al mismo tiempo una serie de normas que se imponen
al franquiciado y con las cuales no siempre estará de acuerdo, aun cuando sepa
que han sido diseñadas para su propio beneficio. Es pues sumamente importante
un buen diseño en la franquicia, ya que al exagerarse la nota de control, el
franquiciado pasa a ser un operador más en vez de un empresario independiente
y esto es perjudicial para el negocio, tanto en el mediano como en el largo plazo.
f) Cuidar que el franquiciado reciba los productos que serán colocados por el
franquiciador y facilitarle la formación de un “stock” en caso de haber sido
convenido.
a) Efectuar el pago inicial por obtener la franquicia y las regalías que hayan sido
establecidas a favor del franquiciante.
c) No hacer uso indebido de las marcas y nombres a las que tiene acceso en
virtud del contrato.
ASPECTOS LEGALES
El Contrato de Franquicias, es un contrato atípica, en lo que a nuestra legislación
se refiere, porque no se encuentra tipificado como tal, por ello se puede celebrar atendiendo
las cláusulas generales de contratación contenidas en le código civil.
El ente encargado de regular y registrar las Franquicias Extranjeras en el Perú es el
Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad
Intelectual: INDECOPI, a través de la Oficina de Signos Distintivos-Área de registro de
Transferencia de Tecnología Extranjera.
Así las normas que regularían las franquicias en nuestro país serían:
ANTECEDENTES
El FRANQUICIANTE ha desarrollado un sistema, denominado ............ para la
explotación de restaurantes especializados en la preparación y venta de comida rápida
según recetas especiales elaboradas que incluyen ingredientes, secretos y fórmulas de
diversa naturaleza.
DURACIÓN Y RENOVACIÓN
DISPOSICIONES VARIAS
VIGÉSIMO QUINTO: Los otorgantes podrán solicitar, en cualquier tiempo, que este
contrato se eleve a escritura pública, corriendo el gasto por cuenta del peticionario.
En fe de lo anterior las partes han firmado este contrato de franquicia. Y suscriben
el presente documento a lo s ..............días del mes d e ....... del 200...
FRANQUICIANTE FRANQUICIANTE
J u r is p r u d e n c ia
J u r is p r u d e n c ia d e f r a n q u ic ia *
Tomado de: CHULIA VICENT, Eduardo y BELTRAN ALANDETE, Teresa: “Aspectos jurídicos
de los contratos atípicos”. Tomo I, pág. 219- 238, Bosch Editor, Barcelona, España 1999.
CONTRATOS {Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 267
F r a n q u ic ia : D e v o l u c ió n d e l c a n o n
INTRODUCCIÓN
Hablar del contrato de distribución es referirnos a los canales de comercialización
de bienes o productos, que caracterizan a las economías de escala para llegar a los
consumidores finales; es decir, al nexo que vincula a productores, fabricantes mayoristas
con los consumidores finales a través de una red organizada y sistematizada que permite
que los fabricantes organicen la comercialización de sus productos por medio de
1. Abogada por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, con estudios de Post Grado en
la Maestría de Derecho de Empresa en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Asistente
de función Registral en la SUNARP.
272 Contrato de Distribución Comercial / Salina Corín Huayanay Chuquillanqui
intermediarios que los venden, de forma que se esa se concentre sólo la venta de su
producción. Y eso es así, porque como señala Fariña: “Uno de los problemas de la empresa
productora, en una economía de mercado en permanente expansión, se refiere a la
necesidad de llegar con sus productos o servicios al público, de modo eficiente, uniforme,
ágil, con el menor riesgo y costo posibles, para lo cual debe competir en los grandes
centros comerciales y en otros medio de venta directa, como consecuencia de la
generalización de la venta en masa y de la publicidad masiva.”2
I. DEFINICIÓN
2. FARIÑA, M., Juan: “Contratos Comerciales Modernos", Ed. Astrea, Buenos Aires 1997 Dáa
391.
3. Ahora bien, sin embargo es menester señalar que el productor puede llegar al público sin
recurrir a una red Integrada por terceros, para la colocación de sus productos a los
consumidores directos a través de bocas de expendio directo, oficinas de ventas, sucursales
stands, locales de ventas de shoping center (centros comerciales) etc., etc. Sin embargo la
distribución constituye una de las mejores formas de competir en el mercado frente a los
productos de otros fabricantes.
4. Otros canales de distribución a través de terceros son: la Agencia, la Concesión Mercantil, y
el Franchlsing, teniendo todos estos contratos las siguientes características comunes: á).
Existencia de dos empresas u organizaciones independientes; b) Relación contractual bilateral;
c) . Posibilidad de que la empresa productora celebre múltiples contratos de esta naturaleza;
d) . Vínculo de cooperación (o colaboración); e). Permanencia, y f). Finalidad (esto es, la
colocación en el mercado por parte de una empresa de los bienes o servicios que produce la
otra). (FARIÑA, Juan: Ob.cit., pág. 405).
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 273
5. ETCHEVERRY, Raúl Aníbal: “ Nuevas Figuras Contractuales” Ed. Astrea, Buenos Aires,
1987.
6. MARZORATI, Osvaldo J.: “Sistemas de Distribución Comercial: Agencia, Distribución,
Concesión, Franquicia Comercia!”. Ed. Astrea, Buenos Aires 1995. pág. 53.
7. Diego MESSEGER GUICH, cita a MARZORATI cuando este dice que: “Este contrato enmarca
en todos los casos un contrato entre fabricante y un intermediario independiente, es decir, no
sujeto a vínculo laboral ni a vínculo societario, sus utilidades le pertenecen exclusivamente, y
autónomo e cuanto, si bien recibe órdenes y consigna a veces minuciosas del fabricante,
realiza u negocio en la forma que considera mas conveniente, y a veces en los casos de
grandes distribuidores, utiliza marcas propias para la comercialización de productos ajenos".
(MESSEGER GUICH, Diego “Manual de Contratos”. Ed. Caballero Bustamante, Lima, 2004,
pág. 681).
274 Contrato de Distribución Comercial / Selina Corín Huayanay Chuquillanqui
8. ZAVALA RODRÍGUEZ; “Código de Comercio Comentado”, Vol. III, Buenos Aires, pág. 721.
9. Cada una de las partes contrata con la otra en razón de consideraciones que le merecen sus
cualidades personales y su competencia en el campo de sus respectivas actividades
comerciales.
10. Como señala Etcheverry: “La duración tiene como contenido económico para las partes, pues
afecta parcial o totalmente sus inversiones y la actividad de sus respectivas empresas a ese
fin, en función del plazo de dicho contrato” (ETCHEVERRY, Aníbal: Obligaciones y Contratos
Comerciales. Parte General, pág.171)
CONTRATOS (Doctrina. I egislación, Jurisprudencia y Modelos) 275
g) Es un contrato oneroso, las partes contratan por que buscan utilidades valorables
económicamente; así, como lo señala Marzorati: “El distribuidor obtiene una ventaja
económica consistente en lo que los terceros abonarán por sus servicios o por los
productos prestigiosos del proveedor; el proveedor por su parte recibe la compensación
del distribuidor, limita su riesgo comercial y aumenta su penetración en el mercado.”12
11. “Según Huayanay: “Son aquellos que quedan formados o perfeccionados por el solo
consentimiento de las partes; desde que ellos han manifestado recíprocamente su
consentimiento sin que se requiera de otra form alidad o requisito" (HUAYANAY
CHUQUILLANQUI, Hugo: “Contratos: Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos”, Tom
I. Pág.42). Por su parte el maestro Messineo sostiene que: “Es un contrato consensual no
aquel por el cual sea necesario el consentimiento (el consentimiento, en efecto, es necesario
para todo contrato), sino aquel para el cual, el consentimiento, siempre necesario, sea también
suficiente”. (MESSINEO, Francesco: “Manual de Derecho Civil y Comercial”, Tomo IV, Ediciones
Jurídicas Europa-América, Buenos Aires. 1979, pág 442).
12. MARZORATI, Osvaldo J.: Ob.. cit., pág. 64.
13. Como anota Hugo Huayanay: “Llamados también sinalagmáticos, son aquellos en los que
ambas partes contratantes se obligan recíprocamente a cumplir determinadas prestaciones,
una a favor de la otra; resulta así que ambas partes se constituyen en deudoras y acreedoras
recíproca e inversamente” HUAYANAY CHUQUILLANQUI, Hugo: “Contratos: Doctrina,
Legislación, Jurisprudencia y Modelos”, Ed. Rao Jurídica, Tomos I y II, Segunda Edición,
Lima, 2002, pág. 40).
14. Estamos pues en presencia de un contrato de colaboración ya que existen un conjunto de
obligaciones para cada una de las partes contratantes, puesto que aquellas no pueden ser
concebidas en forma individual. Así, el elemento de la “colaboración” nace de la cooperación
que da la actividad de una de las partes al campo de acción de la otra, pro no existiendo entre
aquellas subordinación; se deben recíproca colaboración y el cumplimiento de sus actividades
bajo la buena fe.
276 Contrato de Distribución Comercial / Salina Corto Huayanay Chuquillanqui |
IV. ELEMENTOS
El contrato de distribución presenta básicamente los siguientes elementos:
15. Como señala Marzorati: “El contrato de distribución permite que el proveedor o fabricante, sin
mayor necesidad de invertir capital, obtenga beneficios minimizando sus riesgos, ya que solo
vende sus productos sus distribuidores, percibiendo el precio del distribuidor a la vez que
traslada el riesgo de la venta al menudeo sobre este” (MARZORATI, Osvaldo J.: Ob., cit,
pág. 56).
16. Como señala Marzorati: “El distribuidor toma a su cargo no sólo el riesgo, sino también la
organización de la prestación y su funcionamiento, beneficiándose con el prestigio de los
bienes que distribuye”. (MARZORATI, Osvaldo J.: Ob., cit., pág. 57).
17. Como señala Fariña: “Al actuar el distribuidor en nombre e interés propio, desvincula a quien
le vende los bienes y servicios de aquellos que lo adquieren, salvo los derechos emergentes
por vicios en los productos elaborados” (FARIÑA, Juan: Ob.cit., pág. 419).
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 277
18. HUAYANAY CHUQUILLANQUI: Hugo: “El Contrato de Suministro”, en: Contratos, Ob., cit,
Tomo I. Pág. 114
19. Como señala Fariña: “Entendemos que en verdad debe hablarse margen de reventa v no de
remuneración, pues ésta significa un pago hecho por otro, en tanto que el beneficio del
distribuidor resulta de su propia actividad, pues él adquiere la mercadería y debe abonar su
precio sea cual fuere la suerte posterior en su reventa; de modo que su ganancia depende
exclusivamente de su éxito en el mercado y de la diferencia que obtenga entre lo que deba
pagar al proveedor y lo que cobre a sus clientes". (FARIÑA, Juan: Ob.cit., pág. 413)
20. Porque el distribuidor obtiene su beneficio económico a través de la venta a nombre propio y
por su cuenta facturando al cliente y lucrando con la diferencia.
21. MESSEGER citando a Fariña señala que: “El distribuidor obtiene una ventaja económica
consistente en lo que los terceros abonarán por sus servicios o por los productos prestigiosos
del proveedor; el proveedor por su parte recibe la compensación del distribuidor, limita su
riesgo comercial y aumenta su penetración en el mercado. (MESSEGER GUICH, Diego:
“Manual de Contratos’’. Ob., cit., pág. 684).
278 Contrato de Distribución Comercial / Selina Corto Huayanay Chuquillanqui
Ahora bien, como hemos señalado, es política regular en estos contratos que el
precio final sea establecido por el proveedor o fabricante, sin embargo nada impide
que el distribuidor considere hacer unos descuentos o rebajas sobre aquellos, o
también que aquel haga bonificaciones sea del modo o forma de pago de sus
clientes.
Sin embargo, debe mantener dicha función sujetándose tan sólo a la política de
precios de reventa de los bienes a los consumidores finales, así como a la política
de mercadeo que son previamente establecidos por el fabricante o proveedor.24
22. Ello porque el beneficio económico y pecuniario que percibe el distribuidor por dicha actividad,
resulta deducida de la propia actividad que este realiza, de su propio riesgo, ya que su ganancia
depende del éxito de la distribución y venta en el mercado, deducido del precio que paga al
productor y del que percibe de los consumidores finales.
23. MARZORATI, Osvaldo J.: Ob., cit., pág. 65.
24. Según Marzorati: “No obstante, existe una planificación comercial, al establecer precios
unitarios, régimen de mercados, aceptación y colaboración de un determinado programa de
propaganda o publicidad, centralizado por el productor y compartido en mayor o menor entidad
e intensidad por el distribuidor MARZORATI, Osvaldo J.: Ob., cit., pág. 68.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 279
Cabe agregar sin embargo que, sí bien el proveedor no mantiene un control directo
sobre el distribuidor, sin embargo mantiene un control mínimo cuando se trate de la
distribución de bienes o productos que son distribuidos con la marca del proveedor.
Ahora bien, ese carácter de intuito persoane del contrato de distribución, acarrea la
imposibilidad de ceder la posición de distribuidor y/o de proveedor; así, los derechos
que el contrato atribuye no pueden ser trasmitidos a ningún título26. Porque dicha
prohibición de ceder los derechos y su posición en el contrato es coherente con el
carácter intuito personas de esta modalidad contractual.
25. Ahora bien, sí se trata de bienes tecnificados se exigirá cierto grado de capacitación técnica.
26. Generalmente se establece en el contrato, que la calidad del distribuidor es intransferible o
que los derechos que acuerda en la distribución no se pueden ceder. Incluso en algunos
casos se prevé que los derechos que acuerdan las partes, no son transferibles por la muerte
del distribuidor.
280 Contrato de Distribución Comercial / Selina Corín Huayanay ChuquiUanqui
27. El contrato de distribución, si bien es cierto en sentido amplio, tiene como objeto principal
encomendar la distribución de bienes, o productos; accesoriamente además se le pueden
añadir otras figuras contractuales: contrato de suministro, contrato de arrendamiento de bienes,
franquicia, que aparecen coligados pero que por cuyas características propias son
perfectamente distinguibles.
28. Ahora bien, esa exclusividad puede ser unilateral o bilateral (a favor solo del proveedor o del
distribuidor; o a ambos.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 281
29. En algunos casos, el fabricante o proveedor, posee un local para el expendio de los productos,
con instalaciones adecuadas y cede su uso al distribuidor.
30. Los distribuidores deben regir su actividad por ciertas condiciones impuestas por el proveedor,
sujetándose a ciertas normas de supervisión por aquel impuestas. Sin embargo, aquellas
limitaciones no le quitan autonomía y, no les privan de su calidad de comerciantes. Ya que si
bien se le imponen ciertas condiciones sobre la forma en que debe ejecutarse el encargo o la
comercialización, mantiene su autonomía e independientemente al frente de su propio
establecimiento y organización empresarial, manejándolo su negocio a su libre arbitrio, su
cuenta y riesgo.
282 Contrato de Distribución Comercial / Selina Corín Huayanay Chuquillanqui
En este sentido algunos autores han tratado de identificarlos como similares; sin
embargo presentan ambos marcadas diferencias. Ya que en la franquicia no hay,
estrictamente, un contrato de distribución, puesto que el franquiciado no compra
para revender sino que adquiere el derecho al uso de una marca y de métodos de
producción y comercialización. Generalmente, el franquiciante celebra contratos
similares con otros comerciantes, formando una red de contratos, asignando zonas
y exclusividades. Claro si bien es cierto que la franquicia puede contener elementos
del contrato de suministro o de distribución y viceversa, y también en muchos
contratos de suministro o de distribución se incorpora la figura de la franquicia; pero
son diferentes pues, pues, como apunta Rodríguez, en el contrato de distribución
no se transfiere tecnología alguna, ni el pago de tasa por publicidad, ni la
obligatoriedad de una relación continua e indivisible, ni la obligación post contractual
de no competir o guardar confidencialmente los conocimientos adquiridos, lo que sí
se da en los contratos Franquicia.
genero que significa el contrato de distribución; en este sentido, para que se produzca
la transición que convierte en contrato de distribución en un contrato de concesión
es necesario la inclusión de cláusulas de exclusividad por las dos partes y la
obligación de Service y garantía de los productos que se distribuyen.34
38. En este último supuesto estamos frente a un vencimiento del plazo que puede haber sido
redactado a plazo expreso o a plazo tácito.
39. Como anota Hugo Huayanay: “Generalmente los contratos finalizan por cumplimiento, esto
es cuando cumplen los efectos, cuando realizan la misión esperada. Pero hay casos en los
que se frustran dichos efectos, estamos entonces frente al incumplimiento del contrato, en
estos casos las causas pueden ser: por causas originarias a la celebración del contrato
(acarrearán la nulidad), o por causas sobrevinientes a la celebración del contrato, en ésta
última se presentan dos supuestos: que aquellas causas sean ajenas a las partes, en aquel
caso estaríamos ante una Imposibilidad de cumplimiento o que estas causas, sean relativas a
las partes, en este caso se presentan a la vez tres afectos: la rescisión, la resolución y la
revocación del contrato". (HUAYANAY CHUQUILLANQUI: Hugo; Ob. Cit, Tomo I, pág. 65).
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 285
Ahora bien, puede que el contrato haya sido redactado a plazo indeterminado; en
este caso como señala Fariña, caben los siguientes supuestos: “1o que se prevea la
posibilidad de extinción mediante una declaración de voluntad unilateral de cualquiera de
las partes; 2o Resolución contractual por causa justa; y 3a que el contrato nada prevea”.40
En el primer punto es necesario señalar que, las parles deben actuar en caso de rescisión
unilateral, con cartas de pre-aviso de plazos razonables, a fin de evitar un daño a la otra
parte; ya que una rescisión sin causa e intempestiva da derecho a la otra parte a reclamar
una indemnización por los daños sufridos.41
44. Esto es corriente en el Derecho mercantil. Ya que los comerciantes van forjando con su
quehacer cotidiano continuamente negocios nuevos y los utilizan convencionalmente hasta
que el legislador constata su existencia y los regula (los tipifica) para atender necesidades
sociales y económicas, para la tutela de los particulares involucrados y aun del interés del
propio Estado.
286 Contrato de Distribución Comercial / Selina Corto Huayanay Chuquillanqui
XI. BIBLIOGRAFÍA:
• FARIÑA, M., Juan: “Contratos Comerciales Modernos”, Ed. Astrea, Buenos Aires,
1997.
ARTÍCULOS:
ANTECEDENTES
PRIMERO: EL FABRICANTE es una empresa constituida bajo el régimen..................
de dedicada a la fabricación de .................. , e importación d e ........... , que desea
comercializarlos en le país, a través de una empresa especializada en la distribución de
dichos productos.
SEGUNDO: EL DISTRIBUIDOR es una empresa constituida bajo el régimen
de..............., siendo su objeto social la comercialización de los productos indicados en la
cláusula precedente.
OBJETO
TERCERO: En virtud del presente contrato EL FABRICANTE se compromete a
entregar los bienes y productos a que hace referencia en la cláusula Primera a EL
DISTRIBUIDOR, en el volumen y periodicidad estipulados en las cláusulas que siguen, por
su parte EL DISTRIBUIDOR se obliga, comercializarlos en la zona establecida, a cambio
que se otorge un descuento del 20% sobre la el precio de venta al público; debiendo pagar
a EL FABRICANTE el precio correspondiente a los lotes entregados de dichos productos en
la en la forma y oportunidad convenidas en las cláusulas precedentes de éste contrato.
CARÁCTER DE EXCLUSIVIDAD
CUARTO: Las partes de común acuerdo señalan, dado las características especiales
del contrato de distribución que este es de carácter intuitu personae. Así, ambas partes no
podrán ceder a ninguna otra, su posición de FABRICANTE o de DISTRIBUIDOR; debiendo
aquellas en forma directa y personal, asumir las obligaciones contraídas en virtud del
presente contrato.
PLAZO Y RENOVACIÓN
las partes conviene que aquel plazo, podrá ser renovado por igual periodo cuando las
partes lo estiman así.
GASTOS Y TRIBUTOS
RESOLUCIÓN UNILATERAL
DÉCIMO TERCERO: Por tener el presente contrato de distribución carácter
continuado, para dar termino al mismo cualquiera de las partes deberá comunicar a la
otra su decisión de poner fin al contrato, por conducto notarial y con una anticipación de
....... días.
DÉCIMO QUINTO: Todos los gastos y tributos derivados de la celebración del
presente contrato serán de cargo de EL FABRICANTE.
SOLUCIÓN DE CONTROVERSIAS
DÉCIMO CUARTO: Las partes acuerdan que en caso de dudas sobre el alcance de
algunas de las cláusulas del presente contrato, aquellas se someterán a la decisión
inapelable de un árbitro, quien será designado de común acuerdo por ellas.
COMPETENCIAS Y DOMICILIOS
DÉCIMO SEXTO: En todos los casos no contemplados en la cláusulas anterior y en
caso de de posibles controversias que pudieran suscitarse durante la ejecución de las
prestaciones de este contrato, las partes se someten a la competencia de jueces y tribunales
de la ciudad d e ...... y señalan como sus domicilios los indicados en la parte introductoria
del presente contrato, para cualquier tipo de comunicación al respecto.
DISTRIBUIDOR FABRICANTE
290 Contrato de Distribución Comercial / Selina Corto Huayanay Chuquillanqui
J URISPRUDEN CIA
C o n t r a t o d e d is t r ib u c ió n :
D if e r e n c ia c o n e l c o n t r a t o d e a g e n c ia
C o n t r a t o d e d is t r ib u c ió n s e l e c t iv a
Resumen: Calificación del contrato suscrito entre las partes. Contrato de distribución
selectiva, dentro de los denominados contratos de colaboración y que presenta la
peculiaridad a diferencia del contrato de agencia que el concesionario actúa en su propio
nombre y por su cuenta, en la zona geográfica asignada, asumiendo los riesgos de las
operaciones comerciales que realiza con los clientes, con capital propio.
r
EL CONTRATO DE ENGINEERING
Sidney Bravo Melgar'
1. CONCEPTO
El concepto del contrato moderno de Engineering, esta ligado a la concepción y a la
construcción de una unidad industrial al menor costo, en los plazos más rápidos y por
ende con la calidad más elaborada. En consecuencia tal cual lo afirma Ricardo Sandoval
López profesor de la Universidad Católica de la Santísima Concepción de Chile; el término
de Engineering comprende no sólo la ciencia de la Ingeniería, esto significa las prestaciones
intelectuales relativas a la concepción de una obra, Ídem, sino que, comprende los
suministros y las tareas operacionales.(*)
(*) Abogado Egresado de la Universidad Católica de Santa María de Arequipa. Doctor en Derecho.
Catedrático de Postgrado de la Universidad Federico Villarreal. Catedrático en el Post Grado
en esta misma Universidad. Ha publicado los libros: “Contratos Modernos Empresariales”, “El
contrato de Franchislng”, “El Contrato de Joint Venture” entre otras obras.
294 El Contrato de Engineering / Sldney Bravo Melgar
3. CLASIFICACIÓN DE ENGINEERING
El contrato traído a colación, se caracteriza por que tiene por objeto prestaciones
intelectuales, consistentes en conocimientos contenidos en planos, esquemas o dibujos y
ciertos suministros materiales, para la realización de una obra o instalación industrial, que
la empresa de Engineering puede o no obligarse a llevar a la práctica.
Lo último citado no es esencial en la operación.
Por consiguiente, el adquirente podrá elegir el diseño que responda mejor a sus
necesidades. Téngase en cuenta que en un contrato de Engineering de llave en
mano, es el propio contratista quien suministra el equipo y efectúa la construcción
siguiendo el diseño contenido en su oferta; es posible que este diseño refleje
economías de fabricación, de construcción y técnicas de que dispone el contratista
con lo que se conseguiría que la construcción resultara económica y eficiente. Pero
por otro lado le puede resultar difícil al adquirente invitar a todos los posibles
contratistas, a que indiquen en sus ofertas desde un punto de vista del diseño, los
métodos y los elementos de construcción que ellos presenten.
Este sistema es conocido con el nombre citado. El adquirente puede utilizarlo como
medio para que el contratista responda no sólo de la terminación de todas las
instalaciones, sino también de la -transmisión al personal del adquirente de los
conocimientos técnicos y administrativos necesarios para hacer funcionar correcta
mente las instalaciones a diferencia del caso en que el contratista se obliga
simplemente a capacitar al personal del adquirente en la explotación de las
instalaciones. Conforme a este sistema, el contratista debe garantizar la eficacia de
la capacitación que imparte. En consecuencia, el contrato debe precisar los
resultados que el contratista tiene que lograr mediante la capacitación. Se puede
estipular que con la capacitación impartida, el personal del adquirente ha de estar
en condiciones de explotar las instalaciones durante el período de prueba convenido,
siguiendo la orientación del personal directivo del contratista.
Así el otorgamiento de la licencia sobre una patente queda regida por el contrato
de licencia; el traspaso de un Know How a través del contrato de Know How; el suministro
de m ate ria les y e quipos por las norm as del co n tra to de co m p ra -ve n ta o de
aprovisionamiento; la Ingeniería civil por el contrato de locación de obra o confección
civil; y los estudios y proyectos, por medio de un contrato de asesoría técnica o de
Ingeniería consulta.
Jacques Gournier, en su obra «Engineering ¡n verbo» «Contrats et obligations»
Recueil Dalloz de Droit Commercial; afirma que, siguiendo las enseñanzas de
Planiol, se trata de un complejo de contratos que se origina por la yuxtaposición de
diversos contratos nominados, al cual no se puede aplicar un régimen jurídico propio,
único, sino reglas correspondientes a cada uno de los elementos. Es así como se puede
distinguir un arrendamiento de servicios en la fase estudios, una licencia de patente, un
Know How si se traspasa un secreto o un procedimiento, una venta de material, un contrato
de ejecución de obra material y así cada vez que se efectúa una nueva prestación. Su
calificación vendría a agregarse a los ya existentes.
Hay juristas que a contrario sensú, señalan que a pesar de existir combinación de
diversas prestaciones, nos encontramos necesariamente en presencia de un contrato
único sui generis, que tiene una calificación propia; no existe una yuxtaposición de
convenciones conocidas sino interdependencia entre ellas; los autores no están de acuerdo
en la calificación que debe atribuirse al contrato único. Para algunos (Jacques Hansenne),
es preciso establecer una jerarquía de las prestaciones, así el contrato tendría la calificación
de la prestación más importante de la cual las otras serían accesorias.
En tal virtud, dependiendo del caso habría un contrato de transferencia de tecnología
acompañado de Ingeniería o de una ejecución de una obra material.
Existen otros autores que señalan que se trata de un contrato propio e hiper sui
generis, que tiene características propias, mixturando en una misma convención los
elementos de los distintos contratos conocidos.
Jean Marie Deleuze, considera ante la interdependencia entre los elementos que
componen el contrato, que no hay otra forma que entenderla corno un contrato innominado
que comporta reglas propias creadas por las costumbres establecidas poco a poco, según
las necesidades y la evolución de los imperativos económicos.
Para nosotros el Engineering es un contrato atípico, con características peculiares,
Ídem es un contrato innominado, en tal virtud queda sujeto en su regulación, supletoriamente
a lo dispuesto en el art. 1351° y ss. (Libro Vil del Código Civil del 1984, Fuentes de las
obligaciones).
Los derechos y las obligaciones se regulan por los diversos contratos que
integran la operación.
8. CONCLUSIONES
(*) Ex Juez titular. Ex Registrador Público. Ex Fiscal Decano. Ex Jefe de Registros Públicos.
300 •sus Torres M,
Por lo cual debemos recurrir a otras fuentes del derecho como la costumbre, la
jurisprudencia y la realidad social, en tal sentido corresponde estudiar las mismas en lo
referido al corretaje inmobiliario.
El derecho no puede dejar de lado la realidad social, por que el derecho vivo se
aprecia en la misma, la cual es de mucha importancia para el derecho. En la jurisprudencia
también se aprecia el derecho vivo.
Por lo cual debemos precisar que las fuentes formales del derecho a veces no
regulan determinada figura jurídica, pero esta se celebra en la práctica, por lo cual
podemos afirmar que el derecho positivo no puede regular toda la realidad social, sino
- sólo regula parte de la misma, ya que regular todos los supuestos de aquella social es
muy complejo.
Existen diversas clasificaciones de las familias jurídicas, entre las cuales destaca la
clasificación efectuada por René DAVID, por la cual se clasifica a los sistemas jurídicos en
cuatro familias jurídicas que son las siguientes: 1) familia jurídica romano germánica, 2)
familia jurídica del common law. 3) familia jurídica de los derechos socialistas, y 4) familia
jurídica de los sistemas filosóficos y religiosos2.
Lucio PEGORARO y Angelo RINELLA precisan que en sentido lato, los sistemas
jurídicos del common law tienen su origen en el legal system que se formuló en Inglaterra
y que se extendió a los ordenamientos que evolucionaron a partir de la base inglesa,
como sucedió en el caso de los Estados Unidos de América3.
Los sistemas del civil law encuentran, en cambio, en la tradición del derecho romano45
las raíces de su misma estructura. Tienen su principal área de difusión en los Estados
democrático-liberales de la Europa continental y en los que derivan de ellos (por ejemplo,
en los Sudamérica)6.
Muchos juristas consideran que la ley no es fuente del derecho en los Estados que
forman parte de la familia jurídica del common law, lo cual no correcto, por que en dichos
Estados la legislación es fuente del derecho, en tal sentido Philip JAMES precisa que en
el derecho inglés la legislación es una fuente principal del derecho9.
El derecho de los Estados Unidos de Norteamérica tiene varias fuentes entre las
cuales destaca los restatements que son una fuente positiva y concreta del derecho
estadounidense10. Los cuales no existen en otro sistema jurídico. Los Estados Unidos ha
evolucionado con los restatements11. Los restatements no son legislación porque no los
promulga un Poder Legislativo propiamente conocido y elegido por el pueblo, ni estatal ni
federal12. Los redactan comités de especialistas en cada materia, y los debaten y aprueban
en un foro de alrededor de quinientos juristas de élite13. Quien quiera estudiar el Derecho
estadounidense de esta materia, u otra materia declarada en la misma forma, debe empezar
con un Restatement14.
2. GENERALIDADES
El texto original del Código de Comercio Peruano de 1902 regulaba varios contratos
mercantiles o comerciales, tales como el contrato de compra venta, permuta, mutuo,
depósito, y fianza de naturaleza mercantil, el contrato de seguro y el contrato de transporte
terrestre (contrato este último del cual no hemos tenido acceso a trabajos de investigación,
pero el mismo es de aplicación constante y tiene mucha importancia dentro del derecho
comercial, contractual, empresarial y dentro del derecho privado), entre otros. Pero el
artículo 2112 del Código Civil Peruano de 1984 estableció que los contratos de compraventa,
permuta, mutuo, depósito y fianza de naturaleza mercantil, se rigen por las disposiciones
del Código Civil y establece que quedan derogados los artículos 297 a 314, 320 a 341 y
430 a 433 del Código de Comercio.
El artículo 1353 del Código Civil Peruano de 1984 establece que todos los contratos
de derecho privado, inclusive los innominados, quedan sometidos a las reglas generales
contenidas la sección primera titulada Contrato en General del Libro Fuentes de las
Obligaciones del Código Civil, salvo en cuanto resulten incompatibles con las reglas
particulares de cada contrato.
10. BECK FURNISH, Dale: Fuentes del Derecho en los Estados Unidos: la muerte del Derecho
Consuetudinario, las Fuentes escritas en la edad del Derecho Positivo, y el papel y efecto de
los Restatements of the law. En: Revista lus et Veritas. Año Vil. Número 13. Pag. 147.
11. Ibid.
12. Ibid.
13. Ibid.
14. Ibid.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 303
Por lo cual podemos afirmar que con el Código Civil Peruano de 1984 se ha
continuado con el proceso de descodificación del Código de Comercio Peruano de 1902,
iniciado por leyes especiales como la ley de quiebras (materia que luego fue regulada
por otras leyes y que en la actualidad se encuentra regulada por la ley general del
sistema concursal), la ley de títulos valores y también por la ley de sociedades mercantiles
(materia que en la actualidad es regulada por la ley general de sociedades ley que también
regula las sociedades civiles, materia que no era regulada por la ley de sociedades
mercantiles).
En todos los Estados ocurre esto, es decir, normalmente en todos los Estados el
derecho positivo y en especial el Código Civil se queda corto frente a la realidad social.
Por ejemplo en España, el derecho positivo y en especial el Código Civil no regula todos
los contratos.
Todo abogado no puede dejar de lado la práctica, en tal sentido en la parte práctica
del derecho existen contratos que todo abogado debe conocer.
Por ejemplo, en los trabajos de derecho civil peruano codificado, no podemos dejar
de lado el proyecto de la ley de enmiendas del Código Civil Peruano de 1984.
Por lo cual debemos precisar que al corretaje inmobiliario se le aplican las normas
generales sobre contratos contenidas en el Código Civil.
El artículo 1353 del Código Civil Peruano de 1984 establece que todos los contratos
de derecho privado, inclusive los innominados, quedan sometidos a las reglas generales
contenidas en la sección primera del libro titulado fuentes de las obligaciones del Código
en mención, salvo en cuanto resulten incompatibles con las reglas particulares de cada
contrato.
4. CLASES DE CORRETAJE
No existe un solo tipo o clase de corretaje, sino que existen varias clases como son:
el corretaje inmobiliario, el corretaje de seguros, corretaje vehicular y el corretaje de valores.
Las cuatro clases o tipos de contratos se estudian en el derecho contractual,
pero específicamente el corretaje inmobiliario y vehicular en el derecho comercial, el
corretaje de seguros en el derecho de seguros y el corretaje de valores en el derecho
bursátil.
Los distintos problemas que existen entre las partes pueden ser ventilados por el
Poder Judicial a través de sus órganos jurisdiccionales, como son los juzgados de paz
letrados, juzgados civiles, juzgados penales, juzgados de familia, juzgados de paz letrado,
salas superiores y salas supremas. Los Juzgados de paz no letrados también es necesario
tenerlos en cuenta porque brindan el servicio de justicia.
En tal sentido en el presente trabajo corresponde determinar cuales son los órganos
jurisdiccionales competentes.
En la negociación, celebración y ejecución del corretaje inmobiliario pueden existir
problemas los cuales pueden en algunos supuestos ser ventilados en el Poder Judicial.
Por lo cual es necesario determinar cual serían los juzgados y salas competentes.
Cuando se estafa en el corretaje los juzgados competentes para procesar a quien
cometió dicho delito son los juzgados penales y las salas penales, conocidas antes éstas
últimas como Tribunales Correccionales.
Pero cuando el problema es un otorgamiento de documento que contenga contrato
de corretaje, o una indemnización a consecuencia de la ejecución del contrato o una
negociación de mala fe y existe responsabilidad en las tratativas, tratos previos o tratos
preliminares, o el problema es el no pago de lo pactado en contrato de corretaje, los
juzgados competentes son los juzgados civiles.
Sin embargo, con la creación de los juzgados y salas especializados en lo civil con
la subespecialidad comercial, estos serían los órganos jurisdiccionales competentes ya
que el corretaje inmobiliario es un contrato que forma parte del derecho comercial. El
literal e del numeral 1 del artículo primero de la Resolución Administrativa N° 006-2004-
SP-CS expedida por el Presidente de la Corte Suprema de la República establece que los
juzgados de la subespecialidad Comercial conocen de las pretensiones derivadas de los
contratos de corretaje.
Además el literal a del numeral 2 del artículo primero de la misma norma citada
establece que las Salas Superiores de la subespecialidad Comercial conocen en grado
de apelación, entre otros asuntos de los procesos resueltos por los Juzgados de la
Subespecialidad Comercial. Así como las quejas de derecho por denegatoria del recurso
de apelación.
En cuanto al recurso de casación la Salas competentes de la Corte Suprema de
Justicia de la República para conocer en materia que es de competencia de los juzgados
y salas con la subespecialidad de Comercial son las Salas Civiles.
7. ANTECEDENTES
Cuando se investiga sobre un tema, materia o tópico es necesario tener en cuenta
los antecedentes existentes, en tal sentido a continuación haremos referencia al principal
antecedente.
En el derecho español encontramos el principal antecedente que es el libro de
Daniel Rodríguez Rulz de Villa a través de su libro El Contrato de Corretaje Inmobiliario:
Los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria.
Es decir, ya existe un gran trabajo sobre este contrato atípico, en el cual se desarrolla
los principales aspectos del contrato en mención como son los siguientes: aspectos
generales, delimitación y caracteres, el corretaje inmobiliario frente a otros contratos afines,
elementos del corretaje inmobiliario, efectos y extinción del corretaje inmobiliario.
En la doctrina peruana no debemos dejar de lado el trabajo que aparece publicado
en el libro Contratos Modernos Empresariales Tomo II cuyo autor es Sydney Alex Bravo
Melgar.
En tal sentido podemos afirmar que el contrato materia de estudio ha sido estudiado
por la doctrina peruana y también por la doctrina extranjera. Por lo cual cualquier estudio
sobre el corretaje sin tomar en cuenta estos antecedentes implicaría un estudio poco
serio, lo cual debe desecharse sobre todo a nivel de estudios de post grado, tales como
maestrías o doctorados, o post grados en materias específicas.
Para tener una ¡dea bastante clara del derecho romano es conveniente el estudio
del trabajo titulado la clasificación de los bienes en el derecho positivo peruano que tiene
como autor al mismo autor del presente trabajo de investigación, el cual apareció publicado
en la Revista Jurídica del Perú tomo 58 página 127 correspondiente al mes de septiembre
de este año 2004.
Motivo por el cual estudiaremos de manera especial los antecedentes del corretaje
en el Derecho Romano y en Egipto.
El origen del corretaje es muy antiguo; se remonta al antiguo Egipto, donde los
corredores formaban una casta particular1
16.
5
En Roma tuvieron amplio desenvolvimiento especialmente en relaciones familiares,
llamándoles: proxeneta, mediator, interpres, internuncius, curritor, de donde tienen la raíz
la expresión francesa “coutiere” y la hispana “corredor”16.
El antecedente legislativo más remoto del corretaje lo hallamos en la República de
Chile. Lugar donde a través de Código de Comercio de 1865 se legisló al respecto,
posteriormente esta posición fue copiada17 por la República de Panamá, más tarde lo
15. FLORES POLO, Pedro: Diccionario de Términos Jurídicos. Volumen I. Pag. 619.
16. Ibid.
17. En base a nuestra experiencia e investigaciones sobre derecho comparado podemos afirmar
que en el mismo no cabe o corresponde utilizar la palabra copiado o copiar de un derecho a
otro, sino en su lugar corresponde utilizar la palabra o mas exactamente el término jurídico
recepcionar, por lo cual el derecho panameño y colombiano habría recepcionado el derecho
chileno en este contrato, igual ha ocurrido en otras materias, por ejemplo dentro del derecho
privado, en el derecho comercial peruano el estado peruano recepclonó el código de comercio
español para la aprobación del primer código de comercio peruano. En tal sentido repetimos
que no son copias sino recepciones, es como decir acordaron en lugar de celebraron dentro
del derecho contractual el cual se ubica en el derecho privado, público y social. Se ubica
dentro del derecho privado por que abarca a civil y comercial. Se ubica en público porque
abarca a constitucional, administrativo, tributario, aduanero y procesal y se ubica en social
porque abarca a laboral, en tal sentido resulta de vital importancia para el abogado actual el
dominio del derecho contractual y el derecho comparado. Es decir, en el derecho no debe
utilizarse palabras como acordaron o copiaron, sino celebraron o recepclonaron
respectivamente, es como si un médico escribiera un libro en el cual precise que le abrieron
el abdomen y le sacaron el apéndice, cuando lo que corresponde escribir es que lo operaron
del apéndice. Por lo cual podemos afirmar que sólo pueden escribir aquellas personas que
alcanzan el dominio del derecho a los cuales se les llama jurisconsultos y no los abogados
que recién comienzan en su vida profesional, que no tienen una suficiente formación a través
no sólo de maestrías y doctorados, sino que además se debe haber seguido estudios de
especlalizaciones y diplomados. Por lo que en la fuente citada no existe seriedad por falta de
formación y de experiencia profesional, ya que el derecho se aprende ejerciendo el mismo a
través de cargos como en la magistratura (jueces o fiscales) y oficinas regístrales,
principalmente. Y en forma reducida o sólo en forma teórica a través de cátedras universitarias.
Es decir, no se puede comparar el médico que a través de libros conoce parcialmente una
operación al corazón, con un médico que realiza en forma frecuente operaciones al corazón.
En tal sentido los conocimientos teóricos son limitados al compararlos con los conocimientos
prácticos o aplicativos. Entre otras causas por que cuando se utiliza conocimientos teóricos
no se puede descubrir nada, sino que otro u otros lo tienen que descubrir para que recién el
teórico lo pueda citar. Es en este orden de ideas que pudimos realizar distintas investigaciones
tales como calificación registral de documentos judiciales o personas jurídicas o embargo de
308 Corretaje Inmobiliario f Fernando Jesús Torres Manrique \
inmueble no inscrito, entre otros, es decir, el conocimiento de la realidad social como fuente
del derecho aclara el panorama y facilita el conocimiento del derecho, sin embargo, pocos
abogados conocen que la realidad social es una fuente del derecho. Incluso en el derecho
peruano se llega al absurdo de equiparar a un profesor con un Magistrado, ya que sería como
comparar una hormiga con un tigre o con un león, ya que el profesor universitario no es
sancionado normalmente cuando se equivoca, pero cuando un Magistrado se equivoca si es
sancionado. Por lo cual comparar un profesor universitario con un Magistrado es como comparar
un gasfitero con un ingeniero o con un arquitecto. En tal sentido es normal que un Magistrado
perciba un sueldo mayor que un profesor universitario, incluso no puede compararse el poder
de decisión de los profesores universitarios con el poder de decisión de un Registrador Público
o con el poder de decisión de un Magistrado que puede ser un Juez o un Fiscal. Incluso un
Juez de Paz no Letrado tiene el poder de ordenarle a un rector, pero un rector no puede
ordenarle a un Juez de Paz no Letrado. Por lo que resulta poco serio escribir sin tener un
dominio del tema, ni tener la experiencia necesaria, y sólo para hacer currículo y ganar
concursos, u obtener cátedras al ser admirados por abogados sin experiencia, que idolatran
falsos Dioses, ya que un abogado sin experiencia (normalmente un decano que sólo ha sido
profesor universitario y no cuenta con muchas publicaciones) no puede evaluar, ni merituar a
un abogado que persuade, engaña y sorprende a sus seguidores, con libros que al redactarlos
no se ha tenido la seriedad suficiente. Y en todo caso repetimos para los abogados sin dominio
del derecho comparado que las instituciones no se copian sino se recepcionan, creo que si se
consigue con el presente artículo que el lector lo asimile este conocimiento se ha contribuido
con el derecho.
18. BRAVO MELGAR, Sydney Alex: Contratos Modernos Empresariales. Tomo II. Pág. 322.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 309
Sydney Alex BRAVO MELGAR precisa que el corretaje es el contrato a través del
cual una persona denominada proponente o interesado efectúa un encargo material a
otra persona denominada corredor, a fin que se le señale la oportunidad y la persona
con quien puede celebrar el negocio jurídico, a cambio de una compensación pecuniaria,
el cual en la práctica generalmente se traduce en un porcentaje del valor de venta del
bien'9.
Puede ocurrir que el comprador también haya requerido los servicios del
corredor (es decir, su intención de comprar una casa lo condujo a una
inmobiliaria). En este caso, el corredor ha contratado con ambos: quien
pretendía vender y quien pretendía comprar. Son dos contratos, y de cada
uno de ellos percibirá comisión”.
18302 y que innovan la legislación bursátil, quedaron derogadas todas las disposiciones
del Código sobre agentes mediadores de comercio26. En la práctica por imperativo legal,
éstos han quedado reducidos a sólo los “agentes colegiados de bolsa” y “martilieros
públicos”27. Respecto de los otros agentes o corredores, en nuestra opinión, resultan
aplicables las normas del Código de Comercio sobre mandato y comisión mercantil y,
supletoriam ente, las del Código Civil, excepto en aquellas m aterias reguladas
expresamente, como es el caso de los “representantes de firmas extranjeras” 28. Habiéndose
promulgado el nuevo Código Civil, consideramos que esta opinión sigue vigente, de
conformidad con lo establecido en los artículos 1353 y 211229.
26. Ibid.
27. ibid.
28. Ibid.
29. Ibid.
30. Ibid. Pág. 176 y 177.
31. El subrayado es nuestro
32. Es decir, no sólo existe corredor de inmuebles, sino también corredor de seguros, tema que
corresponde ser estudiada por el derecho de seguros.
312 Corretaje Inmobiliario / Fernando Jesús Torres Manrique
14. CORREDORES
Pedro FLORES POLO34 precisa que son Auxiliaras o agentes mediadores de
comercio, en la mayoría de las legislaciones comerciales latinoamericanas, informadas
por el antiguo derecho comercial español. Los corredores desempeñan habitualmente las
actividades de corretaje que le son propias (corredores de bolsa, de inmuebles, de valores,
de seguros, etc). En el Derecho Comercial Peruano, la legislación sobre corretaje no es
homogénea porque inicialmente se les consideró “agentes mediadores de Comercio” en
la Sección Sexta del Libro Primero del Código de Comercio de 1902, recogiéndose
instituciones propias del derecho español del siglo anterior. Eran agentes mediadores de
comercio, los agentes de cambio y bolsa, los corredores colegiados de comercio, corredores
intérpretes de buques y rematadores y martilieros. A partir de 1968 se han introducido
serias reformas en este esquema del corretaje, dejándose sólo a los agentes de bolsa y a
los rematadores o martilieros. Además, existen disposiciones legales referentes a los
productores o corredores de seguros. En la práctica subsisten los corredores de inmuebles,
de valores y otros comisionistas35.
Es decir, además de los corredores de inmuebles existen otros corredores como
los corredores de valores y de valores, los cuales también conviene que sean materia de
estudio.
En el Vocabulario Jurídico realizado bajo la dirección de Henri CAPITANT se
determinó que corredor es el intermediario que realiza la correduría36.
En mismo Vocabulario Jurídico se determinó que correduría es la operación por la
cual un intermediario pone en relación a dos personas entre sí, con miras a la celebración
de un contrato37.
José Luis SARMIENTO en su trabajo titulado Contratos Especiales que apareció
en la página Web http://www.monoarafias.com/trabajos10/contra/contra.shtml el día
miércoles 3 de noviembre del 2004 precisó sobre los corredores lo siguiente:
Se llama corredor a la persona que, por su especial conocimiento de los mercados,
se ocupa como agente intermediario en la tarea de poner en relación a dos o más personas,
con el fin de que celebren un negocio comercial sin estar vinculado a las partes por
relaciones de colaboración, dependencia, mandato o representación.
2° A llevar en sus libros una relación de todos y cada uno de los negocios en que
intervengan con indicación del nombre y domicilio de las partes que lo celebren, de
la fecha y cuantía de los mismos o del precio de los bienes sobre que versen, de la
descripción de estos y de la remuneración obtenida.
Así por ejemplo una empresa corredora de inmuebles puede ser una sociedad (en
el derecho positivo societario peruano existen los siguientes tipos o formas societarias:
sociedad anónima, sociedad comercial de responsabilidad limitada, la sociedad colectiva,
las sociedades civiles y las sociedades en comandita), o una cooperativa entre otras
personas jurídicas, no importando para ello que las mismas corran inscritas en el registro
de personas jurídicas.
Es necesario distinguir el patrimonio de la persona jurídica del patrimonio de sus
integrantes, por lo cual puede obligarse el patrimonio de la persona jurídica sin obligarse
el patrimonio de sus integrantes.
Para quien desee ampliar sus conocimientos sobre personas jurídicas puede
consultar mi artículo titulado Personas Jurídicas, publicado en la Revista Jurídica del
Perú, conforme se detalla en las fuentes de información del presente artículo.
18. MEDIACIÓN
Cuando estudiamos la mediación hacemos referencia a la conciliación, que es un
medio alternativo de solución de conflictos.
38. FLORES POLO, Pedro: Diccionario de Términos Jurídicos. Volumen 3. Págs. 121 y 122.
39. Ibid.
40. DIEZ PICAZO, Luis y GULLÓN, Antonio: Sistema de Derecho Civil. Volumen II. Págs 509 y
510.
41. Ibid.
42. Ibid.
316 Corretaje Inmobiliario / Fernando Jesús Torres Manrique
43. Ibid.
44. Ibid.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 317
El derecho codificado existe en el derecho de todos los Estados que forman parte
de la familia romano germánica, en tal sentido algunos Estados no cuentan con derecho
codificado.
Por lo cual es necesario precisar que para algunos trabajos de investigación sólo
es necesario estudiar derecho codificado otras veces sólo es necesario estudiar derecho
no codificado. Pero otras oportunidades es necesario el estudio de ambas partes del
derecho, es decir, otras oportunidades es necesario el estudio del derecho codificado y
del derecho no codificado.
Por lo cual es necesario precisar que para algunos trabajos de Investigación sólo
es necesario estudiar derecho codificado otras veces sólo es necesario estudiar derecho
no codificado. Pero en otros casos es necesario el estudio de ambas partes del derecho,
es decir, en otros casos es necesario el estudio del derecho codificado y del derecho no
codificado.
Un aforismo romano precisa lo siguiente Sub tutela juris publici latet jus privatum
que significa lo siguiente bajo la tutela del derecho público se halla latente el derecho
privado. Es decir, en el derecho romano no se hacía referencia al derecho social.
El derecho público no puede ser alterado por los particulares jus publicum privatorum
pactis mutari non potest.
En el derecho romano el derecho privado era el conjunto de normas jurídicas que
protegen y regulan la actividad del individuo privatum ius est quodad singulorum utiiitatem
pertinet, y el derecho público era el conjunto de normas que se refieren al Estado, al culto,
a los sacerdotes y a los magistrados en especial modo publicum ius est quod ad
rempublicam pertinet.
Muchos autores dividen al derecho sólo en dos grandes ramas que son el derecho
público y el derecho privado. Es decir, muchos autores que estudian este tema no hacen
referencia al derecho social.
La división del derecho en derecho público, en derecho privado y en derecho social
también ocurre en el derecho positivo en el cual el derecho se divide en tres grandes ramas
que son las siguientes derecho público, derecho privado y derecho social. Sin embargo,
esta división no es aceptada por todos los tratadistas, en tal sentido existen tesis y argumentos
a favor de la división del derecho en derecho público, derecho privado y en derecho social,
al igual que existen tesis y argumentos en contra de dicha división del derecho.
Teniendo en cuenta que en nuestro medio es más difundida y aceptada la tesis por
la cual el derecho se divide en derecho público, derecho privado y en derecho social, es
necesario dejar constancia que una de las principales ramas del derecho privado es el
derecho comercial que en la actualidad se discute que pertenezca íntegramente al derecho
privado, por ejemplo dentro del derecho comercial se ubica al derecho de quiebras ahora
conocido como derecho concursal, sin embargo, cabe precisar que esta rama del derecho
por ser derecho procesal se ubica dentro del derecho público.
Además es necesario precisar que esta división del derecho no es aceptada en
todas las familias jurídicas, por ejemplo en el derecho soviético que pertenece a la familia
jurídica de los derechos socialistas se rechaza la distinción del derecho en derecho público
y en derecho privado (nótese que no se hace referencia al derecho social).
Las normas sobre clasificación de los bienes se ubican en el derecho público,
derecho privado y derecho social.
En tal sentido dentro del derecho público se ubican el derecho constitucional y el
derecho administrativo.
Dentro del derecho privado se ubican el derecho civil y el derecho comercial.
Dentro del derecho social se ubica el derecho laboral.
Con los estudios de títulos se puede determinar quien es el propietario del terreno
y quien de la construcción o fábrica.
Es decir, para el estudio se tiene que dominar no sólo el derecho privado sino
también el derecho público y el derecho social.
corren inscritos en el Registro de Predios, o existe pluralidad de folios (dentro del cual
un supuesto es la duplicidad de partidas). Motivo por el cual en algunas oportunidades
sobre todo cuando existen partidas regístrales problema en el Registro de Predios se
tiene que solicitar un certificado compendioso a fin de que el propio registrador público
determine quien es el propietario y de que es propietario o sólo es un copropietario. Sin
embargo, en las normas regístrales correspondientes el pago por este servicio que brinda
el registro es reducido.
Es decir, algunas oportunidades es difícil realizar un estudio de títulos, lo cual es
necesario cuando se va a contratar sobre el bien que en algunas oportunidades corre
registrado.
Por ejemplo si el predio pertenecía a una sociedad conyugal conformada por dos
cónyuges luego uno fallece y se tramita su sucesión intestada pero no se declaran
herederos todos los herederos ni se registra en el Registro de Sucesiones Intestadas,
luego el otro cónyuge fallece y no se tramita la sucesión intestada, luego de los diez
herederos del primer cónyuge fallecido otorgan poder cuatro personas, y los cuatro
herederos del segundo cónyuge fallecido otorgan poder dos personas, luego los
herederos que no han sido declarados herederos venden su derecho a nuevos
compradores, los cuales conforman varias sociedades conyugales, y después vuelven
a vender pero no venden los dos cónyuges, sino sólo las esposas y no los esposos, por
lo cual falta que otorguen nueva escritura pública los esposos, y luego fallecen los que
compraron y no son declarados herederos pero los que se creían herederos vendieron,
luego un tercero posee el bien durante quince años y piensa tramitar un proceso de
prescripción adquisitiva de dominio, por lo cual no sabe a quien demandar para poder
vender, en este supuesto es difícil determinar que pasos hay que seguir para poder
vender el inmueble, pero pueden presentarse mayores inconvenientes por ejemplo que
el predio quede ubicado dentro de otro predio de mayor área y no se ha inscrito la
habilitación urbana.
También puede ocurrir además que algunas compra ventas no fueron realizadas
como derechos sobre el inmueble sino como habitaciones o pisos, por ejemplo es posible
que el predio conste de diez pisos y sólo corre inscrito como terreno en el registro, y que
además no se piense comprar todo el inmueble sino sólo un piso pero el régimen de
propiedad horizontal (hoy conocido como régimen donde coexiste propiedad común y
propiedad exclusiva) no debió inscribirse por que no regulaba lo referente al piso que se
quiere comprar.
Además puede ocurrir que existan inscripciones de sentencias de otorgamiento de
escritura pública pero no la inscripción de las escrituras públicas otorgadas por el Juez en
defecto del demandante.
También puede ocurrir que la escritura no la tenga que firmar una sola persona
sino varias personas por el ser el propietario final una sociedad conyugal.
Pocos abogados son los que pueden aconsejar lo necesario en este supuesto
planteado, pudiendo plantearse mayores problemas.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 323
Pero otras veces el títulos es fácil de realizar sobre todo cuando existe un solo
propietario y no existen gravámenes ni cargas y todas las inscripciones que habían que
realizarse en el Registro de Predios se han realizado.
Es conveniente para quien piensa comprar un predio realizar todos los estudios
necesarios de los documentos a través de abogados especializados.
Los bienes materia del contrato son bienes inmuebles como terrenos o edificios o
casas, o departamentos, oficinas, estadios, piscinas, y urbanizaciones, entre otros
inmuebles.
O el bien materia de contrato puede ser sólo parte de un inmueble, por ejemplo un
arrendador puede buscar un arrendatario parar arrendarle una habitación o dos
habitaciones.
El bien materia de compra venta puede ser los aires de una construcción también
conocida como fábrica, en cuyo caso es necesario constituir un régimen donde existe
propiedad común y propiedad exclusiva.
En los casos en que el poder lo otorgue una persona jurídica, se inscribe el poder
en la partida de la persona jurídica o de la sucursal.
Los poderes para compra ventas tienen que ser expresos, conforme al principio de
literalidad y de preferencia correr inscritos en el Registro de Mandatos y Poderes, cuando
son otorgados por personas naturales.
En tal sentido cuando se inscribe una traslación de dominio por compra venta de
una casa cuyo valor es de cien mil dólares americanos el título archivado lo conforma el
parte notarial, con el recibo de pago de derechos regístrales y con el formulario de
solicitud.
Los gravámenes son distintos que las cargas, pero algunos juristas las confunden.
En tal sentido es necesario diferenciarlas.
Sin embargo sobre un predio pueden correr registradas cargas y gravámenes las
cuales hacen que el precio del predio se reduzca, por ejemplo si un predio tiene en el
mercado un valor de $200,000 dólares americanos, pero como tiene una hipoteca inscrita
hasta por la suma de $120,000 dólares americanos, el precio de mercado del predio ya no
es el mismo si no que se reduce a $80,000 dólares americanos.
Es decir, las cargas y los gravámenes reducen el valor de los bienes en el mercado.
Sin embargo, en las municipalidades el valor del inmueble para el Impuesto predial no es
reducido por las cargas ni por los gravámenes.
Los contratos son actos jurídicos que pueden estar contenidos en escrituras públicas
o formularios regístrales.
Efecto querido decimos, pero entiéndase bien - sólo capaz de devenir eficaz en
virtud de lo dispuesto en la norma de derecho objetivo.
Hay que entender que el acto jurídico es una declaración de voluntad privada, pero
dependiente de las normas del derecho objetivo46.
52. Ibid.
53. Ibid.
54. Ibid.
55. Ibid.
56. Ibid. Págs. 31 y 32.
57. Ibid. Pág. 379.
58. Ibid.
59. Ibid. Pág. 380.
Corretaje Inmobiliario / Fernando Jesús Torres Manrique
60. Ibid.
61. Ibid.
62. Ibid.
63. Ibid.
64. Ibid.
65. Ibid.
66. Ibid.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 329
67. Ibid.
68. Ibid.
69. Ibid. Pág. 381.
70. Ibid.
71. Ibid.
72. Ibid.
73. Ibid.
74. Ibid.
330 Corretaje Inmobiliario / Fem ando Jesús Torres Manrique
acto jurídico, pero no todo acto jurídico es un contrato. Por ejemplo toda compra venta es
un contrato pero también un acto jurídico, pero no todo acto jurídico es un contrato, por
ejemplo el poder y el testamento son actos jurídicos pero no son contratos.
Para Manuel DE LA PUENTE Y LAVALLE el contrato es la declaración conjunta de
la voluntad común de dos o mas partes, que por permitirlo el ordenamiento jurídico, tiene
por efecto crear, regular, modificar o extinguir entre sí obligaciones lícitas de carácter
patrimonial75.
El mismo autor precisa que el contrato es el acuerdo de dos o más partes sobre una
declaración conjunta de voluntad común destinada a constituir, regular o extinguir una
relación jurídica patrimonial76.
Max ARIAS SCHREIBER PEZET precisa que en términos generales, el contrato es
el acuerdo entre dos o más partes relacionado con un objeto de interés jurídico. Su finalidad
consiste en crear, modificar, regular o extinguir obligaciones con contenido patrimonial y
constituye el acto jurídico plurilateral por excelencia77.
Para Alberto BENAVIDES BALBÍN en su mas lata acepción el contrato es una
coincidencia de voluntades de la que resultan efectos de orden jurídico78.
Para POTHIER el contrato es el concurso de voluntades de dos personas, de las
cuales, una promete alguna cosa a la otra, y la otra acepta la promesa que se le ha
hecho79.
El mismo autor precisa sobre el contrato que es una especie de convención que
tiene por objeto formar algún compromiso80.
También precisa que el contrato es una convención por la cual las dos partes
recíprocamente, o sólo una de las dos, prometen y se obligan para con la otra darle
alguna cosa, o a hacer o no hacer tal cosa81.
COLIN y CAPITANT precisan que el contrato es un acto jurídico que produce el
efecto de crear obligaciones, ya a cargo de las dos partes, ya a cargo de una de ellas. Son
estas obligaciones las que tienen un objeto, el cual puede consistir en una cosa material,
ya en un hecho, ya en una abstención. Por lo tanto, sólo de un modo elíptico se puede
hablar de objeto del contrato82. ■
Rafael ROJINA VILLEGAS precisa que el contrato es el acuerdo de voluntades
para crear o transmitir derechos y obligaciones; es una especie dentro del género de los
convenios83.
c) El significado más saliente -y que la ley tiene presente en la disciplina del contrato
es el acto humano, esto es, precisamente, de negocio jurídico.
Hay que distinguir rigurosamente del contrato, que se debe concebir así toda otra
figura en la que dos negocios jurídicos unilaterales, aun quedando autónomos desde el
punto de vista de la estructura, se combina en sus efectos. Tal es -e n el campo de los
negocios entre vivos- el caso de la procura conferida por el representado y de la aceptación
de la misma por parte del procurador; tal es -también por lo común- el caso del contrato
de derecho público; tal -e n el campo de los negocios mortis causa- el testamento y su
aceptación84.
Para POTHIER el contrato es la convención por la cual las dos partes recíprocamente,
o solamente una de ellas, promete o se obliga hacia la otra a dar, hacer o no hacer alguna
cosa66.
El artículo 1101 del Código Civil Francés de 1804 establece que el contrato es la
convención por la cual una o más personas se obligan, con otra u otras, a dar, hacer o no
hacer alguna cosa87.
El abrogado Código Civil Peruano de 1852 establecía en su artículo 1226 que el
contrato es el convenio celebrado entre dos o más personas, por el que se obligan a dar,
hacer o no hacer alguna cosa88.
El artículo 1437 del Código Civil Chileno de 1855 establece que contrato o convención
es un acto por el cual una parte se obliga para con otra a dar, hacer o no hacer alguna
cosa. Cada parte puede ser una o muchas personas89.
El artículo 1309 del Código Civil Salvadoreño de 1860 precisa que contrato es una
convención en virtud de la cual una o más personas se obligan para con otra u otras, o
recíprocamente, a dar, hacer o no hacer alguna cosa90.
