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LOGOTERAPIA

TÉCNICAS E INSTRUMENTOS DE LA LOGOTERAPIA


El proceso terapéutico consiste en una cadena continua de improvisaciones. Esta relación
debe contrapesar los extremos de la familiaridad humana y la separación científica. Esto
quiere decir que el terapeuta no debe guiarse por la nueva simpatía en su deseo de ayudar
al paciente, ni a la inversa, reprimir su interés humano por la otra persona, reduciéndose a
la pura técnica. Frankl (1987) expresa que el logoterapeuta puede entablar un diálogo
mayéutico, al estilo de Sócrates. Sin embargo, no es necesario llegar a debates sofisticados
con los pacientes.

Los problemas existenciales o espirituales son complicados, por lo que es necesario que el
clínico tome una postura determinada con respecto a los valores. El logoterapeuta debe
estar alerta para no imponer al paciente su propia filosofía. Tiene que impedir la
contratransferencia al paciente, respecto de su filosofía personal, de su personal concepto
de sus valores, ya que el concepto de responsabilidad implica que el paciente debe ser
responsable de sí mismo. El logoterapeuta sólo tiene que proporcionarle la experiencia de
su responsabilidad.

La intención paradójica
La neurosis de angustia y las condiciones fóbicas se caracterizan por la ansiedad
anticipatoria, que produce una situación a la que el paciente tiene miedo. Esto queda
reforzado si ocurre la situación temida. De esta manera se crea un círculo vicioso que
persistirá hasta que el paciente no evite o se retire de las situaciones en las que espera
tener miedo. A esto, Frankl le llama "pasividad errónea". Cuando el logoterapeuta aplica la
intención paradójica, no le interesan los síntomas en sí mismos, sino la actitud del paciente
frente a su neurosis y a sus manifestaciones sintomáticas.

Esta técnica es especialmente efectiva en el tratamiento breve de fobias acompañadas de


ansiedad anticipatoria. No es un método superficial, ya que afecta a las capas más
profundas de la persona. Es una reorientación existencial. En el verdadero sentido de la
palabra, la logoterapia se basa en el principio logoterapéutico del antagonismo psiconoético,
que se refiere a la capacidad específicamente humana de separarse, no sólo del mundo,
sino también de uno mismo.

La derreflexión
En las neurosis obsesivo-compulsivas, los pacientes exhiben respuestas de "actividad
errónea" en sus ideas obsesivo compulsivas. Esta actividad errónea también está presente
en las neurosis sexuales, en las que el paciente al esforzarse por ser competente en la
relación sexual, que cree que se le exige, responde inapropiadamente a la situación. Las
intenciones desbordadas hacen imposible el funcionamiento deseado. En estos casos es
frecuente el exceso de atención y la observación compulsiva de uno mismo.
La ansiedad anticipatoria: En estos casos la técnica logoterapéutica que se aplica es la
"intención paradójica". Esta consiste esencialmente en "ignorar el problema". Sin embargo,
esta técnica sólo puede lograrse en la medida en que la conciencia del paciente se oriente
directamente hacia los aspectos positivos.
La derreflexión en sí misma contiene aspectos positivos y negativos. El paciente ignorará su
ansiedad anticipatoria; pero la cambiará por alguna otra cosa. Mediante la derreflexión, el
paciente es capaz de ignorar su neurosis y localizar su atención fuera de sí mismo. Se
dirigirá hacia una vida llena de potenciales significados y valores que tienen un especial
atractivo para sus potencialidades personales.
(TEXTO OBLITAS)

Diálogo socrático : en este método, un terapeuta escucha los pensamientos


dañinos de un cliente, quizás incluso los repite de una manera que los afirma, pero
luego intenta que el cliente vea formas alternativas de pensar. La esperanza es
cambiar los pensamientos dañinos y ayudar al cliente a desarrollar diferentes
formas de pensar.

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La logoterapia, por lo tanto, permite hacer frente a la neurosis noógena, es decir, aquella
neurosis que no nace de los conflictos entre impulsos e instintos, sino más bien de los
conflictos morales. espirituales o existenciales. La logoterapia considera que su cometido es
ayudar al paciente a encontrar el sentido de su vida. En cuanto la logoterapia le hace
consciente el «legos» oculto de su existencia, es un proceso analítico. La logoterapia difiere
del psicoanálisis en cuanto considera al hombre como un ser cuyo principal interés consiste
en cumplir un sentido y realizar sus principios morales, y no en la mera gratificación y
satisfacción de sus impulsos o instintos, o en la simple adaptación y ajuste a la sociedad y
al entorno.

