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I.

DERECHO CASTELLANO

Se constituye un principio esencial que la evolución jurídica de un pueblo o de


una nación no se puede insertar rígidamente en los cuadros de la historia
tradicional. Las instituciones jurídicas rebasan el alcance de una división época
tradicional ya que muchas veces cada era temporal irradia influencias sobre las
siguientes, más allá de cualquier período fijado con rigidez cronológica.

La existencia en España, primero, de una etapa primitiva o aborigen constituida


por los Invasores celtas; los tartesos; los ligures; los iberos, llamados así
porque habitaban en Iberia, cuyo nombre procedía del gran río Fser o Ebro; los
celtíberos y después los pueblos colonizadores y cultos mediterráneos,
formados por los fenicios y los griegos.

La conquista romana importó un cambio radical en la situación jurídica y


política de la península. En el siglo III. d.C. Roma empieza a mostrar signos de
decadencia y 200 años después se derrumba ante el avance de los pueblos
germanos como los alanos, los suevos, los vándalos y los visigodos, ávidos de
ocupar tierras de cultivo. Estos últimos organizaron el estado visigodo germano
dotado de un complejo sistema costumbrista, de tradición oral notoriamente
romanizado. En el año 476 d.C se considera el momento de la caída del
Imperio Romano de occidente. La crisis de Roma había sido social, política,
económica y religiosa.

Los bereberes del norte de África con el denominador de islam invadieron la


Península ibérica y destruyeron al entonces estado visigodo en decadencia
después de Guadalete encontrarse sumido éste en un proceso de
disgregación, por la concentración de la propiedad de la tierra bajo una
monarquía presa de la oligarquía nobiliaria.
El islam, durante los siglos VII al XI tuvo una vida más desarrollada económica
y culturalmente que la Europa de entonces. Los musulmanes controlaron los
tráficos mediterráneos y la Europa altomedieval, falta de monedas y de
metales, vio de caer su economía, mientras las ciudades musulmanas como
Sevilla, Toledo o Valencia eran florecientes, con unas manufacturas prósperas.

La parte norte y noreste de España, constituida principalmente por Austrias, fue


la única región que quedó libre del yugo impuesto por los árabes y de ahí nació
un movimiento lento de la Reconquista peninsular con sede en los montes
Cantábricos desde el siglo VIII, hasta las postrimerías del siglo XVI.

Isabel de Castilla había sido elevada al trono en 1474 y cinco años más tarde
su esposo fue ceñido de la corona del reino de Aragón. Este enlace
matrimonial significó la unidad política y la función de los recursos
patrimoniales con los que se creó la España moderna, pero no consolidó la
unidad jurídica.

Sin embargo, los musulmanes fueron transmisores de técnicas que España y


Europa potenciaron. A partir del siglo XI surge la divergencia entre una Europa
que crece y un islam que se estanca y retrocede.

Si hablamos de acuerdo con un criterio meramente histórico cronológico, sin


consideraciones jurídicas, se pueden precisar cinco periodos diferentes hasta
el inicio del siglo XIX: I) primitivo o aborigen, II) Romano, III) visigodo, IV)
musulmán y V) Castellano propiamente tal con la reconquista y la consiguiente
repoblación y la unificación según Jorge Basadre.
II. DERECHO CASTELLANO A FINES DEL SIGLO XV

Tras la unión del Derecho Romano y el Derecho Canónico se ocasionó el


Derecho Común, dando así alcance a toda Europa incluyendo así a España.

Existió en la era un combate para modificar la ideología jurídica a partir de la


que beneficiaba a los señores feudales, a otra adaptada a las monarquías
absolutas que estaban naciendo.

Dada la separación administrativa de lo cual hoy es España, aparecieron


distintas interpretaciones legislativas, con especificidades como eran los fueros
regionales, que solo perjudicaban a parte de la región.

De todo este derecho con aplicaciones locales, ha sido surgiendo una


legislación más universal. Lo más antiguo que se dio a conocer fueron las leyes
emitidas por Alfonso V de León, en el año 1017. De allí, el fomento unificador
pasó a Castilla.

Según los historiadores, no se puede asegurar que el derecho castellano se


aplicara de forma uniforme. Más bien a la inversa, debido a que se iba
construyendo e implementando, dependiendo del entorno.

Las normativas usuales que iban surgiendo se recogían en las denominadas


Partidas. Estas formaban un cuerpo humano normativo que poseía su origen
en la Castilla gobernada por Alfonso X, en la segunda mitad del siglo XIII. Este
monarca, denominado El Sabio, trató de uniformar las leyes de su Reino al
punto mayor viable. El tema de las Partidas era asiduamente más filosófico que
legal, aunque ciertamente eran escrituras legislativas.

Ya en el siglo XV aparecieron escritos que ayudaban a ordenar las diversas


normativas que aún existían en el reino. El mejor ejemplo de esto ha sido el
Ordenamiento de Alcalá.

En verdad, no ha sido hasta el hallazgo de América una vez que el derecho


castellano adquirió una importancia jurídica como fuente de derecho común.
CONCLUSIÓN

En síntesis, el derecho castellano no ha sido más que las adaptaciones que


hicieron los colonizadores a las condiciones propias de los países que iban
dominando. Era fundamentalmente imposible que se aplicase así surgieron
estos lineamientos en España, por esto es por lo que se modificaba una y otra
vez; no obstante, las bases ya las venimos conociendo y datan de fin de la
Edad Media. El evento que vino a disparar el derecho castellano ha sido el
hallazgo de América, lo que desea mencionar que ha sido el derecho de la
legitimación de la conquista de América.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Basadre, J. (2020) Historia del Derecho Universal y Peruano. Lima, Perú. Ediciones
Legales E.I.R.L.

Lopez, H. (2013) Origen del derecho castellano. Historia del Derecho Mexicano.


Ciudad de México.
https://historiadelderechomex.wordpress.com/2013/11/08/origen-del-derecho-
castellano/

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