El artículo 1247 del Código Civil Uruguayo de 1868 en su edición modificada de
1914 y 1994 precisa que contrato es una convención por la cual una parte se obliga para
con la otra, o ambas partes se obligan recíprocamente a una prestación cualquiera, esto
es, a dar, hacer o no hacer alguna cosa. Además establece que cada parte puede ser una
o muchas personas91.
El artículo 1137 del Código Civil Argentino de 1869 establece que hay contrato
cuando varias personas se ponen de acuerdo sobre una declaración de voluntad común,
destinada a reglar sus derechos92.
El artículo 1495 del Código Civil Colombiano de 1873 establece que el contrato o
convención es un acto por el cual una parte se obliga para con otra a dar, hacer o no hacer
alguna cosa. Cada parte puede ser de una o de muchas personas.
El Código Civil Italiano de 1942 conocido como Código de Derecho Privado establece
que el contrato es el acuerdo de dos o más partes para constituir, regular o extinguir entre
sí una relación jurídico patrimonial93.
El articulo 450 del Código Civil Boliviano de 1975 establece que hay contrato cuando
dos o más personas se ponen de acuerdo para constituir, modificar o extinguir entre sí
una relación jurídica94.
86. Ibid.
87. Ibid.
88. Ibid.
89. Ibid.
90. Ibid.
91. Ibid. Págs. 136 y 137.
92. Ibid. Pág. 137.
93. Ibid.
94. Ibid.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 333
El artículo 1133 del Código Civil Venezolano de 1982 refiere que el contrato es una
convención entre dos o más personas para constituir, reglar, transmitir, modificar o extinguir
entre ellas un vínculo jurídico.
Carlos SOTO precisa que el contrato, como una declaración conjunta de la voluntad
común de dos partes, es decir, como un acuerdo de voluntades destinado a crear, regular,
modificar o extinguir relaciones jurídicas obligacionales con contenido patrimonial, es un
concepto moderno, fruto de una confusa y larga evolución histórica del pensamiento
jurídico96.
Este artículo 1351 según los avances de la Comisión de Reforma de Códigos del
Estado Peruano quedaría redactado de la siguiente manera: el contrato es un acto jurídico
plurilateral, referente a una relación jurídica obligacional entre las partes de carácter
patrimonial97.
En los contratos se pueden incluir algunos pactos que ayudan a las partes a ponerse
de acuerdo sobre temas específicos como la garantía necesaria a constituir o la forma de
pagar el precio del inmueble
En los contratos de compra venta se puede incluir algunos pactos como la reserva
de propiedad y el pacto de retroventa, entre otros.
Las formas de pago pueden ser al contado o al crédito, y puede constituirse hipoteca
o prenda u otra garantía para asegurar el cumplimiento de la obligación por parte del
deudor.
95. Ibid.
96. SOTO COGUILA, Carlos Alberto. La Contratación Contemporánea, el respeto a la autonomía
privada y la protección a los contratantes débiles. En: El Contrato en una Economía de Mercado.
MOSSET ITURRASPE, Jorge y SOTO COAGUILA, Carlos Alberto. Pags. 326 y 327.
97. Comisión de Reforma de Códigos. II Congreso Internacional de Derecho Civil llevado a cabo
en Arequipa (Perú) del 4 al 7 de agosto de 1999.
334 Corretaje Inmobiliario / Fernando Jesús Torres Manrique
1
Es decir, muchos confunden la escritura matriz con los traslados, la escritura pública
es archivada por el Notario en su oficio Notarial.
La escritura pública no la entrega el notario a nadie, ni siquiera al Juez.
35. LA INSCRIPCIÓN
La inscripción es una clase de la Registración. En tal sentido debemos precisar que
la inscripción es anotación o inscripción.
Las traslaciones de dominio por compra ventas o contratos de arrendamiento se
inscriben en registros de bienes como son entre otros el Registro de Predios.
Las compras ventas y arrendamiento se inscriben, pero el contrato de corretaje no
se inscribe en el registro público.
La inscripción procede cuando la calificación registral que efectúa el registrador
público es positiva.
36. EL TÍTULO
Es efectuada exclusivamente por los Registradores Públicos y por los Vocales del
Tribunal Registral, a los títulos presentados conforme al artículo 2011 del Código Civil
Peruano de 1984 y el Nuevo Reglamento General de los Registros Públicos.
Por ejemplo si solicita la inscripción de una traslación de dominio en mérito a un
contrato de compra venta se efectúa la calificación registral para determinar si el título
presentado puede tener acogida registral.
336 Corretaje Inmobiliario / Femando Jesús Torres Manrique
Es decir, el artículo 2011 del Código Civil Peruano de 1984 tiene como antecedente
legislativo nacional en el derecho codificado al artículo 1044 del Código Civil Peruano de
1936.
En tal sentido no todos los títulos presentados al registro se registran, sino que
algunos se inscriben, otros se liquidan, se observan o se tachan.
Es decir la calificación registral puede ser positiva o negativa. Es positiva cuando el
título se Inscribe o liquida, y es negativa cuando el título se observa o se formula tacha.
En el último considerando de la Resolución N° 017-97/ORRLLW-TR del Tribunal
Registral se precisó lo siguiente: “Que, la inscripción, acorde con la finalidad de otorgar
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 337
Es decir, la calificación registral no tiene los mismos alcances en todos los sistemas
jurídicos.
Alvaro DELGADO101 precisa que son muchas las definiciones que sobre la
calificación registral ha esbozado la doctrina y precisa que la calificación registral es el
control que realiza el registrador a efectos de determinar si el título presentado al registro
es inscribible sobre la base de los diversos principios que, como requisitos y presupuestos
técnicos para la inscripción, cada sistema contempla102. Es decir, se trata de definir si el
derecho o situación jurídica contenidas en el respectivo título y cuya publicidad se pretende
101. DELGADO SCHEELJE, Alvaro: Aplicación de los principios regístrales en la calificación registral.
Redefinlendo los conceptos tradicionales y planteando los nuevos principios. En: lus Et Veritas.
Año IX. N° 18. Pág. 254.
102. Ibid.
Corretaje Inmobiliario / Fernando Jesús Torres Manrique |
a través de la inscripción que se solicita, así como las titularidades que a dichas situaciones
corresponden, merecen ser objeto de publicidad y, por tanto, hacerse cognoscibles por
terceros, beneficiándose de esta manera con la legitimación y protección que emanan
directamente de tal publicidad103.
También precisa que la rigurosidad que en cada sistema tiene la calificación registral
se encuentra estrechamente vinculada a la real eficacia de la publicidad registral en este
sistema. A mayor eficacia de la publicidad y fuerza del registro, más rigurosa debe ser la
calificación y viceversa. Así, la calificación registral se apoyará en principios más exigentes
cuanto más amplia sea la protección y legitimación que los principios - a través de los
cuales se concretan los efectos materiales de la Inscripción- otorgan a los titulares
regístrales y terceros adquirentes. A decir de Pau PEDRÓN, la calificación es un
presupuesto lógico de la eficacia del registro y la intensa eficacia del registro sólo puede
producirse por una previa calificación rigurosa104.
Para Pau PEDRÓN la calificación consiste en el control de legalidad de los
documentos inscribibles y su finalidad es exclusivamente la de determinar la accesibilidad
del título al registro105.
Es decir, no existe una sola definición de calificación registral, sino que existen
muchas definciones de la misma, lo cual facilita estudio y aplicación por parte de los
operadores jurídicos sobre todo registradores y vocales regístrales.
Es decir, la calificación registral es un tema que se encuentra desarrollado por
distintos autores tanto nacionales como extranjeros.
103. Ibid.
104. Ibid. Págs. 254 y 255.
105. Ibid. Pág. 254.
106. Ibid.
107. Ibid.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 339
detalle la misma en los sistemas regístrales como el peruano que son sistemas regístrales
de registro de derechos. Es decir, en los sistemas regístrales de registro de documentos
la calificación registral es mas superficial, es menos exigente y mas limitada, ya que la
misma se encuentra complementada con un sistema de seguros, por lo cual en algunos
sistemas como el sistema registral de Estados Unidos de América se conoce no como
sistema registral sino como un sistema de seguros.
Pero para aclarar la idea la calificación registral se efectúa en todos lo sistemas
jurídicos, porque en todos existe registro, pero no de la misma manera sino de una manera
distinta, ya que existen diversos sistemas regístrales, cada uno con características
diferentes.
38. SUBSANACIÓN
Es indudable cuando el registro observa se siente cierto malestar pero esto es
normal al igual que no todas las demandas son declaradas fundadas.
Cuando el Registro formula observaciones puede subsanarse la observación, por
ejemplo cuando se otorga una escritura de compra venta y la misma es otorgada sólo por
un cónyuge y la venta es de un bien social y no ha otorgado poder o mandato el otro
cónyuge, el registro debe observar, en cuyo caso es necesario otorgar una escritura
aclaratoria con la cual se efectúa una subsanación.
Es decir, cuando se formulan observaciones puede subsanarse, otro ejemplo de
observación es cuando se solicita la inscripción de una compra venta pero falta la inscripción
de un poder por escritura pública.
No debe aplicarse esta ley por que la misma es sólo de aplicación a los procesos
administrativos, y el procedimiento registral no es un procedimiento administrativo sino un
procedimiento jurisdiccional de naturaleza no contencioso.
En materia procesal civil existen los plenos casatorios, conforme al Código Procesal
Civil y a la Ley Orgánica del Poder Judicial y se han llevado a cabo plenos jurisdiccionales
pero no obligatorios para los Magistrados.
En materia regisgtral existen los plenos regístrales que son reuniones de los Vocales
Regístrales en los cuales se adoptan criterios de observancia obligatoria a tener en cuenta
en la calificación registral.
Los plenos regístrales se orignan a partir del nuevo reglamento general de los
registros públicos del 2001.
43.1. Libros:
DIEZ PICAZO, Luis y GULLÓN, Antonio. Sistema de Derecho Civil. Volumen II.
Cuarta Edición. Reimpresión 1984. Editorial Tecnos S.A. Madrid España.
43.2. Ponencias:
43.3. Revistas:
43.4. Diccionarios:
Código Civil Peruano de 1984. Código Civil Peruano de 1936. Código Civil
Peruano de 1852. Código Tributario Peruano. Código de Comercio Peruano de
1902. Constitución Política Peruana de 1993. Ley de Tributación Municipal peruana.
Ley Notariado Peruana. Reglamento General de los Registros Públicos Peruano
del 2001. Resolución Administrativa N° 006-2004-SP-CS expedida por el Presidente
de la Corte Suprema de Justicia de la República.
Código Civil Español de 1889. Código Civil Francés de 1804. Código Civil
Chileno de 1855. Código Civil Salvadoreño de 1860. Código Civil Uruguayo de
1868. Código Civil Argentino de 1869. Código Civil Colombiano de 1873. Código
Civil Italiano de 1942. Código Civil Boliviano de 1975. Código Civil Venezolano de
1982.
44. CONCLUSIONES
Luego de haber desarrollado los aspectos más importantes del contrato de
corretaje inmobiliario, formulamos conclusiones sobre dicho contrato en los siguientes
términos:
2) El corretaje sirve para acercar la oferta con la demanda y así conseguir la celebración
de contratos de compraventa y arrendamiento.
344 Corretaje Inmobiliario / Fernando Jesús Torres Manrique
3) El corretaje es un contrato.
7) El corretaje ha sido poco desarrollado por parte de los distintos autores en el derecho
peruano.
9) En Alemania, Suiza y Australia (en este estado existe el sistema registral Acta Torrens,
el cual es un sistema registral convalidante y es donde los Registradores Públicos
tienen un trabajo mas delicado y de mas responsabilidad, pero aplicando el derecho
comparado que para algunos juristas es un método y para otros es una ciencia podemos
afirmar que el trabajo de los Registradores Públicos y Vocales Regístrales es muy
delicado) el trabajo del corredor es mas sencillo por que en dichos estados existen
sistemas regístrales constitutivos y convalidantes. Dejando constancia que a los primeros
se denomina sistemas germanos. Para quien desee ampliar sus conocimientos sobre
sistemas regístrales puede consultar mi libro Derecho Comparado y Sistemas Jurídicos.
10) El corretaje es poco utilizado en las ciudades pequeñas como Huancavelica, pero
contrario a ello es muy utilizado en las ciudades grandes como Lima, Arequipa,
Buenos Aires y Madrid. Es decir, en las ciudades grandes el corretaje resulta siendo
una necesidad para los agentes económicos, ya que les facilita contratar en el
mercado, el cual en estos casos es grande y complejo.
13) Para estudiar el corretaje inmobiliario también es necesario el estudio del derecho
registral, por ejemplo todo corredor inmobiliario debe dominar la calificación registral
de documentos judiciales, entre otros temas propios del derecho registral.
CONTRATOS {Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 345
14) En las fuentes formales del derecho peruano el corretaje inmobiliario ha desarrollado
poco, por lo cual existen pocos estudios sobre este interésate contrato.
45. SUGERENCIAS
6) Es necesario que se permita tributar a los corredores que actúan como personas
jurídicas en el Régimen Unico Simplificado.
7) Los corredores inm obiliarios deben ser personas muy preparadas y muy
experimentadas, para no inducir a error a los compradores, es decir, para no inducir
a error a terceros.
MODELO GENÉRICO DE
CONTRATO DE CORRETAJE INMOBILIARIO
ANTECEDENTES:
CUARTA.- Las características del inmueble objeto del presente contrato son las
siguientes: D irección...............Urbanización................, Teléfono:............... área del lote
............... m2, coeficiente de copropiedad ............... %; Precio $ ............... tiempo de
construcción:..............días.
348 Corretaje Inmobiliario / Fernando Jesús Torres Manrique
1. Poner al servicio de El PROPONENTE los medios de los cuales dispone para ejecutar
el objeto del contrato.
REMUNERACIÓN:
CLÁUSULA DE EXCLUSIVA:
DÉCIMO SEGUNDA.- El presente contrato es celebrado a Cláusula de Exclusiva a
favor de EL CORREDOR; por ello, EL PROPONENTE se obliga a abstenerse de ofertar la
venta del inmueble de su propiedad, mientras esté vigente el contrato. En Caso que EL
PROPONENTE incumpliera la cláusula de Exclusiva; y promocionara y vendiera el inmueble
durante la vigencia del contrato, se obliga a pagarle a EL CORREDOR la comisión
establecida en la Cláusula Décima.
PENALIDADES:
DÉCIMO TERCERA.- En caso de constituirse en mora de EL PROPONENTE, la
suma adeudada causará intereses del 5% mensual.
1°. En caso que EL PROPONENTE decida dar por terminado el presente contrato antes
de la realización del negocio con el posible comprador, pagará a EL CORREDOR la
suma d e .............. (S/............... ).
2°. En los casos en que firmada la promesa de venta, del inmueble referido, y aquella
no se realizara, EL CORREDOR que haya recibido íntegramente la comisión, de
acuerdo con lo pactado anteriormente, reintegrará a EL PROPONENTE el 50% del
valor total de la comisión.
GASTOS Y TRIBUTOS:
DÉCIMO CUARTA.- Las partes contratantes, acuerdan que todos los gastos y tributos
que origine la celebración, formalización y ejecución del presente contrato serán asumidos
integramente por EL PROPONENTE.
COMPETENCIA ARBITRAL:
DECIMO CUARTA.- Las partes convienen que en el caso que surja alguna diferencia
entre las mismas, por razón o con ocasión del presente contrato, será resuelta por un Tribunal
Arbitral integrado por tres expertos en la materia, uno de ellos designado de común acuerdo
por las partes, quien lo presidirá y los otros designados por cada uno de ellos.
Si en el plazo d e ..................... días de producida la controversia, no se llegara al
nombramiento del presidente del Tribunal Arbitral, éste deberá ser designado por el Centro
de Arbitraje Nacional y Extranjero de la Cámara de Comercio d e ................. cuyas reglas
serán aplicables al arbitraje.
El laudo del Tribunal Arbitral será definitivo e inapelable, así como de obligatorio
cumplimiento y ejecución para las partes y, en su caso, para la sociedad.
DOMICILIO:
DÉCIMO QUINTA.- Las partes contratantes de mutuo acuerdo señalan que para la
validez de todas las comunicaciones y notificaciones entre ellas, referente a todo lo
concerniente en la ejecución e interpretación de este contrato; señalan como sus
respectivos domicilios los indicados en la Introducción de este documento.
EL CORREDOR EL PROPONENTE
EL CONTRATO DE GARAJE
1. INTRODUCCIÓN
Todo ello trajo como consecuencia un enorme desarrollo de la industria del transporte,
en particular la automotriz. Los vehículos automotores han crecido significativamente en
cuanto a la calidad, pero mucho más en términos cuantitativos.
O Abogada por la Pontificia Universidad Católica del Perú; con Maestría en Derecho con mención
en Derecho Civil en la PUCP; Profesora de Derecho Civil en los cursos de Acto Jurídico,
Obligaciones, Contratos y Garantías en la Universidad de Lima; Autora de numerosos trabajos
de investigación en Derecho Civil.
352 El Contrato de Garaje / Roxana Jiménez Vargas-Machuca
los vehículos resulta un factor imprescindibles por los constantes daños y robos a los
mismos.
Hay quienes opinan que a efectos de incluir todas las posibilidades que se pueden
presentar, es conveniente denominar a este contrato como de estacionamiento. Es por
cierto interesante tal propuesta, por cuanto el problema principal cuya solución primordial
se busca es la de aparcar o estacionar el vehículo.
Lugar o recinto reservado para estacionar vehículos. Lugar donde puede estacionarse un
automóvil.”1, y estacionares “Dejar un vehículo detenido y, normalmente, desocupado, en
algún lugar.”2
6. Así lo señala, por ejemplo, Carlos Alberto Ghersi:"... el deber de guardar del playero es, en
esencia, idéntico al del garajlsta, con la sola diferencia de que si se trata de un lugar no
cubierto, se sobreentiende que no responde por los daños que pueda causar alguna inclemencia
climática...” (GHERSI, Carlos Alberto. “Contratos civiles y comerciales”, Tomo 2, p. 356).
También Vera Ocampo, Fluxá, Colazzo y Di Tullio, quienes señalan que “...ambas figuras
presentan caracteres semejantes, destacándose entre estos la obligación de guarda y custodia
del rodado...” (VERA OCAMPO, Raúl E., FLUXÁ, Francisca, COLAZZO, Estela, DI TULLIO,
José “Contrato de garaje” En: Revista de Derecho Privado y Comunitario, N° 3, Contratos
Modernos, Buenos Aires, Rubinzal-Culzoni, 1993, p. 248).
7. Ver VERA OCAMPO, Raúl E., FLUXÁ, Francisca, COLAZZO, Estela, DI TULLIO, José:
“Contrato de garaje” Op. cit., p. 248.
356 El Contrato de Garaje / Roxana Jiménez Vargas-Machuca
Esto es muy relativo, pues una modalidad frecuente en las playas de estacionamiento
es la de los “abonados”, con lo que se relativiza esta diferencia. El abonado tiene el
derecho de gozar siempre de un espacio físico dentro de la playa aunque el vehículo
no se encuentre estacionado en ella, teniendo el playero o garajista (o conductor
del local de estacionamiento) la obligación de reservarle permanentemente un
espacio; es decir, no hay solución de continuidad. En este caso en nada se distingue
de la definición de garaje que realiza Andró Jack, señalando que el contrato de
garaje es aquel por el que el propietario de un vehículo automóvil conviene en
dejarlo en los locales de un garajista profesional destinados a tal fin, pagando
remuneración, con la condición de poder utilizarlo en los momentos que quiera,
durante el tiempo que dure el contrato.8
Sin embargo, hay una diferencia sustancial entre deber de custodia y deber
de conservación. En el depósito se incluye el deber de conservación, que abarca la
realización de actos tendientes a mantener el bien en las mismas condiciones en
que fuera recibido, lo cual conlleva una prestación adicional a cargo del depositario,
quien debe realizar gastos para evitar el deterioro del bien. Por ejemplo, en el caso
de una maquinarla entregada en depósito, si ésta requiriese de lubricación continua,
el depositario tendría que ocuparse de efectuar tales actos de mantenimiento.
11. Artículo 1819 del Código civil, sobre el deber de custodia y conservación del depositario.
12. Salvo que se pacte lo contrario, ciertamente. Hubo un caso ante la Corte de Riom, del 12 de
enero de 1932, en el que el demandante, dueño de un vehículo, al recogerlo del garaje
constató que el motor se había roto debido al congelamiento del agua del radiador. El
demandado respondió que el vaciado del radiador no entraba en las obligaciones del garajista.
“El automovilista alega entonces la existencia de una convención expresa que tenía por fin
precisamente crear tal obligación a cargo del garajista; pero por una parte, él había dado tales
órdenes solo a título personal a un empleado del garaje y por otra parte, ‘está demostrado que
el coche poseía un doble sistema de vaciado que no era de uso corriente y que el usuario no
justificó haber señalado su existencia a los empleados, los cuales se han limitado, como es
corriente, a vaciar el radiador lo que en tal caso, no fue suficiente’. Hubo, pues falta de
colaboración, la falta de la obligación accesoria de facilitar la ejecución de su obligación principal
al deudor, de hacerla más fácil y de la mejor manera posible, cometida por el acreedor, quien
deberá soportar las consecuencias de la mala ejecución ocasionada por su culpa; en el caso,
ineficacia del vaciado del radiador, que constituía la ejecución normal de la obligación estipulada
por el garajista, por cuanto eran necesarios cuidados especiales en presencia de las
particularidades del coche y que el dueño había omitido prevenir a los empleados del garaje
a su respecto.” Citado por Emilio Pascansky, en ENCICLOPEDIA JURÍDICA OMEBA, voz
“Garaje”, T. XII (FAMI-GARA), Editorial Bibliográfica Argentina, p. 1129.
13. El Anteproyecto de Código civil de 1984 consideró en su capítulo IV al “Depósito en las Playas
de Estacionamiento”, pero la Comisión Revisora suprimió este capítulo. Independientemente
de la inconveniencia de incluir este contrato dentro de la tipicidad del depósito por las razones
señaladas, resulta de interés revisar las normas propuestas que regulaban este contrato. Los
artículos de este Anteproyecto eran los siguientes:
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 359
18. En: DE COSSIO Y CORRAL, Alfonso: “El arrendamiento de locales de negocio”. Madrid,
Instituto Nacional de Estudios Jurídicos, 1949. Citado por Emilio Pascansky, Ob. cit., pp.
1091-1092.
CONTRATOS {Doctrina. Legislación, Junsprudencia y Modelos) 361
Hugo Morote, “Qué duda cabe respecto que la ordenación anticipada de los contratos
será efectuada desde la perspectiva (y para concretar) el ideal maximizador de la
empresa. En todo caso, basta remitirse a la experiencia cotidiana para comprobar
que las empresas consiguen concretas ventajas operativas manipulando este criterio
de utilidad cuando, por ejemplo, ciertos bancos ofrecen a sus clientes seguros de
vida que se hacen efectivos automáticamente si no son rechazados, (!) o cuando el
titular de la playa de estacionamiento coloca en sus boletos que no se responsabilizan
por nada que pueda ocurrirle al auto dejado en sus instalaciones ...”19
19. MOROTE NÚÑEZ, Hugo A.: “La Protección al Consumidor en el Código Civil” , En: “El Derecho
Civil Peruano. Perspectivas y problemas actuales.” Lima, Fondo Editorial de la Pontificia
Universidad Católica del Perú, 1993, p. 176.
20. VERA OCAMPO, Raúl, y otros, Op. cit., p. 244.
21. MOSSET ITURRASPE, Jorge: “Los contratos atípicos”. Buenos Aires, La Ley (LL), 1979-B-
995.
22. DÍEZ-PICAZO, Luis: “Fundamentos del Derecho Civil Patrimonial”, T. I. Madrid, Tecnos, 1970,
p. 240.
362 El Contrato de Garaje / Roxana Jiménez Vargas-Machuca
relevancia social y económica, por lo que puede afirmarse que cumplen una función
social que merece tutela, máxime si se trata, como en este caso, de un negocio
predispuesto por una de las partes a cuyas condiciones se adhiere la otra23, sin
posibilidad de negociación, sino tan solo de sometimiento. No cabe duda de que
existen contratos atípicos de uso frecuente cuya regulación podría resultar
innecesaria, dejando mejor al mercado, a las costumbres comerciales y a la voluntad
de las partes su regulación, pues no es conveniente llenar el espectro legal de
categorías contractuales en un afán normativista que resulta, por decir lo menos,
ineficiente. Tal es el caso, a modo de ejemplo, del contrato de franquicia, no regulado
en el Perú, y dejado su diseño a la negociación y voluntad de las partes. Sin embargo,
el caso del contrato de garaje o de playas de estacionamiento es distinto, debido -
reiteramos- a su importancia social, a su condición de contrato mediante oferta al
público y, concretamente, dirigida a los consumidores o usuarios.24
23. Denominada por la doctrina como parte débil, debido a su carencia de libertad contractual o
de configuración interna del contrato.
24. Cfr. JIMÉNEZ VARGAS-MACHUCA, Roxana: “La oferta al público en el Código civil y en la
Ley de Protección al Consumidor, En: “Instituciones de Derecho Privado”, Tomo I: Contratación
Contemporánea, Bogotá-Líma, Témis y Palestra Editores, 2001.
25. ARIAS-SCHREIBER PEZET, Max: Op. cit., p. 486.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 363
26. Oscar Sasaki Motonishi contra Inmobiliaria La Armonía S.A., 1987. Citado por MARTINEZ
COCO, Elvira. Op. cit., p. 11.
27. Emilio Pascanky admite que esta es la posición mayoritaria, a pesar de que ‘él no comparte
esta opinión, pues él no considera que la guarda o custodia caracterizan al contrato de garaje:
“Ese elemento de custodia que aparece como esencial al contrato hace que éste no pueda
ser catalogado entre las figuras típicas que nuestra legislación regula, dando lugar a un
verdadero contrato atípico, cuyo régimen habrá de establecerse mediante la aplicación de los
preceptos generales del Código civil en materia de contratos: se tratará siempre de un negocio
complejo, integrado por elementos del arrendamiento de cosas, del depósito, del arrendamiento
de servicios, y aun, a veces, del de obra hecha.” (PASCANSKY, Emilio. Op. cit., p. 1092.).
28. CABANELLAS, Guillermo: “Diccionario Enciclopédico de Derecho Usual”. T. IV (F-l), voz
“garaje”. Buenos Aires, Editorial Heliasta, 24° edición, 1996, p. 153.
29. LORENZETTI, Ricardo Luis: “Tratado de los Contratos", T. II. Buenos Aires, Rubinzal-Culzoni
Editores, 2000, p. 333.
364 El Contrato de Garaje / Roxana Jiménez Vargas-Machuca
contra el orden público ni las buenas costumbres. El objeto de este estudio está
basado en la actividad comercial de este tipo de establecimientos, destinados a
dicho fin.
(a) la teoría de la a bso rció n, según la que, ante un negocio con causas
concurrentes, el intérprete ha de procurar encontrar la predominante y regular
el negocio por analogía según la disciplina que regula tan causa en un negocio
típico.
30. Resulta interesante y didáctica la propuesta argentina que define a los contratos atípicos y
establece pautas a las que ellos se sujetarán. Artículo 913 (Proyecto de Código civil argentino
de 1998): “Los contratos son típicos o atípicos según que la ley los regule especialmente o no.
Los contratos atípleos están regidos en el siguiente orden: a) Por la voluntad de las partes; b)
Por las normas generales sobre contratos y obligaciones; c) Por las disposiciones
correspondientes a los contratos típicos afines que sean compatibles entre sí y se adecúen a
su finalidad.”
31. PARELLADA, Carlos A.: “Contratos atípleos”, En: “Instituciones de Derecho Privado Moderno”,
Buenos Aires, Abeiedo-Perrot, 2001, pp. 746 a 751.
32. CNCIv., Trib. Superintendencia, 29/8/1980, “Kreiselman, A. c/ Municipalidad de la Capital”,
BCNC, t. 981-11, p. 7. Citado por Carlos A. Parellada, Op.cit, pp. 746 y 747.
33. CNCiv., Sala E, 11/8/1976, ED, t. 72, p. 472. Citado por Carlos A. Parellada, Op.cit, p. 747.
CONTRATOS *'Poctrin.) I riiN
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/ 365
(c) La teoría de la com binación. Según esta teoría hay que atenerse al carácter
autónomo de la creación de voluntad de los particulares, para lo que se ha de
encontrar el sentido teleológico de la contratación y regular el negocio
conforme las disciplinas que se combinen, ateniéndose a cada uno de los
elementos que componen la negociación.
En base a esta teoría, se ha fallado: “El contrato de garaje, que por carecer
de regulación propia cae dentro de la categoría de los contratos innominados o
atípicos (art. 1143, Cód. Civ, y nota), se rige -en defecto de estipulaciones de las
partes- por las normas generales relativas a las convenciones y las particularidades
de los contratos, con los cuales tiene analogía: la locación de cosas, la de servicios,
34. CNCiv., Sala E, 27/9/1973, JA, serie cont., t. 21-1974, p. 186. Citado por Carlos A. Parellada,
Op.cit, p. 747.
35. “Martín Antonio c/ Sánchez y otros”, (L.L., T. 82, p. 611. Cám. Nac. de Apel. en lo Civ. Sala “D” de
la Cap. Fed. Buenos Aires, 25 de abril de 1956), citado por Emilio Pascansky, Op. cit., p. 1137.
366 El Contrato de Garaje / Roxana Jiménez Vargas-Machuca
Vemos que el esfuerzo de esta teoría por vencer los inconvenientes de las
otras nos devuelve al problema original, en nuestro caso, pues precisamente la
combinación de distintas figuras jurídicas que contienen caracteres contradictorios
es lo que acarrea conflicto a este contrato.
3.4. Efectos
Al respecto, cabe recordar que los contratos son por adhesión cuando las
estipulaciones que constituyen la oferta son fijadas unilateralmente por el oferente,
es decir, no ha habido etapa precontractual o de tratativas o negociaciones previas.
No hay, pues libertad de configuración interna o libertad contractual para el
destinatario de esta oferta, sino tan solo libertad de contratar. Siendo la oferta
emitida de esta manera, el destinatario de ésta puede optar por aceptarla en su
integridad, asumiendo la voluntad del ofertante para hacerla suya por completo, o
puede no celebrar el contrato. Aquí las estipulaciones no son vistas en forma aislada,
sino todas ellas en su totalidad, por lo que, según Manuel de la Puente, no cabe
distinguir entre oferta y estipulaciones.37 El propio artículo 1390 del Código civil
señala que la aceptación debe contener la integridad de las estipulaciones.
36. CNCiv., Sala E, 177/1977, “Heise, Francisco c/ Callao S.A.”; CNCom., Sala B, 25/8/1978, LL,
t. 1978-D, p. 713; TSSanta Cruz, 27/10/1967, “Alvarez Dávila, José c/ Puckeu, Julio y otro”;
CCCórdoba, 5/9/1978, “San Cristóbal c/ Robert's”; CNCom., Sala B, 8/7/1976, “Pereyra
González, Luis el Fernández, Jesús P.” Citado por Carlos A. Parellada, Op.cit, p. 748.
37. DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel: El contrato en general. Primera Parte, Tomo III. Lima,
Biblioteca para Leer el Código, Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú,
1998, p. 23.
38. “Es conocido el fenómeno de la maslvidad de las relaciones jurídicas que dio origen a la
contratación por adhesión a condiciones generales, a partir de fines del siglo XIX.”
(LORENZETTI, Ricardo Luis. “La Nueva Teoría Contractual”, En: “Obligaciones y Contratos
en los albores del siglo XXI”, libro homenaje a Roberto López Cabana. Buenos Aires, Abeledo-
Perrot, 2001, p. 812.).
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 367
Estos contratos son lo más común hoy en día: los celebramos con los
supermercados, con las aerolíneas, con las compañías de seguros, con las empresas
de transporte en general, en el restaurante, en el cine, con los bancos, con las
playas de estacionamiento. Al respecto, Javier Wajntraub es muy enfático, al
manifestar que “...las últimas décadas pudieron presenciar la forma en que se ha
ido imponiendo el cambio que nos llevó a un mundo en el que el contrato predispuesto
es la regla y el acuerdo discrecional representa los restos de una época que muchos
añoran, pero que se ha esfumado definitivamente.”40
39. REZZONICO, Juan C.: “Contratos con cláusulas predispuestas”, Buenos Aires, Astrea, 1987,
p. 109.
40. WAJNTRAUB, Javier H.: “La contratación predispuesta y sus implicancias en el Proyecto de
Código Civil de la República Argentina de 1998”, En: “Instituciones de Derecho Privado
Moderno”, Buenos Aires, Abeledo-Perrot, 2001, p. 727.
41. Así, Alfredo Bullard señala que “Existe evidencia empírica sobre el hecho que las cláusulas suelen
ser incluso menos favorables al consumidor en mercados sumamente competitivos y
desconcentrados que en supuestos de monopolio u oligopolio. Son comunes las cláusulas abusivas
en servicios como lavanderías, playas de estacionamiento, seguros, corretaje de inmuebles, o
contratos de crédito.” (BULLARD G., Alfredo. “¡Firme primero, lea después! La contratación masiva
y la defensa del consumidor”, En: “El Derecho Civil Peruano. Perspectivas y problemas actuales.”
Lima, Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú, 1993, pp. 27-28.).
42. Refiriéndose a las cláusulas que se suelen encontrar impresas en boletos, tickets, formularios,
etc., y que suelen contener estipulaciones de irresponsabilidad, entre otras, Hugo Morote
opina que “Los ejemplos mencionados (...) han sido íntegramente extraídos de boletos, modelos
e impresos que circulan para permitir el intercambio masivo actual y, teniéndolos a la vista,
difícilmente puede concluirse que el consumidor se siente satisfecho con este estado de
cosas. La referencia en el sentido que debe desarrollarse una “cultura de mercado”, mediante
la imposición del modelo de autotutela, parece demasiado simple e irreflexiva en medio de un
país profundamente convulsionado y cuyos niveles de pobreza van cada vez en mayor aumento.
Obsérvese, para refutar semejante afirmación, que la indefensión así como el alejamiento del
ordenamiento jurídico de la realidad solamente generan desconfianza, resentimiento y -muy
probablemente- reacciones violentas.” (MOROTE NÚÑEZ, Hugo A.: “La Protección al
Consumidor en el Código Civil”, En: “El Derecho Civil Peruano. Perspectivas y problemas
actuales.” Lima, Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú, 1993, p. 192.).
368 El Contrato de Garaje / Roxana Jiménez Vargas-Machuca \
El artículo 1398 del Código civil enumera las cláusulas (en contratos por
adhesión o con arreglo a cláusulas generales de contratación no aprobadas por la
autoridad administrativa) que considera inválidas:
• Artículo 1398: “En los contratos celebrados por adhesión y en las cláusulas
generales de contratación no aprobadas administrativamente, no son válidas
las estipulaciones que establezcan, en favor de quien las ha redactado,
exoneraciones o lim itaciones de responsabilidad; facultades de suspender
la ejecución del contrato, de rescindirlo o de resolverlo; y de prohibir a la otra
parte el derecho de oponer excepciones o de prorrogar o renovar tácitamente
el contrato.”
• Artículo 1328: “Es nula toda estipulación que excluya o limite la responsabilidad
por dolo o culpa inexcusable del deudor o de los terceros de quien éste se
valga. También es nulo cualquier pacto de exoneración o de limitación de
responsabilidad para los casos en que el deudor o dichos terceros violen
obligaciones derivadas de normas de orden público.”
• Artículo 1986: Son nulos los convenios que excluyen o limiten anticipadamente
la responsabilidad por dolo o culpa inexcusable.”
• Artículo 219: “El acto jurídico es nulo: (...) 7. Cuando la ley lo declara nulo. (...).”
• Artículo 168: “El acto jurídico debe ser interpretado de acuerdo con lo que se
haya expresado en él y según el principio de la buena fe.
• Artículo V del Título Preliminar: “Es nulo el acto jurídico contrario a las leyes
que interesan al orden público o a las buenas costumbres.”
4. A MODO DE CONCLUSIÓN
A lo largo de este trabajo se ha realizado un análisis acerca de la posible naturaleza
jurídica de este contrato, debido a la cantidad de dudas y conflictos que en el orden
cotidiano se presentan. Por ello, había primero que procurar determinar si dicho contrato
se ajusta a alguna figura tipificada, a cuyas normas habrían de remitirse los jueces,
establecimientos y usuarios en general cuando se presentase alguna controversia.
Es conocida la desavenencia entre los establecimientos y los usuarios en lo relativo
a que los primeros consideran que se trata de una modalidad de arrendamiento en tanto
que los segundos suponen siempre que están entregando un bien (el vehículo) en depósito.
En función de las características propias de cada uno de estos contratos y de la
finalidad social del estacionamiento en garajes o playas de estacionamiento, y asimismo
370 El Contrato de Garaje / Roxana Jiménez Vargas-Machuca
43. Ahora bien, en el caso de los locales pequeños, ubicados quizá en zonas de escasos recursos,
que no puedan asumir los costos de tal seguro, ni menos aun, por tanto, responsabilizarse por
la integridad de los pocos vehículos que puedan albergar, ¿acaso no podrían utilizar su espacio
con fines únicamente de cesión de espacio, sin incluir el deber de custodia? En estos casos,
debidamente autorizados en atención de las circunstancias particulares, y según regulación
legal, podría emplearse una fórmula como la que el Estado de Giorgia, en los Estados Unidos,
utiliza para la generalidad de las playas de estacionamiento: colocar avisos visibles y claros
en el local en los que se Indique que no hay responsabilidad por la pérdida. En este Estado, si
la playa no tiene este tipo de información visible desde fuera, entonces sí hay responsabilidad.
En nuestro caso, nuestra sugerencia apunta a que si se exonerase administrativamente a un
establecimiento de dicha responsabilidad, el local tendría que informar de ello al público de
esta manera.
44. Compartimos el criterio de Alberto G. Spota: “Supongamos el caso judicial frecuente: que
haya un asalto al garaje y que el delincuente se lleve el vehículo. Cabe preguntarse si en tal
supuesto responde el garajista frente al depositario del automóvil. Aquí cobra importancia la
noción del deber de custodia. La obligación del garajista no se limita a otorgar el espacio para
que el dueño del vehículo lo coloque, sino que resulta depositario, es decir, está obligado a
custodiarlo; de ahí que es responsable el garajista. Sin embargo, ello no siempre es así, pues
si se trata de un asalto a mano armada, ya estamos en presencia del caso fortuito (...) que
lleva la nota de lo irresistible y con ello la responsabilidad del deudor (con la salvedad de que
el evento fortuito reconozca como antecedente necesario y adecuado la culpa o el dolo del
garajista) (v. Cám. Nac. Civ. Cap., sala E, 23 ab. 1963, “La Ley”, t. 112, p. 21).” (SPOTA.
Alberto G. “Instituciones de Derecho Civil - Contratos”, vol. I. Buenos Aires, Ediciones DePalma
(2da. reimpresión), 1978, p. 122.).
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 371
Asimismo, no estamos de acuerdo con la intervención estatal que regule todas las
cláusulas de este contrato. La función del estado únicamente debe ceñirse a la fijación de
la responsabilidad, y a algunos aspectos relacionados con la seguridad, como la prohibición
de admisión al establecimiento de una cantidad de vehículos superior a su capacidad,
que bloquee el ingreso y egreso; y extendiendo la responsabilidad a los dependientes
(aspecto por demás ya regulado en el Código civil), así como la no responsabilidad del
garaje o playa -salvo pacto expreso en contrario- por los bienes u objetos dejados dentro
de los vehículos el resto. El resto de aspectos, incluido por cierto el monto correspondiente
al pago por el cliente de la hora o fracción, deben dejarse en manos de! mercado.45
Finalmente, en lo relativo al nombre del contrato, consideramos que la playa de
estacionamiento, si bien es un nombre difundido y por todos conocido -bajo este punto de
vista sería quizá adecuado-, en realidad alude al lugar físico (independientemente de que
ya no se trate de un espacio abierto, una “playa", como inicialmente se configuró) en que
se estacionan los vehículos. El nombre “estacionamiento” es tal vez demasiado amplio, y
no indica la actividad lucrativa del negocio comercial, abarcando el aparcamiento en la vía
pública. En tanto que el nombre “garaje”, si bien es verdad que también se refiere a un
local, como la playa de estacionamiento, no hay que descartar que este tipo de local lleva
a considerar la guarda o custodia como elemento integrante del mismo.
ASPECTOS LEGALES
45. En este punto discrepamos con el Anteproyecto del Código de 1984, que establecía que este
contrato se celebraría en base a tarifas y estipulaciones generales de contratación aprobadas
y actualizadas por la autoridad administrativa.
372 El Contrato de Garaje / Roxana Jiménez Vargas-Machuca
J URISPRUDEN CIA
E l C o ntr ato d e G a r a je :
(L a a t ip ic id a d d e l co ntra to d e P l a y a s d e E s t a c io n a m ie n t o )
EXPEDIENTE 13757
Res. N°: Treintiocho
establecimiento ya que no había lugares disponibles, como consta del atestado policial
que obra en autos de fojas doscientos nueve a doscientos veintiuno, todo lo cual acredita
que la demandada debe reponer por la pérdida del bien que recibió en custodia tal como
lo establece el artículo mil ochocientos veinticuatro del Código Civil, que teniendo en
cuenta lo establecido en la concordancia de los artículos mil trescientos diecinueve y mil
trescientos veintiuno del mismo cuerpo legal y en vista de la omisión de la demandada de
cumplir con su obligación de custodiar el bien depositado, debe responder por los daños
y perjuicios ocasionados como consecuencia de la inejecución de su obligación, incluyendo
tanto el daño emergente como teniendo en cuenta que la indemnización tiene por objeto
reparar a la víctima de un daño causado, menester es fijarle un valor de reposición que
efectivamente le significase un resarcimiento y que no haga ilusorias sus expectativas de
reposición haciendo intrascendente la intervención judicial por los fundamentos precedentes
se debe concluir que ha existido entre las partes un contrato de depósito y en consecuencia
dentro de los alcances del artículo mil ochocientos catorce del Código Civil, no dándose la
figura del arrendamiento como sostiene la demandada, por cuanto conforme lo establece
el artículo mil seiscientos sesentiséis del Código sustantivo, el arrendador se obliga a
ceder temporalmente al arrendatario el uso de un bien, por cierta renta convenida, que no
es aplicable al caso sub judice; que, consecuentemente siendo esto así, el depositario es
responsable por la pérdida, deterioro del bien cuando se origina por su culpa
374 El Contrato de Garaje / Roxana Jiménez Vargas-Machuca
G a r a j e : D if e r e n c ia c o n e l a p a r c a m ie n t o
( s im p l e e s t a c io n a m ie n t o )
Resumen: Sustracción del clclom oto r del actor se produjera dentro del
establecimiento del demandado. Del contrato verbal existente entre las partes no se derivan
otras obligaciones para el arrendador que la cesión de una porción de terreno para uso
del arrendatario como aparcamiento de su vehículo, sin que estén comprendidas entre
sus obligaciones ni responsabilidades la reparación de consecuencias negativas para los
automóviles producidas en el interior del aparcamiento. Desde la crucial S.T.S. de
22.10.1996,se ha ido perfilando la distinción entre la relación contractual de garaje y la de
estacionamiento/aparcamiento. Por la desaparición del ciclomotor.
Civiles y Modernos de Empresa
Doctrina Legislación. Jurisnrudencia v M odelos
I. INTRODUCCIÓN
b. Tomar alguna posición respecto de las distintas teorías que pretenden explicar la
naturaleza jurídica de la sociedad.
(*) Este modesto trabajo está dedicado a Oscar y Rosa, mis padres.
378 Acerca del Contrato de Sociedad / Carlos Gomero Rigacci
1. Sin embargo, el Derecho Societario no puede pretender abarcar todo el Derecho aplicable a
las sociedades. En efecto, una sociedad, a lo largo de su vida jurídica, puede encontrarse en
un sinnúmero de situaciones que hacen aplicables normas ajenas al Derecho Societario:
reglas sobre derechos reales, sobre contratos, sobre obligaciones tributarias, sobre derecho
concursal, etc.
2. BRUNETTI, Antonio: “ Tratado del Derecho de las Sociedades". Tomo I. Editarial Uteha. Buenos
Aires, 1960, Pág. 67.
3. VILLEGAS, Carlos Gilberto: “Derecho de las Sociedades Comerciales". Editorial Abeledo-
Perrot. Buenos Aires, 1988, Pág. 7.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 379
Más correctas parecen ser las definiciones que realizan Brunetti y Villegas, pues
enfocan a la sociedad desde una perspectiva instrumentalista, como un medio para el
logro de fines económicos, fundamentalmente empresariales.
Estos autores nos ponen de relieve que la sociedad no es más que un medio, es un
instrumento jurídico que el Derecho pone al alcance de los sujetos a efectos que éstos
puedan llevar a cabo proyectos empresariales de manera conjunta, cuando de manera
aislada no lo puedan hacer o no puedan conseguir la misma rentabilidad que si realizaran
el proyecto agrupados.
“De allí que los sujetos que actúan colaborando entre sí, en la actividad
económica dentro de una empresa, obtienen del Derecho este instrumento,
que resulta útil y apropiado para su actuación y desenvolvimiento dentro de
la comunidad. Y tal 'instrumento’ o medio técnico, es ofrecido en varios
‘modelos’, llamados ‘tipos sociales’, de modo de adoptar aquél que ese grupo
de individuos considere el más apto y apropiado para la mejor realización de
los fines que persiguen”7.
Nótese que estamos considerando un concepto de sociedad “no jurídico” si cabe la expresión,
sino mas bien uno “natural”, como organización de personas que realizan actividades conjuntas
con el objeto de obtener algún rendimiento.
Como se sabe, en el derecho angloamericano no existe la noción de sociedad, allí solo
existen las partnerships y las companies. Las primeras son equivalentes a nuestras sociedades
colectivas. Estas sociedades no son corporations y por tanto no son personas jurídicas, aunque
se le reconozca cierto status jurídico. ’
ALBALADEJO, Manuel: Derecho Civil II. “Derecho de Obligaciones". Vol II. Librería Bosch
Barcelona, 1982. Pág. 291.
VILLEGAS, Carlos Gilberto: “Derecho de las Sociedades Comerciales”. Op. Cit., Pág. 9.
380 Acerca del Contrato de Sociedad / Carlos Gomero Rigacci
Resumiendo lo expuesto, podemos concluir, por lo menos para efectos del presente
trabajo, que el Derecho sólo proporciona la cubierta, el ropaje para una empresa, de
manera tal que ésta pueda actuar adecuadamente en el mercado, siendo objeto de toda
una regulación jurídica con la finalidad de organizar y ordenar las actividades económicas
que realicen. Esta cubierta jurídica es la sociedad.
II. ANTECEDENTES
Debido a la gran influencia que tienen las sociedades en la actual economía, podría
pensarse que éstas son fruto de recientes situaciones, no obstante, las sociedades, en
esencia, son de antigua data.
11. Montoya Manfredi señala que la más remota expresión de la actividad comercial asociada se
encuentra en las caravanas para transportar sus mercaderías, refiriéndose al parecer al
comercio indio.
12. Los historiadores señalan que la más antigua expresión del comercio se desarrolló en Europa,
debido a que se encontraron en las cavernas de los trogloditas del centro de Francia conchas
del Atlántico y también pedazos de cristal de roca de los Alpes. Sin embargo no hay seguridad
en determinar si tal comercio se desarrolló de forma asociada o no.
13. En Babilonia, según Villegas, es donde se encuentran referencias, en el Código de Hamurabi,
a una de ias más antiguas regulaciones jurídicas de la actividad humana asociada. Lo mismo
se aprecia en las más antiguas leyes chinas que se conocen. Villegas, Carlos Gilberto. Op.
Cit. Pág 10.
14. ARANGIO RUIZ Vicenio: “Instituciones de derecho romano”, Editorial Depalma, 1973, pág.
389 citado por Villegas. Op. Cit. Pág. 10 y 11.
15. Vale decir, mucho antes que el Derecho occidental reconociera un estatuto personal al
“comerciante”, había ya reconocido al “banquero”.
382 Acerca del Contrato de Sociedad / Carlos Gomero Rigacci
En este sentido, habrá de percatarse que una de las actividades económicas más
importantes, sino la más importante de la antigüedad y del medioevo, fue sin duda la
bancaria. Por ello la regulación jurídica de las “sociedades” más antiguas que se conocen
va a estar vinculada a esta actividad. El estatuto del Banco de San Jorge, en Génova,
antecedente de la sociedad anónima moderna, es un claro ejemplo de lo expuesto.
Pero no sólo la actividad bancaria se propuso adoptar formas asociativas. También
la actividad marítima, de gran trascendencia en aquellos tiempos, recurrió a estos modelos
de asociación.
16. RIPERT, George: “Derecho Comercial”. T. II, Sociedades. París. 1954; Pág. 5. Citado por
Ulises Montoya Manfredi. Comentarios a la Ley de Sociedades Mercantiles. Op. Cit. Pág. 9.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 383
17. La sociedad es un empresario, sujeto de derecho que puede ser titular de una o más empresas
o de uno o más fondos empresariales, empero nunca es una empresa o fondo empresarial
(objetos de derecho). Beaumnot Callirgos, Ricardo. Comentarios a la nueva Ley General de
sociedades. Gaceta Jurídica Editores. Lima, 1998, Pág. 110.
18. De este modo, se puede colegir que el fenómeno asociativo surge como institución jurídica
cuando la expansión del comercio hace insuficiente las actuaciones individuales, es decir, la
urgente necesidad de atender las nuevas demandas socioeconómicas son causa del
surgimiento de la sociedad. En este sentido: Liria, Rodrigo. Derecho Mercantil. Marcial Pons
Ediciones Jurídicas. Madrid, 1994, Págs. 167 y168.
19. ALBALEDEJO, Manuel: “Derecho Civil”,II. Op. Cit. Pág. 292.
20. De conformidad con el Art. 12 de la Ley General del Sistema Financiero y del Sistema de
Seguros y Orgánica de la Superintendencia de Banca y Seguros (ley 26702), las empresas
dei sistema financiero y de seguros deben necesariamente constituirse bajo la modalidad de
sociedades anónimas.
384 Acerca del Contrato de Sociedad / Carlos Gomero Rigacci
Por ello se señala que una de las funciones más importantes que debe cumplir la
ley es la de reducir los costos de transacción, tratando de incentivar de este modo a los
21. Este es un concepto clave en todo análisis que se realice dentro del ámbito de una economía
de mercado y se fundamenta en dos principios económicos: el principio de “soberanía del
consumidof según el cual se asume que cada persona sabe lo que es bueno para ella misma,
y el de “hombre económico” que supone que las personas actúan movidas por el egoísmo, en
constante búsqueda de ganancias. Kennedy, Duncan. “El papel del Derecho privado en el
desarrollo de una economía de mercado”. Citado por Del Solar Labarthe, Salvador. “Protección
a los terceros adquirentes en el Código Civil: orientaciones y desorientaciones", artículo
publicado en lus Et Veritas, revista editada por estudiantes de la Facultad de Derecho de la
Pontificia Universidad Católica del Perú N° 18, 1994, Pág 159.
22. Este desplazamiento de los recursos hacia sus usos más eficientes no siempre son conseguidos
en la práctica, para ello resulta necesario que los llamados costos de transacción sean lo
suficientemente bajos como para permitir dicho desplazamiento, siendo la ley la encargada
de fomentar la disminución de estos costos. En este sentido Cabanellas señala que: “El
potencial de la sociedad como mecanismo jurídico para la asignación de recursos a sus
actividades más productivas requiere que los titulares de tales recursos cuenten con los
instrumentos necesarios para tal asignación”. Cabanellas de las Cuevas, Guillermo. Colección
de Derecho Societario. Tomo I. Introducción al Derecho Societario. Editorial Heliasta. Buenos
Aires, 1993, Pág. 57.
23. Los costos de transacción como elemento a tomar en cuenta en un análisis económico sobre
todo de las instituciones jurídicas, es un concepto que se originó en dos trabajos de Ronald
Coase (“la naturaleza de la empresa” en 1937 y “el problema del costo social” en 1960) aporte
que le valió ser galardonado con el Premio Nobel de Economía en 1991.
Los costos de transacción son todos aquellos costos en los que se incurren para poder llevar
a cabo un negocio, un intercambio, pero más propiamente cabe señalar que son los costos
necesarios para adquirir derechos y hacerlos cumplir. El hecho de querer cambiar mi situación
jurídica de empresario individual a integrarme a una sociedad implica un costo y un riesgo que
si son demasiados altos me inhibirá de realizar el cambio y consiguientemente los recursos
no se desplazarían hacia sus usos más productivos. Por ejemplo, el conjunto de formalidades
que hay que cumplir para constituir una sociedad implica un gasto, ya en tiempo, ya en dinero,
ello es un costo de transacción en sentido lato.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 385
sujetos a fin de poder hacer que éstos deseen cambiar su status de partida para alcanzar
un status de llegada?*. Si los sujetos no tienen las garantías ni los incentivos necesarios
para asumir el riesgo y los costos del cambio de estatus, no lo harán y preferirán su status
actual a cambiarlo. Preferirán seguir desarrollando una actividad empresarial de forma
individual; no se asociarán con otras personas ni evidentemente desarrollarán actividades
empresariales de manera conjunta. El resultado negativo que se originaría, salta a la
vista.
De otro lado, y aunque los incentivos que puedan recibir los sujetos por intermedio
de la ley (la reducción de los costos de transacción) son determinantes, no son menos
importantes los incentivos existentes para la maximización de beneficios; uno de ellos es
el propio interés del titular de la empresa de obtener mayores ganancias2 25. El otro es una
4
especie de mecanismo darwiniano26 en virtud del cual las empresas que obtienen mayor
rentabilidad desplazarán a las que las tienen menores, porque éstas no pueden obtener
recursos de capital. De este modo, en una economía que tiene por base a la competencia,
las empresas que no exploten las potencialidades ofrecidas por el mercado se verán
desplazadas por aquellas empresas que sí lo hagan.
En ello se puede resumir, a grandes rasgos, la función e importancia que cumplen
las organizaciones societarias en una economía de mercado.27
24. Estos términos han sido utilizados por Bullard, Alfredo. Citado por Del Solar Labarthe, Salvador.
Op. Cit. Pág. 160.
25. Ello es correcto, pues el propósito normal de quienes realizan aportes a una sociedad no es
simplemente el llevar a cabo el objeto de la misma, sino el de obtener utilidades mediante el
conjunto de actividades que conforma tal objeto.
26. Término empleado por Cabanellas de las Cuevas. Op. Cit. Pág. 108.
27. Era necesario hacer este análisis porque el proceso de reforma institucional por la que atraviesa
el país desde principios de los noventa, orientado fuertemente hacia una liberalización de la
economía, nos conduce a una serie de nuevas posibilidades de vinculaciones contractuales
que hasta la década pasada eran difícilmente realizables.
386 Acerca del Contrato de Sociedad / Carlos Gomero Rigacci
Desde este punto de vista se asume que el acto constitutivo crea una persona
jurídica, un sujeto de derecho, pues sólo en ese caso los socios podrían obligarse
frente a ella; no obstante, cabe percatarse que ello no es siempre así, pues cabe la
posibilidad que el acto constitutivo no dé origen a una persona jurídica frente a la
cual se tendrían las obligaciones emergentes del mencionado contrato, como es el
caso de las sociedades irregulares. “La personalidad jurídica no es efecto del
contrato, sino reconocimiento que hace la ley a una manifestación contractual emitida
por ciertas personas que a su turno cumplen determ inadas form alidades
adicionales.29
El acto colectivo se diferencia del contrato en varios aspectos que han sido
claramente señalados por Halperín3'; mientras que en el contrato las voluntades se
entrecruzan, en el acto colectivo son paralelas; en el contrato las voluntades son
recepticias, en el acto colectivo no. En relación con los efectos que producen: en el
contrato nacen efectos diferentes para las partes, mientras que en el acto colectivo
son idénticos y comunes para los participantes. Además de un aspecto fundamental
y que ha ocasionado múltiples discusiones en la doctrina respecto de la afirmación
de si la sociedad es un contrato o un acto colectivo: en el contrato hay consentimiento,
mientras que en el acto colectivo éste no es indispensable, pudiendo llevarse a
cabo por decisión mayoritaria de las partes. En efecto, la unanimidad que es el
presupuesto para la presencia del consentimiento contractual, no se presenta
necesariamente en el acto colectivo.
28. SPOTA, Alberto G.: “Instituciones de derecho Civil. Contratos”. Tomo Vil. Pág. 10 y 11.
29. FLORES NANO, Lourdes : “E l c o n tra to d e S o c ie d a d ”. En: Temas de Derecho Contractual..
Editorial Cuzco. Lima, 1987. Pág. 449.
30. COLOMBRES, Gervasio: “C u rs o d e D e re c h o S o c ie ta rio ”. Parte General. Editorial Abeledo-
Perrot. Buenos Aires, 1972. Pág. 15.
31. HALPERÍN, Isaac: “C u rs o de D e re c h o C o m ercia l". Tomo I. Ediciones Depalma. Buenos Aires,
1985, Pág. 215. '
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 387
Algunos otros autores como Halperín señalan también como una característica
de los contratos plurilaterales, el hecho de que las partes asuman obligaciones
hacia todos los demás y adquieran derechos respecto de ellos, y conjuntamente se
tengan obligaciones y derechos respecto de la sociedad. Este extremo si bien puede
ser ilustrativo, ha sido criticado^pues se señala que puede ser una característica
del contrato de sociedad, pero no de los contratos plurilaterales, porque pueden
existir, y de hecho existen, contratos plurilaterales que no son sociedad, como los
contratos de colaboración empresarial35. Afirmar lo contrario sería sostener que el
32. El típico ejemplo de estos actos son las decisiones asamblearias, derivadas del voto de la
mayoría. Sin embargo desde una óptica contractual algunos autores como Colombres señala
que la decisión asamblearia no niega la teoría contractual, por cuanto no es más que un acto
de un órgano societario (o un acto colegial, en palabras de Oategui) y no producto inmediato
del acto constitutivo. En: Cabanellas de las Cuevas. Op. Cit. Pág. 410.
33. Este es el caso de la llamada constitución sucesiva de la sociedad anónima, es decir, por
oferta a terceros. En este proceso de constitución la adopción de todo acuerdo requiere el
voto favorable de la mayoría absoluta de las acciones representadas en la asamblea de
suscriptores de acuerdo con el Art. 63 de la Ley General de Sociedades.
34. CABANELLAS de las Cuevas, Guillermo: Op. Cit. Pág. 382.
35. Ejemplos de este contrato son el joint venture (regulado por la Ley General de Sociedades
bajo la denominación de consorcio), y la asociación en participación. Ambos insertos en la ley
señalada como contratos asociativos. No obstante, sin ser un contrato de colaboración
empresarial, el contrato de sindicación de acciones es también uno de naturaleza plurilateral.
388 Acerca del Contrato de Sociedad / Carlos Gomero Rigacci
36. Villegas señala que en esta clase de contratos no es que no haya “sinalagma”, sino que éste
difiere del sinalagma clásico en el que un contratante asume una obligación para que el otro
asuma otra de distinta naturaleza, aunque económicamente equivalente; en el contrato
plurilateral, el sinalagma no impide que estando una parte frente a las demás partes, puedan,
a su vez, estar juntas, unidas, persiguiendo un fin común. Villegas, Carlos Gilberto. Op. Cit.
Pág 26.
37. CABANELLAS DE LAS CUEVAS: Op. Cit. Pág. 411.
38. Sin embargo, Albaladejo ha señalado que en este caso existe un “segundo contrato de sociedad”
celebrado entre los antiguos socios y el nuevo. Albaladejo, Manuel. Op. Cit. Pág. 292.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 389
De otro lado, creemos que lo que sucede es que estas teorías que parecen
divergentes no lo son, antes bien son complementarias, pues mediante las dos, a
nuestro parecer, se puede abarcar todo el complejo societario, y es así como se
pronuncia la doctrina señalando que la sociedad es en suma, un contrato plurilateral
de organización, ya que al ser plurilateral se refiere al momento constitutivo y el
carácter de organización se refiere al momento corporativo, referido al decurso de
la actividad societaria.
Aunque la diferenciación entre ésta teoría y la del acto colectivo puedan parecer
vagas cabe tratar de aclararlas. Mientras que el acto colectivo sería aquel acto
pluripersonal en que las manifestaciones de voluntades se unen para la satisfacción
de intereses paralelos, acto complejo sería aquel en que dichas voluntades individuales
no sólo juegan unidas, sino que se funden en una única voluntad44.
Se puede apreciar que esta teoría nace con la finalidad de intentar descartar
la calificación del acto constitutivo societario como figura contractual, teniendo como
la teoría del acto colectivo, un origen en la necesidad de explicar ciertos efectos
jurídicos que parecen resultar inexplicables en la teoría contractual¡sta clásica. Desde
esta óptica pueden serle aplicables las críticas formuladas a la teoría del acto colectivo.
