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En la 

escatología cristiana, el arrebatamiento o arrebatamiento de la Iglesia, es la


creencia de que al descender Jesús del Cielo, los muertos que llevaron una
vida cristiana resucitarán12 y los creyentes que se hallen vivos serán raptados o
llevados de la tierra junto con ellos (los creyentes muertos resucitados) para
encontrarse con Dios en el Cielo.34El significado exacto, el momento (relativo a
otros eventos escatológicos) y el impacto del evento están en disputa entre los
creyentes. El concepto tiene su base en varias interpretaciones del libro bíblico de
Primera de Tesalonicenses y cómo se relaciona con las interpretaciones de varios
otros pasajes bíblicos, como los de Segunda de Tesalonicenses, el evangelio de

Mateo, Primera de Corintios y el libro del Apocalipsis.

DOCTRINA DEL ARREBATAMIENTO DE LA IGLESIA

Análisis de la verdad revelada del Arrebatamiento o Rapto de la


Iglesia

Índice del Estudio

 Introducción
 1. El cristianismo de los primeros siglos en cuanto a escatología
 2. Algunos autores a través de los siglos
 Victorino, obispo de Pettan
 Efraín de Nisbis
 Joseph Mede
 Morgan Edwards
 John Gill
 3.Consideraciones y comentarios de Mateo 24ss
 La abominación desoladora y la desaparición de la Iglesia
 A) La segunda venida en Mateo 24
 Un rapto que no es el Rapto
 4. Israel es la clave
 5. Principales diferencias entre el Arrebatamiento y la Segunda Venida
 6. Concluyendo

Introducción

La doctrina de los acontecimientos futuros, técnicamente se llama "Escatología


Bíblica", y es importante, no sólo para tener una información en la cabeza, sino
para poder vivir la vida cristiana conforme a esa información que la Palabra nos
brinda.

Ha de tenerse en cuenta que la interpretación profética requiere de un esmero


especial y quizás sea ésta el área de estudio bíblico que precisa de la utilización
más cuidadosa de la exégesis, la síntesis, la hermenéutica y la teología
sistemática. Quizá por este cúmulo de razones, tantos descuidan este
importante don de Dios. Pero no hay excusa.
1. El cristianismo de los primeros siglos en cuanto a
escatología

"No te jactes contra las ramas; y si te jactas, sabe que no sustentas tú a la raíz,
sino la raíz a ti. Pues las ramas, dirás, fueron desgajadas para que yo fuese
injertado. Bien; por su incredulidad fueron desgajadas, pero tú por la fe estás
en pie. No te ensoberbezcas, sino teme. Porque si Dios no perdonó a las
ramas naturales, a ti tampoco te perdonará. Mira, pues, la bondad y la
severidad de Dios; la severidad ciertamente para con los que cayeron, pero la
bondad para contigo, si permaneces en esa bondad; pues de otra manera tú
también serás cortado. Y aun ellos, si no permanecieren en incredulidad, serán
injertados, pues poderoso es Dios para volverlos a injertar. Porque si tú fuiste
cortado del que por naturaleza es olivo silvestre, y contra naturaleza fuiste
injertado en el buen olivo, ¿cuánto más éstos, que son las ramas naturales,
serán injertados en su propio olivo?" (Romanos 11:18-24)

El cristianismo de los primeros siglos, sin lugar a dudas, era premilenarista y


pretribulacionista, tal como los apóstoles enseñaron.

Premilenarista, ya que creían que el Señor regresará glorioso a esta tierra para
instaurar el reino milenial prometido a Israel (Is. 2:1-3; Hch. 1:6), reino este
todavía no establecido en este mundo el cual sigue bajo el maligno (1 Jn. 5:19).
Pretribulacionista, porque la Iglesia necesariamente tendrá que ser sacada de
aquí antes del advenimiento de la Bestia y de su breve periodo de nefasto
gobierno mundial, así como antes de que todo Israel sea salvo (Ro. 11:25-26).

En cuanto a los segundo, la Iglesia primitiva creía que Dios iba a obrar en
relación a Israel para su salvación, pero el Espíritu Santo por medio del apóstol
Pablo, se anticipó al hecho de que la iglesia gentil se olvidaría de esa promesa,
como así fue, de ahí la admonición del apóstol Pablo de que nosotros, los
gentiles, no debíamos ser arrogantes en cuanto a nosotros mismos, sino
proceder sin jactancia en la pura bondad de Dios.

Lamentablemente, lo contrario ha ocurrido. Lo que comúnmente llamamos hoy


en día iglesia, es más reemplacista (*) de lo que muchos piensan.

(*) El Reemplacismo es herejía doctrinal que enseña que Israel ya ha


desaparecido de los planes de Dios, y que todas las promesas y bendiciones de
Dios han sido dadas a la Iglesia.

El periodo mínimo de tiempo para que Dios produzca el resultado final,  en


cuanto a la salvación prometida a Israel, es de siete años (Dn. 9:27).

Los creyentes de los tres primeros siglos habían recibido la doctrina apostólica,
y conocían acerca de estas cosas.

2. Algunos autores a través de los siglos

Victorino, obispo de Pettan


En el siglo III, Victorino, obispo de Pettan, escribió un comentario sobre
Apocalipsis capítulo 11. En ese comentario, ese hombre de Dios que murió como
mártir por su fe en Cristo en el año 304 d. C. bajo el emperador romano
Diocleciano, vio un período de tres años y medio en el que los dos Testigos
ministrarían, seguido de un período similar con el reinado de la Bestia
Anticristo, sumando entonces un total de siete años. Eso es lo que él escribió.

Comentando acerca de las plagas de ese tiempo de la tribulación que todavía


está por llegar a este mundo, dijo: "Esto sucederá en los últimos tiempos,
cuando la Iglesia haya sido quitada de en medio".

Clarísimamente Victorino enfatizó el hecho de que previamente la Iglesia iba a


ser quitada de en medio.

Escribe Tim LaHaye al respecto: "Sin discusión, el obispo Victorino de Pettan,


brillante maestro de la Biblia que vivió en el siglo tercero, vio que la iglesia
partiría antes de las plagas que vendrían durante el tiempo de la ira de Dios,
que según su comentario sobre Apocalipsis 11 durarían siete años. Su manera
de describir el rapto fue: "(Ellos) habrán salido de en medio"

Lamentablemente, años más tarde, fue la enseñanza de Agustín de Hipona


(354-430) al respecto, muy influenciada por Orígenes (s. III) que hizo que a los
cristianos profesantes del siglo V en adelante,  se les enseñara el amilenarismo 
con tintes postmilenaristas, tan típico todo de la iglesia católico romana que
más tarde surgiría.

El amilenarismo niega el futuro reino milenial en esta tierra, o en todo caso


asegura que el reino es ahora, y de ahí el postmilenarismo que ejerce un énfasis
tremendo en esta última cuestión, llegando a la conclusión de que la Iglesia
reina de facto en este mundo, sin el Rey presente. Por otra parte, una estupidez.

Esa doctrina, parte del entendimiento católico romano, y para sí es una de sus
dos teatrales columnas, el llamado "poder temporal". Como decimos, esto partió
de Agustín de Hipona, llamado comúnmente San Agustín, en el siglo V.

Por ello, durante muchos siglos, y a partir de Agustín, la cristiandad fue


básicamente amilenarista/postmilerista; prácticamente todo el tiempo de la
influencia nefasta del catolicismo romano.

Efraín de Nisbis

En cuanto al pretribulacionismo, es decir, el Arrebatamiento de la Iglesia antes


de la Tribulación que ha de venir sobre este mundo, previa a la venida gloriosa
del Señor para establecer su Reino Milenial prometido a Israel, hay que destacar
que en el siglo IV, un tal Efraín de Nisbis (306-373 d. C), conocido también
como Efraín el Sirio, que fuera uno de los principales teólogos de la primitiva
Iglesia Oriental Bizantina, prolífico escritor, por cierto, declaró lo siguiente:

"Porque todos los santos y elegidos de Dios están reunidos antes de la


Tribulación que ha de venir, y son llevados al Señor antes que vean la
confusión que llenará al mundo..."
Aunque no fuera específico en cuanto al número de los años que la Biblia nos
dice durará la tribulación, y que en su conjunto son siete, correspondiéndose
con la última shabúa (Dn. 9:27), es suficientemente claro Efraín, al decirnos que
el Rapto será antes de la tribulación, es decir, será pretribulacional.

Es evidente que esa confusión que llenará el mundo a la que se refiere Efraín el
Sirio no puede ser sino la que traerá el gobierno infame de la Bestia Anticristo y
sus consecuencias.

A pesar de la negación de la escatología bíblica (y de muchas otras doctrinas,


muchas de ellas vitales en cuanto a la fe) por causa de la influencia directa y
atroz de la gran ramera de Roma, paulatinamente algunos escritos de tiempo en
tiempo llegaron hasta nuestras manos.

Joseph Mede

Tal es el caso de Joseph Mede (1586- 1638), quien siglos más tarde, escribiera:

...la resurrección de aquellos que durmieron en Cristo, y el rapto de aquellos


que queden vivos junto con ellos en los aires..."

Si bien este autor no especificó cuando iba a producirse el Arrebatamiento, si


antes o después de la Tribulación, su declaración doctrinal al respecto fue
asombrosamente novedosa, por cuanto lo que se enseñaba en aquellos días
sobre escatología era absolutamente nada, debido a la influencia de siglos y
siglos de oscurantismo medieval.

Morgan Edwards

Pasó el tiempo, y llegamos al siglo XVIII. Morgan Edwards (1722-1795), pastor


bautista, escribió en su libro Millenium, Last Days, una argumentación acerca
del regreso de Cristo para buscar a su Iglesia, antes de la Tribulación. El dijo lo
siguiente en su libro, escrito en 1788:

"Los santos muertos serán levantados, y los santos vivos serán transformados
en el momento en que Cristo aparezca en el aire (1 Ts. 4:17); y esto acontecerá
como tres años y medio antes del Milenio, como veremos a continuación: pero
¿Estarán él y ellos todo el tiempo en el aire? No: Ellos ascenderán al paraíso, o
a alguna de las muchas moradas de la casa del Padre, y así desaparecerán
durante el consabido periodo de tiempo. La razón de esa retirada y la
desaparición será para juzgar a los resucitados y transformados santos..."

Aunque su posicionamiento es más bien, lo que llamaríamos actualmente "mid-


tribulacionista", está claro que para Morgan Edwards (1788), el Arrebatamiento
es antes de la Gran Tribulación. En cuanto a la razón que expone Edwards de
llevar el Señor a los suyos fuera de este mundo, es para ser juzgados en el
tribunal de Cristo (Ro. 14:10; 2 Co. 5:10), y para ocupar las moradas de la casa
del Padre.

¿Dónde irá la Iglesia resucitada y transformada? Pues la Palabra nos lo dice con
claridad:
"...juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares
celestiales con Cristo Jesús" (Efesios 2:6)

Esto se corresponde con lo que la misma Palabra de Dios asegura: "...y así


estaremos siempre con el Señor" (1 Ts. 4:17)

La Iglesia una vez arrebatada no desciende con el Señor cuando él viene a


buscarla (1 Ts. 4:17), sino que van al cielo, que es su Patria, y después de un
corto tiempo desciende – parte de ella (Ap. 19:14) – con el Señor a instaurar el
reino milenial.

John Gill

Cuarenta años antes del escrito de Morgan Edwards, el famoso teólogo bautista
de ese siglo XVIII, John Gill, publicó su comentario del Nuevo Testamento en el
año 1748.

En su comentario sobre el pasaje de 1 Tesalonicenses 4:15-17, al inicio del


mismo, se expresa así:

"El apóstol (Pablo) tiene algo nuevo y extraordinario que enseñar,


concerniente a la venida de Cristo, la primera resurrección o la resurrección
de los santos, la transformación de los santos vivos, y el arrebatamiento de
ambos, los resucitados y los vivos en las nubes, para encontrarse con Cristo en
el aire...aquí Cristo se detendrá y será visible a todos...mas sin embargo no
descenderá a la tierra porque no está lista para recibirle..."

John Gill, creía en un Arrebatamiento anterior a la venida en gloria de Cristo


junto con sus santos, como hemos visto.

John Gill en su comentario, no describe la venida gloriosa de Cristo, sino la


venida en los aires para llevarse a su Iglesia, la cual no puede considerarse parte
de su literal segunda venida, la cual acontecerá más tarde, como venimos
diciendo.

La venida gloriosa de Cristo no es la venida en los aires para llevarse a su iglesia.


El Señor vendrá a buscar su iglesia. Su iglesia le irá a recibir en el aire donde El
quedará, y de ahí iremos al lugar de destino: la nueva Jerusalén. Allí, en
nuestra patria se celebrará el juicio del Tribunal de Cristo, y se celebrarán las
bodas del cordero mientras en la tierra se producirán los juicios de Dios contra
esta humanidad perversa.

Claramente Gill asegura en su escrito que Cristo no descenderá a la tierra (como


así será cuando venga en gloria poniendo sus pies sobre el Monte de los Olivos).
La razón que da es que la "tierra no estará lista para recibirle". Esto es
correcto, porque antes deberán pasar todos los juicios de la Tribulación
descritos en el libro de Apocalipsis.

El hecho de estar el Señor en el aire (1 Ts. 4:17) para recoger Su Iglesia, implica
que será visto de todos, (o todos podrán ver algo fuera de lo normal), lo cual no
contradice Mateo 24: 30, que describe su venida gloriosa, donde leemos que
todos "verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y
gran gloria". Por tanto en ambos eventos de aproximación, el Señor y todo lo que
conlleva dichos eventos, será visto por todos, como no puede ser de otro modo,
dadas las circunstancias absolutamente espectaculares.

De hecho, en 2 Tesalonicenses, nos da detalle la Palabra acerca del aspecto de


Jesús cuando vuelva en gloria: "...cuando se manifieste el Señor Jesús desde el
cielo con los ángeles de su poder, en llama de fuego..." (2 Ts. 1:7-8)

Lo que los hombres verán, no será un hombre o figura humana o similar, sino
¡una llama de fuego! Y por supuesto, todo ojo le verá.

La venida de Cristo en el aire a por su Iglesia no será secreta ni silenciosa, sino


que será muy notoria. La Palabra así lo describe:

"Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con


trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán
primero" (I Ts. 4:16)
"en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se
tocará la trompeta..." (1 Corintios 15:52)

No será un Rapto secreto o silencioso, sino rápido y muy contundente. Esto es lo


que la Escritura enseña.

3.Consideraciones y comentarios de Mateo 24ss

"Cuando Jesús salió del templo y se iba, se acercaron sus discípulos para
mostrarle los edificios del templo.  2 Respondiendo él, les dijo: ¿Veis todo esto?
De cierto os digo, que no quedará aquí piedra sobre piedra, que no sea
derribada. 3 Y estando él sentado en el monte de los Olivos, los discípulos se
le acercaron aparte, diciendo: Dinos, ¿cuándo serán estas cosas, y qué señal
habrá de tu venida, y del fin del siglo?" (Mt. 24:1-3)

Cuando el Señor se sentó en el Monte de los Olivos (Mt. 24), se estaba


dirigiendo en primera instancia a una audiencia judía que creía en él (V. 3). A
resultas de las preguntas de sus discípulos, todos ellos judíos (la Iglesia todavía
no había surgido como tal), el Maestro les narra toda una serie de
acontecimientos proféticos, que es menester ordenar con cuidado.