Sin embargo, la logoterapia no sólo se encarga de afrontar las neurosis noógenas, también
ha desarrollado técnicas para hacer frente a neurosis que tienen poco contenido existencial,
como lo son las fobias, la obsesión, etc. Todas ellas tienen un componente común: la
ansiedad anticipatoria. Para hacer frente a tal tipo de problemas surgió la técnica
logoterapéutica denominada «Intención Paradójica», en la que se invita al paciente fóbico a
hacer precisamente lo que teme, aunque sea sólo por un momento, con el fin de que pueda
controlar sus niveles de ansiedad.

Por ejemplo si alguien teme a hablar en público y no tiene otro remedio que hacerlo, se le
invita a que comunique explícitamente su temor al auditorio, de esta forma la ansiedad
generada por la idea de que el público se va a dar cuenta de su inseguridad, no tiene
sustento y tiende a desaparecer. O si por ejemplo se trabaja con una persona que sufre de
insomnio y trata desesperadamente de dormir todas las noches pero no consigue, se le
invita a que la siguiente noche trate por todos los medios de no dormir, de mantenerse
despierto el mayor tiempo posible (de ahí lo paradójico), esto anula la ansiedad por dormir y
le permite cae rápidamente en un sueño profundo. TEXTO EXTRAIDO
https://www.redalyc.org/pdf/805/80530210.pdf

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Logos es una palabra griega que equivale a "sentido", "significado" o "propósito". La


logoterapia o, como muchos autores la han llamado, "la tercera escuela vienesa de
psicoterapia", se centra en el significado de la existencia humana, así como en la búsqueda
de dicho sentido por parte del hombre. De acuerdo con la logoterapia, la primera fuerza
motivante del hombre es la lucha por encontrarle un sentido a su propia vida. Por eso hablo
yo de voluntad de sentido,en contraste con el principio de placer (o, como también
podríamos denominarlo, la voluntad de placer) en que se centra el psicoanálisis freudiano, y
en contraste con la voluntad de poder que enfatiza la psicología de Adler.

Voluntad de sentido
La búsqueda por parte del hombre del sentido de la vida constituye una fuerza primaria y no
una "racionalización secundaria" de sus impulsos instintivos. Este sentido es único y
específico en cuanto es uno mismo y uno solo quien tiene que encontrarlo; únicamente así
logra alcanzar el hombre un significado que satisfaga su propia voluntad de sentido.
Algunos autores sostienen que los sentidos y los principios no son otra cosa que
"mecanismos de defensa", "formaciones y sublimaciones de las reacciones". El hombre, no
obstante, ¡es capaz de vivir e incluso de morir por sus ideales y principios!

Frustración existencial
La voluntad de sentido del hombre puede también frustrarse, en cuyo caso la logoterapia
habla de la frustración existencial. El término existencial se puede utilizar de tres maneras:
para referirse a la propia (1) existencia; es decir, el modo de ser específicamente humano;
(2) el sentido de la existencia; y (3) el afán de encontrar un sentido concreto a la existencia
personal, o lo que es lo mismo, la voluntad de sentido.
La frustración existencial se puede también resolver en neurosis. Para este tipo de neurosis,
la logoterapia ha acuñado el término "neurosis noógena", en contraste con la neurosis en
sentido estricto; es decir, la neurosis psicógena. Las neurosis noógenas tienen su origen no
en lo psicológico, sino más bien en la dimensión noológica (del griego noos, que significa
mente), de la existencia humana. Este término logoterapéutico denota algo que pertenece al
núcleo "espiritual" de la personalidad humana. No obstante, debe recordarse que dentro del
marco de referencia de la logoterapia, el término "espiritual" no tiene connotación
primordialmente religiosa, sino que hace referencia a la dimensión específicamente
humana.

El vacío existencial
Puede deberse a la doble pérdida que el hombre tiene que soportar desde que se convirtió
en un verdadero ser humano.
Sin contar con que el vacío existencial se manifiesta enmascarado con diversas caretas y
disfraces. A veces la frustración de la voluntad de sentido se compensa mediante una
voluntad de poder, en la que cabe su expresión más primitiva: la voluntad de tener dinero.
En otros casos, en que la voluntad de sentido se frustra, viene a ocupar su lugar la voluntad
de placer. Esta es la razón de que la frustración existencial suele manifestarse en forma de
compensación sexual y así, en los casos de vacío existencial, podemos observar que la
libido sexual se vuelve agresiva.