Además, al mencionar que las voluntades se funden en una sola, esta teoría
parece no admitir la existencia paralela entre el fin común y los intereses de las
partes, por ello se ha señalado que la existencia de un fin común no es contradictoria
con la simultánea coexistencia de intereses propios de los socios, intereses que
pueden entrar en conflicto entre sí. De esta manera, una sociedad supone un interés
común dirigido a la obtención de utilidades que serán divididas entre los socios,
pero simultáneamente los socios tienen intereses contrapuestos en distintas
materias, tales como la valoración de los aportes que cada uno efectúe o la
distribución de utilidades que a cada uno le corresponda, entre otras.
los socios que la integran y sobre la cual se fundamentan las distintas vinculaciones no
sólo de dichos socios, sino de éstos con la propia sociedad como ente, creándose para
cada socio con la sociedad, un status que tiene un valor económico y que le corresponde
como compensación a cambio del aporte realizado a la sociedad45, pasaremos ahora a
explicar las características del contrato de sociedad, a la luz de la teoría general sobre los
contratos.
De este modo el contrato de sociedad se torna particular y adquiere características
propias, no existentes en los contratos que comúnmente estudiamos. Estas a grandes
rasgos pueden ser las siguientes:
nunca conduce a una invalidación del contrato de sociedad mismo, sino que éste
es válido y surte efectos por el sólo consentimiento, aunque la Ley General de
Sociedades en estos casos le atribuya una serie de consecuencias jurídicas poco
saludables como la responsabilidad personal de los administradores, etc. En tal
sentido hablamos de las sociedades irregulares.49
49. En la doctrina se ha señalado que dos son las clases de sociedades irregulares, las de hecho
y las de derecho. Las primeras son aquellas que no se han constituido conforme a ley, que
emanan de la participación conjunta de dos o más personas que actúan manifiestamente en
sociedad, sin haberla constituido y sin intenciones de hacerlo, y aún así contratan con terceros
como si realmente estuvieran constituidas. Las sociedades irregulares de derecho son aquellas
en las que se ha firmado cuando menos el contrato social, es decir, cuando menos se ha dado
el primer paso para su formalización.
50. FLORES NANO, Lourdes: Contrato de sociedad. Op. Cit. Pág. 445.
51. No hay novación subjetiva porque ella comprendería la extinción de un vínculo y el nacimiento
de otro por un cambio de las personas obligadas, en este caso el ingreso de una persona al
contrato de sociedad no lo extingue y nace otro, sino que forma parte de él sin que sufra
modificación alguna.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 393
1. La estructura de los contratos plurilaterales nos permite distinguir entre dos tipos
de vicios, los que afectan al vínculo de una de las partes, y aquellos vicios del
contrato mismo; en los contratos de cambio -sobre las cuales se asienta casi toda
la elaboración legislativa contractual de nuestro Código Civil- no es posible establecer
esta distinción, por cuanto el vicio que afecte el vínculo de una de las partes afectará
también el contrato, pues al anular una de las prestaciones el contrato se torna
imposible de realizarse de forma normal53.
52. Es frecuente en los joint ventures suscribir un contrato básico que detalla los lineamientos de
la colaboración entre las partes; la formación de sociedades puede ser solo un elemento de
tales lineamientos y tendría, por tanto, una relación accesoria respecto del contrato básico.
Sobre el tema puede revisarse: Cabanellas de las Cuevas. Op. Cit. Pág. 432.
53. Debe señalarse, sin embargo, que no debemos confundir en este punto el vicio del vínculo de
una de las partes con el vicio de una de las cláusulas del contrato, pues en tal caso ni en
contratos de cambio ni en los plurilaterales el contrato se afectaría ya que se aplicaría la regla
de derecho que señala que si una disposición separable de un contrato se invalida, no invalida
aquellas válidas que integran el resto del contrato.
54. Esta regla se encuentra contenida en el Código Civil (Libro de Acto Jurídico):
“Artículo 223°.- En los casos en que intervengan varios agentes y en los que las
prestaciones de cada uno de ellos vayan dirigidas a la consecución de un fin común, la
nulidad que afecte el vínculo de una sola de las partes no importará la nulidad del acto,
salvo que la participación de ella deba considerarse como esencial, de acuerdo con
las circunstancias.”
La situación aquí expuesta se explica en razón de que en los contratos plurilaterales si una
prestación se torna imposible o el vínculo de una de las partes se anula o resuelve, el contrato
podría seguir cumpliendo los fines que persigue, como es el beneficio de las partes restantes.
394 Acerca del Contrato de Sociedad / Carlos Gomero Rigacci
Es importante señalar que aun en el caso que la sociedad como contrato se encuentre
afectada por algún vicio que determine su existencia (falta de pluralidad, objeto
social ilícito, falta de capacidad de los contratantes, etc.), los efectos que produzcan
estos vicios no son retroactivos, es decir sólo pueden operar para adelante, debiendo
considerarse a la sociedad desde su supuesta creación a la fecha del descubrimiento
del vicio, como una sociedad de hecho, o sociedad irregular. Etchevarry señala que
aquí se produce una nulificación a futuro ya que “la sociedad tiene necesidad de
existir. (...). Es que no debemos olvidar que con la creación de la sociedad nace
un sujeto de derecho, equiparable nada menos que al ser humano. Esta persona
no se detiene en un acto jurídico o contrato, sino que se evidencia como un centro
dinámico operante, que tiene múltiples manifestaciones (no solamente jurídicas
sino económicas o sociales) otorgando y recibiendo imputación normativa en un
marco que le es propio”55
nacer de este modo el denominado interés social como punto central para la
interpretación de las obligaciones asumidas por las partes dentro del contrato.
58. Excepción de incumplimiento de contrato. Mediante esta excepción se faculta a cada parte a
negarse a cumplir lo pactado en tanto el otro contratante no cumpla lo que le corresponde.
59. Código Civil: “Artículo 1426.- En los contratos con prestaciones recíprocas en que éstas
deben cumplirse simultáneamente, cada parte tiene derecho de suspender el cumplimiento
de la prestación a su cargo, hasta que se satisfaga la contraprestación o se garantice su
cumplimiento.”
60. Naturalmente los agentes económicos pensarían más de una vez ante la oferta de formar una
sociedad ya que nadie querría asociarse con otros, si sabe que en el camino todos podrían
negarse a aportar al fondo común ante la negativa de sólo una de las partes contratantes. De
este modo, frustrar un intercambio supone desperdiciar posibilidades de mayor bienestar
económico.
61. URÍA, Rodrigo: Op. Cit. Pág. 174.
396 Acerca del Contrato de Sociedad/ Carlos Gomero Rigacci
7. Por extensión, tanto las normas sobre lesión, como las relativas a la excesiva
onerosidad de la prestación no son aplicables precisamente por lo que venimos
señalando. La falta de reciprocidad en las prestaciones del contrato plurilateral en
general y del contrato de sociedad en particular hacen que las normas referentes a
estos temas sean inaplicables para dicha clase de contratos. No obstante, Spota62
señala que la excesiva onerosidad de la prestación puede ser perfectamente
aplicable a los contratos de sociedad en razón del carácter conmutativo de los
mismos. En ese sentido, señala que “si el aporte de uno de los socios queda sometido
a un plazo o es de ejecución diferida o continuada, y ello torna excesivamente
onerosa la prestación propia (v. gr., la construcción de un edificio), nada obsta a
que se aplique el remedio de la resolución contractual (disolución de la sociedad) o
el reajuste de la prestación del socio en cuanto a que se compute ese reajuste en
su cuota social”.
Son estos los dos “momentos” del complejo societario, el primero referido a su
nacimiento o constitución, y el segundo, atinente al campo corporativo, cuyas actividades
son llevadas a cabo por los órganos societarios.
Habrá, por tanto, sociedad en cuanto contrato, cuando dos o más personas se
obligan a realizar aportes que serán utilizados para la realización de una serie de actividades
debidamente delimitadas, las mismas que serán llevadas a cabo mediante una organización
que está a cargo, a su vez, por las personas que aportaron . Todos los que conforman la
sociedad participan, además, en los beneficios y pérdidas derivadas de esas actividades.
La sociedad en cuanto ente u organización, no es más que la relación jurídica que existe
entre los socios originado en el contrato constitutivo de sociedad, relación que
frecuentemente adopta la estructura de una persona jurídica.
ASPECTOS LEGALES
Normas Complementarias
Señor Notario:
C) Los aportes dinerarios que forman el capital social se encuentran depositados, a nombre
de la sociedad, en una institución bancaria, según el respectivo comprobante de depósito,
en cumplimiento de lo establecido por el artículo 23° de la Ley General de Sociedades.
D) Los socios dejan establecido que el valor total de las acciones suscritas deberá ser
pagado dentro de los sesenta días siguientes a la inscripción registral de la
constitución de la sociedad.
ESTATUTO
TÍTULO I
Denominación, Objeto, Domicilio y Duración.
TÍTULO II
Capital Social y Acciones.
Artículo 6o.- Los accionistas tienen preferencia absoluta para suscribir a prorrata
de sus respectivas participaciones las acciones representativas de los sucesivos aumentos
de capital por nuevos aportes que resuelva la Junta General de Accionistas de la sociedad.
No pueden ejercer el referido derecho preferencial los accionistas que se encuentren en
mora en el pago de los dividendos pasivos, y sus acciones no se computarán para
establecer la prorrata de participación en el derecho de preferencia.
Artículo 8o.- En todos los demás aspectos que atañen al régimen de las acciones
los socios se someten a las normas de la Ley General de Sociedades y demás que resulten
pertinentes, o en su caso, a lo que acuerde la junta general de accionistas.
TÍTULO III
Órganos de la Sociedad
b) El directorio; y,
c) La gerencia.
CAPÍTULO I
Junta General de Accionistas
CAPÍTULO II
El Directorio
Artículo 13°.- El período de duración del directorio será de tres (3) años, vencidos
los cuales los directorios podrán ser reelegidos indefinidamente por la junta general de
accionistas.
Artículo 14°.- El directorio elegirá de su seno un presidente, salvo que la junta general
de accionistas lo haya designado al momento de la elección de los miembros del mismo.
Artículo 15°.- El directorio tiene los más amplios poderes y facultades de
representación para la gestión ordinaria y extraordinaria de la sociedad, con las limitaciones
que conforme a la ley y al estatuto están reservadas a la junta general de accionistas.
El directorio está facultado expresamente para:
e) Pactar todo tipo de contratos que sean necesarios para llevar a cabo los propósitos
de la sociedad.
CAPÍTULO III
La Gerencia
Artículo 19°.- El o los gerentes de la sociedad serán designados por la junta general
de accionistas, la misma que puede delegar esta facultad al directorio. El nombramiento
de dicho cargo será por plazo indefinido, pudiendo el o los gerentes ser removidos en
cualquier momento por la junta general de accionistas o por el directorio, cualquiera que
sea el órgano del que haya emanado su nombramiento.
n) Cobrar las sumas que se adeudan a la sociedad y otorgar las cancelaciones del
caso.
Artículo 21°.- Para el ejercicio de las facultades a que se refiere la cláusula anterior
bastará la intervención del gerente a sola firma.
Artículo 22°.- En lo concerniente a los demás aspectos relacionados con la gerencia
y los gerentes de la sociedad, los socios se someten a lo previsto por la Ley General de
Sociedades y demás normas que resulten pertinentes, o en su caso, a lo que acuerde la
junta general de accionistas.
TITULO IV
Aumento y Reducción del Capital y Modificación del
Pacto Social y Estatuto
Artículo 23°.- El aumento y reducción del capital así como cualquier modificación
del acto social o del estatuto se acuerda por la junta general de accionistas, según el
procedimiento, requisitos y formalidades establecidas en los artículos 198° y siguientes
de la Ley General de Sociedades, y con los efectos que dicha ley indica.
TÍTULO V
Gestión Social, Estados Financieros y Aplicación de Utilidades
TITULO IV
Disolución, Liquidación y Extinción de la Sociedad
TÍTULO Vil
Disposición Final
Artículo 26°.- Rigen además para la sociedad todas las disposiciones imperativas
de la Ley General de Sociedades. En caso de incompatibilidad entre las prescripciones
de dicha Ley y el contenido de este estatuto, prevalecerán aquéllas sobre éste.
Agregue usted, Señor Notario, la introducción, conclusión y cláusulas de Ley, y
sírvase elevar a escritura pública la presente minuta, cuidando de hacer los insertos
correspondientes, y de pasarlos partes respectivos para la inscripción de la sociedad en
el Registro de Personas Jurídicas de Lima.
Lim a,------ de de
406 Acerca del Contrato de Sociedad / Carlos Gomero Rigacci
J URISPRUDEN CIA
I n s c r ip c ió n d e l c o n t r a t o s o c ia l : O r ig e n d e l a
IDEAS PRELIMINARES
El contrato de Asociación en Participación es uno de los dos contratos que en el
Libro Quinto regula nuestra vigente Ley General de Sociedades, NLGS, 26887; el otro es
el denominado Consorcio. En el derogado, D. Leg. 311 del año 1985, ALGS, se hallaba en
el Libro Tercero, Normas Complementarias, Sección Sexta, y era el único; no había
regulación legislativa, en la ley general de sociedades, para el Consorcio.
Como introducción al tema, apreciemos la diferente estructura orgánica de la ley
anterior versus la vigente. En la ALGS se incluía en el Libro Primero, un Título Preliminar,
con evidente aroma civilista; y cinco Secciones: I Sociedad Colectiva; II Sociedad En
Comandita Simple; III Sociedad Anónima; IV Sociedad En Comandita Por Acciones; y V
Sociedad Comercial de Responsabilidad Limitada. En el Libro Segundo, sólo las(*)
(*) Abogado por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Miembro de la Comisión Redactora
del proyecto del Reglamento del Registro de Sociedades. Profesor de Derecho Comercial en
las Universidades de San Marcos y en la Universidad de Lima. Ex Profesor de ESAN. Autor de
los Libros Reestructuración Empresarial y Derecho Comercial (1994), Comentarios a la Ley
General de Sociedades (1998), Comentarios a la Ley de Títulos Valores, en coautoría con el
Dr. Rolando Castellares, (2000); y Comentarios al Nuevo Reglamento del Registro de
Sociedades (2001). Fundador del Instituto Peruano de Derecho Mercantil. Magistrado del
Tribunal Constitucional.
408 El Contrato de Asociación en Participación / Ricardo Beaumont Callirgos
I. CONTRATOS ASOCIATIVOS
Antes de referirnos al tratamiento que el contrato de Asociación en Participación
tiene en nuestra legislación societaria, conviene primero analizar la figura de los llamados
contratos asociativos, dentro de los cuales esta institución constituye una de sus clases.
Muchos autores se han pronunciado sobre la naturaleza de estos contratos, algunos
como Fariña1, afirman que “los contratos asociativos serían contratos plurilaterales en
sentido funcional y de colaboración”, Messineo2 señala que “ todo contrato asociativo
1. FARIÑA, Juan. M.: “Contratos Comerciales Modernos”. Editorial Astrea. Buenos Aires, 1994.
Pág. 330
2. MESSINEO, Francesco: “Manual de Derecho Civil y Comercial”. Tomo IV. Buenos Aires,
1973. Pág. 10. ’
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 409
- Dan lugar, en nuestra Ley, a dos contratos, nominados y típicos, que son el de
asociación en participación y el de consorcio.
- La Ley regula estos contratos en forma amplia, dejando un campo muy extenso a la
autonomía de la voluntad privada.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 411
Nada impide, en nuestra opinión, que las partes celebren contratos asociativos que
pueden no adecuarse a los esquemas de la asociación en participación o del
consorcio, si así lo desean. Ellos serán contratos asociativos innominados y atípicos.
La única formalidad exigióle a los contratos asociativos es que consten por escrito.
No es necesaria la escritura pública ni la inscripción en el Registro.
En cuarto lugar, vemos que los bienes contribuidos al negocio conjunto se presumen
de propiedad del asociante salvo que figuren inscritos en el registro respectivo a favor del
asociado; cosa que no se da en el contrato de consorcio donde los bienes asignados al
negocio son del consorciado.
En quinto lugar, se puede apreciar que las obligaciones que nacen para el asociado
son principalmente obligaciones de dar, siendo las obligaciones del asociante de dar y
hacer; cosa que no se da en el caso del contrato de consorcio donde las partes tienen
obligaciones de dar pero particularmente de hacer.
Finalmente, en sexto lugar, es importante destacar que en el contrato de asociación
en participación siempre se persigue un fin lucrativo (la repartición de utilidades), propósito
que puede no darse en el caso del consorcio, donde muchas veces éstos se celebran con
fines de investigación y los resultados del negocio o de la empresa se explotan
individualmente por cada parte.
De este modo, es fácil entender las ventajas que ofrece la asociación en participación
sobre otras figuras jurídicas apropiadas para la captación de recursos, como el contrato
de sociedad, los créditos, la emisión de obligaciones y otros.
Así, los recursos se obtienen con un mínimo de formalidades, sin garantías, sin
intereses, sin compromisos de reembolso o de rendimiento y con la sola promesa de
participar en las aleatorias utilidades del negocio, pero también en las eventuales
pérdidas.
- Las obligaciones que nacen para el asociado en este contrato son obligaciones de
dar; las del asociante, de hacer y dar.
- Los bienes que se adquieren son en copropiedad y los que se “aportan” son del
consorciado que los aporta.
- Las obligaciones de las partes en este contrato son obligaciones de dar, pero
particularmente de hacer.
Las diferencias que se han anotado resultan capitales; para referirnos sólo a la
primera, tomemos el hecho de que la asociación en participación sea un contrato con
prestaciones recíprocas y el joint venture no, los aparta abismalmente. El inmediato efecto
de esta diferencia, es que al primero de los contratos de los citados le son aplicables el
título VI (artículos 1426 a 1432) del libro Vil del Código Civil, Dicho título se refiere a los
contratos con prestaciones recíprocas y contiene importantes figuras que le son aplicables
a estos contratos, como: excepción de incumplimiento, excepción de caducidad de plazo,
resolución por incumplimiento, cláusula resolutoria, etc.
III. ANTECEDENTES
En cuanto al nacimiento de este contrato podemos decir que éste tendría su
antecedente en la llamada Commenda Medieval (antigua forma de colaboración mercantil
a través del negocio de participación o empresa secreta) en cuyo término el commendator
confía el dinero o mercancía al commendatario para su utilización comercial en un viaje,
concluido el cual se repartían las ganancias o pérdidas en la proporción convenida. Parece
ser que el auge de este contrato en la Alta Edad Media habría sido propiciado
involuntariamente por la prohibición del préstamo con intereses.
Esta es la razón por la cual, a decir de Elias La Rosa4, “.. el contrato de asociación
en participación, tal como lo señala la doctrina, apunta a objetivos similares a los de los
socios de las sociedades en comandita”.
Esto también es tomado en cuenta por Brunetti5 quien sobre el tema señala que
"las afinidades entre la sociedad en comandita simple y la asociación en participación son
solamente externas; las diferencias de estructura son notables. Para el autor las diferencias
sustanciales serían las siguientes: i) la sociedad en comandita es una sociedad comercial,
es un empresario, en la asociación en participación, en cambio, el empresario es sólo el
asociante: ii) la sociedad en com andita constituye una entidad patrim onial con
responsabilidad propia bajo una razón social; la asociación en participación, en cambio,
no tiene razón social: el asociante actúa en nombre propio y solamente él asume
obligaciones ante terceros; iii) En la sociedad en comandita los socios ilimitadamente
4. ELIAS LAROZA, Enrique: “Derecho Societario Peruano. Ley General de Sociedades- Tomo
II. Editorial Normas Legales. Lima, 1999 Pág. 1172.
5. BRUNETTI, Antonio: “ Tratado del Derecho de las Sociedades. T. I. Uteha. Buenos Aires,
1960. Pág. 714-715.
414 El Contrato de Asociación en Participación / Ricardo Beaumont Callirgos
Ambos conceptos marcan una oposición clara frente a los que podrían conocerse
como caracteres tipificantes de la institución de la sociedad común, vale decir la
indeterminación en su duración y la permanencia o amplitud en su objeto comercial.
Esto nos permite ir notando que, en efecto, la institución tratada no puede asimilarse
a una sociedad.
2. Se advierte la existencia de dos partes, por un lado el asociado y por otro el asociante.
El primero es el que aporta bienes y servicios mientras que el segundo realiza el
negocio y asume la responsabilidad frente a terceras personas. Este es el rasgo
principal que lleva a decir a la doctrina que estamos ante un caso de negocio oculto,
en el cual el asociante es el que da la cara ante terceros. A decir de Muguillo6 "..
esta sociedad accidental o en participación crea entre sus componentes una relación
oculta interna”.
Sobre este tema conviene precisar que se ha dejado a las partes una amplia
posibilidad para que establezcan diferentes convenios de acuerdo a la autonomía
6. MUGUILLO, Roberto A.: “Cuestiones de Derecho Societario”. Ed. Meru S.R.L. Buenos Aires.
1980. Pág. 82-83.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 415
6. Otro rasgo que se reconoce, es el hecho que el asociante actúa en nombre propio
estableciendo una relación jurídica con los terceros, no existiendo relación jurídica
entre el (los) asociado (s) y los terceros. Ante éstos, es el asociante el que responde
por las obligaciones asumidas.
7. Las contribuciones del (de los) asociado (s) son utilizadas por el asociante para el
desarrollo del negocio. De existir bienes aportados al negocio conjunto se presume
que pertenecen al asociante, aunque la ley permite que permanezcan en poder del
asociado. La excepción se da en el caso que el (los) asociado (s) tenga inscritos
bienes a su nombre en los Registros Públicos.
Este tema es de singular importancia por cuanto la ley vigente en vez de referirse a
aportes, como mencionaba la legislación anterior, ha optado por denominar como
contribuciones a los diferentes bienes o servicios que deberán las partes proporcionar
a la empresa conjunta. Se decidió modificar esto debido a que en puridad no se
daría una transferencia de propiedad sobre los bienes que los contratantes se obligan
a entregar al negocio, ya que conforme al artículo 443 los bienes que proporcionan
los asociados a la empresa se pueden presumir de propiedad del asociante, pero no
significa que sean efectivamente de su propiedad ya que pueden estar inscritos a
nombre del asociado en el registro respectivo. A nosotros nos parece correcto que se
haya cambiado el vocablo “aporte” por “contribución”, pues el primero da la impresión
de tener las connotaciones jurídicas del “aporte” en el caso de las sociedades, prevista
ahora en la Ley 26887, artículos 22 a 31, que por supuesto, no es el caso. Sin embargo,
no han faltado quienes sin advertir esta ventaja, han percibido un aroma tributarista a
la palabra “contribución” y propugnan el retorno al vocablo “aporte”.
9. Se deriva también el derecho por parte del asociado de exigir al asociante la rendición
de cuentas al término de cada ejercicio y al finalizar la participación conjunta en el
negocio.
10. Otra nota importante es la referida a la limitación de asociar que lleva implícita el
contrato, el asociante no puede dar participación en el negocio a otras empresas o
personas, sin contar con el consentimiento expreso del asociado u asociados.
V. NATURALEZA JURÍDICA
Sobre la naturaleza jurídica de este contrato podemos decir que este es un aspecto
interesante que ha sido objeto de un intenso debate en la doctrina.
Es variada la manera como los distintos países han regulado a esta institución.
Este contrato ha recibido así diferentes denominaciones. Se le conoce en algunos casos
como Cuentas en Participación, también como Sociedad Tácita, Sociedad Accidental,
Sociedad Secreta y Contrato en Participación.
Es interesante ver que en países como España, Honduras o Portugal se regula
esta figura como un contrato, aplicándole, sin embargo, ciertas disposiciones de las
sociedades.
Específicamente en el caso de España los autores L. Ribo Duran y J. Fernández
Fernández78señalan que éste constituiría una modalidad de negocio jurídico a medio camino
entre el contrato de préstamo parciario y la sociedad. Así mismo, el maestro español
Broseta Pont8, menciona que las cuentas en participación fueron y son un contrato de
colaboración económica por el que uno o varios sujetos aportan capital o bienes a otro,
para participar en los resultados prósperos o adversos de un acto o actividad que éste
desarrolla enteramente en su nombre, y aparentemente por su cuenta.
Se puede apreciar que en este caso se opta por concebir a las llamadas cuentas en
participación como un contrato pero aplicándoseles ciertas reglas de las sociedades
comunes.
como sociedad, negándole tal carácter y remitiéndose a calificarla como simple asociación
o como contrato o negocio parciario. Se fundamentan estos autores en que la sociedad
accidental o en participación no tendría personería y no sería sujeto de derecho, no tendría
denominación o razón social, ni tendría capital o fondo social y que no existiría organización
del ente como correspondería de acuerdo a la normativa general de la ley de sociedades
comerciales.
Por otro lado una segunda posición reconoce el carácter de sociedad típica. Expresan
algunos autores que aunque se hallan atenuados -frente a terceros- los caracteres propios
de la sociedad, nada falta para que exista sociedad. Señalan que es una sociedad oculta,
la mayor parte de las veces, ya que frente a terceros sólo actúa uno o algunos de los
socios.
Fariña,9 comentando también este tema, menciona que la figura del negocio en
participación no aparece definida ni regulada como figura típica en el ordenamiento
argentino. La sociedad en participación (que es como se le conoce al contrato de asociación
en participación en Argentina) es regulada como una sociedad anómala.
Finalmente una tercera tendencia entre los que estarían países como el Perú, México
e Italia, regulan a esta institución como un contrato de tipo asociativo diferente a la sociedad
común.
VI. ELEMENTOS
a) En relación a los sujetos, como hemos mencionado, se involucra a dos partes. Por
un lado, al asociante que actúa como gestor y es aquel que tiene a su cargo la
administración del negocio y actúa a nombre propio frente a terceros, y por otro
lado el asociado que permanece oculto y no tiene parte en la conducción de la
empresa pero sí en las pérdidas o utilidades del negocio conjunto. Nada obsta para
que ambas partes puedan ser personas naturales o personas jurídicas.
b) El objeto de esta institución tal como lo señala el artículo 440 de la Ley General de
Sociedades, es la participación conjunta en el resultado o en las utilidades de uno
o varios negocios o empresas del asociantes, a cambio de una determinada
contribución. Por tanto su objeto es la realización de una o más operaciones
determinadas y transitorias que pueden ser de diferente tipo, tales como obras de
construcción, operaciones de producción o inversiones conjuntas, etc.
ASPECTOS LEGALES: .
El contrato de asociación en participación es un contrato típico. Se encuentra
regulado en la Ley General de Sociedades (Ley 26887, en su Libro V, que trata sobre las
reglas comunes a todos los contratos asociativos, para luego tocarlo puntualmente. Así
tenemos:
MODELO DE CONTRATO
DE ASOCIACIÓN EN PARTICIPACIÓN
Señor Notario:
ANTECEDENTES
PRIMERO
1.3. Como parte del desarrollo de sus actividades, LAASOCIANTE y LA ASOCIADA han
acordado llevar adelante la construcción o adquisición de una embarcación pesquera
con una capacidad de bodega de 353.35 m3, mediante la acumulación de la
capacidad de bodega autorizada a LA ASOCIADA según Resolución Directoral N°
... de fe c h a ........ a que se refieren en los numerales 1.1. y 1.2. precedentes, para
lo cual ambas partes deberán iniciar ante el Ministerio de Pesquería, por sí o
mediante sus apoderados, el correspondiente procedimiento de acumulación y
sustitución de capacidades de bodega.
OBJETO
a) Se considerarán los ingresos que se perciban por la venta del pescado cuya
extracción se hubiese verificado mediante la explotación de la nueva embarcación.
b) A dichos ingresos les serán deducidos todos los costos directos en los que debió
incurrirse para la explotación antes mencionada tales como petróleo, aceite,
reparaciones de la embarcación, pago a la tripulación, aportes a la Caja de Beneficio
al Pescador y otros de similar naturaleza.
c) Asimismo, le deberán ser aplicados los impuestos de ley que pudiesen corresponder,
de ser el caso.
PLAZO
CUARTO: Queda expresamente establecido que el plazo del presente contrato
es uno de carácter perpetuo o de 2 años en caso existieran observaciones a dicha
perpetuidad.
Las partes convienen en ratificar que esta modalidad contractual ha sido preferida
a la de una Fusión o Participación conjunta en el capital social de una respecto de la otra,
toda vez que ambas empresas cuentan con otros activos que no desean verse
comprometidos bajo este sistema de explotación con riesgo compartido pero que, el carácter
de permanencia en el tiempo de esta Asociación en Participación deberá ser el mismo
que el considerado a una Sociedad.
DIRECCIÓN DE LA ASOCIACIÓN
QUINTO: La presente Asociación en Participación será representada y dirigida
por LA ASOCIANTE a cuyo nombre deberán ser extendidas todas las autorizaciones y
permisos que sean tramitadas ante las autoridades administrativas para la explotación de
la nueva embarcación.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 423
CONFIDENCIALIDAD
SEXTO:Las partes así como sus funcionarios, empleados y servidores se
comprometen a mantener la mayor confidencialidad sobre cualquier información que
puedan recibir con relación a la ejecución del presente contrato.
En tal sentido, entiende y aceptan que la información relativa a la otra parte que
llegue a su conocimiento como consecuencia de la celebración y ejecución del presente
contrato, así como del material por ellos utilizados, las ideas, recursos, y documentos,
tienen el carácter de confidencial y, por lo tanto, quedarán en absoluta reserva y no podrán
ser divulgados por ninguna de ellas a un tercero, sin previa autorización por escrito del
titular de la información.
ARBITRAJE
OCTAVO: Cualquier discrepancia que surja sobre el alcance de este contrato,
ampliaciones, modificaciones o sustituciones o sobre la interpretación de sus estipulaciones
o en la ejecución de las prestaciones y demás obligaciones estipuladas en ellos que
involucre entre sí a cualquiera de las partes de este contrato, así como en los casos de
rescisión o resolución del contrato, será resuelto en la vía arbitral bajo las siguientes
reglas:
a) Será sometido a un tribunal integrado por tres árbitros, uno designado por cada una
de las partes involucradas o, de ser el caso, intervinientes y el tercero, quien lo
presidirá, designado por los dos primeros árbitros.
b) El proceso arbitral, incluida la designación de los árbitros en caso que una de las
partes no lo hiciera, se regulará por el Reglamento de Arbitraje Nacional del Centro
de Arbitraje Nacional e Internacional de la Cámara de Comercio de Lima.
LA ASOCIANTE LA ASOCIADA
424
J URISPRUDEN CIA
A s o c ia c ió n e n p a r t ic ip a c ió n : No d e t e r m in a l a c o n s t it u c ió n d e
PERSONA JU R ÍD IC A (*)
RESOLUCIÓN N° 415-97-ORLC/TR
(*) Esta jurisprudencia ha sido tomada de “Jurisprudencia registra!1, de jul-dic de 1997. AñoV, vol.
III, 1998, ORLC
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 425
A s o c ia c ió n e n p a r t ic ip a c ió n : O b l ig a c ió n m a n c o m u n a d a
EXP. N° 656-98
Sala de Procesos Abreviados y de Conocimiento
A s o c ia c ió n e n p a r t ic ip a c ió n : I m p id e a l a s o c ia d o
CAS. N° 2051-2002
Arequipa
El Peruano 30/07/2004
“(...) Sétimo.- Que, en el presente caso el objeto del contrato en referencia fue la
construcción de un edificio m ultifam iliar para la posterior venta de las tiendas o
departamentos futuros; lo que permite colegir que al haber la tercerista aportado el Lote
de la Manzana E al contrato de asociación en participación, el mismo salió de su esfera
patrimonial en dicho contrato, los que son exigióles únicamente a su contraparte la
asociante.
Octavo.- Que siendo ello así, es fácil concluir que el artículo 887 precitado no resulta
de aplicación al caso que nos atiende por cuanto el lote de la manzana E sobre el que se
levantaron las construcciones (específicamente las tiendas) pasó a ser utilizado con el
objeto social de la asociación en participación en alusión cuya representación frente a
terceros por mandato del artículo 441 de la Ley en comento, le corresponde a la asociante
CODINSA, lo que debe corroborarse con lo dispuesto por el tercer párrafo del citado
artículo de la misma Ley según el cual, los asociados no adquieren derechos ni asumen
obligaciones frente a terceros, razones por las cuales la demanda incoada resulta inviable,
máxime si conforme establecieron los Jueces de Mérito, el bien objeto de tercería no está
constituido por el lote en alusión sino por las tiendas que se han construido sobre el
mismo, cuya propiedad no ha sido demostrada por la tercerista.
Noveno.- Que, la causal de inaplicación para que surta sus efectos debe cumplir
con demostrar la idoneidad de la norma al supuesto de tacto establecido así como también
de qué manera su aplicación modificaría el sentido de lo resuelto, situaciones que en el
caso del artículo 887 en comento no se verifican en la presente causa, por lo queja sentencia
de vista recurrida no puede ser casada (...)”
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 427
PRESTACIONES RECÍPROCAS
EXP. N° 1461-2002
1a Sala Civil de Lima
I. INTRODUCCIÓN
(*) Abogado por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, con Tesis y calificación 18
(equivalente a cum laude) y recomendación oficial de publicación. Ex Director de ios Talleres
de Investigación: “Fénix” y “José de la Riva Agüero” en esa Universidad. Director Ejecutivo de
“ESDEN” Escuela Superior de Derecho, Empresa y Negocios. Ha publicado artículos y ensayos
sobre de derecho, en especial de las áreas derecho de contratos, derecho constitucional y
procesal Constitucional.
430 El Contrato de Consorcio / Hugo Huayanay Chuquillanqui
1. Ernesto Martorell, hablando de los contratos asociativos señala que se trataría de un concepto
más amplio que el de sociedad «Comprensivo a todas aquellas figuras contractuales en las
cuales las partes -sin renunciar a sus intereses individuales (intelectuales, económicos, o de
cualquier índole que fuesen)- se obligan a efectuar prestaciones y colaborar para el logro de
un fin económico; obviamente, un espectro tan amplio sirve para albergar en el desde las
asociaciones civiles y comerciales, las agrupaciones de colaboración y las uniones transitorias
de empresas, hasta ciertos negocios en participación y coaliciones empresariales»
(MARTORELL, Ernesto: «Tratado de Contratos de Empresas», Ed. Depalma, Buenos Aires,
tomo 11,1998, pág. 282). Por su parte, para Ricardo Beaumont: «El contrato asociativo es un
género contractual que contiene diversos tipos de contratos caracterizados por la colaboración
entre las partes inten/inientes que les permite la participación e integración en negocios o
empresas determinadas». (BEAUMONT CALLIRGOS, Ricardo: «Ricardo: «Comentarios a
la Ley General de Sociedades», Ed. Gaceta Jurídica, Lima, 2002, pág. 819).
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Moríalas) 431
• Otra diferencia saltante entre ambas figuras es la relativa a las partes Integrantes;
así, mientras que en una «sociedad» todos son socios entre sí, con derechos
igualitarios y participaciones de acuerdo a sus aportes en la dirección de la sociedad,
en los «contratos asociativos» en cambio, existen asociados que participan en
diferentes grados y con distintas responsabilidades de acuerdo a la naturaleza de!
negocio,6caso por ejemplo en la asociación en participación donde las obligaciones
del asociante y del asociado son distintas.
5. Nuestra actual Ley General de Sociedades (LGS), Ley 26887, en artículo primero, permite
que existan sociedades que persigan o no lucro; lo cual constituye una importante innovación.
Basta que ese ente colectivo desempeñe actividades económicas para que se pueda considerar
como una sociedad. Dicho en los términos de Beaumont, cuando comenta el art. 438 de la
LGS: «No genera persona jurídica, es decir, no da tugara la creación de un sujeto de derecho
que tenga existencia distinta de sus miembros y que ninguno de éstos ni todos ellos tengan
derecho al patrimonio de ella». (BEAUMONT CALLIRGOS, Ricardo: « L e y G e n e r a l d e
S o c ie d a d e s C o m e n ta d a ». Ob. Cit., pág. 819).
6. Juan FARIÑA, tratando de marcar diferencias de la sociedad con los contratos asociativos,
señala que en el contrato de sociedad: «... no existe un asociante y uno o más asociados,
sino que cada parte participa directamente y a título jurídicamente igualitario en el negocio o
la empresa común, con intervención directa o indirecta en la gestión de los negocios comunes,
con la facultad de concurrir a la formación de la voluntad colectiva y con derecho a participar
de los beneficios exigibles directamente al órgano común. Es decir, son todos asociados
entre sí.» (FARIÑA, Juan: « C o n tra to s C o m e rc ia le s y M o d e rn o s » , Ed. Astrea, Buenos Aires,
1991, págs. 737-743).
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 433
• En el aspecto del plazo encontramos otra diferencia sustancial entre los «contratos
asociativos» y la «sociedad», ya que mientras que los primeros, como señaláramos,
son celebrados a plazos determinados, o hasta la consecución de un fin o negocio
específico, en la «sociedad» el plazo es siempre indeterminado e indefinido, pues
su existencia y actividades no están supeditadas a plazos o negocios específicos.
• Otro punto fundamental distintivo entre ambas figuras es la relativa a las prestaciones
que cumplen las partes; así, en la «sociedad» el cumplimiento de las prestaciones no
encuentra correspondencia de sus contrapartes, pues no existe reciprocidad entre
ellas, en tal sentido, el incumplimiento de las prestaciones de una de las partes sólo
generará la resolución del contrato respecto a la parte que la incumple y no autoriza
a las otras a suspender sus cumplimientos; caso distinto ocurre en los «contratos
asociativos» en los cuales si existe reciprocidad, así el Incumplimiento que haga una
de las partes afectará al contrato mismo y es objeto de resolución de aquel.
• Finalmente como otro punto diferencial tenemos que, «la sociedad,» siendo en
principio una organización abierta permite el ingreso de nuevas personas después
de su celebración, así como la salida de las partes originarias; en contraposición a
ello, en los «contratos asociativos» no se permite aquello, en razón que son
organizaciones mucho más cerradas que las anteriores, ya que el ingreso de nuevos
asociados sólo es posible si es que así lo han establecido previamente todas las
partes celebrantes del contrato.
Aunque en este punto, luego de haber analizado someramente los contratos asociativos,
parezca un tanto extraño concebir, como siendo tan diferentes estas figuras jurídicas -en
cuanto a su naturaleza y estructura- con las sociedades, en nuestra legislación se hallan
consagradas normativamente en un ley que regula todos los tipos societarios permitidos,
como es la actual Ley General de Sociedades (Ley N° 26887); pero lo cierto es que aquel
inclusión obedece a dos situaciones muy concretas: a la tradición legislativa, puesto que
también estaban contenidos en la anterior Ley de Sociedades (Ley de Sociedades Mercantiles,
Ley N° 16123 de 1966);7 y a Ja supuesta afinidad doctrinaria, que un grueso sector de la
doctrina de ese entonces -hoy superada- le reconocía a aquellos con las sociedades.8
Como señaláramos líneas atrás, la actual Ley General de Sociedades (Ley N° 26887)
regula a los contratos asociativos en su libro V, en artículos que van del 438° al 448°. Los
dos primeros artículos de la citada ley, tratan de las generalidades comunes a todos los
contratos asociativos, así el artículo 438° habla de los alcances y de la conceptualización
de los contratos asociativos, y el artículo 439° se refiere a las contribuciones de dinero,
bienes y/o servicios necesarios para la celebración y ejecución de dicho contrato;
seguidamente la Ley se ocupa del tratamiento de dos modalidades de este género
contractual que son: la Asociación en Participación (Art. 440° al 444°) y el Consorcio (Art.
445° al 448°).
9. Cabe señalar que dicho proyecto de ley reafirmaba el tratamiento legal del contrato de
“ Asociación en Participación», de «Consorcio», y adiciona una nueva figura contractual,
hasta aquella fecha casi desconocida y atípica, «El Contrato de Riesgo Compartido»;
posteriormente en un nuevo anteproyecto, de esa ley dicha propuesta de inserción fue
eliminado.
10. El texto de motivos de ese anteproyecto decía así: «La razón es una: lo que la legislación
mercantil busca, mas que aludir aun contrato, es contemplar una nueva forma de organización
empresarial, permanente o temporal. Por ello estimamos que, sin desnaturalizar y sin romper
la armonía de la Ley General de Sociedades, el libro V que la regula, debe ser trasladado a la
ley, permitiendo la contratación entre cualquier empresario, sin importar la forma organizativa
que adopte. Nótese por ende, podrán formar asociaciones o consorcios, todas las personas
natural es o jurídicas que quieran realizar o realicen actividad empresarial». (Anteproyecto de
la ley Marco del empresariado. Exposición de motivos. Diario Oficial El Peruano, jueves 06 de
mayo de 1999, pág. 7).
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 435
b) Que no den lugar a la formación de una nueva persona jurídica distinta a las personas
que contratan;
b) Ahora bien, los bienes aportados por el asociado en los contratos asociativos, y en
concordancia con artículos siguientes de esta ley, de ningún modo pasan a la
propiedad del otro asociado-, así cada contratante mantiene la propiedad de los
bienes que asigna al negocio (art. 446° LGS);
c) Por otra parte, siendo lo ordinario que las partes establezcan en el documento
contractual las contribuciones a que se obligan, puede ocurrir que no lo hayan
señalado y guarden silencio, en estos casos, deberán efectuar todas las
11. En concordancia también con lo dispuesto en el Código Civil, que en su artículo 1352, que
trata sobre el ámbito de aplicación de las normas generales de contratación y el artículo
1353, sobre la libertad de contratar.
12. ELIAS LAROZA, Enrique: «Derecho Societario Peruano». Ed. Normas Legales S.A., Trujillo.
Edición 2001, pág. 947.
436 El Contrato de Consorcio / Hugo Huayanay Chuquillanqui
• El contrato de Consorcio y
1. DEFINICIÓN
Esta otra modalidad de contrato asociativo que nuestra LGS regula, podríamos
definirla como aquella por el cual dos o más personas contratantes (naturales o
ju ríd ica s) denom inadas «consorciados,» convienen en p articip a r activa,
abiertamente, con independencia y conservando sus propias autonomías y
personerías jurídicas, con el propósito específico de obtener una ganancia
económica y a través de una relación jurídica temporal, en determinado negocio o
empresa, o de las actividades previstas en aquella. Su naturaleza es asociativa, y
por ende no constitutiva de persona jurídica;15 así se encuentra normado en nuestra
legislación como contrato nominado y típico.16
13. Ley General de Sociedades: Art. N° 448 Sistema de Participaciones: «El contrato deberá
establecer el régimen y los sistemas de participación en los resultados del consorcio; de no
hacerlo, se entenderá que es en partes iguales».
14. Ley General de Sociedades: Título: IV: Aportes y Adquisiciones Onerosas (Arts. 74 al 81).
15. Sobre el particular, el maestro Ullses Montoya al intentar una conceptualizacion señala que:«El
contrato de consorcio es uno de naturaleza asociativa y por definición no constitutivo de sociedad;
la intención de las partes en este contrato es participar en un determinado negocio, obtener un
beneficio en esa en conjunto en la cual participan, asumiendo cada parte las actividades propias
que se le encargan en el mismo contrato y responder por los compromisos asumidos
contractualmente. En esta modalidad contractual, las partes deben fijar los mecanismos de
coordinación para el desarrollo del objeto que lleva esta unión transitoria». (MONTOYA
MANFREDI, Ulises: «Derecho Comercial», Tomo II, Ed. Grijley, Lima, 1999, pág. 749).
16. Nuestra LGS, en su artículo 445, define a esta modalidad de contrato asociativo como: «£/
contrato por el cual dos o más personas se asocian para participar en forma activa y directa
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 437
motivo que Aníbal Sierralta ubica al consorcio dentro de las llamadas «alianzas
estratégicas» empresariales,20 pues usualmente constituye una forma más de
interactuar entre empresas.
2. ELEMENTOS
20. Señala Sierralta que esas «alianzas estratégicas» podemos entenderlas como: «una asociación
permanente de empresas cuyo objetivo principal es agrupar ofertas y demandas de productos
y/o servicios. Eventualmente, su objetivo puede ser el de aumentar la capacidad técnica o
financiera de sus miembros, sin que éstos pierdan su individualidad. Estas empresas pueden
unirse en forma horizontal, cuando negocian los mismos productos y servicios, o en forma
vertical, cuando ofrecen productos o servicios complementarios.» Y, más adelante citando a
Gaspar Caballero Sierra, considera que: «El consorcio implica un hacer colectivo, un conjunto
de esfuerzos, sustancialmente de muchas personas, hacia un logro de fines comunes. Es un
instrumento que el ordenamiento jurídico ofrece a una pluralidad de sujetos para el desarrollo
en común de cierta actividad. Lo que caracteriza al consorcio es la particular decisión de
muchos sujetos que acuerdan crearlo como un instrumento común para el mejor logro de sus
propias actividades». (SIERRALTA RÍOS, Aníbal: « J o in t V e n tu re In te rn a c io n a l» , pág. 90,
Ed. Depalma, Buenos Aires, 1996).
21. Ya que: «En buena medida el consorcio tiene un objeto determinado, sea por razón del negocio
o por razón de la actividad emprendida». Agrega el mencionado autor señala que: «Sobre la
participación en la actividad empresarial, habrá que adoptar un razonamiento extenso y uno
limitativo. En el lato, será posible que el consorcio participe en la formación y constitución de
una empresa cuyo objeto se encuentre relacionado con el objeto de cada uno de los partícipes
del consorcio, pudiendo llegar al caso de constituir sociedades merced al pacto o al contrato
asociativo de consorcio (...).» (MONTOYA MANFREDI, Ulises. Ob. Cit., pág. 752).
22. MESSINEO, Francesco: Ob., clt., Tomo IV, pág. 536-537.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 439
3. CARACTERES JURÍDICOS
Entre los principales caracteres jurídicos que presenta este contrato, podemos
señalar los siguientes:
23. Para Maricela Tranchini: «Son contratos plurilaterales aquellos en los cuales pueden intervenir
más de dos partes y presentan una estructura asociativa. La moderna doctrina destaca tres
caracteres esenciales: a) La existencia posible de pluralidad de partes, es decir de centros de
interés, lo que no se debe confundir con pluralidad de personas físicas o jurídicas, pues
puede darse la posibilidad de que varias personas constituyan una sola parte contractual; b)
Esa pluralidad es eventual, no necesaria, pues pueden intervenir en el contrato, ya sea desde
su formación o con posterioridad, varias partes, o no, por cuanto aunque no haya pluralidad,
puede subsistir entre dos; c) Presenta una estructura asociativa, pues la prestación de todas
las partes van dirigidas a un fin común asociativo. Esta característica lleva a considerarlos
como contratos de organización en oposición a los contratos de cambio. >>(TRANCHINI, Marcela:
«Clasificación de los contratos», en « C o n tra to s , T eo ría G e n e ral» , Rubén Stiglitz, Director,
T. li, Ediciones Depalma, Buenos Aires, 1997, pág. 47).
24. Como señala Ernesto Martorell: «Los contratos de colaboración empresarial, se entienden
por tales, aquellos en los cuales media una función de cooperación de una parte hacia la otra
o recíproca, para alcanzar el fin que determinará la concreción del contrato» (MARTORELL,
Ernesto: Ob Cit., pág. 277).
440 El Contrato de Consorcio / Hugo Huayanay Chuquillanqui
25. Una de las características centrales del consorcio es que la administración del contrato debe
estar establecida en éste, debiendo señalarse de manera clara las facultades y
responsabilidades propias de cada uno de los consorciados y las del conjunto -si las hubiere.
CONTRATOS fDoctrina l ogislacnr Junsprudenc a y Modelos) 441
e) Los bienes, que cada uno de los consorciados puedan aportar durante el
plazo de duración del negocio o empresa objeto del contrato, permanecen
en propiedad de estos mismos; esto es continúan siendo de propiedad de
sus titulares (de cada consorciado); pero si durante la ejecución de este
contrato, se hubieran adquirido bienes conjuntamente, aquellos se sujetan a
las reglas de bienes adquiridos en «copropiedad», tal como lo establece el
artículo 446° de la LGS.
26. Pero, como bien apunta Enrique Elias Laroza, tal obligación de los consorciados de responder
individualmente frente a terceros no abarca, en igual sentido, a los beneficios que a título de
individualidad pudiera obtener el consorciado de terceros: «Ello no significa, evidentemente
que los logros individuales que cada consorciado obtenga, en los negocios o empresas del
consorcio, le pertenezcan íntegramente. Salvo que existiese pacto expreso, esos beneficios
son para todos los consorciados, aun cuando la obligación asumida por el tercero corresponda,
como derecho individual, al consorciado que celebró ese convenio». (ELIAS LAROZA, Elias:
Ob. Cit., pág. 900).
27. Así lo señala la LGS en su Art. 447° (Relación con terceros y responsabilidades). Pero en la
Ley del CONSUCODE (Ley 26850), la solidaridad entre los consorciados si es un requisito
fundamental, ya que las partes se obligan entre sí, y ante la entidad contratante (el Estado) a
cumplir con el contrato, siendo solidariamente responsables ante un eventual incumplimiento
del contrato, salvo que pueda identificarse individualmente al causante de dicho incumplimiento
y el CONSUCODE lo estime así. Por ello, los consorciados deben responder de manera
solidaria por todas las consecuencias derivadas de su participación, individual o conjunta,
dentro del consorcio; tanto en los procesos de selección así como de su participación derivado
de este.
28. Sin embargo nada Impide, además, que las facultades de poder asumir compromisos con
terceros se precisen y se inscriban en la partida de la sociedad en el Registro, esto, a efecto
de que los terceros, que contraten con empresas consorciales tengan la seguridad jurídica
respecto a las facultades de quienes representa al consorcio, si es que fuere el caso.
29. La Ley del CONSUCODE (Ley N° 26850) dispone en su artículo 37°, que en los procesos de
selección podrán participar distintos postores agrupados en consorcios, para lo cual será
442 El Contrato de Consorcio / Hugo Huayanay Chuquillanqui
necesario que éstas acrediten la existencia de una promesa formal de consorcio, que deberá
perfeccionarse una vez que se otorgue la buena pro-, ahora bien, esa promesa podrá ser un
documento simple suscrito por los representantes legales del consorcio (si son personas
jurídicas); o directamente si son personas naturales. Una vez que se ha producido el
otorgamiento de la Contrata (buena pro) y quede consentido el consorcio, los concorciados
están obligados a formalizar el consorcio, para lo cual resulta suficiente que se formalice
mediante un documento privado, con firmas legalizadas por los concorciados o sus
representantes ante el notario (o juez en caso que no hubiera aquel), designado para efectos
del contrato, a un representante o apoderado de aquel frente al CONSUCODE.
30. MESSINEO, Francesco: Ob. cit. Tomo VI, (Relaciones Obligatorias Singulares), pág. 31.
31. MESSINEO, Francesco: Ob. cit. Tomo VI, (Relaciones Obligatorias Singulares), pág. 24 al
31.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 443
32. Elias Laroza dice al respecto que; «con frecuencia varias partes, o todas ellas, desean ser
socios activos y participar abiertamente en actividades previstas en el contrato o en la propia
gestión. Ello deviene insuperable con el esquema rígido de la asociación en participación,
cuya característica principal es la de un asociante activo» (ELÍAS LAROSA, Enrique: Ob. cit.,
pág. 898).
33. Pero la responsabilidad será solidaria entre los miembros del consorcio, solo si así se ha
pactado en el contrato o lo dispone la Ley.
El Contrato de Consorcio/Hugo Huayanay Chuquillanqul
34. En cuanto a la tipificación de esta nueva figura, en nuestra legislación (LGS), César Álvarez
Carranza, señala que debido al apresuramiento, algunos doctrinarios lo tendieron a confundir
con el Joint Venture: «Cuando fue publicada la Ley General de Sociedades conteniendo dentro
de sus normas el contrato de consorcio, muchos hombres de derecho fueron de la idea que se
había regulado el Contrato de Joint Venture, pero bajo la denominación de aquel, incluso
especialistas en la materia; v. gr. Hernando Montoya en una conferencia sobre Joint Venture
en el Colegio de Abogados de Lima, en marzo de 1997, sostuvo, comentando algunos artículos
del entonces Anteproyecto de la LGS., que efectivamente, el Contrato de Joint Venture dejaría
de ser atípico para convertirse en típico, al estar contemplado en dicha normatividad bajo el
nombre de consorcio. En el mismo sentido, Gutiérrez Camacho, quien sostiene que «por
primera vez (...) se regula de modo amplio el contrato de consorcio que, todo parece indicar,
alude al joint venture; y Ferrero, quien asimila al consorcio con el joint venture contractual».
(ÁLVAREZ CARRANZA; César: «Algunos criterios respecto a los contratos de colaboración
empresarial en el ordenamiento jurídico peruano», en Gaceta Jurídica, T. 76-B, pág. 39, marzo
del 2000). En lo que respecta a la legislación y doctrina extranjera, también aquí existe un
tanto de confusión respecto al consorcio, ya que a veces lo asemejan y otras lo distancian de
otras figuras asociativas, así, señala con acierto Sierralta que: «La confusión de estas figuras
en América Latina, e incluso en algunos países europeos, se deriva de la asimilación equivocada
de estas figuras en América Latina, e incluso en algunos países europeos, se deriva de la
asimilación equivocada que se ha hecho del Código Civil italiano, particularmente las
modificaciones introducidas en 1976en susarts. 2602° al 2611° que tratan « D e l c o n s o rz i p e r
il c o o rd in a m e n to D e lta p ro d u z io n e e d e g li s c a m b i» y que influyeron en el Derecho brasileño
(Ley 6404), y en el Derecho argentino (Ley 18.875 y su reglamento el Decreto 2930/70) así
como en otros regímenes latinoamericanos. En todos los casos se legisló se legisló esta
figura a fin de regular la práctica entre empresas para ingresar o dar servicio en licitaciones
públicas, pero hay países cuyas legislaciones lo desconocen por la falta de personalidad
jurídica, o desconocen los contratos asociativos o las sociedades especiales de naturaleza
estrictamente temporaria. Así, en Colombia no se regulan directamente, aun cuando el art. 3
del Decreto N° 222 (1983) especifica que, en determinados casos, como en el de la ejecución
conjunta de un contrato de donde se deriven beneficios para la entidad contratante, podrá
generarse el consorcio. En otras realidades, como el caso de España donde se creó la
«agrupación temporal de empresas» o la Sociedad de Empresas en el año 1963. Posteriormente
en Francia (1976) bajo la Norma N° 821/67, se creó el «agrupamiento de interés económico»
que es el consorcio personalizado, constituido por personas naturales o jurídicas, creando un
nuevo ente jurídico el cual tiene como fin colaboraren el desarrollo económico de sus miembros
y mejorar los resultados de sus actividades». (SIERRALTA Aníbal: Ob. Cit., pág. 93-94).
35. En el contrato de joint venture convergen las voluntades de dos o más partes que convienen
en aportar bienes, servicios, y derechos, con el propósito de desarrollar una actividad en
común y repartirse los beneficios en la forma convenida.
CONTRATOS (Chx trna Lcjislauo’' Jjr,<,pruder,cn y M '>h'ir‘,i 445
36. Gutiérrez Camacho, Walter: «£/ Contrato de Consorcio». En: Estudios Societarios & Ley
General de Sociedades. Lima (Perú), Gaceta Jurídica Editores, junio de 1999, p. 363. Montoya
Alberti, Hernando. «Los contratos de colaboración empresarial y la codificación del Derecho
Mercantil». En: Revista Peruana de Derecho de la Empresa. Lima (Perú), Editorial
Asesorandina, noviembre de 1997, N° 47, pág. 108.
37. Con fecha 6 de mayo de 1999 se público en el Diario Oficial «El Peruano» el Anteproyecto y
Exposición de Motivos de la Ley Marco del Empresariado que será la norma que muy
probablemente derogue el Código de Comercio de 1902; la cual contiene un Título Preliminar
y 93 Artículos distribuidos en cuatro libros: «De la Empresa»; «Del Empresario»; «De los
Contratos de Colaboración Empresarial»; y «De la Contabilidad».
38. En nuestro país se tiende a identificar doctrinariamente ambas figuras asociativas como
sinónimas, como lo mismo, siendo frecuentes los ejemplos al respecto, pero lo cierto es que
existen grandes diferencias al respecto que el tiempo se encargará de traslucir. Actualmente
en lo que respecta a minería, muchas reglamentaciones que se existen con nombre de Joint
Venture.
446 El Contrato de Consorcio / Hugo Huayanay Chuquillanqui
8. CONCLUSIONES:
39. Según Sierralta, en el contrato de Joint Venture: «El plazo es cierto y la intención de las
partes es la mutualidad o gestar el negocio; en tanto que en los consorcios existe permanencia»
(SIERRALTA, Aníbal: Ob. cit„ pág. 92).
40. Como sostiene Aníbal Sierralta, en el Joint Venture: «Los sujetos actúan en la gestión y
control de la empresa pudiendo comprometerse a los otros para que actúen en su
representación; circunstancia que no podría darse en el consorcio pues lo desvirtuaría.»
(SIERRALTA, Aníbal: Ob. cit., pág. 93).
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 447
el contrario, sociedades. Esto es que no forman una persona jurídica nueva y distinta
a las partes contratantes, con vida autónoma y propia; por lo tanto no deberían
estar más en una Ley que regula exclusivamente sociedades.
• Es cierto que se espera que pronto sea debatida y promulgada una «ley marco del
empresariado», que regule normas comunes a los empresarios, y en el caso
concreto, a los contratos asociativos, incorporando todo el articulado de todo del
Libro V de la LGS; sin embargo, este proyecto de Ley -que a la fecha ya ha tenido
tres proyectos- en la parte relativa de los contratos asociativos no ha sido muy
consensual su tratamiento, ya que si bien en el primer proyecto, tres eran los
contratos asociativos: asociación en participación, consorcio y riesgo compartido,
ya en el último proyecto se obvió el riesgo compartido, bajo la apresurada premisa
que el contrato de riesgo compartido es lo mismo que el consorcio, y por lo tanto no
debe regularse más en forma independiente, lo cual consideramos en un gravísimo
error.
• Ahora bien, ambas figuras, tanto el consorcio como el jo in t venture, son diferentes
y también tiene origen jurídico diferente; lo que sucede es que el jo in t venture es
una institución anglosajona, más amplia de lo que se cree, y tiene diversas variantes
como el jo in t venture contractual, el jo in t venture operativo, etc. El jo in t venture es
genérico, mientras aquél el consorcio es específico, aquí en el Perú sólo lo que ha
hecho la Ley General de Sociedades (LGS), es regular en términos generales, el
consorcio que podríamos identificarlo con el jo in t venture contractual, -de eminente
sentido económico- pero no en sí con lo que es y representa el jo in t venture en la
doctrina comparada; por lo tanto, hacen muy mal quienes irresponsablemente los
señalan como iguales.41
BIBLIOGRAFÍA
41. Señala Echaiz, que es un error, pues: «se está evitando darle el correspondiente tratamiento
jurídico a una figura contractual de origen anglosajón, de creciente arraigo en Latinoamérica
y con especial énfasis en nuestra patria». (ECHAIZ MORENO, Daniel: «Propósito del
Anteproyecto de la Ley Marco del Empresariado: Algunas Preguntas.... que esperan
respuesta»).
448 £7 Contrato de Consorcio / Hugo
FARIÑA, Juan: «Contratos Com erciales y Modernos», Ed. Astrea, Buenos Aires,
1991.
• Dec. Leg. N° 1017, vigente desde el 04 de julio de 2008: Ley de contrataciones con
el Estado. Art. 32.
ANTECEDENTES
partes iguales (33.3%) de los montos que resulten del ejercicio anual del negocio, conforme
a los estados financieros que se preparen .
No obstante esto, previo acuerdo de junta, será posible celebrar contratos en los
cuales se señale expresam ente que todos LOS CONSORCIADOS responderán
solidariamente ante terceros.
CONTABILIDAD Y TRIBUTACIÓN
CLÁUSULA DÉCIMO OCTAVA.- Para todo lo no previsto por las partes en el presente
contrato, LOS CONSORCIADOS se someten a lo establecido por las normas de la Ley
General de Sociedades, el Código Civil y demás del sistema jurídico que resulten aplicables.
TRIBUNAL ARBITRAL
J URISPRUDEN CIA
C o n s o r c io : R e s p o n s a b il id a d m a n c o m u n a d a e n t r e
EMPRESAS CONSORCIADAS
CAS. N° 928-2003-LIMA
El Peruano, 31/03/2004
Las facturas reputadas impagas corren giradas a nombre del consorcio que integran
las emplazadas; la actividad comercial realizada es una ordinaria en el marco de la ejecución
del contrato de obra que determinó la celebración del consorcio, por lo que no se requiere
de poder ni se halla dentro de las atribuciones del Comité de Gerencia del consorcio; y
que no existe pacto en el contrato de consorcio sobre el tipo de responsabilidad de los
asociados frente a terceros; debe concluirse que la responsabilidad es mancomunada
entre los consorciados, como de entenderse de la interpretación contrario sensu del
segundo párrafo del artículo cuatrocientos cuarenta y siete de la Ley General de
Sociedades.
C ontrato de c o n s o r c io : Y su r e l a c ió n c o n t e r c e r o s
CAS. N° 928-2003-LIMA
El Peruano, 31/03/2004
C o n s o r c io ante CONSUCODE: P r e s u n c ió n de
PARTICIPACIÓN CONJUNTA
RES. N° 758/2005.TC-SU
Tribunal de Contrataciones y Adquisiciones del Estado
10. En ese sentido, a criterio de este Colegiado la Promesa Formal presentada por el
CONSORCIO resulta válida al manifestar, de manera indubitable, la voluntad de las
partes consorciadas de prestar el servicio de manera conjunta. Sin perjuicio de ello,
resulta pertinente que en caso el CONSORCIO se viera beneficiada con el
otorgamiento de la Buena Pro, se le exija la formalización respectiva a través de la
presentación del Contrato de Consorcio con las firmas legalizadas ante Notario
Público, tal como lo establece el artículo 207° del Reglamento (...)”.
r
EL CONTRATO DE MANAGEMENT
(Gestión Gerencial)
Aproximaciones a su encuadramiento doctrinario y
legislativo en el Perú
Hugo Huayanay Chuquillanqui***1
I. DEFINICIÓN
Denominado también “gestión gerencial”, el m a n a g e m e n t es un contrato moderno
de colaboración empresarial y organización empresarial1, cuyo origen doctrinario es
O Abogado por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, con Tesis y calificación 18
(equivalente a c u m la ude) y recomendación oficial de publicación. Ex Director de los Talleres
de Investigación: “Fénix” y “José de la Riva Agüero” en esa Universidad. Director Ejecutivo de
“ESDEN” Escuela Superior de Derecho, Empresa y Negocios. Ha publicado artículos y ensayos
sobre de derecho, en especial de las áreas derecho de contratos, derecho constitucional y
procesal Constitucional.