Tres son las preguntas base que ellos le formulan:

 a) Cuando iba a ser destruido el templo.


 b) Señales de su venida.
 c) Señales del fin de esta era.

En Lucas 21:20ss Jesús describió la destrucción del templo de Jerusalén, la cual


se produjo en el año 70 D.C.
En Mateo 24: 4ss el Señor les previno en contra de ser engañados, ya que se
iban a levantar diferentes falsos ungidos. Uno de ellos fue Bar Kobja (el hijo de
la Estrella), quien se autoproclamó el Mesías, y en el año 135 D.C. condujo a
Israel a la derrota definitiva y a su desaparición como nación.

Varias señales comentó antes del fin (entendiendo por fin, el fin de esta
dispensación de la gracia): guerras, rumores de guerras, levantamientos
naciones contra naciones, enfermedades, pandemias, hambruna, terremotos.
Todo ello diciendo sería principio de dolores de parto.

Habló también de persecución, incluso a muerte, y esto tanto se puede atribuir a


judíos, como a cristianos.

Se iban a levantar falsos profetas, lo cual también se atribuye tanto a judíos


como a cristianos, etc. etc.

La abominación desoladora y la desaparición de la Iglesia

Una de las señales claras y específicas, la vemos en v. 15, donde nos habla del
lugar santo, y en él la abominación desoladora, de la cual habló Daniel. Esto es
clave. En el año 168 a. C. Antíoco Epífanes hizo quitar el sacrificio continuo, e
hizo sacrificar una cerda en el lugar Santísimo del templo de Jerusalén
(ver Daniel 11: 31). Esto mismo, o similar deberá volver a ocurrir, como lo
predijo el Señor.

Esto nos traslada inmediatamente a 2 Tesalonicenses 2, donde leemos:

"...se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone


y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se
sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios" (2 Ts.
2:3b-4)

La abominación desoladora no será un cerdo esta vez, sino el mismísimo


Anticristo cuando se siente en su lugar.

Ahora bien, el templo ya hace siglos que no existe, no obstante Israel volvió a ser
de nuevo nación, y ¡en un solo día! (Is. 66:8). Sólo es menester que pase poco
tiempo antes que levanten de nuevo el templo.

En Daniel 9:27 vemos que una vez empezada la última shabúa (la última
semana de años: siete años), a la mitad de ese tiempo, se producirá de nuevo la
abominación desoladora. Este es el evento predicho por el Señor en Mateo
24:15, y obviamente va dirigido a los judíos que creerán en él en aquel tiempo.

¿Por qué el Señor se está dirigiendo ahora en Mt. 24 al Israel creyente en él y no
a la Iglesia como tal? Pues porque en el tiempo de la abominación desoladora, la
Iglesia ya no estará.
Déjenme decirles algo que es importante: no puede coexistir en la tierra en este
tiempo de gracia, por una parte la Iglesia, y por otra parte el Israel salvo (Ro.
11:25-26).

Si un judío se salva ahora, viene a ser parte de la Iglesia, pero en el tiempo de la


Tribulación, cuando Dios esté derramando en su momento la doble lluvia sobre
Israel, y si la Iglesia está todavía presente, ese judío ¿dónde pertenecería, a
Israel o a la Iglesia? ¿Sería entonces la Iglesia Israel... o sería Israel la Iglesia?
No.

Israel no es la Iglesia, y la Iglesia no es Israel.

El tiempo de la dispensación de la gracia se corresponde con la


Iglesia. El tiempo de la dispensación del reino, se corresponde con
Israel.

Es para mí evidente, que los postulantes del postribulacionismo, son


mayormente reemplacistas, lo sepan o no. Si no se tiene en cuenta a la Palabra
cuando asegura que en un momento dado "todo Israel será salvo" (Ro. 11:25-
26), entonces no se puede entender la Palabra en su cabalidad, y
consecuentemente se produce el error.

A) La segunda venida en Mateo 24

En Mateo 24:29ss leemos acerca de lo que ocurrirá inmediatamente después de


la Tribulación (la cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora,
ni la habrá V. 21). En el v. 30, el Señor explica acerca de Su venida gloriosa.

Antes de proseguir, es menester hacernos la gran pregunta, ¿Por qué no vemos


con claridad en todo este relato del Monte de los Olivos, comentario acerca del
Arrebatamiento de la Iglesia? La respuesta es sencilla, porque todo este relato
va dirigido en primera instancia a Sus discípulos judíos vivos en aquel
momento, y al Israel que será salvo; en este orden.

¿Quieren más prueba de ello? Sencillo. Fíjense que en el contexto consabido de


la abominación desoladora, la cual se producirá en el nuevo santuario que
todavía ha de levantarse, el Señor aconseja a que se huya a los montes de Judea,
y a que oren para que esa huida no se produzca en invierno, ni en un día de
reposo... ¿Qué tiene que ver esto con la Iglesia? Nada. Pero sí con Israel:

 Sólo los residentes en Jerusalén pueden huir a los montes de Judea, los
judíos.
 En invierno hace frío en Israel (no en la república del Salvador, por
ejemplo)
 El guardar el sábado sólo lo han de hacer los judíos.

Pero volviendo al relato de Mateo 24:29ss,  ahí vemos que el Señor nos está
hablando de Su segunda venida, la gloriosa, la cual se producirá después de la
Tribulación: "E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días...",
con las señales que ocurrirán en los cielos (V. 29,30)
Un rapto que no es el Rapto

"Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos,
de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro" (Mateo 24:31)

Aquí el Señor describe lo que pareciera ser el Arrebatamiento de la Iglesia, este


es el texto en el que se basan los postribulacionistas para intentar demostrar su
doctrina, pero no es el Rapto de la Iglesia; es otro rapto. ¿Por qué no lo es? Por
dos razones:

 a) Recordemos que todo este párrafo va dirigido a judíos creyentes en él.


 b) Este evento es previo al juicio sobre los ethnos de Mateo 25:31ss.

En ese evento, la Iglesia hará algún tiempo que habrá sido glorificada y reinará
juntamente con Cristo. Luego desciende con él Mt. 25:31 (*) para juzgar a las
gentes que hayan quedado en esta tierra después de los horrores de la
Tribulación.

(*) La versión Reina Valera traduce la palabra en griego por "ángeles", pero
su traducción también es "enviados".

Lo primero que hará el Señor será reunir ante él a todos sus escogidos. Nótese
que no dice Su Iglesia, sino "sus escogidos". Esos escogidos serán los salvos
vivos de la Tribulación, los cuales pondrá a su derecha, para que hereden el
reino milenial (Mt. 25:32,34). Los escogidos en ese contexto, son los santos de la
tribulación, también se les llama el resto de la descendencia de la mujer de Ap.
12:17.

El reposo prometido a la Iglesia, después que esta ha pasado por la tribulación


de este mundo a lo largo de su existencia sobre el mismo, será visible a todos los
presentes en esta tierra cuando se manifieste el Señor Jesús desde el cielo en
gloria, cuando venga en aquel día para ser glorificado en sus santos y ser
admirado en todos los que creyeron (2 Ts. 1:6-7)

En ese momento sublime, a ojos de todos, se realizará la manifestación gloriosa


de los hijos de Dios (ver Romanos 8: 18, 19). Esto será previo al Reino Milenial,
y seguramente en ese momento se producirá la resurrección de los mártires de
la tribulación para que reinen por mil años (Ap. 20:4-5).

4. Israel es la clave

"Y luego todo Israel será salvo" (Romanos 11:26)

El planteamiento postribulacionista (el Arrebatamiento después de la


Tribulación) no puede sostenerse ante la futura realidad de Israel viniendo a ser
cabeza de las naciones de cara al reino milenial.

Dicho de otro modo, el postribulacionismo necesariamente ha de ser


reemplacista. Veámoslo.
La Biblia de forma muy clara y específica nos enseña que todavía quedan unos
años determinados sobre Israel y Jerusalén para que sean salvos (Ver Daniel 9:
24). En concreto son siete años (Dn. 9: 27). De esta manera se cumplirán las
palabras proféticas neotestamentarias: "Y luego todo Israel será
salvo" (Romanos 11:26)

Ese tiempo de siete años que restan de los 483 ya cumplidos (Dn. 9:24-26)
coincide con el tiempo de la tribulación que ha de venir, y que empezará con la
confirmación del pacto con muchos (Israel y sus vecinos), que ha de realizar el
que visiblemente llegue a ser la Bestia Anticristo (Dn. 9:27).

A la mitad de esos siete años, empezará la Gran Tribulación, y durará tres años y
medio (la segunda mitad de esos años).

Necesariamente la Iglesia deberá ser sacada de este mundo, coincidiendo con el


fin del endurecimiento en parte de Israel, y con el fin de la entrada de la
plenitud de los gentiles [en la Iglesia] (Ro. 11:25), para que Dios empiece de
nuevo con Israel de manera que el Israel nacional sea salvo, y herede el reino
prometido (Hch. 1:6)

Escribe John McArthur en relación a "el entrar la plenitud de los


gentiles": ""Hasta" se refiere a un periodo específico en el tiempo, "plenitud" se
refiere al cumplimiento total; "haya entrado", es la traducción de un verbo
griego que se emplea para referirse a alcanzar la salvación. El endurecimiento
espiritual de Israel que comenzó con su rechazo de Jesús como Mesías, durará
hasta que se hayan salvado todos los gentiles elegidos"

Imaginar la coexistencia aquí en la tierra de la Iglesia con un Israel salvo, es una


incongruencia. Así que, la Iglesia deberá partir a recibir su promesa, siempre de
corte celestial (Ef. 3: 20), mientras Israel reciba su promesa de corte terrenal
(Is. 2:1-3)  Porque "irrevocables son los dones y llamamiento de Dios" (Ro.
11:29).

Por tanto, una de las razones principales del Arrebatamiento previo a los
últimos siete años relatados, es justamente para que Dios se ocupe de Israel,
como prometió iba a hacer.

5. Principales diferencias entre el Arrebatamiento y la


Segunda Venida

El Arrebatamiento es el traslado y remoción de todos los creyentes. La Segunda


venida es la manifestación de Jesucristo.

El Arrebatamiento se refiere a los santos arrebatados en el aire. La segunda


venida al regreso de Cristo a la tierra.

En el Arrebatamiento, Cristo viene a buscar a su Esposa. En la segunda venida


la Esposa viene con El.
El Arrebatamiento conduce al tiempo de la Tribulación. La segunda venida al
establecimiento del Reino Milenial.

El Arrebatamiento es inminente. La segunda venida es precedida por muchas


señales.

El Arrebatamiento tiene un mensaje de consuelo. La segunda venida está


acompañada por juicio.

El Arrebatamiento tiene que ver con el programa de la Iglesia. La segunda


venida con el programa para Israel y el mundo.

El Arrebatamiento es un "misterio". La segunda venida está anunciada en el


Antiguo Testamento.

El Arrebatamiento da paso a un juicio para creyentes. La segunda venida será


previa al juicio para Israel y las naciones.

El Arrebatamiento deja la creación inalterada. La segunda venida envuelve un


cambio en la creación.

En el Arrebatamiento los gentiles no serán afectados. En la segunda venida


serán juzgados.

En el Arrebatamiento los pactos con Israel no se cumplen. En la segunda venida


se cumplen todos.

En el Arrebatamiento no hay relación con el programa de Dios con respecto al


mal. En la segunda venida el mal será juzgado.

En el Arrebatamiento sólo participan creyentes. En la segunda venida se verán


involucrados todos los hombres.

El Arrebatamiento tendrá lugar antes del día de la ira. La segunda venida será al
final de ese día.

El Arrebatamiento abre para la Iglesia un encuentro con Cristo. La segunda


venida abre la implantación del Reino de Dios en la tierra.

6. Concluyendo

Los que niegan el Rapto pretribulacional argumentan diciendo que esa doctrina
hace que los creyentes no se preparen para pasar por la Gran Tribulación... pero
yo les digo lo siguiente: ¿Cómo habría uno que prepararse para pasar por la
Gran Tribulación? ¿De qué estamos hablando? 

Les puedo fehacientemente asegurar que si la Iglesia verdadera fuera a quedarse


durante la Gran Tribulación, no quedaría ni uno de nosotros con vida
para recibir al Señor en las nubes, especialmente los fieles al Señor...
¿Realmente no creen que la gente del Nuevo Orden Mundial nos conoce, y tiene
todos nuestros datos al detalle, sabe dónde encontrarnos, y que no dudaría ir a
por nosotros para cortarnos la cabeza en el mismo minuto en que sea quitado el
que al presente detiene al Inicuo, que es el poder del Espíritu Santo? (2 Ts. 2:6-
7). ¡Razonemos!

Lo único que pueden esos inicuos hacer ahora mismo al respecto, es hacernos
dudar de la Bendita Esperanza, y no amar la venida del Señor, para de ese modo
intentar que no seamos dignos de escapar de las cosas que han de venir (Lc.
21:36)

Paradójicamente, estos que niegan el Rapto le siguen el juego a nuestros


verdaderos enemigos.

Una cosa es clara: hasta que el poder del Espíritu Santo no sea llevado de nuevo
al cielo, no se puede levantar el Anticristo (2 Ts. 2:7-8), con la consiguiente
Tribulación. La pregunta entonces es simple, amado fiel a Cristo, ¿Se puede
imaginar usted en este mundo sin la llenura y el poder del Espíritu Santo? Pues
según los detractores del Rapto usted y yo seremos desposeídos de la presencia
poderosa del Espíritu Santo para que se pueda manifestar el Inicuo... ¡menudo
sin sentido!

¡Lo que Dios nos dio, no nos lo va a quitar, y esto es el poder del Espíritu Santo!
(Hch. 1:8)

Dios ha dicho cosa muy diferente: la Iglesia nada tiene que ver con el Anticristo,
sino con Cristo, y ¡él viene a por Su amada! ¿Está preparado?

Dios les bendiga.

© Miguel Rosell Carrillo, Pastor de Centro Rey, Madrid, España.


Diciembre 2010
www.centrorey.org

FIN

Bibliografía:

 Aviso Final... Grant. R. Jeffrey


 Apocalipsis sin velo... Tim La Haye
 Morgan Edwards: Another Pre-Darby Rapturist... Thomas Ice
 Comentario del Apocalipsis... John Gill
CENTRO REY es una iglesia evangélica, sita en Madrid, España. En la
actualidad, la congregación está formada por gentes de muy diversa
procedencia. Además de españoles, entre nosotros hay hermanos de muchas
otras naciones. ¡Es maravilloso ver como el Espíritu de Dios une a los creyentes
genuinos de tan diferentes lugares y contextos!
Juntos, tenemos algo muy en común: La misma fe en una misma Persona:
Jesucristo, el Hijo de Dios; el que nos amó y nos lavó nuestros pecados con su
sangre, y nos hizo un reino y sacerdotes para Dios, su Padre; a Él sea gloria e
imperio por los siglos de los siglos. Amén. (Ap. 1:5-6).
No sólo creemos que Jesucristo es el Salvador que ya vino; también creemos que
es el Rey que va a volver, y que no tardará en hacerlo: "He aquí que viene con
las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la
tierra harán lamentación por él. Sí, amén" (Ap. 1:7)
Esperamos que en este sitio, puedas hallar lo que estás buscando de parte de
Dios. Recibe un caluroso saludo de parte de todos en CENTRO REY

EL ARREBATAMIENTO DE LA IGLESIA
(ADOPTADA POR EL PRESBITERIO GENERAL EN SESIÓN EL 14 DE AGOSTO
DEL 1979)

Incluida en la sección “La esperanza bienaventurada” en la


Declaración de Verdades Fundamentales de las Asambleas de Dios,
es la declaración siguiente:

“La resurrección de los que han muerto en Cristo y su


arrebatamiento junto con los que estén vivos a la venida del Señor
es la esperanza inminente y bienaventurada de la Iglesia (1
Tesalonicenses 4:16,17; Romanos 8:23; Tito 2:13; 1 Corintios
15:51,52).”

