HUME

CONTEXTO HISTÓRICO

David Hume nace en Edimburgo en 1711. En 1722 entro en el Colegio de Edimburgo, donde tuvo por profesores a
discípulos de Newton y leyó a los poetas latinos y a los escritores ingleses. Allí escribió su obra fundamental ``Tratado
sobre la naturaleza humana´´.

El siglo XVIII es el siglo del auge del despotismo ilustrado y la revolución francesa de 1789 marca el final del
absolutismo. En Inglaterra, un siglo antes, había tenido lugar la revolución Gloriosa de 1688, que acabo dando inicio a la
monarquía parlamentaria inglesa. La declaración de derechos de 1689 (Bill of Rights) sirvió para la expansión de los
ideales liberales por Europa como en Francia, pero también en los EEUU. Además, las persecuciones y expulsiones
religiosas (contra los calvinistas y jansenistas) y las crisis económicas, hacen que la monarquía deba apoyarse mas en la
burguesía.

CONTEXTO FILOSÓFICO

TEORÍA DEL CONOCIMIENTO

Como buen empirista considera que todos los contenidos o ideas de la mente proceden de la experiencia. Hume llama
percepción a todo acto o contenido de la mente, y hay dos clases. Las percepciones e ideas pueden ser simples y
complejas.

 Impresiones: datos inmediatos, directos, de la experiencia. Mayor fuerza y vivacidad. Sensaciones (proviene de
los sentidos), emociones (proceden de nuestro interior), pasiones (emociones sostenidas en el tiempo).
 Ideas: son copias de las impresiones. Imprecisión y debilidad. Las impresiones son el origen de nuestras ideas
 Ideas simples: proceden de impresiones simples
 Ideas complejas: provienen de combinaciones de ideas simples

Estas agrupaciones de ideas surgen de su asociación mediante la imaginación. Siguen unas pautas: Leyes de asociación
de ideas

 Ley de semejanza: tendemos a unir las impresiones o ideas que se parecen entre si
 Ley de contigüidad en el espacio o en el tiempo: tendemos a unir una idea con otra que normalmente se ha
dado junto a ella espacial o temporalmente
 Ley de causalidad (causa-efecto): organizamos nuestras ideas najo la forma causa-efecto

Principio clave en su empirismo: la existencia de una impresión previa a partir de la cual se forma la idea, garantiza la
posible validez de esta última. Si una idea no tiene correspondencia en ninguna impresión habrá que desechar esa idea
como falsa.

Hume distingue dos formas posibles de conocimiento: las relaciones de ideas y las cuestiones de hecho.

RELACIONES ENTRE IDEAS

Las proposiciones que expresan relaciones entre ideas que son independientes de lo que en realidad existe, es decir, de
los hechos (a priori). Puesto que su negación implica una contradicción lógica, son necesarias y son siempre verdaderas.
Y el predicado está contenido en el sujeto puesto que no amplia el conocimiento. A este tipo de juicios pertenecen la
lógica y las matemáticas.
CUESTIONES DE HECHO
Las proposiciones que expresan cuestiones de hecho se refieren a hechos y se fundamentan en la experiencia, es decir,
en las impresiones, son meramente probables y se fundan en el principio de causalidad. Si estamos convencidos de que
un hecho ha de producirse es porque la experiencia nos lo ha presentado siempre asociado a otro hecho que le precede
o que le sigue, como su causa o efecto (habito).

CRÍTICA A LAS CIENCIAS NATURALES

El tema central de la epistemología es la ciencia, que consiste en la búsqueda de afirmaciones universales y ciertas a
priori. Hasta ese momento el método que se usaba en ciencia era la inducción. Pasamos de lo particular a lo universal.