1. Como señala Spota: “s o n c o n tra to s d e c o la b o ra c ió n a q u e llo s e n lo s c u a le s m e d ia una fu n ció n
d e c o la b o ra c ió n d e u n a p a rte h a cia la o tra o, re cíp ro c a m e n te , p a ra a lc a n z a r e l fin q u e ha
460 El Contrato de Management / Hugo Huayanay Chuquillanqui
Dicho así, podríamos definirlo jurídicamente como aquel acuerdo entre dos partes
-ordinariamente personas jurídicas- mediante el cual: una de ellas, que es una empresa
especializada en brindar servicios de gestión gerencial (manager), se obliga a prestar
dichos servicios a la otra (comitente), proveyéndola de cuerpos ejecutivos y técnicos
(altamente calificados) que lleven adelante los servicios de su administración gerencial;*2
pero siempre a cambio de una retribución económica, que es lo que representa los
honorarios de la primera (manager) por las funciones que realiza a favor del comitente.
De lo señalado en líneas anteriores, deducimos que este contrato implica la
prestación de un servicio de administración especializado, pudiendo aquel abarcar, bien
un proyecto de la empresa3 o la organización misma de aquella; porque mediante este
contrato lo que se hace es trasladar las funciones de conducción y gerenciamiento del
órgano societario.4 Pero cabe agregar al respecto que además de los servicios cubiertos
3. Es frecuente este tipo de contratos para administrar especializadamente áreas tan importantes
de una empresa o negocio, tales como: producción marketing estratégico y ventas, finanzas
reconversiones empresariales, etc.
4. Eduardo Benavldes, en un escuetísimo artículo señala sobre el particular que: “se co n fía la
d ire c c ió n o g e re n c ia m ie n to d e una e m p re sa o n e g o c io a un tercero, e x p e rto e n a d m in is tra c ió n
de negocios, d u ra n te cie rto tiem po a ca m b io de una rem uneración". (BENAVIDES T, Eduardo:
“C on tra ta ció n m od e rn a e in ve rsión extra n je ra en e l P e rú ”, en: Rev. Them is, N° 33, PUCP, p. 47).
CONTRATOS (Doctrina. Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 461
II. IMPORTANCIA
La creciente necesidad frente a la existencia de mercados especializados, de cuadros
gerenciales competitivos, han hecho posible la existencia y aparición de los “managers”,
esto es, empresas especializadas en brindar dichos servicios y cumplir con los requerimientos
de un mundo globalizado cada vez más competitivo5. Por ello es este contrato constituye un
importante instrumento de colaboración empresarial, en los que se exige gestión eficaz y
especializada en la gestión y gerenciamlento de sociedades comerciales.
Ahora bien, es menester señalar que en torno al management se ha venido
desarrollando diversas relaciones y variantes, que en su conjunto vienen constituyendo
una novedosa y especializada ciencia de la administración empresarial, sumamente
difundida y popularizada en los países de economías y comercios fuertes, cuyo correlato
se expresa nítidamente en la abundante bibliografía autorizada en aquellos, que
lamentablemente en nuestro país casi no existe.6
En cuanto a la utilidad y empleo de este contrato en la práctica empresarial, podemos
decir que, es frecuentemente utilizado por grandes empresas, en las uniones de empresas
y de grupos económicos;7 también es utilizado para la distribución y difusión de servicios
específicos y especializados en economías de gran escala, en los cuales es necesaria
una administración centralizada y altamente especializada en la gestión de los negocios8
5. Peter Druker en su libro: “La R e vo lu ció n d e lo s M a n a g e rs ” califica a la toma del poder económico
por parte de los directores y ejecutivos de una empresa, a los que se puede calificar como
empresarios de gestión, los poseedores de la gerencia estratégica, para diferenciarlos de los
empresarios de riesgo, ósea de los accionistas dueños del capital, pero muchas veces
incapaces de conducir o administrar eficientemente una empresa, por su dispersión, su
pasividad o sus intereses grupales.
6. Entre las principales revistas especializadas en m a n a g e m e n t e n e l m undo, podemos citar las
siguientes: “M a n a g e m e n t R e v ie w ” (American Management Associations, New York), “ The
M a n a g e m e n t” (The Journal of British Institute of Management, London), “M a n a g e m e n t S in c e "
(Journal of The Institute of Management Sciences- Providence-Rhode Island- USA), en el
medio arqentino “It M a n a g e r”, “G e s tió n ”, etc., y en el medio peruano M a n a g e m e n t y G e re n cia
de ESAN e IPAE.
7. Desde un punto de vista exclusivamente de control societario, Juan Fariña señala que: “E l
m a n a g e m e n t c o m ie n z a c o n la p rá c tic a s o cie ta ria , e n la s u n id a d e s d e e m p re s a s o g ru p o s
e c o n ó m ic o s , c o m o u n a te n d e n c ia h a c ia la m a y o r c o n c e n tra c ió n d e l g ru p o , m e d ia n te la
a d m in is tra c ió n c e n tra liz a d a d e to d o s lo s in te g ra n te s .” (FARIÑA, Juan: “C o n tra to s C o m e rc ia le s
m o d e rn o s ”, Ed. Astrea, Buenos Aires, 1997, p. 678).
9. Este sería un management de gerenciamiento personal, mientras que el otro tiene que ver
con el gerenciamiento de personas jurídicas por ende más complejo y especializado que el
primero.
10. Como señala Kleidermacher en este caso: “La sucursal es establecida a partir del apode de
capital que asume el tercero interesado para la construcción o remodelación, equipamiento
del edificio necesario de acuerdo a pautas que ya al inicio de la gestión del hotel que el
management le indica, y, finalmente el cuerpo ejecutivo regenta el hotel contra el pago de un
canon mensual. Con el cumplimiento de todas las estipulaciones del servicio de management,
la cadena de hotelería central utiliza la autorización de la insignia, la marca y los beneficios de
la popularidad de ese hotel”. (KLEIDERMACHER, Jaime: Op. cit. p. 124).
11. Así por lo general al management se asocian otros contratos como de aprovisionamiento de
bienes de capital, suministros de insumos, consultaría y de representación, etc.
CONTRATOS (Dnctnn.i legislan' n Jtm spudrnaa y Modelos) 463
14. Como señala Fernando García Cachafeiro “Los contratos atípicos no son sino una manifestación
de la autonomía de la voluntad que preside el derecho de los contratos y que se plasma en la
idea de que las partes puedan pactar todo lo que deseen siempre que no resulte contrario a
las leyes, la moral o el orden público”. (GARCÍA CACHAFEIRO, Fernando: “Obligaciones
Asumidas por el Manager en los Contratos de Gestión Empresarial, ” en: Revista Jurídica del
Perú, N° 60, Año LV, Enero-Febrero, del 2005, p. 60).
CONTRATOS f D o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 465
a. Partes intervinientes.- Como hemos señalado, dos son siempre las partes
¡ntervinientes en este contrato, pudiendo ser ambas -generalmente- o al menos
una de ellas, personas jurídicas18:
15. “Cuando se designe gerente a una persona jurídica ésta debe nombrar a una persona natural
que la represente la efecto, la que estará sujeta a las responsabilidades señaladas en este
Capítulo, sin perjuicio de las que correspondan a los directores y gerentes de la entidad
gerente y a ésta", (Artículo 193 de la LGS).
16. Ley General de Sociedades: Art. 185 (Designación); 186 (Duración del cargo); 187 (Remoción);
188 (Atribuciones del gerente); 189 (Impedimentos y acciones de responsabilidad); 190
(Responsabilidad); 191 (Responsabilidad solidaria con los directores); 192 (Contratos créditos,
prestamos o garantías que celebre); 194 (Nulidad de la absolución antelada de responsabilidad);
195 (Efectos del acuerdo de responsabilidad); 196 (Responsabilidad penal); 197 (Caducidad
de la responsabilidad).
17. Pero ello no impide, como señala Messeger, que: “una sociedad de management, nombre a una
persona de confianza, por medio de los accionistas, en el cargo de director’(MESSEGER, Diego:
“Manual de Contratos Comentado” Tomo II, Ed. Caballero Bustamante, Lima, 2004, p. 1112).
18. Definitivamente, como lo señaláramos, aunque lo usual es que ambas partes sean empresas,
esto es personas jurídicas debidamente constituidas, puede darse el caso que también sean
personas naturales.
466 El Contrato de Management / Hugo Huayanay ChuquiHanqui
3. Asistir, con voz pero sin voto, a las sesiones del directorio, salvo que éste
acuerde sesionar de manera reservada;
4. Asistir, con voz pero sin voto, a las sesiones de la junta general, salvo que
ésta decida en contrario;
19. Montalenti, citado por Fariña, señala que: “La sociedad de management, desenvuelve
únicamente una actividad de consultaría gerencial, o de gestión en sentido propio, en un
régimen de exclusividad a la sociedad” (FARIÑA, Juan, Op. cit., p. 711).
20. Como se ha señalado, nuestra Ley General de Sociedades, permite que el órgano de la
gerencia pueda ser ejercida por persona jurídica distinta a la de la sociedad; así, pues:
“Artículo 193°.- Designación de una persona jurídica
Cuando se designe gerente a una persona jurídica ésta debe nombrar a una persona
natural que la represente al efecto, la que estará sujeta a las responsabilidades
señaladas en este Capítulo, sin perjuicio de las que correspondan a los directores y
gerentes de la entidad gerente y a ésta".
21. Ley General de Sociedades (Ley N° 26887), artículo 1000
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 467
prestados a la empresa comitente, suelen ser deducidos de los porcentajes del presupuesto
anual de esta, y sobre la base del producto de explotación del mismo; ahora bien, como
señala Giacometti: “De la facturación de servicios, sobre la cual habrá de diferenciar dos
aspectos: la facturación bruta mensual o la facturación neta recaudada y convertida en
ingreso operacional, que para cada una de las cuales el porcentaje de retribución variará,
en dependencia de la mayor o menor carga de riesgo para cada una de las partes’*2.
Otro punto también importante a tener en cuenta en los contratos de management,
es el referido al modo en que el manager organiza el trabajo de gerenciamiento sobre la
empresa comitente; para ello será sumamente Importante contemplar los siguientes
aspectos en el documento contractual:
• Establecer un plan metodológico y de interacción directa con los entes y los órganos
de gobierno de la empresa comitente; así como la especificación de los medios
legales, operacionales, de recursos humanos y financieros de los que podrá disponer
el manager.
acuerdo a lo prescrito por la Ley General de Sociedades (LGS), en su artículo 193°; pero
debe tenerse en claro que la delegación de la gerencia a manos del manager, debe ser
adoptada por una mayoría calificada de socios en junta general, y la “sociedad” no pierde
en ningún momento sus facultades de control sobre aquella, ya que sigue manteniendo el
control y fiscalización sobre la “gerencia”,23 y en este caso sobre el manager al cual se le
ha encargado en virtud del contrato de management.
A grosso modo, haciendo una apretada síntesis podemos señalar que las funciones
que se delegan en virtud del contrato de management, son las siguientes:
la empresa comitente. También, es importante para una mayor seguridad jurídica, que el
contrato sea inscrito en el registro respectivo,27 para resguardo de su oponibilidad.
Entre las principales ventajas que ofrece este contrato en la gestión empresarial
moderna, en favor de la empresa comitente, podemos señalar que básicamente son dos,
siendo las siguientes: ’
A menos que el contrato de manager haya implicado realizar una reconversión empresarial
que afecte al personal laboral de aquella empresa.
472 El Contrato de Management / Hugo Huayanay Chuquillanqui
BIBLIOGRAFÍA
LIBROS:
• FARIÑA, Juan: “Contratos Comerciales Modernos”, Ed. Astrea, Buenos Aires, 1997.
37. Cabe señalar al respecto que, para cuidarse de los incumplimientos totales, parciales o
defectuosos de las prestaciones, es necesario incluir cláusulas resolutorias del contrato.
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 473
• MARTORELL, Ernesto: “ Tratado de Contratos de Empresa”, Tomo III, Cap. Vil: “El
contrato de Management, Ed, Depalma, Buenos Aires, 1997.
ARTÍCULOS:
ANTECEDENTES:
PRIMERA.- EL COMITENTE es una persona jurídica de derecho privado constituida
bajo el régimen de la sociedad .......... cuyo objeto social principal es dedicarse a la
elaboración, envasado y distribución de los piscos peruanos “..............”. En ese sentido,
LA EMPRESAcuenta con una red diversificada de locales de producción y comercialización
ubicados del siguiente modo:
« ....................... » en la ciudad d e ......................, ubicado e n ........................;
en la ciudad de , ubicado en :
en la ciudad de , ubicado en .
en la ciudad de , ubicado en . y
SEGUNDA.- EL COMITENTE, por acuerdo del directorio de fe ch a ........ d e .............
del 200.........conforme al acta que se adjunta, ha acordado encomendar la función de
gerenciamiento de sus empresas a una entidad privada de reconocida trayectoria gerencial.
TERCERA.- EL MANAGER es una persona jurídica de derecho privado constituida
bajo el régimen de la sociedad......... , cuyas actividades comprende la gestión empresarial,
esto es la prestación de servicios de administración, gerencia, consultoría y asesoramiento
en general a otras empresas.
DURACIÓN:
QUINTA.- El presente contrato tendrá una duración de ..............., meses, contados
a partir de la firma del presente documento hasta e l ..... d e .............. , del 20 ....... y podrá
ser renovado automáticamente, salvo que alguna de las partes contratantes desee no
continuar en tales funciones o desee introducir modificaciones al contrato.
Para ello, se requiere una comunicación mediante conducto notarial con una
anticipación de dos meses al vencimiento del plazo del contrato.
COMPETENCIA ARBITRAL:
DÉCIMO OCTAVA.- En caso que pudieran suscitarse controversias respecto a la
ejecución del presente contrato, estas serán sometidas a arbitraje, mediante un Tribunal
Arbitral Integrado por tres expertos en la materia; dos de ellos elegidos por cada una de
las partes y el tercero designado de común acuerdo por estos dos árbitros.
Las partes de común acuerdo establecen que si en el plazo de (.... ) días de producida
la controversia, no se acordara el nombramiento del presidente del Tribunal Arbitral,
entonces aquel deberá ser designado por el Centro de Arbitraje Nacional y Extranjero de
la Cámara de Comercio d e ........ cuyas reglas serán aplicables al arbitraje. Así mismo,
establecen que el laudo del Tribunal Arbitral es definitivo e inapelable, así como de
obligatorio cumplimiento y ejecución para las partes.
En señal de conformidad a las cláusulas contenidas en el presente documento, las
partes suscriben este documento en dos ejemplares en la ciudad d e ...............a lo s ...........
días del mes d e ..... del 20........
EL COMITENTE EL MANAGER
C O N T R A T O S (D o c trin a . L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 477
ANTECEDENTES:
PRIMERA.- Que SERVIMUSICA, es una empresa de representación musical, que se
dedica a facilitar y organizar Giras Conciertos, Festivales y Tours a formaciones musicales.
SEGUNDA.- Que EL COMITENTE; desea la incorporación a esta Agencia que
maneja EL MANAGER, durante un año.
TERCERA.- Que ambas partes se reconocen plena capacidad jurídica para celebrar
el presente contrato y habiendo llegado a un acuerdo satisfactorio acuerdan regir sus
reciprocas relaciones, obligaciones y derechos, sujetándolas libre y voluntariamente de
conformidad a lo dispuesto en los siguientes:
RETRIBUCIONES ECONÓMICAS
SÉPTIMA.- EL MANAGER percibirá de EL COMITENTE; la parte proporcional del
cache, dividida entre los miembros de EL COMITENTE; por cada Actuación contratada
por EL MANAGER que será en efectivo, el día de dicha actuación.
478 El Contrato de Management / Hugo Huayanay Chuquillanqui
1.- Confección y envíos a nuestro mailina list y correo terrestre de Dossier elaborado
(doc. ppf, pdf, jpg, html. mp3). (Salas de Conciertos, Festivales, Ayuntamientos,
Responsables de Cultura, patrocinadores, Medios de Comunicación, Compañías
Discográficas, Distribuidoras.).
5.- Diseñadores.
8.- Representación legal exclusiva en cualquier contratación que realicen los clientes
de EL MANAGER en nombre de EL COMITENTE.
9.- Los mejores técnicos de Sonido, Luces, Monitores, Pipas, Conductores. Pagadero
si fueran requeridos por EL COMITENTE.
COMPETENCIA ARBITRAL:
DÉCIMO SEGUNDA.- En caso que pudieran suscitarse controversias respecto a la
ejecución del presente contrato, estas serán sometidas a arbitraje, mediante un Tribunal
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 479
Arbitral integrado por tres expertos en la materia; dos de ellos elegidos por cada una de
las partes y el tercero designado de común acuerdo por estos dos árbitros.
Las partes de común acuerdo establecen que si en el plazo de (.... ) días de producida
la controversia, no se acordara el nombramiento del presidente del Tribunal Arbitral,
entonces aquel deberá ser designado por el Centro de Arbitraje Nacional y Extranjero de
la Cámara de Comercio d e ........ cuyas reglas serán aplicables al arbitraje. Así mismo,
establecen que el laudo del Tribunal Arbitral es definitivo e inapelable, así como de
obligatorio cumplimiento y ejecución para las partes.
CONFIDENCIALIDAD Y PRIVACIDAD:
DÉCIMA TERCERA
EL COMITENTE EL MANAGER
EL ARTISTA LA AGENCIA
r
CONTRATO DE JOINT VENTURE
Sum ario: I. Antecedentes históricos del joint venture. II. Definiciones. III. Clasificación:
a) De acuerdo a la forma; b) Atendiendo a la función o finalidad.; c) Según
la nacionalidad de las partes; d) Desde el punto de vista del tipo de actividad
económica a efectuar; e) Desde el punto de vista del rol de los socios. IV.
Caracteres: a) Contrato de colaboración empresarial; b) No es constitutivo
de un sujeto de derecho; c) De variada duración; d) Especificidad; e) Variedad
en los aportes; f) Fin lucrativo; g) Constituye una comunidad de derechos o
de intereses; h) Derecho de control de todos los miembros integrantes; i)
Naturaleza fiduciaria; j) Contrato atípico; k) Affectio cooperationis; I) Contrato
consensual; m) Contrato plurilateral; n) Oneroso: ñ) Conmutativo. V.
Elementos: a) Sujetos del contrato; b) Objeto del contrato; c) Finalidad. VI.
Naturaleza jurídica del joint venture. Vil. Celebración del contrato: a) El
acuerdo base; b) Contratos satélites. VIII. Participación, representación y
administración de los joint venture. IX. Representación. X. Modificación y
extinción de la relación contractual. XI. El Joint Venture en la legislación
nacional. XII. Conclusiones. Bibliografía.
A) ORÍGENES
Torres Vásquez señala que el origen está vinculado con los legendarios
“Merchant ventures, o gentlement adventures” del comercio de ultramar del Reino
Unido, apareciendo en la denominación social de algunas compañías americanas,
como la ‘The treasurer and Company o Adventures and Planters of the City of London,
for the Colony o Virginia” constituida en 1603, posteriormente existió en Escocia a
principios del siglo XIX. Continúa el maestro sanmarquino diciendo que, del Derecho
anglosajón pasó al Derecho francés con la denominación de coentreprises y
también al derecho belga. En España la Ley 18 del 26.05.1982 que modifica a la ley
196 del 28.12.1963 sobre asociaciones y uniones de empresas, en el Art. 7o lo
denomina Unión Temporal de Empresas, de España pasó a la Argentina que lo
regula con el nombre de Unión Transitoria de Empresas (Ley 19.550). En el
Brasil, el art. 278 de la Ley de sociedades por acciones No. 6406 de 1976 se refiere
a los Consorcios sin personalidad para la realización de determinada actividad
empresarial. En la actualidad, el joint venture se ha convertido en una de las
modalidades de unión de empresas comúnmente bajo formas no societarias que
ha irrumpido en las actividades industriales y comerciales de todo el mundo,
venciendo toda barrera ideológica3.
B) LA PARTNERSHIP
1. Definición de la Partnership
II. DEFINICIONES
A) ASPECTOS GENERALES
B) DIVERSAS DEFINICIONES
El Joint Venture por ser un contrato generado por el derecho inglés basado
en la experiencia de una colectividad en el ejercicio de la actividad económica, es
difícil definir desde la óptica de los juristas vinculados al derecho romano germano,
es por ello que las diversas definiciones del contrato de JOINT VENTURE no son
uniformes. Sin embargo, a manera de ilustración pasamos a mencionar algunas de
éstas:
Caballero Sierra dice que el joint venture es una asociación de dos o más
personas para realizar una empresa aislada que implica un determinado riesgo
(venture), para lo cual persiguen unidas un beneficio, pero sin crear sociedad o
corporación alguna, y para ello se combinan propiedades, efectos, trabajo,
conocimiento, etc. En el joint venture cada miembro actúa como dueño y como
agente de los demás miembros, y por ende la promesa de uno equivale a la promesa
de todos. Lo ejecutado por un miembro se entiende ejecutado por todos y se presume
autorizado para realizar las actividades propias del joint venture. Todos los miembros
asumen las pérdidas en la proporción convenida, y sus obligaciones se encuentran
limitadas a la duración del propio joint venture. Entre los miembros se establece
una relación de mutua confianza y buena fe, y mientras la organización se encuentre
vigente no podrán realizar por su propia cuenta aquellas actividades y actos propios
del joint venture, pues si así procediesen deberán reintegrar al fondo lo que hubieren
obtenido de manera particular26.
III. CLASIFICACIÓN
A) DE ACUERDO A LA FORMA
27. SIERRALTA R., Aníbal y OLAVO B., Luiz: Ob.cit., pág. 190.
28. SIERRALTA R„ Aníbal y OLAVO B„ Luiz: Ob.cit., pág. 189.
29. COLAIACOVO, Juan Luis y otros: Ob. cit., pág. 79.
490 Contrato de Joint Ventura / César E Ramos Padilla ^
35. LEON BARANDIARAN HART, José: Ob. cit. Págs. 40, 41, 42, 43 y 44.
36. COLAIACOVO, Juan Luis y otros: Ob. cit. pág. 165
492 Contrato de Joint Venture / César JE. Ramos Padilla
IV. CARACTERES
37. COLAIACOVO, Juan Luis y otros: Ob. cit., págs. 166, 167 y 168.
38. TORRES VASQUEZ, Aníbal: Ob. cit., pág. 257.
39. LEON BARANDIARAN HART, José: Ob. cit., págs. 36 y 37.
40. CONADE: Ob. cit., pág. 32.
C O N T R A T O S (D octrina. Legislación, Jurisprudencia y M odelos) 493
Se debe tener en cuenta -como lo señala Le Pera- cuando a fines del siglo
pasado y comienzos del presente se dicta la Partnership Act inglesa y se publica
la Uniform Partnership Act estadounidense, lo que se hace es recoger y ordenar
las reglas elaboradas por este derecho jurisprudencial. La Corporation, en cambio,
no es Common law sino derecho de creación legislativa. Las reglas partnership,
cubren cualquier caso como en que dos o más personas realizan un negocio o
actividad común, es decir, aportando para él sus esfuerzos sobre la base de una
repartición de los resultados que de allí se obtengan. La Corporation (Company
Limited by Shares y Limited Liability Company en la Companies Act inglesa) en
cambio, es la forma y las reglas a que el legislador resolvió sujetar el derecho que
se acuerda a los partícipes para limitar su responsabilidad hacia terceros y, más
C) DE VARIADA DURACIÓN
D) ESPECIFICIDAD
F) FIN LUCRATIVO
Por este contrato las partes persiguen obtener un lucro o beneficio económico,
con participación en las pérdidas. Los contratantes asumen las probables pérdidas,
pero nada impide que se pacte que todos participan de las utilidades, pero que
solamente alguno o algunos asumen las pérdidas52. Según Le Pera, existe una
línea de decisiones judiciales que consideran que no es esencial para la existencia
de un jo in t venture q u e las partes acuerden dividirse las pérdidas; ellas pueden
incluso pactar que todos participen en las utilidades pero que sólo algunos soporten
las pérdidas53.
Las partes han unido sus bienes, intereses, habilidades y riesgos de tal manera
que sus respectivas contribuciones se han unificado para los fines de una aventura
en particular, y los entrecruzados bienes e interés han sido aportados en la confianza
de que cada uno de ellos actuará para beneficio común, y como motivación para
que lo hagan54. Pero ¿ c ó m o p o d ría m o s califica r a la relación existen te en tre las
p a rte s y lo ap o rtad o a la J o in t Venture?, a esta interrogante Le Pera magistralmente
explica, que a más de tener una relación con los bienes comunes, los p a rtn e rs
tienen un “interés” en la p a rtn ersh ip . Este “interés” es descrito por la U niform
P artnership A c t como el derecho del p a rtn e r a su parte en las utilidades y al “su rp lud ’.
La expresión de “s u rp lud ’ puede ser traducida como “patrimonio neto”, aquello en
que los bienes o activos excedan obligaciones hacia terceros; lo que quedaría
disponible en caso de liquidación, o sea, el saldo neto que queda al p a rtn e r luego
de que todas las deudas de la p a rtn e rs h ip han sido pagadas y ajustadas las
participaciones entre él y los otros partners55. Podría querer recurrirse a las reglas
del condominio, pero la noción de condominio romano es limitada por la amplitud
de la noción de sociedad; Le Pera citando a Vélez Sársfield dice que: “No es
condominio la comunión de bienes que no sean cosas”.
I) NATURALEZA FIDUCIARIA
Cardozo, citado por Le Pera, expresa que los jo in t adven tu rers, al igual que
los partn ers, se deben uno al otro, mientras la empresa continúa, el deber de la
más delicada lealtad. Muchas formas de conducta permisibles en el mundo cotidiano
para aquellos que actúan sin ninguna especial vinculación entre sí están prohibidas
para aquellos atados por lazos fiduciarios. No solamente honestidad, sino también
el puntillo del honor más delicado es aquí una pauta de conducta. Si bien es los
jo in t ve ntu re s se deben entre sí la más estricta lealtad (“relación fiduciaria”) en
cuanto al negocio para el que se han vinculado, conservan libertad para continuar
compitiendo en los otros proyectos para los que no se han unido y de hecho
frecuentemente lo hacen59.
J) CONTRATO ATÍPICO
K) AFFECTIO COOPERATIONIS
León Barandiarán Hart señala que más que una integración empresarial debe
ser visto como un acto de colaboración, por lo que podría hablarse de una “affectio
cooperationis”62.
L) CONTRATO CONSENSUAL
M) CONTRATO PLURILATERAL
Los contratos plurilaterales existen cuando son más de dos partes obligadas,
existiendo diferencias, además de las conocidas con los unilaterales y bilaterales,
la derivada de la causa objetiva: El contrato bilateral o de prestaciones recíprocas
es un medio de conciliar intereses particulares y el contrato plurilateral, además de
conciliar de manera mediata estos intereses, es un medio para la realización del fin
común y la utilidad general; en el presente caso el contrato de Joint venture es un
contrato de colaboración66.
N) ONEROSO
Es un contrato oneroso por cuanto cada co-venture debe aportar algo que
tenga o al cual se asigne un valor económico y, de otro lado, todos los miembros
integrantes participan de los beneficios y, en su caso de las pérdidas67.
M) CONMUTATIVO
V. ELEMENTOS
La obligación como objeto del contrato, tiene por contenido tanto a prestaciones
de dar como de hacer a que se comprometen los contratantes para lograr su
cumplimiento y por este medio alcanzar el fin propuesto consistente en la obtención de
un lucro o beneficio. En el joint venture las prestaciones consisten en un negocio
específico, predeterminado; no desarrolla ilimitadamente un objeto en el tiempo, no
prevé una serie de negocios genéricos, sino que su objeto está previsto en forma tal
que individualiza un solo negocio, aunque es preferible decir un negocio específico, por
más complejo o extenso en el tiempo que éste resulte. De la cláusula referida al objeto,
debe aparecer que se trata de un emprendimiento muy concreto, específico e
identificable70.
C) FINALIDAD
Los jo in t ve ntu re s aún son c o nfu nd ido s con las “p a rtn e rsh ip s"
estadounidenses, con las sociedades de hecho, con la asociación en participación,
o de lo contrario se trata de calzarlos en una estructura societaria, el análisis de la
naturaleza jurídica de esta figura debe centrarse, en primer lugar, en dos alternativas:
considerar al joint venture como una figura societaria o considerarla como una mera
figura contractual, pero de lo desarrollado en los capítulos anteriores podemos afirmar
que el joint venture tiene una naturaleza jurídica contractual cuyas relaciones jurídicas
son complejas y sui generis, tal y como a continuación detallamos:
a) El origen jurisprudencial del joint venture como relación contractual entre las
partes, en las resoluciones de los Tribunales de los EE.UU. e Inglaterra se
atiene a los derechos y obligaciones que las partes habían pactado entre sí.
proporción que ambos acuerden en las utilidades o en las pérdidas de una empresa
o de uno o varios negocios del asociante (Art. 398 de la Ley General de Sociedades).
A) EL ACUERDO BASE
80. SIERRALTA R. Aníbal y OLAVO B., Luiz: Ob. cit., pág. 217.
81. SIERRALTA R., Aníbal y OLAVO B., Luiz: Ob. cit., pág. 218.
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 503
82. SIERRALTA RIOS, Aníbal y OLAVO B., Luiz: Ob. cit., pág. 219.
83. TORRES VASQUEZ, Aníbal: Ob. cit., pág. 263
84. SIERRALTA RIOS, Aníbal y OLAVO B., Luiz. Pág. 220.
85. TORRES VASQUEZ, Aníbal: Ob. cit., págs. 264 y 265.
86. SIERRRALTA R., Aníbal y OLAVO B., Luiz: Ob. cit., págs. 220 y 221.
504 Contrato de Joint Venture / César E. Ramos Padilla
87. SIERRALTA R, Aníbal y OLAVO B., Luiz: Ob. cit., págs. 224, 225 y 226.
88. TORRES VASQUEZ, Aníbal: Ob. cit., págs. 264, 265 y 266.
C O N T R A T O S (O o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 505
9. Cláusula de Hardship
89. SIERRALTA R„ Aníbal y OLAVO B„ Luiz: Ob. cit., págs. 221,222 y 223.
90. SIERRALTA RIOS, Aníbal y OLAVO B., Luiz: Ob. cit., pág. 227.
91. SIERRALTA RIOS, Aníbal y OLAVO B., Luiz: Ob. cit., pág. 228.
506 Contrato de Joint Venture / César E. Ramos Padilla
92. SIERRALTA RIOS, Aníbal y OLAVO BAPTISTA, Luiz: Ob. cit., pág. 230.
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 507
B) CONTRATOS SATELITES
93. SIERRALTA RIOS, Aníbal y OLAVO BAPTISTA, Luiz: Ob. cit., págs. 234, 235, 236.
94. TORRRES VASQUEZ, Aníbal: Ob. cit., págs. 263 y 264
508 Contrato de Joint Venture / César E. Ramos Padilla
a) PARTICIPACIÓN Y CONTROL
95. SIERRALTA RIOS, Aníbal y OLAVO BAPTISTA, Luiz: Ob. cit., págs. 231 y 232.
96. CONADE: Ob. cit., pág. 28.
C O N T R A T O S ( D o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 509
Colaiácovo señala que Peter Killing, en su obra Strategies for Joint Venture
Success, cree que cuando un socio aporta solamente atributos (nacionalidad,
provisión de materias primas o componentes y clientes para la producción del joint
venture) o activos (capital, marcas, patentes), entonces ese socio sólo debe jugar
un rol pasivo en el emprendimiento conjunto, ya que su contribución de mannagement
no es significativa, dejando que otro socio domine el emprendimiento. El punto
esencial de análisis acerca de esos activos y atributos, es que a pesar de que
pueden ser necesarios para el éxito de la joint venture, no requieren que el proveedor
de los mismos se involucre gerencialmente. De manera que, entonces, la cuestión
critica para el diseño de una joint venture, no es tanto el aspecto de quien provee
los atributos, sino cual de las partes tiene la capacidad y las habilidades de
mannagement para hacer un negocio exitoso.99
b) LA REPRESENTACIÓN
97. SIERRALTA RIOS, Aníbal y OLAVO BAPTISTA, Luiz: Ob. cit., pág. 249.
98. SIERRALTA RIOS, Aníbal y OLAVO BAPTISTA, Luiz: Ob. cit., pág. 245 y 246.
99. COLAIACOVO, Juan Luis y otros: Ob. cit., pág. 168 y 169
100. TORRES VASQUEZ, Aníbal: Ob. cit., pág. 267.
510 Contrato de Joint Venture / César £. Ramos Padilla
En forma genérica, podemos afirmar que cada uno de los co-ventures tienen
facultad para obligar a los otros y sujetarlos a responsabilidad frente a terceros en
cuestiones que estén estrictamente dentro del ámbito del objeto de la joint venture,
lo que significa, que un miembro de la joint venture puede obligar a sus asociados,
sean ocultos o no, por los contratos que sean razonablemente necesarios para
llevar adelante el negocio101. Los actos que celebre en forma Individual frente a
terceros obligan a los demás co-ventures. Dichos actos deben encontrarse
encaminados única y exclusivamente a explotar el fin del negocio; si el co-venture
se extralimitó en sus facultades, obligará solamente a los demás co-ventures, si el
tercero con quien celebró el negocio jurídico desconocía la extralimitación de
facultades102.
La administración del Joint Venture, así como la persona que será la encargada
de ella, debe ser regulado contractualmente; el grado de experiencia en el negocio
propuesto así como la capacidad empresarial constituyen factores decisivos para
que una persona natural o jurídica, según la situación que se presente, pueda ser
considerada por los demás coventures como la encargada de la dirección,
representación y control de la empresa107. Los problemas se presentan por factores
culturales y de conducta que influencian la dirección del Joint Venture, como la
existencia de diferencias en las percepciones gerenciales y consecuentemente
en los difentes estilos de gestión (tanto el estilo de trabajo como la actitud respecto
al riesgo), lo cual hace más difícil la toma de decisiones y vuelve frágil el Joint
Venture108.
IX. RESPONSABILIDAD
Los tribunales de los Estados Unidos, tal como ha sido elaborado por el derecho y
la equidad, consideran que un acreedor con sentencia judicial contra un partner puede
embargar y vender el interés de su deudor en los bienes de la partnership, pero no puede
vender ni afectar de ninguna manera los bienes individuales de ésta 113.
En la Partnership Act de 1890 expresamente se dispone que los bienes de la
partnership no son atacables por acciones de los acreedores de los partners, los que
tienen un derecho sobre el “interés” de su deudor en la partnership pero no un derecho
sobre “los bienes de la partnership". El derecho de estos acreedores se limita entonces a
la posibilidad de cobrarse con la parte de las utilidades o con cualquiera otra suma que
corresponda al partner deudor en su relación con la partnership"4.
La separación patrimonial que así se dispone funciona, por supuesto, en un solo
sentido, porque los acreedores de la partnership sí tienen acción contra los bienes
“personales” de los partners. La responsabilidad de éstos es, en consecuencia, ilimitada
y ello tanto en materia contractual como extracontractual (“torts”)115.
La responsabilidad de cada uno de los miembros integrantes del joint venture por
los actos que deban desarrollar y ejecutar y por las obligaciones contraídas por la entidad
frente a terceros es mancomunada, salvo que se pacte expresamente la solidaridad, o lo
señale la Ley. Pero, imponer o presumir legalmente la responsabilidad solidaria de los
miembros integrantes del joint venture, como sucede en algunas ligislaciones, es crear
dificultades para su constitución116.
No se presume la “solidaridad” de los miembros del joint venture por los actos y
operaciones que deban desarrollar o ejecutar, ni por las obligaciones contraídas frente a
terceros. El que la responsabilidad no sea solidaria a menos que expresamente se la
convenga es conforme a la regla común del Código Civil en materia de obligaciones con
pluralidad de sujetos.
Como obligación simplemente mancomunada se dividirá por partes iguales, salvo
que las partes al constituir la obligación hayan convenido que la división no se haga por
partes iguales sino “a prorrata del interés que cada uno de ellos pueda tener en la comunidad
a la cual se refiere el crédito o la deuda”.
Queda por saber -dice Le Pera- si los acreedores “personales” de uno de los
miembros tienen acción sobre los bienes del fondo. La Ley nada dice y por lo tanto,
debería razonarse que no siendo la unión un “sujeto de derecho”, no existiría razón legal
para negar esta acción. Pero como esta acción no parece tolerable debemos concluir que
esa acción queda excluida (y la separación patrimonial del fondo establecida) por aplicación
de las reglas de la Ley General de Sociedades117; pues antes hemos manifestado que el
Joint Venture es un caso específico de “Comunidad de derechos”, siendo la única regulación
genérica de la “comunidad de derechos”, es la de la sociedad; por lo que se considera
que, en caso de vacío en la regulación contractual de las relaciones internas de los co-
venture, se utiliza supletoriamente las normas que regulan las sociedades.
por la imposibilidad de lograrla, por resolución o nulidad del contrato cuando haya justa
causa o por mandato de ley. Se debe convenir contractualmente en qué casos se producirá
la resolución del contrato respecto de un socio singular o los motivos por los cuales puede
ser excluido121.
El DEC. LEG.N0 708 del 14.11.91, denomina al Joint Venture como “Contratos de
Riesgo Compartido”, señalando que este contrato es de carácter asociativo, destinado a
realizar un negocio común, por plazo determinado o indeterminado, en el que las partes
aportan bienes o recursos o servicios que se complementan, participando en la utilidad o
el ingreso bruto, la producción u otras formas que convengan, pudiendo ejercer cualquiera
de las partes o todas ellas la gestión del negocio compartido.
CONCLUSIONES
BIBLIOGRAFÍA
Señor Notario:
Sírvase extender en su Registro de escrituras públicas una de Joint Venture que
celebran de una parte la empresa ........ , con R.U.C.......... , debidamente representada en
este acto por su Gerente General el Sr..............con DNI N ° .............. , con domicilio
en....................... . a quien en lo sucesivo se denominará EL ASOCIANTE; y de otra parte
la empresa...................... con R.U.C..............debidamente representada por su Gerente
General el Sr................ , con DNI N °................. domicilio................. a quien en los sucesivo
se denominará EL ASOCIADO; bajo los términos y condiciones siguientes:
ANTECEDENTES
PRIMERO.- EL ASOCIANTE es una persona jurídica de Derecho Privado, constituida
bajo el régimen legal de la sociedad anónima, inscrita en la ficha N°...........del Registro
Mercantil de............cuyo objeto social es dedicarse a.............................................................
EL ASOCIADO es una persona jurídica de Derecho Privado, constituida bajo el
régimen legal de la sociedad comercial de responsabilidad limitada, inscrita en la ficha
N°..........del Registro Mercantil de........ cuyo objeto social es dedicarse a..............
DENOMINACIÓN
CUARTO.- De acuerdo a las prescripciones dispuestas en el inc. 4) del Art. 160 del
D.S. N° 03-94-EM, la asociación se denominará...................................
Queda acordado del mismo modo que en caso de surgir tal supuesto, EL
ASOCIANTE estará facultado para suspender los trabajos que viniere realizando en el
yacimiento materia de este contrato, así como también, a suspender el costo que irrogue
la explotación de dichos yacimientos.
NORMAS COMPLEMENTARIAS
DÉCIMO SEGUNDO.- Las partes acuerdan, que de conformidad con lo establecido
en los artículos 163 y 164 del D.S. N° 03-94-EM, la presente asociación y los intervinientes
en este contrato, podrán acogerse a los beneficios dispuestos en el título noveno del D.S.
520 Contrato de Joínt Vcnture / Cesar E. Ramos Padilla
UTILIDADES
DÉCIMO CUARTO.- En lo que respecta a la participación de utilidades, los
contratantes de común acuerdo, conviene en distribuirse, sin excepción, las utilidades en
un ....% (...... ) para EL ASOCIADO y u n ......% (............... ) para el asociante, asumiendo
también en igual proporción y de la misma forma, las pérdidas que eventualmente se
pudiera tener.
DOMICILIO LEGAL
DÉCIMO SEXTO.- Las partes contratantes señalan como domicilio legal el que
aparece en la introducción del presente documento.
DE LA ELEVACIÓN A ESCRITURA
DÉCIMO SEPTIMO.- Todos los gastos e impuestos que genere el otorgamiento de
escritura pública, así como los gastos notariales y regístrales, correrán por cuenta de EL
ASOCIANTE.
Agregue Ud. Señor Notario, las cláusulas de la ley pertinentes, cursándose las
partes respectivas al R egistro................. . para la inscripción del presente contrato.
ASOCIANTE ASOCIADO
Anexo 1 .-Aquí versan las especificaciones de la reserva minera, así como los denuncios
y demás concesiones mineras.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 521
J u r is p r u d e n c ia
EXP.: 7688-97
Sala de Procesos Abreviados y de Conocimiento
“(...) Primero.- Que, por el Joint Venture se configura una asociación de personas
que acuerdan participar en un proyecto común, generalmente especifico (ad hoc), para
una utilidad común, combinando sus respectivos recursos, sin formar ni crear una
corporación. El acuerdo también establece una comunidad de intereses y un mutuo derecho
de representación dentro del ámbito del proyecto, sobre el cual cada venturer ejercerá
algún grado de control; Segundo.- Que, entre sus características fundamentales se
aprecian: a) el carácter contractual, es decir que par que se configure se requiere del
acuerdo entre dos o más partes, generando por ende obligaciones entre las mismas; b) el
objetivo común, esto es, que las partes contratantes deben compartir un interés común,
que es el que motiva a involucrarse en un mismo negocio, y c) la inversión riesgo, lo que
se halla directamente ligado a la característica anterior, por el cual, los venturers no tienen
una garantía de devolución de la aportación dada, de allí que de acuerdo al artículo 204°
del Decreto Legislativo 014-92-EM, Ley General de Minería, se considera a éste como un
contrato de riesgo compartido; Tercero.- Que, de acuerdo a lo expuesto, son los resultados
del negocio materia del Joint Venture los que serán asumidos por los contratantes,
radicando en dicho aspecto el riesgo compartido; en tanto que con respecto a las
prestaciones asumidas por las partes, éstas deben de cumplirse por ser el contrato, ley
entre las partes, dando lugar a su resolución el incumplimiento de las obligaciones, de
conformidad con lo dispuesto por el artículo 1428° del Código Civil;(...)”
522 Contrato de Joint Venture / César E. Ramos Padilla
J o in t V enture: C o n t a b il id a d I n d e p e n d ie n t e
RTF. N° 0815-4-1997
Expediente: 2219-97
“(..) Que el artículo 38° del Reglamento de la Ley del Impuesto a la Renta dispone
que las sociedades de hecho, asociaciones en participación, joint venture, consorcios y
comunidad de bienes, perceptoras de rentas de tercera categoría, dentro de la cual se
encuentra la recurrente en su condición de Asociación Temporal, deberán llevar contabilidad
independiente de las de sus socios o partes contratantes, salvo el caso de contratos en
los que por modalidad de la operación no fuera posible llevar la contabilidad en forma
independiente permitiéndose que cada parte contratante contabilice sus operaciones o
que una de ellas lleve la contabilidad del contrato, en el caso de autos y de acuerdo al
Com probante de Inform ación R egistrada ante la Superintendencia N acional de
Administración Tributaria, a folio 03, la recurrente declaró llevar un sistema de contabilidad
computarizado (...)”
EL CONTRATO DE DOMINACION GRUPAL
Daniel E chaiz M oreno111
1. PRELIM INAR
Los grupos de empresas serán por siempre un tema con el cual nos sentiremos
profundamente identificados porque nuestro primer acercamiento se produjo a propósito
de nuestra tesis universitaria para optar el título de abogado en la Universidad de Lime?,*1
2
(*) Abogado por la Universidad de Lima. Maestría en Derecho de la Empresa por la Pontificia
Universidad Católica del Perú. Presidente de Echaiz Estudio de Abogados. Catedrático de la
Pontificia Universidad católica de Perú, Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas. Miembro
asociado del Instituto Peruano de Derecho Mercantil. Web: www.echaiz.com E-mail:
daniel@echaiz.com
1. El autor desea agradecer la colaboración de Ana María Neciosup Cajas para la preparación
de este trabajo.
2. Vid. Echaiz Moreno, Daniel. R e g u la c ió n ju ríd ic a d e lo s g ru p o s d e e m p re s a s e n e l D e re c h o
E m p re s a ria l p e ru a n o (b a s e s p a ra u n a le g is la c ió n in te g ra l). Lima, tesis para optar el título de
abogado, Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de Lima, julio del 2000.
524 El Contrato de Dominación Grupal / Daniel Echaiz Moreno
sustentada en el 2000 y, desde entonces, nos atrajo el análisis y la reflexión del complejo
mundo de los grupos de empresas que, a su vez, despertó en nosotros el interés por
diversas aristas de aquel tema, siendo una de ellas el contrato de dominación grupal. La
primera vez que nos avocamos directamente a esta figura contractual fue en un artículo
publicado en el 2001 en la Revista Jurídica del Perú3, el mismo que con singular éxito se
reprodujo en publicaciones tanto propias45como colectivas6, en Lima6, provincias7 y el
extranjero8. Ahora, en el 2007, deseamos ofrecer una versión revisada, aumentada y
actualizada de aquel trabajo que versa sobre una materia aún atractiva para el Derecho
por la mayor proliferación de los grupos de empresas en el mercado.
2. INTRODUCCIÓN
10. Cfr. Echaiz Moreno, Daniel: “ La c o n ce n tra ció n e m p re s a ria l co m o m e ca n ism o p a ra e l cre cim ie n to
c o rp o ra tiv o ”. En: Revista Jurídica del Perú. Trujillo, Editora Normas Legales, marzo del 2001,
Año Ll, N° 20, ps. 125 a 137.
11. “£/ P e rú tie n e una s itu a c ió n d e c re c im ie n to m u y e s p e c ia l’. Entrevista a Dirk Beeuwsaert,
presidente de Suez Energy International. En: Suplemento Día_1. Lima, 6/11/2006, Año 3, N°
129, p. 21.
12. “ S u p e rm e rc a d o s P e ru a n o s a p u n ta a la p e rife ria d e Lim a". En: Suplemento Día_1. Lima, 6/11/
2006, Año 3, N°129, p. 22.
13. “ G ru p o G lo ria im p o rta 1,5 50 v a q u illo n a s d e U r u g u a f. En: Suplemento Día_1. Lima, 26/12/
2005, Año 2, N° 84, p. 16.
526 a Contrato de Dominación Grupa! / Daniel Echaiz Moreno
igualdad jurídica) instrumentan una relación hegemónica de una de las partes que se
plasma por lo convenido en las distintas cláusulas pactadas”20.
L a dominación de C itigroup en C entroamérica
“Ejecutivos de la Corporación UBC Internacional (UBCI), conglomerado propietario
de entidades como el Banco Cuscatlán y Seguros e Inversiones, viajaron a Nueva
York para firmar con Citigroup el acuerdo de venta, que le permitirá al banco
estadounidense ampliar su presencia en Centroamérica y Panamá. Citigroup y UBCI
anunciaron la transacción en diciembre de 2006, y se dedicaron a gestionar las
autorizaciones necesarias ante las instituciones reguladoras... Con esta adquisición,
Citigroup ampliará sus operaciones en Centroamérica, puesto que Grupo Cuscatlán
cuenta con operaciones en El Salvador, Guatemala, Costa Rica, Honduras y
Panamá... Citigroup aseguró además que se mantendrá el equipo gerencial y el
modelo empresarial de Grupo Cuscatlán.”2'
24. Citados por Morales Acosta, Alonso. “Los grupos de sociedades’, obra citada, p. 106.
25. “Mucho más que lácteod’. En: Grupo Gloria. Lima, 9/11/2002, Suplemento contratado con el
Diario El Comercio, p. 3.
CONTRATOS (Doctrina. Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 529
Alrededor del referido contrato estarán los diferentes grupos de interés (inversionistas
m inoritarios, trabajadores, acreedores, consum idores, usuarios y Adm inistración
Tributaria)27, puesto que si bien éstos no son parte en la contratación, tienen interés en
ella, a tal punto que en el instrumento contractual podrán pactarse mecanismos de
protección para dichos grupos de interés, adicionales a los regulados en la ley de la
materia. Al respecto, debemos indicar (sin perjuicio de mayor explicación más adelante)
que postulamos la dación de una Ley sobre Grupos de Empresas donde se regule de
manera integral dicho fenómeno concentracionista, estipulándose los mecanismos de
protección específicos para cada grupo de interés (como el ejercicio del derecho de
separación y la percepción de un dividendo garantizado a favor de los inversionistas
minoritarios), pero nada obsta para que contractualmente se pacten mejores u otros
beneficios (como un mayor dividendo garantizado o el canje accionario o participacional).
La respo nsabilidad social del G rupo B ackus
“Siguiendo la lógica de apadrinar al balompié -la marca Cristal ha tratado de
identificarse con el fútbol peruano a través del auspicio y publicidad de clubes como
Sporting Cristal, Alianza Atlético y el propio seleccionado nacional-, pero esta vez el
Grupo Backus apuesta por lo jóvenes valores, buscando estar presente en el Mundial
Sudáfrica 2010. Para lograrlo, Backus ha creado el Fondo Cristal Perú al Mundial,
con un desembolso inicial de Si. 250,000 que servirán para actividades que estimulen
las capacidades de los futbolistas y la capacitación de entrenadores, entre otros.”28
Por otro lado, es importante dejar en claro que las partes del contrato deberán estar
plenamente identificadas, es decir, habrá que saber con certeza quién es el sujeto
dominante y quiénes son las empresas dominadas. Sobre el particular, ya en la mayoría
de países latinoamericanos (como Chile, Costa Rica, Argentina, Brasil y Colombia) existen
modificaciones a sus legislaciones comerciales, donde, si bien es cierto no regulan
específicamente la contratación grupal, establecen mecanismos de reconocimiento y
transparencia en los grupos de empresas. Por el contrario, en los grupos de empresas
circulares tal exigencia (la plena identificación de las partes) no se cumple pues una
empresa domina a una segunda, esta hace lo propio con una tercera y así, sucesivamente,
hasta que la última domina a la primera, de manera tal que todas son, a la vez, dominantes
y dominadas, lo que conlleva a que se desconozca quién ejerce la dirección unificada,
26. "W h a t’s N e w s ? ’. En: The Wall Street Journal Amerlcas, Sección del Suplemento Día_1. Lima,
26/12/2005, Año 2, N° 84, p. 20.
27. En cuanto a los grupos de interés, cfr. Torres y Torres Lara, Carlos. “ P e rso n a ju ríd ic a , s u je to
vs. em p re sa , obje to. L o s g ru p o s d e in te ré s y la te s is d e l s o m e tim ie n to a l e le m e n to e x tra ñ ó ’.
En: Revista Peruana de Derecho de la Empresa (Derecho de la Empresa). Lima, Editorial
Asesorandlna, abril de 1985, separata doctrinaria, ps. 1-31 a 1-35; Girón Tena, José. “ La
e v o lu c ió n d e lo s tip o s d e e m p re s a h a sta e l c u a d ro a c tu a l d e lo s m is m o d ’. En: Las grandes
empresas. México, Universidad Nacional Autónoma de México, s/f, p. 50; y Echaiz Moreno,
Daniel. “ L o s g ru p o s d e in te ré s d e n tro d e lo s g ru p o s d e e m p re s a é ’. En: Revista Acta Académica.
San José, Universidad Autónoma de Centro América, mayo del 2001, N° 28, ps. 114 a 122.
28. “ B a c k u s a p u e s ta p o r e l fú tb o l'. En: Suplemento Día_1. Lima, 22/5/2006, Año 2, N° 105, p. 11.
530 El Contrato de Dominación Grupa! / Daniel Echate Moreno
quién imparte las directrices, quién interpreta el interés grupal y, lo que es más grave, el
capital social se vuelve algo ficticio. En consecuencia, estimamos adecuado proscribir
esta fórmula grupal29, tan igual como lo hace la Ley de Sociedades por Acciones, de Brasil
(artículo 244); la Ley de Sociedades Comerciales, de Francia (artículos 358 a 359-1); la
Ley de Sociedades Anónimas, de Chile (artículo 121); la Ley de Sociedades Anónimas, de
España (artículo 74 inciso 1); y la Ley de Sociedades Comerciales, de Argentina (artículo
32), entre otras normas jurídicas.
En todo grupo de empresas existe una motivación por encima incluso de sus propios
miembros considerados aisladamente, la misma que busca el bienestar empresarial del
grupo concebido como entidad autónoma. Dicha motivación se denomina interés grupal y
tiene gran incidencia en los derechos y obligaciones de las partes contratantes, puesto
que prevalece sobre cualquier otro interés (bien sea éste individual, empresarial o
particular). Bajo esta premisa, a continuación mencionaremos los más importantes derechos
y obligaciones tanto del sujeto dominante como de las empresas dominadas, según el
texto de nuestra propuesta legislativa30.
e) Disponer la transferencia del personal entre las diversas empresas del grupo.
La HOLDING C encosud
“¿Qué es Cencosud? Es la holding sureña que el año pasado obtuvo ventas por
unos US$ 5,500 millones, opera 32 hipermercados Jumbo (19 en Chile y 13 en
Argentina), 50 homecenters Eas(21 y 29, respectivamente), 19 centros comerciales
(7 y 12), 120 supermercados Santa Isabel (Chile), 235 supermercados Disco
(Argentina), 7 Aventura Centery 23 tiendas por departamento París (Chile), además
de 46 sucursales de Banco París (Chile).”33
c) Inscribir el referido contrato y todo acto jurídico que lo modifique, regule o extinga
en la ficha registral perteneciente a cada una de las empresas integrantes del
grupo.
d) Remitir copia legalizada del contrato de dominación grupal, así como de todo acto
jurídico que lo modifique, regule o extinga al órgano de supervisión de los grupos
de empresas.
f) Brindar copia del contrato de dominación grupal y de todo acto jurídico que lo
modifique, regule o extinga, así como de los estados financieros consolidados a los
interesados.
32. “Copeínca y la consolidación harinera”. En: Suplemento Día_1. Lima, 15/5/2006, Año 2, N°
104, p. 17.
33. “Chilena Cencosud podría comprar cadena Supermercados Peruanos’. En: Diario El Comercio.
Lima, 24/1/2007, p. b3.
532 El Contrato de Dominación Grupa] / Daniel Echate Moreno
Por otro lado, los principales derechos de las empresas dominadas son:
b) Exigir que la dirección unificada se rija exclusivamente por el principio del interés
grupal.
c) Exigir que el contrato de dominación grupal y todo acto jurídico que lo modifique,
regule o extinga sea inscrito en la correspondiente ficha registral.
e) Exigir el actuar solidario de las empresas integrantes del grupo cuando ello
corresponda según los mecanismos de protección específicos.
34. “Ransa quiere Centroamérica". En: Suplemento Día_1. Lima, 17/4/2006, Año 2, N° 100, p. 8.
35. “Backus apuesta con US$ 135 milloneé’. En: Suplemento Día_1. Lima, 26/3/2007, Año 3, N°
150, p. 9.
CONTRATOS (D o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 533
c) Brindar copia del referido contrato y de todo acto jurídico que lo modifique, regule o
extinga, así como de los estados financieros consolidados a los interesados.
d) Cumplir con los mecanismos de protección específicos para cada grupo de interés
que sean de su competencia.
36. Aviso publicitario intitulado. En: Diario El Comercio. Lima, 25/6/2006, p. a3.
37. En el seno de la Comisión encargada de elaborar el Anteproyecto de Ley de Grupos de
Empresas (en el Perú) se refirió que el tema debía ser abordado mediante la regulación
jurídica del “contrato de grupo”.
38. Cfr. Fariña, Juan: Contratos comerciales modernos. Buenos Aires, Editorial Astrea, 1994,
primera reimpresión, p. 739.
39. Cfr. Hundskopf Exebio, Oswaldo: “Criterios de clasificación de los grupos de empresad'. En:
Informativo Legal Rodrigo. Lima, Asesores Financieros, junio de 1999, Volumen 156, p. XXII.
40. Vid. Martorell, Ernesto Eduardo: Los contratos de dominación empresaria y la solidaridad
laboral. Buenos Aires, Ediciones Depalma, 1996, p. 74.
534 El Contrato de Dominación Grupa! / Daniel Echaiz Moreno
Debemos precisar que Ernesto Eduardo Martorell enumera dos características que
no compartimos41: es un contrato que se perfecciona entre empresas (lo cual, como hemos
visto, no es cierto ya que el sujeto dominante no siempre es una persona jurídica) y es un
contrato de adhesión (lo que si bien es cierto se presenta en muchos casos a propósito de
la dominación, no es una “regla de oro” en tanto cabe la negociación, especialmente de
las cláusulas que otorgan otros mecanismos de protección a los grupos de interés).
41. Vid. Martorell, Ernesto Eduardo: Tratado de los contratos de empresa. Buenos Aires, Ediciones
Depalma, 1993, Tomo I, p. 307.
CONTRATOS (D o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 535
Para comenzar habrá que recordar que los administradores de las empresas del
grupo podrán ser personas naturales o jurídicas, según las estipulaciones legales de la
organización empresarial; así tenemos que en el Perú es legalmente posible que el gerente
de una sociedad anónima sea una persona jurídica, a tenor del artículo 193 de la Ley
General de Sociedades (Ley N° 26887), lo cual se encuadra dentro de la moderna visión
del management.
b) Cuando la calidad de sujeto dominante recaiga en una empresa holding (la cual
contaría con directores y gerentes que, por extensión, serían administradores del
grupo).
42. Las facultades de gestión conferidas al Comité Laboral del Grupo son exclusivamente para la
defensa de los derechos de los trabajadores; a ello se constriñe su participación en la gestión
del grupo.
43. “ What's News?'. En: The Wall Street Journal, Sección del Suplemento Día_1. Lima, 22/5/
2006, Año 2, N° 105, p. 26.
El Contrato de Dominación Grupal / Daniel Echaiz Moreno |
Finalmente, en cuanto a otros pactos lícitos que las partes estimen convenientes
podrían ser las reglas aplicables a la ayuda económica entre las empresas del grupo.
c) Mayor presencia en el mercado puesto que los diversos sujetos con los que se
relacione saben que cuentan con el respaldo no de una empresa, sino de un grupo
de empresas, lo que se traduce en símbolo de confianza.
46. “ Wiese-Parque Arauco planea operar 4 malls antes d e l2009'. En: Suplemento Día_1. Lima,
12/2/2007, Año 3, N° 143, p. 19.
47. Aquí está infringiéndose el estatuto de la sociedad, por lo que constituye un acuerdo impugnable,
según lo estipulado en el artículo 139 de nuestra Ley General de Sociedades.
538 El Contrato de Dominación Grupa! / Daniel Echaiz Moreno
Existen otros ejemplos más alejados. Así hace una década se dictó, en España, la
Ley sobre Derechos de Información y Consulta de los Trabajadores en las Empresas y
Grupos de Empresas de Dimensión Comunitaria (1997) donde se regula el acuerdo que
deberán suscribir la Dirección Central y la Comisión Negociadora y, aunque su naturaleza
no coincide con la del contrato de dominación grupal, busca satisfacer el derecho a la
información de la plana laboral mediante el establecimiento de pautas que atañen a la
organización del grupo de empresas. Asia no quiere quedarse a la zaga y, recientemente,
en China se dictaron las fíegulations on the Investment and Establishment o f Holding
Companies by Foreign Business Entities (2004) que someramente se acerca a los
mecanismos contractuales de dominación grupal.
48. Ley sobre derechos de información y consulta de los trabajadores en las empresas y grupos
de empresas de dimensión comunitaria. España, Ley N° 10/1997 del 24/4/1997, httD://noticias.
juridicas.com/base_datos/Laboral/l10-1997.Í1 ,html#a12
49. Cfr. Echaiz Moreno, Daniel: “Los grupos de empresas en la legislación peruana". En: Revista
Normas Legales. Trujillo, Editora Normas Legales, agosto del 2000, Tomo 291, ps. A-161
hasta A-168.
50. Mercado Neumann, Susana: Los grupos de empresas y sus consecuencias en el Derecho
Mercantil. Lima, tesis para optar el grado de bachiller, Facultad de Derecho y Ciencias Políticas
de la Universidad de Lima, junio de 1987, p. s/n (especialmente, artículos 5 al 8 de su Proyecto
de Ley).
51. Vid. Hundskopf Exebio, Oswaldo: “Regulación jurídica de los grupos de empresad'. En:
Informativo Legal Rodrigo. Lima, Asesores Financieros, noviembre de 1998, Volumen 149, p.
XXIII.
52. Echaiz Moreno, Daniel: “Anteproyecto de Ley sobre Grupos de Empresad'. En: Revista Normas
Legales. Trujillo, Editora Normas Legales, octubre del 2000, Tomo 293, ps. B-13 hasta B-26.