JESÚS ENSEÑÓ QUE ÉL REGRESARÍA

Jesús enseñó que Él regresaría a la tierra. Él cuidadosamente


advertió a sus discípulos que necesitaban estar constantemente
preparados para esto (Mateo 24:42-51; 25:1-13; Marcos 13:37; Lucas
12:37).

Ellos entendieron que la era actual terminará con su venida (Mateo


24:3). La garantía de su venida era una de las verdades con las que
Él consoló a sus seguidores antes de su muerte (Juan 14:2,3).

En el momento de la ascensión de Cristo, dos ángeles vinieron al


grupo de los discípulos que estaban reunidos para repetir la
promesa de que Él regresaría. Ellos declararon que Él vendría de la
misma manera que se había ido (Hechos 1:11). Esto claramente
significa que su segunda venida será literal, física, y visible.

LAS EPÍSTOLAS ENSEÑAN QUE JESÚS REGRESARÁ


Las epístolas del Nuevo Testamento se refieren frecuentemente a la
segunda venida, y a través de los pasajes de las Escrituras que tratan
de este tema recurre la idea de la inminencia. Aunque habrá un
período de tiempo entre la primera y la segunda venida (Lucas
19:11), todas las enseñanzas acerca del regreso del Señor enfatizan
que acontecerá repentinamente y sin previo aviso; que los creyentes
deben estar siempre en un estado de preparación continua
(Filipenses 4:5; Hebreos 10:37; Santiago 5:8,9; Apocalipsis 22:10).

Los creyentes en los primeros días de la Iglesia vivían en un estado


de expectación (1 Corintios 1:7; 1 Tesalonicenses 1:9,10). Cuando
Pablo usa la forma “nosotros” en 1 Corintios 15:51 y 1
Tesalonicenses 4:17 muestra que él tenía la esperanza de que
todavía estaría vivo cuando Jesús regresara.

EL RAPTO DE LOS CREYENTES

Una comparación de los pasajes de las Escrituras relacionados con la


segunda venida muestra que algunos hablan de un acontecimiento
visible a toda la humanidad que implica el juicio de los pecadores.
Otros describen una venida conocida solo por los creyentes y que
resulta en su redención de la tierra.

La segunda es conocida por los evangélicos como “el rapto” (o


arrebatamiento). Esta palabra no se encuentra en la Biblia, pero ha
sido usada tanto que una de las definiciones para la palabra en
inglés en el Webster’s Third New International Dictionary
Unabridged, es: “Cuando Cristo levanta a su verdadera iglesia y a sus
miembros a un reino más allá de la tierra donde todos disfrutarán
de felicidad celestial con su Señor”. La palabra raptar se podría usar
para traducir la palabra “arrebatados” de 1 Tesalonicenses 4:17.
Jesús dijo que su venida resultaría en situaciones donde un
individuo sería llevado de un lugar mientras el otro individuo sería
dejado. Esto indica un traslado repentino de los creyentes de la
tierra, mientras los no creyentes quedan aquí para enfrentar la
tribulación (Mateo 24:36-42).

Jesús describió su venida como algo que ocurriría en un tiempo en


que las naciones de la tierra se lamentarían cuando lo vieran llegar
(Mateo 24:30). El apóstol Pablo describe el regreso del Señor como
un tiempo de juicio e ira para los impíos (2 Tesalonicenses 1:7-10).

En 1 Tesalonicenses 4:13-18, él considera un aspecto diferente de la


segunda venida. Este breve pasaje es la enseñanza más directa y
clara sobre el rapto en el Nuevo Testamento. Sólo habla de los
creyentes, tantos vivos como muertos. No dice que los injustos
verán a Cristo en ese momento. Pablo describe la venida de Jesús en
el aire, pero no dice nada de que sus pies tocarán la tierra, como
dice otro pasaje que acontecerá en su venida (Zacarías 14:4). Es el
momento cuando se cumplirá 1 Juan 3:2, y seremos como Él.

La misma palabra griega usada en 1 Tesalonicenses 4:17 para decir


“arrebatado” se usa en Hechos 8:39 para describir cuando Felipe fue
“arrebatado” después de bautizar al etíope. El segundo versículo
dice que el Espíritu del Señor arrebató a Felipe–identificando el
origen del poder que llevará a los creyentes de la tierra en el rapto.

En 2 Tesalonicenses 2:1 Pablo llama el rapto “nuestra reunión con


él.” La palabra griega aquí traducida “reunión” es la misma palabra
traducida como “congregarnos” en Hebreos 10:25, refiriéndose a la
congregación de los cristianos para alabar. Es la imagen de los
santos congregándose alrededor de Cristo cuando venga por ellos.

El arrebatamiento sobrenatural de individuos piadosos de la tierra


no es algo desconocido en las Escrituras. El suceso destacado en la
vida de Enoc fue su desaparición milagrosa de la tierra después de
caminar con Dios (Génesis 5:21-24). El autor de Hebreos llamó esa
experiencia un traspaso, evitando la muerte (Hebreos 11:5).

Aunque algunos aspectos del traspaso de Elías fueron distintos del


de Enoc, también implicó un arrebatamiento repentino de un
creyente del mundo sin experimentar la muerte (2 Reyes 2:1-13).

Primera de Corintios 15:51-54 trata del mismo acontecimiento que 1


Tesalonicenses 4:13-18. Aquí también Pablo trata de los cambios
que se producirán tanto en los creyentes vivos como en los
creyentes muertos durante el rapto. Lo llama un misterio (1
Corintios 15:51), una verdad que antes no era conocida pero que
ahora le fue revelada por el Espíritu Santo.
En Filipenses 3:21 Pablo relaciona la venida del Señor con el tiempo
cuando “el cuerpo de la humillación nuestra” será cambiado–otra
referencia al rapto.

Los pasajes que corresponden al rapto describen la venida del


Señor por su pueblo. Los pasajes que se refieren a la revelación de
Cristo describen la venida del Señor con sus santos. Colosenses 3:4
trata de los creyentes que aparecerán con Cristo en su venida. Judas
14 también prevé la venida del Señor con su pueblo para ejecutar el
juicio que muchos otros pasajes mencionan en relación con su
venida pública.

Porque las Escrituras no se contradicen, parece razonable concluir


que los pasajes que describen la venida de Cristo por los santos
y con los santos indican dos fases de su venida. Nosotros creemos
que es bíblico suponer que el intervalo entre los dos es el tiempo
cuando el mundo experimentará la gran tribulación, implicando el
reino del Anticristo y el derramamiento de la ira de Dios sobre los
injustos (Daniel 12:1,2, 10-13; Mateo 24:15-31; 2 Tesalonicenses 2:1-
12).

LOS CREYENTES Y LA GRAN TRIBULACIÓN

Aunque el pueblo de Dios quizá sufra muchas aflicciones antes de la


venida del Señor, la iglesia será raptada antes del período llamado
la Gran Tribulación.

En 2 Tesalonicenses 2 Pablo indica que ciertas cosas tienen que


acontecer antes de que el día del Señor (que es parte de la gran
tribulación) pudiera empezar. Un individuo llamado “el hombre de
pecado” (anticristo) aparecerá. El misterio de injusticia ha estado
operando desde el tiempo de Pablo, pero está siendo restringido
por el poder del Espíritu que obra por medio de la iglesia verdadera.
Sólo cuando la iglesia sea llevada de la tierra por el rapto, este
hombre podrá aparecer públicamente.

En 1 Tesalonicenses 5, siguiendo el pasaje del rapto en el capítulo 4,


Pablo enseña acerca del Día del Señor. Él advierte de la destrucción
que éste traerá sobre los injustos (vv. 2, 3). Pero en seguida aseguró
a los cristianos que los que son de Cristo no serán vencidos (v. 4).
Todavía hablando del día del Señor, Pablo escribe: “Porque no nos
ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de
nuestro Señor Jesucristo” (v. 9). Parece claro que él está indicando
aquí la liberación de los creyentes de los juicios del día del Señor,
incluida la gran tribulación.

En el Nuevo Testamento los cristianos son repetidamente


exhortados a velar en vista de la venida del Señor. Nunca se les
enseña velar por la gran tribulación ni por la llegada del Anticristo.
Esperar que tales cosas tengan que suceder antes del rapto destruye
el sentido de inminencia que respecto a la segunda venida de Cristo
aparece en todo el Nuevo Testamento.

Los creyentes reciben las instrucciones de que tienen que “esperar


de los cielos a su Hijo,” no la gran tribulación (1 Tesalonicenses
1:10). Cuando las señales del fin de la era son evidentes, deben
erguirse y levantar su cabeza en expectación de su redención, no de
la gran tribulación (Lucas 21:28).

Las señales de la venida del Señor se manifestarán antes de su


llegada pública, pero no tienen que ser cumplidas antes del rapto.
Cualquier enseñanza que ciertos hechos tienen que acontecer antes
del rapto no está en armonía con la doctrina de inminencia.

Es consecuente con los tratos de Dios con su pueblo en el Antiguo


Testamento creer que la iglesia será llevada del mundo antes de la
gran tribulación. Dios no mandó el diluvio hasta que Noé y su
familia estuvieron seguros dentro del arca. No destruyó a Sodoma
hasta que Lot salió. La Biblia refiere de un rapto que es pre-
tribulación. En todas las enseñanzas de la segunda venida en el
Nuevo Testamento la inminencia se enfatiza. Interponer otros
sucesos antes del rapto viola tales enseñanzas.

Mientras los cristianos esperan con alegría la venida del Señor, es


bueno recordarles las palabras de Pablo a Tito: “Porque la gracia de
Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres,
enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos
mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente,
aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa
de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo, quien se dio a sí mismo
por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un
pueblo propio, celoso de buenas obras” (Tito 2:11-14).

EL TEXTO BÍBLICO HA SIDO TOMADO DE LA VERSIÓN REINA-VALERA Ó1960

SOCIEDADES BÍBLICAS EN AMÉRICA LATINA; Ó RENOVADO 1988 SOCIEDADES


“LA IGLESIA NO
BÍBLICAS UNIDAS. UTILIZADO CON PERMISO.

PASARÁ POR LA GRAN TRIBULACION”