El sentido de la vida
Lo que importa no es el sentido de la vida en términos generales, sino el significado
concreto de la vida de cada individuo en un momento dado
Como quiera que toda situación vital representa un reto para el hombre y le plantea un
problema que sólo él debe resolver, la cuestión del significado de la vida puede en realidad
invertirse. En última instancia, el hombre no debería inquirir cuál es el sentido de la vida,
sino comprender que es a él a quien se inquiere. En una palabra, a cada hombre se le
pregunta por la vida y únicamente puede responder a la vida respondiendo por su propia
vida; sólo siendo responsable puede contestar a la vida. De modo que la logoterapia
considera que la esencia íntima de la existencia humana está en su capacidad de ser
responsable.

La esencia de la existencia
Este énfasis en la capacidad de ser responsable se refleja en el imperativo categórico de la
logoterapia; a saber: "Vive como si ya estuvieras viviendo por segunda vez y como si la
primera vez ya hubieras obrado tan desacertadamente como ahora estás a punto de obrar."
La logoterapia intenta hacer al paciente plenamente consciente de sus propias
responsabilidades; razón por la cual ha de dejarle la opción de decidir por qué, ante qué o
ante quién se considera responsable.
Corresponde, pues, al paciente decidir si debe interpretar su tarea vital siendo responsable
ante la sociedad o ante su propia conciencia.
. La función del logoterapeuta consiste en ampliar y ensanchar el campo visual del paciente
de forma que sea consciente y visible para él todo el espectro de las significaciones y los
principios. La logoterapia no precisa imponer al paciente ningún juicio, pues en realidad la
verdad se impone por sí misma sin intervención de ningún tipo.

El sentido del amor


El amor constituye la única manera de aprehender a otro ser humano en lo más profundo de
su personalidad. Nadie puede ser totalmente conocedor de la esencia de otro ser humano si
no le ama. Por el acto espiritual del amor se es capaz de ver los trazos y rasgos esenciales
en la persona amada; y lo que es más, ver también sus potencias: lo que todavía no se ha
revelado, lo que ha de mostrarse. Todavía más, mediante su amor, la persona que ama
posibilita al amado a que manifieste sus potencias. Al hacerle consciente de lo que puede
ser y de lo que puede llegar a ser, logra que esas potencias se conviertan en realidad.

El sentido del sufrimiento


Cuando uno se enfrenta con una situación inevitable, insoslayable, siempre que uno tiene
que enfrentarse a un destino que es imposible cambiar
Hay situaciones en las que a uno se le priva de la oportunidad de ejecutar su propio trabajo
y de disfrutar de la vida, pero lo que nunca podrá desecharse es la inevitabilidad del
sufrimiento. Al aceptar el reto de sufrir valientemente, la vida tiene hasta el último momento
un sentido y lo conserva hasta el fin, literalmente hablando. En otras palabras, el sentido de
la vida es de tipo incondicional, ya que comprende incluso el sentido del posible sufrimiento.

El suprasentido
Este sentido último excede y sobrepasa, necesariamente, la capacidad intelectual del
hombre; en logoterapia empleamos para este contexto el término suprasentido. Lo que se le
pide al hombre no es, como predican muchos filósofos existenciales, que soporte la
insensatez de la vida, sino más bien que asuma racionalmente su propia capacidad para
aprehender toda la sensatez incondicional de esa vida. Logos es más profundo que lógica.
La neurosis colectiva
Cada edad tiene su propia neurosis colectiva. Y cada edad precisa su propia psicoterapia
para vencerla. El vacío existencial que es la neurosis masiva de nuestro tiempo puede
descubrirse como una forma privada y personal de nihilismo, ya que el nihilismo puede
definirse como la aseveración de que el ser carece de significación. Por lo que a la
psicoterapia se refiere, no obstante, nunca podrá vencer este estado de cosas a escala
masiva si no se mantiene libre del impacto y de la influencia de las tendencias
contemporáneas de una filosofía nihilista; de otra manera representa un síntoma de la
neurosis masiva, en vez de servir para su posible curación. La psicoterapia no sólo será
reflejo de una filosofía nihilista, sino que asimismo, aun cuando sea involuntariamente y sin
quererlo, transmitirá al paciente una caricatura del hombre y no su verdadera
representación.
TEXTO DE El Hombre En Busca De Sentido

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