540 El Contrato de Dominación GrupaI / Daniel Echaiz Moreno
Artículo 10. Alcances.- El contrato de dominación grupal tiene por finalidad principal
el establecimiento de una relación de dominación, siendo celebrado entre el sujeto
dominante y las empresas dominadas. Su celebración, según las formalidades legales,
hace presumir, sin admitir prueba en contrario, la existencia de dominio.
Artículo 11. Requisitos.- El contrato de dominación grupal constará en escritura
pública y expresará, bajo sanción de nulidad:
4) El domicilio legal del grupo, que podrá ser el correspondiente al sujeto dominante.
6) Los titulares de cada una de las empresas integrantes del grupo, indicando el número
de su documento oficial de identidad y el respectivo porcentaje de participación en
el capital.
7) Los adm inistradores de cada una de las empresas integrantes del grupo,
especificándose el número de su documento oficial de identidad y el cargo que ocupan.
Podrá contener, además, los pactos lícitos que las partes contratantes estimen
convenientes para la organización del grupo de empresas.
El grupo de empresas es circular cuando una empresa domina a una segunda, ésta
domina a una tercera y así, sucesivamente, hasta que la última domina a la primera.
Artículo 13. Inscripción registral.- El contrato de dominación grupal y todo acto
jurídico que lo modifique, regule o extinga surtirá efecto a partir de su inscripción en la
ficha registral perteneciente a cada una de las empresas integrantes del grupo.
Artículo 14. Deber de información.- El sujeto dominante deberá remitir copia legalizada
del contrato de dominación grupal, así como de todo acto jurídico que lo modifique, regule o
extinga al órgano de supervisión, dentro de los 10 días hábiles siguientes a su celebración.
La información brindada tendrá la calidad de declaración jurada y el incumplimiento
será sancionado por el órgano de supervisión con una multa no menor de dos ni mayor de
25 Unidades Impositivas Tributarias.
C O N T R A T O S (D o c trin a . L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 541
3. Sur Cervecera Sur S.A., identificada con Registro Único del Contribuyente N°
20016348970, con domicilio en la Avenida Húsares de Junín 900, Distrito de Alto
Camaná, Provincia de Camaná, Departamento de Arequipa y debidamente
representada por su gerente general Nancy Villacorta Tenorio, identificada con
Documento Nacional de Identidad N° 14578665, según Poder que consta en la
Ficha N° 4001 del Asiento 6-G del Registro de Personas Jurídicas, a la que en
adelante se le denominará SUR CERVECERA SUR.
4. Industria Integral Del Envasado S.A.C., identificada con Registro Único del
Contribuyente N° 20012235476, con domicilio en la Avenida Industrial cuadra 4,
Distrito de Fortaleza, Provincia y Departamento de Piura y debidamente representada
por su gerente general Raymundo Pérez Pinedo, identificado con Documento
Nacional de Identidad N° 25290870, según Poder que consta en la Ficha N° 3609
del Asiento 1-F del Registro de Personas Jurídicas, a la que en adelante se le
denominará INDUSTRIA INTEGRAL DEL ENVASADO.
53. Nota del autor.- Este es un modelo de contrato de dominación grupal que alude a un grupo de
empresas ficticio, cuyos datos son también, en su integridad, ficticios, cuyo único propósito
es servir de modelo contractual didáctico. Asimismo, conviene realizar dos precisiones: por
un lado, redactar un contrato de dominación grupal supone, como todo contrato, analizar el
caso específico y diseñar sus cláusulas a la medida de la situación corporativa del grupo
empresarial, por lo que este modelo debe tomarse solamente como una guía referencial,
siendo indispensable la correspondiente asesoría legal especializada; y, por otro lado, el
contenido del contrato de dominación grupal sería distinto si contásemos con una regulación
legislativa del mismo.
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 543
3. Contratar tecnócratas que presten sus servicios a las empresas del GRUPO
BRONCO.
5. Disponer la transferencia del personal entre las diversas empresas del GRUPO
BRONCO, siempre que se justifique por el interés grupal y no constituyan actos de
hostilidad laboral.
La EMPRESA DOMINANTE ejerce éstos y otros derechos a través del Comité
Corporativo de Alta Dirección, según lo estipulado en la cláusula décimo séptima de este
contrato.
DÉCIMO SEGUNDA.- La EMPRESA DOMINANTE tiene, entre otras, las siguientes
obligaciones:
2. Inscribir este contrato y todo acto jurídico que lo modifique, regule o extinga en la
ficha registral perteneciente a cada una de las empresas integrantes del GRUPO
BRONCO.
3. Brindar fotocopia del presente contrato y de todo acto jurídico que lo modifique,
regule o extinga, así como de los estados financieros consolidados a los interesados
que lo soliciten.
DERECHOS Y OBLIGACIONES DE LAS EMPRESAS SUBSIDIARIAS.-
DÉCIMO TERCERA.- Las EMPRESAS SUBSIDIARIAS tienen, entre otros, los
siguientes derechos:
2. Exigir que la dirección unificada se rija exclusivamente por el principio del interés grupal.
3. Exigir que este contrato y todo acto jurídico que lo modifique, regule o extinga sea
inscrito en la correspondiente ficha registral.
2. Brindar copia del presente contrato y de todo acto jurídico que lo modifique, regule
o extinga, así como de los estados financieros consolidados a los interesados que
lo soliciten.
1. Que la persona jurídica objetivo realice una actividad económica que coadyuve al
mejor desarrollo del negocio cervecero.
VIGÉSIMA.- Este contrato y todo acto jurídico que lo modifique, regule o extinga
surtirá efecto a partir de su inscripción en la ficha registral perteneciente a cada una de las
empresas integrantes del GRUPO BRONCO.
VIGÉSIMO PRIMERA.- Fotocopia del presente contrato y de todo acto jurídico que
lo modifique, regule o extinga estará a disposición de los interesados en el domicilio legal
C O N T R A T O S (D o c trin a . I a g is la c io n . J iir is p ru d c n c ir j y Murtofcw) j 547
LEGISLACIÓN SUPLETORIA.-
VIGÉSIMO SEGUNDA.- En todo lo no previsto por las cláusulas de este contrato
rige supletoriamente la legislación peruana vigente, especialmente el Código Civil y la Ley
General de Sociedades, en lo que fuera aplicable.
COMPETENCIA JUDICIAL.-
VIGÉSIMO TERCERA.- Las partes contratantes declaran expresamente que, ante
cualquier controversia derivada de la ejecución del presente contrato, se someten a la
competencia de los jueces y tribunales de la ciudad de Lima.
En Lima, a los 21 días del mes de mayo del 2007 se expiden seis ejemplares
idénticos de este contrato, los mismos que son suscritos por las partes en señal de
conformidad.
1. ANTECEDENTES
Uno de los ingredientes básicos de la naturaleza humana es la “propensión a trocar,
permutar y cambiar una cosa por otra”, y esto ha sucedido a lo largo de la historia de la(*)
C) ETAPA DE IAMULTILATERALIDAD
3. DEFINICIÓN
Es un contrato por el cual una empresa bancaria o una persona jurídica autorizada,
concede una apertura de crédito, de tipo rotatorio, con una cuantía determinada, a favor de
su cliente que puede ser una persona natural o jurídica, para que utilizando una tarjeta
plástica singular, pueda adquirir bienes o servicios de las empresas o establecimientos
afiliados, cuyos consumos serán cancelados al contado (a la vista) o a cierto plazo convenido.
Podemos observar que se trata de una figura jurídica múltiple y compleja. Diferentes
tratadistas, entre ellos Álvarez-Correa, sostiene que se trata de tres contratos diferentes:
un contrato de emisión de la tarjeta de crédito entre el Banco y el titular de la tarjeta; un
contrato de afiliación entre el Banco y la empresa proveedora de los bienes o servicios, y
un contrato de compraventa entre el titular de la tarjeta y la empresa afiliada.
Otra definición importante la encontramos en el Artículo 3o del Reglamento de Tarjetas
de Crédito, aprobado por Resolución SBS N° 271-2000 que señala:
4. CONTRATACIÓN MÚLTIPLE
A. Desde el punto de vista crediticio, existe una relación jurídica entre la entidad
emisora y el cliente usuario de la tarjeta, quienes celebran un contrato de apertura
de crédito, lo que significa que el Banco pone a disposición de su cliente un crédito
para ser utilizado en el futuro, mediante la compra de bienes o servicios o retiro de
dinero en efectivo, hasta un monto determinado o preestablecido.
B. Desde el punto de vista del Banco con la empresa afiliada, existe un contrato de
afiliación y de cuenta corriente, por el cual el Banco se compromete en cancelar las
compras y consumos efectuados por el titular de la tarjeta, a la sola presentación de
los comprobantes firmados por el titular, a Cambio de una comisión preestablecida.
5. ENTIDADES EMISORAS
Las entidades emisoras pueden ser:
A. Empresas comerciales.- Que emiten sus propias tarjetas de crédito, para uso
exclusivo en sus establecimientos y empresas vinculadas.
La facultad que tienen los Bancos para operar estas operaciones se encuentra en
el inc. 34 y) del Art. 221° de la Ley GSF., que dice:
“Expedir y administrar tarjetas de crédito y de débito”.
6. LA TARJETA PLÁSTICA
incorporada, y donde se registra la firma del titular que servirá para el control adecuado
por parte de la empresa afiliada.
7. CARACTERÍSTICAS DE LA TARJETA
4. Fecha de vencimiento; e,
Los gastos que demande la verificación del domicilio podrán ser cobrados al
solicitante, siempre que previamente le hayan sido informados por escrito. En ningún
caso dicho cobro deberá exceder los gastos efectivamente incurridos.
El domicilio señalado por el solicitante producirá plenos efectos jurídicos hasta que
se comunique a la empresa, de manera fehaciente, su variación en las condiciones
señaladas en el correspondiente contrato de Tarjeta de crédito.
3. Comisiones, portes y otros gastos directos por los servicios prestados, o los
criterios para su determinación;
10. Sanciones que serán impuestas a los titulares de tarjetas de crédito que sean
anuladas.
15. VENTAJAS
Podemos indicar algunas ventajas que se observan para las partes:
A. PARA EL USUARIO:
d. Posibilidad de crédito.
a. Ampliación de clientela.
16. DESVENTAJAS
En cuanto a las desventajas, se reconoce que son en su número menores que las
ventajas, en todo caso, las primeras son susceptibles de ser superadas con cierta facilidad.
Entre las más frecuentes tenemos:
A. Del contrato celebrado entre la entidad emisora con el usuario, nacen los
siguientes derechos y obligaciones:
• Pagar la cuota periódica que se pacta con la entidad emisora con los
que ésta paga los gastos de administración y percibe sus beneficios.
Este pago es una suma elevada que permite al usuario usar el crédito
y a la entidad emisora le permite soportar los imprevistos. La falta de
pago de la cuota puede determinar la resolución de la obligación, con
la excepción de las instituciones bancarias que pueden compensar la
deuda.
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 561
anulará la tarjeta y dará aviso de tal situación a los establecimientos afiliados, Las
transacciones no autorizadas que se realicen con anterioridad a dicha comunicación,
serán de responsabilidad de los titulares o usuarios.
21. SANCIONES
Los titulares de las tarjetas de crédito, anuladas por las causas señaladas en el
artículo anterior quedan impedidos de solicitar una nueva tarjeta de crédito en cualquier
empresa del sistema financiero, durante del plazo de un año contado a partir de la fecha
de anulación respectiva.
En caso de reincidencia por primera vez en las causales de anulación previstas en
el artículo precedente, se procederá a la anulación de las tarjetas de crédito del titular, y
dicho impedimento durará tres (3) años. Si se reincide por segunda vez, el impedimento
será permanente.
Al vencimiento de los plazos señalados en el presente artículo. Las empresas quedan
facultad as para celebrar nuevos contratos de tarjeta de crédito con las personas
sancionadas, sin que .se requiera previa autorización de este organismo supervisor.
Los Bancos que emitan tarjetas de crédito, ya sea directamente o por intermedio de
sistemas de tarjetas de crédito, celebrarán contratos con los establecimientos afiliados,
mediante los cuales éstos se comprometen a recibir las órdenes de pago suscritas por los
titulares o usuarios de las tarjetas de crédito, o a recabar las respectivas firmas electrónicas
o autorizaciones previas que permitan realizar los cargos respectivos. Por el importe de
los bienes y/o servicios suministrados dentro del país o en el exterior, según corresponda.
566 La Tarjeta de Crédito /Javier Rodríguez Vélarde }
En los contratos con los establecim ientos afiliados deberá incluirse como
obligaciones de los mismos:
• Tarjetas emitidas por Bancos: son aquellas en las que interviene un Banco
como organismo financiero crediticio y al mismo tiempo como emisor de la
Tarjeta de Crédito.
• Tarjetas Mixtas: son las emitidas por una entidad comercial apoyada por un
banco o grupo de bancos.•
Este tipo de tarjetas son bilaterales y sólo tienen validez en los establecimientos
comerciales de la entidad emisora. Este sistema de tarjeta de crédito está
siendo dejada de lado, pues las tarjetas tienden a ser universales y en realidad
corresponden a la forma primitiva de la tarjeta de crédito.
• Tarjetas universales, múltiples o generales: son aquellas con las que el usuario
puede adquirir toda clase de bienes (incluido dinero en efectivo) o servicios
en general; la mayor parte de las existentes en el país son de esta naturaleza.
• Tarjetas pago inmediato: son aquellas que deben pagarse a fin de mes,
generalmente en fecha determinada.
E) POR SU DURACIÓN:
• Ilimitadas: son aquellas Tarjetas de Crédito que tienen una duración ilimitada,
pero no debe tomarse esta acepción en sentido absoluto, siempre tienen un
tope máximo; a estas tarjetas que permiten las compras sin límites en el
importe se les llaman Tarjetas de Crédito “golden Cards” y tarjetas de “oro”.
Por ejemplo: “ Avis”.
568 La Tarjeta de Crédito / Javier Rodríguez Velarte
• Bipartitas: son las tarjetas en las que solamente intervienen dos sujetos: el
emisor y el establecimiento comercial; corresponde al sistema primitivo de la
Tarjeta de Crédito.
• Tripartitas: son las tarjetas en las que intervienen sólo tres sujetos: el emisor
(generalmente Banco), el usuario y los proveedores afiliados.
• Tetrapartitas: son las tarjetas en las que intervienen cuatro sujetos: La entidad
emisora (que no es Banco), la entidad bancada (que otorgará el crédito), el
usuario y los establecimientos afiliados.
Como hemos apreciado, una ventaja común que tienen los sujetos que participan
del contrato de Tarjeta de Crédito, es la posibilidad de realizar comercio electrónico. Tal
como evoluciona este concepto se prevé, que para finales del presente año y siglo el
volumen de ventas en línea alcance los 22 mil millones de dólares.
Aunque el comercio electrónico se ha implantado definitivamente en Internet, todavía
existen muchas dudas respecto de la seguridad. La falta de leyes que regulen el comercio
electrónico impide que las empresas arriesguen la oferta y venta de sus productos; por
otro lado, los consumidores desconfían mucho cuando tienen que dar sus números de
tarjeta de crédito.
• Cuando el Banco recibe el pagaré verifica los datos del cliente y del
comerciante, previo a la transferencia de fondos.
Antes de que se pueda realizar transacción alguna, cada una de las partes
debe tener su propia clave pública y privada. Estas claves son emitidas por alguna
de las autoridades certificadoras. Las autoridades certificadoras forman una
jerarquía. Cada tarjeta de crédito está certificada por el emisor, a su vez. el
emisor está certificado por una autoridad geopolítica, la cual está certificada
por las sociedades em isoras de tarjeta de crédito, quienes a su vez son
certificadas por una asociación central que agrupa a las tarjetas de crédito. Un
sistema semejante se aplica al comerciante. Un certificado contiene información
sobre su dueño (nombre, número de cuenta, fecha de vencimiento, etc.) y su
clave pública, con toda esta información firmada, con la clave privada de la
autoridad certificadora.
• El costo de exponer los productos en una página web es menor que imprimir
los catálogos y pacer que éstos lleguen al cliente. Para el usuario.
570 La Tarjeta de Crcdtio / Javier Rodríguez Velardo
• Ahorro de tiempo.
Actualmente, casi todos los Bancos del mundo permiten hacer transacciones
vía telefónica y muchos ya han hecho su incursión en el ciberespacio. Internet por
sí solo representa un medio poco fiable, entonces se requiere que alguien asegure
al consumidor que nadie intercepte sus datos a la hora de comprar por teléfono. Es
sin duda la falta de regulación en la red y el miedo a lo desconocido lo que hace
desconfiar a la hora de tener que dar cualquier dato personal a través de la red. De
hecho, no es extraño enterarse de compras no realizadas cargadas a cuentas de
tarjetas de crédito.
Tanto las entidades financieras, así como los comercios han desarrollado
sistemas de seguridad que reducen en mayor o menor medida estos posibles fraudes
además de crear interfaces sencillas de utilizar para el usuario. Dos ejemplos de
empresas que han apostado por el e-commerce y han creado infraestructura virtuales
basadas en la seguridad son Banesto e IBM.
F) PAGOS VIRTUALES
G) LA GARANTÍA DE LA CONFIDENCIALIDAD
tres partes: el consumidor puede negar haber dado su permiso para hacer un pago,
el Banco puede facturar demás y la tienda puede alegar no haber recibido ningún
dinero. Además debemos considerar a los hackers (intrusos) que se introducen en
los sistemas informáticos para localizar información valiosa.
Para tener un panorama completo del llamado apogeo de las Tarjetas de Crédito se
debe contrastar el número de tarjetas emitidas con el de las que son anuladas cada año,
pues durante los 10 primeros meses de 1997 un total de 27 mil 336 Tarjetas de Crédito
fueron anuladas por las diversas empresas del sistema financiero y de la banca de consumo
y similar cifra en 1998. Resulta entonces pertinente analizar la problemática de las Tarjetas
de Crédito y las responsabilidades que de ella se derivan:
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 573
Para tratar este punto resulta pertinente recordar las obligaciones que bajo
responsabilidad deben cumplir las instituciones bancadas y financieras, antes de la
celebración del contrato de Tarjeta de Crédito y durante su vigencia y extinción:
• Cuando la entidad controlad ora incumpla las normas del presente Reglamento
y demás disposiciones aplicables.
574 La Tarjeta de Crédito / Javier Rodríguez Velarde
En estos reclamos es muy común que el usuario no cuente con una copia de
su contrato y que irresponsablemente manifieste que lo firmó sin leerlo porque no
le dieron el tiempo suficiente para esto o porque las letras del contrato eran
demasiado pequeñas y abundantes, lo cual evidencia que la generalidad de veces
estos consumidores no encuadran en la categoría del “consumidor razonable”
establecida por el Indecopi. Siendo por otro lado muy frecuente que el titular
desconozca que cuando pierde su tarjeta, debe avisar inmediatamente al Banco,
para que le otorgue un código de bloqueo (que servirá para retener la tarjeta en
caso que un tercero quiera utilizarla), y que además deberá presentar una
comunicación escrita al Banco comunicando el robo y ratificando el pedido del
bloqueo o suspensión de la tarjeta y finalmente ordenar su anulación. Asimismo es
importante señalar que muchos desconocen que el Banco no asume responsabilidad
por el uso que hagan terceras personas de la tarjeta, sino pasadas las 48 ó 72
horas desde la confirmación por escrito.
c. Por extinción del emisor. Cuando el Banco emisor deja de administrar una
determinada tarjeta.
d. Por resolución del contrato como consecuencia del incumplimiento del titular
de la tarjeta.
ASPECTOS LEGALES
MODALIDAD
SEGUNDO: La tarjeta de crédito objeto del presente contrato tiene las siguientes
modalidades:
SEGURIDAD
SEXTO: Los usuarios de la Tarjeta de Crédito, están obligados a identificarse con
un documento personal de identidad, cada vez que desea efectuar mediante el uso de la
misma, consumos o disposiciones en los establecimientos afiliados o en EL BANCO.
578 La Tarjeta de Crédito / Javier Rodríguez Vetante
FORMALIDADES
SÉPTIMO: Para los consumos, bienes o servicios que EL CLIENTE y los titulares
de tarjetas emitidas a su solicitud, efectúen, adquieran o reciban, se utilizarán los formularios
especiales que el establecimiento afiliado o EL BANCO les presente los mismos que
deberán ser suscritos por el titular de la tarjeta en señal de conformidad, debiendo EL
CLIENTE conservar una copia para sí.
ESTADO DE CUENTAS
NOVENO: EL BANCO enviará mensualmente a EL CLIENTE, un estado de su cuenta
corriente Tarjeta de Crédito, en el cual se detallará el movimiento (cargos y abonos) en el
curso del último período, el monto de pago correspondiente y el saldo disponible de la
línea de crédito. Las fechas de corte a los efectos de la emisión de tales estados de
cuenta, podrán modificarse en cualquier momento, lo que se comunicará al CLIENTE
mediante notas en los mismos estados de cuenta.
USO LOCAL
DURACIÓN
COMPETENCIA Y DOMICILIO
DÉCIMO NOVENO: Para cualquier controversia que pudiera surgir en relación con
la interpretación y/o ejecución del presente contrato, las partes se someten a la jurisdicción
y competencia de los jueces d e ..................., cualquier cambio de domicilio, de EL CLIENTE
para reputarse como válido, deberá ser cursado a EL BANCO por escrito con una
anticipación no menor de quince días útiles.
En señal de conformidad del presente contrato de Tarjeta de Crédito, las partes
suscriben el presente contrato a lo s .... d ía s ...... del mes d e ......del 200.........
BANCO CLIENTE
582
■ Tañeta de Crédito / Javier Rodríguez Veiarde I
J URISPRUDEN CIA
T a r j e t a d e c r é d it o : F alta d e in f o r m a c ió n 1*1
EXPEDIENTE 309-97-CPC
Comisión de Protección al Consumidor
Resolución final: N° 040-99-CPC
Denunciante: Edith Espejo S. / Denunciado: Banco Santander/Materia: Información
de Tarjeta de crédito
(...)
hasta el límite de su línea de crédito (y, en su caso, los sobregiros permitidos). Ello, en
tanto que un consumidor razonable entiende que esta línea, previamente autorizada por
el banco tomando en consideración las posibilidades económicas de su cliente, conlleva
tanto derechos como deberes para su titular. Así por un lado, el cliente tiene derecho a
efectuar consumo hasta por el tope del crédito autorizado y, por otro lado, tiene el deber
de no excederse de esta línea. Igualmente, un consumidor razonable entiende que es de
interés del banco adoptar las medidas necesarias para evitar sobregiros que pongan en
riesgo la posibilidad de recuperar los créditos otorgados. Así, es sensato suponer que el
banco adoptará medidas estrictas para asegurar que sus clientes y en especial terceras
personas, no puedan exceder sus líneas de crédito de manera ¡limitada. Ello conlleva a
que un consumidor razonable válidamente pueda suponer que la responsabilidad derivada
de los usos fraudulentos que puedan realizar terceras personas con su tarjeta tampoco
pueda ser irrestricta. (...)”
de Crédito f Javier Rodríguez Velante \
T a r j e t a d e c r é d it o : B lo q ueo p a r a e v it a r q u e e s t a s e a
RESOLUCIÓN N° 0177-2000-TDC-INDECOPI
EXPEDIENTE N° 005-1998-CPC
Tribunal de Defensa de la Competencia y de la Propiedad Intelectual
Sala de Defensa de la Competencia
“(...) Para un consumidor razonable no es lógico que si el Banco confirma que su
tarjeta de crédito ha sido efectivamente bloqueada, le sean cargados consumos efectuados
después de dicho bloqueo, porque un consumidor razonable entiende que el bloqueo de
tarjetas de crédito es una medida de seguridad otorgada por el Banco justamente para
evitar que la tarjeta anulada continúe siendo utilizada. Por lo tanto, el Banco no brindó al
denunciante toda la información relevante respecto del procedimiento a seguir y de los
requisitos necesarios para anular una tarjeta de crédito, ni tampoco informó al denunciante
acerca de la responsabilidad que podría asumir en el supuesto de producirse consumos
fraudulentos que excedieran el límite del fondo de protección asignado, infringiéndose lo
dispuesto en los artículos 5, inciso b), y 15 de la Ley de Protección al Consumidor
CONTRATOS DE DESCUENTO BANCARIO Y DEPOSITO
DE AHORROS
H ugo H uayanay C h u q u illa n q u in
con la colaboración de:
Fernando Reyna Támara* (*)" 1
I. INTRODUCCIÓN
Los contratos en el marco de la actividad del sistema financiero constituyen una
modalidad de contratación celebrado por las empresas financieras conformantes del
(*) Abogado, Presidente Ejecutivo de la Escuela Superior de Derecho, Empresa & Negocios.
www.esdenderecho.org
(**) Abogado Jefe del Área de Asesoría Legal de la Caja de Ahorro y Crédito-Huancayo. Asistente
en las Cátedras de Derecho Societario, Derecho Bancario y Financiero y Derecho de Títulos
Valores en la Universidad Mayor de San Marcos y Universidad Privada San Juan Bautista.
586 Contratos de Descuento Bancarío y Depósito... / Hugo Huayanay Chuquillanqui
referido sistema con sus clientes y/o usuarios, cuya finalidad fundamental consiste en
crear, regular, modificar o extinguir una relación jurídica patrimonial relacionada con las
operaciones de intermediación financiera. Así, las partes intervinientes son: la institución
financiera y el cliente (persona natural o jurídica).
En esta modalidad de contratos, las partes intervinientes expresan su consentimiento
en forma no tradicional, ya que, de acuerdo a la necesidad de celeridad de las operaciones
financieras, se han eliminado las tratativas previas (consensualismo pleno entre la oferta
y la aceptación), esto es que la etapa de negociación ha sido minimizada, cuando no
eliminada; así, los clientes deben expresar su conformidad o no sobre cláusulas
predeterminadas unilateralmente por la institución financiera, enmarcadas dentro de la
doctrina del “Lo tomas o lo dejas” (tafee it or leave it), que en términos de negociación
contractual determinan la utilización de la modalidad denominada Contratación por
Adhesión1, para celebrar dichos contratos.
Siguiendo lo expresado anteriormente, la prestación materia de la obligación derivada
del contrato puede bien ser una operación activa, pasiva o neutra. E n l a s o p e r a c i o n e s
a c t iv a s , la institución financiera se convierte en acreedora del público (clientes prestatarios
denominados también agentes deficitarios) en razón de las colocaciones que aquella hizo
con capital y especialmente con los recursos captados de los ahorristas (denominados
también agentes superavitarios), transacciones financieras que son registradas en su
activo contable, aquí es donde encontramos al Contrato de Descuento Bancario. E n la s
o p e r a c i o n e s p a s i v a s el cliente de la institución financiera ingresa fondos dinerarios a
ella, mediante operaciones de apertura y depósito en cuenta, de esta forma la institución
financiera capta recursos del público, frente a quienes queda como deudor u obligado,
registrándose tales operaciones en su pasivo, estando posteriormente obligado a devolver
el capital más los intereses devengados; es aquí donde se ubica fundamentalmente el
Contrato de Depósito de Ahorros. Finalmente dentro de esta clasificación de operaciones
financieras tenemos a las o p e r a c i o n e s n e u t r a s , en donde la institución financiera realiza
servicios que no representan concesiones de crédito, o asuma el compromiso de pagar
intereses por los fondos captados del público ahorrista, que por consiguiente conllevan
asumir menor riesgo para la institución financiera, proporcionándoles al mismo tiempo la
obtención de grandes utilidades sin pérdida. En esta línea se comprende también aquellas
actividades financieras que puede realizar por cuenta propia, o de terceros, inversiones
dentro o fuera del país (adquisición de instrumentos de emisión en las principales bolsas
de valores del mundo).
Los contratos bancarios y/o contratos con que se operan dentro de la actividad
cotidiana de las instituciones financieras tienen la particularidad de ser masivos; esto es,
destinado para la celebración de una multiplicidad de operaciones semejantes, donde la
reserva y confidencialidad son también características importantes. Así, se clasifican dentro
1. “El contrato por adhesión está integrado por cláusulas que se denominan condiciones generales,
cuyas notas más salientes responden a la circunstancia de ser redactadas exclusivamente e
íntegramente por una parte que adopta el nombre de predisponente. Se caracterizan por su
homogeneidad con fundamento en que la uniformidad de la producción de bienes y servicios
lleva a la estandarización de los Instrumentos negociables que sirven a su comercialización y
finalmente a su rigidez, elemento que apunta a la severa inmutabilidad de las formulas
preordenadas...” (Stigliz, Rubén y Gabriel. “Contratos por Adhesión, Cláusulas Abusivas y
Protección al Consumidor”. Buenos Aires, Ediciones Depalma. 1985. )
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Motetes) \ 587
de esta categoría los contratos de cuenta corriente bancaria, tarjeta de crédito, descuento
bancario, depósito de ahorros y los contratos financieros en sus diversas modalidades.
En esta línea debemos mencionar que existe una nueva especie de contratos que
se utilizan dentro de la actividad financiera, que algunos han denominado «contratos
bancarios modernos», cuya importancia y auge en esta última década ha sido bastante
notorio, y son utilizados por un número cada vez mayor de empresas corporativas y
medianas empresas, con una perspectiva de ingreso a la utilización de estos contratos de
la pequeña empresa. Estos referidos contratos son celebrados por una institución financiera
y su cliente, con el objeto de brindarle servicios de financiamiento, administración o gestión,
entre otros, y que la doctrina los ha denominado como: contratos de financiamiento
empresarial; así, están clasificados bajo esta modalidad los contratos de leasing,
fideicomiso, underwriting, factoring, titulización de activos, entre otros.
1. DEFINICIÓN:
El tratadista Luis Muñoz lo define como aquel Contrato “...en virtud del cual
una parte, el descontante o institución financiera, pone a disposición del acreedor o
descontatario una suma de dinero, a cambio de la tradición de un crédito de
vencimiento posterior, obligándose las partes a las demás prestaciones pactadas,
entre otras el descuento de los intereses correspondientes por la entidad financiera
que los deduce a la entrega del dinero, que deberá ser restituido a la fecha del
vencimiento del crédito o créditos descontados, pues el descuento es limitado al
monto nominal del crédito descontado, y el interés se deduce por el período de
pago anticipado”3.
2. Cabe señalar que el término “descuento” en el derecho bancario, alude tanto a una operación
jurídica - financiera, como a la suma deducida por el banco; en el presente trabajo vamos a
referirnos al término “descuento” en la primera acepción mencionada, es decir como una
operación jurídica - financiera.
3. MUÑOZ, Luis. “Contratos y Negocios Jurídicos Financieros”, Tomo II (Parte Especial). Pág.
765. Edit. Universidad. 1981. Buenos Aires - Argentina.
588 Contratos de Descuento Bancario y Depósito... / Hugo Huayanay Chuquillanqui
realizar dicha operación, y sus clientes; ello debido al menor costo que representa
para el empresario, a diferencia de otros productos financieros similares. A través
de este mecanismo contractual, las empresas pueden vender sus mercaderías al
crédito, obteniendo la liquidez adelantada a cambio de una tasa de descuento. Así,
en el tráfico comercial, los clientes de las empresas que obtienen determinados
productos al crédito, estilan emitir Letras de Cambio a plazos que oscilan de entre
60 días y el máximo de 120 días, plazos que la Banca Comercial acoge para proceder
a realizar las operaciones de descuento.
3. ELEMENTOS:
3.1. Partes.- Dos son las partes intervinientes en este Contrato, pero tres en la
dinámica de la operación de descuento. Manuel Broseta Pont, citado por
Vicent Chulia5 considera a los siguientes:
4. CARACTERES JURÍDICOS
Entre los principales, podemos citar:
• Es un contrato oneroso.
• Es un contrato autónomo.
En los términos de Jorge La banca: El Banco se obliga, por efecto del contrato, a entregar
cierta suma de dinero; esta cantidad se corresponde con el importe del crédito, sal la deducción
del interes correspondiente al tiempo que corre entre la concreción del descuento y el
vencimiento del crédito, y de una comisión. Se trata de una obligación de dar sumas de dinero
(LA BANCA, Jorge: “Los contratos bancarios de apertura de crédito y descuento’’. Ed. Depalma
1964. Buenos Aires, Argentina, pág. 62.
Que se haya establecido expresamente en el título valor la cláusula especial de “sin protesto” (Art.
52° de la Ley de Títulos Valores - Ley N° 27287), caso en el cual se libera del tenedor del título
valor a observar la formalidad del protesto para ejercitar las acciones derivadas del título valor.
C O N T R A T O S (D o c trin a . L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 591
6. MODALIDADES DE DESCUENTO:
11. LA BANCA, Jorge: “Los Contratos Bancaríos de Apertura de Crédito y Descuento”, Ed. Depalma,
1964, Bnos Aires Argentina. Pág. 70-71.
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 593
Una vez celebrado el contrato entre las partes, el descuento se forma y ejecuta
de inmediato: se endosa el título de crédito o transfiere el documento comercial y
su importe es llevado a la cuenta del cliente. Se originan obligaciones para ambas
partes en el mismo momento, la obligación del descontante (institución financiera)
de entregar el importe de un crédito, la institución financiera entrega el dinero; y la
obligación del descontatario de endosar o transferir a la institución financiera ese
crédito no vencido contra tercero.
Tal como señala Bonfanti, cuatro son las modalidades de extinción en este
contrato:
9. ASPECTOS LEGALES:
1. DEFINICIÓN:
13. BROSETA PONT, Manuel: “Manual de Derecho Mercantil". Edit. Tecnos. Décima Edición.
1994, pág. 533.
14. BONFANTI, Mario. Ob. cit. Pág.133.
CONTRATOS (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 595
3. ELEMENTOS:
3.1. PARTES: Dos son las partes intervinientes en el contrato de depósito de ahorros:
4. CARACTERES JURÍDICOS:
4.1. Es un contrato real.- Como anotan Giacomo Molle y Bonfanti, debido a que
se perfecciona mediante la entrega del dinero a la institución financiera, y la
obligación de este último a su restitución21.
c) Depósito a Plazo Fijo con un Pre aviso. Con este tipo de contratos
lo que se busca es dar un tiempo prudencial a la institución financiera,
para que esté en condiciones de reembolsar la cantidad depositada,
después de recibir un preaviso que ha sido convenido anticipada
mente.
Hay quienes han pretendido confundir este contrato con el contrato de mutuo,
pero como bien apunta Giacomo Molle: “El depósito de ahorros se parece al mutuo
porque ambos contratos implican el traspaso de la propiedad de las sumas
depositadas o dadas en mutuo y también para la obligación de restituir en la misma
clase de moneda. Pero mientras en el mutuo la duración es esencial, estando ligada
su función con la prórroga de restitución, en el depósito bancario, por el contrario, el
reembolso puede ser exigido también al momento, y ello en relación con el diferente
interés amparado por los contratos: en el mutuo el interés del beneficiario en utilizar
la suma prestada y en el depósito bancario, el interés del depositante en conservar
la disponibilidad del dinero.” 30
Como lo señala Carlos Dávalos Mejía dos son los documentos fundamentales
que se adhieren a la ejecución del contrato de depósito “Son independientes entre
si, por cuanto a su regulación legal se refiere, pues cada uno se puede realizar sin
que se requiera, la realización de él o los otros dos”.31 Uno es el comprobante o
ficha de retiro y el otro es una ficha de retiros, ambos pueden ser documentos
III. BIBLIOGRAFÍA:
DEL DESCUENTO:
CLÁUSULA PRIMERA.- Por el presente contrato EL BANCO ha aprobado una línea
de crédito a favor de EL CLIENTE, hasta por la suma de US $ 100 000,00 (CIEN MIL Y 00/
100 DÓLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE NORTEAMÉRICA), por el término de 01
(un) año, que será utilizado en forma rotativa mediante el descuento de instrumentos de
contenido crediticio.
El CLIENTE asume el riesgo crediticio de los deudores de los instrumentos
descontados, en adelante Deudores.
CLÁUSULA SEGUNDA.- Los Instrumentos con contenido crediticio, deben ser de
libre disposición de EL CLIENTE. Las operaciones de descuento no podrán realizarse con
instrumentos vencidos u originados en operaciones de financiamiento con empresas del
sistema financiero.
Los Instrumentos objeto de descuento pueden ser Letras de Cambio, Pagarés,
Facturas Conforrmadas y títulos valores representativos de deuda, así definidos por las
leyes y reglamentos de la materia. Dichos instrumentos se transfieren mediante endoso o
por cualquier otra forma que permita la transferencia a favor de EL BANCO.
CLÁUSULA TERCERA.- EL CLIENTE se obliga en poner en conocimiento de los
Deudores, dentro de las 24 horas de endosado un instrumento, de la operación del
descuento.
Se presumirá que los Deudores conocen del descuento.
CLÁUSULA CUARTA.- Son derechos mínimos de EL BANCO:
4.1. Realizar todos los actos de disposición con relación a los Instrumentos recibidos;
4.2. Cobrar una tasa de interés del 21% anual, que se calculará desde la fecha del
descuento a la fecha del vencimiento del título valor.
604 Contratos de Descuento Boticario y Depósito .../H u g o Huayanay ChuquIUanqui
4.4. Realizar las gestiones de cobranza extrajudicial y de ser el caso iniciar las
acciones judiciales que fueran necesarias.
DEL CLIENTE:
CLÁUSULA QUINTA.- EL CLIENTE tiene los siguientes derechos:
5.1. Exigir el pago por los Instrumentos descontados dentro de las 24 horas y conforme
a las condiciones pactadas; y,
5.2. Exigir la devolución del título valor debidamente protestado y endosado por EL
BANCO en caso de falta de pago.
6.3. Notificar la realización del descuento a sus Deudores, cuando sea el caso;
6.4. No recibir los pagos que efectúen los Deudores por pagos a cuenta o cancelación
de los títulos que obren en poder de EL BANCO.
6.5. Informar a EL BANCO y cooperar con éste para permitir la mejor evaluación de su
propia situación patrimonial y comercial, así como la de sus Deudores;
6.6. Utilizar los formularios proporcionados por EL BANCO para la presentación de los
títulos valores sujetos a descuento.
PLAZO:
CLÁUSULA NOVENA.- El presente contrato tendrá una duración de 01 (UN) año, y
concluirá sin necesidad de aviso previo alguno.
C O N T R A T O S (D o c trin a . I o g is la c ió n . J u r is p r u d m c u y M o d e lo s ) 605
DISPOSICIONES VARIAS:
El tribunal arbitral que se constituya estará integrado por tres árbitros, que
obligatoriamente deberán ser abogados. Cada parte nombrará un árbitro, quienes a su
vez designarán un tercero, que actuará como Presidente del Tribunal. Si los árbitros
designados por las partes no se pusieran de acuerdo en la designación del tercer árbitro,
éste será designado conforme a lo establecido en “las reglas”.
La nacionalidad o domicilio de los árbitros podrá ser cualquiera, sin importar quién
sea la entidad que los designe.
El Tribunal Arbitral decidirá por mayoría sobre la materia objeto del arbitraje. A tal
efecto emitirá un laudo arbitral por escrito, en el plazo máximo de ciento veinte (120) días
a partir de la fecha de inicio del arbitraje, justificando la resolución adoptada.
El tribunal arbitral determinará la forma en que deberán satisfacerse los gastos
relacionados con el arbitraje.
606 Contratos de Descuento Bancario y Depósito... / Hugo Huayanay Chuquillanqui
EL BANCO EL CLIENTE
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 607
Conste por el presente documento, el contrato privado que celebran de una parte,
el Banco Empresarial S. A. , con R.U.C. N° 78456206875, al que en lo sucesivo se
denominará EL BANCO, y, de la otra parte EL CLIENTE, cuyas generales de ley, constan
al final del presente documento y en la cartilla de información anexa al mismo.
Todas las condiciones son aceptadas por EL CLIENTE, expresando dicha aceptación
mediante su firma y/o huella digital en este documento y en la cartilla de información
adjunta.
1. ANTECEDENTES:
2.1. El presente contrato contiene los términos y condiciones que regulan los
depósitos que realice EL CLIENTE de EL BANCO, en depósitos de ahorros,
en depósitos a plazo y en depósitos por Compensación por Tiempo de
Servicios (CTS). Estos términos y condiciones son de obligatorio cumplimiento
por EL CLIENTE de EL BANCO desde la firma y/o al imprimir su huella digital
en la solicitud para abrir las cuentas de depósitos de ahorros o depósitos a
plazo fijo. En el caso de cuentas de depósito por CTS el trabajador está
obligado a firmar, imprimir su huella digital o presentar la firma de un
representante debidamente acreditado.
3. CONDICIONES GENERALES:
3.5. El importe de los cheques que se depositen en las cuentas de ahorros estarán
disponibles y devengarán intereses, sólo cuando hayan sido efectivamente
cobrados por EL BANCO.
3.6. Los cheques que no resulten conformes o que sean devueltos por el Banco
girado serán entregados a EL CLIENTE y los gastos originados se cargarán
en su cuenta de ahorros.
3.25. Las condiciones pactadas en este contrato bajo el cual se brindan los servicios
que EL BANCO presta, las comisiones y demás conceptos mencionados en
el numeral anterior, podrán ser modificados por EL BANCO debiendo
comunicar ello a EL CLIENTE mediante aviso en cualquiera de las formas y
dentro del plazo que señala la Ley. En caso de que EL CLIENTE no estuviera
de acuerdo con las m odificaciones introducidas, deberá ponerlo en
conocimiento de EL BANCO, por escrito, dentro de los diez (10) días de
recibido el aviso, quedando facultado EL CLIENTE para resolver la presente
relación contractual
4.1.6. Debitar cualquier suma acreditada en Las Cuentas por error o abonar
cu a lq u ie r im porte no reg istra d o o p o rtu n am en te o retirado
indebidamente, no siendo necesario aviso previo ni instrucciones
expresas por EL CLIENTE.
4.2.3. Los Depósitos a Plazo no son transferibles y sólo pueden ser cobrados
por sus titulares.
4.2.10. Para todos los depósitos a plazo abiertos a plazos menores de 720
días, si es cancelado antes de su vencimiento a requerimiento de
EL CLIENTE, se redituará la tasa de interés de ahorros corriente
vigente computados por el periodo de permanencia efectiva del
depósito; si EL CLIENTE hubiera cobrado los intereses, EL BANCO
puede afectar el capital cuando sea necesario para la compensación
respectiva.
4.3. DEPÓSITOS POR CTS.- Los Depósitos por Compensación por Tiempo de
Servicios, se rigen por las normas legales que le son propias.
4.3.2. El titular de la cuenta CTS podrá disponer de los fondos que sean de
libre disponibilidad o hasta el límite que establecen las normas
legales.
4.3.4. El traslado de los fondos de las cuentas por CTS a otro depositario
implica la cancelación de dichas cuentas y será requerido por EL
CLIENTE a su empleador quien comunicará por escrito a EL BANCO,
procediendo a realizar el respectivo traslado luego de descontar los
créditos u obligaciones que, con la garantía expresa de dicho
beneficio social, mantenga EL CLIENTE con EL BANCO.
Lugar y Fecha de de
M U Contratos do Descuento Bancario y Depósito... / Hugo Huayanav Chuauillanaui
Nombre del primer titular / Razón Social: Nombre del segundo titular / Razón Social
DNI / RUC
Dirección:.
Firma de EL CLIENTE:
Huella Digital
Agregar las generales de ley de la Cónyuge.
J URISPRUDEN CIA
D e p ó s it o : C o nduc ta d e l b a n c o a n t e m u e r t e d e s u c l ie n t e
RESOLUCIÓN N° 0370-2005/TDC-INDECOPI
EXPEDIENTE N° 862-2004/CPC
Tribunal de Defensa de la Competencia y de la Propiedad Intelectual
“(...) Sin embargo, si tal como ha sucedido en el presente caso, el titular de las
cuentas o depósitos falleciera habiendo otorgado testamento, formará parte de un servicio
idóneo y prestado de conformidad con el ordenamiento legal, el que la entidad bancaria
proceda a revisar y tener en cuenta las disposiciones establecidas por el causante en su
testamento para proceder a la cancelación de sus cuentas. Ello, en la medida que por esa
vía, el cliente podría haber dispuesto la forma en la que se llevará a cabo la partición de su
herencia, o, como ha sucedido en el presente caso, porque podría haber otorgado legados
con cargo a sus depósitos. De esta manera, el Banco se asegura de dar cumplimiento a la
voluntad de quien en vida fuera su cliente, resguardando los intereses de sus herederos,
como el de sus legatarios (...)”.
Contratos de Desatento Bancerio y Depósito... /H u g o Huayanay Chuquitianqui
I d o n e id a d d e l o s s e r v ic io s f in a n c ie r o s : D e p ó s it o s d e CTS
RESOLUCIÓN N° 0252-2004/TDC-INDECOPI
EXPEDIENTE N° 726-2002-CPC
Sumario: I. Antecedentes. II. Vocablo Leasing. III. Definición. IV. Clases de Bienes. V.
Casos de Leasing. VI. Leasing operacional y leasing operativo. VI.1. Leasing
operativo. VI.2. Leasing financiero. Vil. Terminología. VIII. Relaciones entre
las partes intervinientes. IX. Derechos y obligaciones de las partes: IX.1.
Derecho de las partes; IX.2. Obligaciones de las partes. X. Clasificación de
las empresas de leasing. XI. Naturaleza jurídica: a) Compraventa: b) Compra
venta a plazos; c) Locación-venta; d) Compraventa a plazos con reserva de
dominio; e) Arrendamiento; f) Préstamo; g) Renting; h) Mandato: i) Depósito;
¡) Opción de compra; k) Fiduciario; I) Contrato atípico: m) Contrato complejo:
n) Contrato mixto. XII. Características del contrato de leasing. XIII. Elementos
propios del contrato de leasing: a) Opción de compra, b) Valor residual. XIV.
Etapas del arrendamiento financiero: a) Selección del bien: b) Propuesta
contractual: c) Principales cláusulas contractuales; d) Perfeccionamiento del
contrato; e) Vigencia del contrato; f) Ejecución; g) Plazo del contrato; h)
Conclusión del contrato; i) Efecto del contrato. XV. Clases de Leasing. XVI.
Variantes del contrato de Leasing. XVII. El Leasing y la legislación concursal.
XVIII. Aspectos tributarios. XIX. Tratamiento contable. XX. El Leasing y la
legislación bancaria. XXI. Emisión de bonos de arrendamiento financiero.
XXII. Leasing internacional. XXIII. Disposiciones sobre el loasing en la
legislación peruana: 1. Normas que regulan el arrendamiento financiero. 2.
Requisitos. 3. Terminación del contrato. XXIV. Ventajas y desventajas del
contrato de leasing: 1. Ventajas; 2. Desventajas. XXV. Legislación comparada.
(*) Abogado y economista por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Doctor en Derecho y
Ciencias Políticas. Ex Decano y actual Catedrático principal de la Facultad de Derecho de la
UNMSM. Ex Decano del Ilustre Colegio de Abogados de Lima y del Colegio de Economistas del
Perú. Miembro del Jurado Nacional de Elecciones. Autor de numerosos libros de Derecho Comercial.
620 El Contrato de Leasing / Ulises Montoya Alberti \
I. ANTECEDENTES
Así mismo el Código de Hamburabi (1,800 a.c), contiene artículos que regulan el
arrendamiento de tierras y de barcos.
La palabra Leasing, es de origen sajón, proviene del verbo “to lease” que significa
en inglés arrendar, aplicado al campo económico se le utiliza para distinguir un tipo de
arrendamiento que reúne características especiales.
Esta falta de precisión del término, el no ser claro para definir este tipo de Contrato
y distinguirlo de los de arrendamiento normales, ha traído como consecuencia la
imprecisión de su traducción cuando fue adoptado por los demás países europeos.
4. BUONOCORE, Vicenzo: En “La locación financiera en el ordenamiento italiano”. En: “El Leasing”.
Ed. Abeledo Perrot, Argentina, 1990. pág. 16.
5. FARIÑA, Juan: “Contratos comerciales modernos”, pág. 500, nota 47.
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Todas esas expresiones dan por supuesto que el núcleo central es la locación de
cosas. Según ello, el tomador es un locatario o, por lo menos, ocupa una posición que
sería la de un locatario.
III. DEFINICIÓN
6. Decreto Legislativo N° 299. Artículo 5 (1er. párrafo). “El contrato de arrendamiento financiero
otorga a la arrendataria el derecho al uso de los bienes en lugar, forma y demás condiciones
estipulados en el mismo”.
7. BRUGNAGO, Darío: “II leasing: definizione e sviluppo” en Seminario sobre el leasing. Madrid. 1969.
8. Citado por LOPEZ DE ZAVALIA, Fernando, J.: “Compraventa-Leasing-Permuta-Suministro”.
Ed. Abeledo Perrot. Argentina. 1994. pág. 218. “La locazione financiera” en Trattato di Diritto
Privado. Tomo 11.
CONTRATOS lüoctrna, Lcgiiiwun JwLiprudtincu y McvJeJub), 623
Los bienes materia de arrendamiento financiero están constituidos por: los “Bienes
de Capital” o “Bienes de Equipo” (maquinarias, equipos, etc.) que tienen por finalidad
participar en el desarrollo o mejora de la empresa. En estos bienes lo que interesa
principalmente es su uso más que la propiedad.
En este sentido se puede señalar que los bienes a otorgarse en leasing deberán
de reunir las siguientes condiciones:
2.- Que se trata de bienes enajenables, por su condición de estar dentro del comercio.
Uno de los aspectos que se plantea es que si los bienes intangibles pueden
ser materia de arrendamiento financiero, tales como derechos patrimoniales de autor,
de inventor, de patentes, nombres, marcas y otros similares, teniendo presente que
en muchas legislaciones se considera que son “bienes muebles” , entre otros, los
derechos.
14. BUONOCORE, Vicenzo: En El leasing, notas 6, 38, 81 y 212; ídem Fantozi-Alderighi. pág. 132.
15. BARREIRA, Delfino.- Citado por Martorell. Tratado de Derecho Civil, pág. 394.
16. Panamá.- Ley N° 7 de 10 de julio de 1990. Art. 1. Ver nota 11.
Uruguay. Ley 16.072.- El art. 5o indica los bienes que pueden ser materia de leasing, siendo
estos los bienes muebles no fungibles y todos los inmuebles, afectados a la actividad industrial,
agraria o comercial. Cuando el objeto sea un inmueble, el contrato se regirá por las disposiciones
de la presente ley siempre que exista opción de compra a favor dei usuario (artículo 1°, inciso
segundo) y que el precio final estipulado a tal efecto no exceda a la fecha del contrato del
25% (veinticinco por ciento) del valor real, fijado por la Dirección General del Catastro Nacional
y Administración de Inmuebles del Estado.
En Francia la Ley 66-455 de 2 de julio de 1966, considera que los bienes inmobiliarios deben
de ser de uso profesional. Artículo 1.- “Las operaciones de leasing consideradas en la
presente ley son las operaciones de arrendamiento de bienes de equipo, de material de
utillaje o de bienes inmobiliarios de uso profesional, especialmente comprados con vista a
este alquiler por empresas que permanecen propietarias de tales bienes, cuando dichas
operaciones, cualquiera que sea su denominación, dan al arrendatario la facultad de adquirir
todo o parte de los bienes alquilados por un precio convenido teniendo en cuenta, al menos
en parte, las entregas efectuadas a título de alquileres”.
17. En España el Real Decreto - Ley N° 15/77, la ley no indica la clase de bienes que pueden ser
materia de arrendamiento financiero, el art. 20 se refiere a que estos han de quedar afectados
por el usuario exclusivamente a fines agrarios, industriales, comerciales, de servicios o
profesionales, se faculta al Gobierno, que atendiendo a la coyuntura económica, pueda
extender el ámbito de aplicación de esta ley a bienes diferentes de los indicados en el artículo
19 o a bienes afectos a fines distintos de los enunciados en el párrafo anterior.
18. LOPEZ DE ZAVALIA, Fernando J.: Ob. cit. pág. 208.
625
V. CASOS DE LEASING
a) Cada calidad es asumida por una persona distinta. Estamos ante el leasing
financiero indiscutido. Primus es el tomador, Secundas la entidad financiera, y
Tertius el proveedor.
b) Dos calidades son asumidas por una sola persona, presentándose las siguientes
situaciones:
Así la persona que entrega el bien en leasing (the lessor en inglés) reservándose
la titularidad del mismo, es llamado “dador”, “arrendador”, “locador”.
El que tiene el uso y goce del bien y la obligación de pagar el canon, (the lesee, en
inglés) se le denomina “tomador” , “arrendatario”, “locatario” “conductor”, “tomador”,
“usuario”, “utilizador” .
Para otros el leasing se reduce a una relación bilateral, la misma que priva de una
distinción entre el leasing operativo y el leasing financiero.
Por tanto, el acto de la compra del bien, operación que debe ser contemplada
fuera del alcance de la operación de leasing como tal, queda jurídicamente delimitado
a partir de la conclusión del contrato, la cual lleva consigo el nacimiento de la coexistencia
de relaciones jurídicas entre el proveedor y la sociedad de leasing en el marco de un
contrato de compraventa y entre la sociedad de leasing y arrendatario en el marco de un
contrato de leasing.
Puede darse el caso que al término del leasing el tomador no opte por la compra
del bien, retornado este a la empresa de leasing, planteándose si el nuevo contrato que
se celebre constituirá o no un leasing financiero.
a) D e r e c h o d e la e m p r e s a l o c a d o r a .
i) Facultad de fijar las condiciones mínimas del seguro que cubra el bien
arrendado.
b) D e r e c h o d e la a r r e n d a t a r ia .
ii) Exigir la entrega del bien y hacer uso del mismo en las condiciones
convenidas.
iii) Ejercer contra el proveedor las acciones pertinentes derivadas de los vicios
y daños de los bienes. Si bien existe la obligación por parte del fabricante o
proveedor del bien al saneamiento por evicción, vicio oculto, la arrendadora
no responde por ellos, es el arrendatario quien deberá ejercitar las acciones
del caso contra el proveedor o fabricante.
r
630
b) Obligaciones de la arrendataria.
i) Usar y disfrutar el bien según los términos del contrato. En este sentido se
pacta que la arrendataria efectúe en el bien todas las reparaciones
necesarias para conservarlo en estado de servir para el uso al que ha sido
24. Decreto Legislativo 299. Artículo 13.- “La arrendataria, respecto de los bienes que posea en
arrendamiento financiero con empresas dedicadas a esta actividad establecidas en el país,
gozará para los efectos de sus relaciones contractuales con el Estado, empresas de derecho
público, empresas estatales de derecho privado y las empresas sometidas a regímenes
especiales de los derechos y ventajas como si tuviera la condición de propietaria de dichos
bienes, excepto los referentes a la disposición o enajenación definitiva y/o constitución de
gravámenes sobre los mismos.
25. Este aspecto se encuentra declarado en el art. 4 del Dec. Leg. 299: “La locadora mantendrá
la propiedad de dichos bienes hasta la fecha en que surta efecto la opción de compra
ejercida por la arrendataria por el valor pactado”.
26. Decreto Legislativo N° 299. Artículo 6.- “Los bienes materia de arrendamiento financiero
deberán ser cubiertos mediante pólizas contra riesgos susceptibles de afectarlos o destruirlos.
Es derecho ¡rrenunciable de la locadora fijar las condiciones mínimas de dicho seguro.
La arrendataria es responsable del daño que pueda causar el bien, desde el momento que lo
recibe de la locadora”.
Decreto Supremo N° 559-84. Artículo 23.- “Para el efecto a que se refiere el segundo párrafo
del art.6° de la Ley de Arrendamiento Financiero, corresponde a la arrendataria asegurar
obligatoriamente a los bienes materia de arrendamiento financiero contra riesgos de
responsabilidad civil frente a terceros”.
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s )
iv) Responder del daño que pueda causar el bien desde el momento que los
recibe de la empresa locadora.
vii) Permitir que se fijen las placas de identidad sobre el bien en un lugar
visible del equipo y en forma permanente, cuyo objetivo es anunciar a
terceros la titularidad sobre el bien.
b) Compañías de le a sin g espe cia liza d as: las “specialized leasing companies”
aseguran servicios anexos como el m antenimiento y reparación, seguros,
reemplazo del bien, etcétera. Tienen una infraestructura montada y especializada
en ese rubro o tipo de maquinaria.
27. Citado por GARRIDO CORDOVERA, Lidia M. R.: Ob. cit. pág. 69.
28. El artículo 221. (35) de la Ley N° 26702 lo autoriza expresamente, lo que complementa el
artículo 223. (4) al disponer que para tal efecto deberán de constituirse departamentos
separados.
e) Bancos: los que intervienen siempre y cuando el régimen legal de su país los
habilite.
a) COMPRAVENTA
Según este criterio las partes están de acuerdo sobre el bien y el precio,
siendo la voluntad de las mismas celebrar un contrato de compraventa, los
alquileres al sobrepasar el valor del bien, proporciona un beneficio a la sociedad
de leasing. Por otro lado existe la cláusula de compra a favor del usuario.
29. CALEGARI DE GROSSO, Lydia E.: “El Contrato de leasing. Legislación y Jurisprudencia”. Ed.
Abeledo Perrot. Buenos Aires, Argentina. 2001. Págs. 14.
30. CALEGARI DE GROSSO, Lydia E.: Ob. cit. pág. 16.
31. ROLIN, Serge: El leasing. Ed. Pirámides. Madrid.1971. Ob. Cit. pág. 75.
C O N T R A T O S (D o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 633
b) COMPRAVENTA A PLAZOS
c) LOCACIÓN-VENTA
32. Véase MARTORELL- Op. cit., pág. 384, T. I, a propósito del caso “Singer vs. Chagra”.
33. Revista DYNA No. 10, Octubre 1965. Pág.535. Citado por VIDAL BLANCO, Carlos.
634 El Contrato de Leasing l Ulises Montoya Alberti |
Esta figura tiene cierta similitud con el leasing, en razón que en ambos
casos la propiedad de la cosa permanece en poder del dador y del vendedor
(denominados así respectivamente en el leasing y en la compraventa). Además el
pago convenido, que es siempre una suma de dinero, se realiza mediante cuotas
y dentro de un plazo establecido.
e) ARRENDAMIENTO
f) PRÉSTAMO
g) RENTING
Al renting se le ha definido como “el uso de bienes por plazo variable, según
contrato previo, mediante pago de una tasa de utilización, siendo de cuenta del
propietario la conservación del objeto alquilado, pudiendo proporcionar en ciertos
casos los medios humanos necesarios para la explotación, cuyos gastos están
normalmente incluidos en la tasa de alquiler”.34
34. VIDAL BLANCO, Carlos: “Leasing, una Innovación en la Técnica de la Financiación”.- Tesis
Doctoral, pág. 83. Mayo de 1976.Universidad Complutense de Madrid, pág. 147.
35. SEGURADO LORENTE, Juan Luis: “Aspectos reales del leasing en el Convenio de Ottawa de
28 de mayo de 1988 sobre el leasing internacional”. Revista de la Corte Española de Arbitraje.
Madrid. España. 1992.
636 El Contrato de Leasing t Ulises Montoya Alberti
h) MANDATO
i) DEPÓSITO
j) OPCIÓN DE COMPRA
k) FIDUCIARIO
36. Art. 1423 del Código Civil. “Toda opción está sujeta a un plazo máximo de seis meses y
cualquier exceso se reduce a este límite".
638 El Contrato de Cuenta Corriente Bancaria / Hernán Flgueroa Bustamante
l) CONTRATO ATIPICO
Como bien se expresa en estos casos hay un retardo entre realidad vivida
y una relación jurídica, sin embargo en algunos casos por tratarse de figuras que
se encuentran en formación y que se nutren de una realidad económica no es
conveniente regularlos en una ley o código sino hasta que sus lineamientos se
configuren claramente.
m) CONTRATO COMPLEJO
n) CONTRATO MIXTO
37. Leyva Saavedra, José: Tratado de Derecho Privado. Vol. I. “Leasing”. Editorial San Marcos.
Lima. 1998. Ob. cit. pág. 117.
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n , J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 639
El contrato complejo tiene un ámbito mayor que el contrato mixto, toda vez
que puede resultar bien sea de una síntesis de esquemas negociables, o de
elementos no característicos de negocios, en cuanto no idóneos “per se” para
identificar un negocio y para darle fisonomía propia.
38. Decreto Legislativo N° 299. Artículo 1. “Considerase Arrendamiento Financiero, el contrato mercantil
que tiene por objeto la locación de bienes muebles o inmuebles por una empresa locadora”.
39. La resolución de la Sala de Procesos Ejecutivos de fecha 25 de noviembre de 1998 (Exp. N°
24572-98) ha considerado que: “El contrato de arrendamiento financiero faculta a la arrendadora
a demandar por los trámites del proceso ejecutivo el cumplimiento de todas las obligaciones de la
arrendataria pactadas en el contrato y la realización de las garantías otorgadas, incluyendo
aquellas derivadas de su rescisión como es el pago de cantidades acordadas como penalidades
por el resarcimiento de los daños y perjuicios originados por esta parte”. Citado por LEDESMA
NARVAEZ, Marianella. Jurisprudencia actual. T.3. Ed. Gaceta Jurídica. Lima. Año 2000. Pág. 634.
640 El Contrato de Leasing t Ulises Montoya Alberti
a) OPCIÓN DE COMPRA
b) EL VALOR RESIDUAL
40. BORDA, Guillermo A.: Tratado de Derecho Civil. Contratos T. I. Sétima edición actualizada. Ed.
Perrot. Buenos Aires. 1997. pág. 606.
CONTRATOS ¡Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos
Para la legislación peruana la elección del bien, así como del proveedor es
un derecho que le pertenece al futuro arrendatario, así lo señala el art. 5 del Dec.