27 de abril de 2015 a las 21:06Público
“LA IGLESIA NO PASARÁ POR LA GRAN TRIBULACION”
Debido a que existen muchas dudas con respecto a este tema y muchos predicadores (entre ellos
lamentablemente Armando Alducín, Paul Washer, Chuy Olivares, a los cuales respeto y no hay nada
que decir en contra de su persona pero si en algunos puntos doctrinales), ellos están enseñando la
falsa doctrina que “la iglesia pasará la gran tribulación” les comparto un excelente estudio , espero
las ayude a comprender el tema y les de la fuerza y apoyo bíblico para defender nuestra postura que
la iglesia se irá antes de la gran tribulación
(36 razones bíblicas para afirmarlo)
“Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba
que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra” Apocalipsis 3:10.
“así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por
segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan” Hebreos 9:28.
Hoy miles de congregaciones modernas están dejando de predicar profecías bíblicas, no hablan ni
enseñan el apocalipsis, no les interesa el tema del arrebatamiento de la iglesia al cielo, miran con
indiferencia y menosprecio el plan escatológico de Dios para la iglesia y para el mundo. Inclusive
cientos de denominaciones que antes lo creían, ahora dicen que no habrá rapto, sino que la iglesia
debe establecer el reino en la tierra (el Kingdon now).
Para muchas denominaciones protestantes el Apocalipsis es un libro cerrado, histórico o bien sin
importancia, la biblia dice todo lo contrario;
“Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella
escritas; porque el tiempo está cerca” Apocalipsis 1:3.
De las pocas denominaciones que todavía están anunciando el rapto, muchas de ellas lideradas por
seudo escatólogos, aseguran que la iglesia entrará en la gran tribulación y que se irá al cielo
arrebatada por Jesús a la mitad del periodo de la gran tribulación o bien a finales de la gran
tribulación (en Armagedón), es decir aun muchos de los que dicen creer en el rapto tampoco enseñan
correctamente la verdad del arrebatamiento de la iglesia al cielo.
Según la escritura señala con claridad meridiana la iglesia del Señor será llevada al cielo poco antes
del comienzo del periodo más terrible que la humanidad conocerá; el horrendo tiempo de la gran
tribulación (Mateo 24:15, Apocalipsis 6:1), la verdadera iglesia de Cristo no entrará en este periodo.
En este sencillo pero conciso estudio, veremos 36 razones bíblicas para afirmarlo.
1. No existe ningún pasaje en el Antiguo Testamento o en el Nuevo Testamento que diga que la
Iglesia pasará por el período de la Tribulación.
2. El período de la Tribulación es llamado el “Tiempo de Angustia de Jacob” (el tiempo de angustia
del Israel incrédulo), pero nunca es llamado el tiempo de Angustia de la Iglesia (Jeremías 30:7).
3. Gabriel le dijo a Daniel, “Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo [(el pueblo de
Daniel es el judío] y sobre tu santa ciudad”, la Ciudad Santa es Jerusalén (Daniel 9:24). No hay
mención de la Iglesia.
4. La Iglesia no tuvo parte en las primeras 69 semanas y no tendrá ninguna parte en la septuagésima
semana, es decir la semana 70 (el periodo de la Tribulación) (Daniel 9:24).
5. En el libro de Apocalipsis, el Rapto ocurre en Apocalipsis 4:1, cuando Dios lleva a Juan al 3°
cielo, lo cual es antes del periodo de la Tribulación descrito en Apocalipsis 6:1-19. En la secuencia
de eventos, el Rapto es antes de los juicios de los sellos, las trompetas y las copas.
6. La Iglesia es mencionada más de veinte veces en los primeros tres capítulos de Apocalipsis, pero
la Iglesia nunca es mencionada en la descripción del periodo de la Tribulación entre Apocalipsis 4:1
y Apocalipsis 19:1.
7. El período de la Tribulación es llamado en la Biblia “un Día de Ira” (Sofonías 1:15), pero la Biblia
dice, “Dios no nos ha puesto (a la Iglesia) para ira” (1°. Tesalonicenses 5:9).
8. El período de la Tribulación es llamado en la Biblia un Día de Ira (Sofonías 1:15), pero la Biblia
dice que Jesús “nos libra de la ira venidera (librará a la Iglesia del periodo de la Tribulación) 1°.
Tesalonicenses 1:10. Dios pues nos ha prometido en su palabra a todos los que somos parte de su
iglesia, que nos librará de esa gran ira que viene sobre el mundo entero.
9. El periodo de la Tribulación es llamado “el Día del Señor” en la Biblia (Sofonías 1:14). La Biblia
dice, “el día del Señor (el periodo de la Tribulación) vendrá así como ladrón en la noche; que cuando
digan (los incrédulos): Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos (sobre los incrédulos no
nosotros) destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán (los incrédulos,
nosotros Sí escaparemos)” 1°. Tesalonicenses 5:2-3. Todo este pasaje enseña claramente que el
periodo de la Tribulación vendrá sobre los incrédulos, pero no incluye a los creyentes.
10. Con respecto al Rapto, la Biblia dice, “Consolaos unos a otros con estas palabras” (1°.
Tesalonicenses 4:18). No hay consuelo en la enseñanza que la Iglesia atravesará parte o todo el
periodo de la Tribulación.
11. Jesús le dijo a la Iglesia en Filadelfia: “Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo
también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los
que moran sobre la tierra” (Apocalipsis 3:10). Dios prometió mantener a los miembros obedientes de
la Iglesia fuera del periodo de la Tribulación.
12. De acuerdo con la Biblia, las Bodas del Cordero se llevarán a cabo en el cielo antes de que Jesús
regrese a pelear la Batalla de Armagedón al final del periodo de la Tribulación. (Apocalipsis 19:7-
21). Esto significa que la Iglesia irá al cielo (será arrebatada) para las Bodas del Cordero antes de la
Segunda Venida.
13. El fin de la era será “como los días de Noé” (Mateo 24:37). Noé y su familia fueron removidos
de la tierra (entraron al arca) antes del diluvio. Algunos creen que esto significa que la Iglesia será
removida de la tierra antes del juicio de Dios es decir, arrebatada antes del periodo de la Tribulación
(Génesis 7:23).
14. El fin de la era será “como los días de Lot” (Lucas 17:28). Lot y su familia fueron removidos de
Sodoma antes del juicio de Dios (antes que el fuego y el granizo cayeran) Génesis 19:16. Creemos
por lo tanto, que indudablemente la Iglesia será removida de la tierra antes del juicio de Dios
(Arrebatada antes del periodo de la Tribulación).
15. Jesús estaba hablando acerca del periodo de la Tribulación cuando dijo, “Orad en todo tiempo
que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán” (Lucas 21:36). Parece
irrazonable creer que Jesús le diría a la Iglesia que ore por algo; “escapar”, que El no está dispuesto a
conceder.
16. La Biblia dice, “Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al
presente lo detiene, hasta que Él a su vez sea quitado de en medio. Y entonces se manifestará aquel
inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de Su boca, y destruirá con el resplandor de Su
venida” (2°. Tesalonicenses 2:7-8). La interpretación más común de esto es que el Anticristo no
puede ser revelado en el mundo hasta que el que restringe (quien la mayoría de los comentaristas
dicen que es el Espíritu Santo y la Iglesia) sea removido. Si el que restringe es sólo la Iglesia, esto
significa que la Iglesia será removida antes de que el Anticristo sea revelado (esto es el Rapto Pre-
Tribulacional). Si el que restringe es sólo el Espíritu Santo en la iglesia, pues queda claro que será
precisamente el Espíritu del Señor quien quitará a la iglesia de la tierra en el momento del rapto ya
que el único pueblo que tiene una promesa de ser sacado de la tierra antes de la aparición del
Anticristo, es justamente la iglesia, una vez que ella sea sacada de en medio se abrirá el 1° sello del
Apocalipsis y aparecerá el anticristo o 1° jinete Apocalipsis 6:1-2.
17. Isaías escribió que Dios dijo, “Tus muertos vivirán; sus cadáveres resucitarán. ¡Despertad y
cantad, moradores del polvo! porque su rocío es cual rocío de hortalizas, y la tierra dará sus muertos.
Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras ti tus puertas; escóndete un poquito, por un
momento, en tanto que pasa la indignación. Porque he aquí que Jehová sale de su lugar para castigar
al morador de la tierra por su maldad contra Él; y la tierra descubrirá la sangre derramada sobre ella,
y no encubrirá ya más sus muertos” (Isaías 26:19-21). Observe que los muertos resucitan primero
(eso es el Rapto), luego el pueblo de Dios es llamado a entrar en sus aposentos por un tiempo corto
hasta que la indignación (un nombre del periodo de la Tribulación) haya pasado. Dios levantará a los
muertos y convocará a Su pueblo porque pretende castigar a los habitantes de la tierra (enviar el
periodo de la Tribulación).
18. Malaquías escribió que Dios dijo, “Y serán para Mí especial tesoro, ha dicho Jehová de los
ejércitos, en el día en que Yo actúe; y los perdonaré, como el hombre que perdona a su hijo que le
sirve. Entonces os volveréis, y discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que sirve a
Dios y el que no le sirve” (Malaquías 3:17-18). Los maestros Pre-Tribulación creen que Dios está
diciendo que El vendrá por Su Iglesia (el Rapto) y luego El regresará con Su Iglesia (la Segunda
Venida) para juzgar entre los justos y los malvados es decir al llevarse a su pueblo (los buenos) y
dejar a los impíos en la tribulación (los malos) confirma este pasaje.
19. En el Rapto, Jesús viene por Su Iglesia (1°. Tesalonicense 4:16-17; Juan 14:3). Cuando Él viene
al final del periodo de la Tribulación, Él vendrá con Su Iglesia (1°. Tesalonicenses 3:13; Apocalipsis
19:14).
20. Con respecto a la Segunda Venida, Jesús dijo, “Pero del día y de la hora nadie sabe ni aun los
ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre” (Mateo 24:36). Pero si la Iglesia pasa por el periodo de la
Tribulación, algunos sabrán el día porque será siete años después de la firma del tratado de siete
años. Algunos sabrán el día porque será 1.260 días después que el Anticristo profane el Templo
(Apocalipsis 12:6).
21. Con respecto al Anticristo, muchos eruditos creen que la Biblia enseña que él no será revelado
hasta que la Iglesia se haya ido (2°. Tesalonicenses 2:6-8), pero si la Iglesia pasa por el periodo de la
Tribulación, algunos sabrán quién es él porque él firmará el tratado de siete años (Daniel 9:24-27),
encabezará el gobierno mundial (Apocalipsis 13:1-10), intentará forzar que multitudes lo adoren y
que reciban su marca, reciban su nombre o su número (Apocalipsis 13:15-17). Muchos de aquéllos
que estén aquí y estén siendo forzados a adorarle y a tomar su nombre o morir, sabrán quién es él.
22. El Anticristo no está supuesto a ser revelado hasta después que la Iglesia se haya ido (2°.
Tesalonicenses 2:6-8), pero si la Iglesia pasa por el periodo de la Tribulación, la Iglesia sabrá quién
es el Anticristo porque él pondrá una estatua de sí mismo en el Templo reconstruido (Daniela 11:31;
Daniel 12:11; Mateo 24:15).
23. Si la Iglesia pasa por el periodo de la Tribulación, la Iglesia sabrá quién es el Anticristo, porque
él encabezará el gobierno mundial y recibirá una herida mortal en su cabeza que será sanada
(Apocalipsis 13:3). Algunos piensan que él será resucitado de los muertos o al menos fingirá la
resurrección.
24. Si la Iglesia pasa por el periodo de la Tribulación, la Iglesia sabrá quién es el Anticristo, porque
él encabezará el gobierno mundial y estará apoyado por la cabeza de la religión mundial llamado el
Falso Profeta (Apocalipsis 13:11-18).
25. Si la Iglesia pasa por el periodo de la Tribulación, la Iglesia sabrá quién es el Anticristo, porque
él será el que matará a los dos Testigos (la mayoría concuerda que ellos serán Elías y Moisés) en ese
periodo (Apocalipsis 11:7).
26. Muchas personas no piensan que la Iglesia pasará por el periodo de la Tribulación debido a
versículos de la Escritura que dicen cosas como, “Jehová guarda a todos los que le aman, mas
destruirá a todos los impíos” (Salmo 145:18-20). Muchos creen que Dios preservará a la Iglesia del
periodo de la Tribulación o que mantendrá a la Iglesia fuera del periodo de la Tribulación y no
destruirá a la Iglesia en el periodo de la Tribulación.
27. El autor de la carta a los Hebreos dice claramente; “Así también Cristo fue ofrecido una sola vez
para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para
salvar a los que le esperan” Hebreos 9:28, por ende si en su primera venida hace 2.000 años vino
para salvarnos del pecado como dice Lucas 19:10, Hechos 4:12, 1°. Timoteo 1:15, Romanos 6:23,
ahora vendrá en el rapto para librarnos de la gran Tribulación ¿A quiénes, a todos? no
definitivamente No, solo a aquellos “que le esperan”.
28. En las siete cartas a las siete Iglesias del Asia, Jesús dijo, “El que tiene oído, oiga lo que el
Espíritu dice a las Iglesias”, siete veces (Apocalipsis 2:7, 11, 17, 29; 3:6, 13, 22). Cuando llegamos
al periodo de la Tribulación, Jesús dijo, “Si alguno tiene oído, oiga” (Apocalipsis 13:9). El dejó
fuera, “lo que el Espíritu dice a las iglesias” ¿Por qué razón? Sencillamente porque no hay iglesia en
la tierra que pase por el periodo de la Tribulación. La Iglesia estará en el Cielo.
29. Cuando el Rapto ocurre, la Iglesia sube para encontrar a Jesús en el aire (1°. Tesalonicenses
4:13-18), pero al final del periodo de la Tribulación, la Iglesia descenderá a la tierra con Jesús para
atestiguar lo que Él hace en la Batalla de Armagedón (Apocalipsis 19:14-21).
30. El Rapto Pre-Tribulación es más consistente con la gracia, el amor, la misericordia y la
compasión de Dios, etc. Los Rapto Mid y Post-Tribulación son más consistentes con la ira de Dios.
31. Si el Rapto se lleva a cabo al final del periodo de la Tribulación, y todos los inicuos son
removidos de la tierra en ese momento (Mateo 13:24-30, 47-50; 25:41) no quedaría nadie para
repoblar la tierra durante el Milenio. Si todos los salvos son arrebatados y todos los perdidos son
removidos de la tierra al final del periodo de la Tribulación, no quedará nadie para repoblar la tierra.
32. El Anticristo prevalecerá contra los santos que se queden aquí (por tibios y no dar frutos) durante
el periodo de la Tribulación, pero las puertas del infierno no prevalecerán contra la Iglesia
(Apocalipsis 13:7; Mateo 16:18). Por lo tanto, la Iglesia no pasará por el periodo de la Tribulación.
33. Los 24 ancianos (representantes de la Iglesia formada por todos los santos del antiguo y del
nuevo testamento) estarán en el cielo antes que el rollo de siete sellos sea abierto (Apocalipsis 4:4;
6:1-17).
34. Jesús estaba hablando acerca del periodo de la Tribulación cuando dijo, “Orad en todo tiempo
que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán” (Lucas 21:36). Él no dijo:
“Oren en todo tiempo para que seáis tenidos por dignos de soportar algunas o todas estas cosas que
vendrán”, por lo tanto es claro que los creyentes verdaderos escaparán de la tribulación y escaparán
de todos de los sucesos que ocurrirán en ese terrible periodo.
35. No hay señales del Rapto, el rapto es sorpresivo “como ladrón en la noche”, pero si el Rapto
ocurre durante el periodo de la Tribulación, tendría que ser después que el tratado de siete años sea
firmado por el Anticristo, y tal vez después de varias otras cosas dependiendo de lo que una persona
crea acerca del Mid Tribulación, Post-Tribulación, etc.
36. Jesús dijo, “Cuando estas cosas comiencen a suceder” (Lucas 21:28). Él no dijo, “Después que
todas estas cosas hayan ocurrido vuestra redención se acerca”. El dijo, “Cuando estas cosas
empiecen a suceder, está cercano”.
Para terminar solo diremos que las evidencias bíblicas son abrumadoras a favor de que la iglesia no
entrará, ni pasará por la gran tribulación. Los argumentos bíblicos son contundentes y evidentes, solo
un ciego o un hereje no podría aceptarlas, además en nuestro movimiento pentecostal jamás se ha
escuchado una profecía, vaticinio o revelación de algún creyente, usado por el Espíritu Santo, que
diga, advierta o preparare a la iglesia para enfrentar la gran tribulación, sino muy por el contrario,
siempre Dios por medio de su Espíritu, amonesta a la iglesia y a los creyentes, a prepararse para ser
llevados al cielo antes de la ira venidera, Amén, que así sea.
“Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y
embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día. Porque como
un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la tierra. Velad, pues, en todo tiempo
orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie
delante del Hijo del Hombre” Lucas 21:34-36.

Etimología[editar]
El versículo citado de la Primera epístola a los tesalonicenses, originalmente escrita en
griego común o helenístico (koiné), utiliza la palabra ἁρπαγησόμεθα (harpaguesómeza),
que podría traducirse como ‘seremos arrebatados’, ‘seremos llevados’ o frases
parecidas.5 La palabra es una conjugación del verbo ἁρπάζω (harpadsō), que significa
‘arrebatar’, ‘tomar’, ‘llevar, ‘raptar’ y verbos similares.6
En la Vulgata, ἁρπαγησόμεθα (harpaguesómeza) se traduce al latín como rapiemur,7 de
significado similar, que proviene del verbo rapio (‘raptar’, ‘arrebatar’, ‘llevar’ ‘tomar
por la fuerza’ o verbos similares).
Principios[editar]
1. Aquellos que estén vivos y permanezcan hasta la
Venida del Señor no precederán a los que están
muertos. (1 Tes 4:15)
2. Los muertos en Cristo resucitarán primero. (1 Tes
4:16)
3. Los vivos y los muertos resucitados serán llevados
juntos en las nubes para encontrarse con el Señor en el
aire. (1 Tes 4:17)
4. El arrebatamiento ocurrirá durante la Parusía. "los que
están vivos y permanecen hasta la Venida del Señor
(Parousia en griego), serán arrebatados juntamente con
ellos [los muertos resucitados] en las nubes para recibir
al Señor en el aire" (1 Tes 4:17)
5. La reunión con el Señor será permanente. "Y así
estaremos siempre con el Señor" (1 Tes. 4:17)

Tiempo[editar]
Según 1 Tesalonicenses 4: 16-17 y Mateo 24: 37-40, el arrebatamiento ocurriría en
la Parusía del Señor, donde se usa la palabra griega "Parousia" para describir los
eventos:

1 Tesalonicenses 4:15-17 NVI Mateo 24:37-40 NVI

15
 Conforme a lo dicho por el Señor, afirmamos 37
 La venida del Hijo del hombre (παρουσία
que nosotros, los que estemos vivos y hayamos
Parousia)9 será como en tiempos de
quedado hasta la venida del Señor (παρουσία
Noé. 38Porque en los días antes del diluvio
Parousia)8, de ninguna manera nos adelantaremos
comían, bebían y se casaban y daban en
a los que hayan muerto. 16 El Señor mismo
casamiento, hasta el día en que Noé entró en el
descenderá del cielo con voz de mando, con voz
arca; 39y no supieron nada de lo que sucedería
de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos
hasta que llegó el diluvio y se los llevó a todos.
en Cristo resucitarán primero. 17 Luego los que
Así será en la venida del Hijo del hombre.
estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos
(παρουσία Parousia)10 40Estarán dos hombres
arrebatados junto con ellos en las nubes para
en el campo: uno será llevado y el otro será
encontrarnos con el Señor en el aire. Y así
dejado.
estaremos con el Señor para siempre.