Según hume todas las proposiciones o cuestiones de hecho sobre las que aplicamos el método inductivo se basan en el
principio de causalidad. Hume critica la causalidad, para el esta claro que tenemos la percepción de los dos hechos,
pero no la percepción de la relación entre los dos hechos. Analizando la relación causa-efecto, hume descubre: una
causa, un efecto y un ``nexo´´ entre ambos. Hume concluye que lo que llamamos ``casualidad´´ no es otra cosa que un
habito o costumbre que nace de la repetición de hechos. Mas aun: el nexo (la causalidad) no es mas que una creencia
(es cuestión de fe).

En el conocimiento de los fenómenos físicos, en la ciencia no hay necesidad, ni certeza absoluta, no es seguro y
definitivo, sino mera probabilidad. Hume llama ``inferencias causales´´ a las conclusiones que llegamos aplicando la ley
de la causalidad, y concluye que no son validad ni seguras, eso si nos dan una certidumbre moral.

CRÍTICA A LA METAFÍSICA
Critica todas las ideas de la metafísica, y sobre todo, a las tres sustancias: la extensa (el mundo) la pensante (el alma) y
la infinita (dios). Las ideas metafísicas no tienen su origen en ninguna impresión previa de la cual se copia la idea, y por
tanto han de ser rechazadas como falsas.

CRÍTICA A LA IDEA DE LA EXISTENCIA DE UNA REALIDAD EXTERIOR A NOSOTROS

No podemos demostrar nada más allá de nuestras percepciones, ya que solo de ellas tenemos experiencia. Esta
doctrina se denomina fenomenismo: solo podemos establecer la realidad de las percepciones, de los fenómenos. No
podemos estar seguros de la existencia de un mundo exterior, tenemos impresiones, pero no podemos justificar de
donde provienen.

CRÍTICA A LA IDEA DE DIOS

En las pruebas a priori se da un salto ilegitimo, dado que la Idea de Dios no responde a ninguna impresión. Las pruebas
a posteriori, aplican el principio de causalidad para llegar a la supuesta demostración de la existencia de Dios. Hacen
una inferencia causal, que para Hume nunca es probativa.

CRÍTICA LA IDEA DE YO
La idea de un ``yo´´ carece de base, dado que no hay impresión alguna de ese ``yo´´. Si existiese tal impresión,
tendríamos que permanecer fijos e invariables a lo largo de nuestra vida.

La intención de Hume no es tanto negar la existencia de las sustancias, del mundo, de Dios o de la causalidad, como
negar su justificación racional. De todos modos, sus conclusiones desembocan en un fenomenismo y escepticismo total.

ÉTICA DE HUME
Las éticas anteriores a Hume eran normativas, porque consideraban que se odia razonar y exponer filosóficamente
cuales eran las normas morales. Pero Hume rechaza que la ética se pueda fundamentar en la razón. Esta no puede
valorar algo, mucho menos moralmente.

Según Hume, el placer y el dolor son la base de la moral. En conclusión, la virtud produce placer, mientras que el vivió
produce dolor. Concluye que la moral no es obra de la razón, sino que se fundamenta en el sentimiento, sentimiento de
placer y dolor. Esta manera de comprendedor la moral recibe el nombre de emotivismo moral, y por esto, las
proposiciones éticas no sin ni verdaderas ni falsas se limitan a expresar un sentimiento

El sentimiento desinteresado que permite la comprensión del otro es lo que Hume denomina simpatía (hoy empatía), la
capacidad de dejar a un lado nuestro propio interés para situarnos en la perspectiva y el interés de la otra persona.
Intenta huir del relativismo al afirmar que existe una especie de naturaleza emotiva común.

La razón interviene como arbitro en las cuestiones que surgen en la vida moral, pero es el sentimiento el que decide
nuestras motivaciones.

Hume termina por definir el concepto de utilitarismo; la inclinación de la naturaleza humana hacia el bien proviene de
la utilidad para la vida social. Para que la búsqueda del placer sea moral, es necesario que sea desinteresado, esto es,
que busque el placer para todos.