Leg 29942. Este derecho de la arrendataria es de carácter irrenunciable, el que es
reconocido por la doctrina y legislación comparada, lo que explica y fundamenta,
de acuerdo a Leyva,43 la presencia de las denominadas cláusulas de exoneración
de responsabilidad de la empresa de leasing dentro del contenido del contrato,
cuyo texto ordinariamente reza: «La empresa de leasing queda exonerada de
responsabilidad en lo atinente a los caracteres técnicos, a la demora en la entrega
y a los vicios del bien».
b) PROPUESTA CONTRACTUAL
41. El Código Civil del Perú en su artículo 1382 señala: “La oferta obliga al oferente, si lo contrario
no resulta de los términos de ella, de la naturaleza de la operación o de las circunstancias del
caso”.
42. Decreto Legislativo N° 299. Art. 5.- “Es de derecho irrenunciable de la arrendataria señalar las
especificaciones de los bienes materia del contrato y el proveedor de los mismos, siendo de
su exclusiva responsabilidad que dichos bienes sean los más adecuados al uso que quiera
darles, lo que deberá constar en el contrato”.
43. LEYVA SAAVEDRA, José: Ob. Clt. pág. 211.
44. ESCOBAR GIL, Rodrigo: “El contrato de Leasing Financiero”. 1981. Ed. Temis. pág. 51.
El C a n u ta de l* M b t W¡ ¡ya Alberti i
45. Artículo 1354 del Código Civil. “Las partes pueden determinar libremente el contenido del
contrato, siempre que no sea contrario a norma legal.”
46. GORDILLO ARRIAZA, Eduardo: “Aspectos importantes del “leasing” o arrendamiento
financiero”. Revista Vox Juris. Revista de la Faculta de Derecho de la Universidad San Martín
de Porres. Edición Especial XXXV. Aniversario, pág. 23.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos) \ 643
Para su cálculo se imputa al precio total la porción del canon que corresponda
teniendo en cuenta la amortización del capital, los intereses y gastos.
47. COILLOT, Jacques: “El leasing”. Éd. Mapire S.A. 1974. pág. 150.
48. GUTIERREZ VIGUERA, Manuel: El leasing como institución financiera. A.P.D., 1997 . pág. 86.
644 El Contrato de Leasing í Uhses Montoya A lb erto
10. La identificación del bien, para tal efecto se considera la cláusula que obliga
al arrendatario de colocar y mantener una placa que exprese la propiedad
del bien por parte de la sociedad de leasing.
11. Uso adecuado del bien. La obligación consiste en utilizar el bien de acuerdo
con los términos y condiciones que se establecen en el contrato, los cuales
recogen una serie de garantías en relación al «buen uso» del bien. so Para
ello existen cláusulas que explícitamente incluyen referencias sobre: el
lugar de su emplazamiento, la cantidad de horas de utilización, el derecho
de la sociedad de leasing de inspeccionar en cualquier momento el bien
arrendado y eventualmente el local en donde esté instalado, la obligación
49. La legislación del Uruguay. Ley 16072, considera el descuento racional compuesto sobre las
cuotas no vencidas. Artículo 9°.- Durante el plazo del contrato, no es lícito a la institución
acreditante retirar la cosa del poder del usuario, ni a éste devolverla antes de concluirse el
tiempo convenido, a no ser pagando la totalidad de las cuotas periódicas estipuladas, con el
descuento racional compuesto sobre las cuotas no vencidas
50. Uruguay la Ley 16.072 considera que el usuario debe de usar la cosa como un buen padre de
familia. Artículo 22.- Si el usuario no usare de la cosa como un buen padre de familia,
responderá de los daños y perjuicios, y aun tendrá derecho la institución acreditante para
demandar la rescisión del contrato en caso de un grave y culpable descuido.
Artículo 23.- Lo dispuesto en los dos artículos anteriores no tendrá lugar si el usuario ejerce
la opción de compra pactada para la terminación del contrato y paga las cuotas pendientes y
el precio final, con el descuento racional compuesto previsto en el inciso tercero del artículo
30 de la presente ley.
645
por norma general, del usuario de hacerse cargo de todos los gastos de
conservación, mantenimiento, etc., del material.
12. Algunas legislaciones disponen en forma explícita las cláusulas que debe
de contener el contrato de arrendamiento financiero, como es el caso de
Brasil,51 y España,52
f) EJECUCIÓN
51. Ley 6099.- El art. 5o señala las disposiciones que deberán contener los contratos de
arrendamiento mercantil siendo: a) Plazo del contrato; b) Valor de cada contraprestación por
períodos determinados, no superiores a un semestre; c) Opción de compra o renovación de
contrato, con facultad del arrendatario; d) Precio para opción de compra o criterio para su
fijación, cuando fuera estipulada esta cláusula.
52. En España la Ley 26/1988 de Disciplina e Intervención de las Entidades de Crédito si bien no
establece formalmente un modelo contractual escrito para el leasing, la Orden de 12 de
diciembre de 1989, promulgada en función de dicha ley, dispone en su número T que las
entidades de crédito están obligadas a entregar a sus clientes un ejemplar del documento
contractual que formalice la operación de arrendamiento financiero Según dicha orden, el
contrato debe recoger explícitamente los siguientes datos: Tipo de interés nominal utilizado para
la liquidación de los intereses. Periodicidad de los devengos y sus fechas correspondientes.
Comisiones y gastos repercutibles. Derechos que correspondan a la entidad de crédito en
relación a la eventual alteración de los tipos de interés, de las comisiones o de los gastos
repercutibles. Derechos de cliente en relación al posible reembolso anticipado de la operación,
dándose por sentado que tal indicación no será aplicable cuando no existan esos derechos.
Derechos restantes a ser incluidos en el contrato de acuerdo con la normativa específica del
leasing, tales como, por ejemplo, explicitar de forma diferenciada las partes que corresponden
a la recuperación del coste del bien y a la carga financiera. Se incluirá también en el contrato,
con una finalidad informativa, la equivalencia entre la suma de cargas financieras, comisiones
y gastos repercutibles, y un tipo efectivo anual postpagable, conocido comúnmente por las
siglas TAE, con indicación de la formula utilizada para obtener tal equivalencia.
53. Decreto Legislativo N° 299. Art. 8.- “El contrato de arrendamiento financiero se celebrará
mediante escritura pública, la cual podrá inscribirse a pedido de la locadora, en la ficha o
partida donde se encuentre inscrita la arrendataria”.
54. El Reglamento de la mencionada norma, Decreto Supremo N° 559-84-EFC, en este sentido
precisa en su art. 22 que: “La vigencia del contrato de arrendamiento financiero se inicia en
la fecha que ha sido contractualmente convenida por las partes dentro de las posibilidades a
que se refiere el art. 2 del Decreto Legislativo N° 299.
646
Una vez cumplida esta instancia, se puede decir que se inicia la ejecución
del contrato de arrendamiento.
55. MARTIN OVIEDO, José María: “El leasing ante el Derecho Español”. Ed. de Derecho Financiero.
Madrid.1972. pág. 52.
56. COILLOT, Jacques: Ob. cit. pág. 170.
57. Decreto Legislativo N° 299. Art. 7.- “El plazo del contrato de arrendamiento financiero será
fijado por las partes, las que podrán pactar penalidades por el incumplimiento del mismo”.
¡CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 647
En relación con el plazo Lavalle y Pinto señalan: “La naturaleza del leasing
hace que la duración del contrato se aproxime a la vida útil estimada para el bien
en el momento de su celebración y que esto es así porque el objeto del contrato
es la financiación del uso y goce de un equipo, y tal uso y goce no puede concebirse
más allá del lapso de vida útil del bien. Cabe agregar que la “vida útil” de un
equipo, en el momento de celebrarse el contrato de leasing, que es una hipótesis,
puede no cumplirse en la práctica, resultando que después esa vida se extiende
o se acorta por diversos motivos.”58
Se puede decir que el plazo de duración del contrato esta vinculado a tres
factores:
1. Al cumplirse el plazo.
3. Por la sustitución del bien. Se presenta cuando se sustituye el bien por otro
mas moderno antes de la terminación del plazo contractual.
58. LAVALLE, Jorge E. y PINTO, Carlos A.: “El leasing. Ed. Astrea. Buenos Aires. Argentina. 1982.
pág. 107 y 108.
648 B Contrato de Leasing / Ufíses Montoya A lb ¡ ñ Í\
5. Por afectación de la propiedad del bien, como en los casos de: confiscación,
embargo, ejecución de garantías o cualquier otra circunstancia que afecte
la propiedad.
59. En el caso del Perú el Dec. Leg. 299 en su art. 9, párrafo 2o, faculta a la empresa de leasing
a resolver el contrato por falta de pago de dos o más cuotas consecutivas o el atraso del
pago en más de dos meses, en este sentido esta facultad operara aunque la misma no se
haya mencionado en el contrato pactado, a menos que hubiese en el contrato una estipulación
diferente.
60. MARTÍN OVIEDO, José M.: Ob. cit. pág. 218.
CONTRATOS 'O .'!'" ' t Lvai^.h u'i Jjr-jQ'udo'Vui i MuJi-ms' 649
El “Full pay out leasing”, concierne a que la empresa de leasing con los pagos
efectuados por la empresa usuaria, como contraprestación, cubre íntegramente la
inversión efectuada en la adquisición del bien o bienes más, los gastos operativos,
intereses y un beneficio por el capital empleado en ella.
En cuanto al “Non full pay out leasing”, en esta modalidad la empresa de leasing,
percibe un cantidad menor al costo del bien, quedando al término del contrato un valor
residual por cubrir. El bien será recuperado por la empresa de leasing, pudiendo venderlo
o celebrar un nuevo contrato de leasing.
a) El “Cross border leasing”,en este caso intervienen partes que proceden de diversos
países, como puede ser la empresa proveedora que proviene de un determinado
país, la empresa de leasing que opera en un país diferente, y la usuaria que utiliza
el bien en un tercer país.
Por su plazo de duración el leasing puede ser a corto o largo plazo, para tal efecto
se tendrá en cuenta la vida útil del bien y la naturaleza del mismo.
1. Sale and Lease Bank. El Sale and Lease Back vendría a ser una venta del bien y
su arrendamiento de regreso, lo que se busca más que una renovación de equipos
es disponer de circulante, en este sentido la empresa conviene con una entidad,
generalm ente financiera en enajenarle sus m aquinarias, las que en forma
inmediata le son concedidas en uso.
3. Self leasing. La modalidad del self leasing, se presenta cuando las empresas de
leasing, usuaria y el fabricante o proveedora, pertenecen a un mismo grupo
económico o empresarial, actuando la fabricante o vendedora como empresa
financiera.
recursos para la adquisición del bien se comparten los riesgos en el caso que
suceda algún inconveniente o incumplimiento del contrato de leasing con el
usuario.
b) Adquisición del derecho de propiedad del terreno sobre el cual está instalado el
edificio.
64. La enfiteusis, es la cesión por determinado tiempo generalmente largo del dominio útil de un
inmueble mediante el pago de un canon a quien hace la cesión, el cual conserva el dominio
directo sobre el predio.
65. PACE, Gilbert: La convention de credit-bail ¡nmobilier. la ed., París, 1974.
El Contrato de Leasing / Ulises Montoya Alberti
En cuanto al problema que se presenta por la falta de pago de las cuotas y las
consecuencias que de este hecho se derivan la Ley No. 25.248 de Argentina (Contrato
de Leasing). Publicada en B.O.: 14-06-2000), distingue las consecuencias según el
número de cuotas que se hayan cancelado.66
67. Argentina. Ley 25.248. Art.8. Segundo párrafo.- A los efectos de la oponibilidad frente a
terceros, el contrato debe inscribirse en el registro que corresponda según la naturaleza de
la cosa que constituye su objeto.
Uruguay. Ley N° 16.072. Artículo 30. Ultimo párrafo.- “Los embargos trabados a la institución
acreditante posteriores a la inscripción al contrato de crédito de uso, no obstarán a la
compraventa ni a la transferencia de la propiedad a favor del usuario, debiéndose descartar
dichos embargos”.
68. Ver nota 77.
69. Argentina. Ley 25.248. Art.11.2do párrafo.- “En caso de concurso o quiebra del dador, el
contrato continuará por el plazo convenido, pudiendo el tomador ejercer la opción de compra
en el tiempo previsto.
En el caso de quiebra del tomador, dentro de los sesenta (60) días de decretada, el síndico
puede optar entre continuar el contrato en las condiciones pactadas o resolverlo. En el
concurso preventivo, el deudor puede optar por continuar el contrato o resolverlo, en los
plazos y mediante los trámites previstos en el artículo 20 de la ley 24.522. Pasado este plazo
sin que haya ejercido la opción, el contrato se considerará resuelto de pleno derecho...”.
El Contrato de Leasing / Ulises Montoya Alberti \
XVIII.ASPECTO S TRIBUTARIOS
Impuesto a la Renta.
Depreciación.
Los bienes del activo fijo serán materia de depreciación, lo que esta
relacionada a los años de su vida útil, la consecuencia de la depreciación es una
disminución de la renta afecta al impuesto a la renta.
Los ingresos que se perciben por concepto de alquiler del bien, constituyen
pagos por servicios los que están gravados por el Impuesto General a las Ventas.73
72. ORTUZAR SOLAR, Antonio: “El Contrato de Leasing”. Editorial Jurídica de Chile. Chile. 1995. pág. 117.
73. En el caso del Perú el Decreto Legislativo N° 821, Ley del Impuesto General a las Ventas e
Impuesto Selectivo al Consumo dispone en su artículo 3° lo siguiente: “Para efecto de la
aplicación del Impuesto se entiende por: .. c) Servicios: Toda acción o prestación que una
persona realiza para otra y por la cual percibe una retribución o ingreso que se considera
renta de tercera categoría para los efectos del Impuesto a la Renta, aún cuando no éste
afecto a este último tributo; incluidos el arrendamiento de bienes muebles e inmuebles y el
arrendamiento financiero”.
656 El Contrato de Leasing / Ulises Montoya Alberti
Programa de Reinversión.
74. Artículo 18 del Decreto Legislativo N° 299, cuya vigencia ha sido restituida por el artículo 3o
del Decreto Legislativo N° 625.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y Modelos) 657
X IX . TRATAMIENTO CONTABLE
En lo que se refiere a la forma de contabilizar la operación de leasing, se advierte
la posición de quienes sostienen que el arrendatario debe de contabilizarlo considerando
la naturaleza jurídica del contrato, que evidencia que al arrendador le pertenece el bien
y al arrendatario el uso y disfrute del mismo. Esta posición es seguida por los países de
Europa Continental y gran parte de América Latina.
Mientras en Estados Unidos consideran que en el balance debe reflejarse la
naturaleza económica de la operación y por lo tanto el bien materia del contrato se debe
anotar en el activo del arrendatario.
Esta divergencia señala Ortuzar75, tiene una razón de fondo histórico - jurídica
que radica en la naturaleza misma de la institución del leasing.
El leasing se origina en el medio anglosajón, dentro del denominado Common
Law, en cambio en los países de Europa y América Latina se adopta el leasing bajo sus
propias normas jurídicas, que provienen del Código de Napoleón y se remontan al
derecho romano.
Sobre el particular se ha manifestado que: “En los sistemas anglosajones los
arrendamientos financieros (financiaI leasing) son asimilados a las ventas a plazo,
hasta el punto de que en Estados Unidos e Inglaterra se califican como “arrendamientos
tipo venta" (sales-type-leases), “alquiler compra” (lease-purchase, hire-purchase), o
“arrendamiento de pago integro” (full pay-out-leases).
De esta forma, se sostiene que el arrendamiento financiero es, en sustancia, una
venta con pago diferido del precio, y que la propiedad se transfiere al arrendatario en el
momento de contratar. Por ello, aunque el arrendador tenga a su nombre la propiedad
del bien, se considera que durante el plazo de arrendamiento sólo tiene un interés de
garantía (security interest).”77
Las norm as de co n ta b ilid a d d ictad as en N orte am érica responden a lo
anteriormente expuesto, es así que las disposiciones contenidas en el FASB 13, que
sirvieron de base a la Norma Internacional que se conoce como IAS o NIC N°17, la
empresa de leasing no deberá registrar el bien en su balance, debiendo sólo anotarse
los pagos que por concepto de arrendamiento perciba hasta la finalización del contrato.
En lo que concierne al aspecto contable, en el Perú la Ley General de Sociedad,
vigente a partir del 1 de Enero de 1988 establece que los estados financieros se preparan
y presentan de conformidad con las disposiciones legales sobre la materia y según los
Principios de Contabilidad Generalmente Aceptados en el país (PCGA). En este sentido
Por otra parte la Ley sanciona (ley penal en blanco) a quien valiéndose de
Información o documentación falsa sobre su situación económica y financiera, obtiene
de una empresa del sistema financiero, una o más operaciones de crédito, así como de
arrendamiento financiero, aplicándose lo dispuesto en el primer párrafo del artículo 247
del Código Penal.80
En lo que concierne a la calificación de riesgo de las operaciones bancarias, se
considera a las operaciones de arrendamiento financiero, las que pueden ir de riesgo
cero en caso que se trate de operaciones con el Gobierno Central y el Banco Central de
Reserva, hasta un riesgo del 100%.81
80. Código Penal Peruano. Art. 247°. “El usuario de una institución bancaria, financiera u otra que
opera con fondos del público que, proporcionando información o documentación falsa o
mediante engaño obtiene créditos directos o Indirectos u otro tipo de financiación, será
reprimido con pena privativa de libertad no menor de uno ni mayor de cuatro años y con ciento
ochenta a trescientos sesenticinco días - multa.
Si como consecuencia del crédito así obteniendo, la Superintendencia de Banca y Seguros
resuelve la intervención o liquidación de la institución financiera, será reprimido con pena
privativa de libertad no menos de cuatro ni mayor de diez años y con trescientos sesenticinco
a setecientos treinta días-multa.
Los accionistas, asociados, directores, gerentes y funcionarios de la institución que cooperen
en la ejecución del delito, serán reprimidos con las mismas penas señaladas en el párrafo
anterior y, además, con inhabilitación conforme al artículo 36, incisos 1, 2 y 4".
81. Artículos 189 a 193 de la LGB.
82. Ley N° 26072 Disposiciones Finales y Transitorias. Décimo Octava: “Los Instrumentos que se
emitan para fines de titulización y de arrendamiento financiero, por su naturaleza no son
susceptibles de redención anticipada, y son materia de negociación en el mercado secundario”.
660 El Contrato de Leasing / Ulises Montoya Alberti
b) El acuerdo que se celebra entre las partes donde se conviene un plazo que tiene
en cuenta el periodo de la amortización económica del equipo de que se trata,
quedando así de manifiesto que la renta se paga por el uso del bien, obedeciendo
la amortización a la inversión hecha por el propietario del bien.
Alrededor de estos dos puntos los autores, resolvieron construir un marco legal
especial para el que denominaron tipo “sui generis de leasing”, que prescindiera de las
figuras jurídicas existentes y dejando al mismo tiempo a las partes amplia facultad para
convenir autónomamente sus relaciones reciprocas. Los autores actuaron sobre la
base de que era conveniente clarificar un número limitado de puntos fundamentales
que fueran los que constituían la naturaleza atípica del leasing financiero, en lugar de
buscar el obtener una modificación de todos los aspectos legales del tema, ya que,
obviamente, mientras mas se penetraba en detalles había mas posibilidad de encontrar
dificultades que tendrían los países con diferentes sistemas jurídicos que deseaban
aplicar las nuevas normas.86
Se tomo la decisión para la preparación de las normas que estas se limitarían al
ámbito del leasing financiero. La razón es que el leasing operativo no muestra las
características atípicas del financiero.
La Convención establece las condiciones que debe de cumplir un contrato de
leasing para que se le considere de carácter internacional y por lo tanto que las
disposiciones de la Convención le sean aplicables.87
Respecto a los bienes que pueden ser materia de leasing según la Convención
se encuentran los “equipos de planta”, “bienes de capital” u otros equipos, con lo que
excluye los bienes raíces.88 Esta exclusión se debió a que se estim o que las
transacciones sobre estos bienes tenían una incidencia limitada si se las consideraba
a un nivel internacional y a que, por otra parte se preveían dificultades para establecer
normas adecuadas que unificasen en un mismo texto los principios de la legislación
referente a los bienes raíces y de la propiedad personal.
La Convención consta de veinticinco artículos contenidos en tres capítulos. El
primero se ocupa de su ámbito de aplicación y disposiciones generales, comprendiendo
6 artículos que delimitan la extensión substantiva y geográfica de las normas.
El Capitulo II en sus artículos 7 al 14 concierne a la parte principal de las reglas
uniformes, especificando los derechos y obligaciones de las partes de la transacción
financiera del leasing, en lo que respecta a los derechos y obligaciones de las partes entre
sí y las referentes a la relación con los derechos y obligaciones de las partes con terceros.
El Capítulo III se refiere a las Disposiciones Finales, las que tratan de las normas
que son materias usuales en las Convenciones Internacionales, como la ratificación y
acceso de los Estados a la Convención, la incorporación, fecha de vigencia, reglas
sobre su aplicación, exclusión de reservas, vigencia de la Convención con relación a los
contratos, denuncia de la Convención, etc.
En particular se puede mencionar el artículo 1.3°,que dispone que es optativo que
el leasing vaya acompañado por opción de compra, tenga o no finalidad traslaticia.
El art. 5.1, permite la inaplicabilidad del Convenio cuando las tres partes de la
operación compleja de leasing (contrato de suministro y contrato de leasing) así lo han
dispuesto. El descarte del Convenio por las partes, señala Sánchez, Lorenzo^ implica,8 9
(a) aquellos Estados y el Estado en el cual el proveedor tiene su lugar de negocio, sean
Estados Contratantes, o
(b) que tanto el contrato de suministro como el de leasing sean regidos por la ley de un
Estado Contratante
2. La referencia dada en esta Convención por una de las partes respecto a su lugar de
negocio significara, si es que tiene más de uno, aquel lugar de negocio que este más
estrechamente relacionado con el contrato relevante y con su ejecución, teniendo en
cuenta las circunstancias conocidas o contempladas por las partes en cualquiera época
antes o al término de ese contrato.
88. A rtíc u lo 1
1. Esta Convención regula una transacción de leasing financiero tal como se describe en el
párrafo 2, en la cual una de las partes (el arrendador),
(a) de acuerdo con las especificaciones de otra de las partes (el arrendatario), acepta
un contrato (el contrato de suministro) con un tercero (el proveedor), según el cual
el arrendador adquiere equipos de una planta, bienes de capital u otros equipos (el
equipo) en los términos aprobados por el arrendatario y que convengan a sus
intereses, y
(b) celebra un contrato (el contrato de leasing) con el arrendatario, otorgando al
arrendatario el derecho de usar el equipo a cambio del pago de una renta.
89. SANCHEZ, Lorenzo: “Aspectos reales del leasing internacional”. En Revista de la Corte
Española de Arbitraje. 1982. pág. 73.
C O N T R A T O S ( D o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 663
- Decreto Legislativo No. 644 del 4 de julio de 1991, que regula los contratos
de leasing de buques de bandera extranjera (art. 7).
2. REQUISITOS
92. Decreto Legislativo N° 299. Artículo 18.- “Para los efectos tributarios los bienes objeto de
arrendamiento financiero se considera activos fijos y se depreciaran durante el plazo del
contrato, siendo el plazo mínimo de depreciación 3 años”.
C O W T W A T O S iD o c > r'ii» . L rg is M c m n . J u n s p r u a s n c d y 665
93. Código Civil. Art. 144.- “Cuando la ley impone una forma y no sanciona con nulidad su
inobservancia, constituye sólo un medio de prueba de la existencia del acto”.
Art. 1352.- “Los contratos se perfeccionan mediante el consentimiento de las partes, excepto
aquellos que, además, deben observar la forma señalada por la ley bajo sanción de nulidad”.
Art. 1412.- “SI por mandato de la ley o por convenio debe otorgarse escritura pública o
cualquier otro requisito que no revista la forma solemne prescrita legalmente o la convenida
por las partes por escrito bajo sanción de nulidad, éstas pueden compelerse recíprocamente
a llenar la formalidad requerida.
La pretensión se tramita como proceso sumarísimo, salvo que el título de cuya formalidad se
trata tenga la calidad de ejecutivo, en cuyo caso se sigue el trámite del proceso
correspondiente. (Párrafo incorporado por la 1ra. Dlsp. Modificatoria del Código Procesal
Civil., Decreto Legislativo N° 768 (04.03.92).
94. La resolución de la Sala de Procesos Abreviados y de Conocimiento de fecha 9 de noviembre
de 1998 (Exp. N° 56030-97) ha considerado: “Que en cuanto a la formalidad del contrato,
cierto es que el artículo 8° del Decreto Legislativo N° 229 prevé que éste debe ser celebrado
por escritura pública e Inscrito en el registro público, aunque también es cierto que se
constituye un documento de fecha cierta donde hay expresión de voluntad y que no se ha
elegido la vía procedimental ejecutiva, como faculta su artículo 10°, sino la de conocimiento”.
Citado por LEDESMA NARVAEZ, Marlanella. Ob. cit. Pág. 632.
95. Decreto Legislativo N° 299. Artículo 11.- “Los bienes dados en arrendamiento no son
susceptibles de embargo, afectación ni gravamen por mandato administrativo o judicial en
contra del arrendatario.”
96. Decreto Legislativo N° 299. Artículo 12.- "Asiste a la locataria el derecho de exigir la Inmediata
restitución del bien materia de arrendamiento financiero, cuando la arrendataria haya incurrido
en una causal de resolución prevista en el contrato.
666 El Contrato de Leasing / Ulises Montoya Alberti
iii) Resolución del contrato por falta de pago de dos o más cuotas o atraso en
el pago de dos meses (Art.9. Dec. Leg. N° 299)9?
1. VENTAJAS
Para el usuario:
a) Constituye un negocio.
97. Decreto Legislativo N° 299. Artículo 9.- "Las cuotas periódicas a abonarse por la arrendataria
podrán ser pactadas en moneda nacional o extranjera, y ser fijas o variables y reajustables.
Sin perjuicio de ios correspondientes intereses, en el contrato se podrán pactar penalidades
por mora en el pago de cuotas. La falta de pago de dos o más cuotas consecutivas, o el
atraso de más de dos meses, facultará a la locadora a resolver el contrato”.
667
2. DESVENTAJAS
Para el usuario:
Para la empresa:
X X V I. LEGISLACIÓN COMPARADA
En varios países el arrendam iento financiero se encuentra normado por
disposiciones específicas. A continuación se mencionan algunas de ellas.
98. La Cámara de Senadores en mayo del 2000, aprobó por unanimidad, la ley de leasing para
modernizar la legislación vigente. El leasing ha resultado casi impracticable por su elevada
carga impositiva. La Ley aprobada disminuye la presión Impositiva sobre el tenedor que, en
lugar de abonar el IVA al comienzo de la operación, puede financiarlo en cuotas.
99. Ver nota 9.
100. Ver nota 67.
101. Ver nota 64.
102. Ver nota 49
103. Ver nota 10.
El Contrato de Leasing / Uhses Montoya Alberti I
bienes que pueden ser materia de leasing,104 claúsulas que deben de contener
los contratos,105 etc.
MODALIDAD
OBJETO
PLAZO
QUINTO.- El plazo del Arrendamiento Financiero es d e ....... meses forzosos para
ambas partes, cuyo término comenzará a computarse a partir del día en que EL
ARRENDATARIO inicie el pago de la merced conductiva, fecha que deberá, según la Ley
vigente, coincidir con la entrega de los bienes a EL ARRENDATARIO o con el primer
desembolso total o parcial por parte de EL BANCO a EL PROVEEDOR, lo que ocurra
primero.
SEXTO.- Este contrato, tiene el carácter de IRREVOCABLE en este sentido no
podrá concluir por ninguna razón antes del vencimiento del plazo previsto, con la única
excepción de que EL BANCO lo declare resuelto por las causales que se establecen en
la cláusula.
SÉPTIMO.-La cuota mensual por el arrendamiento, pactada de común acuerdo
es de U S $ ....... deberá ser pagada por adelantado en cualquiera de las Agencias de EL
BANCO o debitada en la cuenta corriente de EL ARRENDATARIO.
OCTAVO.- Los vencimientos de las cuotas no admiten períodos de gracia. Por
tanto, la fecha de vencimiento es también de último pago. Las cuotas mensuales de
arrendamiento serán pagadas por EL ARRENDATARIO en concordancia con las fechas
que se establece en el Calendario de Vencimiento, que el Banco dará a la firma del
presente Contrato.
EL ARRENDATARIO no podrá solicitar reducción en el monto de la cuota de
arrendamiento ni suspender su pago por la no utilización de los bienes, cualquiera que
se su causa (deterioro o averías).
OPCIÓN DE COMPRA
DÉCIMO.-A solicitud de EL ARRENDATARIO, EL BANCO otorgará a su favor la
opción de compra de los bienes materia del presente Contrato; ejercitable en cualquier
momento y efectiva al vencimiento del Contrato por el precio equivalente al % del monto
total de su costo de adquisición, esto es, el valor residual de dichos bienes al vencimiento
del plazo del Contrato.
La opción de compra sólo podrá ser ejercitada globalmente, o sea, por toda la
materia de este contrato.
CONTRATOS iDorlnna L'.'gis’.u itm 671
MANTENIMIENTO Y REPARACIONES
SEGUROS E INDEMNIZACIONES
DÉCIMO SEXTO.- Para que se cuenten con las mejores condiciones de cobertura
frente a eventuales daños sobre los bienes, ellos deberá estar cubiertos por seguros
específicos y obligatorios durante todo el plazo de vigencia del presente Contrato.
Dicha cobertura de seguro deberá ser efectuada por los montos, límites y condiciones
a plena satisfacción de EL BANCO en una com pañía aseguradora legalm ente
constituida en el país.
EL ARRENDATARIO autoriza a EL BANCO, a controlar los seguros, en donde
constará que EL BANCO, es el único beneficiario de los mismos siendo derivados de la
suscripción de la pólizas de seguros.
DÉCIMO SEPTIMO.- En caso de que EL BANCO no asuma directamente la
suscripción de las pólizas de seguro, EL ARRENDATARIO queda en la obligación de
contratar los seguros del presente contrato, siendo todos los gastos recurrentes por su
cuenta, entregando a EL BANCO el original de la póliza o Endoso de Seguro.
Si ocurriese algún siniestro, EL BANCO tendrá derecho exclusivo a recibir toda o
cualquier indemnización a pagarse por la compañía aseguradora.
EL ARRENDATARIO será responsable por el resarcimiento a EL BANCO de
cualquier pérdida no cubierta por el seguro.
INSPECCIÓN
DÉCIMO OCTAVO.- EL ARRENDATARIO está obligado a que EL BANCO en
cualquier momento pueda inspeccionar los bienes arrendados, verificando que se
cumplan las condiciones establecidas en el presente contrato sobre garantías,
mantenimiento, uso, estado de conservación y funcionamiento.
DOMICILIO
VIGÉSIMO TERCERO.- Para los efectos de este Contrato, ELARRENDATARIO
se somete expresamente a la competencia de los Jueces de ........... señala como
domicilio el indicado en la introducción de este Contrato donde, en general, se le
harán todas las citaciones y notificaciones judiciales y extrajudiciales a que hubiere
lugar.
Cualquier variación de domicilio se hará saber a EL BANCO, mediante carta
notarial con indicación del nuevo domicilio siempre dentro de esta ciudad.
Todas las comunicaciones y avisos entre las partes deberán ser hechas por
escrito, siendo las firmas debidamente autorizadas.
GASTOS DE FORMALIZACIÓN
DÉCIMO CUARTO.- Todos los gastos que originen el otorgamiento de la escritura
pública y los correspondientes a los contratos colaterales que el presente Arrendamiento
Financiero originen, será de cuenta y cargo de ELARRENDATARIO, inclusive los que se
deriven de la obtención de un testimonio para EL BANCO.
En e fe cto de lo a n te rio r las p a rte s firm a n el p re se n te c o n tra to de
ARRENDAMIENTO FINANCIERO, suscribiendo el presente documento, a lo s ..... del
m e s .......d e ....... ciudad del 200......
ARRENDADOR ARRENDATARIO
El Contrato de Leasing / Ulises Montoya
J URISPRUDEN CIA
L e a s in g (A r r e n d a m ie n t o F in a n c ie r o ): C o n tr a to C o m p le jo y
A u tó no m o
L e a s in g : M é r it o E j e c u t iv o í *)
CASACIÓN 154-99
Fecha: 25 de junio de 1999
Publicada en El Peruano el 28/9/99.
“(...) Primero.- Que, el contrato de arrendamiento financiero se rige por las reglas
del D.Leg N° 299 el que en su Artículo 10° concede mérito ejecutivo al testimonio de la
escritura pública correspondiente para cobrar el saldo del arrendamiento adeudado, y
cuyo Artículo 12°, permite exigir, copulativamente, la devolución del bien entregado (...).
Sétimo.- Que, en el caso de autos, la sentencia de vista reconoce mérito ejecutivo
al testimonio de la escritura pública de arrendamiento financiero celebrado entre las
partes, en virtud de lo dispuesto en el Artículo 10° del D.Leg N° 299, pero lo limita en
cuanto a la restitución del tracto camión, en cambio desestima la ejecución al negarle
mérito ejecutivo a la liquidación presentada por la actora, pues es una expresión unilateral
que no califica como título ejecutivo. (...)
Décimo.- Que, el D.Leg N° 299 se viene aplicando desde la fecha de su vigencia,
en el año de mil novecientos ochenticuatro, y los testimonios de las escrituras públicas,
celebradas con arreglo a Ley, fueron suficientes para despachar ejecución, para el
pago del saldo de arrendamientos adeudados y la devolución del bien, sin necesidad
de que se le acompañe ninguna liquidación, lo que se ratifica por el Artículo 24° del D.S.
N° 559-804-EFC del 28 de diciembre de 1984
(*) Fuente: CD Gaceta Jurídica -2000 también se publicó en el Tomo N° 17 de Diálogo con la
Jurisprudencia
676 El Contrato de Leasing / Ulises Montoya Alberti
L e a s in g : D e v o l u c ió n d e l b ie n d a d o e n L e a s in g , v ía e j e c u t iv a
CAS. N° 3736-2001
CHIMBOTE
Lima, 23 de abril del 2004,
Publicada en El Peruano, 30/05/2005.
INTRODUCCIÓN
El excesivo endeudamiento de los países en desarrollo a fines de la década de
los años setenta del siglo pasado, limitó su capacidad para la obtención de recursos en
los mercados de capitales destinados a financiar la ejecución de proyectos a cargo del
Estado. Ante esta situación surgen nuevos esquemas financiero a efecto de canalizar
recursos a proyectos productivos, poniéndose énfasis en una mejor garantía de pago, y
una mayor participación de la actividad privada en sectores que anteriormente estaban
a cargo del Estado.
Entre .los factores que han permitido esta nueva forma de financiamiento señala
Barbiert se encuentran: a) la necesidad de los gobiernos de reducir el endeudamiento (*)
(*) Abogado y economista por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Doctor en Derecho y
Ciencias Políticas. Ex Decano y actual Catedrático principal de la Facultad de Derecho de la
UNMSM. Ex Decano del Ilustre Colegio de Abogados de Lima y del Colegio de Economistas del
Perú. Miembro del Jurado Nacional de Elecciones. Autor de numerosos libros de Derecho Comercial.
1. BARBIER, Eduardo: “Contratación Bancaria. 2. Empresas”. Ed. Astrea. Bs. As. 2002, pág. 202.
678
del sector público y el déficit fiscal; b) la reducción drástica de los recursos destinados
a la asistencia a los países en vías de desarrollo, y c) la existencia de una creciente
desconfianza en la eficiencia de gestión del sector público en la industria y los servicios.
El project finance aparece como una alternativa de financiamiento de proyectos
de inversión, basándose en el rendimiento económico del proyecto, de allí que se requiera
que la actividad sea rentable para generar los recursos que permitan el repago del
crédito, diferenciándose del financiamiento para el desarrollo de proyectos de inversión
donde el pago depende del patrimonio del prestatario. El aspecto sustancial en el
project finance son los ingresos generados por el proyecto.
Desde el punto de vista del país receptor el project finance tiene la ventaja de
preservar el acceso a los mercados internacionales de capitales por no usarse su
crédito en estos mercados, y no existir garantía soberana en relación con la financiación
que se obtiene.
El esquema del project finance esta destinado a financiar la ejecución de proyectos
que requieren sumas importantes para su desarrollo, como es el caso de plantas
eléctricas, gasoductos, oleoductos, vías de comunicación, explotaciones mineras, etc,
pudiendo citarse entre estos el túnel bajo el Canal de la Mancha, el nuevo puente sobre
el Bosforo, el puerto de Tokio, la extensión de los subterráneos del Bangkok, y de Singapur,
las centrales eléctricas de Turquía, Pakistán y Malasia, la línea férrea de alta velocidad
del Estado de Florida, etc.
Entre los aspectos de interés de este esquema para las instituciones financieras,
en particular los bancos comerciales privados es el aislamiento de los prestamistas de
las condiciones del país el cual de otra manera podría inhibirlos de participar en el
proyecto.
1. DEFINICIÓN
El término project finance, señala Rendell2 tiene varios significados. Para algunos
es prestar para un proyecto donde los prestamistas para otorgar el crédito consideran la
capacidad crediticia de uno o más prestatarios. Dentro de este contexto, el suceso o
fracaso del proyecto es importante pero no decisivo para el prestamista debido a que
los prestatarios tienen otros activos y operaciones comerciales con las cuales puede
pagar la deuda.
En un nivel diferente continúa, project finance significa el préstamo para un proyecto
donde el prestarlo se ha establecido con el único propósito de financiar y operar un
proyecto determinado, sin tener ningún otro activo. Es así que en un project finance puro,
los prestamistas son pagados solamente de los ingresos generados por el proyecto y
la garantía son los activos del proyecto, sin embargo en la práctica desde que los
prestamistas no esperan que su capital sea de riesgo, requieren mayores garantía de
repago más allá del éxito o fracaso del proyecto.
En este sentido el término project finance, se usa generalmente para referirse a
una estructura financiera en la cual la deuda, el capital de la empresa, y otras fuentes
2. ETAPAS
Los recursos que se requieren para la ejecución del proyecto, dada su envergadura
son proporcionados por entidades financieras, requiriéndose previamente un análisis
particular de la factibilidad del proyecto en razón que los recursos que se generen
constituyen la fuente para el pago del financiamiento otorgado.
Se puede distinguir una primera etapa, de carácter preparatorio, la que tiene por
finalidad demostrar que el proyecto es viable, a efectos de interesar a las instituciones
financiera para que el otorgamiento de los recursos necesarios, para tal fin al proyecto
se le evalúa considerando aspectos generales que conciernen al país como situación:
macroeconómica, política, social, financiera, legislación aplicable, seguridad jurídica;
así como los aspectos que en particular conciernen al proyecto, como: su viabilidad,
aspecto técnico, flujo de fondos, costos, utilidades, inversión requerida, posibles fuentes
de financiamiento, protección del medio ambiente.
La segunda etapa comprende la negociación del contrato de préstamo, en la que
se requiere la coordinar de este con otros contratos a celebrarse para materializar el
3. The Law and Business of International Project Finance. Scott L. Hoffman. 2001. http://.
member.aol.com/projectFin/what.htm.
4. Paolantonio, Martín E.: “Operaciones financieras internacionales”. Ed. Rubinzal.Culzoni. 1997.
Bs.As., pág. 263.
5. «Project Finance».- Euromoney. Agosto 1988. Suplemento. Euromoney Pubiicaction. Londres,
pág. 2.
6. «Project Finance».- Euromoney. Oecember 1990. Suplemento. Euromoney Pubiicaction.
Londres, pág. 10.
680 El Contrata de "Project Fifiance / Ulises Montoya Aíbertí
project fínance tales como los contratos de: concesión, ejecución de obra, suministro de
equipos, compra de los productos o servicios proveniente del proyecto, cesión de los
recursos en beneficio de los prestamistas. Estos acuerdos o contratos deberán concluirse
a satisfacción de estos, a fin de suscribir el contrato de crédito, o proceder al desembolso
del préstamo, ya que los mismos constituyen condiciones precedentes del contrato de
préstamo.
7. NORTON, Richard: “Cash flow and carry project fínance” Trade Finance & Banker Internacional.
September. 1989, pág. 35.
CONTRATOS 'Oo tr.r* L ^ l a ^ J w jp ru U m
4. RIESGOS
Como en toda financiación existen factores que pueden constituir riesgos para el
cumplimiento del contrato de préstamo celebrado. Los riesgos en esta clase de contratos
son también aplicables al project finance, pero además se presentan riesgos de carácter
particular que esta relacionado con esta clase de financiamiento.
Igualmente las variaciones de los precios de los productos o servicios que genera
el proyecto puede alterar el flujo de fondos originalmente previsto, para minimizar este
riesgo en los contratos de venta alargo se incluye precios de soporte, o sea precios
mínimos de compra de la producción del proyecto.
Por otra parte en el caso de un project finance bajo el esquema del BOT habrá
siempre un respaldo del gobierno aunque este es limitado. Puede ocurrir que la empresa
concesionaria no cumpla con la terminación del proyecto o que no lo opere en forma
apropiada, lo que puede dar lugar a que el gobierno puede dar por terminado el acuerdo
de concesión, asumiendo la dirección del proyecto o encargándosele a una nueva
empresa concesionaria.
Por una parte se produce un flujo de fondos de los prestamistas a los prestatarios
destinados a la ejecución del proyecto, y por la otra la venta de los bienes y servicios que
el proyecto genera, cuyos recursos se destinan a cancelar la deuda.
A efecto de garantizar que los recursos generados por el proyecto se destinen al
pago del financiam iento, se establece una cuenta en fideicom iso en la que los
compradores depositan los recursos que genere el proyecto, procediendo con cargo a
ella a cancelar las cuotas del financiamiento, y de existir saldo disponible el mismo se
transfiere al proyecto.
6. PARTICIPANTES
Entre los participantes que intervienen en el contrato de project finance en forma
directa o indirecta se puede mencionar a los:
682 El Contrato de Project Finance / Ulises Montoya Alberti
a) PATROCINADORES
Los patrocinadores son quienes asumen la iniciativa del proyecto son los
patrocinadores, se encargan de organizar y promover el proyecto, para tal efecto
constituyen una sociedad (project company), que los vinculan la que tiene a su
cargo la obtención de las autorizaciones gubernamentales que se requieran y de
obtener los recursos financieros necesarios para la ejecución del proyecto.
En cuanto ala creación de una entidad ad hoc, propietaria del proyecto, esta
se identifica con la idea del «vehículo» del proyecto, el cual, además, suele ser el
prestado del financiamientoS. Esta entidad asumirá una forma jurídica adaptada
al derecho local del lugar del emprendimiento, como señala Eck, permitiendo la
participación de inversores locales, públicos y privados. De igual modo, se favorece
el otorgamiento de facilidades fiscales o las adaptaciones puramente políticas
concedidas por el interés del país receptor del proyecto9.
b) PRESTAMISTAS
Por otra parte teniendo en cuenta el monto de los recursos que se necesitan
los mismos son proporcionados por un grupo de bancos, a través de lo que se
conoce como sindicatos bancarios cuya expresión jurídica esta dada por el contrato
denominado de crédito sindicado.
c) EL ESTADO
d) PROVEEDORES Y CONTRATISTAS
e) COMPRADORES
f) BANCO FIDEICOMISARIO
La función del fideicomiso va a nacer en base aun acuerdo que para tal
efecto celebre la empresa patrocinadora con una entidad bancada a fin de que los
ingresos por las ventas que generen los productos o servicios del proyecto se
consideren en cuentas que se aperturan con tal finalidad, las que servirán para
atender el servicio de la deuda.
g) OTROS PARTICIPANTES
7. RELACIONES JURÍDICAS
El project finance genera una compleja diversidad de relaciones jurídicas, que
tiene como base un contrato de crédito de donde se derivan diversas situaciones, que
dan lugar a otros contratos vinculados entre sí.
Entre los principales documentos que requiere el entorno del project financing se
puede mencionar los siguientes contratos: Contrato de Concesión, Contrato de préstamo,
Acuerdo Intercrediticio, Contrato de construcción, Contratos de ventas a largo plazo,
Acuerdo de cesión de recursos, Acuerdo de Inversiones, etc.
Dada la conexión entre los distintos contratos -algunos de los cuales condicionan
la existencia y los efectos de otros, el contrato de financiación resume estas
interre lacion e s y las d iscip lin as (supuestos de incum plim iento, estableciendo
condiciones resolutorias o suspensivas, movilizando garantías, etcétera) En cualquier
caso, tales previsiones deben ser apreciadas atendiendo sustancialmente al objeto ya
la causa constitutiva del project finance.
Todos los convenios en una u otra forma tienen su importancia dentro de este
esquema, sin embargo algunos de ellos tienen una mayor conexión con el contrato de
préstamo, entendiéndose desde el punto de vista de la posibilidad de su repago los que
se exponen a continuación.
a) EL CONTRATO DE CONCESIÓN
b) CONTRATO DE PRÉSTAMO
Sin embargo hay ciertos aspectos particulares que se consideran dentro del
contrato de préstamo tratándose del project finance, como aquellos referentes al flujo
de fondos del proyecto, que constituye la principal fuente de reembolso de los
prestamistas, la terminación del proyecto en el tiempo estimado, así como su
operatividad, la entrega de informes, estudios de ingeniería ambientales, de factibilidad
que demuestren el cumplimiento de las normas y la factibilidad del proyecto.
A fin de m inim izar los riesgos el desem bolso del préstam o estará
condicionado al avance de las etapas del proyecto, la presentación de informes
periódicos y las inspecciones que los prestamistas crean necesarias.
c) ACUERDO INTERCREDITICIO
El acuerdo deberá tener una duración, que equivalga a la fecha del último
pago del préstamo que esta siendo asegurado por el Acuerdo de cesión.
I. INTRODUCCIÓN
El término “leasing" proveniente del verbo inglés “fo toase” cuyo significado es
arrendar o dar en arrendamiento, se ha venido imponiendo internacionalmente para agrupar
una “nueva” modalidad contractual, nueva en sentido comparativo con la antigüedad
normativa de tantas otras figuras contractuales que se remontan al derecho romano.*1
Esta figura si bien toma elementos característicos de otras figuras contractuales
típicas y reguladas, se presenta en su propio entorno y se desenvuelve en él con identidad
propia.
La doctrina y legislación comparada no presenta uniforme criterio ni frente a la
denominación, ni al concepto y naturaleza jurídica de esta figura contractual, es más, en
muchos países es aún una figura atípica.
Nuestra legislación vigente Decreto Legislativo N° 299, adopta al igual que España
y otros países de habla hispana el término “Arrendamiento Financiero”, con lo cual
contribuye a su asimilación mecánica a la clásica figura del arrendamiento.
Tenemos por conveniente optar por una denominación y, en efecto, así lo hacemos,
acogiendo el acertado criterio de Escobar Gil en el siguiente sentido:
Sin embargo, tendremos que utilizar necesariamente los términos que la ley
nacional prescribe como locador, arrendador, arrendatario, entre otros, sin que por ello
se nos atribuya la identificación del leasing con una especie de arrendamiento.
II. CONCEPTO
Establecer una definición de Leasing no es una labor sencilla, por ello es que
antes de adoptar una posición al respecto creem os conveniente citar algunas
definiciones.
Para José Leyva, “el Leasing es un contrato de financiamiento en virtud del cual,
una de las partes, la empresa de Leasing, se obliga a adquirir y luego dar en uso un bien
de capital elegido previamente; por la otra parte, la empresa usuaria, a cambio del pago
de un canon como contraprestación por ésta, durante un determinado plazo contractual
-que generalmente coincide con la vida útil del bien- finalizado el cual puede ejercer la
opción de compra, pagando el valor residual pactado, prorrogar o firmar un nuevo contrato
o, en su defecto devolver el bien”.34
José María de la Cuesta Rute en definición puramente descriptiva elabora la
siguiente definición de Leasing:
"... por virtud del leasing, quien desea disfrutar de un bien acude a una empresa-
empresa de leasing,- para que, adquiriéndolo a tal fin de su constructor o fabricante,
le ceda su uso por todo el tiempo que se prevé tendrá de vida económica o útil, a
cambio de una contraprestación en dinero que el usuario paga fraccionadamente
y que asciende al importe que la empresa de leasing satisfizo al fabricante,
increm entado en los gastos e intereses del aplazam iento más el beneficio
empresarial se reconoce al usuario la facultad de adquirir el dominio del bien
requerido al cumplirse el término previsto, el v a lo r r e s i d u a l que corresponda”A
1. Contrato de financiamiento
2. Contrato autónomo
3. Contrato complejo
4. Contrato consensual
6. Contrato de adhesión
9. Que tiene por objeto la creación de una relación jurídica patrimonial, de carácter
mixto6
2. Obligación del usuario de elegir el bien según sus necesidades y criterio propio.
3. Obligación de efectuar una prestación periódica a cargo del usuario del bien.
- Otro sector considera que el contrato de leasing es una compraventa a plazos con
reserva de dominio. Opinión que se descarta por el carácter especial de la “opción
de compra”, no necesariamente al cumplirse el plazo del leasing se ha de transferir
la propiedad del bien, esto sólo ocurrirá si el usuario así lo decide en el plazo
contractualmente convenido con la empresa de leasing.
Como paso previo a abordar el tema del contrato de lease-back, nos detendremos
en el análisis del momento en que nace el contrato de leasing.
No olvidemos que estamos ante una especial figura jurídica de identidad propia
en la que se distingue un elemento esencial y característico de su naturaleza; este
elemento se presenta previamente a la firma del contrato al que la doctrina otorga
diferentes denom inaciones.79 Tenemos por conveniente citar la opinión de Carlos
8
Cárdenas respecto al elemento bajo comentario:
punto partida del contrato, como resultado de la obligación que asume la primera
de adquirir los bienes requeridos por el segundo.”10
Si bien el Reglamento del Dec. Leg. N° 299, aprobado por D.S. N°599-84 EFC en
su art. 22° señala que la vigencia del contrato se inicia en la fecha contractualmente
convenida por las partes, lo encasilla a las posibilidades que establece el art, 3. de la ley
esto es al momento en que la locadora efectúe el desembolso total o parcial para la
adquisición de los bienes especificados por la arrendataria o a partir de la entrega total
o parcial de dichos bienes a la arrendataria por el valor pactado. Consideramos que el
leasing nace al formarse el consentimiento, este momento es anterior a la suscripción
del acuerdo escrito, y la fase previa a esta suscripción es un elemento característico y
muy importante del contrato, pues determina la adquisición por parte de la empresa de
leasing de un bien individualizado y de acuerdo a lo requerido por el futuro usuario-
poseedor del bien.
V. EL CONTRATO DE LEASE-BACK
La mayoría de autores al clasificar el contrato de leasing hacen referencia: por su
finalidad en leasing operativo, financiero; de acuerdo a su objeto en leasing inmobiliario,
mobiliario; por la ejecución en leasing directo e indirecto; el leasing apalancado, de
intermediación, etc., entre ellos encontramos al lease-back, que es objeto del presente
comentario.
Esta modalidad de leasing está recogida en el artículo 27° del Decreto Legislativo
N° 299 con el siguiente texto: “En todos los casos en que la locadora adquiera de una
empresa un bien, para luego entregárselo a ella misma en arrendamiento financiero,
dicha transferencia está exonerada del Impuesto General a las Ventas y del Impuesto
Selectivo al Consumo en su caso”.11
Nótese que la particularidad que presenta el lease-back es el hecho de que el
usuario del leasing (arrendatario) es propietario del bien, y es en virtud de este contrato
que transfiere su derecho de propiedad a la empresa de leasing para que ésta a su
turno se lo entregue cediéndole el derecho de uso, a partir de ese momento cambia el
título por el que venía poseyendo el usuario-arrendatario (originalmente propietario).
Es esta categoría la que ha suscitado severas críticas las cuales señalan que
desnaturaliza la esencia financiera del contrato de leasing. Aunque se encuentran varias
opiniones en ese sentido, a modo de ejemplo, citaremos la definición de Barreira Delfino:
“El Lease-Back tiene un mecanismo que consiste en la venta que hace una
empresa de sus bienes e instalaciones a una Sociedad de Leasing, la cual, de
inmediato, se los alquila por medio de un contrato de Leasing. Ambos contratos,
de compraventa y de leasing, uno sucedáneo forzoso del otro, se celebra entre las
mismas partes. Evidente resultado que esta m odalidad desnaturaliza el fin
financiero que reviste el contrato de Leasing como contribución al equipamiento
empresario, pues el tomador no incrementa su capacidad productiva, sino que
recibe fondos que integra como alquiler y pierde de su activo ia propiedad de esos
bienes".12
Nos apartamos de tal calificación del contrato de Lease-Back por los argumentos
siguientes:
El Lease-Back no niega por tanto el carácter financiero del contrato,13 sino por el
contrario esta modalidad de leasing confirma su finalidad financiera y responde a la
necesidad real de muchos empresarios nacionales que ven en ésta un instrumento
financiero para reflotar sus empresas o simplemente aumentar su productividad y
eficiencia.
Partiendo del principio de la “libertad contractual” que otorga la facultad de las
partes para estipular el contenido de las cláusulas que rijan sus relaciones y al hecho
de que la ley que regula el Arrendamiento Financiero no lo hace de manera restrictiva,
los contratos de leasing podrán presentarse en múltiples modalidades siempre que
con ellos no se trasgredan los límites del ordenamiento jurídico en su totalidad. Es
importante la opinión de Gordillo:"...ex/sfen tantos tipos de leasing como contratos.”14.
Luego nos adherimos a su opinión en la parte en que considera al lease-back con
finalidad financiera:
"... La ventaja financiera que se obtiene con este tipo de operación es la conversión
de aquello que está inmovilizado en recursos disponibles, mediante la reducción
del primero a cambio del aumento de lo segundo’’.15
12. BARREIRA, Delfino Eduardo A.: “Leasing. Aspectos jurídicos contables, impositivos y
operativos”. Ed. Cangallo S.A.C.I., Buenos Aires 1978. p. 56.
En el mismo sentido los autores. CARDENAS QUIRÓS, Carlos: en ob. cit. p. 497. LAVALLE
ZAGO Eduardo: en “Contratos” Ediciones Jurídicas Lima-Perú. p. 393: BRAVO MELGAR
Sydney: “Contratos Modernos”, Editora FECAT Lima -Perú, 1995, p. 60, entre otros.
13. En este sentido encontramos opiniones pomo la de Ortúzar: “Esta operación es sin duda de
índole financiera!...)”. El contrato de leasing. Ed. Jurídica de Chile-Santiago de Chile 1990, p.
165; Escobar Gil, señala "... Esta forma de financiamiento ha tenido un notable desarrollo en
los Estados Unidos..." Ob. Cit., p. 24.
14. GORDILLO ARRIAZA, Eduardo: Ob. Cit., p. 687.
15. GORDILLO ARRIAZA, Eduardo: Ob. Cit., p. 660.
El Contrato de Lease-Back / Elena E. Sálte
Tal como lo hemos señalado, el contrato del leasing nace con el acuerdo de las
partes, lo mismo sucederá con la modalidad específica del Lease-Back, surgiendo
entre ellos las obligaciones principales siguientes:
Señor Notario:
DEFINICIONES:
PRIMERA: Las partes expresan que los términos, utilizados en el presente contrato,
tendrán los significados siguientes:
f) PRECIO DE VENTA: es aquel precio de adquisición, que las partes fijan de común
acuerdo por la transferencia en propiedad del EQUIPO por la ARRENDATARIA a
favor de la LOCADORA.
MONEDA DE PAGO:
TERCERA: Las partes acuerdan que todas las obligaciones monetarias derivadas
del presente contrato serán pagadas por LA ARRENDATARIA en dólares americanos, de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 1237° del Código Civil.
En el supuesto que la normatividad legal del país, durante la vigencia del presente
contrato, prohíba que en los contratos se pacten obligaciones en moneda extranjera, las
partes, desde la vigencia de la norma, tendrán un plazo de (.....) días calendarios para
que de mutuo acuerdo varíen en ese sentido el presente contrato, pudiendo utilizar
cualquier otro índice de reajuste automático permitido.
Si las partes no se pusieran de acuerdo, el presente contrato quedará resuelto de
pleno derecho, conforme las cláusulas sobre Resolución del Contrato.
En el supuesto que algún costo o servicio o desembolso en general que deba
abonar LA LOCADORA y que formen parte del Precio Definitivo, y que hayan sido
expresados en moneda nacional, éstos para ser incluidos en el Precio Definitivo, deberán
ser expresados en dólares americanos, para tales efectos se aplicará el tipo de venta
bancaria de la fecha de cada desembolso o, en su defecto, el del primer día hábil
siguiente.
DEL EQUIPO:
QUINTA.- La LOCADORA ha adquirido de la ARRENDATARIA, conforme a sus
indicaciones, los siguientes bienes que en lo sucesivo se denominarán el EQUIPO, de
acuerdo a su(s) factura(s) Nro............................, que se insertará(n) a la escritura pública
que origine la presente minuta.
Para tal efecto, se ha dirigido previamente a la LOCADORA solicitándole que
adquiere los bienes, y exprese su pleno consentimiento y conformidad sobre los términos
y las condiciones de adquisición de los mismos y su respeto a la descripción y
especificaciones consignadas en la documentación referida en esta cláusula.
r
699
PRECIO DEFINITIVO:
SÉTIMA: Se entiende como “Precio Definitivo” del EQUIPO al fijado de común
acuerdo entre la LOCADORA y la ARRENDATARIA formado por la suma efectuada como
precio de adquisición del EQUIPO que la LOCADORA entrega a la ARRENDATARIA, al
que se deberá incluir todos los impuestos, gastos y costos, así como el interés y ganancia
de la LOCADORA.
El Precio Definitivo se expresará en moneda extranjera, dólares de los Estados
Unidos de América, de conformidad a lo establecido en la cláusula tercera.
MODIFICACIONES Y MEJORAS:
DÉCIMA: La ARRENDATARIA se obliga a no hacer ninguna clase de modificaciones,
alteraciones, adiciones o mejoras en el EQUIPO sin el consentimiento previo, otorgado
por escrito, de su propietaria la LOCADORA.
Cualquier elemento que la ARRENDATARIA instale en el EQUIPO o cualquier
sustitución de repuestos que realice, en todo caso, serán de propiedad de la LOCADORA,
sin perjuicio de la responsabilidad a que hubiere lugar por el incumplimiento de la
ARRENDATARIA. Toda reparación, cualquiera sea su naturaleza, importancia o urgencia,
será de cuenta, costo y cargo de la ARRENDATARIA, sin derecho a reembolso o
compensación alguna por parte de la LOCADORA.
OBLIGACIONES DE LA ARRENDATARIA:
DÉCIMO PRIMERA: La ARRENDATARIA se obliga a tomar por su cuenta, cuantas
medidas sean necesarias para defender, respetar y hacer respetar por terceros los
derechos de posesión y hasta el de propiedad, incluyendo el caso de reclamaciones
derivadas de relaciones preexistentes entre dichos terceros y el PROVEEDOR.
La ARRENDATARIA se obliga a colocar en un lugar visible y preferencial el EQUIPO,
en forma permanente, un distintivo indicador de que el EQUIPO es propiedad de la
LOCADORA, teniendo ésta el derecho de hacerlo fijar en cualquier momento y por cuenta
de la ARRENDATARIA en caso ésta ultima no lo haya hecho.
C O N T R A T O S (D o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 701
DERECHO DE INSPECCIÓN:
DÉCIMO SEGUNDA: La LOCADORA tendrá derecho a inspeccionar el EQUIPO
cuantas veces lo juzgue conveniente con la finalidad cerciorarse de su correcta institución,
uso y funcionamiento. Por su parte, la ARENDATARIA se obliga a facilitar dichas
inspecciones y a colaborar con la LOCADORA en todo lo que éste le licite para el mejor
desenvo lvim ien to de la inspección del uso, fu ncionam iento, m antenim iento y
conservación del EQUIPO.
a la LOCADORA por tales conceptos, por lo que renuncia a todas las acciones y/o
excepciones que pudiera hacer valer frente a la LOCADORA.
DÉCIMO SEXTA: La ARRENDATARIA declara que el EQUIPO se halla en su poder.
Funcionando a su entera satisfacción y expresa estar totalmente de acuerdo con el
estado en que se encuentra y con las características del mismo.
DE LA RESOLUCIÓN:
VIGÉSIMO SEXTA: La LOCADORA podrá dar por resuelto el presente contrato, de
pleno derecho y sin necesidad de declaración judicial, por las causales de resolución
señaladas en este contrato, así como las señaladas por la cláusula vigésimo séptima
a cuyo efecto comunicará la resolución por telegrama, télex, o cualquier otro medio al
domicilio indicado por la ARRENDATARIA en este contrato.
La LOCADORA comunicará su decisión de valerse de la cláusula resolutoria y
podrá la LOCADORA recuperar de inmediato el EQUIPO y exigir acumulativamente el
pago total de las cuotas de arrendamiento vencidas y por vencerse. Hasta la finalización
del plazo establecido en el presente contrato.
La ARRENDATARIA se obliga a devolver de inmediato el EQUIPO al lugar que
designe la LOCADORA en las m ism as co n d icio n e s de co nse rva ción y buen
funcionamiento en que le fue entregado, salvo el desgaste natural por el uso. Son de
cargo de la ARRENDATARIA el pago de los gastos de devolución y de los que fijare la
LOCADORA para reparar cualquier desperfecto del EQUIPO y el que ocasione su
remoción y transporte.