En los puntos de vista amilenarista y post-milenarista no hay distinciones en el


momento del arrebatamiento. Estos puntos de vista consideran que el arrebatamiento
descrito en 1 Tesalonicenses 4:15-17 sería idéntico a la Segunda Venida de Cristo
descrito en Mateo 24:29-31 después de un milenio simbólico.
En el punto de vista pre-milenarista, el arrebatamiento sería antes de un milenio literal.
Dentro del pre-milenarismo, la posición pre-tribulacionista es la visión mas
predominante entre todas que distingue el arrebatamiento y la segunda venida como dos
eventos diferentes. También hay otras posiciones dentro del pre-milenarismo que
difieren con respecto al momento del rapto.11

Interpretaciones[editar]
Existen tres corrientes teológicas en cuanto a la interpretación de los pasajes bíblicos
relacionados con el rapto. Se debe tener en cuenta que estas, a su vez, se subdividen en
otras y no son propias de denominaciones particulares:
 Amilenaristas. Rechazan la creencia de que Jesús tendrá
un reinado físico de mil años literales en la tierra.
Sostienen que los mil años mencionados en Apocalipsis 20
es un número figurativo, no una descripción literal,
interpretado como un tiempo indefinido entre la fundación
de la Iglesia y la segunda venida de Cristo, 12 y que Jesús
reina ya desde el Cielo junto con sus santos a través de su
Iglesia. Los amilenaristas no suelen usar el término rapto o
arrebatamiento para referirse al evento del encuentro de
ellos con Jesús en el Cielo, para ellos este suceso sucederá
en un mismo evento con la Segunda Venida de Cristo,
durante la cual tendrá lugar la resurrección general y el
juicio final, donde todos (justos e injustos), luego de haber
sido resucitados, serán juzgados según sus obras, los justos
serían llevados (raptados) al cielo y los malvados serían
llevados al infierno. Entre estos figuran la Iglesia católica y
algunos grupos protestantes tradicionales.13

 Premilenaristas. Creen que Jesús regresará por segunda


vez a la tierra para reinar físicamente sobre ella durante un
periodo de mil años literales tras el cual sucederá el juicio
final. Se subdivide a su vez en varias corrientes teológicas
(todas ellas sostenidas por algunas
denominaciones evangélicas, como por ejemplo
los pentecostales):
o Postribulacionistas. Creen, de acuerdo con 2
Tesalonicenses 2:1-4, que el arrebatamiento ocurrirá
tras la manifestación del Anticristo y al término de
la Gran Tribulación. Los premilenaristas
postribulacionistas ven el arrebatamiento, al igual que
los amilenaristas y posmilenaristas, como un suceso
que sucederá en un mismo evento con la Segunda
Venida de Cristo. Esta fue la doctrina sostenida por los
escritores paleocristianos y los reformadores
protestantes de la Edad Media.[cita requerida] Muchas
Iglesias evangélicas y protestantes sostienen esta
visión.[cita requerida]
o Pretribulacionistas. Creen que el arrebatamiento
ocurrirá tras la manifestación del Anticristo y antes de
la Gran Tribulación (2 Tesalonicenses 2:1-4). Después
de este periodo ocurriría la segunda venida de Cristo
para reinar en la Tierra físicamente por mil años
literales. Después del milenio acontecería el juicio final
y la construcción del «nuevo cielo» y de la «nueva
Tierra».141516 Esta doctrina es relativamente reciente (de
hace poco más de un siglo). Desde 1832 formó parte
de las tesis dispensacionalistas de John Nelson Darby,
quien se refería al arrebatamiento como «el misterio
del rapto». Fue incorporada a la Biblia de
Referencia Scofield en 1909. Tras la publicación del
libro de Hal Lindsey La agonía del gran planeta
Tierra en 1970 y la difusión de varias películas, hoy se
ha convertido en una doctrina muy popular en el seno
de muchas Iglesias evangélicas (por ejemplo, la Iglesia
Metodista Pentecostal, la Iglesia Internacional del
Evangelio Cuadrangular, las Asambleas de Dios y la
mayoría de las Iglesias pentecostales).
o Semitribulacionistas. Llamados mid-tribulationists en
inglés, consideran que la Iglesia pasará los primeros 42
meses en la Tierra y que el arrebatamiento ocurrirá
aproximadamente a la mitad de la semana 70 (semana
de 7 años bíblicos [de 360 días de duración] referente a
la profecía de las Setenta Semanas escrita en Daniel
9:24-27; creen que es antes de la Gran tribulación, que
dura los últimos 42 meses finales de la semana 70 —
Mateo 24:20-21 y Apocalipsis 13:5—). A la mitad de
la Tribulación, el Anticristo se convertiría en la
«abominación de la desolación», por la profanación
del Tercer templo de Jerusalén, que habrá de ser
construido al lado del Domo de la Roca.
o Preíra. Esta postura considera que el rapto ocurrirá en
la segunda mitad de la Tribulación, antes de la segunda
venida. Se trata de una doctrina postribulacionista que
adelanta el arrebatamiento un poco antes de finalizada
la Tribulación. Divide la semana 70 en 3 períodos: del
primer al tercer sello, conocido como «principio de los
dolores del parto»; del cuarto al sexto sello,
denominado la «Gran Tribulación del Anticristo»; y
del sexto sello en adelante, llamado el «día de la ira del
Señor». Los creyentes en esta doctrina consideran que
el rapto ocurrirá cuando se abra el sexto sello. Para
entonces, muchos cristianos habrían sido asesinados
como mártires por el Anticristo.
o Parcial. Esta teoría sostiene que los verdaderos
cristianos serán arrebatados antes, en medio de o
después de la Tribulación, dependiendo de la verdadera
conversión a la fe. Por lo tanto, el rapto de un creyente
se determina por el tiempo de su conversión durante la
Tribulación. Los defensores de esta teoría sostienen
que solo los que son fieles a la Iglesia serán raptados al
inicio de la Tribulación y que el resto de los creyentes
lo serán en algún momento durante esta o al final.
 Posmilenaristas. Creen que la segunda venida de Cristo
ocurre después del "milenio", una edad de oro en el que la
ética cristiana prospera.1718[aclaración requerida]. Tienen dos
posturas sobre el milenio, algunos creen que los mil años
son literales, mientras que para otros es figurativo. Durante
dicho milenio, literal o figurativo, ocurriría la
cristianización completa de todo el mundo donde existirá
un periodo de justicia y paz (cosa que aún no sucede) y al
término de este, sucedería la segunda venida de Cristo. Los
posmilenaristas comúnmente ven el arrebatamiento, al
igual que los amilenaristas y los premilenaristas
postribulacionistas, como un suceso que sucederá en un
mismo evento con la Segunda Venida de Cristo[´
 ´

El Rapto”: Que nos enseña


´

la biblia sobre esto?

Este tema creo que es muy importante tocarlo, ya que la enseñanza y lo que
cree la mayoría del cristianism es que no hay de que preocuparnos ya que
por el solo hecho de ser cristianos cuando los tiempos del fin lleguen junto
con una Gran Tribulación la iglesia sera “raptada” y llevada a las nubes y
desde arriba verán toda la tribulación al resto del mundo, al tener esta
enseñanza lo que genera es confianza y confort y es como decirle a u chico
de escuela que no tiene que estudiar para el examen final ya que el examen
no lo tiene que presentar, que hace el chico? pues no estudia.

Que pasaría si te digo que el “Rapto” como se conoce y enseña en la iglesia


no es bíblico y lo vemos con pasajes?  crees que el saber que SI vas a pasar
por tribulación y juicio, te generaría un interés por estudiar mas sobre
profecía y Torah?  crees que si al estudiante le dices que el examen final
sera difícil y que debe estudiar para pasarlo le genere una fuerte obligación
a estudiar?

La escritura me ha ensenado que lo que el cristianismo llama como Rapto,


es fácil entenderlo si estudiamos la historia del Éxodo de Egipto, no hay
mejor ejemplo, lo que sucederá al final de los tiempos después de  pasar
por la tribulación (como Israel paso por algunas plagas en Egipto y mucha
opresión), el pueblo de YHVH sera llevado de los 4 ángulos de la tierra, y
entonces ya no sera dicho “como cuando YHVH saco a su pueblo de
Egipto” si no se dirá “cuando YHVH saco a todos sus escogidos de los 4
ángulos de la tierra”.

Este estudio es un llamado a todos, para regresar a las enseñanzas de tu


Dios, el único y creador YHVH, por favor lee con atención antes de creer
cualquier cosa que se te enseñe (incluso lo que esta aquí) y toma tus
conclusiones y decisiones.

.
Que enseña la teología del
RAPTO?
El rapto es aquel tiempo cuando los cristianos fieles de repente serán
arrebatados de este mundo para estar con el Señor Jesucristo.  Una fracción
de segundo antes del rapto de los cristianos vivos será la resurrección de
aquellos cristianos que han “muerto en Cristo.” En el cielo ó en la
atmósfera de la tierra ó en el espacio, ellos serán juzgados ante el tribunal
de Cristo para ser recompensado por sus actos (2 Corintios 5:10; 1
Corintios 3:10-15). Durante ese tiempo por siete años los que quedan en la
tierra serán sometidos a la prueba más tremenda de sus vidas en aquel
periodo más fatal de toda la historia de la humanidad, el tiempo de “la gran
tribulación” (Mateo 24:29).
.

Quien mejor para hablarle al


publico cristiano que el mismo
JESUS, ya que el es el que hará
el Rapto:
Jesus / Yeshuah mismo hablando sobre el tema de los tiempos del fin,
donde claramente vemos que claramente si habla de que recogerá a los
escogidos de las 4 esquinas de la tierra, PERO después de haber pasado la
Gran Tribulación:

Mat 24:4 —Tengan cuidado de que nadie los engañe —les advirtió Jesús


— 5 Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: “Yo soy el Cristo”, y
engañarán a muchos. 6 Ustedes oirán de guerras y de rumores de guerras,
pero procuren no alarmarse. Es necesario que eso suceda, pero no será
todavía el fin.  7 Se levantará nación contra nación, y reino contra reino.
Habrá hambres y terremotos por todas partes.  8 Todo esto será apenas el
comienzo de los dolores. 9 »Entonces los entregarán a ustedes para que los
persigan y los maten, y los odiarán todas las naciones por causa de mi
nombre.  10 En aquel tiempo muchos se apartarán de la fe; unos a otros se
traicionarán y se odiarán; 11 y surgirá un gran número de falsos profetas
que engañarán a muchos. 12 Habrá tanta maldad que el amor de muchos se
enfriará, 13 pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo. 14 Y este
evangelio del reino se predicará en todo el mundo como testimonio a todas
las naciones, y entonces vendrá el fin. 15 »Así que cuando vean en el lugar
santo “el horrible sacrilegio”, de la que habló el profeta Daniel (el que lee,
que lo entienda), 16 los que estén en Judea huyan a las montañas. 17 El que
esté en la azotea no baje a llevarse nada de su casa. 18 Y el que esté en el
campo no regrese para buscar su capa. 19 ¡Qué terrible será en aquellos
días para las que estén embarazadas o amamantando! 20 Oren para que su
huida no suceda en invierno ni en sábado. 21 Porque habrá una gran
tribulación, como no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora,
ni la habrá jamás. 22 Si no se acortaran esos días, nadie sobreviviría, pero
por causa de los elegidos se acortarán. 23 Entonces, si alguien les dice a
ustedes: “¡Miren, aquí está el Cristo!” o “¡Allí está!”, no lo crean. 24
Porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas que harán grandes señales y
milagros para engañar, de ser posible, aun a los elegidos. 25 Fíjense que se
lo he dicho a ustedes de antemano. 26 »Por eso, si les dicen: “¡Miren que
está en el desierto!”, no salgan; o: “¡Miren que está en la casa!”, no lo
crean. 27 Porque así como el relámpago que sale del oriente se ve hasta en
el occidente, así será la venida del Hijo del hombre. 28 Donde esté el
cadáver, allí se reunirán los buitres. 29 »Inmediatamente después de la
tribulación de aquellos días, »“se oscurecerá el sol y no brillará más la
luna; las estrellas caerán del cielo y los cuerpos celestes serán
sacudidos” . 30 »La señal del Hijo del hombre aparecerá en el cielo, y se
angustiarán todas las razas de la tierra. Verán al Hijo del hombre venir
sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria. 31 Y al sonido de la gran
trompeta mandará a sus ángeles, y reunirán de los cuatro vientos a los
elegidos, de un extremo al otro del cielo. 32 »Aprendan de la higuera esta
lección: Tan pronto como se ponen tiernas sus ramas y brotan sus hojas,
ustedes saben que el verano está cerca.

.
.

Versículos utilizados para


enseñar que el Rapto sera antes
de la tribulación:
Rev 3:10 Porque tú sí obedeciste mi mensaje acerca de perseverar, te
guardaré en tiempos de aflicción que vienen sobre el mundo entero, para
poner a prueba a la gente que vive en la tierra.
Te confundió el versículo de arriba?  no solo leamos el versículo, lee todo
el capitulo y es mas lee el capitulo 2 y 3, esta hablando a las 7 iglesias, este
mensaje es para una de ellas, la iglesia de “Filadelfia”, una iglesia que le
mostró obediencia (obediencia a que? claramente a la Torah), dice que a
ese grupo de gente lo guardara (cuidara) en tiempos de aflicción, sera algo
parecido con las plagas que mando YHVH sobre Egipto? donde las
primeras plagas eran para egipcios e israelitas y en las ultimas plagas
YHVH les dio instrucciones a Israel y los que obedecían de no salir o de
hacer la pascua por ejemplo los “guardaba” de esas plagas? Sin embargo
estaban presentes y si no obedecían las plagas los afectaban.

1Th 4:15 Conforme a lo dicho por el Señor, afirmamos que nosotros, los


que estemos vivos y hayamos quedado hasta la venida del Señor, de
ninguna manera nos adelantaremos a los que hayan muerto. 16 El Señor
mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con
trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero. 17 Luego
los que estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos
arrebatados junto con ellos en las nubes para encontrarnos con el Señor
en el aire. Y así estaremos con el Señor para siempre.
No entiendo como se puede tomar estos versículos para decir que el
“arrebato” sucede antes de la tribulación si claramente esta diciendo los que
estemos vivos HASTA la venida del senor, si estudiamos profetas y
complementamos apocalipsis, es fácil entender que el Mesías llegara a la
tierra después de la angustia y tribulación, no antes, entonces si habla de los
que hayan quedado hasta la venida del Senor, claramente dice que ese
Éxodo sera después de la tribulación. Igual que el éxodo de Egipto, fue una
vez que pasaron todas las plagas.

Joh 14:2 En el hogar de mi Padre hay muchas viviendas; si no fuera así,


ya se lo habría dicho a ustedes. Voy a prepararles un lugar. 3 Y si me voy y
se lo preparo, vendré para llevármelos conmigo. Así ustedes estarán donde
yo esté.
Honestamente no se como esto este hablando de un arrebatamiento, y
menos de donde se concluye que es antes de la tribulación?

