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Hume es de la misma época que Descartes, solo que Hume es del XVIII. Debido a una
crisis a todos los niveles de la sociedad, aparece a nueva ciencia que tiene que ver con el
análisis empírico (medir, cuantificar…) y se basa sobre todo en la observación.
Los filósofos de esta época aspiran a crear una filosofía, una corriente filosófica contraria
al racionalismo que es el empirismo, surgida en las islas británicas y siendo sus máximas
exponentes:
· Solo se puede conocer aquello que nos viene dado por la experiencia.
· La Negación de las ideas innatas.
· El modelo de ciencia va a ser las ciencias naturales.
En vida, más que por ser filósofo, será famoso por hacer un compendio de la historia
de Reino Unido, Hume será el típico hombre ilustrado, que quiere llevar a cabo un sistema
completo de las ciencias, para lo cual realizará un adecuado análisis de la propia naturaleza
humana y ha de constituir la ciencia de las ciencias.
3. EMPIRISMO
Lleva a cabo una crítica demoledora contra las profundas aportaciones de la metafísica y
de la moral tradicional. Hasta tal punto que con él se puso fuera de juego el sistema
categorial de la filosofía griega.
Frente al dogmatismo fanático de la Europa del siglo XVI y XVII, la solución de Hume es el
criticismo: ya está bien de conceptos abstractos y de profundidades insondables. El
entendimiento humano ya no da para tanto y siendo rigurosos, en el único campo
cognoscitivo en el que podemos movernos con alguna certeza y claridad es en lógico-
matemático, en el resto tenemos la obligación de ser escépticos.
Para los filósofos clásicos y racionalistas, la relación entre causa y efecto era una relación
necesaria. La proposición “todo lo que empieza tiene una causa” era una proposición
evidente a la que se daba el nombre de principio de causalidad. Se creía que estaba basada
en al intuición y se suponía que era una de esas máximas que los seres humanos no pueden
poner realmente en duda.
Su validez solo puede provenir de la experiencia y no existe ninguna experiencia de la
causalidad.
Cuando se afirma que una sucesión es causa de otra, no existe impresión alguna en que
basar esa afirmación. La mente, al hacerla, va más allá de lo que está inmediatamente
presente.
La experiencia, que muestra la constante conjunción de dos clases de acontecimientos,
permite inferir uno de otro. Esta constante lleva a pensar que hay una conexión necesaria
entre la causa y el efecto.
5. CONSECUENCIAS
Hume era consciente de que el principio de causalidad había constituido el núcleo
explicativo de la ciencia de occidente. Pero que creamos en el principio de causalidad no es
más que un hábito, una costumbre originado en nosotros por un proceso psicológico
derivado de la contigüidad espacio-temporal.
Consecuencias contra la Metafísica:
1. MUNDO: No hay nada más allá de las impresiones. No hay mundo externo. No existe
la sustancia.
2. YO: Se tiene impresiones de cosas que pasan pero no del propio yo.
3. DIOS: No se puede demostrar su existencia:
-Dios sería una sustancia, una realidad en sí
-Los fundamentos para demostrar a Dios se fundamentan en el principio de
causalidad.
6. EXCEPTICISMO
- Fenomenismo Radical: La realidad se reduce al fenómeno
- Excepticismo Moderado: Aunque no existe la causalidad, existe el sentido común y
tenemos que pensar que el sol saldrá mañana.
Hume no está de acuerdo con esta tesis puesto que para él la razón solo puede
alcanzar un juicio sobre el bien y el mal. Hume dirá que lo que nos mueve a actuar son
las pasiones y no la razón.
La razón está sujeta a las pasiones. La razón solo es un instrumento para orientarnos
en la elección de qué camino escoger para satisfacer nuestro deseo.
El fundamento de la acción moral será el sentimiento de aprobación o rechazo de
determinadas acciones.
La razón nos dice como son las cosas, pero no cómo debemos ser.
El salto del ser al deber ser fue denominado por Hume como falacia naturalista, esto es
un salto ilegítimo.
La conclusión no se sigue de las premisas.
- El fin último de la ética es la felicidad. Hume entenderá la felicidad como la
autosatisfacción con nuestra propia conducta.
- Problema: relativismo moral. El relativismo moral es la creencia que da igual
valor, legitimidad, importancia y peso a todas las opiniones morales y éticas con
independencia de quién, cómo, cuándo y dónde se expresen; por tanto, las
opiniones morales o éticas, las cuales pueden variar de persona a persona, son
igualmente válidas y ninguna opinión de "lo bueno y lo malo" es realmente mejor
que otra y no es posible ordenar unos valores morales gracias a criterios
jerárquicos de clasificación.
- Solución de Hume: Reconoce la simpatía como la capacidad de compartir las
pasiones de otro. Lo que contribuye a la felicidad de la sociedad merece nuestro
sentimiento de aprobación.