VIGÉSIMO SÉPTIMA: Sin perjuicio de las causales señaladas específicamente
en este contrato también son causales de resolución de pleno derecho las siguientes:
CLÁUSULA PENAL:
VIGESIMO NOVENA: Adicionalmente, la ARRENDATARIA queda obligada a pagar a
la LOCADORA una penalidad adicional consistente en abonarle la suma a que asciende
e l ..... % anual sobre el total de los montos que le haya dejado de abonar.
DISPOSICIONES FINALES:
TRIGÉSIMA: Para todos los efectos del presente contrato, las partes pactan la
mora automática, en ningún caso será necesario la intimación al deudor para que la
mora exista respecto al cumplimiento de sus obligaciones, para estos efectos será de
aplicación la tasa máxima de interés moratorio establecida por el Banco Central de
Reserva del Perú.
CLÁUSULA PENAL:
VIGESIMO NOVENA: Adicionalmente, laARRENDATARIAqueda obligada a pagar a
la LOCADORA una penalidad adicional consistente en abonarle la suma a que asciende
e l ..... % anual sobre el total de los montos que le haya dejado de abonar.
DISPOSICIONES FINALES:
TRIGÉSIMA: Para todos los efectos del presente contrato, las partes pactan la
mora automática, en ningún caso será necesario la intimación al deudor para que la
mora exista respecto al cumplimiento de sus obligaciones, para estos efectos será de
aplicación la tasa máxima de interés moratorio establecida por el Banco Central de
Reserva del Perú.
TRIGÉSIM A PRIMERA: P a r a to d o s los e fe c to s d e l p r e s e n te c o n tra to , la s p a rte s
re n u n c ia n a s u s p ro p io s fu e r o s y s e s o m e te n a la ju r is d ic c ió n y c o m p e t e n c ia d e los
706 El Contrato de Lease-Back / Elena E. Sánchez A t
Jueces y Tribunales del Distrito Judicial del Cercado de Lima, designando como sus
domicilios los consignados en la introducción de este instrumento. Cualquier variación
de domicilio para que surta efecto, deberá ser comunicada por escrito al contraparte con
diez (10) días calendario de anticipación.
Lim a,............. d e ........... del 20..........
LA LOCADORA LA ARRENDATARIA
C O N T R A T O S lü o c t n n a L e g is la c ió n J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) |
J URISPRUDEN CIA
L ease back: T r a n s f e r e n c ia d e p r o p ie d a d v ía l e a s in g y
RTF. N° 02983-2-2004
Tribunal Fiscal N° 02983-2-2004
Expediente N°: 942-2004
3. En la definición de bien mueble que contiene el inciso b) del artículo 3 de la Ley del
Impuesto General a las Ventas (D.S. N° 055-99-EF), se incluye a los bienes
incorporales o intangibles. Los derechos, obligaciones y deberes que derivan de
un contrato de Lease Back califican como intangibles, en tanto constituyen bienes
incorporales pues no tienen una naturaleza material, no son espaciales, ni
accesibles a los sentidos, son percibidos intelectualmente.
5. De otro lado, cabe señalar que el contrato de Lease Back o leasing retro es un
contrato por medio del cual la empresa locadora adquiere el bien que tiene en
propiedad la persona con quien va a celebrar el contrato de leasing. De acuerdo
con la doctrina jurídica en un contrato de Lease Back coexisten dos contratos
distintos: a) compra venta (la entidad financiera adquiere un bien de su cliente) y
b) arrendamiento financiero (el bien adquirido es arrendado al mismo vendedor).
El Contrato de Lease-Baek i Elena E. Sánchez Abanto
BASE LEGAL:
• Texto Único Ordenado de la Ley del Impuesto General a las Ventas e Impuesto
Selectivo al Consumo, aprobado por el Decreto Supremo N° 055-99-EF, publicado
el 15.4.1999 y normas modificatorias (en adelante, TUO de la Ley del IGV).
ANÁLISIS:
Para efecto de la presenta consulta, se parte de la premisa que la misma se
encuentra orientada a determinar si en el caso de celebrarse un contrato de lease
back entre una empresa y una entidad bancaria, habiendo aquélla transferido uno o
más activos a la citada entidad, es aplicable el Régimen de Recuperación Anticipada
del IGV.
Al respecto, mediante el primer párrafo del artículo 78° del TUO de la Ley del IGV
se crea el Régimen de Recuperación Anticipada del IGV pagado en las importaciones y/
o adquisiciones locales de bienes de capital realizadas por personas naturales o jurídicas
que se dediquen en el país a actividades productivas de bienes y servicios destinados
a exportación o cuya venta se encuentre gravada con el IGV1.
Por su parte, el artículo 3o del Decreto Supremo N° 046-96-EF dispone que pueden
acogerse al Régimen las personas naturales o jurídicas que no habiendo iniciado su
actividad productiva, importen y/o adquieran localmente bienes de capital para la
producción de bienes y servicios destinados a la exportación o gravados con el Impuesto,
1. Cabe mencionar que el citado texto ha sido recogido por el TUO de la Ley del IGV de las
anteriores normas que regularon dicho Impuesto, esto es del Decreto Legislativo N° 821,
publicado el 23.4.1996, y del Decreto Legislativo N° 775, publicado el 31.12.1993.
712 El Contrato de Lease-Back / Elena E. Sánchez Abanto
1
incluyendo a quienes opten por la renuncia a la exoneración del Impuesto por operaciones
comprendidas en el Apéndice I del Decreto.
Agrega el citado artículo que para tal efecto, se entiende que una persona natural
o jurídica ha iniciado su actividad productiva cuando realice la primera exportación de un
bien o servicio, o la primera transferencia de un bien o prestación de servicios.
Como se puede apreciar de las normas antes glosadas, el Régimen de
Recuperación Anticipada del IGV es de aplicación a las personas naturales o jurídicas
que no habiendo iniciado su actividad productiva, entre otros requisitos, se dediquen en
el país a la producción de bienes y servicios destinados a la exportación o cuya venta se
encuentra gravada con dicho impuesto; para lo cual se considera que se ha iniciado
actividades, entre otros, cuando realice la primera transferencia de un bien.
Ahora bien, debe tenerse en cuenta que por el contrato de lease backuna empresa
vende un bien de su propiedad, de naturaleza mueble o inmueble, a una empresa de
leasing, la que simultáneamente le concede en leasing el mismo bien, contra el pago
de un canon periódico, durante un plazo determinado, y al final del cual le otorga una
opción de compra por un valor residual establecido en el contrato2.
Así, siendo que el contrato de lease back tiene como característica principal la
transferencia de un bien mueble o inmueble, en tal caso, no se habría cumplido con el
requisito de no inicio de actividades establecido por la normatividad que regula el
Régimen de Recuperación Anticipada del IGV, razón por la cual, en tal supuesto, no
procederá el acogimiento a dicho Régimen.
Sin perjuicio de ello, la empresa que transfiere el activo a la entidad bancaria
podrá deducir del impuesto bruto del período correspondiente a la citada transferencia,
el crédito fiscal a que tenga derecho; en el caso que el crédito fiscal resulte mayor al
impuesto bruto, el exceso constituirá saldo a favor del sujeto del impuesto, el cual se
aplicará como crédito fiscal hasta agotarlo2.
CONCLUSIÓN: Teniendo en cuenta que el contrato de lease back tiene como
característica la transferencia de propiedad de un bien mueble o inmueble, en tal caso,
no se habría cumplido con el requisito de no inicio de actividades establecido por la
normatividad que regula el Régimen de Recuperación Anticipada del IGV; razón por la
cual, en tal supuesto, no procederá el acogimiento a dicho Régimen.
Lima, 17.10.2006
2. HUAYANAY CH., Hugo. “Contratos, Doctrina, Legislación y Modelos”. Lima, pág. 138.
3. Tal como lo dispone el artículo 25° del TUO de la Ley del IGV.
EL CONTRATO DE FACTORING
(FACTURACIÓN)
Hernando M ontoya A lbertiO
Sumano: I lntrc.iüoción. II. Antecedentes del contrato de factoring. III. Concepto. IV.
Función económica. V. Naturaleza jurídica: 1. Teoría de la apertura de crédito;
2. Teoría del descuento; 3. Teoría del compra venta y de la cesión de créditos.
VI Det melón del conUat j de factoring. Vil. Características. VIII Elementos del
contrato: 1. Elementos personales: a) La empresa de factoring, b) El cliente,
r,¡ El deudor cedido ¿ Elementos materiales- a) Los instrumentos, b) La
factura conformada. IX. Modalidades del contrato de factoring 1. Por su
contenido; 2. Por su forma de ejecución; 3. Por la asunción del riesgo; 4. Por
la junsdicción. X. Obligaciones de las partes en el contrato 1. Del cliente, 2.
De la empresa de factoring XI. Ventajas para las partes- 1. Para el cliente a)
crediticias, b) De liquidez, c) Administrativas; 2. Para la empresa de factonng.
XII. Extinción del contrato. Bibliografía. Anexos de dispositivos legales.
I. INTRODUCCION
El desarrollo sostenido de los agentes de producción obliga a encontrar nuevas
herramientas que permitan financiar sus actividades y en especial la fase de venta de(*)
(*) Abogado por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Doctor en Derecho por esa
misma casa superior de estudios. Catedrático de Derecho Comercial en la Universidad de
Lima, Universidad San Martín de Porres, y en la Universidad Femenina del Sagrado Corazón;
Catedrático de Post Grado en esas mismas universidades, y además en la Universidad
Nacional Mayor de San Marcos, Pontificia Universidad Católica del Perú. Miembro de las
comisiones encargadas de elaborar los Proyectos de Ley General de Sociedades, Ley de
Títulos Valores, Reglamento del Registro Mercantil y Anteproyecto de Ley de Grupo de
Empresas. Miembro del Instituto de Derecho Mercantil.
714 El Contrato de Factoring t Hernando Montoya Albeiti
sus productos, requisito indispensable para continuar con la fase de producción. Ese
devenir incesante ha hecho que la riquísima imaginación de los comerciantes y de los
hombres de empresa se esmere en encontrar fórmulas que satisfagan a ellos mismos,
a sus clientes y a los agentes de intermediación, quienes constituyen los depositarios
de fa confianza de fondos del público.
Dentro de este contexto el Sistema financiero no está constituido únicamente por
los bancos y financieras, sino también por los agentes de intermediación constituidos
de acuerdo a las disposiciones de cada país. Cada agente financiero constantemente
está procurando insertar en el mercado un nuevo producto que haga atractiva la
concertación de una operación con su cliente, no solo en forma activa, sino también
pasiva. Esta constante actividad hace que determ inados instrum entos no sean
suficientemente aptos para mantenerse en el mercado, y requieren en todo caso cierta
variación y compromiso por parte de quines asumen las obligaciones contenidas en
cada uno de los documentos, o en forma globalizada.
Precisamente el derecho mercantil, por su variada extensión hace que el
comerciante, empresario o financista no se quede en el tiempo y recurra a nuevas
formulas que obviamente no se encuentran reguladas en los dispositivos legales. Es
así como ingresa a este terreno el contrato de factoring, regulado en algunos países y
en otros sujetos a la libertad de contratación, hasta que encuentren la mejor manera de
definirlos o fijarlos en el contexto de cada país.
El contrato de factoring nace pues, como una necesidad de la comunidad
internacional porque precisamente el intercambio internacional hace que existan agentes
en la plaza de colocación que respondan por la bondad de la cobranza, aspecto que nos
hace regresar a los orígenes de esta figura jurídica, cuando el Colonial Factor asentado
en el Nuevo Continente colocaba los productos del exportador, con la confianza de que
iban a ser pagados. Este criterio hoy nos hacer revisar cifras a nivel global donde se
refleja un índice creciente de operaciones de factoring.
Sin duda que el producto de las operaciones de factoring constituye una colocación
o crédito respaldado con la solvencia de las instituciones bancarias y financieras, y con
las de aquellas empresas pertenecientes al sistema financiero que se encuentran
reguladas por la entidad supervisora, en el caso del Perú por la Superintendencia de
Banca y Seguros.
Se complementa la figura del contrato de factoring con aquellos beneficios que
otorgan las disposiciones legales que buscan evitar la desestabilización del sistema, y
brinda a los agentes de intermediación los medios que garantizan su función y el respaldo
o pago de los instrum entos de negociación. Los docum entos responden a sus
características, y en unos casos tenemos la solidaridad para el pago del título, en otros
se busca proteger no solo al título, sino al agente que negocia el título, es así como, ante
situaciones coyunturales, y para no perjudicar los depósitos de los clientes en
instituciones bancarias y financieras, la Legislación peruana protege el ahorro del público
amparado en una norma de la Constitución Política del Estado. Así el artículo 87 de la
Constitución Política del Perú establece que: “El Estado fomenta y garantiza el ahorro.
La ley establece las obligaciones y los límites de las empresas que reciben ahorros del
público, así como el modo y los alcances de dicha garantía. La Superintendencia de
Banca y Seguros ejerce el control de las empresas bancarias y de seguros, de las
demás que reciben depósitos del público y de aquellas otras que, por realizar operaciones
C O N T R A T O S iD o a n n p I e w ,
--------— ---------¡______ :__ or*“
717
Mediante este sistema el exportador obtenía beneficios pues podía colocar sus
productos y percibir el precio total sin necesidad de tener que esperar el vencimiento de
los plazos, ni otorgar créditos a personas cuya solvencia ignoraba, y por otro lado, el
agente de ventas obtenía sus frutos, pues lograba un beneficio suficiente por el adelanto
que facilitaba. Después de la independencia de los Estados Unidos de América, y
cuando la industria de ese país salió a competir con las potencias de la época, encontró
en los viejos “Factors” una figura de gran valor, pues estos le permitieron conseguir
financiación para las exportaciones. Con el desarrollo de la actividad mercantil también
se amplió la actividad financiera, y fue necesario que los Factors se unieran en
sociedades para poder hacer frente al riesgo y de esta forma nacieron las primeras
entidades de factoring que van logrando un auge sorprendente a partir de los altos
veinte, hasta nuestros días, donde existen grandes empresas destinadas a este tipo de
financiación, como son: la Walter E. Heller and Co. International Factors. En la década
del sesenta y paralelamente con el Leasing, el factoring cruza el Atlántico y se instala en
el Viejo Continente; así nacen las empresas como Sofinter S.A.. Societé Francaise de
Factoring International, y la Factor France Heller, todas en Francia. En Italia la Heller
Factor Italia S.P.A., la International Factors en Bélgica y en el Reino Unido la All Factors.
Cabe destacar que estas sociedades financieras tienen como cuna la fusión de
718 El Contrato de Factoríng t Hernando Montoya Alberti
El profesor Max Arias Shereiber? señala que “El factoring está directamente
relacionado con los servicios que un banco o una entidad financiera debidamente
constituida pueda prestarle a sus clientes, en función de los créditos de los cuales
éstos son titulares como resultado de su actividad mercantil. El origen de la expresión
viene de los fenicios y de la colonización inglesa. Factus equivale a “el que hace algo.
Factor en inglés significa “apoderado”, pero factoring expresa el significado de financista”
que tuvo el selling agent en los Estados Unidos de América.”
Rafael Vásquez precisa que “ La aparición de la actividad, profesionalizada que
hoy podemos encuadrar dentro del contrato de Factoring sucede, al igual que con otras,
en el ámbito del Derecho anglosajón, de donde, y a través de una generalización de
valores implícitos en una determinada concepción de la cultura empresarial, ha llegado
hasta nosotros; si bien, tras completar un proceso de adaptación a instituciones y modos
con el suficiente asentamiento, para que se haya podido extraer el necesario partido de
un modelo contractual, ya de por sí, más que acreditado en otras realidades jurídicas.
La conducta del factor, como sujeto de la actividad de factoríng, está asociada a una
concreta concepción de la explotación de los mercados que se iban abriendo en las
nuevas colonias ultramarinas, concretamente y en este caso, en Norteamérica.
Este autor nos va decantando la figura del Factor para devenir en el mismo contrato
de factoring. Así identifica al “Colonial Factor” como de una las posibles caracterizaciones
del contrato de comisión de venta.
“Esta labor era desarrollada por el pionero o colono, por cuenta del comitente que
se había quedado en la metrópolis, y cuya actividad consistía en la colocación de sus
productos en los nuevos asentamientos que se iban realizando. El llamado Colonial
Factor desempeñaba su tarea comercializadora respondiendo de la solvencia del deudor,
a fin de cuentas el comitente-exportador radicado en Inglaterra difícilmente iba a conocer
las características de los nuevos mercados sino a través de la solvencia que le mereciera
su co m isio n ista . Este co nse gu ía c lie n te s para los p roductos de aquel, pero
respondiendo del riesgo derivado de la falta de pago de los compradores de productos.
Todo ello a cambio de una remuneración cifrada en una comisión. No se diferenciaba,
según esta práctica, de la conocida comisión de garantía.”
La importancia contractual la tenemos en el Conventional Factoring, que empieza
a dar más importancia contractual a la actividad de gestión de cobro de las facturas que,
eventualm ente, em itiera el exportador asentado en la m etrópolis. Este original
comisionista va decantando su labor en la gestión de cobro de facturas cuya titularidad
ostenta, mediante la correspondiente cesión de los derechos inherentes a las mismas,
la propiedad en unos casos, o bien en otros en mera comisión de cobranza. La figura se
enriquece con nuevos encargos, el factor no se dedica sólo a buscar clientes para
colocar los productos del exportador inglés, sino que su tarea recae en procurar la
liquidez de las facturas, corriendo o no con los riesgos derivados del impago de éstas,
según nos encontremos ante el Factoring propio o impropio. Por lo tanto, la comisión de
garantía deja paso a la gestión de cobro como actividad principal del Factoring.
7. Arias Schreiber, Max: C o n tra to s M odernos, Edit Gaceta Jurídica, pág. 57, Lima, 1999.
CONTRATOS (Doctrina.
— Leaislacion,
*•* Jurisprudencia
1 y Modelos) I
___ '______
Rolando C astellares8 nos dice “la mayor dificultad para definir este contrato radica
en la inexistencia de un objeto único o definido de la relación contractual por lo que para
tener una clara idea acerca de su identidad, es necesario tomar como punto de referencia,
uno de los servicios del conjunto que incluye este contrato, lo que nos permitirá determinar
los efectos legales que se originan como consecuencia de su suscripción. Celebrado
el contrato de Factoring entre las partes, que son: El Factor de una parte y el cliente
industrial o comerciante de otro lado, este último comunica a sus clientes este hecho,
sometiéndose a partir de entonces todos sus pedidos de ventas a la previa aprobación
del Factor, a quien debe hacérsele entrega de la totalidad de las facturaciones (principio
de la universalidad). A cambio, el industrial o comerciante, recibirá de parte del Factor,
el pago inmediato o dentro de los plazos convenidos en la respectiva factura -de
haberse concedido facilidades para su pago- sin importar que el obligado a pagar
tales facturas cumpla o no con su compromiso: pues el riesgo es asumido íntegramente
por el Factor.
Este esquema troncal del factoring, puede ser enriquecido con la concurrencia de
una gama de servicios adicionales y estipulaciones especiales en cada caso, que va
desde los servicios de la emisión de facturas, de los títulos de crédito respectivos, el
manejo de los registros contables de las operaciones, la investigación comercial del
mercado, información estadística del com portam iento del mercado e índices de
rentabilidad por productos, almacenamiento de mercaderías, la selección de clientes,
información comercial, la cobranza judicial y extrajudicial de acreencias no transferidas
al Factor. Así como ser complementado con el financiamiento por parte del Factor de los
documentos por cobrar. De este modo, podemos afirmar válidamente que el contrato de
factoring combina la asistencia crediticia, con la administración y cobranza de las
facturaciones provenientes de la venta de bienes o servicios.”
V. NATURALEZA JURÍDICA
Las múltiples relaciones que conlleva este contrato, o que permisiblemente pueden
incluirse, traen como consecuencia la dificultad de encontrar una naturaleza jurídica que
justifique su existencia por sí solo, siendo frecuente que se le identifique con otros
contratos.
Una tesis importante que intenta la explicación de la esencia jurídica del factoring
es aquella que partiendo de la pluralidad funcional llega a la unidad de la causa del
contrato, mostrándose contraria a su fragmentación jurídica, y concluye que el factoring
ha de calificarse como un contrato complejo, en el sentido de tener elementos y lograr
resultados económicos propios de otros contratos, fusionados en una unidad causal
que lo individualiza. Frente a ésta se colocan las posturas que, partiendo también de la
pluralidad contractual, no concluyen en la unidad causal. Estas coinciden en señalar la
existencia de distintas modalidades de factoring, con naturaleza diferente entre sí, en
función de las posibilidades de combinaciones de los servicios a realizar por la empresa
factora establecidos en el propio contrato, pues en cada una de ellas la causa de la
cesión de créditos es diferente.
Al margen de las dificultades lógicas de concebir una causa única que sea al
mismo tiempo variable, explica García de Enterría, es claro que en el desarrollo práctico
del factoring no se produce una fusión de una diversidad de causas (colaboración,
financiación, garantía) que anule su respectiva singularidad y que se manifieste por
igual con relación a todos los créditos, y que las mismas (y aquí radica la principal
especialidad de este contrato, la que explica sus posibles ventajas en comparación con
otras figuras afines o similares) pueden combinarse y disgregarse bajo distintas
fórmulas, según las concretas finalidades del empresario y el propio criterio de la
empresa de factoring. Siendo esto así, al variar por completo el resultado práctico
perseguido por las partes según los servicios prestados en cada caso por la empresa
de factoring, es evidente que el programa de prestaciones y el contenido del contrato
difícilmente pueden reconducirse a un único esquema causal rígido y predeterminado,
La tesis del factoring como contrato definitivo, por el contrario, sostiene que este
instituto entraña una cesión global de créditos existentes y futuros. A pesar de ello, en la
doctrina se sostiene (García-Cruces) que no obstante el carácter definitivo del factoring,
“no puede olvidarse que, en ocasiones, se configura el contrato de factoring no con
carácter definitivo y traslativo, sino, por las razones que sean, como un contrato cuadro
respecto a los posteriores negocios de cesión”.
No se presentan, pues, dos momentos distintos, sino uno solo: la cesión de los
créditos se produce en el momento de celebrarse el contrato, aun cuando pueda pactarse
que, en cada caso, dicha cesión tenga como condición suspensiva que aquellos reúnan
las condiciones previstas en el contrato.
y existencia compleja para concebirlo como una figura autónoma. Muchas veces nos
preguntamos cuál es la razón que justifica la creación de nuevas figuras jurídicas,
en todo caso cuál es el ingrediente jurídico que hace que la relación contractual
merezca un tratamiento conceptual distinto para plasmarse luego en un dispositivo
legal.
Las diversas teorías que buscan atraer la figura del contrato de factoring la
encontramos en las siguientes.
15. Castellares Aguilar, Rolando: E l c o n tra to d e fa cto rin g , en Revista de la Facultad de Derecho
y Ciencias Políticas de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Congreso Nacional de
derecho Civil y Comercial 1993, pág. 611, Lima, Perú.
726 El Contrato de Factormg / Hernando Montoyá Atbertí
16. Art. 1567 C.C.: El riesgo de pérdida de bienes ciertos, no imputables a los contratantes, pasa
al comprador en el momento de su entrega.
17. Art. 1213 C.C.: El cedente no está obligado a garantizar la solvencia del deudor, pero si lo
hace, responde dentro de los límites de cuanto ha recibido y queda obligado a! pago de los
Intereses y al reembolso de los gastos de la cesión y de los que el cesionario haya realizado
para ejecutar al deudor, salvo pacto distinto.
C O N T R A TO S (Doctrina, Legislación. Jurisprudencia y Modelos) 727
18. Bravo Melgar Sidney “L o s C o n tra to s M o d e rn o s E m p re s a ria le s ”. Editorial San Marcos, 1998,
Tomo I, Lima, Perú.
728 El Contrato de Factoríng l Hernando Montoya Alberti
d) El acuerdo en virtud del cual un empresario cede los propios créditos comerciales
a un operador especializado (el factor), el cual se compromete a cambio de ello a
prestar una serie de servicios de contenido diferenciado entre los cuales los más
importantes son la gestión, la contabilización y sobre todo el cobro de los créditos
cedidos, ello a cambio de una comisión de factoring.
- Formal, ya que el consentimiento de las partes debe expresarse por escrito, (art.
3 Resolución SBS 1021-98). Considerando los sujetos y las prestaciones
involucradas, es esencialmente un contrato de empresa, no limitado al sector
bancario.
cliente no forma parte de esta relación contractual, en todo caso son elementos pasivos
de este contrato; ellos no pueden ejercer actos que graviten en la concertación del
contrato de factoring.
1. ELEMENTOS PERSONALES:
a) La empresa de factoring.
b) El cliente
c) El Deudor Cedido.
a) De los instrumentos.
b) La factura Conformada.
señal de conformidad y con la garantía prendaria que pesa sobre los bienes
vendidos y que se encuentra incorporada en el título. Es decir, un instrumento
propicio para las operaciones de factoring.
23. Los bienes a que se refieren, deben consistir en bienes muebles y materializados,
excluyéndose los bienes muebles inmateriales y los inmuebles de toda clase.
24. LOLLET, Miguel Angel. Citado por Bernardo Trujlllo Calle en “Facturas Cambiarías”. Rev.
Estudios de Derecho. N° 83, Medellín Colombia, 1973, p. 95.
c) Los bienes y mercaderías pueden ser fungibles o no, ¡dentificables o
no. No deben estar sujetos a carga o gravamen alguno, salvo al que
el título representa;
e) Sólo una vez que cuente con la conformidad, el título puede ser objeto
de transmisión;
b) A la Vista;
del Sistema Financiero Nacional que verifique tales pagos, sin perjuicio
de su obligación de expedir la respectiva constancia o recibo de tales
pagos. -
740
25. V á s q u e z G a rc ía R am ón: C o n tra to d e factoring. E dit N ova, 1998 M ad rid , pág. 1205.
C O N T R A T O S {llott'ina. Lrg.slacion. J innpnicioncut y M odelos) 741
POR LA ASUNCIÓN DEL RIESGO. El factoring puede ser Con recurso y Sin
recurso.
así cuando el incum plim iento se haya producido por otras causas, como
mercancías en mal estado, no acorde con el pedido, etc. La cobertura del riesgo
es generalmente por la totalidad de la deuda contenida en el título.
4. POR LA JURISDICCIÓN.
en los artículos 1206 a 1217 del Código Civil. Cabe señalar que los créditos
que se ceden son los originados por las operaciones del cliente (empresa)
y no cualquier clase de créditos. Por lo general, el cliente está en el deber
de informar a su clientela la celebración del contrato con el factor. Además
en todas las facturas que se emitan se debe incluir la cesión, lo cual produce,
a su vez, el conocimiento de cada comprador o usuario acerca de la
realización del crédito.
porque no son del agrado del cliente. Además, había surgido, la controversia
sobre si basta con controlar los documentos que se refieren a los créditos
cedidos, o si es necesario un control sobre todos los documentos contables
del cliente, y si el ejercicio de un control tan amplio pudiese dar a conocer a
la empresa de factoring datos de los que se podría aprovecharse para
ejercer una influencia dominante sobre la empresa del cliente.
Deberá cobrar los créditos que le han sido cedidos por el cliente,
nada prohíbe que conceda prórrogas para el pago e inclusive establecer
nuevas obligaciones con los deudores (novación). Sin embargo debe
tenerse presente que en el caso de una operación sin recurso o sin acción
de regreso el cliente no tiene facultades para negar la extensión del plazo
otorgado por la empresa de factoring, pues se supone que dicha empresa
previamente adelanto los recursos y la liquidez al cliente.
Sobre los anticipos se pagan los intereses que las partes estipulen
en las condiciones particulares, computándose desde la fecha del anticipo
hasta el momento del cobro de los créditos o en la fecha convenida por las
partes.
b) Financiación
los títulos de crédito sobre los cuales se corre el riego. Existen supuestos
de incumplimiento que no pertenecen al ámbito del contrato de tactoring.
e) El factor está obligado a llevar la contabilidad en las ventas del cliente, así
como la cuenta corriente de los créditos y débitos surgidos como
consecuencia de las recíprocas obligaciones de los contratantes. Esta
obligación será pertinente para el tipo de servicio contratado.
1. PARA EL CUENTE
753
Otros servicios.-
caso del contrato de factoring, en tal supuesto el artículo 1365 del Código civil peruano
establece: “En los contratos de ejecución continuada que no tengan plazo convencional
o legal determinado, cualquiera de las partes puede ponerle fin mediante aviso previo
remitido por la vía notarial con una anticipación no menor de treinta días. Transcurrido el
plazo correspondiente el contrato queda resuelto de pleno derecho.”
BIBLIOGRAFÍA
• ARRUBLA PAUCAR, Juan Alberto: “Contratos Mercantiles”, tomo II, Biblioteca Jurídica
Dike, Segunda Edición, Bogotá. 1992.
• BONFANTI, Mario Alberto - GARRONE, José Alberto: “De los Títulos de crédito”
Abeledo-Perrot. Buenos Aires, 1982.
FARIÑA, Juan M.: “Contratos Com erciales M odernos”, Ed. Astrea, Buenos
Aires, 1993.
GARCÍA VILLAVERDE, Rafael: “El Contrato de factoring”, Edit Me Graw Hill, 1999,
España.
LEYVA SAAVEDRA, José: “El Contrato de Factoring”, En: revista de los Negocios.
Num. 110 noviembre 1999, Madrid.
• LEY DEL SISTEMA NACIONAL FINANCIERO (Ley N° 26702): Artículo 16o (Capital
mínimo). TITULO III (Operaciones y Servicios), CAPITULO I (Normas Comunes),
Artículo 2210 (Operaciones y Servicios), Artículo 237° (Factura Conformada). TITULO
IV (Empresas Del Sistema Financiero). Capitulo I (Disposiciones Generales),
Artículo 282 (Definiciones: Inc 8. Empresa de factoring, cuya especialidad consiste
en la adquisición de facturas conformadas, títulos valores y en general cualquier
valor mobiliario representativo de deuda; Artículo 290°.- Esquema Modular De
Operaciones: d) Numeral 10 artículo 222: Realizar operaciones de factoring. e)
Numeral 30 b) artículo 221: Emitir órdenes de pago.•
Artículo 47°.- Endoso de título valor que representa garantía real: 47.1. El endoso
de título valor que represente derechos reales de garantía, transfiere al endosatario
dichos derechos reales y los demás derechos representados por el documento.
47.2. El endoso en garantía de estos títulos valores, se limita a los derechos
distintos a los de garantía real que represente. En tal caso, la garantía real
representada por el título valor, respaldará también la obligación que se garantiza
con dicho endoso.
a). Factura comercial que deberá ser explícita y rigurosamente conforme con la entrega
y/o prestaciones de pago convenidas con el comprador.
b). Letras de cambio aún no vencidas en por lo menos... días contados a partir de la
suscripción del presente contrato.
ASUNCIÓN DE RIESGO:
c) Que LA FACTORADA haya cumplido todos los pactos del presente contrato menos
los expresamente exceptuados, en caso de asunción de riesgo.
e) Que ni LA FACTORADA ni ninguna otra firma filial del mismo tenga relaciones de
deudor con el comprador o algunas de sus filiales.
h) Que la causa del impago obedezca a la insolvencia del comprador con exclusión
de cualquier otra.
DÉCIMO SETIMO: En caso de que el límite del riesgo aceptado por LA FACTORA sea
inferior al importe total impagado por el comprador, los cobros que puedan conseguirse
de este o de quienes le representen, ya sean realizados por LA FACTORA o LA FACTORADA
-se aplicarán en primer lugar a cubrir la parte garantizada por LA FACTORA.
762 El Contrato de Factormg / Hernando Montoya Alberti
ANTICIPOS Y RESERVA
DÉCIMO OCTAVO: LA FACTORA podrá anticipar a LA FACTORADAcantidades hasta
por un importe del .... % de los créditos cedidos y aprobados. LA FACTORADA podrá
solicitar estos anticipos a su discreción, salvo en los casos en que expresamente se
pacte lo contrario.
DÉCIMO NOVENO: En garantía del riesgo en curso LA FACTORA se reserva la
propiedad de la parte no anticipada. LA FACTORA podrá aplicar a esta reserva las
cantidades impagas que por cualquier causa se produzca. LA FACTORA se obliga a
transmitir a LA FACTORADA las sumas que forman la reserva en la proporción adecuada,
al cumplirse la condición suspensiva de la desaparición del riesgo en la misma proporción.
REMUNERACIÓN AL FACTOR:
VIGÉSIMO:
EXAMEN DE CONTABILIDAD:
VIGÉSIMO SEGUNDO: LA FACTORADA autoriza a LA FACTORA examinar
personalmente o mediante servicio exterior, la veracidad de las operaciones que le
hayan sido cedidas, a cuyo fin LA FACTORADA se obliga a poner a disposición de LA
FACTORA sus libros de comercio, cuentas, correspondencia y documentos relativos a
estas operaciones, facultando ampliamente y desde ahora a cualquier representante
de LA FACTORA para que pueda, en todo momento, inspeccionar, comprobar o anotar
los datos que precise.
DURACIÓN:
VIGÉSIMO TERCERO: Este contrato tendrá la duración de.... , contándose dicho
plazo a partir de su firma, siendo prorrogable por periodos iguales hasta que alguna de
763
las partes comunique a la otra, por escrito y con una anticipación de.... días, su voluntad
de ponerle término. Sin embargo, LA FACTORADA no podrá resolver este documento
hasta que todas las deudas y obligaciones con LA FACTORA queden satisfactoriamente
cumplidas y canceladas.
PACTO FINALES:
LAFACTORA LAFACTORADA
' "" ' '
J URISPRUDEN CIA
1-En el marco del contrato de factoring, atípico, mixto y complejo, con características
conceptuales propias del contrato de comisión de venta en sus orígenes más
remotos, luego evolucionadas hacia una mera actividad de cobranza, tres son
actualmente las funciones que, no siempre coincidentes, suelen satisfacerse: a)
la de gestión; b) la de garantía, y c) la de financiación. Si por la primera, esencial
a cualquier modalidad, la entidad de factoring se encarga de gestionar el cobro de
los créditos que le son transmitidos, liberando al empresario de la carga de los
m edios m ateriales y hum anos que tal actividad requiere y reduciendo y
simplificando los gastos administrativos y contables normalmente derivados de
tal gestión, por la segunda asume el riesgo de insolvencia del deudor cedido -
factoring, sin recurso o factorin propio-, en tanto que por la tercera -factoring
financiero- la entidad anticipa al empresario el importe de los créditos transmitidos,
permitiéndole la obtención de una liquidez inmediata.
2. En el caso de la sola existencia del servicio de gestión del cobro de los créditos,
el factoring carece de aptitud causal suficiente para producir una cesión plena del
derecho de crédito, presentándose entonces como una simple comisión de cobro.
En caso de pactarse el servicio de garantía, la asunción del riesgo de insolvencia
sólo se explica desde una situación de plena titularidad de los créditos; bien se
instrumente jurídicamente por medio del intercambio definitivo de un crédito por
un precio, insertándose la operación en el esquema de la compraventa, bien sea
la causa de la cesión distinta, existen dificultades para reconocer el efecto traslativo
pleno en el caso del factoring financiero sin acompañamiento de aquel servicio
de garantía, es decir, cuando el propósito negocial es la movilización de los créditos
del empresario, pero sin liberarle de los riesgos de la insolvencia de sus clientes,
habida cuenta que la transmisión del riesgo de insolvencia suele elevarse a la
(*) Tomado de: “Aspectos Jurídicos los Contratos Atípleos’’ E. Chuliá Vlcént-T. Beltrán Alandete,
Tomo I, págs.74-75. J.M. BOSCH EDITOR, Barcelona-España. 1999.
CONTRATOS [ /Je r'n ij i c<. s nn j,i'i-.p'u lencia y Modelos)
766
F a c t o r in g : M o d a l id a d e s
( P r o p io o s in r e c u r s o )
R° CASACIÓN 26/1996
Sentencia del Tribunal Supremo Español N° 67/2001
Sentencia N° 67/2001, de 2 de febrero de 2001 (Primera Sala Civil)
F a c t o r in g : D e f in ic ió n
F a c t o r in g : C e s ió n d e l c r é d it o , d e b e p r e c is a r e l
I. INTRODUCCIÓN
Los órganos encargados de la gestión de las empresas deben decidir cuál es la
mejor alternativa de financiamiento para alcanzar sus metas operativas. Existe una
amplia gama de posibilidades, partiendo del aporte de capital efectuado por los propios
socios, pasando por el crédito bancario, hasta llegar a la alternativa de ofrecer títulos
emitidos por las empresas para su colocación a través del mercado de valores.(*)
(*) Abogado y doctor en Derecho Privado por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Profesor
universitario desde el año 1957 hasta la fecha. Fue Pro-Rector de la Pontificia Universidad
Católica del Perú y decano de la Facultad de Derecho por un total de cuatro períodos.
Profesor honorario de varias universidades peruanas y profesor visitante y conferencista
en diversas universidades del país y del exterior. Ha sido Decano del Colegio de Abogados de
Lima (1993-1994).. Ex Congresista de la República (1995-2000). Condecorado por el Ministerio
de Educación con las Palmas Magisteriales en el grado de Amauta. Es autor de numerosas
publicaciones. Miembro fundador del Estudio de abogados que lleva su nombre. Es actualmente
miembro del Consejo Consultivo de la Presidencia del Poder Judicial e integrante de las
Comisiones Consultivas de Justicia y de Relaciones Exteriores. Miembro de la Comisión
Reformadora que dio lugar al Código Civil de 1984.
770 El Contrato do Undorwríting / Jorge Avendano Valdez
1. GRADOS SMITH, Pedro; CHAVEZ MUJICA, Tatiana; ZUÑIGA GAMERO, Magali: “La Bolsa.
Principios Básicos”. Universidad de Lima, Lima, diciembre 1993, p. 35.
CONTRATOS ■Durt'na, l sin <nn Jjnspmdencj y Modelos; | 771
Boneo y Barreira opinan que “un sector importante del mercado de capitales, lo
constituye el mercado de valores. En él. La intennediacidn entre la oferta y demanda de
recursos opera mediante el tráfico de títulos valores”2.
Por el tipo de colocación, el mercado de valores se divide en dos sub mercados
de características y funciones diferentes: el mercado primario y el secundario.
En el primero se negocian los valores recién emitidos. “El mercado primario es el
mercado de emisiones, es decir, donde se realiza la primera colocación de los valores,
y mediante el cual se permite recoger recursos frescos para la constitución del capital de
las empresas y/o para la ampliación del mismo, en el caso que ya estén en marcha. A
este mercado, al que se le llama también mercado de financiamiento, porque constituye
una fuente de captación de recursos financieros, es al que se dirige la oferta pública
primera de acciones y obligaciones’3.
El mercado secundario es aquel en el cual se da liquidez a valores ya emitidos.
Mientras el mercado primario tiene por objeto principal captar recursos, en el mercado
secundario se transmiten títulos ya existentes.
La operatividad del mercado primario depende directamente de la eficiente
circulación de los títulos en el mercado secundario, puesto que los títulos colocados por
primera vez en el mercado, son negociados posteriormente, luego de la primera
adquisición. La falta de una fluida circulación de los títulos en el mercado secundario
reduciría el interés de los inversionistas, interés que radica en la especulación en cuanto
al valor de los títulos como consecuencia de las sucesivas transferencias a realizarse
en el mercado secundario.
El contrato de underwriting se desarrolla en el mercado primario. En este nivel esta
figura genera diversas ventajas para las transacciones, entre las cuales puede
mencionarse la de proveer de recursos económicos a las empresas y la de permitirle una
mayor capitalización, sin que sea necesario el aporte de los accionistas. El contrato de
underwriting es un mecanismo que permite obtener financiamiento incluso con anterioridad
a la colocación en el mercado primario de los valores emitidos por las sociedades.
supone una técnica de financiación que la banca moderna, conformada por bancos de
inversión, pone al servicio de las empresas, anticipando fondos contra la entrega de
emisiones de acciones o títulos de deuda56
Fernando Vidal señala que el contrato o de underwriting “es un contrato de
prestaciones recíprocas, cuyo objeto es la obligación de colocar la emisión -obligación
de hacer- por parte del colocador de los valores y el de pagar la suma pactada -obligación
de dar- por parte de la sociedad emisora” 5
Los tres aspectos citados están orientados a prever el interés que los
títulos despertarán en el mercado de valores. Si la empresa no tiene solidez
económica o buenas posibilidades de desarrollo, ella no representará interés de
inversión por parte de los presuntos inversionistas a quienes se dirigirá el
underwriter con su oferta. Es indispensable para que los títulos conciten interés,
que la deuda que respaldan, en el caso de los bonos, o la alícuota del capital
social que representan, en el caso de las acciones, se encuentren amparados
por la solvencia de la empresa. Tratándose de bonos, la ley permite constituir
garantías específicas.
De otro lado, para que los títulos sean verdaderamente atractivos, deben
ser demandados en el mercado primario y generar expectativa de circulación en
el mercado secundario.
Esta última etapa del proceso se inicia con la emisión de los títulos y culmina
con la colocación de los mismos.
V I. CARACTERES ESTRUCTURALES
a) Es un co ntrato co nse nsu al, puesto que se p erfeccio na con el sim ple
consentimiento de las partes, y desde ese momento surte plenos efectos jurídicos,
independientemente de que se lleve a cabo la colocación de los valores en el
mercado.
a) Underwriting en firme.
Nótese que el underwriter suscribe las acciones, lo cual pese a ser una
suscripción temporal, le confiere la calidad de accionista, y como tal, el derecho a
ejercitar derechos políticos y a percibir utilidades.
10. LINARES BRETON, Samuel E: “la operación financiera del underwriting”. En: Revista jurídica
Argentina La Ley, tomo 140, oct/dic 1970, La Ley S.A. Ed. E Impr., Bs. As. p. 113.
11. SODERQUIST, Larry; GABALDON, Theresa: “Secundes Law”. Fundatlon press. New York,
1998, p. 29.
12. Cosa similar ocurre en el caso de emisión de bonos, en que el interés económico del undenvriter
no es percibir intereses derivados de la tenencia de los títulos, sino especular con su
colocación en el mercado secundario.
r
777
b) Underwriting StandBy.
y como tales confieren a su titular la calidad de accionista, otorgándole por esta razón
una serie de derechos (como por ejemplo el derecho a percibir dividendos y utilidades)
y obligaciones (por ejemplo la de pagar el dividendo pasivo correspondiente a las acciones
suscritas y no terminadas de pagar).
A diferencia de las acciones, que son instrumentos de renta variable Jos bonos
son títulos de renta fija, mediante los cuales la empresa obtiene financiamiento a largo
plazo y se obliga con los suscriptores a pagarles, en el plazo y forma predeterminados,
el capital que han invertido en la suscripción de los bonos, mas el interés pactado.
17. La actual Ley del Sistema Financiero contiene un esquema modular, de acuerdo al cual se
define el ámbito de actuación de los distintos tipos de empresas que intervienen en el sistema
financiero. De acuerdo a ello, tanto las empresas bancadas como las financieras pueden
llevar a cabo operaciones de underwriting.
El Contrato de Underwritíng / Jorge Avendano Valdez ]
Para efectuar dichas operaciones, las empresas del sistema financiero tienen
que construir departamentos separados claramente diferenciados, lo cual no acarrea la
necesidad de crear subsidiarias.
Sin perjuicio de ello, el Decreto Legislativo N° 861, Ley del Mercado de Valores,
faculta en su artículo 194° inciso e) a las sociedades agentes de bolsa a suscribir
transitoriamente una parte o la totalidad de emisiones primarias de valores, así como
adquirir transitoriamente valores para su posterior colocación en el público.
18. Los American Depositary Receipts ADR- se encuentran regulados en el Perú por la Resolución
CONASEV N° 358-93/94.10.0, la misma que define a los ADR como certificados que representan
para sus tenedores propiedad sobre acciones emitidas por empresas inscritas en la CONASEV,
depositadas en un banco custodio local. Dichos certificados se negocian en el mercado de
valores extranjero.
19. PASTOR PAREDES, Jorge: “Mercados de Futuros y de Opciones en instrumento financieros
y commodities”, Lima 1997, p.99.
20. VERCHIK, Ane: “Mercado de Capitales". Ediciones Macchi, Argentina Córdoba, 1993.
Modelos)
Señor Notario:
Sírvase extender en su registro de escrituras públicas una de emisión y colocación de
acciones (UNDERWRITING) que celebran de una parte la .................con RUÓ N°....... inscrita
en la ficha........del Registro de Personas Jurídicas, con domicilio en.......... , debidamente
representada por su Gerente..........Sr........... identificado con DNI N°............... según poderes
registrados en la ficha.........del mencionado registro, a la que se llamará LA EMISORA; y de
la otra parte, el Banco.......... inscrito en la ficha.......... del mencionado Registro, representado
por su Gerente General Sr....................... identificado con DNI N°..........según poderes
inscritos en la ficha..............del referido Registro, con domicilio e n .........................con RUC
N°..............y a quien se llamará EL BANCO, en los términos y condiciones siguientes:
ANTEDENTES:
PRIMERA: LA EMISORA es una sociedad anónima cuyo capital totalmente pagado
es de............ ( ......), y cuyo objeto e s ......................
EL BANCO, a su vez, es una institución bancaria que opera debidamente autorizada
y tiene como fines los que determina la ley.
DE LA COLOCACIÓN DE ACCIONES
CUARTA: LA EMISORA declara que ha vencido el plazo para el ejercicio del derecho
de preferencia de sus accionistas tal como lo establece el Estatuto, sin que ninguno de
ellos haya ejercitado su derecho de preferencia, por lo cual EL BANCO es libre de hacer
la colocación que se le ha encomendado.
QUINTA: La colocación deberá efectuarse en forma pública.
MODALIDAD DE LA COLOCACIÓN
SEXTA: La modalidad de este contrato es la de COLOCACION DE FIRME Y CON
PREFINANCIACION, de modo que EL BANCO asume la totalidad de las acciones
emitidas y corre, por lo tanto, con el riesgo de la colocación.
CONTRATOS iDoctrrm LvaisldciOfl Jurisprudencia y Madofof! 783
OBLIGACIONES DE LA EMISORA
OBLIGACIONES COMUNES
DOMICILIOS:
VIGÉSIMA PRIMERA: Las partes señalan para todo efecto como su domicilio el
señalado en la introducción del presente documento, y se someten al fuero de los
jueces y tribunales de la ciudad d e .................
Agregue Ud. Señor Notario, las cláusulas que son de ley. Inserte las actas de
Junta Extraordinaria de Acciones de la Compañía.........y de Sesión de Directorio del
Banco fechadas e l...........y ............... respectivamente, así como los anexos A y B a que se
ha hecho mención en la cláusula Séptima del presente contrato, y eleve partes al Registro
de Personas Jurídicas, a efectos de que se inscriba este contrato.
EMISORA BANCO
CONTRATOS fQocmna Ltgisla&on '¡prudencia / Moucl.'S) 785
VISTOS:
El expediente N° 99/00175 de EDEGEL S.A.A. y el Memorándum Ejecutivo N°
0011-99-EF/94.50 de fecha 17 de mayo de 1999 de la Gerencia de Emisores y Empresas.
CONSIDERANDO:
Que, de conformidad con el artículo 304° de la Ley General de Sociedades, Ley N°
26887, las sociedades pueden emitir obligaciones;
Que, con fecha 14 de diciembre de 1998 la Junta General de Accionistas de
EDEGEL aprobó por unanimidad una o más emisiones de bonos corporativos, las
cuales podrán ser realizadas en el marco de un programa de emisión, hasta por un
monto máximo de ciento ochenta millones y 00/100 Dólares de los Estados Unidos de
América (US$ 180 000 000,00) o su equivalente en moneda nacional, delegando al
Directorio tanto la facultad de determinar si dichas emisiones se realizarán en el marco
de un programa de emisión así como decidir y acordar las características y condiciones
de dichas emisiones, pudiendo delegar todas as facultades otorgadas sin límite ni
restricción alguna a las personas que estime conveniente;
Que, en sesión de Directorio de EDEGEL S.A.A. de fecha 15 de diciembre de 1998
se delegó en el Gerente General y en el Gerente de Administración y Finanzas la
facultades para que, indistintamente cualquiera de ellos, decidan y acuerden todos y
cada uno de los términos de las emisiones a ser efectuadas;
Que, el Gerente de Administración y Finanzas de EDEGEL S.A.A. ha solicitado a
CONASEV la aprobación del trámite anticipado correspondiente a la oferta pública primaria
de bonos corporativos, el registro del prospecto marco correspondiente al “ Primer
Programa de Bonos Edegel”, y la inscripción del mencionado programa en el Registro
Público del Mercado de Valores;
Que, conforme a lo establecido por el artículo 3o del Reglamento de Oferta Pública
Primaria y de Venta de Valores Mobiliarios, aprobado por Resolución CONASEV N° 141-
98-EF/94.10, así como por el artículo 2o de la Resolución CONASEV N° 039-99-EF/
94.10, EDEGEL S.A.A. cumple con los requisitos para ser considerada Entidad Calificada.
Que, en el presente caso se ha cumplido con presentar la información requerida
por el Reglamento de Oferta Pública Primaria y de Venta de Valores Mobiliarios, aprobado
por Resolución CONASEV N° 141-98-EF/94.10, así como las disposiciones aprobadas
mediante Resolución Gerencia General NG 211-98-EF/94.11; y,
Estando a lo dispuesto por los artículos 53 y siguientes de la Ley del Mercado de
Valores, Decreto Legislativo N° 861, así como lo establecido en sesión del Directorio de
CONASEV de fecha 06 de abril de 1999, de acuerdo a lo cual el Gerente General de
CONASEV se encuentra facultado para aprobar el trámite anticipado de inscripción de
786 El Contrato de Underwríling / Jorge Avendano Valdez
SE RESUELVE:
Artículo 1°.- Aprobar el trámite anticipado correspondiente a la oferta pública
primaria de bonos corporativos de EDEGEL S.A.A.
Artículo 2°.- Disponer el registro del prospecto marco correspondiente al primer
programa de bonos corporativos de EDEGEL S.A.A hasta por US$ 180000 000,00
denominado “Primer Programa de Bonos Edegel”.
Artículo 3°.- Disponer la inscripción del mencionado programa en el Registro
Público del Mercado de Valores.
Artículo 4°,- En tanto EDEGEL S.A.A. mantenga su condición de Entidad Calificada,
la inscripción de bonos y el registro de los prospectos a utilizar en la oferta pública a que
se refiere el artículo 1o precedente se entenderán realizados en la fecha de entrada en
vigencia de la presente resolución. En su defecto, la inscripción de bonos y el registro de
los prospectos correspondientes se sujetarán a lo dispuesto en el numeral 2, literal b),
del artículo 14 del Reglamento de Oferta Pública Primaria y de Venta, aprobado por
Resolución CONASEV N° 141-98-EF/94.10.
Artículo 5.- La aprobación, el registro y la inscripción a que se refieren los artículos
1o, 2o y 3o de la presente Resolución no implican que CONASEV recomiende la inversión
en los valores u opine favorablem ente sobre las perspectivas del negocio. Los
documentos e información para una evaluación complementaria están a disposición de
los interesados en el Registro Público del Mercado de Valores.
Artículo 6°.- La publicidad que se realice para promover la oferta pública a que se
refiere el artículo1° precedente, deberá sujetarse a las condiciones previstas en el
contrato marco de emisión y sus complementarlos, en el prospecto marco y sus
complementarios, y en lo establecido en la presente Resolución.
Artículo 7°.- La colocación de los bonos a que se refiere el artículo 1o de la
presente Resolución deberá efectuarse en un plazo que no excederá de nueve (9)
meses, contados a partir de la fecha de su inscripción en el Registro Público del Mercado
de Valores, prorrogables hasta por un período igual, a petición de parte.
Artículo 8°.- EDEGEL S.A.A. queda obligado a presentar a esta Comisión Nacional
la información a que se refieren los artículos 23 y siguientes del Reglamento de Oferta
Pública Primaria y de Venta, aprobado por Resolución CONASEV N° 141-98-EF/94.10,
las disposiciones aprobadas mediante Resolución Gerencia General N° 211-98- EF /
94.11, y el artículo 39° del Reglamento del Registro Público del Mercado de Valores,
aprobado por Resolución CONASEV N° 079-97-EF/94.10. Asimismo, tan pronto culmine
la colocación de la oferta pública de bonos, la empresa emisora deberá poner el hecho
en conocimiento de CONASEV.
Artículo 9°.- Transcríbase la presente Resolución a EDEGEL S.A.A.; a Citibank
N.A. Sucursal de Lima, en su calidad de entidad estructuradora; al Banco Continental en
su calidad de entidad estructuradora y representante de los obligacionistas; a Bank
Boston N.A. Sucursal del Perú en su calidad de entidad estructuradora; a Citicorp Perú
787
EDEGEL S.A.A.
Sociedad anónima abierta constituida bajo las leyes de la República del Perú
Primer Programa de Bonos Edegel
Hasta por US$ 180'OOO,OOO (ciento ochenta millones y 00/100 Dólares de los
Estados Unidos de América) o su equivalente en moneda nacional
Bonos Edegel -Cuarta Emisión
Oferta Pública Primaria
Hasta por US$ 20 0 0 0 , OOO
(veinte millones y 00/100 Dólares de los Estados Unidos de América)
Entidades Estructuradoras
Estos valores han sido inscritos y el texto de este prospecto ha sido registrado en
el registro publico del mercado de valores de la comisión nacional supervisora de
empresas y valores, lo que no implica que ella recomiende la inversión en los mismos
u opine favorablemente sobre las perspectivas del negocio o certifique la veracidad o
suficiencia de la información contenida en el presente documento.
La fecha de este Prospecto Complementario es 9 de noviembre de 2000
Aviso al Inversionista
(Declaración de Responsabilidad)
Este Prospecto Complementario debe ser leído conjuntamente con los estados
financieros de Edegel y con el Prospecto Marco.
Los firmantes declaran haber realizado una investigación, dentro del ámbito de
su competencia y en el modo que resulta apropiado de acuerdo con las circunstancias,
que los lleva a considerar que la información proporcionada por Edegel, o en su caso
incorporada por referencia, cumple de manera razonable con lo exigido en las normas
vigentes, es decir, que es revelada en forma veraz, suficiente, oportuna y clara; y, con
respecto a las ocasiones en que dicha información es objeto del pronunciamiento de un
experto en la materia, o se deriva de dicho pronunciamiento, que carecen de motivos
para considerar que el referido pronunciamiento contraviene las exigencias mencionadas
anteriormente, o que dicha información se encuentra en discordancia con lo aquí
expresado.
• Albert Forsyth. Socio PrincipalMuñiz, Forsyth, Ramírez, Pérez- Taiman & Luna-
Victoria Abogados. Asesores Legales de las Entidades Estructuradoras
• Luis Felipe Mauger Director de Productos BankBoston, N.A. Sucursal del Perú.
Entidad Estructuradora.•
1. ANTECEDENTES
(*) Abogado por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, con Tesis y calificación 18
(equivalente a c u m la ude) y recomendación oficial de publicación. Ex Director de los Talleres
de Investigación: “Fénix” y “José de la Riva Agüero” en esa Universidad. Director Ejecutivo de
“ESDEN” Escuela Superior de Derecho, Empresa y Negocios. Ha publicado artículos y ensayos
sobre de derecho, en especial de las áreas derecho de contratos, derecho constitucional y
procesal Constitucional.
El Contrata de Fideicomiso / Hugo Huayanay Chuquillanqu
los encontramos en roma a fines de la república, con la fiducia romana, la cual estaba
estrictamente vinculada a los actos sucesorios teniendo como base fundamental la
confianza.
La fiducia romana era un negocio de confianza por el cual una persona transfería
sus bienes a un tercero (de su absoluta confianza) para que estos, de acuerdo a su
voluntad, fueran entregados a un beneficiario. Ahora bien, los romanos distinguían dos
tipos de fiducia: La fiducia cum amico, que era aquella por la cual se transfería bienes y
derechos a un tercero para que fueran administradas o preservadas ante el peligro de
la existencia de riesgos personales,1 en beneficio propio o cuando los beneficiarios
estaban impedidos legalmente de adquirir directamente; y la fiducia cum creditote,
mediante la cual se transfería bienes de un deudor a favor de su acreedor como garantía
de la obligación que aquel había contraído.
Como una variación inglesa del fideicomiso y las fiducias romanas, encontramos
al “ trust', esta se deriva del dominio fiduciario y equitativo sancionado poco después por
el derecho de equidad. El trust se origina de primitivo “use” ingles, el que consistía en
la transferencia de tierras a favor de un feudatario, el cual a manera de testaferro las
poseía o administraba en beneficio de un tercero o del propio transfiriente. En el trus
ingles la propiedad corresponde a dos personas simultáneamente donde uno debe
usar la propiedad en beneficio del otro. Posteriormente con el correr de los siglos en
Estados Unidos y Canadá redesarrolla el trust pero con características muy distintas a
las del derecho inglés; en el caso latinoamericano sobre la base del “Fides” románico,
que va tomando forma en la “ Fiducia”23y aparecerá regulado bajo el nombre de
fideicomiso en distintas legislaciones.
1. En el Imperio romano el fideicomiso fue visto como una figura riesgosa puesto que nada
obligaba al fiduciario a entregar el fideicomiso a su beneficiario, por ello Justiniano confirió a
los cónsules intervención en caso de comportamiento doloso por parte del fiduciario.
2. Existen dos tipos de fiducias: La Fiducia Civil.- En esta modalidad cualquier persona puede
entablarse como fiduciario, se agrega que el fiduciario aquí se queda con los frutos del
patrimonio ficeicometido; y la Fiducia Mercantil.- En esta modalidad es fiduciario entidad que
cuente con la autorización previa de un órgano del estado para cumplir tales fines.
3. en el artículo 1014 del Código Civil promulgado en 1936, en el cual aparecen los bancos con
“fideicomisarios” nombrados necesariamente en el acto de la emisión de las hipotecas, como
en el artículo 1812 que dispone también su nombramiento en la emisión de bonos hipotecarios
y dispone que éste recaiga directa y exclusivamente en el Banco Central Hipotecario
4. Por primera vez aparecen los “fideicomisos de cualquier otro carácter”, en el inciso 14o., el
último del artículo 94o. de la primera Ley de Bancos, dictada por decreto Ley No. 7159 y
promulgada en 1931.
5. En el artículo 1108 del Código Civil, promulgado en 1984, aparecen también los bancos como
“fideicomisarios” en la emisión de títulos hipotecarios.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación. .Jutiapruilencui y Modelosj 793
Decreto Legislativo N° 7706 donde aparece regulado por primera vez (arts. 314-350); y
posteriormente en la Ley de Bancos (Ley N° 26702), es desarrollado en 34 artículos (del
Art. 241 al 274), cuyas normas han sido reglamentadas por la SBS mediante Resolución
N° 1010-99 de 11 de noviembre de 1999.
2. DEFINICIÓN
6. El Fideicomiso fue definido y normado por vez primera en el Decreto Legislativo N° 770
(apareció en su Título I “Bancos Múltiples” Capítulo IV, Instrumentos y Contratos, un Sub
capítulo IV que trata “Del Fideicomiso”, integralmente, entre los artículos Nos. 314 y 350 de
la ley en referencia, seguido por el Sub-Capítulo V dedicado a “otras Comisiones de
Confianza, haciendo evidente que el fideicomiso es una de ellas), que aprobó el nuevo
texto de la Ley General de Instituciones Bancadas, Financieras y de Seguros en el año
1993. Esta norma fue derogada y reemplaza por Ley N° 26702 Ley General del Sistema
Financiero y del Sistema de Seguros y Orgánica de la Superintendencia de Banca y Seguros
emitida en el año 1996.
7. Ley 26702, Ley de Bancos.
El Contrata de Fideicomiso l Hugo Huayanay Chuquillanqui \
EL CONTRATO DE FIDEICOMISO
(CUADRO N° 1)
t -------------------------------- ^
FIDEICOMITENTE FIDUCIARIO
(Fiduciante) Ef'ftbd Ul-láOd v
Transó ere un patríminio ¡ >
2 y te y le*-t*- v* i df-'-teT** W„S T'J*' ufe
3' > í 'r ! f- u * ívb Dife n- cu1' u hjt bíu
-V ¡ «. " ft U líF J b
En Beneficio de:
Como hemos venido señalando en le párrafo anterior, los orígenes de este contrato
se remontan a muchísimos siglos atrás en la antigua Roma, sin embargo, es necesario
señalar que hoy por hoy, se va venido convirtiendo en cono la dinámica del comercio
mundial y las inversiones; el fideicomiso va venido cobrando una gran importancia y
vigencia, al punto que lo ubican como una de las mas importantes figuras contractuales
empleadas en le manejo eficiente de grandes recursos y patrimonios bajo el manejo de
una eficiente y calificada administración.
4. CARACTERES JURÍDICOS
Entre los principales caracteres jurídicos que presenta este contrato podemos
señalar los siguientes:
e) Es un contrato bilateral, pues dos son las partes intervinientes en este contrato,
así tenemos el fidelcomitente y el fiduciario.
i) Es una o p e ra ción fin an cie ra neutra, porque constituye un servicio que las
empresas del sector financiero y bancario pueden contratar con sus clientes que
lo soliciten, siempre que esté dentro del módulo de operaciones que cada una de
ellas pueda realizar.
5. ELEMENTOS
Presenta los siguientes:
9. Dominio Fiduciario: Es el derecho de carácter temporal que otorga al fiduciario las facultades
necesarias sobre el patrimonio fideicometido, para el cumplimiento del fin o fines del fideicomiso,
con las limitaciones establecidas en el acto constitutivo. El dominio fiduciario se ejerce desde
la transferencia de los bienes objeto del fideicomiso, salvo disposición contraria establecida
en el acto constitutivo, hasta el término del fideicomiso.