.
.
Versículos
Luk 17:30 Así es como será en el día que el hijo del hombre sea
revelado. 31 En ese día si alguno está en la azotea, con sus pertenencias en
su casa, no debe bajar a llevárselas. Asimismo, si alguno está en el
campo, no puede devolverse. 32 ¡Recuerden a la mujer de Lot! 33 Todo
aquel que procure salvar su vida, la perderá; pero todo el que pierda su
vida, permanecerá vivo. 34 Les digo, en esa noche estarán dos personas en
una cama; una será llevada, y la otra será dejada atrás. 35 Estarán dos
mujeres moliendo granos juntas; una será llevada, y la otra será dejada
atrás.”  36 Dos hombres estarán en el campo; uno será llevado, y el otro
será dejado atrás. 37 Ellos le preguntaron: “¿Dónde Adón?” El
respondió: “Donde quiera que haya un cuerpo muerto, allí es donde se
juntarán los buitres.”
Es el mismo contexto de Mateo 24, no esta hablando de que sera llevado al
cielo, si no esta hablando de Juicio, que mucho tiene que ver este contexto:

Mat 25:31  Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, con todos sus
ángeles, se sentará en su trono glorioso.  32 Todas las naciones se
reunirán delante de él, y él separará a unos de otros, como separa el
pastor las ovejas de las cabras.  33 Pondrá las ovejas a su derecha, y las
cabras a su izquierda.  34 »Entonces dirá el Rey a los que estén a su
derecha: “Vengan ustedes, a quienes mi Padre ha bendecido; reciban su
herencia, el reino preparado para ustedes desde la creación del mundo.
35 Porque tuve hambre, y ustedes me dieron de comer; tuve sed, y me
dieron de beber; fui forastero, y me dieron alojamiento;  36 necesité ropa,
y me vistieron; estuve enfermo, y me atendieron; estuve en la cárcel, y me
visitaron.”
 

Este tema creo que es muy importante tocarlo, ya que la enseñanza y lo que
cree la mayoría del cristianismo es que no hay de que preocuparnos ya que
por el solo hecho de ser cristianos cuando los tiempos del fin lleguen junto
con una Gran Tribulación la iglesia sera “raptada” y llevada a las nubes y
desde arriba verán toda la tribulación al resto del mundo, al tener esta
enseñanza lo que genera es confianza y confort y es como decirle a u chico
de escuela que no tiene que estudiar para el examen final ya que el examen
no lo tiene que presentar, que hace el chico? pues no estudia.

Que pasaría si te digo que el “Rapto” como se conoce y enseña en la iglesia


no es bíblico y lo vemos con pasajes?  crees que el saber que SI vas a pasar
por tribulación y juicio, te generaría un interés por estudiar mas sobre
profecía y Torah?  crees que si al estudiante le dices que el examen final
sera difícil y que debe estudiar para pasarlo le genere una fuerte obligación
a estudiar?

La escritura me ha ensenado que lo que el cristianismo llama como Rapto,


es fácil entenderlo si estudiamos la historia del Éxodo de Egipto, no hay
mejor ejemplo, lo que sucederá al final de los tiempos después de  pasar
por la tribulación (como Israel paso por algunas plagas en Egipto y mucha
opresión), el pueblo de YHVH sera llevado de los 4 ángulos de la tierra, y
entonces ya no sera dicho “como cuando YHVH saco a su pueblo de
Egipto” si no se dirá “cuando YHVH saco a todos sus escogidos de los 4
ángulos de la tierra”.

Este estudio es un llamado a todos, para regresar a las enseñanzas de tu


Dios, el único y creador YHVH, por favor lee con atención antes de creer
cualquier cosa que se te enseñe (incluso lo que esta aquí) y toma tus
conclusiones y decisiones.

.
Que enseña la teología del
RAPTO?
El rapto es aquel tiempo cuando los cristianos fieles de repente serán
arrebatados de este mundo para estar con el Señor Jesucristo.  Una fracción
de segundo antes del rapto de los cristianos vivos será la resurrección de
aquellos cristianos que han “muerto en Cristo.” En el cielo ó en la
atmósfera de la tierra ó en el espacio, ellos serán juzgados ante el tribunal
de Cristo para ser recompensado por sus actos (2 Corintios 5:10; 1
Corintios 3:10-15). Durante ese tiempo por siete años los que quedan en la
tierra serán sometidos a la prueba más tremenda de sus vidas en aquel
periodo más fatal de toda la historia de la humanidad, el tiempo de “la gran
tribulación” (Mateo 24:29).

Quien mejor para hablarle al


publico cristiano que el mismo
JESUS, ya que el es el que hará
el Rapto:
Jesus / Yeshuah mismo hablando sobre el tema de los tiempos del fin,
donde claramente vemos que claramente si habla de que recogerá a los
escogidos de las 4 esquinas de la tierra, PERO después de haber pasado la
Gran Tribulación:
Mat 24:4 —Tengan cuidado de que nadie los engañe —les advirtió Jesús
— 5 Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: “Yo soy el Cristo”, y
engañarán a muchos. 6 Ustedes oirán de guerras y de rumores de guerras,
pero procuren no alarmarse. Es necesario que eso suceda, pero no será
todavía el fin.  7 Se levantará nación contra nación, y reino contra reino.
Habrá hambres y terremotos por todas partes.  8 Todo esto será apenas el
comienzo de los dolores. 9 »Entonces los entregarán a ustedes para que los
persigan y los maten, y los odiarán todas las naciones por causa de mi
nombre.  10 En aquel tiempo muchos se apartarán de la fe; unos a otros se
traicionarán y se odiarán; 11 y surgirá un gran número de falsos profetas
que engañarán a muchos. 12 Habrá tanta maldad que el amor de muchos se
enfriará, 13 pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo. 14 Y este
evangelio del reino se predicará en todo el mundo como testimonio a todas
las naciones, y entonces vendrá el fin. 15 »Así que cuando vean en el lugar
santo “el horrible sacrilegio”, de la que habló el profeta Daniel (el que lee,
que lo entienda), 16 los que estén en Judea huyan a las montañas. 17 El que
esté en la azotea no baje a llevarse nada de su casa. 18 Y el que esté en el
campo no regrese para buscar su capa. 19 ¡Qué terrible será en aquellos
días para las que estén embarazadas o amamantando! 20 Oren para que su
huida no suceda en invierno ni en sábado. 21 Porque habrá una gran
tribulación, como no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora,
ni la habrá jamás. 22 Si no se acortaran esos días, nadie sobreviviría, pero
por causa de los elegidos se acortarán. 23 Entonces, si alguien les dice a
ustedes: “¡Miren, aquí está el Cristo!” o “¡Allí está!”, no lo crean. 24
Porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas que harán grandes señales y
milagros para engañar, de ser posible, aun a los elegidos. 25 Fíjense que se
lo he dicho a ustedes de antemano. 26 »Por eso, si les dicen: “¡Miren que
está en el desierto!”, no salgan; o: “¡Miren que está en la casa!”, no lo
crean. 27 Porque así como el relámpago que sale del oriente se ve hasta en
el occidente, así será la venida del Hijo del hombre. 28 Donde esté el
cadáver, allí se reunirán los buitres. 29 »Inmediatamente después de la
tribulación de aquellos días, »“se oscurecerá el sol y no brillará más la
luna; las estrellas caerán del cielo y los cuerpos celestes serán
sacudidos” . 30 »La señal del Hijo del hombre aparecerá en el cielo, y se
angustiarán todas las razas de la tierra. Verán al Hijo del hombre venir
sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria. 31 Y al sonido de la gran
trompeta mandará a sus ángeles, y reunirán de los cuatro vientos a los
elegidos, de un extremo al otro del cielo. 32 »Aprendan de la higuera esta
lección: Tan pronto como se ponen tiernas sus ramas y brotan sus hojas,
ustedes saben que el verano está cerca.

Versículos utilizados para


enseñar que el Rapto sera antes
de la tribulación:
Rev 3:10 Porque tú sí obedeciste mi mensaje acerca de perseverar, te
guardaré en tiempos de aflicción que vienen sobre el mundo entero, para
poner a prueba a la gente que vive en la tierra.
Te confundió el versículo de arriba?  no solo leamos el versículo, lee todo
el capitulo y es mas lee el capitulo 2 y 3, esta hablando a las 7 iglesias, este
mensaje es para una de ellas, la iglesia de “Filadelfia”, una iglesia que le
mostró obediencia (obediencia a que? claramente a la Torah), dice que a
ese grupo de gente lo guardara (cuidara) en tiempos de aflicción, sera algo
parecido con las plagas que mando YHVH sobre Egipto? donde las
primeras plagas eran para egipcios e israelitas y en las ultimas plagas
YHVH les dio instrucciones a Israel y los que obedecían de no salir o de
hacer la pascua por ejemplo los “guardaba” de esas plagas? Sin embargo
estaban presentes y si no obedecían las plagas los afectaban.

1Th 4:15 Conforme a lo dicho por el Señor, afirmamos que nosotros, los


que estemos vivos y hayamos quedado hasta la venida del Señor, de
ninguna manera nos adelantaremos a los que hayan muerto. 16 El Señor
mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con
trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero. 17 Luego
los que estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos
arrebatados junto con ellos en las nubes para encontrarnos con el Señor
en el aire. Y así estaremos con el Señor para siempre.
No entiendo como se puede tomar estos versículos para decir que el
“arrebato” sucede antes de la tribulación si claramente esta diciendo los que
estemos vivos HASTA la venida del senor, si estudiamos profetas y
complementamos apocalipsis, es fácil entender que el Mesías llegara a la
tierra después de la angustia y tribulación, no antes, entonces si habla de los
que hayan quedado hasta la venida del Senor, claramente dice que ese
Éxodo sera después de la tribulación. Igual que el éxodo de Egipto, fue una
vez que pasaron todas las plagas.

Joh 14:2 En el hogar de mi Padre hay muchas viviendas; si no fuera así,


ya se lo habría dicho a ustedes. Voy a prepararles un lugar. 3 Y si me voy y
se lo preparo, vendré para llevármelos conmigo. Así ustedes estarán donde
yo esté.
Honestamente no se como esto este hablando de un arrebatamiento, y
menos de donde se concluye que es antes de la tribulación?
.
.
Versículos
Luk 17:30 Así es como será en el día que el hijo del hombre sea
revelado. 31 En ese día si alguno está en la azotea, con sus pertenencias en
su casa, no debe bajar a llevárselas. Asimismo, si alguno está en el
campo, no puede devolverse. 32 ¡Recuerden a la mujer de Lot! 33 Todo
aquel que procure salvar su vida, la perderá; pero todo el que pierda su
vida, permanecerá vivo. 34 Les digo, en esa noche estarán dos personas en
una cama; una será llevada, y la otra será dejada atrás. 35 Estarán dos
mujeres moliendo granos juntas; una será llevada, y la otra será dejada
atrás.”  36 Dos hombres estarán en el campo; uno será llevado, y el otro
será dejado atrás. 37 Ellos le preguntaron: “¿Dónde Adón?” El
respondió: “Donde quiera que haya un cuerpo muerto, allí es donde se
juntarán los buitres.”
Es el mismo contexto de Mateo 24, no esta hablando de que sera llevado al
cielo, si no esta hablando de Juicio, que mucho tiene que ver este contexto:

Mat 25:31  Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, con todos sus
ángeles, se sentará en su trono glorioso.  32 Todas las naciones se
reunirán delante de él, y él separará a unos de otros, como separa el
pastor las ovejas de las cabras.  33 Pondrá las ovejas a su derecha, y las
cabras a su izquierda.  34 »Entonces dirá el Rey a los que estén a su
derecha: “Vengan ustedes, a quienes mi Padre ha bendecido; reciban su
herencia, el reino preparado para ustedes desde la creación del mundo.
35 Porque tuve hambre, y ustedes me dieron de comer; tuve sed, y me
dieron de beber; fui forastero, y me dieron alojamiento;  36 necesité ropa,
y me vistieron; estuve enfermo, y me atendieron; estuve en la cárcel, y me
visitaron.”
 

1. Introducción
2. El rapto de la iglesia
3. Una explicación acerca del rapto de la iglesia
4. Rapto: ¿qué quiere decir?
5. ¿Cuándo tendrá lugar el rapto de la iglesia?
6. Esperar el rapto antes de la gran tribulación no es idea nueva

Introducción
El libro de Apocalipsis comienza con la visión del Cristo Glorificado (1:18-19). Dicha visión
constituye una especie de preludio que introduce las cartas o mensajes a las siete iglesias
del Asia Menor (caps. 2 y 3). De igual manera, la visión del «trono» y el «rollo» en los
capítulos 4 y 5 son preparatorios de las cosas que han de ocurrir en la tierra posteriormente.
La visión del trono del Dios creador del universo y del rollo sellado con siete sellos,
destacan un cuadro de juicio. La escena que aparece en los capítulos 4 y 5 está claramente
relacionada con Daniel 7:9-14 y 22:27, pero Apocalipsis 4 y 5 la presenta desde la
perspectiva de la iglesia, mientras que Daniel 7 la presenta desde la óptica de Israel.
Apocalipsis 4 y 5 descorre el telón del escenario celestial y permite que Juan contemple el
glorioso cuadro de la preparación divina para la intervención del Dios Soberano en los
asuntos del hombre. Los capítulos 4 y 5 son preparatorios para el comienzo del «día de
Jehová» o «día del Señor». El hombre ha tenido su día. El humanismo secular y filosófico
proclama que Dios no es necesario para el progreso humano. El hombre, dicen los
humanistas, puede vivir sin Dios. Pero la Palabra de Dios enseña lo contrario (Juan 15:5).

El rapto de la iglesia
«Después de esto miré, y he aquí una puerta abierta en el cielo; y la primera
voz que oí, como de trompeta, hablando conmigo, dijo: Sube acá, y yo te
mostraré las cosa que sucederán después de estas. Y al instante yo estaba en
el Espíritu» 4:1-2a
 A. Sube acá:
 1. [Después de esto miré, y he aquí una puerta abierta en el cielo; y la
primera voz que oí, como de trompeta, hablando conmigo, dijo: Sube acá, y
yo te mostraré las cosas que sucederán después de estas] 4:1
No fue coincidencia que lo primero que sucedió después que Juan describiera a las siete
iglesias (que, como vimos, no representan solo el mensaje a cada iglesia en particular sino
también a los siete periodos de historia de la iglesia), que ascendiera a los cielos. Como
Juan era el último apóstol que quedaba y era miembro de la iglesia universal, su elevación a
los cielos es figura del «rapto de la iglesia» antes que comience la gran tribulación. También
conviene mencionar que la invitación proviene de Cristo mismo, el primero que le habló
con «voz fuerte, como de trompeta» (1:10).
 a. «Después de esto miré, y he aquí una puerta abierta en el cielo»
(Metá taúta eídon, kaí idoú thyra eineoigménei ei en tói ouranói), mejor «después de estas
cosas vi y he aquí una puerta que había sido abierta y permanecía abierta en el cielo». La
expresión «después de estas cosas» tiene que ver con el contenido de los capítulos 2 y 3, es
decir, después de las cuestiones relacionadas con la iglesia.
«Miré, y he aquí»
El verbo «miré» (eídon) es el aoristo segundo, modo indicativo, voz activa de (horáo), que
significa «ver», «mirar». El aoristo sugiere una acción puntual y el modo indicativo señala
la realidad del acontecimiento. «He aquí» (idoú) es una exclamación enfática usada para
llamar la atención. Juan ha estado tratando con cuestiones que suceden en la tierra. Ahora,
en los capítulos 4, 5, el escenario descrito es celestial.
«Una puerta abierta en el cielo»
(Thyra eineoigménei en toí ouranói). La expresión «abierta» es un participio perfecto, voz
pasiva. El tiempo perfecto sugiere una acción completada con resultados permanentes.
Dicho participio sugiere que «la puerta ha sido abierta y dejada así para la llegada de
Juan». No se menciona en el texto ni cómo ni cuándo la puerta fue abierta, pero el hecho es
incuestionable. La puerta abierta permite la entrada personal de Juan para recibir la
revelación que aparece en la escena celestial.
 b. «Y la primera voz que oí, como de trompeta, hablando conmigo»
Seguramente se refiere a «la voz» mencionada en (1:10). De ser así, la referencia es al Señor
Jesucristo (véase Ap. 1:11-18). La voz es la de una persona, pero el efecto es el de una
trompeta. La trompeta se usaba:
 1) Para anunciar convocaciones públicas, Neh. 4:20
 2) Para preparar un juicio, Jl. 2:1
 3) Para producir reverencia y temor, Éx. 19:16
El sonido de la trompeta se usa aquí metafóricamente para destacar la autoridad de la voz
del Señor Soberano que habla con Juan. La expresión «hablando conmigo» (laloúseis met"
emoú) sugiere un mensaje o instrucción dirigido personalmente a Juan.
 c. «Sube acá, y yo te mostraré las cosas que sucederán después de estas»
(Anába hóde, keí deíxo soi há deí genésthai metá tauta).
El verbo «sube» (anába) es el segundo aoristo imperativo, voz activa de (anabaíno). Esta
forma verbal sugiere acción urgente. El apóstol recibe un mandato urgente de subir y,
evidentemente, entrar por la puerta que le ha sido abierta en el cielo con el fin de recibir la
revelación de parte del Señor.
El verbo «mostraré» (deíxo) es el futuro indicativo, voz activa de (deíknumi), que
significa «mostrar», «exhibir». El comentarista Robert L. Thomas observa: [La promesa de
(deíxo soi) («yo te mostraré») es en ejecución del plan de Dios el Padre al otorgar a Cristo
la responsabilidad de transmitir el (apokálypsis) («revelación») a las iglesias (véase
deíxai [mostrar], 1:1). Su acción, que cumple esta promesa, comienza en Apocalipsis 6:1,
donde el Cordero inicia el proceso de romper los sellos del rollo sellado con siete sellos].
El Señor promete mostrar a Juan «las cosas que sucederán después de estas». El
texto griego dice: «las cosas que necesariamente sucederán después de estas». Esa
declaración pone de relieve el hecho de la certeza del cumplimiento, y no habrá acción
humana ni fuerza satánica que pueda impedirlo.
Esta frase completa la tercera división del bosquejo del libro que aparece en Apocalipsis
1:19. La referencia es a los acontecimientos que se describen en el resto del libro, es decir,
desde el capítulo 4 hasta el 22. En esos capítulos se describe lo relacionado con «el día del
Señor», que abarca los juicios de la gran tribulación, la venida en gloria del Rey – Mesías, el
reino mesiánico y la creación de los nuevos cielos y la nueva tierra.
 2. [Y al instante yo estaba en el Espíritu] 4:2a
(Enthéos egenómein en pneúmati), mejor «inmediatamente me hallé yo mismo en
espíritu». El texto griego omite la conjunción «y» lo que hace que la frase sea más
dramática. También debe notarse que aunque la Reina – Valera 1960 sugiere que «en el
Espíritu» se refiere al Espíritu Santo, es mejor tomar la expresión «en pneúmati como una
alusión al espíritu de Juan. Tal como sucede en Apocalipsis 1:10, Juan es transportado
espiritualmente hasta el mismo cielo, donde pudo contemplar las cosas que le fueron
reveladas. Experimentó un segundo éxtasis que le permitió ser trasladado en su espíritu
para recibir la visión que le fue dada.
Fíjese la similitud que existe en este suceso y la promesa que nuestro Señor les hizo a sus
discípulos cerca del final de su vida, en cuanto a llevarlos a la casa de su Padre
«En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy,
pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez,
y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis». (Jn. 14:2-3).
Todos saben que Cristo está en el cielo, y Jesús ascendió a los cielos adonde se encuentra
sentado a la diestra de Dios. Pablo nos dice que al morir, su espíritu y su alma «partirían
para estar con Cristo» (Filipenses 1:23). También dijo: «Aunque estoy físicamente ausente,
los acompaño en espíritu» (Col. 2:5). Por lo tanto, es indudable que cuando un cristiano
muere, su alma y su espíritu van a estar con Cristo en la casa del Padre, es decir, se van al
cielo. Su cuerpo, por supuesto, queda en la tumba hasta la resurrección, que para los
cristianos será de la era de la iglesia, justo antes de la gran tribulación (1 Ts. 4:16-17). Es por
eso que ubicamos al rapto a esta altura en el devenir de los acontecimientos del libro de
Apocalipsis.
Existen por lo menos cuatro razones para situarlo aquí:
 1) La ubicación es adecuada para el rapto. Los capítulos 4 y 5 presentan una visión del
cielo y el capítulo 6 introduce el período de la gran tribulación. Juan, uno de los
primeros miembros verdaderos de la iglesia de Jesucristo, es un símbolo perfecto para
representar a la iglesia que sale de este mundo antes de que comience la gran
tribulación, tal como lo prometió nuestro Señor:
«Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora
de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la
tierra» (Ap. 3:10).
 2) El no mencionar a la iglesia en el resto del libro de Apocalipsis indica que no se
encuentra en la tierra durante la tribulación. Existen dieciséis referencias a la iglesia en
los capítulos 2 y 3 de Apocalipsis, mientras que en los capítulos del 6 al 18, que hablan
de la gran tribulación, no se menciona ni una sola vez. La conclusión natural que
sacamos es que la iglesia que fue tan prominente durante sus dos mil años de historia
(como se predice en los capítulos 2 y 3) no se menciona en los capítulos 4-18 porque en
ellos se describe la gran tribulación, período que ella no tendrá que soportar.
 3) El profuso uso de términos y símbolos del Antiguo Testamento en los capítulos 4-18
nos habla de Israel, no de la iglesia. Esto es comprensible, ya que la era de la iglesia es el
tiempo de los gentiles, mientras que la gran tribulación es el tiempo de sufrimiento de
Jacob o de las setenta semanas de Daniel, que Dios determinó para tratar con Israel.
Algunos de estos símbolos del Antiguo Testamento son el tabernáculo, el arca del Pacto,
el altar, los ancianos, los incensarios, los querubines, los sellos, las trompetas y las
plagas.
 4) Existe mucha similitud entre los acontecimientos de Apocalipsis 4:1-2 y otras
enseñanzas de las Escrituras sobre el rapto, tales como 1 Tesalonicenses 3:13-18.
Ninguna de las cuatro razones expresadas con anterioridad es suficiente para insistir en que
Apocalipsis 4:1-2 se refiere al rapto de la iglesia. Sin embargo, cuando se consideran todas
juntas, nos sentimos inclinados a creer que esta deducción puede ser correcta.
El versículo 2 nos indica que Juan fue trasladado de la tierra, al cielo y lo que él describe en
los capítulos 4 – 5 del Apocalipsis son cosas que él vio en el cielo. En este arrebatamiento de
Juan podemos ver un tipo del levantamiento de la iglesia, y aquí está el lugar en el libro
donde el rapto de la iglesia acontece, es decir, al final de la historia de la iglesia, y antes de
que acontezcan los juicios de Dios. La verdadera iglesia no estará en la tierra cuando llegue
el tiempo de la indignación divina (3:10). La iglesia desaparece de vista al final del capítulo
3, y no se menciona otra vez hasta el fin de la gran tribulación en el capítulo 19, donde se ve
en el cielo, y sus bodas con el cordero se anuncian (19:7-9). Después de que la iglesia
desaparece, Dios otra vez comienza a tratar con Israel:
 1) Enoc, es un tipo de la iglesia; al ser salvado del juicio del diluvio (la iglesia no
pasará la gran tribulación). Génesis 5:24
 2) Noé, es un tipo de Israel; pues fue salvado a través del juicio del diluvio (Israel
pasará por la gran tribulación). Génesis 5:29
En Apocalipsis 4 no se enseña explícitamente acerca del rapto de la iglesia, pero en
definitiva, aparece aquí en orden cronológico al final de la era de la iglesia y antes de la gran
tribulación. Considerando otros pasajes de las Escrituras que tratan específicamente acerca
del rapto para poder informarnos con claridad lo que la Biblia enseña al respecto.
Lo primero que sucede en esta visión del futuro (después de que Jesús presenta su
revelación de la era de la iglesia en los capítulos 2-3) es el llamado que se le hace a Juan
para que suba a la casa del Padre en los cielos; este hecho nos enseña algo. Ciertamente,
Juan representa a la iglesia, y como la apertura de la puerta del cielo y la invitación
personal que hace el mismo Cristo al decir «sube acá», son paralelos a otros pasajes
proféticos (1 Tesalonicenses 4:16-18), todos estos factores detallan el rapto de la iglesia.
La mayoría de los especialistas en profecía se muestran renuentes a decir que Apocalipsis
4:1-2 representa una enseñanza directa acerca del rapto porque no concreta o porque no
nos da detalles adicionales acerca de este acontecimiento. Sin embargo, como Juan es el
que tiene la visión, y se encuentra escribiendo sobre los sucesos futuros, ¿Qué mejor
manera de referirse al rapto en el momento preciso, situado después de la descripción de la
era de la iglesia en los capítulos 2 y 3, y antes de la revelación del anticristo en el capítulo 6
y el comienzo de la gran tribulación?

Una explicación acerca del rapto de la iglesia


El apóstol Pablo fue el escritor especial que Dios escogió para revelarle a la iglesia los
maravillosos detalles del rapto, cuando todos los cristianos, tanto vivos como muertos,
serán «arrebatados» y llevados al cielo con Cristo (1 Tesalonicenses 4:16-17). Jesús lo
menciona solo una vez, en Juan 14:2-3. Habló muchas veces de su segunda venida, pero en
cada una de esas ocasiones tenía en mente el acontecimiento culminante el cual Pablo llama
«la gloriosa venida». Por lo general, la mayoría de las personas piensan en este suceso
cuando hablan de las muchas promesas (trecientas dieciocho en total) que existen en el
Nuevo Testamento que se refieren a la segunda venida de Cristo. Debemos tener cuidado al
analizar los pasajes de la segunda venida y determinar si se refiere al rapto o a la gloriosa
venida.
El Dr. Thomas Ice, director ejecutivo del [Pre Trib Research Center] (Centro
de investigación Previas a la Tribulación), sitúa a algunas de las referencias principales que
se hacen de las dos etapas diferentes de la segunda venida. Verá que la mayoría de las que
describen el rapto provienen de escritos del apóstol Pablo. Este cuadro revela que al unir
todas las promesas de la segunda venida, la Biblia enseña que existe una venida en dos
fases:
 1) La primera es la venida en el aire para arrebatar [harpazo] a su iglesia antes de la gran
tribulación.
 2) La segunda describe la gloriosa venida, cuando vuelve a la tierra a buscar a todos los
demás luego del período de la gran tribulación, antes de establecer su reino de mil años.
Rapto: ¿qué quiere decir?
Hay dos términos en el original griego para referirse «al rapto» o «arrebatamiento», uno es
[harpazo]. Y significa «llevar», «tomar apresuradamente», «arrebatar precipitadamente» o
«arrebatar con fuerza», esto sucederá con la verdadera iglesia antes de que comiencen los
juicios de Dios sobre la tierra, será «arrebatada precipitadamente» y llevada al cielo a la
casa del Padre. El otro es [sunarpazo] que significa «prender» (Hch. 6:12).
Estudiar la segunda venida de Cristo y los sucesos futuros tal como se nos revelan en
los libros proféticos de la Biblia es un tema perfectamente legítimo. No solo porque su
venida se menciona trecientas dieciocho veces, sino porque ocupa gran parte del ministerio
de enseñanza del apóstol Pablo. El primer libro que se escribió del Nuevo Testamento fue
«1 Tesalonicenses», dirigido a una pequeña iglesia griega en la ciudad de Tesalónica. Pablo
estuvo allí solo durante tres semanas hasta que unos judíos furiosos lo sacaron fuera de la
ciudad. Mientras tanto, enseñó que Cristo volvería y arrebataría [harpazo], a los cristianos
de este mundo para que se fueran con Él a la casa del Padre. Sin embargo, cuando se fue,
algunos de los miembros murieron. Como resultado, estos cristianos nuevos quedaron
perplejos con respecto al estado en el que se encontraban sus hermanos muertos, entonces
le escribieron una carta pidiéndole una explicación. 1 Tesalonicenses es la respuesta de
Pablo. En ella, da la descripción más detallada del rapto de la iglesia que se encuentra en
toda la Escritura.
«Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os
entristezcáis como los otros que no tienen esperanza. Porque si creemos que Jesús murió y
resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él. Por lo cual os
decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado
hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Porque el Señor mismo
con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los
muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos
quedado, seremos arrebatados [harpazo], juntamente con ellos en las nubes para recibir
al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. Por tanto, alentaos los unos a los
otros con estas palabras» (1 Tesalonicenses 4:13-18).

Para apreciar el contraste entre este acontecimiento y la gloriosa venida al final de la gran
tribulación, debemos leer la descripción que hace el propio Señor de este suceso en Mateo
24:27-31
«Porque como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente, así será
también la venida del Hijo del Hombre. Porque dondequiera que estuviere el cuerpo
muerto, allí se juntarán las águilas. E inmediatamente después de la tribulación de
aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán
del cielo y las potencias de los cielos serán conmovidas. Entonces aparecerá la señal del
Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al
Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. Y enviará
sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntará a sus escogidos, de los cuatro vientos,
desde un extremo del cielo hasta el otro».
No se sorprenda si no puede relacionar estas dos etapas de la segunda venida del Señor.
Son sucesos diferentes. Y cuando añadimos otros sucesos del rapto como los que se
describen en 1 Corintios 15:51-55 y Apocalipsis 19:11-16, a la única conclusión que llegamos
es que no describen el mismo acontecimiento. Es más, descubrí quince diferencias entre el
rapto antes de la gran tribulación y la posterior gloriosa venida.

15 SUCESOS CONTRASTANTES DE LA SEGUNDA VENIDA

RAPTO: BENDITA ESPERANZA GLORIOSA VENIDA DE CRISTO


Cristo viene en los aires a buscar a los suyos Cristo desciende con los suyos a la tierra

Rapto: traslado de todos los cristianos No se traslada a nadie

Los cristianos van a la casa del Padre Los santos que resucitan no ven la casa Padre

Al momento del rapto no hay juicio en la tierra Cristo juzga a los habitantes de la tierra

La iglesia asciende a los cielos en el rapto Cristo establece su reino en la tierra

El rapto es inminente: puede suceder en cualquier La gloriosa venida no puede tener lugar por lo menos
momento dentro de siete años

No existen señales para el rapto Muchas señales que anuncian la venida Cristo

Es solo para los creyentes Afectan a toda la humanidad

Tiempo de gozo Tiempo de lamentación

Antes del día de la ira Inmediatamente después de la gran tribulación

No se menciona a Satanás Se encierra a Satanás en el abismo mil años

El trono del juicio de Cristo No hay un tiempo ni un lugar para el trono juicio

Las bodas del Cordero Su esposa desciende con Él

Solo los suyos pueden verlo Todo ojo lo vera

Comienza la gran tribulación Comienza el reinado de mil años de Cristo

Se pudieran hacer muchas observaciones importantes en cuanto a los quince sucesos


contrastantes que describen las dos fases de la venida de nuestro Señor. La
primera observación, es que es imposible que ambas describan el mismo hecho. Como
único se puede ver esto es colocando las descripciones bíblicas una al lado de la otra. Por
esta razón muchos nunca han visto la diferencia y piensan que la segunda venida es un solo
suceso, en lugar de ver la venida de Cristo en los aires para llevar [harpazo] a su iglesia a la
casa del Padre, y su venida a la tierra, siete años más tarde, con poder y gran gloria como lo
prometió.
Existe una sola «segunda venida», pero se desglosa en dos fases. La primera es solo para su
iglesia, es decir, para todos los creyentes, vivos y muertos, desde que se fundó la iglesia en el
año 33 d.C. La segunda es para todos los que vivan sobre la tierra al final de la gran
tribulación. No se puede cuestionar que la gloriosa venida será al final de la gran
tribulación, antes del milenio, porque Jesús predijo que su gloriosa venida vendría
«inmediatamente después de la tribulación de aquellos días» (Mt. 24:29).
Hay tres líneas de pensamiento en cuanto al rapto se refiere:
 1) Están los que creen que el rapto será al final del período de la iglesia y antes de la gran
tribulación.
 2) También los que creen que el rapto tendrá lugar a mitad de los siete años de la gran
tribulación.
 3) Y los que creen que el rapto sucederá después de la gran tribulación y antes de los mil
años del reinado del Mesías.