[ CONTRATOS (Doctrina, LegMatíón, Jurisprudencia y Modelos) | 797
6. CLASES DE FIDEICOMISOS
Podemos señalar las siguientes:
Ahora bien, en caso que se proceda vender los activos fideicometidos, y para que
aquellos no sean rematados judicialmente, el deudor (fideicomitente) tiene mayor
oportunidad de obtener un mayor precio de su bien dispuesto.1 111
0 2
10. Los activos que conforman el patrimonio autónomo fideicometido no generan cargos al
patrimonio efectivo del fiduciario. Solamente podría atribuirse el cargo, por el Importe de los
correspondientes daños y perjuicios, si éste tuviera responsabilidad por mala administración
y así se determine por resolución jurisdiccional.
11. Como menciona Ullses Montoya “en cumplimiento de la orden recibida de su cliente, el banco
procederá a venderlos, liquidarlos y satisfacer la obligación, es decir la entidad fiduciaria se
concreta a cumplir de manera simple y llana la obligación que por medio del convenio asumió.”
(MONTOYA MANFREDI, Ulises: “Derecho Comercial”, Tomo I, Lima, Edit. Grijley 1999, Pág.
319).
12. Es en realidad un albaceazgo, con la diferencia que la persona jurídica que cumple el papel
de fiduciario,es una persona jurídica, que a su vez evita los riesgos que se produce en una
persona física.
13. CELIAREVALO, Marco: “El fideicomiso en el derecho bancario”, en Revista Jurídica del Perú,
N° 2 Pág. 188.
798 El Contrata do Fideicomiso / Hugo Huayanay Chuquillanqui
Puede ocurrir a veces que sean bienes y negocios, los destinados a ciertas
actividades para obtener rendimientos económicos, a fin de realizar una inversión
futura, por ejemplo: se alquila un local y con la renta se adquirirá acciones de una
empresa.
14. Los activos se pueden constituir por carteras de créditos, activos inmobiliarios, rentas o
flujos de caja, títulos de deuda publica, acciones. Es decir todo valor que se negocia en los
mercados centralizados de negociación.
15. De acuerdo a nuestra Legislación, el fiduciario deberá ser una entidad crediticia, que estará
sometida a rigurosos controles por parte del estado, en base a su conocimiento del mercado
financiero y bursátil; quien además deberá actuar como diligente propietario, en la
administración del patrimonio fideicometido.
16. El Fideicomiso de seguro de vida, se determina esta clasificación por el origen que produce
el fideicomiso ya que su efecto es similar al fideicomiso de administración siendo el detalle
relevante que el bien aquí destinado es el monto recibido al momento del deceso del asegurado,
su fin es la correcta aplicación de esta suma.
C O N T R A T O S (D o c trin a , L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 799
Entre las características más revelantes de este contrato, podemos señalar las
siguientes:
ÉL CONTRATO DE FIDEICOMISO
(CUADRO N° 1)
Ru^sc-oti >¿f>£jrca 301 :« qt.* 3 . Rd«£smtt«nte t'arcfteró bisoco ai
Fiduciaria, pasa la ccetsitaorv z>¿ „i< ¿¿rwof*.: idwufltt-tjicfc, vuttSQ
a: ú ís rm io ú v a o e > 3 tefeeo» ai r^iír¡&<U¿ ú t urt *\a f-spatjf<u fn
DEFINICIÓN tevu- d*-í f«3cv<rúf*iífwt# i s? ©¿n^r-osdo fifitenanrafosaírk».
j- -i PARTES
; F íd M C ia n o : I-’ ta t- ü u - ' r ¿ qu« t to b e 12 t t J 1*?- ti¿¿ s« o», - »
: aetacftós cofi prouo cte u-^cnamoí. í->a * t? tump- i'**j r 'ijd(‘ «■«.**
T avoae teaetéqfrs&ct. *
C v i-- .in m u tó cotí ul-'f'ío « xjsIic -’.-j í t t ' 2 > í* i« e launfi; p3tá té csost&ü*
¿ o u 4 c u ’ p a ü in o ^ ío #i£&«.<* i * U ta , 5 <* «.unp /r-£í»;u d e un fin
OBJETO - - «spw citay t?r t é w í ch la persu-’,¿ q ue t a* ~Jv¡- ‘ f dfc'>.Ofv¡it<*i¡té¡- & de
un te reeco >1id o o o rn o a neo,
Contrato ;
de i
m*~ -A_ * ------- -8
rioeiconiiso |;
«y j Fidecomiso «n Garantía. Agsq, as tsenss si paínmorio íisetccn^ de está
\ desbfiacíc a asegura? «i curpi/rinto úb BeteTtrad-as osivgacores cor-
j! estadas d por esnoertatss, a carpo etei &fetctrr (tente o 3e un tersare,
s Fidsíeomrao de íitejlsacson: Aqu' se carsttjje ir¡ palrkonso frfeecosraliiáQ
htate k ssisds ransíorspos ce scivds cuyc prapósit»ferd^r^níai ecrv
wMt sr ’Bspatíár e cago es les de^ecm oqr%téos 3 los litu&pgs ds vate*
rs%st ’-cc^ co15 tarso te neta patri-no^c
5
i. ¥ é *si£ o m \ ® testamentaF?e: Aquí, el teslsdcf ífidobocráentei designa al
’ du^a' u para qjp se ne-ga cargo de tota o pane de sise bienes -patrírmnío:
desales ese su r^e"-*
CLASES I ’ Fid&i comiso st^InversKm.* Aquí el F*deicomSe<t€ tasca destina? e
p -t fde vtTei de 2 ciertas acliv^dadse de ;as Cuales pueden
d e - « 3'se re - < rr !e ',‘ ss gqunóm rcos.
Fideicomiso de Administración.- Áqui s« transare is orapíessd de cuai-
ta«í be- dsífKod® siners ;tienen, oerectas, tiüáes valsm c taicei ai
’ cjác anL para tas este té adnnístre c sea de-simaon a; cunr(iTríento oe
una -na ¡aau sslaDíedea de acjgrds a té dispuesto oo- si fií^bsniiente
8. FO R M ALIDAD ES
Los contratos de fideicomiso deben celebrarse mediante documento privado o
protocolizado notarialmente. Cabe señalar que en el caso que este contrato comporte la
transferencia de activos mobiliarios, este debe ser inscrito en la Central de Riesgos de
la Superintendencia de Banca y Seguros, según lo considere el fideicomitente (art. 246
de la LGB, Ley N° 26702). En el caso del fideicomiso testamentario la voluntad del
fideicomitente debe ser expresada mediante testamento.
CONTRATOS (Doctrina, Legislación, Jurisprudencia y M odelosf] 801
Según el artículo 251 del la Ley 26702 (LGB), el plazo máximo de duración de
estos contratos es de 30 años contemplándose las excepciones siguientes:
22. El artículo 273° de la Ley N° 26702 (Ley de Banca) dispone que el patrimonio fideicometido es
administrado por el fiduciario (empresa fiduciaria) y que éste debe llevar contabilidad separada
por cada patrimonio fideicometido bajo su dominio fiduciario en libros debidamente legalizados,
sin perjuicio de las cuentas y registros que corresponden en los libros de la empresa,
cuentas y registros que deben mantenerse conciliados con aquélla. La empresa fiduciaria no
tiene derecho de propiedad sobre los bienes que conforman el patrimonio fideicometido,
siendo solo responsable de la administración del mismo.
23. Las Normas Internacionales de Contabilidad - NICs, se denominan actualmente como Normas
Internacionales de Información Financiera - NIIFs.
C O N T R A T O S (D o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 803
12. PROHIBICIONES
En términos generales los fideicomisos expresamente prohibidos por la ley son:
a) Los fideicomisos secretos; b) Los fideicomisos que constituyen fraudes a terceros; c)
Aquellos en los que el fiduciario sea el propio beneficiado; y, d) Los fideicomisos eternos
y perpetuos.
Por otro lado, de acuerdo a lo establecido por el artículo 257 de la Ley General
de Bancos (Ley 26702), la empresa fiduciaria está prohibida de afianzar, avalar o
garantizar en forma alguna ante el fideicomitente o los fideicomisarios los resultados
del fideicomiso o de las operaciones, actos y contratos que realice con los bienes
fideicom etidos.
De igual modo el artículo 258 de la Ley General de Bancos, señala que la
empresa fiduciaria está prohibida de realizar operaciones, actos y contratos con los
fondos y bienes de los fideicomisos, en beneficio de: la propia empresa fiduciaria, sus
directores y trabajadores y, en su caso, los miembros del comité a cargo del fideicomiso;
el factor o factores fiduciarios; los trabajadores de su departamento fiduciario y los
contratados para el fideicomiso de que se trate; sus auditores externos, incluidos los
profesionales socios que integran la fima y los profesionales que participan en las
labores de auditoría de la propia empresa. Estos impedimentos alcanzan al cónyuge y
a los parientes de las personas indicadas, así como a las personas jurídicas en el que
el cónyuge y los parientes tengan personalmente una participación superior al cincuenta
por ciento.
a) Obligaciones:
b) Derechos:
24. Los Principios de Contabilidad aplicados en los Estados Unidos de Norteamérica (USGAAP)
son aprobados por el FinanciaI Accounting Standards Board (FASB).
r
804
B. De la Empresa Fiduciaria
3. Proteger con pólizas de seguro los riesgos que corran los bienes
fideicometidos, de acuerdo a lo pactado en el instrumento constitutivo;
4. Renuncia expresa de todos los fideicomisarios a los beneficios que les concede
el fideicomiso.5
7
6
BIBLIOGRAFÍA
• ARIAS SCHREIBER, Max: Contratos Modernos, Edit Gaceta Jurídica Pág. 57, Lima,
1999.
• BONFANTI, Mario: “Contratos Bancarios". Edit. Abeledo Perrrot. 1993. Buenos Aires-
Argentina.•
• MUÑOZ, Luis: “Contratos y Negocios Jurídicos Financieros”. Tomo II. Parte Especial.
Edit. Universidad. 1981. Buenos Aires - Argentina.
• VILLAGORDA L., José Manuel, Doctrina general del fideicomiso. Ed. Porrúa México
1982. ’ ’
808 El Contrato de Fideicomiso / Hugo Huayanay Chuquilla
MODELO N° 1
MODELO DE CONTRATO DE
FIDEICOMISO DE INVERSION
Señor Notario:
ANTECEDENTES
DEL BENEFICIADO
CUARTA: “EL Fiduciario”, acepta el encargo que se le hace para actuar como
fiduciario y declara expresamente que los bienes que le han cedido están en la condición
C O N T R A T O S (D o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) |
DURACIÓN
DÉCIMO PRIMERO: La duración de este fideicomiso de inversión es d e ........... años,
contados a partir de la fecha de la escritura pública, por consiguiente una vez vencido
dicho plazo, los bienes deberán ser entregados en propiedad al “El Fideicomisario”.
PAGO
DÉCIMO SEGUNDO: “El Fiduciario” percibirá como retribución por el encargo que
ha asumido el................. (...%) de la renta neta que se obtenga, adicionalmente a dicha
retribu ción , los gastos que surjan com o conse cue ncia de su a dm in istración ,
entregándolos con respaldo documentado. La liquidación de dichos gastos se entregará
al constituyente con copia para “El Fideicomisario”,
810 El Contrato de Fideicomiso / Hugo Huayanay Chtiquillanqui \
MODELO N° 2
FIDEICOMISO DE ADMINISTRACIÓN
De nuestra consideración:
Señor Notario:
PRIMERA: DEFINICIONES
Para efectos del presente contrato, los términos utilizados en plural y singular
tendrán los significados que a continuación se detallan:
Los derechos crediticios derivados de estos contratos forman parte de los FLUJOS
FUTUROS que integran el PATRIMONIO FIDEICOMETIDO.
1.8. DEUDORES CEDIDOS: Son las personas naturales o jurídicas que han celebrado
o celebren con el FIDEICOMITENTE CONTRATOS EXISTENTES DE VENTA DE
METALES o CONTRATOS FUTUROS DE VENTA DE METALES de los cuajes se
deriven derechos de crédito a favor de éste, y que sean identificados por el
813
1.10. DGM: Es la Direcci6n General de Minería del Ministerio de Energía y Minas, quien
interviene en el presente contrato conforme a lo señalado en el Decreto Supremo
N° 046-2004-EM y en señal de aprobación de los términos y condiciones pactados.
1.12. EL FIDEICOMITENTE: Es Doe Run Perú S.R.L quien cede los FLUJOS FUTUROS
con la finalidad que los mismos integren el PATRIMONIO FIDEICOMETIDO que en
virtud del presente instrumento se constituye. EL FIDEICOMITENTE ha convenido
con la DGM en respaldar y asegurar la ejecución del PAMA MODIFICADO mediante
el presente fideicomiso en administración; para cuyo efecto señalan conocer los
alcances y régimen legal vigente del presente contrato de fideicomiso, regulado
en el articulo 2410 y siguientes de la LEY y del REGLAMENTO.
1.16. FECHA DE CORTE: Es la fecha a partir de la cual los FLUJOS FUTUROS serán
cedidos a favor del PATRIMONIO FIDEICOMETIDO, lo cual deberá producirse en la
fecha que el FIDEICOMITENTE suscriba la escritura pública de constitución del
presente Fideicomiso. Esta suscripción acontecerá dentro del plazo de treinta
días de aprobada la solicitud de prórroga del PAMA MODIFICADO, de conformidad
a lo dispuesto por el artículo 7.7 del DECRETOSUPREMO.
1.17. FLUJOS FUTUROS: Son el cien por ciento de los derechos de crédito que
correspondan a EL FIDEICOMITENTE en virtud de los CONTRATOS EXISTENTES
DE VENTA DE METALES los mismos que son cedidos en su totalidad al
PATRIMONIO FIDEICOMETIDO. Los FLUJOS FUTUROS comprenden además,
los montos correspondientes a los intereses com pensatorios y moratorios,
814
1.18. FLUJO MÍNIMO ANUAL Es el monto mínimo promedio derivado de los FLUJOS
FUTUROS que deberán ingresar anualmente en la CUENTA DE RECOLECCION
en función al presupuesto de inversiones aprobado para la ejecución del PAMA
MODIFICADO.
1.19. LA LEY: es la Ley General del Sistema Financiero y del Sistema de Seguros y
Orgánica de la Superintendencia de Banca y Seguros, promulgada mediante Ley
N° 26702.
1.20. PAMA: Es el Programa de Adecuación y Manejo Ambiental que contiene las acciones
e inversiones necesarias para incorporar a las operaciones minerometalúrgicas,
los adelantos tecnológicos y/o medidas alternativas que tengan como propósito
reducir los niveles de contaminación ambiental hasta alcanzar los niveles máximos
permisibles de emisiones y/o vertimientos. Para efectos del presente fideicomiso,
se entenderá como PAMA al aprobado por el Ministerio de Energía y Minas para e!
Complejo Metalúrgico de La Oroya mediante Resolución Directoral Nro. 334-97 -
EM/DGM del 16 de octubre de 1997 y que fuera transferido a DRP durante el
proceso de privatización, incluyendo sus modificatorias.
1.21. PAMA MODIFICADO: Para efectos del presente fideicomiso, comprende tanto el
PROYECTO prorrogado como los otros Proyectos PAMA pendientes de ejecutarse
a la fecha de aprobación de la prórroga del PROYECTO.
SEGUNDA: ANTECEDENTES
4.1. El PATRIMONIO FIDEICOMETIDO está constituido por los FLUJOS FUTUROS que
son transferidos en fideicomiso vía cesión. EL FIDUCIARIO ejercerá el dominio
fiduciario sobre los FLUJOS FUTUROS a partir de la FECHA DE CORTE, en tal
sentido, los FLUJOS FUTUROS que se generen a partir de dicha fecha,
corresponderán única y exclusivamente al PATRIMONIO FIDEICOMETIDO.
4.3. Queda claram ente establecido que en ningún m om ento se tran sfiere en
PATRIMONIO FIDEICOMETIDO el PROYECTO contenido en el PAMA MODIFICADO,
el cual permanece en propiedad exclusiva y dominio de EL FIDEICOMITENTE.
5.3. Las partes dejan establecido que EL FIDUCIARIO deberá ejercer el dominio
fiduciario sobre los FLUJOS FUTUROS con la finalidad de administrarlos de
conformidad con lo establecido en el presente contrato así como destinarlos, por
cuenta y en interés de EL FIDEICOMITENTE, única y exclusivamente a la ejecución
del PAMAMODIFICADO.
5.4. LOS FLUJOS FUTUROS estarán afectados a favor del patrimonio fideicometido
hasta que el AUDITOR EXTERNO verifique que EL FIDEICOMITENTE ha ejecutado
C O N T R A T O S -'D o c trin a L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ! |
6.2. Las partes reconocen que la eficacia de la transferencia fiduciaria de los FLUJOS
FUTUROS se encuentra subordinada a su existencia posterior a la FECHA DE
CORTE Y al cumplimiento de lo establecido en las cláusulas 6.3, 6.4, 6.5, 6.6 Y 6.7
en los casos pertinentes.
6.3.1. Incluirá una cláu sula pactando con sus clien tes que los ingresos
devengados por estos contratos deberán depositarios en la CUENTA DE
RECOLECCIÓN a favor del PATRIMONIO FIDEICOMETIDO a partir de la
FECHA DE CORTE.
Dentro del plazo de cinco (5) días hábiles antes de la FECHA DE CORTE,
EL FIDEICOMITENTE deberá remitir a EL FIDUCIARIO copia del contrato
donde conste esta cláusula.
6.4.1. Incluir una cláusula mediante la cual pactará con sus clientes que los
ingresos devengados por estos contratos deberán depositarios en la
CUENTA DE RECOLECCIÓN a favor del PATRIMONIO FIDEICOMETIDO a
partir de una fecha determinada.
818 E l Contrato de Fideicomiso t Hugo Huayanay Chuquillanqui \
«- y M M s l J 819
OCTAVA:
Documentos sustentatorios correspondientes al pago provisional y al reajuste de
éste (facturas, notas de crédito, notas de débito, etc.)
Asumir el pago de todos los tributos, creados o por crearse, y gastos que pudieran
gravar o generarse en el cumplimiento de este contrato y en las actividades del
820
Los contratos que forman parte de los FLUJOS FUTUROS están sujetos a un
pago mensual provisional contraentrega de documentos de embarque y reajuste del
pago el primer día útil del mes siguiente. Este reajuste se hace a través de una nota de
crédito o débito, según el caso, dependiendo del promedio mensual de los precios
internacionales del metal transado- Para efectuar los reintegros derivados de notas de
crédito emitidas con motivo del reajuste antes señalado. EL FIDUCIARIO deberá proveer
los fondos necesarios a EL FIDEICOMITENT previa documentación remitida por el
SUPERVISOR TÉCNICO de acuerdo a lo pactado en la cláusula 7.11.5.
Queda claramente establecido entre las partes que los pagos que deba realizar
EL FIDUCIARIO en ningún caso deberán exceper el monto efectivamente disponible en
la CUENTA DE RECOLECCION. En tal sentido, en ningún caso será de responsabilidad
del FIDUCIARIO atender pagos que excedan el monto efectivamente disponible.
Las Partes dejan expresa constancia que, de conformidad con lo establecido en
el Artículo 2520 de la LEY. EL FIDUCIARIO no requiere de poder especial para la
administración del PATRIMONIO FIDEICOMETIDO. Consecuentemente, EL FIDUCIARIO
se encuentra plenamente facultado para operar la CUENTA DE RECOLECCION,
pudiendo disponer de los fondos de la misma de acuerdo a lo establecido en el presente
contrato y LALEY.
9.6. Queda claramente establecido, que los pagos que efectúe EL FIDUCIARIO a fin
de cumplir con las obras correspondientes al PAMA MODIFICADO se realizan por
cuenta y en interés de EL FIDEICOMITENTE.
Queda precisado que, todos los gastos estrictamente necesarios en los que EL
FIDUCIARIOincurra en su gestión y cumplimiento de las obligaciones que asume por
este contrato, serán asumidos por EL FIDEICOMITENTE, con arreglo a lo previsto en la
cláusula vigésima y vigésima primera del presente Contrato.
C O N T R A T O S {D o c trin a , L e g is la c ió n J u ris p ru d e n c ia y M o d o io s ) 823
haya sido debidamente aceptada por la SBS y comunicada dicha aceptación a las
partes intervinientes. Ante la renuncia de EL FIDUCIARIO, será de aplicación lo
dispuesto a continuación:
13.3. Las partes dejan claramente establecido que si, dentro del plazo señalado en el
numeral 13.1. anterior, no se ha nombrado un fiduciario sucesor, EL FIDUCIARIO,
en cumplimiento de su encargo y estando expresamente autorizada por EL
FIDEICOMITENTE y la DGM, procederá a liquidar el PATRIMONIO FIDEICOMETIDO
en favor de EL FIDEICOMITENTE. En tal sentido, EL FIDUCIARIO queda obligado
a suscribir todos los documentos necesarios, ya sea público o privado, para
formalizar la liquidación del PATRIMONIO FIDEICOMETIDO
21.5. La presente cláusula cubre tanto las obligaciones tributarías, sustantivas y/o
formales, que se encuentren vigentes a la fecha o las que sean establecidas en
el futuro, por cualquier tributo creado o por crearse.
23.1. Las partes acuerdan expresamente que cualquier conflicto o controversia que
pudiera surgir entre ellas como consecuencia de [a interpretación o ejecuci6n de
este contrato, incluidas las relacionadas con su nulidad e invalidez, serán resueltas
mediante arbitraje de derecho, a cargo de un Tribunal Arbitral compuesto por tres
(3) miembros que necesariamente deberán ser abogados colegiados. El arbitraje
será realizado conforme el Reglamento de Conciliación y Arbitraje Nacional e
internacional de la Cámara de Comercio de Lima.
23.2. El Tribunal Arbitral estará constituido de la siguiente manera: cada una de las
partes nombrará a un árbitro y el tercero, quien presidirá el Tribunal Arbitral, será
designado de común acuerdo por los dos árbitros nombrados. Los árbitros quedan
expresamente facultados para determinar la controversia materia de arbitraje. En
caso que por cualquier motivo tuviere que designarse un árbitro sustituto, éste
será designado siguiendo el mismo procedimiento señalado precedentemente
para la designación del árbitro que se sustituye.S
i
Si una parte no nombra árbitro dentro de los quince (15) días de recibido el
requerimiento de la parte o partes que soliciten el arbitraje, o si dentro de un plazo
igualmente de quince (15) días contados a partir del nombramiento del último
828 El Contrato de Fideicomiso J Hugo Huayanay Chuquillanqul
arbitro por las partes, los dos árbitros no consiguen ponerse de acuerdo sobre el
tercer árbitro, la designación del árbitro faltante será hecha a petición de cualquiera
de las partes por la Cámara de Comercio de Lima.
23.5. Los gastos del proceso serán asumidos por la parte que no se vea favorecida con
la decisión del Tribunal Arbitral.
23.6. En caso que alguna de las partes decidiera interponer recurso de anulación
contra el laudo arbitral ante el Poder Judicial, deberá constituir previamente a
favor de la parte contraria una Carta Fianza otorgada por un Banco de primer
orden con sede en Lima, equivalente a US$ 50,000.00 (CINCUENTA MIL DOLARES
y 00/100 DE LOS ESTADOS UNIDOS DE NORTEAMERICA), ejecutable en caso
que dicho recurso, en fallo definitivo, no fuera declarado fundado. Dicha Carta
Fianza deberá estar vigente durante el tiempo que dure el proceso promovido. En
este caso, las partes se deberán someterse expresamente a la jurisdicción de
los Jueces y Tribunales del Cercado de Lima, renunciando al fuero de sus
domicilios.
Agregue usted, señor Notario las demás cláusulas de estilo y sírvase pasar los
partes al Registro Público para su respectiva inscripción, expidiendo un testimonio para
cada una de (as partes que intervienen en este contrato.
829
J U R IS P R U D E N C IA
F i d e ic o m i s o : F o r m a l id a d e s y
P a t r im o n io F i d e ic o m e t id o
EXP. N° 1195-2005
Cuarto.- Que, para la validez del acto constitutivo del fideicomiso es exigible al
fideicomitente la facultad de disponer de los bienes y derechos que transmita. (...)
1. CONCEPTO
por orden del titular de la cuenta, la operación que toma el nombre de «cuenta corriente
bancaria» o «cuenta corriente con servicios especiales», se caracteriza por el mandato
aceptado por el banco para efectuar, en el marco de su organización, pagos tales como
cheques bancarios librados contra el banco, letras de cambio con domicilio de pago en
el banco, cartas de crédito. Dicho mandato lo obliga también a efectuar cobranzas por el
importe de cheques bancarios, giros y letras de cambio, intereses y dividendos por
títulos depositados para su administración, remuneraciones y otras utilidades periódicas.
En una palabra, el banco está obligado a prestar un servicio de caja con las limitaciones
impuestas por su propia organización.
La acreditación por “clearing"transfiere una partida del activo de una cuenta a otra
en el mismo banco siempre que tanto quien haya dado la orden como el beneficiario
sean titulares de cuentas corrientes en ese banco. De no ser así la transferencia se
hace al banco del beneficiario o a pedido del banco de quien haya dado la orden. Esta
acreditación por “clearing" se concreta mediante una orden del titular de la cuenta
corriente, generando que el banco pase a ser deudor del tercero, quien a su vez acepta
ser su acreedor, con el resultado que la relación entre acreedor y deudor se extingue y se
constituye una nueva, de idéntico contenido, entre el banco y el beneficiario.
Si la acreditación en cuenta se refiere a títulos de crédito entregados al banco
para su cobro y en particular cuando se trata de cheques bancarios, la acreditación se
hace con efecto suspensivo. Es decir que el titular de la cuenta corriente no adquiere
la disponibilidad hasta que se haya cobrado el título. De dónde, aún cuando el banco
autorizara la disponibilidad antes de la cobranza, si el crédito no fuera luego satisfecho,
la anulación de la partida acreditada cancela la obligación a favor del titular de la
cuenta, quien está obligado a restituir al banco las sumas que eventualmente hubiera
utilizado.
5. CIERRE DE LA CUENTA
Para permitir la liquidación y capitalización de los intereses y para no dilatar
demasiado el control recíproco de los registros contables, la cuenta se cerrará para su
balance en los vencimientos estipulados por el contrato o por los usos o, en su defecto,
al finalizar cada trimestre cuando el saldo sea deudor, o en cada semestre cuando el
saldo sea acreedor, el que será computable a partir de la fecha del contrato. Se enviará
un extracto al titular de la cuenta para su aprobación.
Aún después que la cuenta hubiera sido aprobada, el titular y también el banco
podrán impugnar dicha cuenta para corregir vicios puramente formales, cuando se trate
de errores en los asientos o en los cálculos y de omisiones o duplicación de partidas.
Tal impugnación deberá hacerse, bajo pena de dar por extinguido el derecho del
impugnante, luego de la recepción del extracto de cuenta.6
6. FIN DE LA RELACIÓN
La relación contractual se resuelve por vencimiento del plazo cuando éste hubiere
sido fijado o por resolución dispuesta por las partes si se hubiere celebrado por tiempo
indeterminado. También se resuelve por muerte, interdicción o quiebra del titular de la
cuenta corriente. En caso de quiebra, el banco quedará liberado de toda responsabilidad
r
CONTRATOS fPoc
t— — - - ...... ...... . 835
si diera curso a las órdenes de pago o cheques bancarios librados contra él cuando
ignorara, sin culpa de su parte, la quiebra del titular de la cuenta. No procederá la
revocatoria de los asientos individuales de créditos registrados en la cuenta cuando no
tengan naturaleza de pago y menos aún cuando representen relaciones jurídicas
inexistentes, con respecto a las cuales no puede hablarse de errores de asientos.
Las partes son el banco autorizado a operar en cuenta corriente y los clientes,
personas naturales o jurídicas.
8. RÉGIMEN TRIBUTARIO
El Articulo 18 del Dec. Leg. 774, Ley del Impuesto a la Renta, dispone que se
encuentraba exonerado de dicho tributo hasta el 31 de diciembre del año 2000, los
intereses y rendimientos correspondientes a los depósitos efectuados en el Sistema
Financiero Nacional (entre ellos los realizados bajo la modalidad de cuenta corriente).
9. PROBLEM AS
Los problemas que generalmente se suscitan son el incumplimiento de pago de
las obligaciones, los injustificados e inadvertidos cambios de domicilio de los clientes
que dificultan la posibilidad de ejecución judicial y las maniobras defraudatoñas que
afectan los intereses de terceros.Frente a ello la operatividad y legislación bancaria
modernas recomiendan la centralización de cuentas o la afectación de una cuenta para
atender las obligaciones derivadas de otras; la determinación y verificación de la actividad
comercial, profesional o laboral de los clientes y adicionalmente de sus respectivos
domicilios.
ASPECTOS LEGALES
• CODIGO DE COMERCIO
sobre cuenta corriente), Art. 572 (Consideración del saldo como capital), Art. 573
(Garantía del saldo), Art. 574 (Pactos admitidos en la cuenta corriente), Art. 575
(Prueba del contrato de cuenta corriente), Art. 576 (Conclusión de la cuenta
corriente), Art. 577 (Oportunidad en que se determina la calidad de acreedor y
deudor), Art. 578 (Plazo de prescripción de acciones sobre cuenta corriente), Art.
579 (Cuenta corriente a descubierto), Art. derogado por la Décimo Sexta
Disposición Final del Decreto), Art. 584 (Intereses, comisiones y otros pactos), Art.
585 (Cuenta corriente con provisión de fondos).
838* El Contrato de Cuenta Corriente Bancaria i Hernán Figueroa Bustamante
términos, condiciones, costos de éstos y medios de afiliación, los que requerirán siempre
la firma de EL CLIENTE, por escrito o por los medios electrónicos puestos especialmente
a su disposición por EL BANCO.
- Cargas en las cuentas y/o valores de EL CLIENTE, las sumas que pudieran
resultar de cualquier obligación exigible que éste mantenga o pudiera mantener
frente a EL BANCO, incluyendo intereses, comisiones, gastos e impuestos que,
directa o indirectamente se deriven de la misma, sea que la obligación se origine
o no en las distintas operaciones y/o contratos que realice o celebre. EL CLIENTE
con EL BANCO sin que esta autorización obligue a EL BANCO a efectuar los
citados cargos a otorgar sobregiro alguno en cuenta corriente. El BANCO podrá
realizar por cuenta y cargo de EL CLIENTE, las operaciones de compra y venta de
moneda extranjera que sean necesarias para el cumplimiento de sus obligaciones,
aplicando el tipo de cambio que EL BANCO tenga vigentes al momento de la
operación. Asimismo EL BANCO podrá retener y aplicar cualquier suma que tenga
en su poder o reciba a favor de EL CLIENTE a amortizar o cubrir las obligaciones
antes indicadas.
Para tal efecto, bastará que EL BANCO remita a EL CLIENTE la nota de cargo y/o
estado de cuenta respectivo, con el detalle del concepto que origina el cargo,
rigiendo además para estas cuentas, las estipulaciones de las condiciones de
las cuentas corrientes, en lo pertinente.
Se considera como causa de fuerza mayor o caso fortuito, sin que la enumeración
sea limitativa, las siguientes:
e) Huelgas y paros.
DÉCIMO PRIMERO.- EL CLIENTE sólo podrá girar contra los fondos disponibles
en su cuenta. Tratándose de abonos efectuados con cheques, los mismos deberán ser
endosados a EL BANCO, y EL CLIENTE sólo podrá girar contra estos fondos después
que EL BANCO haya efectuado su cobro.
Tratándose de abonos efectuados sobre cheques contra Bancos del exterior que
se hubieran realizado en la cuenta de EL CLIENTE, EL BANCO podrá cargar a la cuenta
el importe previamente acreditado, más los intereses compensatorios que EL BANCO
aplica en sus operaciones activas, si posteriormente dichos cheques son devueltos a
EL BANCO, como no conformes, por el Banco girado, cualquiera sea el plazo en el cual
dicha devolución se produzca.
a) Todos los titulares de las mismas son responsables en forma solidaria ante EL
BANCO, de cualquier saldo deudor u operación de crédito que se hubiere convenido
bajo la cuenta corriente.
c) Los titulares en forma conjunta podrán solicitar el cierre de la cuenta, con una
anticipación no menor de diez (10) días. En este caso, los saldos que resultaren
a favor de los titulares, luego de cerrada la cuenta y cubiertas las obligaciones
para con EL BANCO, serán entregados al conjunto de los titulares, salvo
instrucciones en contrario al momento de dar aviso de cierre.
f) Los titulares en forma conjunta podrán dar instrucciones para que EL BANCO
pague cheques girados o ejecute órdenes escritas impartidas en forma indistinta
por uno cualesquiera de ellos. Si tal fuera el caso, los titulares declaran que tales
actos se consideran para todos los efectos legales, como actos de pura
administración, para los que los titulares conceden por el mérito de tal instrucción
a EL BANCO, un mandato recíproco, por lo que no requieren para su validez o
eficacia frente a EL BANCO, de formalidad adicional alguna.
VIGÉSIMO SÉPTIMO.- Los pagos por consumo de servicios que realice EL CLIENTE
a través del Cajero Automático y/o de cualquier otro canal que se implemente en el
futuro, quedarán evidenciados en la constancia de pago que EL BANCO expedirá, con
arreglo a los convenios suscritos con las instituciones prestadoras de los servicios
materia de los consumos previstos en este numeral.
Dichos pagos los efectuará EL CLIENTE con cargo a sus cuentas afiliadas a
su(s) Tarjeta(s) de Registros.
VIGÉSIMO OCTAVO.- Las transferencias de dinero que efectúe EL CLIENTE entre
sus cuentas y/o a cuentas de terceros, a través de la Red de Cajeros Automáticos y de
cualquier otro canal que en el futuro ponga a su disposición EL BANCO, serán de su
exclusiva responsabilidad, asumiendo EL CLIENTE las consecuencias de cualquier
error que pudiera presentar en la instrucción que al efecto haya impartido EL BANCO
mediante el uso de tales mecanismos.
VIGÉSIMO NOVENO.- El BANCO no está obligado a realizar pagos y/o transferencias
por cantidades que EL CLIENTE no tenga disponibles, ni está obligado a hacer anticipos
de fondos, ni a otorgar créditos, ni sobregiros en favor del mismo.
846 El Contrato de Cuenta Corriente Banearía / Hernán Figueroa Bustamante
...r..........r-i i-r....nni-nnn-n... rr-rn-
a) Adoptar las medidas necesarias para impedir el uso indebido de sus Tarjetas de
Registro y la de las personas a que se refieren los numerales 5 y 43 por terceras
personas.
- No ejecutar cualquier orden, cuando tenga duda sobre la identidad del ordenante
o de la operación o no sea utilizada correctamente la clave secreta.
V. DISPOSICIONES FINALES
TRIGÉSIMO OCTAVO.- Todos los tributos creados o por crearse que graven la
prestación de los servicios que EL BANCO ofrezca a EL CLIENTE en desarrollo del
presente contrato, serán de cargo de EL CLIENTE. Se exceptúa del Impuesto a la Renta
que grava los ingresos de EL BANCO.
TRIGÉSIMO NOVENO.- Toda variación en las condiciones que regulan los servicios
que EL BANCO presta a EL CLIENTE, regirán desde la fecha en que EL BANCO las
comunique a EL CLIENTE por los medios que considere convenientes. La permanencia
o continuación en el uso de los servicios por parte de EL CLIENTE significarán su total
aceptación a las referidas modificaciones.
EL CLIENTE declara que es de su total conocimiento que las variaciones en el
costo de los servicios están sujetas a los cambios, que EL BANCO pudiera introducir en
su tarifario, el mismo que estará a disposición de EL CLIENTE en todas las oficinas de
EL BANCO, en los medios previstos en el numeral uno de este contrato, no siendo
necesario por tanto su remisión a EL CLIENTE por vía distinta.
TRETAGÉSIMO.- Las partes se someten a la jurisdicción y competencia de los
jueces, Cortes y Tribunales de esta ciudad, en caso de cualquier controversia derivada
de la interpretación y/o ejecución del presente contrato.
TRETAGÉSIMO PRIMERO.- Las partes fijan como sus domicilios, los consignados
en el presente contrato, donde se dirigirán todas las comunicaciones y/o notificaciones
judiciales y extrajudiclales a que hubiere lugar. EL CLIENTE se compromete a comunicar
por escrito a EL BANCO, de cualquier cambio de domicilio, el mismo que deberá estar
ubicado dentro del área urbana de esta ciudad. En caso contrario, todas las
comunicaciones y/o notificaciones cursadas a EL CLIENTE en el domicilio indicado en
el presente contrato, serán válidas y surtirán todos los efectos legales.
848 §J Contrato de Cuenta Corriente flanearía / Hernán fíguerga flu af» nw vite |
EL BANCO EL CLIENTE
N° de Cta. Cte. Referencial:
C O N T R A T O S /D o c trin a . L e g is la c ió n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s } | 849
J u r is p r u d en c ia
C o n tr a to d e c u e n t a c o r r ie n t e : R e s p o n s a b il id a d d e l
CÓNYUGE NO CONTRATANTE
CAS. N° 928-98
LAMBAYEQUE
C uenta c o r r ie n t e : D e f in ic ió n
Sum illa.- La Ley General del Bancos (Ley 26702) define a la cuenta
corriente como un contrato en virtud del cual una empresa
se obliga a cumplir las órdenes de pago de su cliente hasta
por el importe de/ dinero que hubiere depositado en ella o
del crédito que se haya estipulado.
“(...) Séptimo.- Que, por otro lado, cabe preciar que el artículo doscientos veinticinco
de la Ley General del Sistema Financiero y del Sistema de Seguros y Orgánica de la
Superintendencia de Banca y Seguro número 26702 define a la cuenta corriente como
“un contrato en virtud del cual una empresa se obliga a cumplir las órdenes de pago de
su cliente hasta por el importe de/ dinero que hubiere depositado en ella o del crédito
que se haya estipulado”. Asimismo, “las empresas informarán periódicamente a sus
clientes respecto de sus estados de cuenta, los que se darán por aceptados de no ser
observados dentro de los treinta días siguientes a su recepción” (último párrafo del
artículo doscientos veintiséis de la acotada Ley número 26702). Siendo que en el caso
de autos, el Banco ejecutante debió comunicar al deudor de la existencia de un saldo
deudor, atendiendo además que, el primer párrafo del artículo doscientos veintiocho,
señala que “la cuenta corriente se cierra por iniciativa de la empresa o del cliente. La
empresa puede negarse a la solicitud que le formule el cliente para el cierre de la cuenta
en el caso que la misma mantenga saldo deudor o que el cliente tuviese obligaciones
pendientes de pago con está”, esto es, si en el año mil novecientos noventa y siete el
deudor mantenía en su cuenta corriente un saldo deudor de cero, la propia empresa
bancaria podría haber optado por cerrar la cuenta corriente y evitar que se configure un
saldo deudor por portes y mantenimiento de cuenta que no han sido probados por el
actor que se haya pactado, razones por las cuales se desestima este agravio. (...)”
TARJETA DE CRÉDITO BANGARIA
Sumario: I. Introducción. II. El Comercio Electrónico. III. Las Nuevas Tecnologías. IV.
La Empresa. V. El Sistema Financiero. VI. Concepto de Tarjeta de Crédito
Bancada Vil. Características de la Tarjeta de Crédito. VIII. A Manera de
I. INTRODUCCIÓN
Este comercio electrónico, que ha sido definido de muy diversas formas y sobre el
cual se ha generado todo un movimiento de control a nivel mundial, es posible prever
por consecuencia de lo anterior nuevas legislaciones y reformas a leyes existentes,
este cambio se ha iniciado aunque de manera incipiente pero no por ello menos
importante.(*)
Antes de que se pueda realizar transacción alguna, cada una de las partes debe
tener su propia pareja de llaves pública y privada. Estos pares son emitidos por alguna
de las autoridades certificadoras. Las autoridades certificadoras forman una jerarquía.
Cada tarjeta de crédito está certificada por el emisor, a su vez, el emisor está certificado
por una autoridad geopolítica la cual está certificada por las sociedades emisoras de
tarjeta de crédito quienes a su vez son certificadas por una asociación central que
agrupa a las tarjetas de crédito miembros de SET. Un sistema semejante se aplica al
comerciante. Un certificado contiene información sobre su dueño datos de identificación
como nombre, número de cuenta, fecha de vencimiento, y un largo etc. y su llave pública,
toda esta información firmada con la llave privada de la autoridad certificadora.
El problema surge toda vez que Internet es un mundo sin reglas, Internet es el
paradigma de la expansión del mundo digital y carecen de sentido las barreras físicas
y la distancia del mundo analógico: la comunicación entre dos “internautas” de dos
continentes distintos se produce con la misma facilidad y al mismo coste que una
conversación telefónica entre dos vecinos, pero que las posibilidades ofrecidas por las
nuevas tecnologías y especialmente por Internet, introducen nuevos interrogantes e
¡ncertidumbres. Las nuevas tecnologías e Internet hacen que los esquemas y conceptos
jurídicos nacidos para el mundo analógico no se adapten bien al nuevo entorno digital.
CONTRATOS iDoctrina, Legislación. Jiirispiudsncia y MeadosI 853
Con las nuevas posibilidades surgen nuevos problemas, pues conceptos y teorías
pensados para el mundo analógico no se adaptan bien al nuevo entorno digital. Desde
el Derecho deben articularse nuevos conceptos, nuevas teorías que puedan hacer frente
a la realidad de las nuevas tecnologías e Internet.
Ante tan impresionante e insospechado escenario, de una parte, se dice que la
empresa tiene que adoptar estructuras que permitan reaccionar rápidamente ante
problemas del entorno, esto es, un sistema, no puede existir sin entorno, quiere decir
que el mundo no es un sistema y que el ser humano es considerado parte del entorno
y no del sistema.
Al advertirse que la empresa tiene que adoptar estructuras que permitan reaccionar
rápidamente, la empresa, al regular su organización tiene que servirse de sus formas
estructurales para reproducirse continuamente con el fin de subsistir, de lo contrario,
fenece. Esa reproducción ocurre a través de nexos de comunicación, con la observación
a si misma (por ejemplo, la S.A. puede observarse en lo interno y tiene órganos
encargados de cumplir esa misión (gobierno, administración y control -auto observación),
siendo que el derecho traduce a sus términos, el mensaje que ve en otros lenguajes,
como el caso de la economía.
Por eso, lo único que queda al derecho es regularse a si mismo con controles y
los sistemas se valgan de ellos para la toma de sus propias decisiones, como por
ejemplo redes contractuales para formar complejas redes contractuales por las cuales
se logre una reducción de costos en las transacciones a nivel analógico como digital,
tanto de integración como de desintegración y sus repercusiones, en lo intemalidad
como en la externalidad. Para ello, debe razonarse que se aprovecha el Internet, que en
el fondo es una red de redes.
IV. LA EMPRESA
Ahora bien, la empresa es una organización que transforma factores de producción
en producción, por tanto, la empresa utiliza (organización hacia lo externo) la misma
para el intercambio en un mercado de bienes y servicios. Para ello, requiere de una
organización, como lo hacen otras empresas que participan en diferentes mercados,
que como conjuntos, son parte del gran conjunto denominado sociedad y con la
participación del Estado. Este, al intervenir, utiliza el ordenamiento jurídico para ordenar,
regular y racionalizar a los participantes en el mercado de modo razonable, a fin de evitar
las llamadas disfunciones del mercado y lograr así, la transparencia del mismo, tanto
en la información que reciben competidores y consumidores.
Se dijo que las organizaciones deben utilizar al derecho para subsistir y ante un
medio de comunicación tan polifacético como Internet al ciudadano, -consumidor
abstracto-, deben respetársele sus derechos de intimidad, libertad de información, vida
privada, de protección como consumidor, etc., y al competidor protegerle sus derechos
de libertad de empresa, de exclusiva, inscritos y/o notorios, y ni que se diga de los
conflictos generados por signos distintivos y nombres de dominio en Internet, que generan
ante la utilización indebida no solo error, sino problemas de asociación y confusión al
consumidor por virtud de las muchas y variadas informaciones y ofertas sobre venta de
bienes y servicios, mecanismos de adquisición y pago.
Ante tan notable avance en las comunicaciones, el derecho se cuestiona
nuevamente el tema de la contratación entre ausentes, el momento de perfección del
contrato con la mayoritaria prevalencia de la teoría de la recepción de la oferta, que a
pesar de estar rodeada de críticas, es la tesis contenida en el articulo 130 del Código
Civil Alemán, y en cuanto a la aceptación, la teoría de la cognición es muy importante, así
como el artículo 1262 del Código Civil español y el 1335 del Código Civil Italiano y dentro
de ese contexto los numerales 443 y siguiente del Código de Comercio patrio así como
las seguridades y costos en las transacciones electrónicas.
No obstante, el tráfico jurídico informático es aun más complejo en la sociedad de
la información, donde por consecuencia de las experiencias vividas es que las estructuras
C O N T R A T O S ¡ IM .d n n a l r 'i.s la c io n . J u ris p ru d e n c ia y M o d e lo s ) 855
evolucionan y el derecho y la informática se han unido (al menos de hecho) con el fin de
evitar las mil y una trampas existentes en la contratación. El derecho, como se ha
expuesto, estabilizará el sistema y sus estructuras, facilitando la reproducción continua
del sistema y ese sistema jurídico solo podrá mantener y acrecentar su variedad y
responder a las dem andas de su am biente si consigue estabilizar sus propios
programas, si puede cumplir su función de generalizar expectativas manteniendo un
alto grado de coherencia. Así, utilizando el subsistema de la ley, todo lo que encaja
dentro de la figura geométrica triangular compuesta por las aristas de la buena fe, la
utilidad y la racionalidad es válido. Es el proceso de comunicación que intersubjetivamente
aplica de un sujeto a otro y viceversa en la sociedad (concepto sociológico) que como la
suma de todas las comunicaciones posibles y también aplica a la inversa, afirma
Luhmann, donde los medios de comunicación simbólicamente generalizados tienen
un sistema de referencia necesario: la sociedad.
Es precisamente la sociedad de consumo, ahora de carácter informática la que
presenta de nuevo polémica por virtud del comercio electrónico y sus medios de pago.
Interesa de todas formas, el medio de pago y la tarjeta de crédito.
V. EL SISTEMA FINANCIERO
Diversos autores han definido esta noción señalando que es “el instrumento
emitido en virtud de un convenio según el cual el emitente otorga al titular de la cuenta la
facultad de obtener crédito del mismo em itente u otra form a en las compras o
arrendamiento de bienes y servicios, obtención de avances en efectivo o en cualquier
otra operación cónsona con su naturaleza, realizadas por su portador legítimo con el
em itente, instituto corresponsal o en un establecim iento afiliado y m ediante la
transmisión de la información contenida en ella oralmente, por escrito, por medios
mecánicos o electrónicos o de cualquier otra forma”.
También la definen de la siguiente forma: “Contrato mediante el cual una entidad
crediticia (banco o institución financiera), persona jurídica, concede un crédito rotatorio,
de cuantía y plazos determinados, prorrogable indefinidamente, a una persona natural,
con el fin de que ésta lo utilice en los establecimientos afiliados”.
De conformidad con el Acuerdo N° 1936-16-890524 del Banco Central de Chile,
que contiene las normas sobre la materia, se entiende por tarjeta de crédito ‘cualquier
Tarjeta de Crédito Bancaría / Juan José Blossiers Mazzini
3) cuando el emisor-pagador recibe el vale verifica los datos del tarjetahabiente y del
afiliado, previo a la autorización para transferencia de fondos por el medio escogido
por virtud del pago del bien o el servicio.
2. genera aleatoriamente una llave de DES, con la que se encripta toda esta
información; el tarjetahabiente extrae del certificado del comerciante su llave
pública, la cual utiliza para encriptar la llave de DES;
ASPECTOS LEGALES
J U R IS P R U D E N C IA
T a r j e t a d e c r é d it o : D e f i n i c i ó n y f in a l id a d
EXPEDIENTE N° 052-2005
Corte Superior de Justicia de Lima
Primera Sala Civil con Subespecialidad Comercial
“(...) 2.2.- La Tarjeta de crédito es un instrumento de pago mediante el cual una persona
(titular) accede a una línea de crédito determinado con finalidad de poder adquirir
bienes y servicios en los establecimientos afila dos o en caso de solicitarlo y así
permitirlo la empresa emisora, hacer uso del servicio de disposición de efectivo u
otros servicios conexos, dentro s límites y condiciones pactados, obligándose a
su vez a pagar a la esa que expide la tarjeta, el importe de los bienes y servicios
que haya do y demás cargos conforme a lo establecido en el contrato firmado
previamente.
T a r j e t a d e c r é d it o : N aturaleza
RESOLUCION N° 0612-2004/TDC-INDECOPI
EXPEDIENTE N° 1232-2003/CPC
Tribunal de Defensa de La Competencia y de la Propiedad Intelectual
Sala de Defensa de la Competencia
T a r j e t a d e c r é d it o : D e b e r d e i n f o r m a c ió n p e r m a n e n t e d e l
BANCO AL CLIENTE
RESOLUCIÓN N° 0177-2000-TDC-INDECOPI
EXPEDIENTE N° 005-1998-CPC
Tribunal de Defensa de La Competencia y de la Propiedad Intelectual
Sala de Defensa de la Competencia
C ésar E. R am os Padilla!*)
1. BROSETA PONT, Manuel: “Manual de Derecho Mercantil”. Editorial Tecnos. Madrid. 1983. p.
475.
2. MEILIJ, Gustavo y BARBATO. Nicolás: “ Tratado de Derecho de Seguros”. Zeus Editora.
Rosario. Argentina. 1975. p. 7.
CONTRATOS (Doctrina L 865
seguro descansa. Todo ello indica que la industria aseguradora sólo puede ser
realizada por empresarios especializados, que organicen la explotación industrial
de acuerdo aun plan racional Con el auxilio de métodos estadísticos y cálculos
matemáticos8.
Halperin manifiesta que el seguro nació en las ciudades italianas del medioevo,
su aparición fue bajo la forma de un préstamo gratuito y luego como una venta por un
precio a pagarse si la cosa no llegaba a destino6. Como se aprecia, inicialmente las
operaciones se limitaron al comercio marítimo, pero posteriormente se amplió el radio
de acción a todos los ramos de seguro78 ; como el seguro de incendio, sobre la vida en
base a la tabla de mortalidad de Halley, y otros.
3. URÍA, Rodrigo: “Derecho Mercantil". 19° Edición. Ed. Marcial Pons. Ediciones Jurídica S.A.
1992. pp. 687 y 688.
4. SANCHEZ CALERO, Fernando: “Instituciones de Derecho Mercantil’. Editorial Revista de
Derecho Privado. Madrid. 1986, p. 511.
5. BROSETA PONT, Manuel: “Manual de Derecho ...”, cit., p. 475.
6. HALPERIN, Isaac: “ Contrato de Seguro”, Ediciones Depalma. Buenos Aires, 1966. p. 1.
7. RODRÍGUEZ PASTOR. Carlos: “Derecho de Seguros y Reaseguros”. Fundación M.J.
Bustarnante de la Fuente. Lima, 1987, p. 77.
8. HALPERIN, Isaac: “Contrato de seguro", cut, m. p. 5.
866
La mayoría de autores definen al contrato de seguro como aquel por el que una
persona (asegurador) se obliga, a cambio de una prestación pecuniaria (prima), a
indemnizar a otra (asegurado o beneficiario), dentro de límites convenidos, los daños
sufridos por la realización de un evento inciertos, o bien, a pagar el capital, renta u otras
prestaciones convenidas1o.
Un concepto más completo se puede ensayar definiendo al contrato de seguros
a aquel convenio por el que una persona, organizada para la distribución de
determ inados riesgos entre grandes masas de personas expuestas a tales
eventualidades (Asegurador), asume un riesgo y por ello cubre una necesidad eventual
de la otra parte (Tomador del Seguro y/o asegurado) por el acontecimiento de un hecho
determinado, o se obliga para un momento determinado a una prestación apreciable en
dinero, por un monto determinado o determinable, y en el que tal prestación dependa de
circunstancias desconocidas en su gravedad o acaecimiento9 11, recibiendo como
0
1
retribución una prestación pecuniaria (prima) de parte del Tomador del Seguro.
9. Ver: URÍA, Rodrigo: “Derecho Mercantil," cit. p. 692; SÁNCHEZ CALERO, Fernando:
‘‘Instituciones”, clt., p. 513; BROSETA PONT, Manuel: “Manual de Derecho", cit., p, 480;
RODRÍGUEZ PASTOR, Carlos: “Derecho de Seguros y Reaseguros”, cit., p. 82; y MARTÍNEZ
VAL, José María: “Derecho Mercantil”, Bosh, Casa Editora S.A. Barcelona 1979, p. 532.
10. Artículo 1° del Anteproyecto de la Ley del Contrato de Seguro. El Peruano del 24-06-2000.
11. HALPERIN, Isaac: “Contrato de Seguro”, cit., pp. 31 y 32.
12. SÁNCHEZ CALERO, Fernando: “Instituciones” cit., p. 511.
CONTRATOS ¡Doctrina, Legislación Ji 867
5. CARACTERÍSTICAS
6.1. EL RIESGO
872
6.2. EL SINIESTRO
27. Ver: URÍA. Rodrigo: “Derecho Mercantil”, cit., pp. 698 y 699; SÁNCHEZ CALERO, Femando.
“Instituciones”, cit., pp. 512 y 513; BROSETA PONT, Manuel: “Manual de Derecho”, cit., pp.
485; RODRÍGUEZ PASTOR, Carlos: “Derecho de Seguros y ...” cit., p.126.
28. SANCHEZ CALERO, Fernando: “Instituciones ..." cit., p. 512.
29. URÍA, Rodrigo: “Derecho Mercantil...” cit., p. 705.
30. URÍA, Rodrigo: “Derecho Mercantil...” cit., p. 707.
31. RODRÍGUES PASTOR, Carlos: “Derecho de Seguros y ...” cit., p.134.
874 Contratos de Seguros / César E. Ramas Padilla 1
a) Si al ocurrir el siniestro, el riesgo estaba cubierto.
6.3.1. Concepto
Por interés, a efectos del seguro, hay que entender aquella especial situación
del asegurado respecto de un determinado bien que le hace susceptible de
sufrir daño al producirse el evento. Esa situación proviene de encontrarse el
asegurado en relación económ ica con el bien en cuestión, aunque
normalmente la relación económica tendrá su base en una relación jurídica
(de propiedad, usufructo, depósito, etc. ), no es el aspecto jurídico de esa
relación la que se toma en cuenta a efectos de determinar el interés asegurable.
Para que exista interés basta una mera relación de hecho del sujeto con el
bien, siempre que esta relación haga susceptible al sujeto de sufrir daño al
realizarse determinado evento32. A veces basta un interés moral. Por ejemplo,
una persona puede tomar un seguro de vida a favor de un amigo, sin interés
económico, llevado de un entrañable afecto. Pero estos casos son excepciones,
confirmatorias de la regla general: “La relación económica entre el asegurado
y una cosa”33.
6.4. LA PRIMA
6.4.1. Concepto
38. Ver: SANCHEZ CALERO, Fernando: “Instituciones ...” cit., p. 521; URIA, Rodrigo: “Derecho
Mercantil..", cit., p. 700; BROSETA PONT, Manuel: “Manual de Derecho ...” cit.,p. 493 y
RODRÍGUEZ PASTOR, Carlos: “Derecho de Seguros y ...” cit., p. 107.
878 Contratáis de Seguros,/ César E. Ramos Padi
6.4.4. Clases
880
7.1. EL ASEGURADOR
El tomador del seguro, aun en el supuesto de que haya actuado por cuenta
ajena, es decir, que el asegurado sea otra persona, queda obligado con el
asegurador al cumplimiento de los deberes y obligaciones que derivan del
contrato, salvo aquellos que por su naturaleza se deban cumplir por el
asegurado4^.
7.3. EL ASEGURADO
7.4. EL BENEFICIARIO
52. MEILIJ. Gustavo y BARBATO, Nicolás: “Tratado de Derecho de Seguros", cit., p. 265 y 266.
53. BROSETA PONT, Manuel: “Manual de Derecho ...” cit., p. 466.
54. SANCHEZ CALERO, Fernando: “Instituciones ...” cit., p. 522.
55. BROSETA PONT, Manuel: “Manualde Derecho ...” cit., p. 486.
886 Contratos de Seguros / Cesar E. /tumos Padilla \
a) Comunicación al asegurador
b) Minimizar el daño
59. Ver: SANCHEZ CALERO, Fernando: “In s titu c io n e s ..." cit., p. 522, y LIRIA. Rodrigo: “D e re c h o
M e r c a n til ...” cit., p. 705
a) Consideraciones Preliminares
c) El Peritaje de un Siniestro
El artículo 965° del Código de Comercio establece que el plazo para que
opere la prescripción de las acciones para reclam ar la indem nización al
asegurador, como consecuencia del siniestro, es de tres años computados desde
la fecha del siniestro. Así se hace constar en el texto impreso de las pólizas que se
emiten en el mercado nacional de seguros.70
10. DOCUMENTACIÓN
Se definen como elementos formales del seguro los diferentes documentos que
forman parte del contrato suscrito entre tomador y asegurador.
Rodríguez Pastor dice que en este campo, debe tenerse presente que la
emisión y suscripción de la póliza, pese a su relevante importancia, no substraen
al contrato de seguro su carácter predominante consensual. Pero de todos modos,
10.2.1 .Concepto
10.2.2.Contenido
10.2.3.Clases de pólizas
a) Pólizas individuales
b) Pólizas flotantes
Los seguros cuya función es reparar los daños que pueden producirse
sobre cosas individualizadas, sobre derechos y sobre los patrimonios propiamente
dichos. Estos seguros poseen una función e stricta m en te rep aratoria o
78. Ver: SANCHEZ CALERO, Femando: “Instituciones” cit., p. 518; BROSETA PONT, Manuel:
“Manual de Derecho", cit., p. 489; RODRÍGUEZ PASTOR, Carlos: “Derecho de Seguros y ...",
cit., p. 114.
79. Ver: URÍA, Rodrigo: “Derecho Mercantil", cit-, pp. 695 y 696; SANCHEZ CALERO, Fernando:
“Instituciones", cit., pp. 518 y 519.
80. GARRIGUES, Joaquín: “Curso de Derecho Mercantil”, Tomo II. Editorial Porrúa S.A. México.
1995, p. 272.
r
897
Son materia del seguro contra incendio todos los bienes muebles e
inmuebles, susceptibles de ser deteriorados o destruidos por el fuego y la
cobertura comprende la reparación e indemnización de los daños y de las
pérdidas materiales causadas directamente por la acción del fuego; así como
los gastos del salvamento; los detrimentos que sufran los objetos salvados
y las medidas dictadas por las autoridades competentes para cortar o
extinguir el incendio. La cobertura opera, ya se trate de un caso fortuito o de
negligencia del propio asegurado o descuido de las personas de las que
es civilmente responsable y aun de la aversión o enemistad de terceros.848 5
81. Ver: SANCHEZ CALERO, Femando: “In s titu c io n e s ...”, cit., p. 523; y BROSETA PONT, Manuel:
“ M a n u a l d e D e re c h o ...” cit., pp. 482 y 483.
898
11.1.8.EI Reaseguro
95. Ver: SANCHEZ CALERO, Fernando: “In s titu c io n e s ...” cit., p. 527 y BROSETA PONT, Manuel:
“M a n u a l d e D e re c h o ...” cit., pp. 525 y 526.
96. Ver: BROSETA PONT, Manuel: “E l C o n tra to d e R e a se g uro ", Aguilar, S.A. de Ediciones. Madrid
1961, cit., p, 46, y BROSETA PONT, Manuel: “M a n u a l d e D e re c h o ...”, cit., p. 529.
97. SANCHEZ CALERO, Fernando: “In s titu c io n e s ...” cit., pp. 529 y 530.
98. RODRÍGUEZ PASTOR, Carlos: “D e re c h o de S e g u ro s y ...” cit., p.145.
99. URÍA, Rodrigo: “D e re c h o M e r c a n til ...” cit., p. 732.
901
902
11.2.2.Seguro de Enfermedad
ASPECTOS LEGALES
• LEY N° 26702: Ley General del Sistema Financiero y del Sistema de Seguros y
Orgánica de la Superintendencia de Banca y Seguros
J u r is p r u d en c ia
C o n tr a to d e seg uro : R e s p o n s a b il id a d s o l id a r ia
DE LA ASEGURADORA^)
CAS. N° 2492-99
Publicado el 1 de junio de 2000
(*) Tomado de Dialogo con la jurisprudencia N° 22, julio del 2000, p. 317-318.
CONTRATOS (O gcln m ._t^^ y Madetog
C O N TR A TO DE SEGURO! L ÍM IT E S DE LA ASEGURADORA^*)
CASACIÓN N° 2439-98
RESOLUCION N° 0030-2001/TDC-INDECOPI
EXPEDIENTE N° 385-2000-CPC
Tribunal de defensa de la Competencia y de la Propiedad Intelectual
Sala de Defensa de la Competencia
TOMO II
ÍNDICE
Presentaciones Introductorias:
• Introducción al Estudio de los
denominados Contratos Modernos MaxArias-Schreiber Pezet +....................21
• Contratos Modernos y Reforma Económica Hernán Figueroa Bustam ante.............29
• La Contratación Masiva y la Crisis de la
Teoría Clásica del Contrato Carlos Soto C oaguila............................. 51