¿Cuándo tendrá lugar el rapto de la iglesia?


Muchos de los textos citados que hablan del rapto de la iglesia enseñan una inminente
venida de Cristo. Esto significa que puede venir en cualquier momento. Tomemos por
ejemplo, una de las primeras enseñanzas acerca del rapto en 1 Tesalonicenses 1:9-10:
«Porque ellos mismos cuentan de nosotros la manera en que nos recibisteis, y cómo os
convertisteis de los ídolos al Dios vivo y verdadero, y esperar de los cielos a su Hijo, al
cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien nos libra de la ira venidera».
 1. Esperando el rapto:
Estos cristianos de Tesalónica no estaban sentados esperando el rapto, sino que:
 a) Servían «al Dios vivo y verdadero» en una actitud de confianza.
 b) esperando «del cielo a Jesús, su Hijo». Así debiera ser, porque puede suceder en
cualquier momento, o puede pasar una generación o más. En Filipenses 3:30 tenemos
otro ejemplo, una interpretación adecuada de 2 Tesalonicenses 2:1-8 es otro, y hay
muchos más.
 c) pero debemos recalcar de nuevo que el rapto tendrá lugar antes de la gloriosa venida.
 2. ¿Cuánto tiempo habrá antes de que ocurra el rapto?:
Casi todos los pre-milenaristas están de acuerdo en que existe un rapto planificado antes de
la gloriosa venida. La fuente de desacuerdo es cuánto tiempo habrá antes de que ocurra el
rapto. El lector debiera tener en mente que todos son cristianos, todos tienen razones
escriturales para sostener su punto de vista, y debemos considerarlos a todos como
compañeros en la fe. En realidad, las discrepancias van desde los tres hasta los siete años o
más. Sin embargo, la diferencia de tiempo es importante, ya que determina si debemos
esperar al anticristo y a la gran tribulación primero, o si el rapto tendrá lugar antes.
Algunos de los que creen que el rapto tendrá lugar en medio de la gran tribulación o al final
de la misma están editando en este momento libros con instrucciones para saber cómo vivir
durante ese período de siete años siendo cristianos. Me resulta interesante debido a que en
el Nuevo Testamento no existe un solo versículo que les diga a los cristianos cómo deben
vivir durante ese período. La razón indiscutible es que los cristianos no estarán en la tierra
en ese momento; estarán en el cielo.
Aquellos «santos» de la gran tribulación del Apocalipsis son individuos que no recibieron a
Cristo hasta después del rapto de la iglesia. Parece extraño que, teniendo tanto contenido
profético en los profetas del Antiguo Testamento como en los apóstoles del Nuevo
Testamento que describen los siete años de gran tribulación (más que cualquier otro tema
profético excepto la segunda venida en sí), no se pueda encontrar ni un versículo que
instruya a los cristianos en cuanto a cómo vivir durante ese período. Esto solo puede
significar que la iglesia no pasará por la gran tribulación, tal como lo representa Juan,
miembro del cuerpo de Cristo, quien fue llevado al cielo en una visión antes de que se le
revelara la visión de los sucesos del período de la gran tribulación.

Esperar el rapto antes de la gran tribulación no es idea


nueva
Durante muchos años, un argumento popular en contra de la teoría del rapto previo a la
gran tribulación, de la fase de la «esperanza bendita» del regreso de Cristo ha sido que John
Darby fue quien la inventó en el siglo pasado (1828) y que los padres de la iglesia primitiva
nunca la vieron ni la mencionaron durante casi diecinueve siglos de historia de la iglesia.
Esto es muy sencillo, este argumento es falso. Un escritor que creía en la pos-tribulación
publicó un anuncio ofreciendo quinientos dólares a cualquiera que probara que
el concepto del rapto antes de la gran tribulación había sido visto antes de que John Darby
comenzara a hacerlo popular en Gran Bretaña, Estados Unidos y Canadá en la década de
1840. Más tarde, tuvo que pagar los quinientos dólares cuando alguien descubrió que el
reverendo Morgan Edwards lo vio en el año 1742. Desde aquel entonces, ese ministro
admitió su error y retiró su ofrecimiento.
El reverendo Morgan Edwards, pastor bautista de Filadelfia incluyó en su libro
[millennium, Last Days] (El milenio, las novedades de los últimos días), una discusión
acerca del regreso de Cristo para buscar a su iglesia antes de la gran tribulación, escrito en
1788. Aunque veía un período de gran tribulación de tres años y medio, enseñó que, en
definitiva, el rapto tendría lugar antes de la gran tribulación. Lo que es más interesante aún,
es que afirmó que escribió lo mismo en el año 1742. Puede haber recibido la influencia de
John Gill o de otros que lo precedieron, cuyos escritos o enseñanzas se encontraban
disponibles en aquella época pero que no se preservaron.
Históricamente, la reforma protestante trajo como resultado una proliferación de
traducciones e impresiones de la Biblia que la hicieron accesible a la gente común y
corriente por primera vez en mil setecientos años. Cuando comenzaron a leerla, quedaron
impresionados por las muchas enseñanzas proféticas que contenía. El Sir Isaac
Newton hizo un comentario sobre el libro de Apocalipsis a mediados del siglo diecinueve.
Era un erudito ávido de Biblia (además de ser uno de los científicos más grande de toda la
historia) y, sin lugar a dudas, recibió la influencia de otros escritores que lo precedieron.
Así, desde el punto de vista histórico, el desarrollo de la profecía es comprensible; progresó
a la par que la Biblia se hacía accesible y que se le podía estudiar.
Al llegar el siglo diecinueve, millones de personas leían la Biblia en el mundo angloparlante.
Se dice que «la profecía estaba en el aire», en particular en la Universidad de Trinity, en
Dublín, Irlanda, a la cual asistieron entre mil ochocientos y mil ochocientos treinta, John
Darby y otros especialistas en profecía. Sin lugar a dudas, algunos de los maestros de la
Biblia en la facultad tuvieron una fuerte influencia en su manera de pensar, incluyendo tal
vez a S. R. Maitland, quien desarrolló la teoría del futurismo, posición que afirma que la
mayoría del libro del Apocalipsis y otras profecías bíblicas se cumplirán en el futuro.
Escribió el primer libro acerca de ese tema en 1826.
John Darby afirmaba que recibió la inspiración en cuanto al rapto previo a la gran
tribulación en 1828, después de ver la diferencia entre Israel y la iglesia en su estudio del
libro de Efesios. Son pocos los especialistas que, sin hacer esta distinción, ven al rapto de la
iglesia previo a la gran tribulación. Por cierto, al separar a Israel de la iglesia tenemos una
de las claves principales para entender correctamente la profecía bíblica. La segunda clave
es tomar las Escrituras proféticas de la forma más literal posible.
Grant Jeffery, un conocido conferencista y especialista en profecía, hizo una investigación
intensiva sobre los escritos de los especialistas en profecía del siglo dieciocho. En su libro
Apocalypse, cita a muchos que tenían una compresión definitiva de la diferencia entre las
dos fases de la venida de nuestro Señor, en particular en cuanto a la venida para buscar a su
pueblo antes de la gran tribulación y de la revelación del hombre de pecado.
El hallazgo más importante de Jeffrey fue el sensacional descubrimiento de una declaración
en un sermón apocalíptico del siglo cuarto. Al autor se le llama «seudo-Efrén» («seudo»
[que quiere decir «falso»] porque existen dudas si en realidad lo escribió Efrén de Nisibis
[alrededor de 306 – 373], un prolífico padre siríaco de la iglesia). Algunos prefieren una
fecha posterior para este sermón, llamado «Sermon on the End of the World» (El Sermón
acerca del fin del mundo), sugiriendo que se pudo escribir en algún momento entre los años
565 y 627. Para nuestro propósito, la fecha es irrelevante, porque aunque se remontara al
siglo séptimo comprueba que mil cien años antes de John Darby, los cristianos entendieron
que el rapto tendría lugar antes de la gran tribulación. Fíjese en la declaración traducida
al inglés de sus versiones griega y latina que datan de ese período. Desafiando a los
cristianos a vivir en santidad (propósito que siempre tiene la enseñanza del rapto), Seudo –
Efrén escribió:
[Por lo tanto, ¿Por qué no rechazamos toda preocupación por las acciones terrenales y
nos preparamos para el encuentro con el Señor Jesucristo, para que pueda librarnos de la
confusión que avasalla al mundo?... El Señor junta a todos los santos y elegidos de Dios
antes de la tribulación, que está por venir, y se los lleva, para que no vean el tiempo de
confusión que avasalla al mundo a causa de nuestros pecados].
No cabe duda de que este erudito bíblico del siglo cuarto (o a lo sumo del séptimo) vio a los
santos reunidos todos juntos antes de la gran tribulación esperando la venida del Señor. Su
afirmación posee todas las marcas de un rapto de los santos antes de la gran tribulación a
diferencia de la gloriosa venida, que nuestro Señor prometió que tendría lugar
«inmediatamente después de la tribulación de aquellos días» (Mt. 24:29). Se debe admitir
que Efrén vio que la gran tribulación durará cuarenta y dos meses o tres años y medio
(como ensaña más adelante en su sermón); sin embargo, sigue siendo claro que veía un
rapto de la iglesia previo a la gran tribulación mucho antes de que se hiciera popular
durante el siglo diecinueve. Considerando que se preservaron hasta nuestros días mucho
menos de diez por ciento de los libros cristianos antiguos, no nos quedan dudas que a pesar
de que los detalles del rapto previo a la gran tribulación no se reconocieron con amplitud en
el siglo cuarto, deben existir otros estudiosos de la Biblia además de Efrén que también
descubrieron la enseñanza de la «esperanza bendita».
Efrén, el siríaco del siglo cuarto, no fue quien originó este punto de vista, ya que Victorino,
obispo de Pettan, lo entendió de la misma manera en una época tan temprana como el año
270 d. C. Conocido como alguien que toma la Biblia literalmente, murió como mártir por su
fe en el año 304 d. C. bajo el gobierno de Diocleciano. Jerónimo, un erudito del siglo cuarto,
traductor del primer texto del Nuevo Testamento al latín, «lo clasificó como defensor del
milenarismo», haciéndolo digno del mérito de que Damasus I. Froom, historiador de la
iglesia, suprimiera los escritos de Victorino en los cuales veía un período de tres años y
medio en el que los dos testigos ministrarían, seguido de un período similar con el reinado
del anticristo, sumando un total de siete años. En su comentario acerca del Apocalipsis,
comparó las plagas de ese período con las plagas de Levítico y luego dijo: «esto sucederá en
los últimos tiempos, cuando la iglesia haya sido quitada de en medio».
Sin discusión, el obispo Victorino de Pettan, brillante maestro de la Biblia que vivió en el
siglo tercero, vio que la iglesia partía antes de las plagas que vendrían durante el tiempo de
la ira de Dios, que según su comentario sobre Apocalipsis 11 duraría siete años. Su manera
de describir el rapto fue: « [ellos] habrán salido de en medio».
Por supuesto, el más antiguo de todos los escritores proféticos fue el apóstol Pablo, que en
su primera carta del Nuevo Testamento le dio a la iglesia primitiva el desafío motivador de
la «bendita esperanza». El pasaje clásico de 1 Tesalonicenses 4:13-18 no es el único que
presenta un bosquejo de todo el tema, sino también 2 Tesalonicenses 2:1-8. Y estos libros
que desafían a los cristianos a vivir a la luz del inminente rapto se escribieron antes que
cualquiera de los evangelios o que los otros escritos del Nuevo Testamento (en algunos
casos, muchos años antes). De esta manera, teniendo en mente la promesa del rapto y no la
amenaza de la gran tribulación seguida de la gloriosa venida, que no puede tener lugar
hasta que se manifieste el hombre de pecado y se vivan los peores siete años de la historia
humana, la iglesia primitiva se vio desafiada a la santidad, a la evangelización y a las
misiones.
Roy Huebner, un cuidadoso especialista partidario del rapto previo a la gran tribulación,
probó que muchos vieron el rapto antes de que John Darby lo hiciera en 1827. Dijo: «La
palabra «rapto» se usa para designar al suceso en el que Cristo se llevaría a los santos,
mucho antes de 1832. Por ejemplo, Joseph Mede (1586-1638) escribió: «Por lo tanto, no es
necesario que la resurrección de aquellos que durmieron en Cristo, y el rapto de aquellos
que queden vivos junto con ellos en los aires».
Esto indica muy claro que Mede, el gran intérprete literal del siglo dieciséis, entendía que 1
Tesalonicenses 4:13-18 enseña la venida de Cristo para buscar a los santos y usaba el
término rapto para designar este acontecimiento. Esta afirmación se hizo doscientos
cincuenta años antes de que Darby enseñara acerca del rapto. Por tanto, vemos que el
término rapto no era exclusivo de Darby, sino que otros antes que él lo usaron. Pero, por
cada referencia escrita que se preservó hasta el día de hoy, de las que enseñan acerca del
rapto, sin lugar a dudas quedaron muchos otros comentarios en la imprenta y en los
mensajes de maestros fieles acerca de los temas del fin que no se han descubierto o que ya
no están disponibles.
Indiscutiblemente, el concepto del rapto previo a la gran tribulación se conocía durante los
tres primeros siglos de la iglesia y no perdió su desafío hasta que encerraron de manera
eficiente la Biblia en museos o monasterios durante los mil cien años de Edad Oscura,
aunque algunos de los que tenían acceso a las Escrituras (y que podían leer griego o latín) lo
vieron incluso durante esos años. Sin embargo, hasta que no se tradujo la Biblia
al lenguaje de la gente común y corriente, la esperanza del regreso pre-milenarista de Cristo
no se pudo restablecer en la iglesia. Luego en los siglos dieciocho y diecinueve, se
redescubrió la antigua verdad del rapto antes de la gran tribulación. Y en cada lugar adonde
se enseñó esta verdad, surtió el mismo efecto sobre los creyentes que el que tuvo en los tres
primeros siglos: vidas santas en medio de una generación impía, impulsó en la
evangelización y el celo por las misiones.
«Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te
guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para
probar a los que moran sobre la tierra» (Apocalipsis 3:10).
 

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